Ginko Harutomo Una vez reestablecido de sus heridas, estiró su mano hacia Oki para que lo ayude a levantarse, lo había molido de un sólo golpe. -Gracias por el entrenamiento, es cierto...- dijo mirando también a Gon -No he extrañado a Hinata para nada- se llevó una mano detrás de la cabeza y sonrió avergonzado. -Veo que también eres médica, además de una guerrera formidable. ¿Me ayudas a curar a los otros?- se refirió a los Fujiwara que más lejos parecían pelear a muerte, a pesar de que se trataba de un simple entrenamiento. -Si nos dividimos el trabajo terminaremos más rápido- Y más rápido estarían inmersos en esa guerra...
[Takeda; Takano; Oboro; Gon; Ginko; Xiao; Shinko; Riku] Los combates habían termiando; y tanto Oki como Ginko curaron a los presentes; incluyéndose. Era momento de partir, por lo que los emishi volvieron a guiar el camino. —!Eh Riku! — gritó Dazai mientras se preparaban para irse —Tal vez en nuestro siguiente encuentro, puedas comprarme algo; no seas avaro —dijo devolviéndole la espada tomada —No somos ladrones ni mercenarios; yo ahora soy un comerciante; y suelo encontrar cosas extrañas en mis caminos, así como el juego que le vendimos a tu amigo albino; al menos encuentro algo nuevo mientras viajo, esto era lo único que traía esta vez; pero seguramente me encontraré con cosas mejores... —levantó la mano en despedida —¡No mueras! Contenido oculto Monpoke Slam El rol de Ginko y Riku continúa en la Guerra por Nagano.
El rol de Misato proviene de Shima Shima a Nara (desvío por movimiento) Día 57 [Misato; Kumo] Misato había partido de Shima junto a Kato y Yin; pero los amenazó una fuerte tormenta. Kato les dijo que siguieran a su águila que sobrevolaba con agilidad entre las nubes. Pero había otra ave igual de ágil surcando los cielos, y fue esa ave la que guio accidentalmente a Misato hacia su dueño. El búho comenzó a ulular en brazos de su dueño. —Calma, Fukuro; es sólo una tormenta —dijo acariciando su plumaje. Misato reconoció aquella voz, era la que escuchó en la clínica junto a Matahachi. Contenido oculto Ikoma-kun pues... malditos dados. Pero bueno; nos han abierto muuuuchas posibilidades con este encuentro. Aun no contesto en Shima pero pronto narraré la salida de Misato por allá.
Misato Aoyama Al salir de Shima Yin y yo seguimos al águila del maestro Harima pero una tormenta creo perturbación en nuestro camino a Nara. En algún momento terminé siguiendo al ave, pero más tarde cai en cuenta que se trataba de un ave muy distinta a lo que debería ser. Siguiendo al ave distingo un joven que lo recibe, hace un pequeño esfuerzo y me di cuenta que eso no era un águila, sino un búho asustado por la tormenta aterrizó para refugiarse en los brazos de aquél joven. —Esa voz...—dije al escuchar al joven, su voz era la misma que escuche luego de mi primer encuentro con Matahachi. Era su informante. —Parece que amas a los animales...y ellos a ti—dije con tono amable sin ánimos de crear conflictos con aquel individuo. >>Estoy segura que eres quien estuvo en la clínica de Shima el día anterior.
Shima a Nara (desvío por movimiento) Día 57 [Misato; Kumo] Él sujetó con más fuerza a su búho —¿Estuviste en la clínica? —preguntó avanzando hacia ella — ¿Cómo es posible que no sintiera tu presencia? Matahachi no le había dicho nada de la presencia de Misato; tal vez se debía a algo. —Los animales son en los que puedo confiar...— dijo temeroso. Pues ahora entendía que Misato conocía información delicada. Una carreta se aproximaba a ustedes; una mujer y un hombre iban caminando junto al caballo que la jalaba. Parecían ser comerciantes. La mujer sonrió y saludó al joven del búho, este respondió el saludo con una leve reverencia. Misato ubicaba aquellos rostros, ya se había encontrado en el mismo camino pero jamás habló con ellos, fue en aquella ocasión que viajó de Ueda y habló con Takeda y Takano. Contenido oculto Ikoma-kun Kumo es un personaje que es pésimo en interacciones sociales; una de las razones por las que Matahachi pidió que te ocultaras en Shima es porque Kumo no hablaría de temas delicados frente a una persona nueva. La manera de ganarte su confianza en con su búho, tirando un d20 1-5= el búho se espanta 6-19= el búho confía en Misato 20= el búho posa sobre el hombro de Misato; ganas por completo la confianza de Kumo.
