Viendo entradas en la categoría: Encontramos soluciones, no problemas
-
Y es de todo un poco.
Sinceramente, el no saber de un usuario o usuaria, tiene sus motivos. Yo los tengo, pero creo que por estar apuntando una lista y hacer que esto aumente sin escribirlo en mi blog hace que todo esto, sea difícil de aguantar y soportar. Esto ha provocado que no estuviera tanto por aquí... Y ojalá me hubiera estado aquí más tiempo, la verdad.
Durante mucho tiempo, mis padre, mi madre y yo notamos un comportamiento muy extraño con mi tío paterno: hacía cosas sin sentido y notaba que se olvidaba de muchas cosas. Tras muchos meses realmente muy insoportables y imposibles de sostener, diagnostican a mi tío exactamente lo mismo que a mi abuela que en paz descanse: él tiene Alzheimer por lo que, ya hace 8 meses que él ya tiene una plaza fija en la residencia de ancianos para que haga allí su vida rutinaria. Por otra parte, el mes pasado, mi tía paterna resbaló dentro del lavabo y se cayó al suelo. Mi padre se la encontró allí, yo llamé a los servicios de emergencia médicos y la acompañé hasta el hospital de dónde yo vivo para que la examinaran: tenía los huesos de la tibia y peroné rotos y descolocados. Ahora, ya la han operado poniendo varios tornillos dentro de lo que estaba roto y ahora, está en proceso de recuperación, eso sí, va para largo.
De mí, no sé... Me siento ignorada cada vez que chateo con alguien o cuándo hablo con alguien de cara a cara, la conversación suele ser de las típicas: hola, qué tal, que te cuentas... Últimamente, no tengo ganas de nada de ver que mis hermanas mayores tienen sus problemas y yo no puedo hacer nada más que animar las... ¿No? No lo sé, siento que esos ánimos que doy, no hacen su efecto... ¿Algún día lo hará? Quién sabe. Me siento vacía, siento que no soy yo. No necesito ayuda de nadie, para eso ya voy suficiente al psiquiatra y a la psicóloga a que traten de entenderme, o eso creo que hacen.
Lo mejor de todo, es que en el trabajo es todo un éxito, hay mucho por hacer y estoy contenta y realizada.
Y bien, luego de soltar todo esto, sólo me queda tener mucha paciencia y seguir adelante. -
... O eso dicen, ¿no? Pues bien, luego de un largo tiempo sin actualizar entrada de mi blog, hago lavado de cara para seguir adelante, como siempre.
Otro año y nuevo, ¿verdad? Respuesta correcta: SÍ. ¿Otro año con nuevos y siguiendo mis viejos propósitos? Respuestas: SÍ. Y si, debe de ser la respuesta con mayúsculas porqué sí te marcas un propósito, más que un camino, reto, challenge, meta o destino, no parece que sea motivador pero, un propósito para toda la vida, sí lo es.
¿Qué me deparará este nuevo año?
Ésta es la pregunta qué me hago yo misma: no lo sé, sólo quiero que no sea lo mismo que el 2024... Ya que el año pasado ha sido realmente duro y un poco cambiado por el lado familiar: mi tío paterno ya tiene principios de demencia senil, igual que mi abuela paterna, su madre que en paz descanse... Y mi madre también empieza con los mismo síntomas... Bien, todo irá muy bien, después de todo, el año pasado ya tuve mis bajones y lloré todo lo que los demás que me conocen en persona, nunca han visto de mi cuándo yo estoy a solas conmigo. Es lo que hay pero, no todo son penas sin gloria: hace falta entender el por qué de mi tristeza cuándo mi tío paterno y mi madre, ya no estén en este mundo real, es decir el momento en el que llegue. Todo esto será muy duro pero, es necesario que lo sufra y lo supere por mi bien y el de toda mi familia.
Mientras, voy a preparar todo lo que debo hacer este año para seguir adelante, como siempre.
Por cierto, feliz 2025 a quién o quiénes están leyendo mi primera entrada: os amo mucho. <3a Starluz le gusta esto. -
Y así actualizo mi blog para que sepan cómo estoy sobre mí que ya toca, eje. :P ^^
Bien, debo confesar que mi situación actual está yendo muy bien: ahora me centro mucho más en todo lo positivo, ya no presto atención a las situaciones, pensamientos y frases negativas. He llegado a un punto en el que me he hartado de verdad y cansado de ser una mujer con pensamientos negativos, pésimos, nefastos, que me llevaban a la deriva y sin rumbo alguno, de estar siempre sin energía por las mañanas para ir a trabajar e ir con actitud malhumorada e irritable. Ya era hora de encontrar por fin de estabilidad emocional sólida, luego de vivir episodios inestables emocionales y insoportables. Todavía, hay muchas cosas de las que todavía debo mejorar en temas pendientes, pero quiero ir despacio y sin prisa.
A todo esto, ¿Quién me está ayudando tanto? Se trata de mi monitor que es una persona mayor pero maravillosa con muchísima experiencia en el teatro e integrador social. No solo yo y los demás aprendemos mucho de él y hacemos solo teatro inclusivo, si no que gracias a él, trabajamos y gestionamos cada uno, nuestras emociones haciéndonos preguntas, encontrar soluciones para resolver, sentirnos felices de forma íntegra y que nos ayude a mejorar como personas día tras día. Suena un trabajo realmente difícil, pero hay que hacerlo sí o sí, el monitor de teatro tiene esos conocimientos, las herramientas necesarias para hacer que el trabajo sedentario en el taller por las tardes, sea mucho más llevadero, fácil de sobrellevar. Nos pregunta cómo nos sentimos por la mañana, nos hace preguntas sobre cómo podemos solventar todos los problemas que tenemos día a día, nos hace pensar por nosotros mismos, después de todo, él es quién nos hace crecer todos los días como personas adultas, nos enseña a tener educación y a tener respeto hacia las demás personas que nos rodean y ser humildes, nos comenta que nos tenemos que presentar nosotros primero cuándo queramos conocer a una persona que nunca hemos hablado, entre otras cosas. Cabe destacar que hace un trabajo espléndido y maravilloso pues, es el único monitor que no está de acuerdo en lo que los otros monitores de referencia, hacen de lunes a viernes: nos facilitan el trabajo porqué nos dicen lo que tenemos que hacer y tenemos que estar sentados esperando en una silla, a que nos digan lo que tenemos que hacer y nos preparan el material para realizar lo que éstos nos piden.
A mi, hacer teatro inclusivo me ha ayudado mucho. Estoy aprendiendo muchas cosas, lo que más, he aprendido a hablar mucho más despacio sin ir deprisa, a vocalizar y abrir más la boca mientras recito poesía, a frenar a la hora de hablar en voz alta y, retomar y volver a crear historias de las cuáles, contenga sentido, tenga lógica, y nos dé una reflexión de la que me haga de que pensar.
¿Saben? Tengo la esperanza de volver a crear historias. Cuando iba a la escuela, me gustaba crear historias cuándo la profesora de Literatura Castellana y eso, a la profesora le encantaba mucho. Así que, sí en el pasado eso llegó a funcionar, no veo porqué el siguiente paso, sea escribir un libro mío. Ahora mismo, escribir un libro yo sola lo veo muy difícil pero, no imposible. Quién sabe, espero que este propósito, se cumpla algún día, tengo fe en ello. <3a InunoTaisho y Lunático Fantasma les gusta esto.