Long-fic you're just breakin' my heart, 'tis the season, i guess [Gakkou Roleplay | AU | Kohaku x Emily]

Tema en 'Mesa de Fanfics' iniciado por Amane, 31 Enero 2024.

  1.  
    Amane

    Amane Equipo administrativo Comentarista destacado that's that me espresso

    Piscis
    Miembro desde:
    10 Julio 2013
    Mensajes:
    15,940
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Título:
    you're just breakin' my heart, 'tis the season, i guess [Gakkou Roleplay | AU | Kohaku x Emily]
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Romance/Amor
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    3632
    n/a: los dados eligieron la colección, pero realmente mi idea fue para el long-fic desde el principio y lo otro solo se me ocurrió un poco random, so obviamente he decidido hacer lo que realmente había planeado desde un inicio (sorry not sorry dados (?). sooo, esto surge de que sabrina carpenter sacó un ep de navidad y lo escuché, bc she's a queen, y se me ocurrió que se podía hacer una historia chuli siguiendo las canciones, so that i did. me costó mucho definir la pareja en la que quería centrarme, pero al final sentí que ellos eran los que más pegaban con lo que quería escribir, so here we are :D in any case, esto es un AU (un what if...?, i guess) y es probable que haya cosas que no cuadren mucho con las personalidad de los personajes por *brillitos* plot motives *brillitos* so bear with me (?)

    esto se suponía que fuera un fic navideño, pero bueno, cositas pasaron (?) ya me imaginaba que no llegaría a publicarlo por navidades, aunque me hubiera gustado por lo menos haber dejado el primer cap… pero bueno, lo importante es que esto ya está aquí JAJAJA eso sí, prometo acabarlo, pero no prometo ir rápido (?)

    also, Gigi Blanche, heyo, i hope you don't hate me because i know i'm super annoying :D (aunque ya te dije que estaba escribiendo con una pareja nuestra, but still (?)

    pd: para cuando publique esto, ya hasta te dije que era de ellos JAJAJAJ oh god, espero que cuando esto esté en el foro no tenga que añadir otro pd admitiendo que te conté toda la trama (?)

    i. buy me presents



    if you don't wanna
    buy me presents
    drink me like a warm glass of milk

    Mi coche y la carretera no se llevaban bien y eso, francamente, era algo que tenía que empezar a asimilar de una buena vez. Sí, sí, ya sabía que aquello no sonaba nada seguro, y hasta quizás un poco exagerado, ¡pero había estado mucho años intentando convencerme de lo contrario para poder seguir conduciendo!

    —Joder, de verdad que tengo que comprar uno nuevo cuando vuelva a casa… —murmuré, justo después de haber dejado escapar un gruñido de pura frustración al haber tenido que bajar del coche.

    Rebusqué en mi bolso hasta dar con el teléfono móvil, en el que activé la linterna para poder ver algo a mí alrededor, y poco después acabé abrazándome a mí misma en un intento de mantener el calor corporal estable a pesar del jodido frío que hacía ahí fuera. Había pasado por esa carretera las suficientes veces como para saber que, incluso si la llamaba ahora, la grúa no vendría a por mí hasta la mañana siguiente, y mucho menos con un aviso activo por nieve. Mi única opción era esperar a que alguien más decidiera pasar por ahí y quisiera recogerme; las posibilidades de que eso pasara eran tan bajas que casi ni me creí que el coche que paró delante de mí tras unos minutos fuese de verdad.

    —Vaya mala suerte que te hayas quedado aquí…

    La voz de mi salvador me resultó vagamente familiar, pero la oscuridad me complicó la tarea de distinguir su rostro, así que simplemente lo dejé pasar mientras se me escapaba una risilla ligera y asentía con la cabeza.

    —Sí, lo sé. Solo a mí se me podía estropear el coche a diez minutos del pueblo y con tres grados afuera —comenté, con un tono de derrota, aunque intenté quitarle algo de peso al asunto al impostarme cierto nivel de diversión también.

    Mi respuesta me pareció bastante normal, lo suficientemente amable como para indicarle a mi salvador que podía seguir hablándome si así lo deseaba, y una parte de mí espero que lo hiciera, así que me dejó un poco en frío cuando lo único que recibí fue un largo y tendido silencio. Solo entonces se me ocurrió la posibilidad de que aquel tipo perfectamente podía ser un asesino en serie, y aquella mi única noche en vida… pero, honestamente, si tenía que elegir, prefería que me matasen en un coche calentito que morirme congelada ahí fuera.

    —¿Emily?

    No iría a mentirle a nadie diciendo que no me había asustado al oír mi nombre siendo pronunciado por la voz de un asesino en serie, pero por suerte para el muchacho que seguía teniendo delante, mis neuronas lograron hacer sinapsis antes de realmente acabar gritando como loca mientras huía hacia el bosque. Su voz seguía siéndome estúpidamente familiar, posiblemente siendo ese el único motivo por el que no me había tomado tan en serio la amenaza de un posible asesinato, y fue finalmente entonces que caí en apuntarle el rostro con la linterna, permitiéndome así verle la cara y…

    —¡Kohaku!

    No dudé ni un segundo en tirarme a sus brazos, con todas las emociones que había sentido hasta el momento transformándose en la más pura alegría, y ni siquiera lo pensé demasiado cuando acabé hundiendo el rostro en la curvatura de su cuello; estaba muy calentito y seguía oliendo a menta, exactamente igual que cuando éramos pequeños. En otra ocasión, quizás, hubiese tenido más reparo al invadir de aquella manera su espacio personal, pero en ese mismo instante estaba demasiado emocionada como para realmente dedicarle mucho pensamiento a la idea; mucho menos cuando sentí que sus brazos me rodeaban prácticamente con la misma fuerza.

    >>¡No me puedo creer que justamente me hayas encontrado tú! —exclamé, una vez estuve de vuelta en el suelo—. ¿O acaso me has estado siguiendo? —añadí, en voz algo más baja, y aproveché la cercanía para picarle ligeramente el costado.

    Obviamente, estaba bromeando, y el chico fue más que consciente de ese hecho, pues soltó una risilla suave ante mi comentario y pude distinguir el movimiento de sus hombros encogiéndose incluso en la oscuridad. Ambos sabíamos que teníamos mucho de lo que hablar, pero la prioridad era ponerse en marcha y escapar de aquel frío, así que el chico me ayudó a sacar el equipaje del maletero de mi coche para meterlo en el suyo y, no mucho después, me colé en asiento del copiloto. Entre toda la tontería, me había acabado acostumbrado al frío del exterior, pero fue poner un pie dentro del coche, que se había mantenido calentito en todo momento, y darme cuenta de lo absurdamente congelada que realmente había estado hasta ese punto.

    Kohaku arrancó nada más acomodarse y empezó a conducir en silencio, permitiéndome apreciar las vistas (así fuera nocturnas) del camino. Quizás podía parecer absurdo, pero solo aquellos minutos iniciales ya me estaban recordando lo cómoda que me había sentido siempre en presencia del chico, especialmente cuando compartíamos momentos en silencio; nunca eran pesados ni incómodos, lo que me permitía perderme en mis pensamientos con facilidad. Claro que aquella ocasión era un poquito más especial de lo normal, así que era básicamente imposible que mi silencio pudiese durar más de un minuto.

    —¡Ko! —exclamé con emoción, pues, después de un rato, y me giré en el asiento para poder encararlo.

    —¡Emi! —repitió con el mismo entusiasmo que yo, y aunque pude notar que este era impostado, también supe identificar que la sonrisa alegre de sus labios era cien por cien genuina.

    —¡Hace mucho que no nos vemos! ¿No tienes nada que decirme? ¡Porque yo tengo un montón de cosas! Ni siquiera sé por dónde empezar, vaya…

    La risilla que se le escapó a Ko tuvo que ser inevitable, aunque el sonido tampoco me resultó tan extraño como había podido pensar en un principio; quizás había sido tiempo atrás, pero Kohaku y yo nos habíamos reído juntos muchas veces.