Misato Aoyama El joven del búho no tomo muy bien ser descubierto, no podía culparlo pues nunca cruzamos caminos en la vida. El se mostró muy evasivo conmigo, refugiándose más con su ave en un abrazo protector. —Estuve con Matahachi para una conversación especial y si bien no somos amigos, podemos trabajar juntos. Antes de continuar veo como unos comerciantes en carreta se acercan y saludan al chico del búho como si fuera un viejo conocido. Doy un vistazo al búho y sonrió. —Creo que no debes temer, no pondré en peligro tu misión ni a ti—dije intentando mantener un aire amigable para con el asustadizo informante.
Shima a Nara (desvío por movimiento) Día 57 [Misato; Kumo] El búho se asustó al instante; Kumo retrocedió —Hablas de Matahachi por su nombre... no. No puedo confiarme, ya he cometido demasiados errores...— dijo alejándose; pero la mujer comerciante lo detuvo y trató de tranquilizarlo. El hombre miró a Misato —Usted estaba con el señor Takeda y el señor Takano, lo recuerdo. No hablamos pero sé que ustedes son aliados — dijo para después mirar a la mujer y al joven — ¿Usted conoce a Riku? ¿No es cierto?—le preguntó a Misato. Contenido oculto Ikoma-kun Qué malditos dados xD
Misato Aoyama El búho había rechazado mi presencia huyendo, lo cual fue algo muy desalentador, esperaba poder conseguir algo más de aquél muchacho pero sería imposible. Estuve por intentar detener su huida pero la comerciante logro detenerlo. La pareja me reconoció de aquella ocasión previa a mi viaje a Toyama, justo en ese momento estaba por empezar la batalla de Nagano. —He estado con ellos desde el principio y justo ahora pienso buscarlos. Luego escucho sobre el integrante de los Fujiwara, Riku había pasado cierto tiempo desde la última vez que coincidimos. —Hace tiempo que no compartimos un viaje pero he tenido tiempo para conocerlo un poco.
Shima a Nara (desvío por movimiento) Día 57 [Misato; Kumo] El hombre afirmó hacia Misato —Vimos a algunos de los tuyos hace poco, a todos los Fujiwara —mencionó —mi nombre es Dazai, soy un viejo amigo de Riku —Dijo para después señalarle a la mujer —Ella es mi esposa, Kumiko. El joven del búho estaba muy alterado; se notaba que no sabía que hacer. Cargaba con mucha información encima y parecía que Misato podría ser de las mejores portadoras de dicha información. Pero... ¿Si se equivocaba? —¿Qué sucede?— preguntó Kumiko al joven. —Vengo... yo... vengo de Kioto —dijo asustado — Han matado al Emperador Akishino. Debo buscar a Matahachi; pero su rastro... es difuso. Misato sabía que aquellos comerciantes podían ser grandes sabios de algunos objetos que podrían valer algo; buscó entre sus cosas y la gema que portaba ahora estaba destruida, los fragmentos regados por todas partes. Contenido oculto Ikoma-kun
Misato Aoyama Salude a la pareja con una breve inclinación, ambos afirmaron ser personas de confianza con Riku y los demás Fujiwara. —Es un gusto conocerlos mi nombre es Aoyama Misato soy la única de mi clan de nacimiento, el resto de mi familia son refugiados—me presenté a lo comerciantes, aquella vez solo podía verlos de reojo debido a la necesidad de continuar el viaje. El hombre que responde al nombre de Dazai es un conocido de Riku obviamente. En medio de aquella situación no pude evitar ver la cantidad de mercancía que la pareja llevaba consigo, me sentí tentada por saber si tenían alguna pelota Temari, pero antes de preguntar note como el muchacho del búho parecía muy alterado, como si cargará consigo algo que debía contar. Sin dudas era algo muy importante y preocupante. Han matado al Emperador Akishino —Akishino ¿Asesinado? Pero ¿quién ha sido? Junto a aquella vino la idea de consultar a los comerciantes sobre la gema y la estatuilla Fusatada pero tras buscar la gema está se había convertido en añicos.
