Interior del barco [Yume; Kohaku; Tamura; Matahachi] Matahachi sintió el cambio de ánimo en Kohaku cuando mencionó que no hacía falta lavar la piel de lobo; se preguntó si había dicho algo que lo incomodara o molestara, comenzó a repasar sus palabras abstraído en su actividad de descoser. Yume los observaba tambaleándose ligeramente por el alcohol, cómo si estuviera esperando el momento para atacar con sus comentarios, ella seguía jugando sin notar demasiado que ahora parecían estar hablando con mayor seriedad. Fue cuando la pregunta de Kohaku cayó que Yume miró profundamente a Matahachi; y este detuvo sus movimientos. Matahachi pensó unos segundos en lo que había hecho recientemente por mero gusto; recorrió sus misiones y no le molestaba cumplir con su deber; pero ni siquiera el terminar una misión era un sentimiento que le gustara, porque jamás le traía un completo alivio. La cacería de animales para él era necesaria; pero no lo veía como un deporte ni una fascinación. Pensó en sus actividades y sonrió ligeramente. —Me gusta cuidar de mis armas y herramientas; sentirlas limpias, pulidas, bien lijadas o afiladas — mencionó sin continuar su actividad de descoser el haori. Yume se recostó con el pecho en suelo, entrecruzó sus brazos al frente para usarlos como recargadera para sus barbilla mientras miraba Matahachi —¿Eso es lo que más te gusta sobre todas las cosas? — preguntó con genuino interés. Matahachi lo analizó nuevamente; no eran preguntas que le hubieran hecho antes, así que nunca las había internalizado. —Creo que es que me gusta observar detalles — agregó Matahachi — Puedo pasar toda una tarde observando a alguien haciendo su rutina diaria; puedo observar el vuelo de un ave hasta perderla en el horizonte; puedo observar como las olas rompen en la costa hasta que el sueño me gana — y después dejó escapar una risa — Y dormir, disfruto mucho dormir cuando estoy tranquilo. Contenido oculto Gigi Blanche Cubierta [Riku; Togashi] [Murai; Tsubaki; Inagaki; Konan] Konan miró a Togashi y Riku; y se preocupó ligeramente. Sabía que ahora eran aliados de los Minamoto; pero no era una alianza sencilla, el rencor no podía opacarse con una simple sonrisa. Tsubaki pudo escuchar el comentario de Togashi y volteó — ¿Es ridículo? ¿No es así? —volvió la vista a Riku quién también le había respondido —No entiendo cómo este hombre ha tenido tal impacto... —había algo en Tsubaki; un odio distinto al de Riku, una historia que tal vez sólo él y quizás Takeda conociera. —Se acercaron nuestros nuevos aliados, Murai-dono— Konan avisó a Murai, quién aun estaba en una época más atrás de la actual como bien pensaba Riku. —¿Aliados? — preguntó Murai a "Kozaemon" — ¿Es Sakurai y Hashimoto? —No, Minamoto y Fujiwara — dijo Konan con algo de preocupación; pues tenía miedo que lo llevara a un pasado más conflictivo. —Ah...— dijo sin tanta emoción — Amigos de Hiro, seguramente. —De hecho lo son — intervino Tsubaki asumiendo que era Hiro; e invitó a Togashi y a Riku para que se acercaran —¿Quiénes crees que sean? El Fujiwara es un hábil guerrero, y el Minamoto es un herrero bien establecido— preguntó con genuina curiosidad. Murai sonrió ampliamente —¡Hoshi! — dijo hacia Togashi con mucha efusividad, después se dirigiría a Riku, aunque no parecía atinar a la dirección de nadie — Fujiwara... ¿Moromichi o Tadashi? — preguntó hacia Riku, al parecer no conocía a Sumitomo. Konan se mostró preocupado por aquellos nombres y se interpuso para detener a Murai quien ya parecía querer ir hacia "Hoshi" Murai sonrió —Quiero agradecerle nuevamente a Hoshi por la katana que forjó para mi; no seas envidioso Kozaemon; tengo más amigos que sólo tú ¿Sabes? Konan miró a Riku y Togashi —En verdad lo siento; tomó el sake de golpe cuando le dije que era de Kobe. Fue culpa mía que esté así. —¡Qué buen sake hace tu mujer, Kozaemon! — dijo dándole una palmada en la espalda a Konan —Le digo que dejemos todo atrás — mencionó hacia "Hiro" señalando a "Kozaemon" — Con tan buen producto de sake no necesitamos pelear más, ¡Al demonio con Akishino! que ni nos cae bien...