    —Así que vienes a pasar las fiestas aquí, ¿cierto? En casa de tus padres, imagino…

    —Mhm —murmuré, volviendo a dirigir la vista hacia la ventanilla—. Mis hermanos también van a venir. Hace mucho que no nos vemos y también hace bastante desde que mis padres… bueno, ya no están. Creo que a todos nos estaba resultado difícil volver a su casa, pero en algún momento teníamos que hacerlo, ¿no?

    —Van a ser unas navidades especiales, entonces.

    —Eso no sé, pero desde luego van a ser interesantes.

    Siempre me había sentido cómoda con Kohaku y, aunque desde fuera podían llegar a verse como superficiales, sus comentarios siempre habían sido oportunos para mí; justo lo que necesitaba escuchar cada vez. Le sonreí con cierta diversión, sin pretender esconder que tomármelo con gracia era la estrategia que había decidido seguir para aquellos días, y pude ver por el rabillo del ojo que él también relajaba su propia expresión.

    Seguimos hablando algo más durante el resto del viaje, aunque más bien de temas bastante triviales, y lo cierto es que lo agradecí, porque la emoción del momento solo me había hecho olvidar el cansancio que sentía por un breve periodo de tiempo. Fue gracias a ello que me di cuenta que, quizás, por eso mismo Ko no me acribilló a preguntar nada más verme; quería decir, creía que incluso para alguien como Kohaku era imposible no tener curiosidad después de haber estado tantos años sin vernos. Sea como fuere, la casa de mis padres (o mi casa, técnicamente) no quedaba tan lejos de la entrada de la ciudad, así que fueron solo unos minutos más hasta que el muchacho aparcó delante de la misma.

    —¿Tienes algo planeado para mañana? —me preguntó él, justo cuando estaba quitándome el cinturón para poder bajar.

    —Uhm… limpiar un poco la casa, supongo. ¿Por qué?

    —Había pensado que quizás te gustaría dar un paseo por el pueblo… Ha cambiado bastante desde la última que estuviste aquí.

    —¡Qué buena idea! —exclamé, dando una repentina palmada por culpa de la emoción—. ¿Quedamos por la tarde? Así puedo aprovechar la mañana para la limpieza.

    —Perfecto. Paso a recogerte sobre las cinco, entonces.

    La sonrisa, que de por sí había tenido en el rostro desde que el chico me había propuesto su idea, se me ensanchó al saber que tendría la oportunidad de volver a verlo al día siguiente. ¡Ya sí que íbamos a poder hablar como Dios mandaba! Kohaku se bajó del coche para ayudarme con el equipaje, claro, y después de eso, me despedí de él sin perder la sonrisa en ningún momento. Entrar en la casa donde me había criado después de tanto tiempo se sintió raro, y también seguía sintiéndome extremadamente cansada después del viaje, pero ni siquiera la fuerza de ambas sensaciones unidas lograron quitarme la alegría que sentí por aquel inesperado reencuentro.

    Tal y como había prometido, dediqué la mañana del día siguiente para limpiar y preparar la casa para esa misma noche, que era cuando Fred y Alice iban a llegar. Desde el primer día nos habíamos encargado de que, cada pocas semanas, alguien se encargase de la limpieza general del lugar —para no ir a encontrarnos una sorpresa demasiado desagradable el día que decidiéramos volver—, pero eso no quitaba que hubiera suficiente trabajo para ocuparme la mañana; para empezar, había que preparar las habitaciones donde dormiríamos aquellos días.

    Kohaku vino a recogerme a las cinco en punto de la tarde, ni un minutos más ni un minuto menos, y no podía negar que tanta puntualidad de su parte me resultó… inesperada. ¡Y también encantadora, claro! Parecía que ambos nos habíamos decidido por conjuntos más bien casuales, aunque eso no logró, en lo absoluto, que él se viera menos atractivo; yo también me sentía bastante linda, así que suponía que era una victoria para todos.

    El chico se tomó lo del paseo de reconocimiento bastante más en serio de lo que había esperado; eso, o le seguía encantando tomarme el pelo cada vez que tenía oportunidad. Me llevó a cada pequeño rincón que hubiese sufrido un cambió en los últimos cinco años, aunque estaba completamente convencida de que más de la mitad se los estaba inventando por el camino. Yo me dejé llevar, porque la realidad era que me estaba divirtiendo un montón simplemente por estar en su compañía y, de todas formas, recorrer de esa manera la ciudad donde habíamos crecido… bueno, me estaba trayendo muy buenos recuerdos. La última parada de todo aquel pseudo tour fue una… bastante inesperada, debía admitir.

    —¿El orfanato? —murmuré, con un claro deje de curiosidad en mi tono de voz, antes de buscar la mirada de Kohaku y seguirle al interior del edificio.

    Alguna vez había hecho de voluntaria en el orfanato, cuando todavía vivía en la ciudad, por lo que la estancia no me resultó del todo extraña; lo habían reformado, aun así, y se veía algo más grande, además de mucho más… cuidado, de alguna manera. No supe definir exactamente por qué lo sentí así, más cálido que antes, pero gran parte de mis dudas se disiparon cuando un par de niñas se acercaron correteando a nosotros y Kohaku se agachó para abrazarlas. La escena fue entrañable a más no poder y me ablandó por completo, haciéndome ceder ante el impulso de imitar a Ko y también abrazar a aquellas niñas, incluso si no las conocía de nada.

    —¿Has traído a una nueva amiga, Ko? —preguntó una de ellas, después de haberme mirado ambas con muchísima curiosidad en los ojitos, y yo no tardé en dirigir mi atención hacia el nombrado, alzando una ceja con aire inquisitivo.

    —Sí, es una nueva amiga que ha venido de visita desde un sitio que está muy lejos —les contestó, haciendo oídos sordos a lo demás como un campeón—. Eh, ¿qué es eso que veo saliendo de tu chaquetón…?

    Mi expresión se suavizó hasta el punto de adoptar una de curiosidad, viendo como Kohaku sacaba un envoltorio colorido que, efectivamente, sobresalía del bolsillo de una de las chicas. La pequeña se veía algo avergonzada, pues llevó los brazos tras la espalda y agachó la cabeza como un cachorrito, y yo de verdad que no supe como Ko tuve el corazón para regañarla; incluso si su regaño fue… bueno, cuestionable.

    >>Ya sabes que no deberías tomar chocolate a estas horas, que luego te cuesta dormir… —le dijo, con un tono de voz realmente suave, y me di cuenta que más que enfadado parecía… preocupado.

    —¡Lo sé, lo sé! ¡Me lo iba a comer mañana! Es que Ali y Joey nos trajeron dulces de su viaje, ¡pero ya sabes que a Sashie no le gusta mucho que nos den tantos! Así que nos han pedido que los mantengamos escondidos. ¡No se lo digas a Sashie, por fi!

    Kohaku cedió a la petición sin mucha pelea, reacción que me pareció bastante apropiada para él, y dejó que las chicas se fueran con los demás niños mientras se incorporaba para finalmente mirarme; lo hice con la cabeza ladeada y una clara expresión de confusión en el rostro.

    —¿Ali, Joey y Sashie? —repetí, sin poder esconder el tono de incredulidad.

    —Por eso quería traerte —fue toda la respuesta que me dio, con una sonrisilla que dejaba ver lo mucho que había esperado que aquella misma fuera mi reacción ante todo el asunto—. Muchos de nuestros compañeros de la secundaria vienen de voluntarios aquí. De hecho… supongo que has notado la reforma que le han hecho al lugar, ¿cierto? —Asentí con la cabeza—. Pues todo fue gracias a Yumemi y Shinomiya.

    —¿Shinomiya? —volví a repetir tras él, alzando la voz un poco más de lo que había esperado inicialmente.

    —Sí, y todos nos sorprendimos igual que tú —me respondió, junto a una risilla claramente divertida—. Riamu llegó un día, dijo que iba a conseguirnos la reforma costase lo que costase, y al día siguiente se plantó aquí junto a Kou y otro montón de hombres que se encargaron… bueno, de la reforma en cuestión.

    —Vaya, veo que a Shinomiya le sigue gustando mucho Ri.

    —Siguen teniendo una relación curiosa, eso desde luego.

    —¿Están aquí hoy? —pregunté, repentinamente entusiasmada por la idea de poder ver tantas caras conocidas.

