Herbolaria [Shinko; Riku] Entraron a la herbolaria; dos niños jugaban en la entrada con espadas de madera, al verlos detuvieron su juego, para continuarlo en el exterior del local. Allí dentro había un anciano, el cual levantó la vista —¡Clientes!— mencionó emocionado —Díganme, qué es lo que necesitan —su sonrisa era afable. Contenido oculto Monpoke
Riku Sonrío al ver a los niños saliendo de la tienda, niños alegres. Incluso me atrevería a decir con cierto nivel de admiración a los samuráis. Solo espero no se metan en problemas en el exterior. "Bueno días, señor. No llegaré tan lejos para decir que me especializo en eso, pero me centro en la elaboración de antivenenos". Me presenté en unas pocas líneas, diciendo cual es el área en cual me estoy ocupando. "Estoy buscando comprar un ingrediente en específico y saber si tendrá alguna receta interesante a la venta". Dudo me alcance las monedas para este segundo, igual, no pierdo nada por informarme. "Una seta brillante de nombre Reishi, o seta de la inmortalidad. Sino tienes a la venta, igual me gustaría poder usar sus herramientas".
Herbolaria [Shinko; Riku] El anciano negó —Yo no tengo a la venta los ingredientes; mi hijo puede ayudarte con ello; el es un herborista que viaja por todo Japón; siempre trae consigo todo lo que un herborista necesita, y sobre todo, lo tiene a un precio considerable —dijo con sumo orgullo— Su nombre es Seiryo Yoshida, a veces va acompañado de su esposa; pero normalmente debe viajar solo. Le indicó que pasara, mostrando sus herramientas —Úselas por favor, son sólo diez monedas por ello Contenido oculto Monpoke
Riku "Agradezco de todas formas la información". Otra decepción, esta no parece ser la ciudad para conseguir ingredientes. Seiryo Yoshida. Espero encontrarlo algún día. "Eso haré entonces". Llevo las diez a su mano, para luego revisar el lugar de trabajo. Comprobando tener a mano lo que voy a utilizar. Saco de a uno el ingrediente que utilizaré, sacando y guardando una vez elaboré la medicina. Usando el único que me encontré por aquí y aquellas sobras deje desde kamakura. Contenido oculto Corteza de sauce >> Sauce x1 Campanilla de invierno >> Galantamina x1 Corteza de cerezo >> Hidroxicloroquina x2
Herbolaria [Shinko; Riku] El anciano lo observó atento, le gustaba ver los procesos de cada herborista, eran algo único —Cerca de la clínica hay un río, allí hay árboles de cerezo donde podrás recoger material —dijo con una sonrisa— Seguramente eso puede servirte de algo. Shinko permanecía alerta, tomándose muy en serio su actitud de guardían. Contenido oculto Monpoke
Riku "Lo pensaré si pasamos por la clínica". No me sentí nervioso por su mirada y continué trabajando, siguiendo los pasos mentales de estas recetas que poco recuerdo. Me falta mucha practica. "Todo sirve si es bien utilizado". Una lastima que busco medicinas para venenos más mortales. Deteniéndome uno momento luego de recoger y almacenar las medicinas echas, echo un vistazo al rededor para buscar lo necesario para limpiar las herramientas. Ubicado, y suponiendo que no molestara al anciano, limpio aquello que use. "Es todo lo que tengo que hacer por aquí. Nos tendremos que despedir, cuídese". Fui tal vez un poco cortante al despedirme, Pero no le di mucho interés de querer hacer otra charla al ir guiando a Shinko hacia las calles, me sienta medio pesado cuando me mira así. Cuidándome de cualquier amenaza improbable. "Puedes elegir a donde ir a continuación, aun queda tiempo antes de que anochezca y por mi parte no se me ocurre que hacer para pasar el tiempo". Le ofrezco a Shinko la opción de ser quien elija a donde ir, eso quizás lo haga relajarse un poco.
Shukusha [Shinko; Riku] Shinko avanzó por los caminos de Iwakura, mirando a todos lados; esta vez no por paranoia sino que buscaba algo que hacer. La ciudad era pequeña, así que decidió explorar un poco los alrededores, decidió volver al shukusha; allí se dirigió a las aguas termales. Aquel era un sitio perfecto para relajarse; algo que no había hecho en mucho tiempo. De hecho, Shinko jamás había estado en un onsen, pues siempre habían permanecido en bosques o pequeñas aldeas donde el agua tibia no era algo común. Así que vio la oportunidad como una que debía tomar. Al ver el vapor en el agua no pudo evitar sonreír, se quitó su ropa dejándola en una de las piedras para después entrar de un brinco, ya que no había nadie mas allí, a final de cuentas, Shinko seguía siendo un niño. Contenido oculto Monpoke
Riku El mar y ahora el Onsen. Shinko, permaneces alerta mucho, pero solo te gusta relajarte. Divertirte. Por eso creo eliges estos lugares, son ideales para pasarla bien. Disfrutar de la tranquilidad. En este momento ¿No acabas de despojarte de todo? ¿Desarmado y desprotegido? Solo puedo unirme a él. Acompañarlo en este momento. Levanto los pies del agua desbordada por su brinco, sonrío al ver mi calzado empapado e ir quitandomelo. Dejándolo en una esquina de la habitación, donde considero estará más seguro del agua. Abandono mis prendas de la misma manera, dejándolo sobre el calzado. Al contrario de Shinko, decido ingresar lentamente los pies al agua y meter mi cuerpo de apoco. Apoyo tranquilamente la espalda en el borde al continuar hundiéndome en el agua. Me tomo unos segundos de disfrutar el calor del oncen, relajarme y aliviar el cuerpo tenso de tantas lunas. En estos momentos quisiera poder contar unos viejos relatos, dar algo por este buen momento. Pero no tengo nada. Carente de dones y una historia que contar. Ese es el tipo de vida que he vivido. Vivir y olvidar... sufrir en silencio por todo aquello que paso, mentirme diciendo que lo supere. No hay nada como la paz. Ver a un niño sonreír. Por mucho que esa parte de mi desee estar recaer, no lo voy a hacer, no al tener a Shinko a mi lado. Así, solo me limito a mirar con paciencia y alegría a Shinko. Las palabras son innecesarias.
Shukusha [Shinko; Riku] Así permanecieron por un largo tiempo; Shinko recargó su cabeza en una roca detrás suyo; por un breve momento, parecía que lloraba; pero era difícil distinguir si eran lágrimas o el agua que escurría de su cabello. Aun así, parecía estar tranquilo, no mostraba sufrimiento. El sol descendía, pintando de rojo el horizonte, la noche se aproximaba; por ello Shinko tomó la iniciativa de salir de allí, ambos limpios, sin cansancio; revitalizados. A pesar de que sus dedos estaban arrugados debido a la larga exposición al agua. Shinko se secó para después vestirse, mirar su katana, apretarla con todas sus fuerzas para después colocarla en su cintillo. Estaba listo para ir hacia la casa de armamento a recoger a Kosu. Contenido oculto Monpoke
Riku Tiro mi brazo por en cima del hombro de Shinko y apoyo sutilmente la barbilla en el otro hombro. "Eres fuerte Shinko". Te admiro por ello. Susurro en su oído con total tranquilidad, relajado me dejo recostar la cabeza. Sintiendo el frió tacto de un cabello húmedo. "Luchare por los días de paz, paz que cada niño a anciano merece conocer y recuperar". ¿Desconoces que es la paz? ¿Luchas para obtener algo lo cual nunca conociste o no recuerdas? Seguiste a tu familia, caminando por el mismo objetivo. Pero lo desconoces. Desconoces que quieren lograr... "Vale la pena". Todos deben ser libres de elegir. No fingiré conocerla, no a la perfección. Es algo que yo también quiero. Un mundo no me vea arrastrado por la corriente, eligir mi propio rumbo. Lastima ya es tarde para mi, así es como lo decidí. Luchare hasta morir. Solo en ese momento de mi último aliento, espero ser capaz de liberarme de tantas penas. Estar en paz conmigo mismo. En un comienzo no lo quisimos, permanecer en estar guerra, y ahora estamos metido hasta la médula. Una sensación que ahorca, te asfixia lentamente y consume tu voluntad. Sea hace imposible vivir... Estamos juntos. Somos Fujiwara. Aun si existe el fracaso, permaneceré con ustedes. Hasta el final. Sea si caigo último, primero o no caigo en absoluto. Seguiré adelante. Por mi familia. Contenido oculto Finjamos que Riku esta vestido desde el comienzo... Vamos a casa de armamento... eso, si no hay que darle tiempo a Shinko.