— se burló —pensé en instalarnos en Toyama — dijo señalando a todos por igual —¿Qué dicen? Dejar todo atrás y vivir del sake, de la medicina — dijo hacia "Obanai" —Yo podría hacer varios anti venenos; Hoshi podría abrir una herrería... — sacudió a Tsubaki —¡Tú por fin podrías abrir tu dojo! — no sabía a quién se dirigía pero quería hablar con el Fujiwara —Y los Fujiwara... ¿Que es lo que hacen los Fujiwara? — preguntó a Hiro en completa ignorancia.. Contenido oculto Monpoke Bruno TDF
Fujiwara no Riku Intenté darle una sonrisa tranquilizadora al único sobrio del grupo, manteniendo cierta distancia y estando sin aparentar hostilidad. Quedé con los pies congelados en el lugar y los sabios cerrados, demasiado indeciso y confundido sobre qué manera accionar ante Murai. Primero, ¿Queria? Pero... Si de verdad esperaba algo de Murai, más de verlo destrozado, es aprender sobre él. Tratar de averiguar los sentimientos que lo llevaron a sus acciones del pasado. Obviamente, no por querer darle el perdón o llegar a la simpatía. No. Solamente buscar entenderlo, de tener un vistazo a esa cabeza suya. "Si, tenemos mucha confianza en Hiro". Puso una mano en el hombro de Hiro al decir aquello. "Me temo que debo decirte no soy ninguno de los dos". Le dije, refiriéndome a los dos nombres que soltó. "Y que tu plan podría encontrar algunos obstáculos. Se por Kaze que esta aparente tranquilidad puede terminar pronto, de mano de Akishino y del Crisantemo negro, los clanes principales se verán sacudidos... ¿Vas a huir y dejar a los Taira? ¿Tu familia?". Ahora, la verdadera pregunta. "¿Confiarías en nosotros, los Fujiwara? ¿En Moromichi?"
Kohaku Ishikawa Interior del barco Yume se sumó a nuestra pequeña conversación y Matahachi habló de orden y detalle, nociones que fácilmente asociaría con él y, suponía, con los cazadores en general. Los escenarios que planteó me dibujaron una sonrisa en los labios y los fui imaginando sobre los tablones de madera del barco, que era lo que estaba mirando. Al oírlo reírse volteé hacia él y su último agregado amplió mi gesto. —Es una respuesta válida —anoté, ligeramente divertido. Pensé en lo que le había dicho a Yume hace poco, el amor que recordaba en los detalles de mi familia y cómo me había dedicado a observarlos—. Además, siendo así, significa que puedes disfrutar muchas cosas diferentes, ¿verdad? Por ello entendí a Matahachi sin demora. En ese momento Chiasa apareció con cierta prisa, correteó junto a Matahachi, saltó a Yume y se trepó hasta encima de mi cabeza. Me reí apenas y alcé la mano a tientas, notando su pelaje humedecido. —Creo que ya sabemos quién perdió... —comenté, divertido, colando un dedo en la abertura de mi abrigo. Chiasa comprendió mi ofrecimiento y se coló dentro, entre los bordes de piel y contra mi pecho, donde estaría más calentita. Le acerqué lo poco que le había quedado a mi rebanada de sandía y empezó a comer, haciendo un sonidillo bastante tierno. —¿Tú agregarías algo a la lista, Yume? De las cosas que te gustan —pregunté, sosteniendo la fruta con ambas manos—. Digo, además de la medicina, las sandías y Tamura.