    —No, ellos no… Supongo que Joey, Alisha y Sasha seguirán por aquí, pero Riamu y Kou se fueron a pasar las navidades fuera. De hecho…

    —¿Qué pasa?

    Mi emoción inicial se desinfló rápidamente ante la primera negativa de Kohaku, aunque no tardé en recuperar parte de la misma cuando confirmó que al menos algunos de nuestros compañeros sí estarían ahí. La cuestión fue que Kohaku quiso decirme algo más, pero pareció cortarse a medio camino, ¡lo que por supuesto hizo que me diera todavía más curiosidad!

    —Es solo que… normalmente es gracias a ellos que podemos celebrar las navidades con los niños, ¿sabes? Riamu siempre trae mucho regalos para ellos, se encarga de las decoraciones y también de la comida. Nos ha enviado dinero este año también, ¿eh? La pobre se sentía super mal de no estar aquí, a pesar de que le dijimos que no era su obligación ni nada. Pasa que al final hizo la transferencia ya fuera y es una cantidad… considerable, así que aún no la hemos recibido.

    Era obvio que a Kohaku aquello genuinamente le afectaba, y no había que ser ningún genio para entender por qué; podía parece que había pocas cosas que le alcanzaban, y quizás eso fuese real en cierta medida, ¿pero no poder hacer felices a estos pobres niños huérfanos el día de Navidad? Sí, claramente eso le iba a doler. Y a mí se me partía el corazón, para ser honesta, porque sabía lo que era querer alegrarles unas fechas especiales a los niños de aquí.

    —¿Y si lo celebramos en mi casa? —propuse, apenas un segundo después de que él terminase de hablar, y ni siquiera necesité ese tiempo para sopesar la idea, porque se me ocurrió de manera instintiva y sabía que era lo correcto.

    —¿En tu casa? ¿En serio?

    —¡Sí! Es bastante grande, así que deberíamos caber todos. Tengo bastante dinero ahorrado, Anna y yo no gastamos casi nada en nuestro piso, así que mañana por la mañana podríamos ir a comprar algo más de comida y regalos. ¡Estoy segura de que a Alice y a Fred les encantará la idea! Iba a ser un poco incómodo pasar las navidades a solas con ellos, honestamente, pero si es una pequeña fiesta con los niños… ¡va a ser más fácil!

    Kohaku se quedó en silencio un buen rato, mirándome con una expresión que no supe definir del todo, y finalmente, cuando pensé que lo mejor sería retirar lo que había dicho porque creía que lo había ofendido de alguna manera, lo sentí rodeándome con sus brazos. Le correspondí al instante, claro, y me hundí en la curvatura de su cuello con una pequeña sonrisa asomándome los labios.

    —Gracias, Em.

    Estuvimos fundidos en ese abrazo un buen rato, quizás bastante más de lo que podía considerarse normal, y solo nos separamos cuando las niñas de antes aparecieron para recriminarnos que estuviéramos tardando tanto. Nos reímos, por mi parte algo avergonzada, y nos dirigimos así a la sala de juegos, que era donde estaba reunidos todos los niños junto a los voluntarios. El reencuentro con todos fue bastante emotivo, especialmente porque no esperaba que ninguno me recordase con tanta facilidad como lo hicieron, y estuvimos un buen rato jugando con los niños, hasta que tuvimos que irnos porque se acercaba la hora de la llegada de mis hermanos.

    Kohaku me acompañó hasta casa, pues ya casi era bien entrada la noche, y le invité a entrar para tomar algo antes de irse, pues así podíamos aprovechar un poco más el tiempo que nos quedaba juntos. Lo vería al día siguiente también, para hacer todas las compra navideñas, pero… bueno, no quería despedirme todavía de él. Nos serví algo de vino y seguimos hablando, pues parecía que todavía teníamos temas de conversación para rato. Pasaron un buen par de horas, de hecho, hasta que Kohaku de repente me paró para levantarse y salir del salón; cuando volvió, lo hizo con una cajita en su mano.

    —Todavía no es Navidad, así que estaba debatiéndome entre si dártelo ya o no, pero… presiento que van a ser unos días movidos, así que prefiero dártelo ahora.

    —¿Me has traído un regalo?

    —Lo tengo comprado desde el año pasado… —admitió, ante la incredulidad de mi mirada—. Lo vi en la tienda y pensé en ti. Ni siquiera sabía si volveríamos a vernos, pero lo compré. Por si acaso, supongo, o con la esperanza de poder dártelo alguna vez.

    —Ko, esto es… no sé… no me lo esperaba para nada…

    No supe en qué momento me había levantado de sofá ni cuando habíamos acabado tan cerca el uno del otro, solo percatándome de la poca distancia que nos separaba cuando levanté la mirada para buscar la suya y, en el proceso, sentí su respiración chocando contra la mía. Habíamos bebido casi dos botellas enteras de vino entre los dos, por eso él me había confesado todo aquello sobre el regalo y yo había acabado rodeando con mis manos las suyas, en lugar de coger la cajita como debía.

    Por eso también estábamos a punto de besarnos.

    —¡Emiliana! ¡Ya hemos llegado!

    La voz de Fred irrumpió por completo en el momento, haciéndome dar un respingo que, además, me impulsó a alejarme de Kohaku. No me atreví a buscar su mirada, de repente me sentí estúpidamente avergonzada por todo el espectáculo, y finalmente acepté la cajita, al mismo tiempo que se me escapaba una leve tos.

    —Debería irme.

    —Sí, sí. ¡Es tarde, además! ¡Muchas gracias por todo, Ko! ¡Mañana nos vemos! Ve con cuidado, ¿sí?

    Lo eché de manera un poco apresurada, buscando levantar el menor número de preguntas por parte de mis hermanos, aunque… bueno, eso iba a ser misión imposible.

    Y ni siquiera yo sabía que podía responderles.
     
    Última edición: 10 Abril 2024
    • Ganador Ganador x 1
  2.  
    Gigi Blanche

    Gigi Blanche Equipo administrativo Game Master

    Piscis
    Miembro desde:
    1 Abril 2019
    Mensajes:
    7,068
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    i. buy me presents

    ALRIGHT HERE I GOOOOOO primero y antes que nada necesito decir que LA ROLITA ES UN TEMÓN??? im reeeally not into christmas music, demasiado :D :D for me, pero Sabrina is a queen indeed and this song slaps???? es super catchy and kinda classy y tiene pasajes qUE ME GUSTAN MUCHO. La verdad es que la staneo un montón desde que se metió a una iglesia a filmar Feather y los religiosos se enojaron Y ELLA LES DIJO JESUS WAS A CARPENTER TOO

    YASSSSS SLAY QUEEEEEN

    bueno, que me voy de tema. Me habías comentado que estabas escribiendo un AU, yes, and later on que era de Ko y Emi, pero igual cuando lo aventaste NO ME LO ESPERABA PARA NADA and i got soooo excited *giggling* La parte emo de mi alma reniega y reniega de cosas tan bonitas y cliché como las fiestas, pero tú sueles escribir fics ambientados así and i cant deny it, its so cozy and heartwarming <3 Recuerdo el drabble de Joey y Ali en Navidad AND NOW ESTA JOYITA

    WELL, SHALL WE???

    its a packed holiday aND I GOT OOOOPTIONS BABEEEEEE

    Ah, el auto se le descompone a nuestra protagonista en medio de una carretera helada DE NOCHE, el clásico comienzo de las 1) comedias románticas y los 2) thriller sobre asesinos seriales. Qué bueno que estamos en la primera categoría, ¿verdad? ¿Verdad? Es una tontería pero el simple hecho de recibir ese escenario ya me arroja directamente a imaginar a una Emi crecidita, así que te felicito por usar bien el recurso Y EMI CRECIDITA OMGGGG I PICTURE HER SO CUTE BUT ALSO KINDA MATURE AND I WANNA EAT HER??? MY BABYGIRL

    also not emi @ hablando de cambiar el coche como si se le hubiese roto un calcetín. De qué trabajas, reina? dinos el secreto

    NO WAIT, QUE HABÍA OLVIDADO LA MENCIÓN DEL SERIAL KILLER JAJAJAJAJA. I mean, es un chiste bastante usado ya, but still acabo de releerlo y me hizo mucha gracia JAJAJA. Yo sabía que ese diálogo misterioso era de Kohaku, YO LO SABÍA, y me voy a seguir repitiendo pero Ko conduciendo aka biggie enough???? ME LOS COMO. Seguirá usando el cabello celeste? Acabo de tener una revelación y creo que... lo llevaría castaño ahora? Dudo que la manía de tintárselo de un color TAN llamativo le durara más allá de la adolescencia, tbh, it would be weird.

