Aichi Nagoya

​

 

Herbolaria ( Misato)

—Así es, mismo precio —dijo guardando unas hierbas en un frasco —El conocimiento es una defensa a la ignorancia del resto, no lo olvide señorita— dijo recibiendo las monedas y guardándolas en una caja junto a su mesa de trabajo, al caer resonaron junto a las que había recibido de Heya en la mañana. Había sido un gran día para su negocio.

---

Exterior de Nagoya/Establos (Heya; Misato)

Heya había tomado asiento junto a Satou y Ujihisa que esperaban tomando té; Satou levantó la mano al ver a Misato acercarse —Vaya que están tardando los demás —mencionó mirando al horizonte sin éxito, estaba muy obscuro y en las afueras había muy poca luz. Misato pudo reconocer a su caballo junto a los demás.

—Toma un poco de té; la noche es fría y presiento que vamos a esperar un poco más — mencionó Satou mientras le extendía uno de los vasos al igual que a Heya — Estamos acordando cien monedas por cada caballo; seguimos tratando de conencerlos para obtener un mejor precio—

---

Dojo Yoshioka (Zeng; Yin; Matsuda; Kuroki)

Yin Y Kumanosuke seguían con los mismos movimientos, su habilidad estaba pareja

Kuroki y Michinori atacaron con fuerza pero ninguno de los dos logró dañarse, Kuroki esquivó y Michinori tenía una defensa superior, por lo que el ataque de Kuroki no le afectó.

Matsuda esta vez logró esquivar y atacar a Nobuo, pero este era superior en su defensa, sería muy complejo poder romperla.

—Monopolios, si un lugar posee la única fuente de alimentos, sus precios crecerán y nadie podrá quejarse pues son los únicos recursos disponibles —mencionó Kenpo acercándose a Yin y Kumanosuke, deteniendo el embate entre ellos —Esto puede continuar hasta el amanecer, esto ha sido un empate— ambos se separaron con molestia, pero lo que decía Kenpo era cierto.

Después se dirigió a Kuroki y Michinori —El resultado se definirá en el siguiente ataque—

Por último caminó hacia Matsuda y Nobuo —Nobuo ha sido superior; estás herido y esto seguirá así; Nobuo es especialista en una defensa inquebrantable— Matsuda estaba avergonzado pero aceptó el resultado, devolviendo la espada de madera y sobando su hombro —Koreaki... ¿eres algo de Akinao?

—Mi padre, señor —dijo con una reverencia hacia Kenpo en respeto.

—El hijo de el protector de Toyama —sonrió —Mi padre fue un gran admirador de su trabajo; fue gracias a él que tomamos la inspiración de acabar con los Nasada, lamento mucho tu pérdida; era un gran hombre.

—El mejor— mencionó Matsuda caminando a un lado de Zeng quien lo veía con una sonrisa burlona —Si no dices nada, yo no diré nada— mencionó con respecto a sus derrotas.

—Es un trato— culminó Zeng

Contenido oculto: Yoshioka

Kenpo=nivel 5
Kumanosuke= nivel 4
Nobuo= nivel 4
Sachi= nivel 4
Michinori= nivel 3

• Yin
• Matsuda
• Kuroki

• 
  Pv=90
  Fuerza= 17
  Protección= 13
  Bien descansado= +1 defensa
  
• 
  Pv=53
  Fuerza= 9
  Protección= 6
  Bien descansado= +1 defensa
  
• 
  Pv=60
  Bien descansado= +1 defensa
  Agilidad (+2 defensa)
  

• Kumanosuke
• Nobuo
• Michinori

• 
  Pv=80
  Fuerza= 14
  Protección= 16
  
• 
  Pv=80
  Fuerza= 12
  Protección= 18
  
• 
  Pv=69
  Fuerza= 9
  Protección= 6
  

 

​

 

Dojo Yoshioka (Zeng; Yin; Matsuda; Kuroki)

Michinori atacó con fuerza y golpeó directamente en el brazo de Kuroki, el dolor fue agudo pero al menos lo inutilizó su brazo el cual utilizó para contratacar, golpeando el brazo de Michinori; pero aquel golpe no lo hizo ni mostrar algún indicio de dolor.