Yuzuki Minami Interior del barco Mucho hablar del sake fino y no sé qué, pero bien que se nos había subido a la cabeza rápido, ¿no? Shino y yo nos habíamos aliado de repente para molestar a Noishi, quien de repente quiso solucionar todo colocándose en posición de meditación aunque el color en el rostro lo delataba. Ella lo zarandeó y a mí la escena me dio algo de ternura. —¿Y lo somos? —cuestioné ante lo que dijo Shino, mirando el guaje—. Oh, pobre de nuestro estudiante. No pudo dominar un veneno tan corriente como este. La decepción que le puse a mi tono fue bastante impostada, obviamente, y tuve que parpadear porque ya la visión me estaba traicionado. Esto de ver a dos Noishi en absoluta concentración no era una buena señal, qué va. Traté de contener la risa, erguí la postura tanto como pude y me mantuve seria. A este paso bajaríamos del barco todavía ebrios, pero ni modo. —Atento, Noishi —lo llamé solo por la tontería, de algo tendríamos que seguir haciendo reír a Shino, ¿no?—. ¿Cuáles son tus opciones actuales en un enfrentamiento con desventaja numérica? Suponiendo que me escuchara, claro, pero uno nunca sabía cuándo un ebrio meditando podía tener una gran revelación.
Interior del barco [Yume; Kohaku; Tamura; Matahachi] Matahachi afirmó ante las palabras de Kohaku; aquello era cierto y no lo había pensado, tal vez él era una persona muy sencilla a pesar de estar envuelta en escenarios complejos, eso hizo que relajara los hombros. Chiasa volvió con sus patitas mojadas y Matahachi terminó riéndose junto a Yume ante el comentario de que Rei había perdido la batalla. —Nos vino a contar el chisme — atajó Yume mirando como Chiasa se coló en el ropaje de Kohaku. Luego enfocó su atención en Kohaku quién le preguntaba de sus gustos, sonrió ligeramente cuando escuchó a Tamura como uno de ellos. —Lo sabía — atajó Matahachi mientras terminaba de descoser la manga. Yume bajó la mirada, estaba preocupada de lo que diría; no quería entristeser a ninguno de los presentes —Mi familia... — dijo mordiendo ligeramente en brazo dónde se había estado apoyando. —Aun no conoces a tus hermanos menores... ¿Estás emocionada? — le preguntó Matahachi con sumo cuidado; pues había un detalle allí que le preocupaba. —¿Y si no les agrado? Tenemos muchos años de diferencia... — Yume se notaba preocupada —¿Cómo son? — preguntó a Matahachi. Este guardó un momento silencio; no quería ser el que le anunciara la muerte de Kodoku —Creo que tú y Kohaku conectarán con Hajime rápidamente, es herborista por gusto. Murai no quiso entrenar a ninguno de sus hijos como al inicio lo hizo con Haku — Miró a Kohaku — Murai y Mako tuvieron cinco hijos. Haku es el mayor y después sigue Yume. —Después de mi sigue Kodoku; a él lo conocí brevemente, aun era un bebé antes de que yo escapara con Tamura — miró a Matahachi —¿Él no siguió los pasos de papá? Con todo lo sucedido con mi tío pensé que papá entrenaría a todos... —Él...— no debía usar verbos en pasado, debía ser prudente —Se convirtió en shinobi, si. Y Hiro, el menor de todos no ha dejado de ser un simple niño. Murai se ha negado a que Hajime o Hiro siguen los pasos shinobi. —Y de tus amigos verás nuevamente al tal Rengo ¿No es cierto? — preguntó Yume hacia Kohaku —¿Te emociona volver a verlo? Contenido oculto Gigi Blanche [Shino; Yuzuki; Noishi] —Y lo peor es que está tratando de aguantar — agregó Shino al comentario de Yuzuki sobre Noishi al no poder soportar aquel "veneno". "Atento, Noishi" Noishi afirmó ante la voz de Yuzuki. "¿Cuáles son tus opciones actuales en un enfrentamiento con desventaja numérica?" Noishi pensó la respuesta a tal interrogante. Abrió los ojos. —La cualidad suprema consiste en romper la resistencia del enemigo sin luchar — dijo hacia Yuzuki y luego miró a Shino que estaba a su lado y sin previo aviso la tomó con cuidado del cuello y la besó en los labios. Shino se reborizó tanto que no supo como reaccionar; se quedó petrificada en su sitio; luego Noishi miró a Yuzuki —El ataque más eficaz es frustrar los planes del contrincante, y después evitar la unión de las fuerzas enemigas — dijo tambaleándose