Shima a Nara (desvío por movimiento) Día 57 [Misato; Kumo; Dazai; Kumiko] —Un golpe de estado...—mencionó el joven — No sé bien los detalles —dijo a los presentes. Kumiko intentó tranquilizar al joven pero este se separó de ella —Debo apresurarme... debo buscar a Matahachi. —Dale esto de mi parte —mencionó Kumiko entregándole una misiva al joven de búho. Este la tomó, afirmó y siguió su camino. Contenido oculto Ikoma-kun
Misato Aoyama Un golpe de estado...la vida del emperador termino y todo muy probablemente a la inestabilidad por las batallas en Shizuoka y Nagano, además del incidente de la falsa boda termino de fracturar la confianza en el imperio solo quedaba ver quien habría quedado en su lugar y como se desarrolla todo. El joven del búho recibió una misiva de parte de Kumiko, parecia existir cierta colaboración con ellos y Matahachi. Kumiko...ese nombre junto a termino del "crisantemo negro " salieron a relucir en aquella conversación en la clínica, Matahachi se mostró algo esquivo con dicho termino restandole importancia. —Parece que son más que simples comerciantes—dije en cuanto el joven se marcho—hace poco Matahachi me habló sobre ustedes y un término muy curioso que se negó a compartir, no quería ahondar más pues he decidido que debemos cooperar y por fortuna todo indica que así será...incluso tengo que agradecer una ocasión que me apoyo desde las sombras. Di unos pasos más adelante, observe con cautela la vía totalmente desierta. —Desearia saber que hay detrás de eso del "Crisantemo negro"—susurre sin rodeos, esperaba poder averiguar algo más de esta pareja y lo que Matahachi mencionó. >>Espero mi repentino interés no los moleste.
Capítulo IカンケツKanketsu La verdadera simpleza es generalmente obtenida a través de un proceso complejo Shima a Nara (desvío por movimiento) Día 57 [Misato; Dazai; Kumiko] Al principio, Kumiko la miró con desconfianza al mencionar el crisantemo; cubriendo la espalda de Kumo quién se alejaba con temor. Tal vez los instintos de su búho querían prevenirle de algo; al instante sacó unas agujas pero Dazai se interpuso. —Calma— dijo hacia su mujer mientras sostenía sus manos para obligarla a guardar dichas agujas — Es una Aoyama, es aliada de Riku y los Minamoto — le recordó — Seguramente Matahachi la ha dejado escuchar por algo, este encuentro es una casualidad que puede ser muy favorable. Seguramente conoce al clan Fujibashi y por eso Matahachi le ha dado esa información Aquello era cierto; Misato sabía que Matahachi había estado guiando a los Fujibashi como un falso Kaze. También le había dado información a Misato; pero fue ella quién encontró esta gran oportunidad. Dazai miró a la distancia, Kumo ya no estaba cerca — Y ese niño y su búho desconfían de todo, no puedes juzgar a alguien con sus estándares —sonrió. Kumiko se tranquilizó de inmediato —Tienes razón, he estado muy paranoica últimamente —miró a Misato —En verdad lo siento. No quería amenazarte. —Tu familiar ayudó a varios herreros a escapar de una masacre —intervino Dazai —No sólo eso. Toru fue fiel cazador de Yamato no Haruki; yo estuve a sus órdenes en varias ocasiones —mencionaba Kumiko —Los zorros y los perros del Imperio... —dijo soltando una ligera risa —Los perros o inu, eran fieles servidores al Emperador; nosotros los zorros o kitsunes, también servíamos al Emperador pero sin jurar lealtad absoluta. Toru era un Inu y yo un kitsune... Los kitsune eras en su totalidad shinobis sin alguna afiliación con los clanes principales de Iga y Koga, aunque nuestro entrenamiento naciera dentro de esos clanes. Nosotros éramos un grupo selecto, un grupo al que se le llamó el crisantemo negro, a pesar de ya no pertenecer a Iga o Koga; el orgullo de los shinobis de Koga fue muy complejo de erradicar, no querían borrar sus raíces.... o al menos eso decía Ogen. Kumiko soltó un suspiró con pesadez, era un tema álgido que la llevaba a un pasado que a veces buscaba dejar atrás y siempre volvía a acecharla —Es importante que sepas algo antes de continuar el relato; y es que el crisantemo negro ya no representa a la gran mayoría de sus miembros —miró a Misato pues sabía que aquello resultaría difícil de comprender— El crisantemo negro se separó hace ya varias estaciones con la muerte de Haruki Yamato. En su momento Ogen Sugita era nuestra líder cuando el crisantemo se desintegró a sugerencia del líder de los Fujibashi: Kaze. Un nombre que ya conocía Misato muy bien. —El crisantemo negro continuó con algunos de sus miembros; pero los que se separaron de esta facción volvieron a sus prefecturas, volviendo a ser los shinobis de Iga y Koga. Los shinobis con sentimientos, les decíamos. Los shinobis de Koga no pudieron recuperar su libertad; pues Murai fue detenido con manipulaciones gracias a que su madre en su rabia de que le arrebataran Koga, vendió a su propio hijo al nuevo Imperio de