—Ha sido un gran combate— dijo por fin Michinori —Eres rápido, esquivaste la mayoría de mis ataques— mencionó para después hacer una reverencia ante su oponente y luego frente a Kenpo.

—Los Yoshioka actuales si, nos forjamos con esa batalla nuestro honor; pero los Yoshioka han participado en diferentes batallas, oero no podemos simplemente adornarnos de las victorias de nuestros ancentros, nosotros debemos hablar de las propias para mantener el legado— mencionó Kenpo hacia Kuroki —Michinori ha sido el ganador, pero el combate fue interesante—

Contenido oculto: Yoshioka

Kenpo=nivel 5
Kumanosuke= nivel 4
Nobuo= nivel 4
Sachi= nivel 4
Michinori= nivel 3

• Yin
• Matsuda
• Kuroki

• 
  Pv=90
  Fuerza= 17
  Protección= 13
  Bien descansado= +1 defensa
  
• 
  Pv=53
  Fuerza= 9
  Protección= 6
  Bien descansado= +1 defensa
  
• 
  Pv=44
  Bien descansado= +1 defensa
  Agilidad (+2 defensa)
  

• Kumanosuke
• Nobuo
• Michinori

• 
  Pv=80
  Fuerza= 14
  Protección= 16
  
• 
  Pv=80
  Fuerza= 12
  Protección= 18
  
• 
  Pv=66
  Fuerza= 9
  Protección= 6
  

 

Misato Aoyama

Guarde el frasco y asentí al consejo del herborista, con una cálida despedida salí apresurada directo a los establos, todos deberían estar reunidos. Pero aún faltaban por llegar.

Saludé al resto del grupo y me acerque a acariciar el lomo y la crin de Arashi el cual lucia relajado en el lugar.

—¿Has tomado agua? Pronto nos marcharemos amigo ¡Espero estés a punto!—el caballo parecía responder a mis afectuosas atenciones de buena manera, los animales en verdad maravillosos.

Sonriente acepte el té, según me enteré aún no llegaban a un acuerdo, era adecuado mientras Kuroki y Matsuda estaban en el Dojo ¿Serían tan poderosos los samurais en el corazón de Nagoya?

—Deben estar enfrentando oponentes temibles—dije sorbiendo el té— Kuro y Matsuda deben estar en serios aprietos...pero—fije la mirada en el cielo estrellado—pero allí es cuando pueden brillar y demostrar gran talento.

La espera continuaba sorteabamos antes del amanecer lograriamos partir hasta la próxima ciudad.

 

Exterior de Nagoya/Establos (Heya; Misato)

Satou se preocupó por las palabras de Misato; Ujihisa tomó un gran sorbo de té —Seguramente tendremos que tratarlos antes de irnos; Zeng seguró se volverá a abrir las heridas, siempre ha sido así de impulsivo; seguramente Yin ni peleará, él siempre busca evitar las peleas a toda costa.

—Pero Zeng siempre lo termina convenciendo de pelear— dijo Satou mientras un hombre les traía una canasta con arroz hervido, cubierto con una tela para evitar que el calor se escape; a un lado les dejó acompañamientos, verduras hervidos y encurtidos.

—A Kuroki siempre le ha gustado entrenar, siempre quería hacerlo en casa —mencionó Satou hacia Misato —Seguramente con ustedes a buscado cualquier excusa para entrenar un poco— tomó un poco de té para tranquilizarse, no le gustaba ver a su hijo lastimado —Cuando me fui de casa dejé a un niño y ahora veo que se ha convertido en un hombre —levantó su mano para que el hombre que los atendía se acerara —Una botella de sake, nueve vasos por favor — miró a Heya, se veía incluso más grande que Kuroki así que no le preocupó ofrecerle alcohol.

---

Dojo Yoshioka (Zeng; Yin; Matsuda; Kuroki)

Kenpo sonrió ante la pregunta de Kuroki —Tenemos a los guerreros más fuertes porque entrenamos con fuerza; cada cicatriz que tenemos se debe a un encuentro perdido, nos marcamos así para evitar volver a cometer los mismos errores. Las derrotas tienen graves consecuencias, es por eso que lo llevamos día a día, entre más grande la herida y más cerca al rostro...— mencionó tocando la cicatriz que cruzaba en su nariz —... más fuerte es la enseñanza.

—Si quieres mejorar debes hacer un entrenamiento riguroso; estar un tiempo sin viajar con un mismo maestro que te enseñe; con él hacer varias diligencias que ayuden a tus habilidades; la experiencia la obtienes de esta manera, desafiando tus habilidades actuales en peleas, pero para mejorar debes tener una rutina que cumplir por mucho tiempo, hasta que tus piernas no puedan caminar más, hasta que tus brazos duelan, hasta que despiertes por las mañanas y no puedas moverte. Es ahí que tu cuerpo comenzara verdaderamente a mejorar — mencionó Michinori, mientras Kenpo daba palmadas en el hombro de su alumno.

Matsuda afirmó ante tales palabras de sabiduría. —Eso haremos; y la próxima vez que los desafiemos seremos los absolutos ganadores — mencionó mientras Kenpo afirmaba.

—Nosotros también seremos mejores cuando ese desafío llege, pero lo esperaremos — mencionó Kenpo —Recuerden, el que desea sacar la espada es principiante; el que puede sacar la espada, experto. Pero el que es la espada misma es maestro; busquen a aquel que sea la espada misma. —miró hacia Zeng —Entre ustedes tienen a un maestro; pero en su mirada puedo ver que no desea enseñar.

Zeng desvió la mirada y después se despidió con una reverencia; Yin también reverenció antes de salir.

—Agradecemos su tiempo y sus enseñanzas; clan Yoshioka— mencionó Matsuda haciendo una reverencia para acompañar a Zeng y Yin a la salida.

• Yin
• Matsuda
• Kuroki

• 
  Pv=90
  Fuerza= 17
  Protección= 13
  Bien descansado= +1 defensa
  
• 
  Pv=53
  Fuerza= 9
  Protección= 6
  Bien descansado= +1 defensa
  
• 
  Pv=44
  Bien descansado= +1 defensa
  Agilidad (+2 defensa)
  

 

Daichi Nishimura
[Puerto]

Miré el pomo de mi espada por un momento, mientras mencionaba que la mayoría de los guerreros no se hubieran detenido a ayudarlo a recoger las cosas tiradas en el suelo. Suspiré, por un momento, no era la primera vez que escuchaba esas palabra, a veces, me preguntaba si el centro de Japón no eran tan sorprendente como decían los viajeros que se aventuraban en Hokkaido, quizás lo impresionante ocultaba lo deteriorante que parecía a veces. Negué con la cabeza en dirección al comerciante. —Los samurai tenemos un deber con las personas a las que juramos proteger, no solo en la lucha, también en velar por su bienestar... Ayudar debería alegrar el corazón del guerrero.—respondí sin más. Reí levemente ante su historia del flechazo, no era por descortesía, era una historia que se seguía repitiendo a los lugares que he visitado, asentí con mi cabeza, jamás he sentido tal dolor, pero podía imaginarlo, cambiar una vida de guerra por otra de manera imprevista, podría ser drática.

De la nada, recibí un pequeño obsequí del hombre. Lo sujeté con fuerza con el temor que se resbalara de mis manos por la sorpresa. Escuché sus palabras, mirando fijamente el pequeño vacito intacto entre mis manos, intentando escudriñar el mensaje de las mismas. Mi espada parecía pesar, por un momento, mientras lo escuchaba, antes de poder decir algo, el hombre se marchaba con su cajita destruida en sus manos, cojeaba, pero parecía sastifecho por las palabras.—Gracias...—susurré casi en silencio. Me acerqué al borde del entamblado, dejando caer al suelo, mis pies colgando al vacío, moviendolos ligeramente, observando mi reflejo en el agua cristalina, deteniéndome en la cicatriz de mi rostro. Tomé un mechón de cabello e intenté ocultarlo, ahora que me acordaba, habían pasados varios días desde la última que me preocupaba por aquella imperfección causada por la cobardía. Miré el cielo que se encontraba en un anaranjado pálido, las aves regresaban de sus aventuras en el oceáno y a lo lejos, los últimos botes inmensos parecían regresar de su travesía, todo parecía Hokkaido, era como volver en el tiempo.

Suspiré cansado.—Debería dirigirme hacia los establos... No puedo seguir siendo el último en llegar a los sitios.—susurré en broma. Me levanté, limpié mis prendas, miré el vaso de sake que se encontraba apretado en la palma de mi mano. Encaminándome hacia las fueras de Nagoya, a los establos. Pensando si ya habran pensado una manera en como conseguir las los caballos que faltan, tenemos que salir cuantos antes, tenemos que continuar con el camino.

 

Exterior de Nagoya/Establos (Satou; UjihisaHeya; Misato; Daichi)

Daichi fue el siguiente en aparecer en los establos; Misato y Heya ya habían llegado hace rato y bebían y comían junto a Satou y Ujihisa; Satou le indicó que tomara asiento, pasándole un tazón de arroz, la cesta en el centro permanecía bastante llena y los encurtidos se mantenían frescos. Ujihisa ya había terminado de comer mientras que Satou aun esperaba a que Kuroki y el resto aparecieran.

—Beban y coman bien, nos espera un recorrido muy pesado— mención Satou.

---

Dojo Yoshioka (Zeng; Yin; Matsuda; Kuroki)

Kenpo afirmó —Yo tomo sus nombres y lo guardaré en mi memoria; que los dioses guíen sus caminos hacia la mestría en la espada — dijo despidiéndose.

Al salir Matsuda suspiró, se sentía derrotado pero no precisamente triste por ello, aquello le había demostrado que aun debía entrenar mucho mas.

—Ha sido buena idea venir —dijo Zeng con una sonrisa —Siempre es bueno retarse a sí mismo — Yin y Matsuda sonrieron ante las palabras de Zeng mientras se dirigían hacia las afueras de Nagoya, viendo la ciudad aun con luz y vida, la gente seguía en las calles pero no con el mismo ritmo que en el día, iban más despacio, disfrutando de la actividad nocturna de la ciudad.

---

Exterior de Nagoya/Establos (Satou; Ujihisa; Zeng; Yin Heya; Misato; Daichi; Kuroki)

Llegaron al comercio; Daichi; Misato y Heya ya estaban allí junto a Satou y Ujihisa que se apresuraron a ustedes a atender sus heridas; Yin se sentó a un lado de Misato ya que él no había recibido ninguna y empezó a comer con el resto.
Tardaron un poco mientras atendían los golpes pero después se incorporaron en la mesa dónde todos comenzaban a comer.

—Los caballos nos costarán cien monedas por persona —mencionó Satou mientras miraba al resto; Zeng afirmó y Matsuda suspiró.

—Yo creo que no podré...—

—Puedo ayudarte con tus gastos —mencionó Zeng interrumpiendo a Matsuda —siempre que me lo termines pagando después.

—Estos jóvenes ya tienen a sus caballos esperando —dijo Ujihisa refiriéndose a Heya; Misato y Daichi —Vayan a comprarlos y así podemos decidir a dónde viajar.

—Shizuoka— mencionó Yin— Somos un grupo grande ahora, viajar a pueblos pequeños siendo demasiados hará que levantemos sospechas, un grupo grande en una ciudad grande siempre pasa desapercibido.

—Claro —mencionó Satou —Siempre y cuando evitemos decirle a todos que el clan Tao ha llegado a la ciudad — dijo mirando a Zeng quien tomaba té disimuladamente; pues había sido su culpa que los locales en Nagoya supieran de su ingreso gracias a que Zeng no quería ser confundido con un simple ciudadano.

—Gracias a mi error te has reencontrado con tu hijo —dijo tomando uno de los tazones de arroz. Haciendo que Satou sonriera.

—Eso es cierto— dijo abrazando de lado a Kuroki —¡Eso me recuerda a que mi hijo se ha convertido en un hombre!— esto lo dijo en voz alta, avergonzando a Kuroki sin realmente quererlo —Ya no es un pequeño que cae en el lodo y llora; ahora es un hombre que va a dojos a probar su fuerza — decía orgulloso mientras servía sake en los vasos de los presentes. Daichi sacó su nuevo vaso, adquirido por el hombre en el puerto, Zeng lo observó.

—Es una artesanía muy fina; veo que hay alguien con gusto impecable — mencionó Zeng hacia Daichi.

—¿Heya cierto? —dijo Yin mientras veía como Satou servía el sake —No vayas a beber mucho, aun veo que eres muy joven cómo para que te emborraches, en especial ahora que subiremos a los caballos— después le quitó la jarra a Satou y sirvió en el vaso a Misato —Permíteme Satou, que estás regando el licor y eso no es propio frente a una dama —Satou se avergonzó un poco pero se le pasó al mirar a Kuroki.

—¡Kanpai!— dijeron los japoneses chocando vasos.

—¡Ganbei!— dijeron los chinos.

Ahora sólo faltaba terminar de comer para seguir su camino hacia Shizuoka.

 

Exterior de Nagoya/Establos (Satou; Ujihisa; Zeng; Yin Heya; Misato; Daichi; Kuroki)

La noche estaba siendo bastante alegre; todos habían obtenido un caballo; Kuroki y Matsuda fueron ayudados por Satou y Zeng a terminar de pagar al suyo mientras el resto se preparaba para el viaje.
Todos iban con estómagos llenos y ánimos bastante altos, el alcohol había ayudado a ello pero también la compañía; se habían vuelto un grupo unido y bastante sincronizado.

La noche aun era joven, así que emprendieron rumbo para no perder tiempo y llegar a Shizuoka.

---

---

---

El rol sigue aquí ​

 

Camino hacia la clínica
[Kuroki; Rengo; Kibo]

Rengo le entregó en brazos a Kibo quien se sujetó de Kuroki al instante; estaba tan débil que se limitó a estornudar ligeramente en su hombro mientras se estremecía. Rengo trató de ir con sigilo; pero su apariencia no ayudaba.

—Estar de camino a Kioto...—la idea pasó por su mente, no podía imaginar a Natsu dejándolo fuera de sus planes, habían decidido avanzar ese camino juntos; pero tal vez su debilidad lo hizo dudar de él, tal vez se dio cuenta que sólo le estorbaría si viajaban juntos. Sacudió su cabeza, no le gustaba especular demasiado; pero si algo sabía es que el corazón de Natsu era noble —El te salvó porque era lo correcto —dijo con seguridad —Natsu me salvó a mi porque era lo correcto; también salvó a Takano porque era lo correcto; pudo habernos dejado morir, y no lo hizo.

"Hey, Rengo, calma"

El abrazó fue algo que no esperaba; lo correspondió casi de inmediato; conteniendo sus ganas de llorar, simplemente porque no quería que Kibo lo viera así y llorase con él.

—Si. Saldremos de esto —dijo sorbiendo sus mocos; para después tallar sus ojos.

"Ya casi llegamos, no es la primera vez que estoy aquí, de hecho tu tampoco"

—¿Cómo sabes que estuve en Nagoya? —lo miró y sonrió, recuperando un poco su ánimo; o al menos aparentando —¿Ves? Me acosas, eso no es normal Kuro-kun— mencionó para después girar su rostro hacia una dirección en específico —Pero a diferencia de ti, yo no estuve solo en Nagoya; aquí tengo un conocido, posiblemente pueda ayudarnos solo qué... — trató de no reírse —Creo que tú no tienes mucha suerte en santuarios ¿cierto?


Clínica
[Kuroki; Rengo; Kibo]

Llegaron a la clínica, el sitio estaba atascado de personas que parecían querer comprar medicamentos de buena calidad a bajo precio. Una mujer se les acercó preocupada; no parecía ser una de las médicas en la clínica, en sus ropa se le notaba que tenía buena suma de dinero consigo.

—Pobres criaturas— mencionó al ver su aspecto.

Rengo la miró con una tristeza absoluta; para después recargar su mano en el hombro de Kuroki mientras tosía con fuerza—La guerra ha sido muy dura...— mencionó interpretando su papel, se talló los ojos —Huímos de nuestro viejo hogar para salvarnos; nuestro caballo; Men, tuvimos que comerlo para sobrevivir —dijo llevándose la mano a la boca y cerrando los ojos —Hemos perdido todo; mis hermanos y yo hemos viajado a pie por varias lunas; alimentándonos de fauna silvestre, recorriendo ríos para llegar a grandes ciudades — sujetó su cuello como si este le doliera, haciendo una mueca que hacía juego —Y ahora la inclemente lluvia nos ha enfermado; por favor, noble señorita —dijo a pesar de que aquella mujer debía ser reconocida como señora —Salve a mis hermanos; aun son jóvenes...—comenzó a toser con fuerza mientras la mujer lo sujetaba de los hombros, mientras Rengo le daba un codazo a Kuroki para que siguiera el juego.