Shukusha [Shinko; Riku] Aquel momento los unió aun más como familia, Shinko parecía querer hablar pero fue incapaz, pues quería decirle que no era fuerte, pero le gustaría serlo algún día. Casa de armamento [Riku; Shinko] La casa de armamento se escuchaba mucho más silenciosa, al parecer los jóvenes se habían retirado; las puertas estaban abiertas para dejar salir el calor de la forja que se usaba todo el día. En la entrada estaba el herrero experimentado; exprimía varias telas de agua sobre el suelo, el sitio olía a metal, un olor parecido al de un campo de guerra. El hombre los miró y frunció el ceño, llevando a velocidad su trapo a su hombro creando un sonido al contacto de uno con el otro, allí lo dejó para dirigirse a ustedes —No sé que le has dicho; pero no sonríe como siempre lo hace. Procura no hacerla llorar de nuevo —dio unas palmadas en su hombro, pues estaba molesto, pero sabía que no era la culpa del mensajero. Fuji estaba dentro, afilaba su kodachi. Al escucharlos entrar se levantó, tomó a Kosu que descansaba en uno de las maderas de práctica. Desde ese pequeño vistazo, parecía un arma nueva. La saya relucía, mostrando su verdadero color. Fuji la extendió con respeto —Te la presento nuevamente, ha renacido; ha tomado fuerza y luz —observó a Riku —Mi maestro, Masamune me ha ayudado en este trabajo, no sólo estaba llena de herrumbre, también estaba astillada y su filo era casi nulo —esto último lo dijo regañándolo —No vuelvas a abandonarla de esa manera, porque ahora es uno contigo nuevamente. Desenváinala y ve su potencial — dijo señalando una fila de tallos de bambú que había acomodado para su prueba. Contenido oculto Es el momento de la verdad... dado de 20! danos tu fuerza!
Riku "Seguirá brillando mientras mí alma lo haga". Acepto y tomo a Kosu de nuevo, procurando sentir cada centímetro de su empuñadura en mis dedos. Es diferente y a la vez lo mismo. "Yo no volveré a descarilarme". Desenvaino lentamente, notando como la funda se desliza perfectamente por su filo. "Por que he encontrado mí rumbo y lo seguiré hasta el final". Con Kosu o no, ya estoy aquí. Ambos los estamos. Para mí consternación, termino lo que serían en su totalidad unos cortes normales. Todos ellos, yendo en degradación tras cada corte. No esperaba algo diferente de mí. Lamento el lamentable estreno. Pero la pena no está en mis propias habilidades, habilidades que he aceptado y tratado de pulir. Lavanto a Kosu hacia arriba, completo con atención su reluciente filo. Nuevamente, reflejo de mí propio rostro se ve en la hoja. Has vuelto. Es simple notarlo, en el propio reflejo de la hoja, no me regresa nada más que un rostro depresivo. Debería ser feliz, alegre y emocionado por el regreso de este viejo filo. Pero no es así... Resurgió. Y no eres lo que eras. Eres mejor. Enfundó y la vuelvo a colocar de regreso en el cintillo, donde debería estar. "Les agradezco profundamente el trabajo que han echo". Realizo una reverencia hacia los dos herreros que le han regresado la vida a Kosu. "Me esforzaré por estar a la altura de este nuevo filo". Debo demostrar ser nuevamente digno de ella y no valerme solamente por su filo. Estar en igualdad.
Casa de armamento [Riku; Shinko] Fuji sonrió al ver los cortes; eran de práctica, simplemente para probar su filo, y estaba satisfecha de ver como la hoja se deslizaba sin demasiada fuerza —Esto es el verdadero potencial de Kosu— mencionó —Pero debes de saber algo —dijo extendiendo nuevamente sus manos para que le devolviera la katana —Hay algo en su nakago que sólo tú puedes ver, hay una inscripción que yo no entiendo; pero seguramente tú si lo harás. Tomó la katana y con hábiles movimientos la desarmó al instante, mostrando el filo a los ojos de Riku — Te dije que no era la primera vez que limpiaba un arma tan olvidada como esta; y en ambos casos leí lo que no debía haber leído —bajó la mirada —Siempre termino haciéndolo —recordó como también había leído el apellido de Mao en su katana, sabía su apellido y lo guardaría — Esa katana que limpié hace años pertenecía a Takeda —dijo levantando la mirada a Riku —Su nombre estaba gravado en ella, aun así, él me dijo que esa katana jamás fue suya, que se la entregaría a alguien en quien confiara, que sería el arma de alguien que la necesitara mas. Y que ella sabría decirle quien sería su dueño. Y confié en él, porque es cierto; las katanas siempre eligen a sus dueños. Dejó la katana frente a ella, en una mesa de trabajo —Sólo queda algo por hacer —miró a Riku —puedo borrar su pasado, eliminar la inscripción y grabar tu nombre y apellido en ella —dijo con seguridad. Contenido oculto Monpoke tu decides si mostrarle la inscripción a Shinko, decirle lo que hay allí, también decide si Fuji graba su nombre con apellido verdadero.
Riku "El pasado siempre regresa para recordarte quien eres". No son las exactas, es solo versión corta de una oración dicha por el maldito de Murai. Oración que uso para hablar del tormento y dolor por llegada de ese pasado... Tormento, dolor. Yo no usaría esas palabras en este momento, experimento una emoción muy diferente. Confusión. "¿Què...". Desconcertado, mí mente se dividió entre querer hablar y completar aquella inscripción que me presenta. Ambos ojos permanecieron pegados a ese grabado, analizando con trabas cada línea. Más lo veo. Más recuerdo. Más lo relaciono con el sello el cual conozco. Me es imposible no reconocerlo. "¿Què hace eso ahí?". Pregunté. Lo hice aún si es imposible que Fuji tuviera la respuesta. Pero no fue hacia ella. Kosu. No, mucho antes de que cargará con ese nombre. Incluso antes de esa katana llegará a mis manos por primera vez. El contenido de su nakago era nulo. Una zona vacía. Tal como se esperaba de una katana simple con una alta posibilidad de ser desechada o pasada de mano en mano. Nunca. Nunca estuvo destinada a quedarse en mis manos. Pero, este gravado implica confusión. Destruyendo aquello que creí durante todos estos años, todos estos años que la empuñe. "Es...". Su significado, el significado que carga Kosu. "La misma inscripción de mí Hanko". Aquel sello personal que llevo conmigo, pero no he vuelto a usar desde que dejé mí hogar. Lleva mí apellido, solo mí apellido. De la pequeña aldea de la cual vengo, estos eran más familiar que personal. Por cual comparte la similitud con el que cargaría mí padre, abuelo... ¿Por que está en la katana? ¿Es... Un mensaje? No, eso significaría sabían de mí partida. Mí abandono. Traición... ¿Què significa todo esto? ¿Estuve cargando acaso también con una katana diferente? Una katana propia. ¿Que debo sentir? "Puedo borrar su pasado" "No. Déjalo". Carezco del corazón para responder lo contrario. Paso una manos por mis ojos y cortó la vista al grabado, me dejó frotar un poco ese punto de mi rostro. Relajando la expresión y recogiendo la humedad de ambos ojos. "¿Sabes... Quien fue el herrero?". Yo los abandone. Esa es la razón por cual decidí dejar mí apellido, de no cargarlo y esparcirlo con orgullo... pero aún lo sigo cargando, lo sigo usando. Los abandone, pero ¿Ustedes no lo hicieron? Apesar de mis acciones. ¿Siempre podré considerarme un Okudera? Ahora... Soy un Fujiwara.