Akishino a pesar de que Koga sólo obedecía órdenes de los Taira, así como los shinobis de Iga a los Minamoto. Ogen usaba las piezas cómo ella creía conveniente; pero no pudo controlar a todas, a Murai entre ellas. Por lo mismo, usaría a una de las familias más poderosas para manipularlo, hacerlo caer. Someterlo. Kumiko trataba de resumir lo mejor posible; y parecía revisar el rostro de Misato de vez en cuando buscando confusión. Pero fue Kumiko la que mostró dicha expresión al notar como Misato absorbía aquella información con facilidad, pues ya conocía la gran mayoría, sólo no había entrado a detalles. Kumiko continuó con mayor tranquilidad. —Esto causaría un revuelo político entre los clanes shinobis de Iga y Koga; los cuales creerían que el crisantemo negro se había desintegrado por completo. Creando una rivalidad por poder político que nunca fue intencionada. Pero al elegir bandos, los shinobis se volvieron enemigos; pues los shinobis de Koga optarían por apoyar al clan Taira cuando inició la disputa interna en Kioto entre los Minamoto y Taira. Era una decisión sencilla de tomar, los clanes habían servido a sus favoritos por varias generaciones en secreto al Imperio. Kumiko negó —Y es aquí dónde el crisantemo negro que aun permanecía junto a Akihino comenzó a destruirnos a todos... a los desertores del crisantemo; a los shinobis de Iga y Koga. Usaron un tema personal entre los clanes de Iga y Koga para que estos se enfrentaran unos a los otros; así el crisantemo negro podía buscarnos a nosotros... los desertores. Kumiko miró a Dazai y este sonrió. Kumiko levantó la manga de su kimono y mostró un tatuaje en su antebrazo. —Esta es la marca de todos los que pertenecimos al crisantemo negro — miró a Misato — Todos los que tenemos esta marca y ya no pertenecemos al actual crisantemo negro, hemos sido asechados toda la vida. Han logrado eliminar a la mayoría Kumiko se notaba cansada; preocupada. Si ella pertenecía al crisantemo negro, seguramente los integrantes de este la estaría buscando para matarla. —Cree una nueva organización, uno que ayudaría a quién no podía ayudarse a sí mismo. Cree el clan oculto llamado Shirogami; un clan shinobi que busca ayudar a todos los prisioneros de guerra, refugiados o afectados por las acciones bélicas. Y lo cree basándose en la valentía de un maestro herrero, Keisho. Un herrero que no creaba armas para aquellos que sólo buscaban sangre con ellas. Obata fue otro. Kaze, fue otro y mi hijo fue otro... Matahachi. Misato conocía incluso a Keisho; su nivel de investigación era de admirarse. Lo único que era nuevo era enterarse que Kumiko era la madre de Matahachi. —Al menos algo te ha tomado por sorpresa —respondió Kumiko con una leve satisfacción. Esa necesidad por querer ser quién tiene mayor información era un mal hábito que obtuvo del crisantemo negro. Al notarlo, Kumiko borró su sonrisa altiva con vergüenza y prosiguió — Ogen sabía que ya el odio que se tenían entre los shinobis de Iga y Koga se acrecentaría cuando los Minamoto se enfrentaran a los Taira —pausó para mirar a Misato con preocupación —Lo que está sucediendo es un reacomodo del poder en Japón. Son todas las facciones usando a otras. Mientras el crisantemo negro buscaba eliminar los cabos sueltos para seguir en búsqueda del conocimiento; otros clanes aprovechan esta situación para tergiversar la situación. Entre ellos, una mujer del crisantemo negro buscaba algo más que simple conocimiento. Al ver el poder que manejaba Ogen, le resultó sencillo atacarla también a ella, la utilizó. Y esa mujer causante de todo esto es mi hermana... Kanon. Contenido oculto: Kanketsu Ikoma-kun Tu personaje ha entrado al capítulo Kanketsu. Has hecho una excelente decisión al buscar información del crisantemo negro. Este es un capítulo especial; es una búsqueda que se ha colocado a tu personajes de manera secreta. Y es de cada personaje saber en este capítulo si han logrado, están a punto de lograr o no lograron ese objetivo secreto. En este capítulo yo ayudé a tu personajes con toda la información que ha conseguido Misato por sus relaciones y misiones. Este es un punto clave dónde tu personaje descubre algo importante. No precisamente con respecto a la trama, sino a Misato como personaje; y se ha cumplido gracias a: Misión Toru Aoyama [Kogane no inu] El cazador Imperial. Misato ha obtenido: Lealtad: Apreciar sinceramente a su señor; el menos útil es aquel que tiene sabiduría y capacidad sin poseer lealtad. Convencimiento: El sobreponerte a tu propio líder al sentir que debe volver a ser guiado. Coraje: El miedo avanza pero no les domina, son más fuertes. Recelo: Afrontar los problemas escuchando y observando primero. El silencio también es un arma. Pronto te enviaré un mp para explicarte bien esto. Por el momento hago entrega de los 500 EXP por la habilidad obtenida gracias al Kanketsu.