Contenido oculto

Gigavehl

 

​

 

Clínica
[Kuroki; Rengo; Kibo]

La mujer comenzó a reír para después apretar sus cachetes —No deben mentirme pequeñas criaturas; los ayudaré, no es bueno dejar a tres niños a su suerte —miró a su alrededor —Además el más pequeño en verdad no luce nada bien.

Esto hizo que la expresión de Rengo se desplomara, pues realmente estaba preocupado por el niño, quien parecía estar perdiendo su energía.

La mujer le entregó a Rengo una bolsa de tela fina, siendo que él tenía las manos libres ya que Kuroki cargaba a Kibo; Rengo miró al interior en ella había tres frascos con medicina.

— Tómenla, yo volveré a comprar mas para mi —dijo la señora mientras Rengo la observaba, para después hacer una reverencia ante ella.

Contenido oculto

Gigavehl

 

Clínica
[Kuroki; Rengo; Kibo]

—Es bueno tener algo de suerte —mencionó Rengo siguiendo a Kuroki —Aunque la amabilidad es más bien una acción en lugar de simple fortuna —dijo volteando hacia atrás tratando de volver a ver a la mujer; pero ya se había perdido en el cúmulo de gente —Me es difícil pensar que alguien hace algo por simple buena voluntad, siempre es más fácil obtener una buena respuesta con un engaño.

Rengo entregó a Kuroki su medicina mientras hacía que Kibo se girarla al verle, desatando el hilo que detenía el papel en el frasco. El olor era amargo, iba a saber fatal —Escucha bien Kibo, esta es agua de los Dioses; dicen que si la logras beber de un sólo trago, te concederán un deseo.

Kibo miró a Rengo, no sonrió pero afirmó, la cabeza le dolía tanto que no podía ni reaccionar, aunque aquello le emocionara, Rengo le acercó el frasco y Kibo lo bebió de un trago, para después toser un poco y al terminar sacó la lengua y miró a Rengo con enojo —Puaj...— se quejó Kibo mientras Rengo le sonreía y sacudía su cabello.

—Ve pensando en tu deseo —Dijo mientras hacía lo mismo con su frasco; pero el lo terminó devolviendo al frasco por el pésimo sabor —Qué asco; prefiero morir —dijo mirando el frasco. Después observó a Kuroki beber el frasco rápidamente, así que no tuvo remedio de hacerlo también, no iba a ser el único que no se tomara la medicina, no podía volver a enfermar al resto.

Pasaron unos momentos y la fiebre bajaba, Kibo se había quedado dormido sobre Kuroki, el rubor de sus cachetes había disminuido considerablemente. Pero Rengo alejó la vista de Kibo al escuchar a Kuroki preguntarle por el dinero, este metió su mano entre su ropa y sacó una pequeña bolsita, la abrió y dejó caer unas cuantas monedas —Tengo... veintidós monedas... — lo miró apenado mientras este le daba un leve golpe en el hombro haciendo que se le cayeran un par de monedas que de inmediato fue a recoger.

—Pero sé como conseguir dinero ¿Cuánto necesitas? — preguntó mientras guardaba sus monedas nuevamente para evitar perderlas.

—Se llama Benkei; es un monje guerrero. La vez que estuve en Nagoya me dejó permanecer en el templo si le contaba historias—sonrió —Vivía antes en Kioto; y se quedaba en el puente Gojo en la ciudad, allí retaba a todos los guerreros que pasaban; y al ganarles debían darle sus espadas. A él también lo consideraban un demonio, le decían oniwaka, demonio ogro; seguramente por su altura, ese hombre es enorme —rio.

Contenido oculto

Gigavehl dime si vas al santuario o a la casa de armamento