Casa de armamento [Riku; Shinko] Fuji lo observó, ahora ella había sido la causante de sus ojos nublados por lágrimas que no parecían ceder a la gravedad —Cuando un hanko aparece en el nakago, no significa el nombre del portador, ese es tallado con los kanjis correspondientes. Un hanko es una firma, la firma representa al herrero — se acercó a Riku y lo tomó del hombro, apretándolo con fuerza; después con ningún recato, limpió las lágrimas de sus ojos antes de que cayeran —El hanko es la firma del herrero; esta katana fue forjada por tu sangre. Shinko los observó, escuchar esas palabras lo hicieron sujetar su propia arma a su costado. No era por miedo, era por cariño. —No reconozco el Hanko; pero mi maestro lo hizo. No conoció al herrero en persona pero vio mucho ese hanko en su juventud —sonrió —posiblemente algunas armas sigan en circulación en estos tiempos. Contenido oculto Monpoke
Okudera no Riku Sonrió un poco por su gesto de amabilidad, aquel que no me atreví a realizar esta mañana. "Okudera. Ese es el apellido con el cual nací". A un si quisiera llorar, no es el lugar para quebrarse. Es demasiado que pensar, demasiadas emociones. Limpio con la manga húmeda de los ojos y lo dejo un segundo, seguro de que ya no volverán a humedecerse los ojos. Sigo sin poder entender. El hanko en el nakago. Que resulte ser alguien de mi familia quien lo haya forjado, eso no estuvo en mis expectativas en ningún momento de estos años. Menos lo harán en tan solo unos minutos. Es un secreto tras otro. Una revelación que debió llegar a mis oídos en algún momento. Pero llego tarde, si hubiera sido meses atrás... tal vez hubiera perdido la vida en mi hogar. En su lugar me encuentro sabiéndolo ahora, cuando ya lo he perdido todo. Y he ganado más. introduzco la mano mano en una pequeña bolsa, sacando de ella una pequeña bola de tela desgastada. Desenvuelvo lentamente la tela y revelo el contenido protegido de ella, un hanko de madera. Uno que tiene la misma firma mostrada en el nakago. Contenido oculto La segunda pertenecía que me lleve de mi hogar. Una que tiene cierta relación con Kosu. Aun si es a través de un hanko que casi nadie conoce, el apellido de mi familia a dejado su marca en japón. Un gravado que quizás permanezcan en varias katanas hasta hoy en día. Katanas portadas por bandidos, espadachines, de decoración en algún estante o... por sumarais. Si fuiste un gran herrero es lo de menos. Fuiste quien forjo esta katana al descarrilado de tu descendencia, la portare con orgullo. No es su gran habilidad la que quiso dejar impregnada en el filo, sino sus intenciones. "Gracias por revelarme su pasado. Aun si ahora es tarde para volver con mi familia, estoy contento por saber que me han acompañado". Baje un poco la mirada al mencionar mi familia, un gesto bago que espero sepa leer. ¿Estoy contento? Eso no es mentira. Si me ven, ahora se con cual intención me ven. Es un peso el cual me quitan de encima. "Kosu". Sonrío complacido al ver la katana, viéndola desde una perspectiva diferente ahora que se su origen. "Cuánto más camino, más creo que he elegido el nombre correcto para ti". No puedes comenzar un viaje y olvidar de dónde provienes. Estuviste cargando con una señal de tu origen todo este tiempo. En el nakago portas esa firma, en la zona antes del inicio de la hoja. Antes del inicio del viaje.
Casa de armamento [Riku; Shinko] Fuji sonrió —La sangre siempre llama— mencionó mientras observaba a Riku, totalmente absorto. —Ahora...— dijo alejándose para sacar un par de katanas de una acaja de bambú —... mi maestro forjó estas armas hace tiempo, hoy las hemos sacado de su encierro para pulirlas y prepararlas para sus nuevos dueños —Fuji sacó dos de las tres katanas en la caja, una se la entregó a Shinko y la otra a Riku, así dividirían sus pesos entre dos —Me ha costado trabajo sin paga por mucho tiempo —sonrió — Por eso debo debo permanecer aquí antes de volver con mi clan. Se mantuvo en silencio unos segundos, pensando si debía decirlo o no. Pero Fuji no se guardaba las cosas por mucho tiempo —Por favor; si ven a Matsuda... —se sonrojó —... díganle que lo amo. Y que deseo volverlo a ver pronto. Parecía que sería todo. Shinko guardaba el arma cuando Fuji volvió a hablar —Y díganle a Takeda que ya hace varios soles atrás, volví a ver a Natsu en Iwakura. Venía acompañado de un chico que se parecía a él, de hecho al verlos de lejos pensé que eran Takeda y Natsu. —miró específicamente a Riku —No sé dónde pueda estar ahora, pero al parecer está a salvo —sonrió alegre. Contenido oculto Monpoke
Riku "Les haré saber a los portadores de estás katanas el nombre del herrero que las forjó" "Entregar ese mensaje a tu esposo es lo mínimo que puedo hacer". Asiento a su primer pedido desinteresado dirijido a quien ama. Acomodó el arma en mi cintura y asegura. Voy considerando las palabras de Fuji, buscando en mis borrosos recuerdos de cierto día tiempo atrás. "Natsu y... alguien parecido a Takeda". Rengo creo se llama, en cuanto a Natsu, es probable que también hubiera escuchado ese nombre. "Es innecesario. Si estoy en lo correcto, ambos rondaban por la entrada de Kamakura cuando llegamos ahí hace unos soles". Me vuelvo un poco hacia Shinko por esperar sus confirmación, es probable tuviera más internación con su compañero de equipos de subir la montaña. Espero que una positiva, las agresiones en nosotros tal vez empezaron antes de lo que creo. "¿No?". Realizo una referencia en señal de aceptar su trabajado y poder soltar unas últimas palabras de despedida. "Le deseo la mayor de las seguridades Señorita Fuji. Que su forja crezca por cada día que permanezca aquí y pueda reunirse con su clan pronto". Esos son mis deseos hacía ella, quien me ha mostrado bondad mientras yo le he echo llorar. Algunos. No todos los Minamoto son de mala vibra. Creo es momento de irnos
Casa de armamento [Riku; Shinko] Fuji afirmó —Viajen con cuidado— dijo ante la cordialidad de Riku, algo preocupada por el silencio perpetuo de Shinko —Nos veremos pronto, cuando termine mis deberes aquí en Iwakura, y pueda reunirme con todos los aliados— miró a Riku y lo señaló —Cuida tu filo; no dejes que jamás vuelva a oxidarse, o tendré que reprenderte — dijo un poco burlona, sin nada de seriedad. Para después despedirlos con una reverencia. Al salir, Masamune esperaba recargado en una de las paredes de la casa de armamento — Kosu... recordaré ese nombre; pues siempre recuerdo más los nombres de las katanas antes que sus portadores —sonrió para después entrar a la armería a terminar de limpiar. Contenido oculto Monpoke tiraré la lista de movimiento para ver quien tira el dado El rol continúa en Iwata