Long-fic de Inuyasha - Yo comence La Broma [Inu&Kago]

Hola chicas aqui les dejo el siguiente capitulo y espero sea de su agrado.

Capitulo.-93 Vacaciones en Inglaterra.​

–Sí, eso ya lo sé madre, pero solo iremos una semana para que el este aquí el día de su boda.
–Izayo no te preocupes además para toda habrá tiempo mientras él está de vacaciones nosotros arreglaremos todo solo que él se encargue del anillo de compromiso.

Acá por otro lado Sakura e Inuyasha estaban en el parque estaban sentados en una banca en silencio miraban aquel cielo oscuro y estrellado que se veía aquella noche.

Ella tomo de la mano a Inuyasha y en eso el rompe aquel silencio–Sakura tengo algo muy importante que decirte.

–Pues también yo a ti.
–En serio ¿Qué es?
–Que te parece si nos vamos juntos de vacaciones a Inglaterra.
Inuyasha solo la miro y ella sonrió con él. –Está bien pasaremos las vacaciones juntos–acoto aquel chico de ojos ambarinos.
–Ahora si Inuyasha que era es tan importante que me ibas a decir–pregunto ella.
–No, no es nada olvidado después te lo diré.
–Anda dímelo ahora sí.
–No, después te lo digo no seas insistente Sakura.
–Está bien–ella mira su reloj ya debo irme ya es tarde.
–Vamos te llevo.

Inuyasha llevo a Sakura a su casa y de regreso a la de él, se repetía el mismo porque no le había dicho a lo que tenía decidido a decirle.

Ya no quería seguir con ella y decirle que todo terminaba entre ellos, pero prefirió callar, ahora debería buscar la manera de decírselo, y lo más pronto posible ya que dentro de dos semanas se casaba con ella.
Así que pasaron los días Inuyasha, Miroku, Sesshomaru, Sango y Sakura estaban preparados para irse a Inglaterra.

En la mansión Hisakawa se estaban arreglando Inuyasha y Sesshomaru para irse cuando Shippo llega a la habitación de Inuyasha.

–Ya nos vamos.
–Y tu a dónde vas chaparro.
–pues con ustedes tarado.
– ¿Qué dijiste enano?
– Así como lo oyes voy a ir con ustedes aunque no lo quieras, mi tío me compro el boleto. –dijo sonriendo Shippo.
– ¡Mamá! ¡Mamá!
– ¿Qué pasa hijo?
–Yo no me hare cargo de este enano–acoto Inuyasha molesto.
–Ah era eso no te preocupes Sesshomaru se hará cargo de él.

En eso Sesshomaru les dijo ambos si ya estaban listos para irse ya que su vuelo iba a salir a las once de la noche y tenían que estar a tiempo.

–Si vamos-acoto Inuyasha medio molesto por que Shippo iba ir con ellos.

Los tres se van rumbo al aeropuerto haya los estaban esperando Miroku, Sango, y Sakura.
En ese momento llegaron Kikio, Yukari y las demás chicas ya que todos habían quedado en ir juntos a ese viaje.

– ¿Pero que hace aquí Sakura? –Se sorprendió Kikio al verla ahí junto con Miroku y Sango.
–Pues que crees Kikio, ella no iba dejar venir solo a Inuyasha.
–Vaya que esa chica no se despegara de él.

En eso llego Inuyasha, Sesshomaru y Shippo, Sakura al verlo se acerco a él y lo abrazo, Sango se molesto tanto que Miroku la vio y la dijo que se tranquilizará.

– ¡Miroku! Pues la verdad no me agrada que ella venga con nosotros no puede irse por su lado.
–Guarda silencio que él te escuchara.
–No, me importa.

En eso se acerco Shippo con ellos y los saludo, – ¡Shippo! Me agrada que vengas con nosotros–expreso Sango.

– ¡En serio Sango!
–Opino al igual que Sango–acoto Miroku.
–Gracias chicos–dijo con una sonrisa Shippo.

En ese momento anuncian el vuelo con destino a Inglaterra y les dice que pasen por la puerta numero tres.

Todos los chicos se dirigen al avión y se sientan como esta enumerado su boleto, Sakura estaba deseosa de que le tocara junto con Inuyasha.
Pero para su sorpresa tanto para ella y el, ha Inuyasha le toco sentarse junto con Kikio y Shippo.

–No, No puede ser porque me toco contigo enano, no que Sesshomaru se iba hacer cargo de ti.
–Sí, pero me sentare contigo hasta llegar a Inglaterra torpe–le contesto aquel niño de ojos verdes y sacándole la lengua – ¡tonto! Así que déjame pasar si, me toco del lado de la ventana.
–Enano engreído–dijo Inuyasha molesto, le iba a dar un coscorrón pero alguien le detuvo la mano.
El miro y sorprendido al ver quien fue quien le tomo la mano. – ¿Kikio?
– ¿Ya basta déjalo?

Sakura al ver que Kikio se iba a sentar con su prometido se molesto tanto y a demás que iba hacer durante todo el viaje, con quien iba a platicar se aburriría le toco sentarse con Yukari, y solo tuvo que resignarse– ¡uff que remedio!

–Sakura a mí tampoco me gusta tu compañía así que no molestes.
– ¡Que dijiste Yukari!

Acá seguían discutiendo Kikio e Inuyasha, pero él se tranquilizo un poco y pensó bien las cosas viendo por otro lado sintió un alivio que no le tocara con Sakura todo el viaje.

Se sentaron ambos sin decir nada más– ¿Qué pasa? ¿Por qué no nos vamos de una vez?

Kikio pregunto a una de las azafatas que estaba pasando–señorita en un momento despegamos lo que pasa es que nos falta un pasajero ya viene en camino.

–Hm pues déjenlo ¿Por qué no llega antes de salir? –acoto molesto Inuyasha.

En eso una de las azafatas ya llego pase joven.

– ¡Disculpen mi retraso! –expreso aquel chico de cabello negro largo y ojos color celeste , algo apenado.
–Pase joven Minamino su asiento es este! –dijo azafata amablemente y apuntando al lugar donde estaba Sakura y Yukari.
Inuyasha al ver quien era–No puede ser tenias que ser tu lobo rabioso.
– ¿Tu aquí? Yo pensé no ver tu rostro en estas vacaciones bestia pero ni modo tendré que aguantarme.
– ¿Qué dijiste?
–Por favor, jóvenes guarden silencio ya vamos a despegar.
–Ya guarda silencio torpe, me da vergüenza que sea mi primo, toda la gente te está mirando –musito Shippo molesto y cruzándose de brazos.
–Ahora si no te me escapas enano.
– ¡Basta! Inuyasha.
–Está bien no le hare nada a este enano, Kikio–el miro a Shippo y le dijo en voz baja–esta vez te escapaste otra vez pero ya verás cuando llegamos haya.

En eso el sintió un golpe muy fuerte en la cabeza. –Ya compórtate Inuyasha parces un niño, creo que en vez de batallar con Shippo tu eres el que me vas a dar lata y dolores de cabeza.

– ¡Sesshomaru!

La azafate al ver aquella pelean entre aquellos chicos–Jóvenes les pido de la manera más atenta que se comporten sí, ya vamos retrasados de tiempo.

Sesshomaru que iba sentado en los asientos de atrás, se disculpo con la azafata, ella al ver aquel joven de ojos dorados y cabellera alvina se sonrojo–Esta bien no se preocupe.

Después de unos segundos el avión partió rumbo a Inglaterra, Sesshomaru le había tocado sentarse con Sango y Miroku.

En el transcurso del viaja Miroku se quedo dormido, Sango que iba pensando en ese momento como evitar que Inuyasha se encontrara con Aome.

Ella miro a Sesshomaru y le hablo un poco bajo para que Miroku no la escuchara y mucho menos Inuyasha.

– ¡Sesshomaru! ¡Sesshomaru! –ella le hablo tímidamente ya que con el no ha tenido una conversación con él.
–Sí, que sucede Sango. –contesto él.
–Disculpa que te moleste pero, qué vamos hacer cuando lleguemos a Inglaterra no podemos permitir que Aome e Inuyasha se encuentren. Si ella lo ve, ella se pondrá triste y más si lo ve a lado de Sakura.
–No, te preocupes Sango, ayer hable con Karen de esto y me dijo que no le iba a comentar que Inuyasha iba ir con nosotros a Inglaterra. Procuraremos que no se encuentren, además ese torpe va estar ocupado con su novia así no hay de preocuparse, nada mas hay que evitar comentar que ella está ahí.
–Sí, tienes razón.

Mientras Inuyasha y Kikio estaban en silencio, y ella es la que rompe aquel silencio.

– ¿Por qué Inuyasha?
Inuyasha se sorprendió cuando Kikio le dijo esas palabras– ¿Qué pasa Kikio?
–En verdad no te entiendo, podemos hablar.
–Creo que no tengo nada de qué hablar contigo, desde el momento en que tú y yo terminamos.
–Por favor Inuyasha por esta vez escúchame, y deja tu orgullo a un lado –contesto molesta Kikio con él. –Alzando la vos muy fuerte que hasta Sakura escucho.
– De que estarán platicando. –pensó para sí misma ella.
–Está bien habla–contesto el fríamente con ella.
–Espero que no te arrepientas de lo que vas hacer, tú aun amas a Aome verdad.
–Es cosa que no te interesa Kikio.
–Mira te voy aclarar una cosa aunque no me creas Inuyasha yo he cambiado ya no soy la misma de antes, sabes cuánto me arrepentí de lastimar Aome, así que búscala y aclara las cosas con ella.
– ¡Kikio! –exclamo Inuyasha, no podía creer que ella le digiera lo mismo que otras personas le habían dicho.
–Así, que esa será tu decisión. –exclamo aquella chica de ojos negros.

Inuyasha la miro y vio algo diferente en ella ya que su semblante y su mirada habían cambiado por completo, aquellos ojos negros estaban más brillantes que nunca reflejaba alegría y el no se quedo con la duda y ¿Por qué estaba feliz?

–Kikio, puedo preguntarte algo.
–Sí, dime Inuyasha. –Contesto algo intrigada.
–El hecho de que tú y yo rompimos nuestro compromiso aun me preocupas, aunque no lo creas, como va tu relación con Bankotsu, te trata bien.
– ¡Inuyasha! –expreso aquella chica de ojos negros y sonrojándose por la pregunta hecha por aquel chico de ojos color ámbar.
–Además tú fuiste la primera chica a la que ame con todas mis fuerza, aunque lo nuestro no funcionara, creo no es el momento adecuado para hablar de esto aquí, pero ahora que se presento la oportunidad te pregunto.
–Pues me trata muy bien, no me puedo quejar, lo amo demasiado sabes mis padre ya saben la relación que llevo con Bankotsu.
–A caso ellos aceptaron tu relación con él.
–Sí.
–Me alegro por ti, ahora comprendo todo tu mirada lo dice todo y sinceramente te deseo lo mejor Kikio.
– ¡Inu…ya…sha…!–musito Kikio sonrojándose a un mas.
–Y te agradezco que tú me aconsejes que busque a la mujer que amo, lo hare Kikio, no importa que busque en todas partes hasta dar con ella y pedirle perdón.
–Así, que Inuyasha si necesitas que te ayude en algo solo házmelo saber. –respondió ella el ver con aquel entusiasmo a Inuyasha. –sonrió con carisma Kikio hacia él.
–Está bien Kikio lo tomare en cuenta. –sonrió también.

Al parecer aquellos dos chicos que alguna vez tuvieron algo que ver en el pasado habían limado asperezas y hablaron como si fueran unos grandes amigos Sakura al ver desde su asiento que ellos dos estaban platicando y sonreían , estaba se celosa.

Después de una larga charla entre ellos dos Inuyasha se quedo dormido el viaje fue largo llegaron a Inglaterra a las siete de la mañana, todos bajaron del avión y se dispusieron a ir al hotel donde se iban a hospedar.

– ¿Qué bonito lugar es aquí? –exclamo Shippo.
–Pues te sorprenderás mas Shippo cuando conozcas muchos lugares de aquí–dijo Sango con una sonrisa.
–Así que vamos, quiero llegar a descansar otro rato –musito Inuyasha.
–Yo también no descansé muy bien en el asiento del avión. –respondió Kouga.
–Y tú que, lobo rabioso ya te puedes ir.
–Pues para tu información voy ir al mismo hotel que ustedes bestia.
– ¡Eh! Vaya al parecer de ti no descansare ni en la vacaciones.

Así que todos se dirigieron al hotel que habían reservado, llegaron y fueron atendidos amablemente.
Sango estaba en una habitación sola, Miroku e Inuyasha estaban juntos al igual que Shippo y Sesshomaru. En otro Kikio y Yukari al igual Kouga se quedo solo en una habitación contigua a la de Sango eran vecino, ese día descansaron porque el viaje fue muy pesado.

Sesshomaru estaba acomodando sus cosas cuando sonó su móvil.

–Hola, Karen acabamos de llegar.
–Que bien amor, tengo ganas de verte, pero será mañana tienes que descansar.
–Por mí no hay problema ahora mismo voy a buscarte al colegio.
–No, no descansa mañana nos vemos.
–Pues tengo ganas de verte así que voy para allá mismo.
– ¿Está bien te espero? –respondió aquella chica con vos tímida y se sonrojo al saber que él iba ir a buscarla.

Karen al colgar el su móvil se quedo pasmada sin habla y aun estaba sonrojada, tanto como Jenny, Aome y Cindy se sorprenden al verla así, su comportamiento era muy raro.

– ¿Qué te sucede Karen? –pregunto Jenny.
– ¡Chicas! El viene a verme.
– ¿Di nos quien? –acoto Aome.
–Pues quien va hacer Sesshomaru.
Cindy y Jenny al mismo tiempo– Tu novio.
– ¡Sesshomaru! –Expreso Aome–No puede ser si él está aquí, eso quiere decir que Inuyasha también. –Esto lo dijo en voz alta que las chicas se sorprendidas al igual Karen ya se le había olvidado decirle que él no vendría solo era para calmarla, ya que el también había llegado y tenía que evitar a toda costa que su amiga se encontrara con él, ya que el no venia solo si no con Sakura.

–No te preocupes amiga, Sesshomaru me dijo que Inuyasha no vendría, así que tranquilízate. Perdona por no decirte antes se me olvido.
–Está bien que no haya venido, además no quiero verlo nunca más, apenas me estoy acostumbrando a olvidarlo poco a poco, no sé porque Sango no me aviso que llegaría hora, quedo en avisarme–Se quedo pensando en ese momento.

Mientras en el hotel, Sesshomaru le dice a Shippo que si quiere ir a ver a Aome, lo cual aquel chico se pone feliz y le dice que sí.

–Tengo muchas ganas de ver a mi amiga.
–Entonces vámonos no hagas ruido.
–Sí, vamos.

Pero antes de salir Sesshomaru le habla a Sango diciéndole que iban ir a ver a Karen y Aome y que si quería ir con ellos.
Sango acepto ya que también quería ver a su amiga, así que los tres se fueron juntos sin preocupación ya que Miroku al igual que Inuyasha estaban dormidos.

Pero Sakura los vio salir del Hotel–A donde irán–pensó para sí misma.

Los chicos tomaron taxi un rumbo al colegio Chastwood, durante el camino Shippo miraban aquellos lugares por donde pasaban.

–Sí que este lugar es fascinante –dijo Shippo sorprendiéndose a cada momento.
–Sí, pequeño Shippo, después visitaremos los museos que te parece. –acoto Sango con una sonrisa.
–En serio Sango.

Pero ni Sango, Shippo y Sesshomaru no se dieron cuenta que alguien los seguían de cercas desde que salieron del hotel.
El camino fue un poco largo ya que el colegio estaba un poco lejos de la ciudad a los alrededores de aquel lugar estaban cubiertos de áreas verdes grandes árboles y flores.

En eso interrumpió el taxista –Si hubieran venido antes esto lugar se ve muy hermoso cuando cae nieve, hace un mes que cayó una fuerte nevada.
–Vaya de lo que nos perdimos, verdad Shippo, pero Aome llego en ese tiempo aquí. –musito Sango en tono triste.
– ¡Sango! No estés triste además venimos a ver a Aome.
–Tienes razón, Sesshomaru a todo esto nos dejaran entrar a visitar a Karen y Aome ya ves que a estas horas están en clases.
–No te preocupes déjame a mí esto.
–Sí.

Ya casi iban llegando aquel lugar tomaron un sendero que los dirigía al colegio, llegan a su destino, a la entrada del colegio estaba el portero quien al verlos llegar pregunto que se les ofrecía.

– ¡Disculpe! señor podemos ver a la encargada del colegio.
–Pues la directora no se encuentra en ese momento pero esta la señorita Cromwell, pero deje le aviso si los puede atender ¿Cuál es su nombre joven?
–Sesshomaru Hisakawa.

Aquel señor desde su lugar donde estaba marco de su teléfono, mientras es atendido el teléfono por la profesora Alison.

–Sí, diga.
–Srta. Cromwell la busca un joven llamado Sesshomaru Hisakawa.
–Hágalo pasar por favor.
–Si está bien.
Ella quedo algo extrañada– ¿Acaso será un nuevo estudiante? Pero la directora Henstrigdes no me dijo nada.

Pasaron los chicos hasta adentro y el taxista se retiro de ahí, ellos se acercaron a la entrada del colegio entraron Sango, Shippo se sorprendieron al ver aquel lugar era bastante grande.

Mientras afuera del colegio aquella persona miro que los chicos habían entrado a ese lugar– ¡Pero qué harán aquí, ellos!

En el centro de aquel lugar había un ventanal l muy grande ahí había unos trofeos y fotografías de alumnos destacados del Colegio Chastwood. Shippo le llamo tanto la curiosidad que se acerco y se sorprendió al ver ahí a su amiga.

–Sango, Sesshomaru miren ahí esta nuestra amiga.
–Vaya si que Aome es una prodigio estar en el cuadro de honor, ahora a quien le preguntaremos donde queda la dirección no se ve nadie por aquí han de estar en clases.

En eso venia bajando los escalones un chico con una caja, y se callaron unos libros de este mismo.

– ¡Rayos! ¿Qué torpe soy?

Sango y Shippo fueron ayudarle a recoger los libros.

–Estas bien amigo. –pregunto Shippo.

Aquel chico se sorprendió al verlos –Si estoy bien solo se me cayeron los libros. –Contesto con una sonrisa–y miro aquella chica de cabello negro y se sonrojo.

Sango al verlo también se sonrojo ya que era muy guapo era de cabello castaño y ojos color miel. – ¡Seguro que estas bien!
–Si no te preocupes.

Después de acabar de recoger los libros, ella le pregunto a él donde quedaba la dirección.

–Mire váyanse todo este pasillo hasta el fondo y enfrente ahí está,
–Gracias por tu ayuda.
–De nada–acoto con una sonrisa.

En eso otro chico bajo corriendo los escalones.-Anda Jason te estamos esperando.

-Voy.- Nos vemos señorita-él se retiro de ahí junto con el otro chico.

Shippo, Sesshomaru y Sango se dirigen a la dirección y tocan la puerta de aquel lugar, desde adentro se escucho una vos que le dio el pase.

Los tres pasaron y fueron atendidos por la Srta. Cromwell–Buen día pasen por favor y tomen asiento. –Ella miro a los tres –Así que usted es el joven Hisakawa. –Se refirió a Sesshomaru.

–Sí, profesora.
–Su visita es para poder estar a este colegio verdad.
–No precisamente profesora Cromwell.
– ¿Cómo? –expreso ella.
–Pues el motivo de nuestra visita aquí es que venimos a ver a la Srta. Harrison y Higurashi.

continuara....;)

 

Hola chicas pues aqui actulizando mi ff, bueno tarde pero seguro.
pues les agradezco que sigan mi historia Rosalinda, KagomeG, Diana y bienvenidas Kennikag, IhoxFriends y Mitsuki Uchiha.
les dejare dos capitulos por la tardanza y espero sea de su agrado.

Capitulo 94.-Una visita Inesperada.​

– ¡Ah! Ya entiendo son amigos de ellas verdad–respondió con una sonrisa.
–Sí, señorita Cromwell queremos ver a nuestras amigas bueno si se puede. – acoto Sesshomaru.
– Por favor señorita Cromwell ya que venimos desde Japón para verlas. –dijo con entusiasmo Shippo.

La Srta. Alison lo miro y le respondió. –Con gusto dejare que vean a las chicas ya que por políticas del colegio solo se visita a las alumnas los fines de semana siempre y cuando se les da permiso a sus familiares que las visiten, ya que aquí cada mes salen a visitar a sus familias. –Así que no se preocupen ahora mismo mandare por ellas.
Los chicos se miran uno al otro ya que se les había concedido ver a las chicas, la profesora mando llamarlas.
Mientras las chicas estaban en sus clases ya que apenas eran las diez de la mañana.
Cuando en ese momento les hablan a ellas que pasaran urgentemente a la dirección. Tanto como Aome como Karen se miran ya que no sabía que estaba pasando.

– ¿Qué hicieron chicas? –exclamo Jenny.
–Nosotros nada amiga –contesto Karen algo confundida.
Así que las dos salen de su salón y cuando van por el pasillo. – ¿Karen crees que la Señorita Baker no haya reportado?
–No, se Aome pero si dimos la clase.

Las dos iban nerviosas llegaron a la oficina de la directora y tocaron la puerta. La profesora desde adentro les dio el pase, Aome y Karen se sorprenden al ver ahí a los chicos.

Shippo corre y abrazo Aome, ella le correspondió–Amiga tenía tantas ganas de verte.
–Shippo, yo también. –contesto Aome con una sonrisa y miro a su gran amiga Sango.
– ¡Sango!

Sango se acerco a ella y le dio un abrazo, Karen y Sesshomaru también se abrazan.
Después el saludo Aome y le pregunta cómo ha estado, ella dice que bien que ha salido adelante poco a poco.

–Me alegra que hables así amiga, aunque todavía va hacer difícil superarlo tan pronto pero debes seguir adelante tu eres una chica muy fuerte. –dijo Sesshomaru.
–Si, Sesshomaru aunque te confieso que no del todo soy tan fuerte, pero creo que lo superare. –respondió con una sonrisa Aome.

En eso la profesora les dice a Aome y Karen que tienen permiso de salir a platicar con sus amigos y que pueden ir al patio.
Karen y Aome le agradecen a la profesora Alison ya que ella siempre ha sido muy buena gente con ellas.
Los cinco salen de aquel lugar dirigiéndose hacia el patio del colegio, tanto como Shippo y Sango se impresionaron por ese lugar ya que era muy grande, los pasillos eran extremadamente largos, los ventanas eran también muy grandes desde ahí se podía apreciar el jardín del lugar.

Sesshomaru y Karen iban platicando mientras que atrás de ellos venia Sango, Shippo y Aome.

– ¡Sesshomaru! Si que eres un chico muy atrevido. –dijo Karen sonrojándose.
– ¿Por qué lo dices preciosa?
–Pues haber venido a buscarme y eso que hoy no es día de visita, pero la profesora Alison siempre se ha portado bien con nosotros, y me alegra que estés aquí conmigo tenía tantas ganas de verte.
–Yo también.

Ella miro aquellos ojos color dorado que la cautivaban cada vez que los miraba ya que a veces el siempre refleja esa mirada fría, pero con ella era diferente siempre cambia su semblante.
Llegan al patio del colegio este tenía grandes árboles muy frondosos, ahí había lugares pare descansar, en medio de este tenía un Kiosco.
Aome les dice a Sango y a Shippo que si van al kiosco para dejar solos a Karen y Sesshomaru.
Los tres se dirigen ahora allá, dejando solos a sus amigos y platicaran a gusto sin ninguna interrupción.

–Sesshomaru mis padres quieren conocerte les platique de ti, y les dijo que ibas a venir a Inglaterra de vacaciones, y me gustaría saber si tu…–quedo un momento en silencio.
–Claro Karen que me gustaría conocer a tus padres.
–En serio Sesshomaru.
–Sí, tú nada mas dime cuando.

Karen se puso feliz y lo abrazo y lo beso sin pensarlos dos veces, ese beso fue correspondido por aquel chico de cabello color alvino.

Acá estaban platicando Sango y Aome.

–Sango, quiero pedirte una disculpa por no haberte avisado de mi partida. –acoto Aome con cierta melancolía.
–No, te preocupes amiga aunque al principio si me moleste porque no me avisaste y te fuiste a si nada más, pero entiendo que lo hiciste, para ti iba ser difícil despedirte de Miroku y de mí.
– ¡Sango! Tú siempre tan buena conmigo, siendo mi paño de lágrimas tú sabes todo de mí, sin embargo siempre te arrastro a mis problemas y sufres junto conmigo, por eso amiga te considero como una hermana para mí, eres una persona en quien confiar plenamente.

Sango al escuchar a su amiga la abraza–Aome yo también te considero mi hermana.
Las dos sonríen, y Shippo quien estaba jugando las mira–Aome me gusta más cuando esta alegre, pero espero que no sepa el tarado de Inuyasha que tu estas aquí desde hace un tiempo, no me gustaría verte sufrir por él. –pensó para sí mismo el pequeño Shippo.

–Dime Sango que tal les ha ido a ti y Miroku.
–Pues como siempre igual, cada vez que ve una chica le propone tener hijos y lo regaño, pero me dice que soy la única.
–El te ama mucho amiga–contesto Aome sonriendo.
–Sí, tienes razón, aunque sé que es así, el me ama como lo amo yo.
–Que envidia me dan tu y Miroku.
– ¡Aome! –Se sonrojo Sango.
–Sango, te voy a decir una cosa que me está atormentando, no sé cómo decirte pero la pregunta que me hizo Sesshomaru le mentí. –ella empuño sus manos.
–Amiga. –sango la miro y sintió una gran angustia por su amiga al verla así.
–Todo este tiempo no he podido olvidar a Inuyasha para ser sincera, con esta separación de los dos y lo lejos que estoy de él mi amor por él es más fuerte lo amo, lo amo quisiera verlo una vez más.
Sango se acerco a ella y la tomo del hombro. –Aome, solo debes ser fuerte tratar de olvidarlo ya que él se casara dentro de dos semanas.
–Lo, se Sango, pero… quedo en silencio y de repente de la nada salen lagrimas que no pudo contener.

Shippo al verla así se acerco a ella– ¿Qué te pasa Aome?

Aome se, seco sus lagrimas y sonrió–No es nada Shippo estoy bien no te preocupes.
Sango y Shippo se miran ya que se dieron cuenta que ella aun amaba a Inuyasha, ahora más que nada debían evitar que se encontraran los dos.

Sesshomaru y Karen se acercan a ellos en esos momentos. – ¡Aome!
– ¡Sesshomaru!
–Te encuentras bien.
–Si, no te preocupes. –contesto con una sonrisa.
–Aome el viernes a medio día iremos a visitar los lugares de aquí, le prometí a Shippo llevarlo conocer los museos, queremos que tu vayas con nosotros y por la noche iremos a cenar.
–Claro con gusto iré, además este fin de semana lo tenemos libre verdad Karen.
–Si, y entramos hasta el lunes por la mañana, así que Sesshomaru estos tres días estaremos juntos.
–Pues me parece perfecto, que les parece si vengo por ustedes al viernes en la mañana.
–Si, Sesshomaru pero también podemos invitar a mis amigos que vengan con nosotros.
–Claro Aome.
– Bien entonces le avisare a Cindy, Jenny y Jason. –dijo con alegría Aome.

Mientras afuera del colegio al ver que no salían los chicos aquella persona le dijo al del taxi que la llevara al hotel.
Aquella chica iba sumergida en sus pensamientos. –A que vendrían ellos aquí. –se preguntaba Sakura.
Después de unas horas llego al hotel y se encuentra en la recepción a Kouga quien al verla le pregunta que si salió a pasear sin su novio.

–Pues salí a comprar unas cosa, así que luego nos vemos Kouga. –ella se va sin decir nada más.

Pero a Kouga se le hizo raro que no trae nada en las manos de que compro algo, en ese momento Sakura se detuvo unos pasos más adelante y le hablo a Kouga.

– Si, ¿Qué pasa?
–Te puedo hacer una pregunta.
–Dime.
–Sesshomaru conoce a alguien de por aquí, una amiga o algo así por el estilo.
–Pues déjame ver. –El se quedo por un momento pensando. –Ahora que recuerdo Sesshomaru tiene aquí a su novia que vive aquí y ella está en el colegio Chastwood.
–Ah hora comprendo. –espeto Sakura sacándola de la duda,
– ¿Por qué la pregunta?
–Bueno no se lo digas a nadie Kouga pero, seguí a Sesshomaru, Shippo y Sango hasta el colegio Chastwood, entonces fue a ver a su novia.
– ¿Qué hiciste?
–Solo que tenía una duda.
–Una duda.-expreso Kouga.
–Hm olvídalo Kouga, nos vemos.

Ella se retiro dejando aquel chico de ojos color celeste con una duda sobre la visita de ellos al colegio Chastwood.

Estaba tan sumergido en sus pensamientos cuando es sacado repentinamente de ellos. – ¡Hola Kouga!
– ¡Sango!
–Vaya Kouga te asuste, en que estabas pensando.
–No, en nada Sango a donde fueron.
–Pues fuimos a ver a Karen la novio de Sesshomaru, me invito el ir a visitarla.
–Entonces vienen de allá.
–Sí.
En eso interrumpe Shippo la plática de ellos dos. –Sango podemos ir a comer algo tengo mucha hambre.
–Claro vamos. –respondió con una sonrisa. –Gustar ir con nosotros Kouga.
–Vamos.
Los cuatro se dirigieron al restaurante del mismo hotel, ahí ya estaban Sakura, Inuyasha y Miroku.
– ¡Sango aquí estamos! –le hablo Miroku.

Se dirigieron a donde estaban ellos y se sientan en el mismo lugar, Sakura le dice a Sango que donde andaban.
Ella se sorprendió a la pregunta de Sakura no sabía que decir en ese momento ya que no quería decirle a su novio que habían ido a ver Karen y Aome, si decía eso Inuyasha podría sospechar que Aome se encontraba ahí.

Sesshomaru es quien responde la pregunta de Sakura. –Pues Shippo, Sango y yo fuimos a investigar que museos visitar aquí, ya que le prometí a Shippo que lo llevaría a conocer algunos.
Tanto como Sakura y Kouga se sorprenden que les hayan ocultado a sus amigos que fueron a ver a Karen. Para Sakura se le hizo sospechoso todo eso, ahora mas estaba con la duda y tenía que investigar que ocultaban.

–Sí, fuimos a investigar eso, por eso Miroku no te avise que saldría con ellos ya que todo fue tan repentino.
–Así, que Inuyasha, Sakura y Kouga si gustan ir con nosotros el viernes a medio día.

Sango y Shippo no podían creer lo que estaba diciendo Sesshomaru ya que el acuerdo era que nunca se llegaran a ver Inuyasha y Aome.

–No, gracias Sesshomaru pero Inuyasha y yo ya tenemos nuestro itinerario de lo que vamos hacer estas dos semanas juntos verdad que si amor.
–Sí, así es. –reitero Inuyasha.
–Vaya que bien que no irán con nosotros. – Pensó para sí misma Sango sintiendo un gran alivio ya que Sesshomaru dijo eso y estaba seguro que ellos no aceptarían ir con ellos.

En eso Kouga les dice que el también tienes otra cosas que hacer pero que si tiene tiempo ira con ellos.
Mientras platicaban llegaron ahí a ese lugar Kikio, Yukari y Bankotsu venía con ellas.

– ¡Bankotsu aquí!
–Vaya bestia quien se iba imaginar que aun sientes celos de él, quien te quito a tu novia, no me digas que aun la amas, así ¿por quién te vas a decir? –esto lo dijo con tono de sarcasmo.
– ¡Cállate torpe! De que hablas–dijo molesto Inuyasha.
–Por favor chicos tranquilícense –acoto Sango.
–Pues el que empieza es este lobo rabioso.
–Inuyasha aun sientes algo por Kikio. –Musito Sakura al escuchar lo que dijo Kouga.
–No, nada de eso es más me alegra que ella al fin encontró la felicidad al lado de la persona que ama y amara por toda la vida. –Esto lo dijo con cierta melancolía aquel chico de ojos color ámbar.
–Tienes razón Inuyasha.- corroboró Miroku.
–Inuyasha nos podemos ir ya–interrumpió la plática Sakura.
–Chicos nos vemos en la noche, Sakura y yo iremos a dar una vuelta.

Inuyasha y Sakura se retiran de ahí dejando a los chicos, después de unos minutos también se retira Kouga.

Después de un día muy agitado cada quien estaba en su habitación descansando, y así pasaron los días, los chicos se habían divertido al máximo, Sango aun no le había dicho a su novio que Aome se encontraba en Inglaterra desde hace tiempo.
Era jueves por la mañana había amanecido un día caluroso y hermoso Kouga estaba sentado desayunando ya que pidió servicio a habitación, en eso recordó cuando Sakura que le dijo que había seguido a los chicos al colegio.

–Ya sé quien me puede decir a donde se fue Aome. –pensó para sí mismo en ese momento se levanto repentinamente de donde estaba y salió a toda prisa tomo un taxi afuera del hotel.
–Buen día señor me podría llevar al colegio Chastwood.
–Claro Joven.

Así que él se dirigió aquel lugar sin imaginarse la sorpresa que se iba a llevar, el camino fue largo.
Aome no se imaginaba que pronto iba ser descubierta que estaba ahí, estaban en hora de receso eran las doce del día, platicaban sobre el paseo que van a tener.
Estaban todos emocionados ya que los amigos de Aome querían conocer a los amigos de ella, ellos miraron en su amiga esa felicidad que la envergaba en ese momento.

– ¡Aome! Me gusta verte así de feliz. –dijo Jason.
–Jason es lo mejor que me ha pasado en este momento tener amigos como ustedes que siempre me han apoyado, me animan y por eso se que se llevaran bien con mis amigos Sango y Miroku.
–Pues ya me gustaría conocerlos. –expreso Jenny.
–Aome mañana no podre estar con ustedes y te pido una disculpa. –musito Cindy.
– ¿Qué dices Cindy?
–Tu bien sabes que también me gustaría conocer a tus amigos, pero ayer me avisaron que mi abuelo está muy enfermo y tengo que ir a verlo, además mi padre viene por mi esta noche.
–No, te preocupes amiga será en otra ocasión. –respondió con una sonrisa Aome a Cindy.

Termino la hora del receso, y se fueron a su siguiente clase, mientras afuera del colegio se detuvo el taxi y bajo aquel chico de ojos color celestes y se dirigió con el guardia.

–Buen día señor.
–Buen día Joven que se le ofrece.
–Mire vengo a visitar a una amiga que se llama Karen Harrison.
–Pues deje ver si la directora puede atenderle, permítame.

Aquel hombre que comunico a la directora Henstrigdes que buscan a la señorita Karen Harrison.
Ella le dice que lo haga pasar, Kouga entra aquel lugar cuando iba por el pasillo llegando, no sabía por dónde dirigirse, en ese momento escucho unas voces que provenían de las escaleras que venían bajando.

Eran dos chicas una de ellas trae unos libros que no la dejaban ver bien por donde iba mientras la otra chica rubia le insistía que le ayudaba.

–No, Cindy yo puedo sola. –decía aquella chica con una sonrisa.
–Vaya contigo eres muy testaruda, si paso algo no me vayas a echar la culpa yo te digo por donde pisas.

En eso Kouga miro aquellas chicas que venían bajando los escalones– ¡Disculpen donde queda la dirección! –interrumpió el.
Cindy avanzo un poco. –Espera Jenny no te muevas.
– ¿Qué pasa Cindy?

Ella dejando atrás a Jenny mientras se acerco aquel chico para contestar la pregunta de aquel chico.

–Mira te vas por todo este pasillo y al fondo se encuentra la dirección.
–Cindy que sucede ya me canse de traer esto. –pero como Jenny era una chica tan testaruda e impaciente dio un paso hacia adelante.

Al ver aquella chica rubia lo que hizo su amiga grito ya que no piso bien y los libros salieron volando, pero ella cerro sus ojos estaba asustada, Jenny sintió como alguien la había abrazado fuertemente y ambos chicos cayeron por las escaleras.

Jenny entre abrió sus ojos para ver quien había amortiguado su caída se encontró con aquellos ojos color celeste, los dos se miraron fijamente Kouga al ver aquellos ojos color negros lo habían cautivado al instante.

continuara...

 

Capitulo 95.- Amor a primera vista.​

Mientras Cindy preocupada por ella le hablaba pero parecía que no la escuchaba no dejaba de mirar aquel chico de ojos color celeste ella estaba aun encima de Kouga.

–Te encuentras bien. –pregunto Kouga preocupado.

Ella sin dejar de mirarlo solo asentó con la cabeza positivamente no pudo articular ni una palabra.
Kouga la miro fijamente. –Segura que estas bien, no te lastimaste.

–Sí, sí estoy bien y tu. –dijo ella tímidamente y sonrojándose.
–Estoy bien no te preocupes, solo unos cuantos golpes. –acoto el aunque se había pegado fuerte.

Aun los dos estaban tirados en el piso, ella estaba encima de Kouga.

Cuando en ese instante se escucho una voz conocida por ella. –Srta. Blair ¿Qué significa esto?

Ella al mirar quien era se levanto pronto al igual Kouga. –Directora Henstrigdes.
–Directora Henstrigdes, lo que paso fue que Jenny resbalo por las escaleras y este joven le amortiguó la caída. –Cindy fue la que contesto.
–Eso paso Jenny.
–Si, por mi culpa el esta lastimado.

La directora lo miro y de uno de sus brazos de Kouga estaba raspado y sangraba un poco.

–Es mejor llevarte a la enfermería.
–No, no se preocupe Sra. Henstrigdes.
–Jenny lleva a, como se llama Joven.
–Disculpe por no presentarme soy Kouga Minamino.
–Pues bien joven Minamino, la Srta. Blair lo llevara ha enfermería, llévelo por favor que irá a decir el joven que los ingleses no somos hospitalarios.
–Sí. –contesto Jenny sonrojándose.

Ambos se retiran de ahí, mientras la profesora Alison y la directora le ayudan a Cindy a recoger los libros.

–Cindy tú conoces a ese chico.
–No, profesora Alison.
–Pues pensé que lo conocías, al parecer es un amigo de Karen.

Acá en la enfermería estaban atendiendo a Kouga, Jenny cada vez que podía miraba hacia donde estaba el.
Ese chico la había cautivado desde la primera vez. –Así que se llama Kouga que guapo es, ¿donde lo he visto? Donde, donde recuerda Jenny. –pensó para sí misma.

La enfermera termina de curarlo. – ¡Listo joven!
–Gracias señorita.

El se levanta de donde estaba y se dirige con Jenny. –Ya estoy listo Srta. Blair.

Salen de enfermería y van en silencio por los pasillos del colegio, Kouga no podía evitar ver aquella chica era muy bonita no era muy alta era de piel blanca, su cabello era color negro largo hasta la cintura.

Jenny sintió como la miraba que se puso nerviosa. –Oyes vas entrar a este colegio. –pregunto ella rompiendo el silencio.

–No, solo que vengo a visitar a una persona.
–En serio.
–Sí, creo que ella sabe de una persona que ando buscando desde hace tiempo, ya que estudio en este mismo lugar y por eso vengo a buscar a la señorita Harrison.
Jenny al escuchar el apellido de su amiga se sorprendió. –Buscas a Karen.
–Usted la conoce señorita Blair. –expreso Kouga.
–Claro es una de mis mejores amigas. –contesto con una sonrisa.
– ¡Ah! Entonces usted debe conocer a la chica que estoy buscando.
–Vaya por lo que veo esa chica le interesa mucho verdad joven Minamino.
–Pues como le digo es una amiga solamente y la estimo mucho.
–Que suerte tiene esa chica al tener como amigo a Kouga. –pensó para sí misma ella. – ¿A quien anda buscando?
–Srta. Blair le puedo pedir un favor antes de preguntarle a quien busco.
–Si dígame.
–Te puedo decir por tu nombre y tu puedes decirme Kouga.

Ella se sonrojo ya que aquel chico quería hablarle por su nombre. –Claro Kouga. –respondió con una sonrisa.

–Jenny ando buscando a Aome Higurashi.
– ¿Qué dices? Entonces eres amigo de Aome.
–Sí, la ando buscando ella se marcho de Japón sin avisarme–esto lo dijo muy triste.
–Kouga ella está más cerca de lo que piensas.
– ¿Qué?
–Pues ella está aquí desde hace tiempo.

Kouga no podía creer lo que escucho de aquella chica. –Aome está aquí en serio. –respondió alegre aquel chico. –De tan feliz que estaba tomo de las manos aquella joven y la abrazo repentinamente.
– ¡Kouga! –exclamo aquella chica de ojos negros y sonrojada su corazón latía más de lo normal.
–Entonces ayer vinieron a verla los demás chicos.
–Sí, y quedamos que íbamos a ir a los museos y luego a cenar.
–Jenny entonces mañana veré Aome será mejor que me vaya y te pido que no le digas que estuve aquí.
–Este bien no le diré nada.
–Gracias, el se retira y ya no va con la directora se despide de Jenny.

Ella se quedo parada ahí mirando cómo se iba aquel chico, después de un momento Cindy se acerco.

–Jenny ¿Qué te pasa?
–No, es nada amiga vámonos a clases. –pero antes de retirase la directora le dice que paso son Kouga Minamino.
–Se fue directora Henstrigdes.
–Vaya que es un chico muy extraño, pues bien vayan a sus clases señoritas.

Kouga llega al hotel y se encuentra el camino a Sango y le confirma que ira con ellos el viernes.

–Está bien Kouga nos iremos a las diez de la mañana.
–Bueno estaré listo, se que nos divertiremos mucho verdad Sango. –Esto lo dijo con una sonrisa.

Sango se sorprendió por el comportamiento de el – ¿Qué sucederá? Está comportando muy raro, espero que él no le diga a Inuyasha que Aome está aquí.

Estaba tan sumergida en sus pensamientos que no escucho que le hablaba Miroku.

–Sango que te sucede.
– ¡Miroku! Discúlpame no te escuche.
–No, no es nada.
–Dime que está pasando Sango estos días has estado muy rara, tu comportamiento no es normal acaso ya no me amas.

Ella al escucharlo eso por parte del chico que ama, se acerco a él y lo abrazo fuertemente que Miroku se sonrojo.

Sango le dice al oído. –No sea tonto yo te amo tanto yo no sabría vivir sin ti mi querido Miroku.
El sintió su cuerpo estremecer y se sonrojo su corazón latió más de lo normal. –San…go–dijo entre cortado su nombre,

Aquella chica sonrió ya que lo puso en una situación difícil, era la primera vez que él se ponía así con ella, el siempre la ponía en esa situación a ella.

–Anda Miroku vamos a dar una vuelta tu y yo solos.

Ambos salieron del hotel, acá en otro lugar Inuyasha y Sakura estaban también paseando por las calles de Londres.

Los lugares que visitaban eran sorprendentes, ella se divertía al lado de él, pero el rostro de Inuyasha no había nada de felicidad si solo sonreía era complacerla.
Cada vez que la miraba pensaba en esos momentos si debía casarse con ella y olvidar para siempre a Aome ya que el realmente no sabía dónde buscarla y que nadie le diría donde esta, ya que el la había lastimado.

Pero nadie comprendía que todo lo que hizo fue porque su abuelo la dejara en paz, Sakura lo miro que estaba distraído.

–De seguro está pensando en ella, ¿Qué nunca podrá olvidarla? Pero yo hare que se olvide ella para siempre. –pensó en eso momentos ella. –se acerco a él y lo abrazo fuertemente apenas lo iba a besar cuando fueron interrumpidos por Sango y Miroku.
–Hola Inuyasha-
–Sango, Miroku–acoto Inuyasha.
–Rayos tenían que interrumpir estos entrometidos este país es muy grande porque tenían que encontrarse con nosotros. –pensó para sí misma en ese momento.
–Inuyasha y Sakura vamos ir a comer gustan ir con nosotros.
–No, Inuyasha y yo…. –En eso interrumpió Inuyasha a Sakura,
–Claro que vamos ya tenía tiempo que no salíamos juntos.
–Pero Inuyasha tenemos que seguir nuestro itinerario. –expreso molesta Sakura.
–Pues Sakura si quieres seguir con eso vete tú sola yo iré con mis amigos. –contesto aquel chico con algo de fastidio con ella.
– ¿Qué dices?
–Así como lo oyes.

Ella se molesta tanto que le dice que se vaya, que ella se regresara al hotel sola.

–Si es lo que quieres nos veremos allá, vámonos chicos. –los tres se alejan dejando aquella chica enojada.

Esto no te lo perdonare Inuyasha a mi no me dejan así como así tu aun no me conoces bien –ella se fue al hotel molesta.

–Inuyasha no debiste dejar sola a Sakura –espeto Sango.
–No te preocupes luego se le pasara, la verdad ya no quería estar con ella.

Ese día los tres se la pasaron muy bien se divirtieron, fueron a diferentes lugares, ya caída la noche regresaron al hotel, en el hobby del hotel estaban Sesshomaru y Shippo estaban ahí sentados ya que ellos también habían salido a divertirse.

Shippo corre con Sango y la abrazo, le dice al oído. –Amiga le compre un regalo a Aome para mañana, Sesshomaru me ayudo a escogerlo.

–En serio, estoy segura que a ella le encantara.
–Si tienes razón. –dijo con una sonrisa.
– ¡Inuyasha!
– ¿Qué sucede Sesshomaru?
–Mama hablo hace rato y me dijo que te comunicaras con ella en cuanto llegaras.
–Gracias, nos vemos chicos.
El se dirigió a su habitación y se comunico con su mamá. –Hola madre.
–Inuyasha como estas.
–Bien mamá, me dijo Sesshomaru que querías hablar conmigo.
–Sí, solo hablo para recordarte que no se te olvide comprar el anillo de compromiso.
–No, te preocupes mañana mismo lo comprare.
–Está bien hijo, entonces nos vemos la semana que entra ya casi todo está listo Inuyasha.
–Sí, madre gracias. –El contesto sin ningún ánimo. –Nos vemos pues el colgó el teléfono.

Izayo se preocupo ya que escucho a su hijo triste y sin ningún ánimo, la abuela que estaba a un lado de ella le vio distraída.

– ¿Qué sucede Izayo?
–Abuela es mi hijo no lo escuche muy alegre que digamos.
–Pues si yo hubiera sido mi nieto y que me casaran con alguien que no amo me sentiría igual.
– ¡Abuela! –exclamo Izayo.

Mientras en el colegio Chastwood las chicas estaban en la habitación platicando ya que Karen y Aome se preocuparon por Jenny porque en todas las clases estuvo distraída y mirando siempre por la ventana y suspirando cada vez que podía su comportamiento era extraño.

– ¿Pregúntale Aome? Que tiene.
–Crees que me haga caso si aun esta en las nubes, acuérdate que Cindy nada dijo que había conocido a un chico y se puso así.
Aome se sentó a un lado de ella –Jenny quieres hablar.
–De que Aome.
–Pues de lo que te está pasando.
– ¿Pasando que amiga?
–Jenny a caso tu estas enamorada.

Jenny se sonrojo por lo que le dijo Aome y la miro fijamente. –Sí, si Aome he conocido a un chico y creo que me enamore.

–Que tonterías dices Jenny si apenas lo conociste como que te va a gustar con tan solo verlo una vez de seguro ni sabes su nombre.
–Si se su nombre hasta con decirles que él me pidió permiso de hablarme por mi nombre él es tan caballeroso. Amable, gentil tan buen mozo–esto lo dijo con un gran suspiro.
–Amiga nos podrías decir cómo se llama. –No chicas no se los diré pero mañana lo conocerán, así que me retiro me voy a descansar.
Ella salió de la habitación dejando a Aome y Karen sorprendidas. –Vaya si que esta chica se enamoro de verdad. –acoto Karen.
– ¿Quién será? –dijo Aome. –de seguro Karen será el chico que está en séptimo grado Dylan.
–Pues puede ser, dejemos eso por el momento Aome debemos descansar porque mañana tendremos un día muy agitado.

Se van a descansar todos dormían placenteramente pero había un chico en especial que no podía dormir se movía de un lado para otro, decidió levantarse miro el reloj eran las doce de la noche.

– ¡Rayos! Apenas es media noche. –aquel chico se mudo de ropa y salió sigilosamente de la habitación para que no le escucharan que salía.

A pesar de la hora que era había mucha gente en las calles el caminaba sin rumbo alguno
Miro hacia aquel cielo oscuro y estrellado. –Aome donde estas como quisiera abrazarte y besarte y decirte cuanto te amo.
Siguió su camino el no supo cuanto tiempo duro caminando ya que perdió la noción del tiempo.

Regreso a la habitación y al entrar. –Donde andabas Inuyasha.
– ¡Miroku! ¿Qué haces despierto?
–Pues esperándote amigo me preocupaste que horas son estas de salir a pasear puede ser peligroso.
–Lo sé amigo, pero he estado pensando muchas cosas.
–Y en eso que piensas me supongo que esta Aome verdad o me equivoco.
–Sí, no puedo dejar de pensar en ella, esta distancia que hay entre nosotros me ha hecho entender que la amo, la amo y nunca podre amar a nadie más que no sea ella.
–Inuyasha como amigo te sugiero que la olvides tu dentro de una semana te casas.
–Pues no sé, que hacer Miroku no buscar a Aome jamás y casarme con Sakura a lo mejor con el tiempo la llegare amar.
–Mira, mejor descansa ya al rato pensaras mejor las cosas.

Amaneció un día caluroso, los chicos se estaban arreglando, Kouga estaba alegre ya que volvería ver a Aome.
Mientras en el colegio las chicas se estaban arreglando para salir ya que Sesshomaru y los demás iban ir por ellas.
Jason llego por ellas y salen al patio mientras llegan, acá los chicos salieron rumbo al colegio.
Miroku–A donde vamos Sango. –pregunto.
–Pues es una sorpresa.

Llegaron al colegio y afuera de este estaban las chicas y Jason esperándolos, ya que Sango había mandado un mensaje a Aome que estaba ya llegando.

Miroku no podía creer lo que estaba viendo. –Pero si es Aome, Sango que hace aquí.

continuara...

 

hola Rosalind, KagomeG, Aome fan Saku, Yanina Cardenas, diana y Kennikag.
aqui dejo el siguiente capitulo y disculpen por ponerlo demasiado tarde pero aqui esta espero sea de su agrado.

Capitulo.-96.- Un Reencuentro inesperado 1era parte.

–Pues Aome está aquí desde hace tiempo, Miroku y Kouga le puedo pedir un favor.
–Sí, dinos –dijeron ambos chicos.
–Les pido de favor que no le digan a Inuyasha que Aome está aquí.
– ¡Por mí no hay problema Sango! –musito Kouga.

Miroku quedo en silencio por un momento. –También por mí no te preocupes Sango no le diré nada.
Sango lo escucho un poco no muy convencido. – ¡Miroku! ¿Eso espero?

Los chicos llegaron hasta la entrada del colegio donde los estaban esperando Aome y los demás, estaba muy emocionada de ver a sus amigos, Jenny al igual tenía tantas ganas de ver aquel chico de ojos color celeste ya ansiaba de verlo nuevamente.
Bajaron del carro, Aome se sorprendió al ver Kouga que llego junto con Sesshomaru, Sango, Miroku, Shippo.

Aome no podía creer lo que estaba viendo Kouga venía con sus amigos eso la hizo feliz verlo con ellos.
Aquel chico de ojos color celeste no se hizo esperar más y se dirigió con ella y el saludo, ella correspondió el saludo, al igual Miroku, Aome después del saludo se disculpo con ambos jóvenes por no haberse despedido cuando se fue de Japón sin avisar.

Aquellos dos chicos le dijeron que no se preocupara, después Aome les presento a sus amigos, quienes los saludaron amablemente, Jenny no pudo evitar sonrojarse al ver de nuevo aquel joven, quien le había cautivado la primera vez que lo vio su corazón latía más de lo normal.

Karen y Aome no pasaron desapercibido el comportamiento de su amiga al ver que estaba ruborizada, Miroku como siempre no desaprovechaba las oportunidades, así que tomo la mano de la joven de ojos negros y le dijo que si quería tener un hijo con él.

Esto hizo que Jenny se sonrojara como un jitomate. – ¿Qué dices? –expreso ella tímidamente.
Jason también se sorprendió por esas palabras que dijo aquel joven pervertido, Sango no se hizo esperar más le dio tremendo coscorrón y lo tiro al piso.

Jenny y Jason se sorprenden al ver tal acto, de aquellos dos chicos, Aome al verlos confundidos. – ¡Amigos no les hagan caso, Sango y Miroku se llevan siempre así! –expreso Aome.

–Así, que vayan acostumbrándose–Interrumpió aquel niño de ojos verdes y cruzándose de brazos.
Jason al verlo. –hola jovencito ya te conocía.
–Sí, la otra vez que venimos a buscar a mi amiga Aome, mi nombre es Shippo Hisakawa.
–Hola Shippo soy Jason gusto en conocerte.
–El gusto es mío Jason.-Shippo se presento también con Jenny.

Sango que aun estaba discutiendo con novio, Jason se acerco a ella y la saludo. –Hola señorita así que eres amiga de Aome.
Ella se sonrojo cuando miro bien de quien se trataba que era aquel chico que le ayudaron a recoger los libros.

–Sí, soy Sango es un gusto conocerte. –respondió sonrojándose.
Miroku al ver que aquel chico tenía tomada de la mano a su novia se levanto lo más pronto posible y se interpuso entre ellos dos.

–Pues ella es mi novia, joven Jason.

En eso interrumpió Karen les presento a Jason y Jenny su novio, aquellos dos jóvenes se presentaron amablemente con él.

Después de las presentaciones todos se dispusieron a irse y divertirse, en el camino Shippo le da a su amiga el regalo que le había comprado.
Aome lo abrió y se sorprendió había regalado una collar muy bonito esta tenía una estrella de piedras de color rojo, ella le agradeció.

Llegaron al museo que visitarían primero, era muy grande había muchas cosas sorprendentes en ese lugar tanto como Karen y Jenny les decían un poco de historia.

Shippo estaba fascinado con todo lo que miraba ahí, no era el único al igual los demás chicos.
Jenny y Kouga iban los dos platicando ambos chicos reían, esto no la dejos pasar Aome que al verlos sonrió y se dio cuenta Jason.

– ¿Qué pasa Aome?
–Mira Jason a Jenny por lo que se ve Kouga y ella se llevan bien, y eso que apenas se conocen.
–Si tienes razón nuestra amiga se ve más feliz que nunca, pero espero que no se ilusione mucho con él. –dijo Jason.
– ¡Jason! –expreso Aome.
–Pues, crees que no me he dado cuenta amiga ese chico te ve con ojos de amor.

Aome se sonrojo por el comentario de su amigo. –amigo que cosas dices, él una vez me dijo que le gustaba pero yo…–quedo por un momento en silencio.

– ¡Ah! Ya entiendo tu le dijiste que te gustaba aquel chico llamado Inuyasha.
–Sí.

En ese son interrumpidos por Shippo. –Aome ven vamos a ver aquellas pinturas de la otra sección. El la tomo de la mano y fueron haberlas.

Mientras tanto Inuyasha y Sakura estaban también paseándose, visitaron varios lugares, aquella chica se divertía al lado del que pronto iba hacer su futuro esposo.

Pero Inuyasha no pensaba lo mismo no amaba a Sakura mas que él quisiera sentir algo por ella no, no podía, en ocasiones Sakura lo miraba algo distraído, pero ella bien sabia que el pensaba en Aome pero ella iba a tratar que él se olvidara para siempre de aquella chica.

– ¿Inuyasha qué te pasa?
–No, no es nada Sakura, que te parece si vamos al centro comercial tengo algo que comprar ahí.
–Está bien vamos.

Aquellos dos jóvenes se fueron a dicho lugar pero algo iba a suceder, al igual Aome y los demás después de visitar el museo se pusieron de acuerdo para ir al centro comercial ya que en aquel lugar era muy conocido por que contaba con restaurantes, tiendas departamentales donde se vendía de todo.

En aquel lugar llegaron Inuyasha y Sakura y se dirigieron a la joyería había mucha gente.

–Inuyasha después de comprar lo que vas a llevar, vamos al restaurante de aquí que te parece. –dijo Sakura.
–Si está bien

Al llegar a la joyería Inuyasha le dijo a Sakura que anillo le gustaba para el compromiso, aquella chica no podía cree lo que estaba escuchando.

– ¿Qué dices Inuyasha?
–Pues que escojas el anillo que te guste Sakura para nuestra boda.

La joven que está atendiendo les muestra varios anillos, todos eran muy hermosos, cercas de ese lugar llegaron los demás chicos.

–Chicos que les parece si vamos a comprar lo que queramos y nos vemos en este mismo lugar dentro de una hora. –acoto Sango.

Todos dijeron en unisonó que si, Sango y Miroku se fueron aparte al igual Kouga y Jenny se fueron juntos, Karen, Shippo y Sesshomaru se fueron los tres, Aome y Jason aparte.

Cada quien gano a diferente lugar del centro comercial, Aome y Jason subieron al tercer piso haber la tienda donde vendían joyas que ella quería comprarle algo a su mamá.
Iban en el elevador. –Aome tus amigos son muy simpáticos y me alegra que ellos te cuidaran allá en Japón.

–Si, Jason los estimo mucho, cuando entre por primera vez a Sengoku fueron los primeros que me hice amigos. –contesto Aome con una sonrisa.

Al salir del elevador Aome se sorprendió al ver a Kikio, Yukari y Bankotsu.

– ¡Aome!
– ¡Kikio! Ustedes aquí.
–Si, Aome pues estamos de vacaciones aquí, nunca imagine encontrarte en este lugar.
–Pues ya tengo tiempo aquí en Inglaterra. –musito Aome.

Kikio no pudo evitar ver aquel chico de cabello castaño y se dio cuenta Aome. – ¡Disculpen! Le presento a un amigo.

–Hola soy Jason.

Kikio, Yukari e inclusive Bankotsu se presentaron con el amablemente.

–Aome entonces no has visto a. – Kikio no la dejo terminar la frase a Yukari.
–Yukari guarda silencio. –espeto Kikio muy seria con ella.
– ¡Discúlpame Kikio!

Jason y Aome no entendían el comportamiento de aquellas dos chicas, que estaban muy extrañas.

–Nos retiramos Aome fue un gusto verte de nuevo, y conocerte a ti Jason. –dijo Kikio.
–Pues fue un gusto conocerlos Srta. Kikio y Yukari y joven Bankotsu.
–Hasta luego chicos fue un gusto verlos también.

Aquellos tres chicos se retiraron y subieron al elevador, Aome estaba distraída en ese momento, recordando lo que Yukari iba a decir pero Kikio la había interrumpido.
Jason la mira y le pregunta que le pasa. –No, no es nada estoy bien.

–Segura.
–Sí, enserio anda vamos a donde te dije ella lo tomo del hombro.

Acá en el elevador Yukari le pregunta a Kikio porque no le dejo decirle se había visto a Inuyasha.

–Yukari por lo que veo no entiendes, por lo que veo Aome no se ha dado cuenta que el está aquí y con Sakura.
–Tienes razón, pues ojala no se reencuentren ya que si ella los ve juntos no quiero imaginarme lo que pasara.
–Pues eso esperemos, aunque la verdad me gustaría que ambos se encontrarán y arreglaran sus indiferencias. –acoto aquella joven de cabello largo y ojos color negro. – ¿Pero en realidad que pasara si ambos llegan a verse? Pues como los dos son tas obstinados creo que pelearan eso si es seguro. –pensó para sí misma Kikio y dejo escapar un suspiro que Bankotsu la tomo de la mano.
– ¿Qué te sucede linda?
–No, no es nada olvídalo. –contesto a su novio con una sonrisa.

En ese mismo lugar Kouga y Jenny estaban tomando un helado.

–Kouga puedo preguntarte algo. –musito tímidamente Jenny.
–Sí, dime.
–A ti te gusta Aome verdad.

Kouga se sonrojo por aquella pregunta que le hizo aquella joven de ojos negros y se puso nervioso.

–Pues para ser sincero Jenny cuando la vi por primera vez en Sengoku me gusto Aome era la chica más linda que había visto en mi vida.

Jenny al escuchar lo que Kouga dijo de su amiga sintió ella un gran vacío en su corazón sabía bien que no podía competir con su mejor amiga en la forma que él hablaba de Aome.
Aquel chico de ojos azul celeste miro a Jenny que en su mirada reflejaba tristeza. – ¿Qué te sucede Jenny?

–No, no es nada Kouga lo que pasa es que me alegra que mi amiga encontró buenos amigos allá en Japón–eso nada mas dijo ella pero realmente se sintió un poco mal, ya que ella en verdad le gustaba aquel chico pero su amor no podía ser correspondido ya que el amaba a otra chica.

Pero el aun no convencido por la respuesta de ella la tomo de la mano y la miro a los ojos.
Ella no pudo evitar la mirada de Kouga hacia ella y se sonrojo sentía que su corazón se le iba a salir en ese momento, Jenny no pudo evitarlo más y sin pensarlo se zafó de él y se fue corriendo de ahí, dejando a Kouga confundido el fue tras ella.

Jenny no pudo evitar llorar cuando se alejo de ahí, y se preguntaba a si misma ¿Por qué? ¿Por qué? Tenía que enamorarse de él, si su amor no iba a ser correspondido, ella se detuvo cerca de unos escalones se limpio sus lagrimas

– ¡Que tonta soy! ¿Como Kouga se fijaría en mí? Si el ama tanto a Aome, es mejor hablar con él y disculparme.

En eso sintió que la tomaron de la mano y ella miro hacia atrás y era aquel chico que estaba tomando aire ya que había corrido para poderla alcanzarla.

El la acerco hacia él y la abrazo quedaron un momento en silencio, el corazón de ambos jóvenes latía muy fuerte se escuchaba como si fuera uno.

Aquella chica de cabello negro estaba sonrojada al estar tan cercas de Kouga y escuchando el latido de su corazón. – ¡Kouga!

En eso Kouga. –Jenny también tengo algo que decirte como te dije a mi me gustaba Aome pero me di cuenta que el amor de ella no iba hacer para mí.

Jenny no entendía porque él le decía eso a donde quería llegar con esa respuesta que él le daba.

–Por eso Jenny he conocido a una chica que me ha cautivado desde la primera vez que la vi sus ojos son tan hermosos con decirte que a su lado yo me siento a gusto.
– ¡Que dices Kouga!

El la tomo del mentón y la miro a los ojos. –Por eso quiero preguntarte si tú y yo podemos conocernos más.

Jennifer no podía creer lo que aquel chico de ojos color celeste le estaba pidiendo para ella era un sueño. –Claro Kouga –contesto con una sonrisa.

Mientras acá con Aome visitaban una y otra tienda de joyería ya que ninguno collar le convencía a ella.

Pasaron por una tienda de ropa, pero ella no se fija que ahí en ese lugar se encontraba su amado Inuyasha.

–Mira Inuyasha te gusta este vestido ¿Cómo se me ve?
–Bien Sakura.

Aquel chico de ojos color ámbar miro hacia la venta y se sorprendió al ver a una chica parecida a Aome salió corriendo. – ¡Aome! ¡Aome! El gritaba su nombre ya que la perdió de vista como había tanta gente. –el se limpio sus ojos. –No puede ser acaso fue una alucinación será porque tengo tantas ganas de verla.

Pero Aome alcanzo a escuchar que le hablaban y se detuvo por un momento y Miro a todas partes buscando el dueño de aquella voz. – ¡Inuyasha!

Jason le pregunta que le pasaba porque la vio que miraba a todas partes como buscando a alguien.

– ¡Jason escuchaste que alguien me hablo!
–No, Aome.
–Anda vamos a la siguiente joyería.

Sakura mientras salió de la tienda y miro a su prometido que buscaba al alguien porque miraba a todos lados.

– ¿Que sucede Inuyasha?
–No, no es nada qué te parece si vamos a comer tengo mucha hambre.
–Sí, vamos.

En la tienda de joyería Aome compro él un collar para su mamá después de comprarlo Jason le dice a ella que si quiere un helado.
Los dos se dirigen hacia allá, pero sin imaginar lo que iba a pasar en ese momento al fin aquellos chicos se iba a encontrar ya que iba por el mismo camino.

–Jason vamos hacer una apuesta tu y yo.
–Una apuesta.
–Sí, el que llegue al último paga los helados. –dijo aquella chica de ojos color achocolatados y sonriendo.
–Está bien amiga así que prepárate a perder

Aome corrió dejando atrás a su amigo el corrió para alcanzarla, ella voltea hacia atrás si miraba a su amigo.
Pero no se fijo y choco con alguien cayendo ambos al piso y pegándose muy fuerte.

–Fíjate por donde caminas torpe, no sabes que no se debe correr por aquí. –dijo aquel chico de ojos color ámbar, tenía sus ojos medio cerrados ya que había caído sentado y golpeándose muy fuerte.

Al igual aquella chica tirada en el piso también se había golpeado fuerte. –Que dices torpe como te atreves a insultarme.

Aquellos dos jóvenes aun en el piso al escuchar la vos de cada uno se sorprendieron, ella se levanto lo más pronto posible al igual él, los dos se miraron a los ojos.

El no podía creer lo que estaban mirando sus ojos era la chica que amaba con todo su corazón.
Aome al verlo se quedo paralizada no sabía qué hacer si salir corriendo de aquel lugar o simplemente no hablar con él y dar media vuelta pero sus piernas no respondían en ese momento, su corazón latía a mil por hora al ver a su amado Inuyasha.

Al igual Inuyasha su corazón latía mas de lo normal, el solo la miraba a ella, todo a su alrededor no existía solo ellos nada más.

Sakura le habla a Inuyasha pero no recibía respuesta, el no dejaba de mirar a Aome, esto enfurecía a Sakura, no soportaba como la miraba con aquellos ojos de amor, además la mirada de Inuyasha había cambiado por completo.

Inuyasha fue quien rompió el silencio. – ¡Aome ¡ qué haces aquí. –pregunto él.

Aome no contesto la pregunta que le hizo ya que vio al lado de él a Sakura la futura esposa de Inuyasha.

– ¡Discúlpeme por lo de hace rato! –dijo Aome fríamente con el dio media vuelta sin decir nada mas, pero en ese momento sintió que la tomaron de la cintura.
– ¡Por favor Aome no me hagas esto! –Inuyasha le dijo eso al oído.
–Inu…ya…sha…–acoto Aome entre cortado el nombre de él.

Ella empuño sus manos, no podía soportar que él le hiciera eso con ella, el ya estaba a punto de casarse y aun la lastimaba de esa manera.

–Suéltame por favor.
–No déjame quedar un momento así a tu lado por un momento.

El corazón de ambos jóvenes se escuchaba muy fuerte, Aome sintió como Inuyasha la abrazaba, ella se sonrojo en la forma que lo hacía, Aome sintió esa calidez de él.

En ese momento ella quería decirle cuanto lo amaba y lo había extrañado.

– ¡Inuyasha que estas haciendo! –expreso Sakura con lagrimas en sus ojos al ver tal escena su prometido abrazando a otra chica.

Aome al reaccionar y ver lo que estaba pasando dio media vuelta y miro a los ojos a Inuyasha y le dio tremenda bofetada.

Aquel chico de ojos color ámbar se sorprendió. – ¡Aome! ¿Por qué?
–Nunca vuelva hacerme esto Inuyasha entiendes. –respondió ella con sus ojos llorosos.

Inuyasha al ver que ella estaba llorando se acerco mas a ella no le importaba cuantas veces lo rechazara.

–No, me toques.
–Entiende Aome yo te…

Aome no lo dejo terminar la frase. –Pues vete sabiendo de una vez Inuyasha yo no te amo.

–No es cierto Aome tu aun me amas como yo te amo a ti.
–Por favor Inuyasha yo, ya tengo quien me quiera y es un chico que amo demasiado y él me ama también. –Esas palabras que ella decía le lastimaban mucho ella como a él.

Inuyasha no soporto más y se acerco nuevamente a ella y la beso a la fuerza, ella forcejeaba para zafarse, pero no podía.
Ella se zafó como pudo y le dio otra bofetada tan fuerte que se escucho–Te dije que no me volvieras a tocar.

El empezó a jalarla a la fuerza que en ese instante llego Jason y al ver como aquel chico estaba molestando a su amiga, no se contuvo y lo golpeo tan fuerte que cayó al piso.

– ¡Jason! –expreso Aome.
–Estas bien, amiga. –el la abrazo al ver a Aome que estaba llorando , el no soportaba verla así.

– ¡Inuyasha! –Grito Sakura al verlo tirado en el piso.

Inuyasha al escuchar aquel nombre recordó aquella vez la carta que había leído, el se limpio la sangre que le salió de la boca por el golpe que le dio aquel chico de cabello castaño.

Esto lo enfureció mucho y al ver que el tenia abrazada a Aome se puso celoso no soportaba que otro hombre abrazara a la chica que el amaba.

Se levanto y se dejo ir contra Jason y le correspondió el golpe que le dio, tanto como Aome y Sakura querían detener la pelea de ambos chicos.
La gente del lugar estaba asustada por tal acto de estos dos jóvenes.

–Así que eres Inuyasha el miserable que lastimo a Aome. –musito Jason ya que lo tenía tomado del cuello de la camisa.
–Sí, algún problema, es cosa que no te interesa es asunto entre ella y yo. –contesto sarcásticamente Inuyasha.
–Pues vete sabiendo sabandija que todo lo que le pase a mi novia me incumbe a mí.
– ¿Qué dices tu novia? –expreso Inuyasha no podía creer lo que aquel chico estaba diciendo.
–Así, como lo oyes tu no supiste apreciar el amor y el cariño que ella te dio, no la valoraste miserable.

Aome al escuchar lo que acabo de decir Jason se sorprendió nunca imagino que él iba a decir eso y mucho menos reaccionar de esa manera.

– ¡Jason! –exclamo Aome.

Pero Inuyasha no podía soportar eso, se zafó de Jason y lo vuelve a golpear ambos chicos no se detenían.

Continuara…

Espero que este fin de año se la pasen muy bien y que sus deseos para el 2011 se les hagan realidad se los deseo de todo corazon.