    ANYWAY

    Que el coche se le haya quedado a diez minutos parece una mala broma, pero igual yo diría que es un punto positivo JAJAJA. Una vez con mi novio se nos quedó el coche a las cINCO DE LA MAÑANA justo justo juuuusto a mitad de camino entre los dos pueblos y fue: una putada. Pero es esa bronca de decir weeee, no podías aguantar diez minutos más, montón de chatarra??? Also shoutout a Emi prefiriendo ser asesinada dentro de un coche antes de morir congelada fuera JAJAJA I MEAN, si lo pones así tiene sentido, pero mi amor qué son esos pensamientos frente a un POTENCIAL serial killer delante??? y tu sentido de la autopreserv-

    bah deja, deja, siempre supe que no tiene

    Otro shoutout al tiempo que le llevó darse cuenta de iluminarlo con la linterna JAJAJAJAJA girlie ur so dumb and i love you. Mira la cantidad de estupideces que ya dije y ni siquiera releí un quinto de fic, me iré de aquí el año que viene Y ESTAMOS EN FEBRERO, NO IMPORTA, MIRA ESE REENCUENTRO SALIDO DE LA PUTA NADA. Me imagino a Kohaku totalmente a oscuras recalculando tras oír hablar a Emi, sin darle crédito a que sea ella, cuando de repente arriesga y BUM luz en toda la cara JAJAJA "conque así se siente que te pille la policía cuando haces mal los negocios" he thought

    Por favor, los amo JAJAJA. Incluso antes de leer la descripción del diálogo de Ko pude imaginarlo a la perfección, like que lo había dicho así para "burlarse" de Emi, y era también lo que hablábamos hoy temprano respecto a lo que pasó en el invernadero. Ya los conoces un montón a mis personajes y los manejas con un montón de naturalidad y esas cositas me encantan y me ponen muy contenta <3

    El cambio más notorio que vi que hiciste fue haberlos ubicado a todos en un pueblo, y estoy esperando a saber por qué cuz me genera mucha curiosidad (!) Also, ¿te imaginas el ABSOLUTE CHAOS que sería Gakkou en un pueblo? Ya con los personajes activos tendríamos básicamente a la población de la preparatoria, y de por sí todos se conocerían con todos de la vida al haber crecido en un lugar pequeñito. El mejor embodiment de "pueblo chico, infierno grande" JAJAJA

    IF U DONT WANNA BUY ME PRESENTS DRINK ME LIKE A WARM GLASS OF MIIILK

    Ko reencontrándose con Emi después de AÑOS y limitándose a conducir es demasiado accurate JAJAJA. El dude está emocionado, obvio, pero al mismo tiempo es super tarde y seguro ya tenía pensado invitarla a recorrer el pueblo desde el minuto cero EL TRAVIESO, so he said "mejor mañana". ASÍ TAMBIÉN LA ENGANCHA, NO? THATS DIRTY, KO-CHAN

    Ko paseando a Emi por toda la ciudad y hasta inventándose fun facts random me recordó tantísimo a Ian en el fic de tu cumpleaños JAJAJA and i suddenly thought que esos dos probablemente se llevarían bien. La mención de un orfanato tampoco me la esperaba PARA NADA, fue lo que más curiosidad me dio además del pueblo en sí, y el muchachín trabajando de voluntario ahí??? ohmygod thats so cuuuute.

    god forgive me, me iré al infierno pero JAJAJAJAJA esto me sonó demasiado a la típica línea de niña inocente que delata al men, que sieeeempre se lleva a sus ligues al orfanato para conquistarlas??? creo que lo pusiste con esa intención y BUAJAJAJAJAJA ME PARTO EL CULO. Kohaku la puta que te parió, por qué te veo 100% usando a las niñitas PARA LIGAR, TE VAS A IR AL INFIERNO CONMIGO. Joey también lo haría, btw.