en su lugar. Cerrando nuevamente los ojos, eso lo ayudaba a mantenerse en equilibrio. Contenido oculto Zireael Cubierta [Riku; Togashi] [Murai; Tsubaki; Inagaki; Konan] Tsubaki le siguió el juego a Riku y afirmó; Konan los veía ya algo desesperado. Ser el único cuidando un evento que pudiera resultar en caos era agobiante. Murai se notó confundido cuando Riku mencionó que no era ni Moromichi ni Tadashi. Después empezó a reír con el comentario de Riku sobre Kaze, Akishino y el crisantemo. —¡Ese Kaze! Si sabe tanto por qué nunca hace nada — dijo hacia Kozaemon, luego volvió a Riku; o eso creía él, pues estaba hablando frente a Tsubaki. —Por supuesto que mi madre tiene que ver en esto; ella sólo quiere causar problemas — Murai buscó a "Hoshi" quién era Togashi; pero se recargó en Inagaki que seguía riéndose como si todo el tiempo le estuvieran contando chistes grandiosos —Por eso Hoshi quiere que la mate — negó —No te preocupes Hiro; no haría nada como eso. Sabes que yo no puedo matar a nadie, y mucho menos a nuestra madre. Tsubaki lo miró fijamente —Seguro que al matarla la harías sentir orgullosa por primera vez... —Hiro, no seas así — rezongó Murai — ¿Tan malo es sólo querer ser herborista? — se quejó para después volver a buscar a Riku —Conozco poco a los Fujiwara; mi hermano los conoce bien y son amigos. Pero Keiko me ha comentado que Moromichi se ha vuelto muy unido a Sogo y ha separado a este de Sakurai; a quién antes parecía apreciar mucho. No considero que eso sea amable, creo que es envenenar mentes sin razón— sacudió su mano con fuerza —¡Ya sé quién eres! ¡Satomi! Inagaki volvió a reírse sin poder contenerse —¡Satomi es mujer! —¡Perdón! Es que... no veo — se justificó Murai. Provocando que Inagaki llorara de risa. —Maldito seas, Tamura. ¿Para qué repartiste el sake tan pronto? — se lamentó Konan mientras intentaba no reírse. Murai había soltado información de su pasado; hilos que quedaban sueltos. Contenido oculto Monpoke Bruno TDF
Yuzuki Minami Interior del barco El comentario de Shino hizo que tuviera que concentrarme más aún en no reír, pero resultó que Noishi afirmó al escucharme y alcé un poco las cejas. Finalmente abrió los ojos, alcanzando la iluminación de los ebrios, y soltó como si nada que la cualidad suprema era romper la resistencia del enemigo sin luchar y cuando quise acordar estaba besando a Shino. El cuadro me rompió el papel de maestra y reí ya sin ninguna restricción al ver cómo la pobre mujer queda estaqueada en su lugar, dejándome sola en la misión. Noishi podía sonar todo lo compuesto que quisiera, pero seguía tambaleándose y volvió a cerrar los ojos, aunque no sabía yo cómo era eso mejor que mantenerlos abiertos. —Y a veces es necesario retirarse antes de sufrir mayores pérdidas —reflexioné un poco después. Estiré el brazo para darle otro trago al guaje, como si no viera doble ya de por sí, y luego lo dejé a un costado para levantarme muy despacio. Me quise tropezar con mis propias piernas, reí en el proceso de mantener el equilibrio y cuando logré más o menos afirmarme en el suelo hice una reverencia moderada, cosa de no irme de boca frente a ellos. —Muchas gracias por recibirme y responder mis dudas... Shino. —Por un momento no había sabido cómo referirme a ella, pero me pareció que solo decirle su nombre era el curso de acción correcto. Luego miré a Noishi desde mi posición—. Si cierras los ojos demasiado tiempo acabarás quedándote dormido como Hashimoto. Por ahora me retiro, ya dejé a Hayato solo mucho tiempo y dormir un poco no suena mal. Sonreí para ambos, aunque Noishi siguiera metido en su meditación, y al girar el cuerpo para retirarme comencé a tararear muy bajo la canción de mi madre, aquella que condensaba el dolor de nuestro clan, pero también el rumor de Takeda. Fue mi despedida, fueron mis buenas noches para Noishi y mi manera de conectar con el hermano y la familia que había dejado atrás para venir con estas personas. Para cuando entré a la habitación contigua, en la que Tsubaki había dejado a Hayato, las últimas notas se suspendieron en el aire. Con el sake haciendo efecto, de repente solo se me apetecía tomar a mi niño en brazos y dormir. Dormir esperando no revivir Kioto una y otra vez, para llegar pronto a las islas y poder ver a Rengo. Contenido oculto por acá voy cerrando para que desembarquemos con resaca en oki
Kohaku Ishikawa Interior del barco Agregar a Tamura en la lista de cosas que le gustaban a Yume quizá pudiera considerarse un desliz, al menos lo pensé al oír a Matahachi, pero a la chica no le molestó; quería decir, no me pareció que su reacción se debiera a eso. ¿Había algo mal en que quisiera a su familia? Todos aquí lo hacíamos, ¿verdad? ¿O sería por nuestras historias? Fue un razonamiento relámpago, un impulso incluso, me incliné y rasqué apenas la tela de su manga. Aquella que había mordido. No dije nada, sólo le sonreí y regresé la espalda a las cajas. Empezaron a hablar de los hermanos de Yume y yo fui alternando mi mirada entre ellos. Mientras tanto, noté que Chiasa dejaba la cáscara limpita y reposé las manos en mi regazo. Asentí hacia la información que Matahachi me facilitó para comprender el panorama familiar de los Sugita y no intervine hasta que Yume me preguntó directamente por Rengo. Mi sonrisa se ensanchó con alegría genuina. —Quiero contarle un montón de cosas —respondí sin pensarlo demasiado, y luego me cayó encima un chispazo de consciencia—. Aunque no creo que seamos amigos, o sea... no creo que él me considere su amigo, quiero decir. Coincidimos muy poco tiempo y en condiciones bastante... desfavorables. Pero es quien me ayudó a desbloquear mi Qi y con quien empecé a entender muchas cosas, y por eso le estoy muy agradecido. En parte quiero verlo porque todo este tiempo estuve preocupado por él, y si encontró lo que necesitaba... me daría mucha tranquilidad. La máscara me la había quitado después de la última vez que nos vimos y no estaba seguro de que mi rostro, el mismo rostro que el de Itami, le trajera comodidad o tranquilidad. Además... aún recordaba lo que Mara me había dicho. Intentaba no darle crédito, pero conforme transcurrían los días, las semanas, me daba cuenta cuánto había enraizado. Rengo se había arrancado de sus emociones frente a nuestros propios ojos, ¿hasta qué punto no cargábamos responsabilidad por ello? Mientras más lo pensaba, mi mente más se enredaba, y no quería perturbar el ambiente tan ligero de esta conversación. Solté el aire por la nariz con cierta profundidad, alcé la vista y le sonreí a los dos. —Deberíamos ir pensando en dormir un poco, ¿no creen? —propuse, incorporándome. Le extendí la mano a Matahachi, pero me di cuenta que estaba de su lado derecho y di un respingo. Brinqué a su izquierda y repetí el ofrecimiento junto a una risilla leve, también estiré mi otra mano hacia Yume. No estaba seguro de cuánto podría descansar, ahora que Hotaru no estaba y habiendo revivido los recuerdos de hace dos años con tanta... claridad, pero al menos lo intentaría. Con suerte, el alcohol que llevaba encima me jugaría a favor. Contenido oculto por acá cierro con Ko as well
Cubierta del barco/ Alcázar en popa [Eiji; Kojiro] Tanto Eiji como Kojiro vieron a distancia como la corriente se tornaba más violenta; el desafío iniciaba para ellos mientras la gran mayoría de los tripulantes ya dormían completamente noqueados por el sake. Matahachi, Konan, Genichi y Riku se dieron a la tarea de arrastrar o cargar a los que habían perdido la batalla y perdido la consciencia. Y entre Riku y Konan tuvieron que cargar con Rei, el hombre más alto y pesado que habían visto jamás. La gran mayoría permaneció dentro del barco; completamente dormidos; sólo hubieron algunos que rumiaron en cubierta mientras Eiji y Kojiro reían a carcajadas mientras dominaban esa corriente. Y Allí se notó la complejidad de ese viaje; el barco se agitaba con fuerza y varias cajas caminaban dentro del barco, las que no fueron atadas correctamente. Aun así, la gran mayoría estaban tan ebrios que ni sintieron si una caja los aplastaba. El viaje fue complejo, ajetreado; pero llegarían por la mañana a las islas. Contenido oculto Gigi Blanche Zireael Monpoke Bruno TDF Los etiquetaré en las islas :3