Misato Aoyama Mi primera reacción a la postura de Kumiko fue afiliar mis sentidos para una evasión perfecta, no quería confrontación alguna sin razón. Por fortuna la pareja de la comerciante fue más racional y aclaro las cosas. —Exacto recién tuvimos un encuentro con Matahachi en Shima y escuché todo lo que debía saber sobre la verdad tras el clan Taira, llegamos a buenos términos. La pareja respondió señalando detalles sobre mi abuelo, los inu y los kitsune y las misiones de estos con el emperador. El resto era información más detallada con nombres que ya conocía bien. El conflicto entre Iga y Koga solo era parte de los movimientos tras las sombras...como el caso de los Mori y su control sobre los Taira. Esto solo lo confirmó. Kumiko mostro su anterior vínculo con el crisantemo negro por medio de su tatuaje, además de relatar sobre su nuevo clan, uno destinado a ayudar a los refugiados. Mucha de la información era ya previamente conocida con menor detalle, sin embargo la verdadera sorpresa era sin duda saber el vínculo entre ella y Matahachi; eran madre e hijo. Al ver mi expresión Kumiko parecia orgullosa de haberme sorprendido, una mujer que sin duda tenía su orgullo. —Como dije, en Shima su hijo nos reveló como guiaba a los Fujibashi, incluso nos cubrió las espaldas en un evento donde un Sawayama intervino— observe en dirección contraria— debo decir que al principio no entendí a medida que iba descubriendo pero muchas veces así son las cosas. Estuve por agregar más pero un ruido en las carreta de la pareja llamo mi atención, sonaba como mordidas sobre papel de arroz. Al acercarme vi algo moverse ajo una tela, lentamente moví la tela y justo debajo habi algo. —un ¿Gato? Vi como parecía estar devorando un dulce de arroz, parecía no haber comido en un tiempo, el pequeño felino no parecía agresivo pues se reacciona acercándose a mi. Y observando el rostro de los comerciantes y el gato obviamente no eran conocidos siquiera...lo cual podía meter en problemas al gato. —¡Pagare lo que Tojomaru comió!—intervine rápidamente incluso colocando un nombre al gato por suerte no fue mucho—de hecho comprare algunas cosas aprovechando el momento. Puede que hubiese desviado el camino pero algo me indicó que habia obtenido algo muy valioso, más al saber que podía ser digna de recolectar información como un buen shinobi Hattori.
Shima a Nara (desvío por movimiento) Día 57 [Misato; Dazai; Kumiko] Dazai y Kumiko se sorprendieron de ver a aquel gato; Dazai revisó el inventario y no habían tenido pérdidas graves en cuanto a valores materiales; por lo que le indicó a Misato que no habría problema alguno y cargó al gato para extenderlo a Misato. Contenido oculto: Tojomaru —Tiene buen olfato — agregó Kumiko para después mirar a Misato —Ahora que Matahachi ha confiado en ti, nos mantendremos en contacto en la medida de lo posible. Dispondrás de la información que el crisantemo blanco obtenga, seguramente pronto sabrás de otros miembros en tu recorrido —hizo una leve reverencia — He de admitir que he quedado impresionada con la información que ya parecías poseer. Si vuelves a encontrarte con Matahachi, creo que deberían hablar del futuro de los clanes shinobi —su mirada era de un profundo respeto; eso se notaba con dificultad en personas que se conocían de poco tiempo, aun así Kumiko estaba siendo sincera y completamente transparente —Creí tanto tiempo que estábamos solos; pero los clanes shinobi no han muerto, la escencia de Obata la veo reflejada en ti, así como también la de Toru—sonrió —Quién diría que una guerrera como tú sería quien llevará riendas en los clanes shinobi, con la sabiduría que dos viejos dejaron sobre tus hombros. Contenido oculto Ikoma-kun Si quieres comprarles algo del inventario puedes avisarme por mp (narraste que quieres comprarles algo) por el momento terminaré aquí ya para moverte a Fukushima con Yin y Kato. No haremos escala en Kamakura para que no sea tanto lío. El rol de Misato continúa en Fukushima