    ... hold up a sec, qué pasó con el auto de Emi??? ALGUIEN FUE A BUSCARLO????

    HOLD UP HOLD UP, ESTO ES DEMASIADO PARA UN SOLO DIÁLOGO. Is this another AU donde compensamos los pecados cometidos en la storyline oficial haciendo que el Jolisha y Sasha no sean enemigos jurados a muerte??? i hope it is, cuz i really like those AU. De veras que disfruto un montón todos los lil details, porque incluso en ese diálogo tan simple se notan sus personalidades. Joey y Ali serían los idiotas que aparecen con toneladas de chocolate para los niños, y Sasha la que se estresa administrándolos para que luego a nadie le duela la barriga JAJAJA seguro ya le dijo a los otros dos imbéciles que no lleven TANTOS dulces y ellos "¿hmm? ¿que compremos el doble la próxima vez? gotcha". They still a menace to society, pero al menos hacen felices a un montón de niños (?

    Y QUÉ ME DICES DEL KOURI SIENDO LITERALMENTE LOS SUGAR PARENTS???? HELLO???? EXCUSE ME?????? obviamente fue idea de Ri y obviamente la conversación unfolds like
    +kouchii, me dan mucha pena esos niños... *pouts*
    -los organismos públicos suelen ser así de ineficientes *cambiando la página de su libro*
    +*c le acerca* quiero hacer algo por ellos :(
    -*stares*
    +*le hace ojitos*
    -*staaaaaares*
    +*más ojitos*
    -*sigh*

    mirá ese fic de wattpad TAN ACCURATE. Además me los imaginé apareciendo en el orfanato con los cascos de construcción y todo JAJAJA y Ri contenta como un niño en Navidad *ba dum tss*

    SUGAR MOMMY I SAY, also not ri @ transfiriendo casualmente miles de dólares desde las Bahamas, i just know it JAJAJA pinches niños ricos. La vi 100% en el deck de un yate, tomando sol con un sombrero, un mojito y unas gafas de sol enormes, clickeando en el botón de "Tranferir" en su móvil. What a queen.

    AAAAAAAA MIS NOVIAS VIVEN JUNTAS??? Y ME LO DICES ASÍ????? SHUT UP THATS SO BEAUTIFUL POR FAVOOOOOR

    7u7u7u7

    Algo de vino dice, y luego...

    SÍ CLARO, PILLINES

    Lo del regalito me pareció extremadamente cute AND estoy loca o también me dio flashbacks del fic de tu cumple? Ko no había hecho algo similar ahí??? Lo escribí yo y ya ni lo recuerdo BUTTT sigue siendo super cute. Ko es desapegado y vive en su propio delululand y parece que todo le da igual, pero al mismo tiempo lo creo totalmente capaz de pasar por una tienda un día random, ver algo, pensar en Emi y comprarlo, sin importarle lo extraño que sea o si se lo podrá dar algún día. Vive la vida con esa calma and for that i envy him, pero yo sé que pensó enseguida que podría darle el regalito tras reencontrarse con ella y que eso lo puso super contento <3 I mean, de otra forma no lo habría comprado, sabes

    ME DI CUENTA QUE NO QUOTEÉ NADA DEL ABRAZO EN EL ORFANATO but that one was super cute too ;;

    COMO YA TE DIJE, FREDDIE Y LA PUTA QUE TE PARIÓ. No tenías que cumplir TAN bien tu papel de big bro, eh

    Y A TODO ESTO, QUÉ ERA EL REGALO?? NO ME DEJES CON LA DUDA U BITCH

    Y ALGUIEN PENSÓ EN EL COCHE DE EMI???

    Aaaaa tenía muchas ganitas de comentártelo, qué ilu <3 Muchas gracias por escribirlo, preciosa, fue todo super cute and wholesome. Aquí me quedaré esperando a la segunda parte uwu7

     
    • Ganador Ganador x 1
Cargando...

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso