Estado del tema:
No se permiten más respuestas.
  1.  
    ~Sunzure Russo~

    ~Sunzure Russo~ Fanático

    Capricornio
    Miembro desde:
    21 Junio 2006
    Mensajes:
    1,167
    Pluma de
    Escritora
    Re: Winter Love

    vamos!!!!
    kag!!!!
    vamos!!!!!!!!!!!!!!!!!LLAMALO!!!!!!!!!!!!!!
    llama a mi cochito bello^^!!!
    jejejje!!!
    que abuela mas metiche¬¬....jijijiji
    ese miro....que mentiroso¬¬
    bueno espero conty!!!!
     
  2.  
    - mvss;'

    - mvss;' Usuario común

    Acuario
    Miembro desde:
    28 Abril 2007
    Mensajes:
    460
    Pluma de
    Escritora
    Re: Winter Love

    hola!, siempre me gustan tus continuacion porque son largas y son muy buenas^^. estoy totalmente de acuerdo con la abuela de kagome, de que llame a inuyasha, presiento que aparte su abuela planea decirle algo importante a inuyasha, nose solo me lo imagino. la verdad me imaginoque si es incomo leer el pensamiento de otros. pero bueno, espero que pongas continuacion pronto cuidate y nos vemos :)*

    - mvss,'
     
  3.  
    IlEiN LoVe

    IlEiN LoVe Usuario común

    Aries
    Miembro desde:
    1 Enero 2007
    Mensajes:
    473
    Pluma de
    Escritora
    Re: Winter Love

    hola!
    pues tu fic! me encanta! la forma de redaccion es buenisima!
    ademas q es bastante interesante ajajajaj si vieras deje de lado a mi novio :P por
    terminar la historia jeje
    pero bueno me encanta como as desarrollado la personalidad de inuyasha pues en la mayoria de
    los fics uno sabe como reaccionara las palabras q dira y en el tuyo es diferente totalmente!
    tambien el caracter frio y serio me encanta!! me recuerda a mi adorado sessh!
    como ves yo soy fan de kagxsessh pero la verdad me gusta bastante como as creado la pareja!
    te felicito!
    sigue asi! espero puedas continuarla pronto!
    chao
    cuentas con todo mi apoyo!
     
  4.  
    maiki

    maiki Entusiasta

    Sagitario
    Miembro desde:
    2 Junio 2008
    Mensajes:
    64
    Re: Winter Love

    O.O tu fic me a dejado sin palabras me lo e leido entero sin descanso...y estoy deseando la continuación.Espero que no te tardes mucho ya que lo dejaste en un buen momento...Mi enorabuena!!!!
     
  5.  
    chidori03

    chidori03 Fanático

    Leo
    Miembro desde:
    25 Febrero 2006
    Mensajes:
    1,040
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Winter Love
    Total de capítulos:
    21
     
    Palabras:
    2794
    Re: Winter Love


    Capitulo XXI:
    Luna Llena

    -¿Tienes hambre?-Pregunto mi abuela una vez me asome a la cocina.

    Me había duchado.

    -Sí. Pero antes daré una vuelta-Le sonreí amablemente sin dar ni una explicación más. Salí


    ***
    Caminaba descalza por la playa. Hacia frío pero no tanto como para meter los pies al agua. El sol se estaba yendo, con ello la llegaba de la noche, la hermosa luna, quien se asomaba en lo más alto del cielo.
    Mire mis pies rodeados de arena y luego una de mis manos desocupadas, ya que la otra sostenían mis zapatos, y esta sostenían el pendiente, recuerdo de mi difunta madre, quien durante sus años viva ocultaba y ocultaba secretos ¿Qué secretos más de los que yo no sabía ocultaba? Espero que ninguno más, aunque presiento que muerta aún sigue ocultando cosas. En primera instancia: no soportaba la idea de verla junto con alguien que no fuera mi padre, pensar que nunca lo amo tanto como lo hizo con Inutaisho, pero a la vez siento una tranquilidad y felicidad, ya que siempre estuve conectada con Inuyasha y en cualquier momento lo vería, pero no para tener algo más haya que una simple amistad, ya que el motivo de nuestro encuentro fue sencillamente para derrotar al que una vez fue mi familiar, onigumo.
    Todo me llego de un dos por tres, como si de repente me hayan quitado las vendas de los ojos y cayera a la realidad, a mi realidad.

    Decidí volver a casa, porque comenzaba hacer frío y ya estaba oscureciendo. Cuando llegue, mi sorpresa fue ver al joven de quien me enamore un día y que aún no se desvanece aunque quisiera.
    Estaba ahí atractivamente sentado, cruzado de brazos y sus hermosos e hipnotizantes ojos dorados cerrados. Cuando entre a la casa abrió sus ojos clavándose en los míos, al tiempo que cambió su postura y me sonrió

    -Hola-Me saludo
    -¿Qué haces aquí?-Ignore su saludo, avanzando hacía la cocina, donde se encontraba mi abuela tranquila
    -tu misma lo quisiste. Tu abuela quería conocerme ¿No?-Atisbe con ojos sospechosos
    -Así es-concordó mi abuela sin inmutarse por esa mirada, esbozando una amable sonrisa.
    -Ummm…-Musite con neutralidad. Voltee y me fui a la habitación donde dormiría estos días.

    Me deje caer en la cama, pensativa.

    ¿Por qué no puedo disimular mi nerviosismo cuando estoy con él? Es insoportable la sensación. Cerré mis ojos y suspire.
    Sentí en un lado de la cama algo pesado, abrí mis ojos asustada y me senté encontrándome muy cerca con los orbes miel que detestaba.

    -Golpea la puerta ¿O es que hay que enseñarte para hacerlo?-pregunte hosca y molesta
    -Lo siento, pero creía que estabas dormida-se explico ahora sin mirarme. Sus manos estaban apoyadas en sus piernas a la vez que las observaba
    -Entonces con más razón no deberías haber entrado-contraataque regañadientes
    -¿Por qué tan a la defensiva?-alzo la ceja, mirándome dubitativo
    -Por qué sí-bufe mirando hacia el otro lado, cruzada de brazos.
    -Esa no es una respuesta-Ahora me contraataco él con tono tranquilo y despreocupado. Nuevamente miraba sus manos.
    No le conteste, seguía mirando hacia otro lado, sin querer encontrarme con su mirar. Después de un largo silencio dijo:
    -¿Te intimido?-Pregunto de repente como si no supiera. Al enfocar mi mirada en su rostro, reflejaba un deje de diversión, eso hizo molestarme aún más
    -¿A qué viene esa pregunta tan…tan…?-alce mi ceja.
    -¿Tan….De repente, irónica o estupida?-Pregunto mirándome estridentemente

    -De repente-afirme con mis ojos que trataban de eludir los suyos
    -Pues…-Se quedo pensando un momento-Es algo que se me ocurrió en el momento. Una intuición-Se encogió de hombro
    -Es ridícula-asevere más tranquila, pero aún seguía molesta.
    -Yo no lo veo así-susurro más para si mismo que para mi-Veo que te diste cuenta de tu habilidad-cambió el tema rápidamente.

    -Por supuesto-afirmé-no ibas a aprovecharlo por toda la eternidad. Algún día tenía que enterarme aunque fuese por mis propios medios, que así fue-
    -¿Cómo fue?-me pregunto con seriedad. Ese deje de diversión que tenía en su cara se borro, volviendo su típico rostro gélido.
    -No lo se con exactitud-Me encogí de hombro. Vi como fruncía los labios insatisfecho-Creía que podía sólo leerte el rostro, pero poco a poco me di cuenta que no eran pensamientos míos, si no tuyos, pero fue tan de repente que me costo asimilarlo. Luego me preguntaba si tú podías hacerlo también. Pude comprobarlo en la batalla anterior al mismo tiempo que me di cuenta completamente de mi habilidad. Me horrorice al pensar que tú leías los míos con tanta facilidad y en cualquier momento-
    -Te equivocas. Había momentos que me eran imposibles. Sin darte cuenta prohibías que pasara por tu mente-se explico algo perturbado
    -Eso me alivia un poco, pero no quiere decir que no los leías-Vi por el rabillo del ojo como asentía-Al darme cuenta de mi nueva habilidad, también descubrí que no sólo nos leíamos las mentes, si no también sabíamos en que lugar estábamos ¿Y como prohibirle que él pudiera leer mi mente y saber la ubicación en la que estoy? Si te concentras, pones tu mente en blanco, imaginando un muro grueso e indestructible tus pensamientos no llegarían ahí, como lo haces tú ahora-sonreí-es difícil hacerlo, por ahora es fácil destruirlo, pero pronto se fortalecerá-asegure.
    -Es lo más seguro-Me alentó-Con que eso paso…-susurro pensativo-Es verdad. Yo no pensaba decirte que estábamos conectados, pero me resignaría hasta que tú lo descubrieras-
    -¡Así que era cierto!-grite molesta-Aprovechabas de invadir mi mente, la única privacidad que tiene un ser, y ahora se que alguien irrumpía ese espacio que era el único que se tiene en la vida, el único que nadie entraría a invadirla-Me levante molesta enfrentando su mirada, olvidándome de lo hipnotizante que podía ser.
    -Si es para tu alivio jamás me intereso tu vida privada u otras cosas, lo que me interesaba era sobre lo que sabias de tu familia y de nosotros, nada más. Quédate tranquila-miro hacia la ventana, donde reflejaba una noche despejada con ella: las estrellas y la hermosa luna llena.

    Bufe escéptica.

    Se sintieron unos golpes en la puerta, que interrumpieron nuestros ensimismamientos.

    Era mi abuela.

    -Ya esta lista la cena. Por favor vayan al comedor-dicho esto se marcho, quedándonos en un rotundo silencio.

    Inuyasha fue el primero que se marcho sin decir ni una palabra; luego de unos minutos abandone la habitación.

    ***
    -Abuela-La llame. Estaba leyendo en el mesón de la cocina que dividía el comedor con esta-¿Sabes donde está Inuyasha?
    -Dijo que daría una vuelta. Bien larga su vuelta ¿No crees?-Sólo asentí.
    La puerta se abrió. Pensé en un minuto que se trataba de Inuyasha, pero al ver a mi abuelo llegar me desilusione.
    -Kagome me alegra verte aquí-Me saludo, abrazándome dulcemente
    -Vine a visitarlos-

    -¿Cómo están todos por haya?-
    -Todos perfectamente-afirme sonriendo-iré a dar una vuelta-Dicho esto Salí de la casa.

    Inuyasha ya llevaba más de dos horas fuera de casa y ya era de media noche.

    Caminaba por la playa, sin llamar el motivo de mi búsqueda. Hacia frío cada vez que bajaba hacía la playa, mis pies estaban tocando la arena húmeda, pero no aún el agua.
    Mis ojos divisaron una sombra que se movió a una velocidad asombrosa. Me costó divisar aquella sombra en la penumbra.
    -¿Quién anda ahí?-Comencé a asustarme, pero trataba con todas mis fuerzas disimularla, pensando que podría se un borracho o cualquier cosa-¿Inuyasha?-


    Me acerque a una roca. Estaba expectante, asustada. Caminaba lentamente viendo aquella sombra que a veces divisaba con dificultad. Se parecía a mis primeras visiones que tuve con Inuyasha. Un encuentro con un Inuyasha diferente. Todo ocurría en el bosque, pero sé que algo cambió en mi predicción.

    Me acerque más a las rocas, tocando una de ellas con mi mano trémula y helada. Pude ver un bulto allí. Me preguntaba ¿Cómo podía acercarme si estaba atemorizada? De inmediato pegue un grito al ver la figura imponente y seria de Inuyasha. Retrocedí unos pasos con mi mano en el corazón que palpitaba a mil por hora.
    Estaba sentado en la roca con un brazo apoyado en su rodilla, con sus ceños fruncidos y su rostro crispado.
    -¿Qué haces aquí?-Su voz era fría, poco amigable. Notoriamente estaba de mal humor así de repente.
    No respondí a su pregunta. Me quede mirando su cambio algo asombrada. Las orejas de perro que tenía en su cabeza, sus colmillos, sus garras y sus profundos ojos dorados más oscuros de lo usual, provocándome un poco de miedo.

    -Un Hanyou…-susurre, mirando la luna que iluminaba esta noche. Todo encajaba.
    -Si te da miedo mejor márchate-Farfullo con voz hosca y frustrada. Observe sus ojos profundos e impávidos
    -¿Te desagrada que te vean así?-Le pregunte, no en voz alta, si no en mis pensamientos.
    -sí-Respondió tajante
    -Pero tú no debes disgustarte conmigo-Lo mire con ojos triste por su desconfianza. Bueno yo también desconfiaba de él, estábamos a mano
    -¿Por qué no? Ni siquiera te gusta-miro hacia el mar con los labios fruncidos
    -Mentira-rectifique- ya te había visto así anteriormente y no me producirte miedo alguno. Mi mayor miedo es que te pase algo…
    -O que te haga algo ¿no?-Me hablo en voz alta. Guarde silencio-Para que evitemos eso, aléjate de mi-espetó
    -Idiota-sisee-No lo haré aunque quieras-asegure-No te tengo miedo. Se que eres buena persona y no me harías daño-

    El aludido estaba muy a la defensiva, no dejaba que me acercara, me miraba engorroso, mostrando sus colmillos para infundirme miedo y escapar-Escúchame…-Trague saliva nerviosa-Yo…no puedo dejarte solo, no soportaría la idea de estar lejos de ti ahora. No me importa tu apariencia, en lo absoluto. Es cierto que he visto una visión, en donde tú me atacabas, pero eso no quiere decir nada para mi-Él río y en sus labios se formo una media sonrisa.
    -No seas mentirosa. Claro que te provoco miedo. Es verdad que puedo matarte, incluso lo pensé, ya que no te soportaba y tampoco soportaba la idea de protegerte-declaro-Eras una chiquilla insoportable que iba caminando en la vida sin saber nada aún de su propia realidad, eso me provocaba más ira y ganas de decirte toda la verdad de una vez. Te estuve siguiendo unos meses antes de entrar al colegio y te odie. Llegue al maldito colegio, eludiendo a todos, sobre todo a ti, pero era inevitable no estar cerca de ti. Creo que me doy cuenta de los errores que cometí al odiarte y ahora me odio a mi mismo. Mis deseos de protegerte se hicieron más fuertes, eso me perturbe. Cuando te vi por primera vez con mukotsu me dije: no importa que la mate. Pero algo me impulso a rescatarte y de inmediato vi el rostro de mi padre diciéndome que debía arriesgar mi propia vida por ti.
    -Sabes que yo nunca, cuando supe la verdad, te dije que me protegieras, tu no estabas obligado-aclare, portándome seria e impertérrita a toda su confesión.
    -Era demasiado tarde-rectifico-Tu ya me gustabas, por tal razón que daría mi vida por ti, más no dejaba de temer que estuvieras en peligro por mi culpa, ya que a veces al convertirme en lo que soy pierdo el control y me convierto en un ser más endemoniado-Hacia presión en sus manos entrelazada por la frustración.
    -Como ya te dije-Toque sus manos crispadas-mis visiones cambian cuando la persona lo desea de verdad. Mi temor es que algo te pase a ti, sin importar mi situación. Yo he sido una molestia para ti y creo que no merezco ser protegida por ti-mi mano que estaba apoyada en las suyas ahora más laxas se deslizaron hasta separarse de ellas unos centímetros y una de esas manos la tomo con urgencia, jalando de ella para sentir su otro brazo libro en mi espalda
    -¿No te molesta que sea así?-pregunto, apoyando su barbilla en su mentón-¿Me perdonas por ser un idiota?
    -Eres idiota-Me reí junto con él, sintiendo la calidez de su cuerpo, mientras ese frío invernal desaparecía por aquel amor de invierno

    -Gracias-dicho esto esbozo una sonrisa satisfactoria, acercándome más a su cuerpo.

    “No te abandonare nunca. Lo prometo”
     
  6.  
    ~Sunzure Russo~

    ~Sunzure Russo~ Fanático

    Capricornio
    Miembro desde:
    21 Junio 2006
    Mensajes:
    1,167
    Pluma de
    Escritora
    Re: Winter Love

    hay que cuchi!!!!!!!!!!!!!!!!!!^^
    inu cabeza de tapara¬¬......
    como se te ocurre pensar eso....
    bueno, inu tenia que ser!!! jajajaja!!!
    llego el abuelo!....y kag no lo recibio con mucho cariño que digamos!!!
    jajajaja....
    espero la prox!!!

    chaitox!!!!!!!!!!
     
  7.  
    Maritza Chan

    Maritza Chan Fanático

    Sagitario
    Miembro desde:
    30 Agosto 2005
    Mensajes:
    1,305
    Re: Winter Love

    Jajajaja... Bueno mi Inu y Kagome
    son asi pelean y después están
    como si nada, que lindo lo que
    dijo mi Inu *-*, falto el beso xD
    continua adelante, cuidate Bela.
     
  8.  
    IlEiN LoVe

    IlEiN LoVe Usuario común

    Aries
    Miembro desde:
    1 Enero 2007
    Mensajes:
    473
    Pluma de
    Escritora
    Re: Winter Love

    hola!
    hay que sweet!!!
    pero la verdad este inu a veces se pasa de baboso!
    umm me gusta como estan llevando la relacion
    apesar de todo jejeje es que sin las peleas no seria divertido
    jajajaja :p espero lo sigas pronto
    y me disculpo por no aber venido antes pero
    estube en parciales y vi que lo habais continuado pero
    no pude leerlo antes por lo mismo
    espero lo continues pronto!
    cuidate mucho!
    chao
     
  9.  
    chidori03

    chidori03 Fanático

    Leo
    Miembro desde:
    25 Febrero 2006
    Mensajes:
    1,040
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Winter Love
    Total de capítulos:
    21
     
    Palabras:
    8493
    Re: Winter Love

    Capitulo XXII:

    Frustración

    -Maldición-siseo molesto. Miro a ambos lados, volteo sin encontrar nada-Maldición-volvió a repetir y sopeso la situación. Su espada en mano, preparada para cualquier ataque o defensa, no obstante lo complicado de esta situación, era, que no sabía donde demonios estaba su enemigo.
    Estaba en la playa, a orillas del mar. Estar allí le daba ventaja, sin embargo, si no lo aceraba hasta la orilla nunca lo lograría.
    Sabía perfectamente que esos invisibles no eran unos idiotas, para su mala suerte, ya que ni locos se acercaría hasta la orilla, al saber que tenían desventaja en ella. ¿Qué demonios hacer?
    “Demonios piensa”

    -¡Inuyasha!-La voz de una chica interrumpió toda cavilación. Kagome se acerco a él jadeando-¿Por qué demonios no me dijiste que te habían seguido?-Replico molesta, mientras buscaba al causante de tantos agujeros en la playa.
    -¿Para qué? Te hubieras puesto insoportable-se burlo-Además….¿Quién los detiene?-
    -Eres un caso perdido-susurro con un suspiro exasperado
    -Calla y busca-ordeno ahora concentrándose en su objetivo
    -ok, ok-respondí condescendiente.


    Cerré mis ojos para concentrarme aún mejor, y por vez primera, sentí que el péndulo de mi cuello palpitaba, ayudándome a encontrar al objetivo a derrotar. No era necesario ver, podía sentir la corriente de aire, la presencia de cualquier ser inverosímil o no.
    Mi péndulo indico la dirección del enemigo. Al abrirlos lo penetre con mi mirada. La imagen era tan nítida al igual que cada uno de sus movimientos.


    -Por ahí-Apunte totalmente segura, viéndolos a unos cuantos metros, alejándose de la playa-No dejes que se aleje de la orilla, desea escapar. Si te acercas mucho intentara derribarte, trata de no acercarte mucho a él-
    -Tu sólo observa-Dicho esto confianzudo, salto, cayendo a los mismos metros que se encontraba el elfo invisible. Agito su espada con el fin de cortarlo. Estaban muy cerca de la orilla.

    El plan de inuyasha se llevo a cabo en el mismo instante que lo alcanzó. Lo acorraló ahí mismo, haciéndolo retroceder hacia el agua.
    Llevo a cabo un Kaze no kizu, que fue esquivado fácilmente por su oponente, pero callo de inmediato, dándole a su contrincante una sonrisa satisfactoria. Una vez que toco el mar, inuyasha le propino un golpe en la cara derribándolo. Luego le dio vuelo a su espada y le propino un ataque más certero y más fuerte que el usual.

    Esa sombra transparente que se veía claramente gracias al mar, desapareció como una burbuja, dejando al vencedor empapado.

    Corrí nuevamente hacia él para ver como se encontraba. Cuando llegue hacia donde él se ubicaba:

    -¿Estás bien?-le pregunte jadeante por la corrida. Él asintió al tiempo que su espada desaparecía de sus manos.
    -Fue… más fácil-Susurro en voz alta, sabiendo que ese susurro era para él. Comprendí de inmediato el sentido de sus palabras.

    Comenzamos a caminar lentamente por la orilla de la playa, cuando mis deducciones Me decían, que, si no fuera por que lo acorralo en el mar, aún seria un obstáculo difícil de derrotar.
    Y mi afirmación era esta: Mi ayuda era escasa.

    Durante el trayecto no articulo ni una sola palabra. Inmerso a sus cavilaciones se encontraba, aún con sus nudillos apretados y sus labios bruscamente fruncidos. De vez en cuando giraba mi rostro para ver su rostro, más a sus ojos pensativos y calculadores, pero a la vez dolorosos, frustrados. Mi estomago empezó a encogerse y sentí la necesidad de ayudarlo, me urgía, pero ¿Cómo ayudarlo?

    Hoy era lunes por la mañana.
    Fuimos a casa de mi abuela para preparar el bolso, ya que era el momento de partir a nuestras respectivas casas.
    Me despedí de mi abuela con un abrazo. Mando saludos a mi padre y mi primo. Luego nos aconsejo

    -Den lo mejor de ustedes y no dejen que sus próximas generaciones sufran lo mismo. Ustedes deben terminar de poner los puntos sobre las I-Aconsejo con voz pasiva-Inuyasha-Lo llamo- No te frustres. No es el momento, no a estas alturas. Y tu Kagome-Dirigió su mirada seria a mí-Haz que tu madre se sienta feliz y cumplas sus deseos-sonrió al decir esto último que no lo comprendí completamente
    -¿Qué deseos?-Pregunte dubitativa
    -Cosas que vio mi hija para tu futuro-Su sonrisa se ancho, dejando todo como un acertijo que me perturbo durante todo el camino.


    Esas dos horas que se me hicieron realmente eternas, Inuyasha no le dirigió la palabra a nadie, ni siquiera a mi, más se limitaba a responder “mmm” “si” o “Luego”

    ***

    -¿Iras al colegio mañana?-Le pregunte sabiendo su respuesta, pero quería estar segura por si a caso.
    -Sí-Afirmo algo cortante e hizo que me molestara. Me pare frente a él para detener el paso

    -¿Te ocurre algo?-le pregunte alzando la ceja, buscando respuestas
    -No-Me volvió a responder tajante
    -¿Entonces por que estas así?-
    -¿Así como?-Frunció el ceño sin entender ¿Me creía tonta?

    -No soy tonta-Me defendí
    -No, no lo eres-Acepto aún sin entender
    -¿Entonces me dirás que es lo que te perturba?-Inste

    -Ah-exclamo, sabiendo a lo que iba-Nada importante que puedas saber-
    -Para mi todo es importante-le contradije, instándolo para que me dijera la verdad y así poder llevar a cabo mis suposiciones.

    -Pero esto no lo es-se corrió a un lado para seguir caminando e ignorándome.
    -¿Me vas a seguir ignorando?-Le grite engorrosa. No me moví de donde estaba.

    -¿Es lo que quieres?-Me pregunto sin voltearse.
    -Sí-Fue un impulso, que de inmediato quise corregirlo, mas no me dejo hacerlo, porque fue quien hablo primero.

    -Así será-Dejó mi mochila en el suelo y de un salto desapareció, dejándome con las palabras en la boca.
    -Que se abra creído-Farfulle al tiempo que me acercaba a mi mochila y la tomaba con brusquedad.

    -¿Para quién son esas blasfemias?-Pregunto la voz de un chico. Al voltear me encontré con koga-¿a cariño?-
    -¿Qué te dije sobre los sobrenombres?-le recordé con voz laxa.

    -No puedo evitar no llamarte de esa manera-me respondió con voz dulce, mientras tomaba mi barbilla con una de sus manos-¿No podemos ser más que simples enemigos?-
    -Se ve difícil-espete sin remordimiento-Lo siento mucho…
    -Deja conquistarte-me pidió suplicante. Me sorprendió verlo así.

    ¿Darle una oportunidad, si mi corazón ya había elegido a la persona equivocada?
    -Es muy difícil-asevere nuevamente predispuesta a marcharme, pero me lo impidió tomándome de los hombros
    -Sólo amigos-Me rogó. Fruncí los labios. Odiaba hacerle mal a la gente y menos a koga, quien me producía algo extraño dentro de mí.
    -Ok, pero sólo amigos-sonreí poco convencida de mis palabra, pero era sólo para hacerlo feliz nada más, nada más.
    Sus ojos brillaron de la emoción, queriendo decir que tendría una oportunidad para que fuéramos más que simples amigo, a lo que yo lo encontraba imposible.
    -¿Te parece tomar algo por ahí?-me guiño el ojo, tratando de convérseme. Negué con la cabeza para advertirle que no se hiciera ilusiones
    -Nos vemos mañana en el colegio-Con voz lánguida me marche directo a mi casa.

    ***
    Habían dos partes: Una mala y una buena; una de ellas era estar junto con koga. Aclaro. No fue ni buena ni mala. Siento que la más mala fue pelear con Inuyasha, ahora no se como pedirle disculpas, ya que es muy rencoroso.

    Después de una hora de viaje llegue a mi casa totalmente exhausta.
    Entre anunciando mi llegada.

    -Llegue-acto seguido entre a la casa. Estaba calida, gracias a la chimenea que se encontraba en el amplio living.
    Afuera, el cielo tenía cara de llover a cantaros.
    Cuando llegue al living, Miroku me abrazo con energía hasta no sentir mis pies en el suelo; mi padre que también me recibió, pero denote en él un deje de nerviosismo. Al ver con mis orbes el resultado de su extraña reacción, fruncí el entrecejo, sin comprender del por qué una mujer se encontraba sentada en el sillón; pero no debía devanarme tanto los sesos para comprender que no era tan solo una amiga.
    Se perfectamente que esos días de ausencia me perdí de algo, algo muy importante que no me dejaría dormir hoy placidamente como había pensado.

    -Tranquila-bisbiseo Miroku cerca de mi oído con un tono de voz grácil, dándome entender a lo que venía todo esto y mire a la mujer con escepticismo
    -Hija-me llamo mi padre acelerado y sumamente nervioso
    -¿Dime?-

    -Te presento a risa-Se formo una prolongada pausa-¿Cómo decírtelo?-suspiro frustrado-es difícil.
    -Claro que no-interrumpí cortante-es fácil deducir que es tu novia ¿No papá?-Le pregunte con un hilo de voz, mostrando notoramiente mi dolor


    Estúpida”

    Asintió cabizbajo, dejándome aún más triste y culpable. La mujer, Risa se encontraba aún sentada, también cabizbaja y creo que culpable, tal vez más que yo.

    “Él se merece a alguien mejor, alguien mejor que mamá”

    -Estoy cansada-se me quebró la voz en una ocasión-Permiso -Me fui corriendo hacia las escaleras con el fleco de mi cabello ocultando cada expresión de mi rostro totalmente lívido.

    “! Pero que egoísta eres!”



    Esa noche fue totalmente tranquila, ya que ni mi padre, ni Miroku entraron a mi habitación. Comprendieron que necesitaba pensarlo y asimilarlo, no obstante nadie podía batallar con mi insomnio. Absorta totalmente en mis cavilaciones a altas horas de la madrugada, por fin sentí mis parpados pesados, entregándome totalmente a los brazos de Morfeo.

    El despertador sonó como habitualmente lo hacía cada día en la mañana para ir al colegio. Esta mañana fue todo lo contrario, no lo sentí y todo por quedarme en vela hasta tarde. Si mi primo no me hubiera despertado, pasaría de largo.
    Papá se había ido bien temprano, ya que tenía mucho trabajo pendiente.

    -Otro día de lluvia-Musite más para mi que la persona que estaba acompañándome en el desayuno.

    -Me impresiona que adivines siempre el tiempo, bueno no lo digo sólo por el tiempo-Espetó. Él había escuchado lo que susurre, pero me encogí de hombros sin saber la razón-¿No tienes curiosidad de ser meteoróloga?

    -Para nada, ni siquiera me llama la atención-Dicho esto me trague el último pedazo de pan que quedaba en mi plato y me levante –Con tan sólo ver el cielo puedes deducir el clima ¿no?-Tome mi mochila que se encontraba en el suelo-Nos vemos-Hice un ademán de despedida y me retire rápidamente.

    No me sorprendí cuando mis ojos divisaron a un chico esperándome en la parada del autobús. Sin decir nada me pare a su lado, mirando hacia al frente, sin cruzar miradas con él.

    -No quise perturbar a tu primo-Comenzó a decir. Sin voltear mi rostro asentí.

    -No te preocupes-añadí tajante. Segundos después escuche un suspiro proveniente de mi acompañante, pero seguí sin voltear a verlo, estaba realmente molesta con él.



    Hace unos minutos subimos al autobús. Inuyasha se encontraba inquieto, moviendo su pie impaciente, tenía sus labios ligeramente fruncidos, a veces tamborileaba sus dedos en sus piernas y miraba a todas partes.

    -Tortuga-susurro apretando sus dientes fuertemente.
    -Creo que es mi culpa-intervine sus pensamientos. Con brusquedad ladeo el rostro mirándome con las cejas alzadas
    -No. Fui yo, yo decidí subirme a…esto-
    -Puedes bajarte y correr-agregue. Era más fácil así ¿no?

    Negó con la cabeza diciendo que todo estaba bien así y zanjo el tema.

    -Ah-recordó-He de pedirte disculpa-
    -¿Eh?-Lo mire dubitativa
    -Por lo de ayer-Me volvió a recordar algo incomodo-Disculpa-
    -Ah, eso-mire hacia la ventana seria-Se que tienes razones. No te preocupes-
    -Gracias-


    El timbre había tocado en el mismo instante de nuestra llegada. Nos habíamos salvado por un pelo.

    ***
    -¿Que bicho te pico?-Pregunto mi buena amiga Rin, quien se encontraba sentada en el césped junto conmigo. Yo fruncí el ceño por lo dicho.
    -Nada. No me ha picado nada-
    -No seas tonta ¿Con Taisho?-
    -Mmmm…con él nada-asegure

    -Pero es que te mira con unos ojos-Atisbo en mi mirada, queriendo saber más. Yo suspire por lo dicho y aclare.
    -No me pasa nada con él. No quiero que me cargues más con ese tipo, por favor y deja de mirarme así-
    -¿Así como? Si él es el que te mira raro. Te mira con unos ojos…-Junto sus dos manos con ojos y voz ilusionados.
    -No imagines estupideces-Dije airada, mirando mis manos inquietas-Ahora me viene con esto-Pensé con un suspiro resignado.
    -¿Las molesto señoritas?-Se escucho una voz pastosa y molesta. Levante mi mentón para que mis orbes pudieran reconocer al personaje frente a nosotras, y precisamente no era Inuyasha quien yo me imaginaba.
    -¿Qué haces aquí?-Pregunte estupefacta por su aparición. Hace un buen tiempo que desapareció del colegio, y ahora de la nada aparece frente a mis ojos con esa sonrisa malévola y sardónica.
    -Yo me esperaba un “Te echaba de menos mukotsu” ¿No? Lo mínimo-

    -¿Qué haces aquí?-Pregunte, levantándome rápidamente
    -Rin-Dirigió su mirada a la de mi amiga, también en shok-Por que no vas a darte una vuelta, mientras hablo con tu amiga-Me dirigió una sonrisa lasciva.

    Rin me miro con ojos cauteloso y preocupado, al mismo tiempo que asentía para que se retirara. Se fue corriendo, pero no para escaparse, si no para pedir ayuda.
    Mire por largo rato como mi amiga desaparecía entre los árboles y el edificio, más mi temor pedía a gritos que corriera a acompañar a mi amiga. No quería voltear mi rostro para encontrarme con aquellos ojos negros como el satén llenos de deseo y maldad. Sentí su respiración asquerosa cerca de mi rostro y su cuerpo apegado al mió.

    -Tienes que acompañarme-Me ordeno su voz pastosa, al tiempo que tomaba mi muñeca y me jalaba hacía él.
    -Yo…yo no voy a…ningún….lado-Tartamudee aterrada, tratando de safarme de su agarre-Su….suéltame-
    -Te lo dije-Recordó-Tú no te me escapas-Insto-Eres una chica muy valiosa, por tanto he de secuestrarte-Su sonrisa se ancho aún más. Caminamos un tanto, pero sin salir del colegio. No se lo que pretendía, ni lo que sus palabras derivaban.

    Cuando nos alejamos de los edificios, llegamos detrás del gimnasio, donde se encontraba su compañero, a quien también hace tiempo no veía. Naraku.

    -¡Tanto tiempo!-Grito irónicamente.

    Frene en seco aunque sabía que no serviría, ya que Mukotsu tenía más fuerza que yo, por ende me jalaba hacia Naraku.

    Me acerco a él, quien no me toco, sólo me estudio con su mirada penetrante.

    -Es una chica ordinaria-murmuro desconcertado
    -Lo se-Mukotsu se encogió de hombro sin importarle el asunto-Pero fue lo que pidieron, Naraku-
    -Lo se. Mi hermanastro cada vez esta más loco-Río-Aunque esta chica es tan tentativa-Me miro lascivamente.

    ¿De que hablaban? Estaba confundida, aterrada.

    Mukotsu me soltó tan bruscamente que caí al suelo de bruces. Me senté adolorida y fije mi mirada a los dos personajes que iban a secuestrarme. Los dos tenían una sonrisa maliciosa. Algo tramaban.
    De pronto, detrás de ellos se divisaron dos cuerpos invisibles, corpulentos y de gran tamaño. Abrí mis ojos por la impresión.
    -¿Cómo ustedes…?-

    -¿Sabemos?-Interrumpió el de ojos carmesí- Simple. Somos los responsable de que ellos se muevan y reciban ordenes de aniquilarte- Sonrió Naraku, quien tenía en su mano una extraña esfera negra.
    -Imposible, onigumo…-
    -Él nos dio ordenes de perseguirte, dulzura. Si bien Onigumo creo esos elfos, yo y Mukotsu los controlamos. Es fácil, ya que saben obedecer rápidamente. Tienen un pequeño mecanismo hecho para ti, kagome, para matarte-
    -¿Dónde está?-Pregunte cortante, tratando que todo esto no me inmutara

    -¿Quién? ¿Onigumo?-Sonrió, apretando la perla contra sus manos-Observándote desde muy lejos. Te manda muchos saludos-
    -Idiota-musite con rencor. Él río por el hecho y dio unos pasos, acercándose a mí
    -Pero bueno. Nuestra misión es matarte, aunque he de admitir que me atraes bastante, pero una orden es una orden-Entorno sus ojos en mi cuerpo-Pero a nadie le hará daño si te toco sólo un poquito-Añadió con picardía.

    Mi labio inferior tembló cuando Mukotsu me agarro de los hombro para que no escapara. Ahogue un grito, pensando una y mil veces en una sola persona.

    Naraku, Mukotsu, Onigumo, ellos eran un asco, y sin duda me vengaría. Es tanto el rencor que no importa si tiene alguna relación conmigo. Estoy cansada de sufrir las consecuencias.
    Como quiero seguir siendo la Kagome de antes, la ignorante de todo que ocurría a su alrededor, que tan sólo tenía visiones y no sabía el por qué; esa Kagome quería ser.

    “Tranquila”

    Un susurro como el propio viento que corría en estos momentos, escudriñó mi mente. No me sorprendió. Sí me alegro.
    Inuyasha se encontraba parado frente a mí, interponiéndose entre Naraku y yo.

    -Aléjate-Ordeno con voz despectiva y ojos gélidos. Su mandíbula totalmente crispada, su cuerpo tenso, sus puños al igual crispado se encontraban, queriendo propinarle un fuerte golpe en su apestosa cara. Ladeo un poco su rostro hasta la altura de sus hombros para observar a Mukotsu, quien aún me tenía agarrada de los hombros. De un movimiento vertiginoso, Mukotsu se estampó en un árbol algo lejano a nosotros, y de pronto Inuyasha se encontraba de tras mió, no obstante aún se encontraba tenso.
    Buscaba algo con sus ojos urgentemente. Supe de lo que se trataba, por consiguiente apunte con mi dedo, indique a Naraku.

    -Atrás-susurre.

    Desapareció sin decir nada. De repente apareció detrás de Naraku, quien se quedo inmóvil, mirando de tras de si estupefacto.

    Preparado destruyó al primer elfo de un solo ataque, luego el otro se le dificulto más, ya que desapareció.
    Lo busque por todas parte, sabiendo que estaba escondido, pero ¿Dónde?

    -Y yo que creía que su talento era indestructible-Comentó Naraku con su patética sonrisa triunfadora-Miren bien-Aconsejo.
    -¡Kagome!-Él ojidorado me llamo con urgencia, y sus ojos demostraban terror. Mire de tras mió y ahí se encontraba, listo para atacarme.
    Quede estática por la impresión, mis pies no respondían, sentía el terror fluir por mi cuerpo.

    Mi brazo se estampó en la gran mano de este, empujándome hasta un árbol, dejándome grogui.
    Escuche las carcajadas de Naraku y la voz suplicante de Inuyasha, pero se mezclaban tanto con esa molesta risa que no podía escucharlo. Mi cuerpo me dolía, mis ojos no enfocaban bien, se desorbitaba, mis pómulos me pesaban. De repente mi visión se oscureció completamente hasta no ver más nada y caer a la inconciencia.



    Escuche más de una voz en mi mente, suplicándome a que despertara. No quería, porque estaba tan cómoda que quería seguir durmiendo, pero algo en mi pedía que despertara.
    Abrí mis ojos con pesadez y lo primero que vieron mis ojos cafés fue el rostro preocupado de Miroku. Pestañee unos instantes, hasta llegar en si. Me incorpore tan rápido que mi vista se nublo, gracias al mareo, pero pronto lo tuve todo bajo control.


    -¿Miroku?-pregunte para verificar si era él, aunque estuviera en lo cierto
    -¿Quién más?-Me replico-Estaba preocupadísimo cuando supe que te habías caído de las escaleras-Me sorprendió aquello ¿Fue Inuyasha? Tal vez. Por cierto ¿Dónde estaba?
    -Verdad-Mentí, algo adolorida sobre todo la espalda y el estómago-¿Inuyasha?-Pregunte con voz adolorida
    -Se fue hace unos minutos. Él se encargo de llevarte hasta casa, informándome lo ocurrido. Eres bien despistada-Me reprocho molesto-Te podría haber pasado algo, pero si no fuera por Taisho…-

    -Ya, lo siento-
    -Ahora descansa-Sugirió-Te traeré algo de comida ¿Debes de tener hambre no?-Yo asentí, acostándome.
    Estaba fatal.

    -¿Qué horas es?-
    -Las siete-Me respondió-Tu padre llegara tarde hoy, agradece por eso-
    -Gracias-sonreí



    Cerré mis ojos, descanse el cuerpo que adolorido se encontraba en el colchón, también deje reposar mis manos sobre mi vientre cubierto por las sabanas.

    Tenía tanto deseos de saber lo que paso e ¿Inuyasha se encontraba bien? ¿Qué ocurrió después?
    Todo esto me frustra, ya que siento que no soy de mucha utilidad, tan sólo digo una dirección inexacta, porque puede variar. Esos monstruos eran un gran problema. Deseaba ayudar, de verdad.

    Suspire. Había un silencio que parecía eterno, tan sólo se escuchaba mi respiración y mis latidos acompasados de mi débil corazón. De pronto sentí unas pisadas muy cerca de mí ¿Era Miroku? Eso fue lo que me imagine en un principio, cuando sentí una frente helada sobre la mía y me sobresalte. Abrí mis ojos al tiempo que comenzaba a hiperventilar. Iba a gritar cuando unos dedos se posaron en mis labios.


    -No es necesario gritar, ya me aparto-Hizo un amago de apartarse pero se lo impedí, tomándolo de la muñeca. Mi mirada decía más que cualquier palabra. Me regalo una mirada tierna y acercó nuevamente su frente contra la mía y me quede así disfrutando el momento.

    “¿Te encuentras bien?”

    No era necesario hablar, era más cómodo de esa forma

    “A la perfección. Me tenias preocupado ¿Te encuentras bien?”

    “Adolorida pero bien”


    “Me alegro”

    “Yo igual”-Sonreí-¿Me dirás que ocurrió?

    Se tenso cuando le pregunte aquello y sus ojos se endurecieron. Se apartó de mí y me miro con ojos gélidos.

    “Al final no logre nada. Naraku escapo y ese invisible desapareció junto con él”

    Su frustración. Estaba claro que era lo que sentía, lo tenía dibujado perfectamente en su cara, y mi resolución llego a aquella conclusión.


    “Inuyasha…¿Puedes sacar algo de aquel alajero que se encuentra en mi mesa de noche?”-Mire el curioso cofre de madera mientras le preguntaba. Inuyasha obedeció y abrió el alajero, sacando el único objeto que se guardaba en ella. Alzo la ceja confundido.

    “Aquello….”-Añadí antes de que el preguntara cualquier cosa-“Aquello es un péndulo. Lo ha llevado mi familia por generaciones y es de gran utilidad sobre todo si quieres ver a esos invisibles que te es imposible divisar. Para mi no es nada, sólo me brinda ayuda, pero a ti te servirá y es por aquella razón que ahora te pertenece, por consiguiente, mañana después de clases iremos al bosque y te enseñare como verlos”

    Miro el péndulo que colgaba de una fina cadena plateada. Una sonrisa se formo en sus labios, satisfecho y entusiasmado

    “Perfecto”

    -Kagome….-Se escucho a miroku llamar


    -Ay no-Murmure complicada. Miroku estaba abriendo la puerta. Mire a Inuyasha que sonreía y luego desaparecía de la nada.

    -¿Aún tienes la luz apagada? ¿Eres vampiro o qué?-Suspire aliviada. Luego prendí la lámpara que se encontraba en mi mesa de noche con algo de aturdimiento.



    Por fin un día sin nubes, más no dejaba de hacer frío.

    Estaba oscureciendo y en el bosque implicaba más peligro, no obstante eso era lo que buscaba para este entrenamiento, peligro.

    Camine sola dos largas horas. Nuestro punto de encuentro era el árbol sagrado, donde lo vi por primera vez. Mis visiones eran aún más frecuentes, trataba de una batalla. Sólo podía ver a Onigumo y a otras personas desconocidas, pero siento que una de ella era tan importante que podría haber dado mi vida.

    En la copa del árbol sagrado se encontraba él contemplando el cielo por fin estrellado. Estaba tan absorto en sus pensamientos que no se dio cuenta de mi presencia. Cuando me acerque a las grandes raíces del árbol le dije:


    -La noche es perfecta ¿No crees?-Miro hacia abajo con las cejas fruncidas por no haberme detectado a tiempo. No subí el rostro, deje cerrados mis ojos, sintiendo el aire en mis mejillas y el áspero tronco en mis manos.

    De inmediato se encontraba de tras mió, esperándome.

    -Comencemos-

    Me acerque a él y estire mi mano para recibir el péndulo que reposaba en el bolsillo izquierdo del aludido. Saco el péndulo y me lo entrego. Entrelace la cadena entre mis dedo para que se viera bien el objeto carmesí.

    -La noche tiene mil ojos, el día uno sólo-Susurre con parsimonia. Mire la manta oscura hilarante.

    -¿De que hablas?-Farfullo con frigidez e impaciencia

    -Las noches son más interesante que los días-Me encogí de hombros sin restarle importancia-No es algo muy fácil de conseguir, por tanto he de pedirte que estés en tu forma original-Frunció los labios y vacilo, pero luego de unos instante obedeció –Gracias-Musite-Ahora quiero que escuches-Le pedí con acritud-Se que estas frustrado por lo que ha ocurrido y tu falla en el rastreo, ya que ellos tiene la ventaja de ser invisibles. Se burlan de ti, por tanto lo complicado de este asunto es verlo, ya que necesitas que tu mente este relajada y no presionada, es decir, laxa-Mientras le decía esto, él obedecía pero con algo de escepticismo-E intenta dibujar en tu mente un objeto que quieras encontrar dentro de este bosque, pero lo más difícil es saber en que ubicación esta, ya que debes ver el aura en él-
    -Ey-Replico con el ceño fruncido sin abrir sus ojos-¿Cómo demonios quiere que los vea?-
    -Si lo encuentra difícil, ríndete-Bufo y volvió a concentrarse-Por algo te pase el péndulo ¿No crees? Sólo confía-Lo reprendí-Si sigues con ese pensamiento de que esto es una ridiculez no llegaras a ninguna parte-Bufo nuevamente y crispo sus nudillos-Relájate-
    -¡Lo se!-Farfullo impaciente. Volvió a relajarse y apretó el péndulo color carmesí entre su mano.

    “¿Qué vez?”

    “Nada”

    “No sisees. Lo vez ¿Qué vez?”

    “Te dije que nada”

    -“Si sigues así…”


    “! Cállate!”

    “No te comportes como un infante ¿Quieres? sigue explorando”

    “Maldición. Si pudiera lo estaría viendo”

    -Imposible-Asevero con desconcierto. Estaba volviéndose loco, hasta su subconsciente le hablaba

    -Nada es imposible. Anda, una vez más

    Volvió a cerrarlos. Ahora estaba más concentrado, pero aún se le notaba el desconcierto en su rostro. Su mano estaba más relaja, por tanto la cadena colgaba entre sus dedos.

    Cuando lo vi fruncir los labios supe de inmediato que se estaba impacientando.

    -No te vayas a rendir, sigue intentando-

    Suspiro y volvió hacerlo.

    -Tranquilo, tranquilo-pensó-Imagina algo que podría estar en el bosque. Algo, algo…

    “Inuyasha…”

    Esta vez no lo llamaba su subconsciente, esta voz era distinta, llena de sarcasmo.

    “¿Quién eres?”


    “Corre y me encontraras”

    -Silencio-siseo en voz alta

    “La esperanza es lo último que has de perder, pero me encargare de que no sea así.
    Encuéntrame, estoy lejos, pero a la vez muy cerca”

    Volteo con urgencia, ya que su escutrinio le hizo descubrir algo que creía inverosímil.
    Con una rapidez vertiginosa la desenvaino su espada y Ataco.
    Un estallido se oyó, al igual que el humo apareció, derribando unos cuanto árboles. A unos metros de distancia se encontraba la persona que buscaba Inuyasha.


    -¿Cómo diablos pudiste…?-
    -Con esto-Mostró la esfera negra. Ya sabemos de quien hablo, naraku.

    No pude saber con certeza si mi estupor era debido a que Inuyasha haya visto a Naraku, o que Naraku se encontraba entre nosotros.

    -No se sorprendan, esta perla hace de todo. Ella fue quien creo a esos elfos y queme permitiera entrar en tu mente Inuyasha-
    -¿Qué diablos es esto?-
    -La perla de las cuatro almas, así es como se llama. Una perla para los que desean matar a las basuras que habitan este mundo y en primera instancia están ustedes-

    -Chiste repetido sale podrido-Dijo Inuyasha con sarcasmo.

    De un salto se dirigió a Naraku, pero algo invisible interrumpió su cercanía hacia la persona que dominaba al elfo.

    En los primeros días le va dificultar mucho concentrarse para cumplir su objetivo.

    Su contrincante lo derribo, arrastrándose por el suelo, dejando un agujero en él. Se levanto con dificultad, apoyándose en su espada. No miro a un punto fijo. No los veía, pero sí ponía en práctica lo que le enseño Kagome hace unos minutos, él podría lograrlo.

    Cerró sus ojos, confiando en si mismo. Hizo todo paso a paso, más no lo pudo ver a la perfección, sólo vio una silueta algo difuminada, pero sabía perfectamente en que ubicación se encontraba. Sentía el poder de la cadena fluir en él, este le indicaba el camino.

    Corrió hacia su blanco y lo corto por la mitad; luego se dirigió hacia el verdadero blanco y agito su espada, listo para cortarlo, pero fallo una vez que Naraku desapareció, apareciendo frente a mis ojos. Sus orbes dorados se abrieron como dos enormes platos, espantados.
    -Tú eres la causante de todos nuestros problemas junto con tu familia. Ahora se a lo que se refería Onigumo con que eres muy amenaza para nuestros planes-Estiro sus manos para tomarme de los hombros. Reprimí un grito y aterrada cerré mis ojos, esperando lo que viniese.

    No ocurrió nada. Deseaba abrir mis ojos, por tanto mi curiosidad me gano y abrí mis ojos. Alguien que no era Inuyasha se interpuso entre nosotros, empujando lejos a Naraku, quien aterrizaba sin problemas.

    -Maldición-Farfullo

    Cuando mi vista se aclaro un poco más, pude ver a Seshomaru delante mió, mirando a Naraku, impertérrito con su espada, tensseiga en su mano derecha.
    Inuyasha y su hermano lo acorralaron, alejándolo todo lo que podían de mí.

    -¿Dónde está onigumo?-Quiso saber seshomaru
    -Oh, eso es una información confidencial-Sonrió-Pero no se preocupen, pronto lo verán. He de retirarme. Debo infórmale lo que este estorbo hizo-Me miro con desdén, y luego, antes de que Inuyasha lo atacara desapareció

    Suspire aliviada al tiempo que me levantaba para dirigirme hacia Inuyasha que se encontraba mirando hacia donde Naraku había desaparecido. Su rostro estaba tranquilo, satisfecho. Si bien no puedo detener a Naraku, sí pudo ver al monstruo.

    Los dos hermanos guardaron sus espadas. Su hermano menor le mando una mirada al mayor, quien le correspondía; luego se acerco a mí lentamente y me pregunto:

    -¿Estás bien?-Su voz era dulce, no de esa típica frustración después de cada combate.

    -Lo lograste-Sonreí estridentemente y alargue mi mano para ser estrechada con la de él

    -Gracias-susurro

    Cuando toque su mano grande y fuerte sentí una carga eléctrica. Estoy segura que él también la sintió. Algo me dijo que no la aparta y la convirtiera en un abrazo, pero simplemente mi orgullo se negaba a hacerlo… ¿Pero que importaba? No le hice caso y seguí mi impulso, lo que mi corazón pedía con tanta urgencia: Ser rodeada por sus brazos fuertes y protectores. Me correspondió con el mismo cariño con que yo lo hice, apegándome más a su cuerpo. Su barbilla se apoyo en mi mentón y así nos quedamos por largos minutos, hasta que él se separo lentamente de mí.
    Me acarició los pómulos y las mejillas, sin quitar su mirada de la mía.


    -¿Qué debo hacer en momentos así?-Me regalo una media sonrisa, mientras me miraba con dulzura.

    -Tampoco se…-
    -Seguiré mi impulso-Me interrumpió
    -Tonto impulso-Susurre. Él me regalo una sonrisa como respuesta. Después de esto descubrí lo que su impulso le pedía: Un beso. Mis mejillas se encendieron con tanta intensidad como otras veces y por fin ese anhelado momento apareció de la nada. Sus labios atraparon los míos de una forma lenta y apasionada. Cada movimiento era exquisito, su sabor especial y sobre todo el cariño con que me besaba, al mismo tiempo que su mano se deslizaba lenta y delicadamente desde mi mejilla hasta mi cuello y se detuvo para acariciarlo. Su otra mano se encontraba en mi cintura para asegurarse que nuestros cuerpos no se separan ni un milímetro. ¿Las mías? Se encontraban tímidamente en sus hombros, trémulas. Me maree al mismo tiempo que me sentí desfallecer.
    Sus labios se despegaron lentamente de los míos, sin separar mi cuerpo del suyo. Me miro con ojos hilarantes y una sonrisa dibujada en sus labios.

    -Jamás pensé que decir cuanto te gusta a una persona fuera tan difícil-Frunció los labios divertido


    -Te comprendo-Sonreí como idiota, pero eso no me importo, ya que los dos lo éramos en ese momento.
    Me acorde de mi rescatador y me separe de él algo avergonzada, pero al fijarme bien, seshomaru ya no se encontraba e Inuyasha río al darse cuenta de mi inquietud
    -Se fue en el momento en que me abrazaste-Me sonroje aún más cuando dijo eso. Era embarazoso.

    Sus labios se acercaron a mi oído, susurrándome:

    -He de confesarte que me tienes loco, pequeña-Reí bajito. Me puse de puntillas para posar mis labios en su mejilla al mismo tiempo que le susurre:
    -Te quiero-
    -Igual yo-

    …Continuara…
    ----------------------------------------
    o.o tantoooo??
    xDD no me di cuenta que escribi 13 pag en word OMG oOo

    Pos pos gracias por los post.

    bien........... xDD
    pos vnegoo a avisar que esta vez me demorare con la conti por ciertos motivos:
    el primero es porque tengo la pruebas globales toda esta semana y un lunes. La semana pasada tbn tuve epro no hago conti los dia de semana aprovecho fin de semana pero no e podido y emm luego de que terminen voy a estar ocupada en comprar por que el 7 de julio me voy de gira de estudio asique pos durante esas semanas no podre poner conti y emm xDD
    tratare de hacerlo pero no aseguro nada
    eso ess
    me voy
    bye
    atte.chidori03
     
  10.  
    ~Sunzure Russo~

    ~Sunzure Russo~ Fanático

    Capricornio
    Miembro desde:
    21 Junio 2006
    Mensajes:
    1,167
    Pluma de
    Escritora
    Re: Winter Love

    demasiado bueno para ser cierto!!!!!!!
    ahhhhhhhhhhhh
    ahhhhhhhhhhh+ahhhhhhhhhhhhhha
    ahhhhhhhhhhhhhhhhhh´+aaahhhhhhhhhhhhh
    OH MY GOOD!!!!!!!
    ZOQUILIO!!!!!!!!!!!!!AUXILIO!!!!!!!!!!!1
    QUE ME DA ALGO!!!!!!
    VOY A ENTRAR EN COMA!!!!!!!!!!!!EN ESTADO VEGETAL!!!!!!!!!!!!
    NO LO PUEDO CREERRRRR!!!!!!!!!!!
    todavia mi mente no asimila lo que acaba de leer!!!!!!!!
    DIOOOOOOOOOOOOOSSSSSSSSSSS!!!!!!!!!!!!!!!
    SE LO DIJO!!!!!!!!!!!!!!!!
    SE LO DIJO!!!!!!!!!!!!!!!
    SE LO DIJO!!!!!!!!!!
    AJHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH
    AHHHHHHHHH
    AHHHHHHHHHHHHH
    ta que me da!!!..ta que me da!!!!!.....
    si todos lo impulsos terminaran asi!!!!!!!1
    entonces yo ya quiero uno!!!!!!!!!!
    ahhhhhhhhhhhh.......

    ..........me desmaye.....y voy directico a terapia intensiva.....

    PD: espero conty!!!! suerte con tu gira de estudio!!!
     
  11.  
    - mvss;'

    - mvss;' Usuario común

    Acuario
    Miembro desde:
    28 Abril 2007
    Mensajes:
    460
    Pluma de
    Escritora
    Re: Winter Love

    hola!, estuve 3 semanas ausente de cemzoo u.u me perdi una conti pero ya estoy al tanto y la ultima fue esepcional, creo que inuyasha ya se siente un poco mas seguro al tener ese valioso pendulo, ya que le ayuda demasiado. la verdad que pena que sesshomaru hubiera estado ahi, gracias que se fue, si no pobre kagome. que bueno que inuyasha y kagome hicieron caso a sus impulsos ya e dijeron TE QUIERO al parecer una palabra muy importante :). me dio risa lo que le dijo inuyasha"he de confesarte que me tienes loco PEQUEÑA", eso si que es amor. bueno espero que continues pronto con el fic, que pongas la contiuacion ;). que te vaya bien :D cuidate y nos vemos :)*

    - mvss,'
     
  12.  
    Maritza Chan

    Maritza Chan Fanático

    Sagitario
    Miembro desde:
    30 Agosto 2005
    Mensajes:
    1,305
    Re: Winter Love

    Por finnnnnnnnnnnnnnnnnnn...
    La beso *-*, que emoción *-*
    me encanto mucho el
    capitulo, ya sabes porque xD,
    que bueno que Sessho los
    ayudo, continua adelante,
    cuidate Bela.
     
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso