Los majestuosos y temibles cordones montañosos del noreste del territorio de la tierra sirven como límite para la población de la región. Las fronteras no han sido claramente delimitadas jamás, ya que no hay con quien disputarse las ilusorias líneas que los dividen; sin embargo, parece haber sido voluntad de la naturaleza expresarles a los pueblos el claro mensaje de "No más allá", forjando un límite claro que acuna a la región de la tierra. Nadie ha podido cruzar el cordón de montañas, pocos se atreven y muchos menos son capaces de costear la travesía. Los clanes del lugar, sobre todo Bunshi, han intentado invertir en la investigación de la frontera, pero ninguno ha tenido éxito en sus empresas. Muy pocos continúan con el afán de cruzarlos y adueñarse de las riquezas que suponen hay más allá. Pero el resto ha decidido abandonar los intentos, pensándolos como simples pérdidas de tiempo. Se ciernen por el territorio dos leyendas, una opuesta a la otra, con diversas versiones pero un núcleo en común. La primera narra la existencia de "Kinrakuen", un paraíso del otro lado de las montañas. Nacida ésta leyenda por la creencia de que la lluvia que es detenida por las montañas y no consigue pasar hacia el territorio árido en la región y debe caer al lado oculto de éstas, provocando que un paraíso de vegetación diversa nazca por producto de ésta geografía. Para los sedientos pueblos bajo las montañas, se trata de una esperanza lejana y sueños por los cuales suspirar, y varias veces, proyectos de vida, aspiraciones por mejorar sus condiciones. Pero otros pueblos poseen diferentes visiones de lo que fuera yazca al norte. Varias ciudades del territorio se encuentran fortificadas por razones desconocidas, lo cual los pueblos han creído puede ser producto de intentos para protegerse de invasiones. En ningún momento se ha escuchado que las regiones menores que se encuentran al sur hayan intentado expandirse hacia el territorio de la tierra, ya que les es mucho más provechoso extenderse al sureste, donde las tierras son más fértiles y los climas más cálidos. Por lo cual se ha engendrado la historia de que al norte, haya vegetación y buena tierra o no, existan pueblos demoníacos que han atacado tiempo atrás el territorio de la tierra. Varias ruinas bajo las montañas parecen justificar las invasiones, pero los detractores de estas teorías acusan a fenómenos naturales. Sea cual fuera la verdad tras las imponentes montañas, el aura de misticismo de ellas no se desprende, y la curiosidad de los pueblos no se detiene. ® ® Zonas Adyacentes Yamahoushou (7 Post) Myojoshoten (5 Post) Negakuima (7 Post) ®
