[Versión "beta"] Nuestros destinos se re-enlazan (Advanceshipping y otros)

Tema en 'Fanfics Abandonados Pokémon' iniciado por Steve Yops, 3 Agosto 2010.

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    BlackAuraWolf

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    Por fin aquí, han sido unos meses ajetreados, pero bueno, fue un muy buen capitulo, muy divertido, y fue bueno ver la reconciliación de Marina y Jimmy y los momentos Advance, en cuanto a las preguntas:

    ¿De qué se tratará el tan importante anuncio de la directora? Ni la más remota idea, tal ve la presencia de alguien importante o algún tipo de viaje o torneo

    ¿cuál será el siguiente paso que darán Jimmy y Marina a partir de ahora? Por el beso queda claro, damas y caballeros, una nueva pareja ¡A nacido!

    ¿cómo le irá a la castaña de ojos zafiro en las presentaciones Aleatorias? Confio que bien, y que sea Lechugin quien cometa un error.

    Bien, cumplí mi parte, ahora tu opinión del capitulo de mi fic, quiero saber lo que piensas del capitulo.
     
    Última edición: 24 Mayo 2015
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  2. Threadmarks: Capítulo 23: Una revelación bailable
     
    Steve Yops

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    [Versión "beta"] Nuestros destinos se re-enlazan (Advanceshipping y otros)
    Clasificación:
    Para niños. 9 años y mayores
    Género:
    Comedia Romántica
    Total de capítulos:
    25
     
    Palabras:
    9120
    ¡Hola a todos mis queridos lectores! Primero les quiero pedir una disculpa por la gran tardanza en subir este capítulo ^^U Lo que pasó fue que me estuve preparando para mis exámenes para entrar a la universidad, y luego... entré a la universidad y por ende mis responsabilidades aumentaron notablemente. Ahora estuve de vacaciones, y aproveché de avanzar en este capítulo y al fin pude terminarlo :') Espero que les guste y ojalá enmiende los meses de espera x'D

    Aquí se los dejo.

    Capítulo 23: Una revelación bailable

    —¿Ya llegaron? —preguntó la directora Helen, hablando por el teléfono de su oficina—. Perfecto Wren, hazlos pasar.
    ———————————————————————————————————————​
    Una hora antes…

    Luego del aviso de la directora, todos los estudiantes se pusieron de pie y tomaron rumbo a sus respectivas áreas de clase.

    Jimmy y Marina iban de la mano por el vestíbulo, y cuando llegó la hora de despedirse, el entrenador de pueblo Primavera se acercó lentamente a la chica y le dio un suave beso en la mejilla. Ella sonrió y suspiró ante tal gesto y luego observó cómo se alejaba.

    May y Ash, por su parte, observaron aquella escena con satisfacción y luego cruzaron miradas, y se despidieron del otro oscilando la mano con una tímida sonrisa.

    Y así, entrenadores, coordinadores, rangers y aprendices se dirigían a sus destinos, a excepción de tres chicas que en esos momentos se encontraban peinando, secando y limpiando su cabello constantemente mientras tenían su mirada fija al espejo. Ninguna de las tres estaba muy contenta que digamos, y si había algo que llamaba la atención de ellas, era que ninguna tenía su uniforme.

    —¡Las odio! —protestó Lyra—. Ensuciaron todo nuestro uniforme, y el de repuesto sigue en la lavandería… ¡Más les vale no meternos en más problemas!
    —¡Son increíbles! —afirmó Brianna dando un pisotón de ira—. Y no en el buen sentido…

    Dawn, por su parte, se cepillaba sus cabellos con una notable expresión de ira en su rostro acompañada de una respiración agitada.

    —Dane… no te muevas —susurró Lyra.
    —¿Por qué?, ¿qué tengo? —cuestionó la coordinadora de Sinnoh un tanto inquieta—. ¿Es un insecto?

    Brianna se percató de lo que había visto Lyra y dijo un tanto disgustada:

    —Peor…

    La chica de ojos lapislázuli volteó la cabeza bastante intrigada, sin tener la menor idea de lo que estaba ocurriendo…

    —Quédate quieta mientras intento quitarte ese chicle —dijo la entrenadora de ojos marrones.

    Dawn, alarmadísima, puso una cara de notable asco y comenzó a tocarse el cabello por todos lados, hasta que sintió una sustancia viscosa y elástica cerca de su nuca.
    Muy apurada, la chica hizo todos sus esfuerzos para poder sacarse la mano de la goma de mascar, y cuando pudo hacerlo, pegó un ensordecedor y agudísimo grito que retumbó en las ventanas y paredes de la habitación.

    —¡¡Esas bestias!! —vociferó enfurecida—. ¡Las voy a destruir con mis propias manos cuando las vea!

    Lyra y Brianna sacaron lentamente los dedos de sus oídos un tanto dolidas y aturdidas, mientras susurraban “¡Ouch! Mis tímpanos…”

    —Bien, Dane; relájate, sólo me tomara un minuto… —dijo Lyra probando unas tijeras.
    —Ni se te ocurra… acercarte —respondió Dawn un tanto aterrada, poniendo su dedo en alto temblorosamente.
    —¡Quédate quieta!, ¡será rápido! —exclamó la joven Silverwinds, abalanzándose sobre la chica.
    —¡Aleja esas cosas de mi cabello! —gritó la chica de bufanda rosada.

    Brianna observaba la escena muy nerviosa, mirando a sus compañeras continuamente, hasta que no resistió más y se desmayó de la presión emocional.
    No obstante, el par de compañeras siguió con su batalla campal con las tijeras sin notar el estado tragicómico de la fanática de Drew.

    ————————————————————————————————————————​

    Mientras tanto, en un lugar lejano a la Poké-academia, se encontraban dos sujetos sentados en una sala rodeada de una gran variedad de espejos de cuerpo entero.
    Intercambiaron una mirada y luego suspiraron, no sabían cuánto rato más tendrían que esperar.

    —¡Saludos, Cassidy! Y… tú —exclamó Petrel relajado, entrando a la sala.
    —Prefiero eso a que se equivoque de nuevo con el nombre —susurró Butch a regañadientes.
    —¡Buenos días, ejecutivo Petrel! —respondió Cassidy—. ¿En qué podemos ayudarlo?
    —Como ambos deben saber —dijo el ejecutivo, sentándose cómodamente en una tercera silla frente al dúo Rocket—, ustedes fueron elegidos para mi misión preliminar. La cosa es que yo tengo esto meticulosamente planificado, y necesito mucha eficiencia para esto, ¿comprenden?
    —Comprendemos, señor —dijeron ambos al unísono.
    —Bien. Eso significa a que ambos tendrán que pasar por un curso de actuación intensivo, porque en poco tiempo tenemos que movernos, ¿eh?
    —Entendido —afirmaron ambos.
    —¡Bieeen! Me gusta esa actitud. —A continuación, el ejecutivo se levantó de su silla y les hizo una seña al dúo para que se pusieran de pie— Bien, vamos a ver qué tanta experiencia tienen. Les pediré que interpreten a dos personajes conocidos por el público general.

    Al escuchar esta última frase, Cassidy se mostró un tanto emocionada y dijo:

    —¡Oh! Bueno, nosotros nos hemos disfrazado muchas veces y…
    —Pero no me puedo fiar de eso a ojos vendados —la interrumpió Petrel rápidamente negando con el dedo—. Las actuaciones estándar del equipo Rocket son obvias y evidentes luego de una hora; yo quiero que ustedes pasen por papeles netamente creíbles, que sean su personaje realmente con toda su naturaleza.

    Cassidy y Butch, un tanto sofocados, se miraron con angustia. Lo que les pedía Petrel pareciera que se tratase de ser actores profesionales, ¿y cómo lo iban a lograr en días tan sólo?

    —Aunque... he tenido muy buenas referencias de ustedes, así que les tengo fe —prosiguió el maestro del disfraz—. Preparé este curso estratégicamente para que puedan encajar bien en su papel de manera veloz… pero necesito disposición completa, ¿captan?
    —¡Captamos! —exclamaron ambos, un tanto motivados.
    —Excelente; empecemos contigo Cassidy. Imita a una enfermera Joy.

    La rubia se aclaró la garganta, respiró hondamente y prosiguió a cruzar sus manos formalmente y a esbozar una sonrisa.

    —¡Hola, y bienvenido al Centro Pokémon! Restauramos a tus pokémon por completo, ¿quieres que curemos a tu equipo ahora mismo?
    —Bien… ahora trata de suavizar un poco más tu voz.

    Cassidy obedeció al ejecutivo, poniendo su voz con un tono que transmitiera un poco más de gentileza, por decirlo así; y curiosamente, logró adoptar un timbre parecido al de la enfermera Joy.

    —¡Hmmm! Nada mal, de hecho me gustó tu actuación. Seguimos contigo, amigo B.
    —¿Amigo B? —cuestionó Butch.
    —Sí, así no hay dramas con tu nombre —explicó Petrel—. Bien, quiero que personifiques al profesor Oak.

    Butch adoptó una pose pensativa por unos breves segundos, hasta que se le ocurrió una idea:

    —¡Lo tengo! —El muchacho aclaró su garganta y comenzó su actuación— ¡Hola, muchachitos! Bienvenidos al mundo pokémon. ¿Quieren escuchar algo de poesía?
    —¡Buena parodia! —exclamó el agente luego de soltar una carcajada—. Pero necesito que te enfoques más en actuar como él que en ridiculizarlo.

    Butch volvió a pensar en algo y dijo:

    —¡Hola, joven entrenador! Soy Samuel Oak y te invito a que inicies tu propio viaje pokémon. Mi laboratorio está a tu disposición para que puedas ir por tu inicial y tu Pokédex.
    —Mucho mejor—afirmó el maestro del disfraz—. Veo que elegí bien a mis agentes…

    Cassidy y Butch se mostraron bastante ilusionados al ver que habían sido aprobados para aquella misión.

    —De hecho —continuó el ejecutivo—, puedo decir que no vamos a demorar mucho en los preparativos; tenemos que pulir un par de cosas pero creo que sólo tomará un par de horas, así que es muy probable que la misión empiece más pronto de lo previsto.
    —¡Espectacular! —exclamaron ambos—. ¡Somos unos actores de categoría!

    ————————————————————————————————————————​

    Volviendo a la Poké-academia, como bien sabemos, la sesión de actividades ya había dado inicio para todos los estudiantes. Siguieron la rutina de informar cual era el objetivo del día y prosiguieron a pasar lista.

    En el caso de los coordinadores, a varios les llamó la atención el hecho de que hubieran ausentes en aquella clase. Era la primera vez que ocurría y encima había pasado en un día de evaluación.

    —¿Brianna Wuscovi…? —llamó Solidad una vez más, pero no obtuvo respuesta—. Qué extraño, tanto ella como Dawn están ausentes.

    May y Marina desviaron la mirada con cara de “yo no fui”, riéndose a lo bajo, sintiéndose muy victoriosas por su exitosa broma de desquite.

    —¡Y-ya llegamos! —gritó una voz.

    Todos voltearon a ver a la entrada del salón, viendo a Dawn y Brianna ingresando al lugar a todo pulmón, pero lo que más les llamó la atención era la forma en que estaban vestidas.

    —¿Se puede saber qué son estas horas de llegar y más encima sin su uniforme? —cuestionó la tutora de cabellos rosados, llevándose las manos a la cintura.

    Dawn y Brianna frenaron el paso al escuchar las palabras de la coordinadora de élite. La chica de capul adoptó una pose temerosa, llevándose una de sus manos a la boca y zapateando nerviosamente.
    La coordinadora de Sinnoh, por su parte, inspiró aire mosqueadísima y dirigió la mirada hacia May y Marina.

    —¡Las señoritas pueden explicárselo perfectamente! —respondió Dawn, señalando a las susodichas.

    Solidad, un tanto desconcertada, volteó a ver al par de amigas.

    —¿Nosotras? —preguntó la castaña haciéndose la desentendida—, ¿por qué habríamos de saber?
    —¡Aww! Miren como trata de hacerse la víctima; que lástima que te sale pésimo —inquirió la chica de ojos lapislázuli—. ¿No les suena unos avioncitos de papel anónimos?
    —¡Sí! —intervino Marina—. ¿Hablas de los mensajes anónimos que me enviaste para hacerme pelear con May?

    Dawn se sintió enormemente colérica ante las actitudes cínicas del par de amigas, y estuvo a punto de decir una de sus más grandes ofensas, pero por suerte, Solidad la interrumpió en el momento:

    —¡Ya! —intervino la tutora—, fue suficiente. No armen una escenita por qué pueden meterse en muchos problemas. Así que, Dawn, Brianna: por favor siéntense en silencio.
    —¡Ah, no!, ¡eso sí que no! —protestó la joven de cabello azulado—. ¡No me voy a quedar callada si esas dos van a quedar como todas unas santas inocentes!

    >>Este par de arpías nos hicieron creer a nosotras y a Lyra que hoy en la mañana nos íbamos a encontrar con los chicos que nos gustaban, y en lugar de eso fuimos empapadas por la regadera y quedamos cubiertas de lodo; y por eso no tenemos nuestros uniformes. ¡¡Es todo culpa de ellas!!

    Varios de los coordinadores emitieron expresiones de asombro ante la narración de la coordinadora de Sinnoh. May y Marina miraron avergonzadas a toda la gente de su alrededor; y Solidad, por su parte, miró atónita al par de amigas y dijo:

    —May, Marina: ¿en verdad hicieron eso?
    —Bueno… nosotras… emm… es un larga historia —balbuceó la castaña.
    —…estoy muy decepcionada de ustedes —la interrumpió la tutora desilusionada—. Quiero que las cuatro vayan a la oficina de la directora para arreglar este problema, y de paso, vayan a buscar a Lyra, que también está involucrada.

    La chica de ojos zafiro miró apenada a la coordinadora de élite, pero no tuvo más remedio que salir del lugar en silencio, siendo seguida por su amiga, Marina Kristalli, que iba igual de avergonzada.

    —¿A la oficina de la directora?, ¿yo? —preguntó Brianna angustiada—. ¡Ay, Diosito!

    El solo hecho de pensar que estaba en problemas era bastante preocupante para la coordinadora de isla Crisantemo, por lo que no pudo resistir más y volvió a desvanecerse.

    —¡Ay, no de nuevo! —protestó Dawn, sujetando a la chica para que no se cayera al suelo.
    —¡Santo cielo!, ¿ella está bien? —le preguntó Solidad.
    —Sí, se le pasará en unos seis minutos… —respondió Dawn un tanto incómoda.

    La coordinadora de Sinnoh se llevó a su compañera como pudo del lugar, para ir a buscar a Lyra en compañía de las chicas que tanto repudiaba, para luego ir a la oficina de la directora.

    ————————————————————————————————————————​

    En esos momentos, Lyra se encontraba llegando al estadio de entrenadores dando fuertes pisotones. Iba con sus manos empuñadas y una expresión de escamada en toda su cara.
    Varios de los entrenadores, que en esos momentos se estaban alistando para las prácticas de la Neutralización, voltearon a ver a la enojada chica. Era un tanto llamativo ver como aquella alumna que mantenía alegre y solía caminar dando saltitos, llegara esta vez con “la cara larga”.

    —Llegas tarde, Lyra —le dijo Misty.
    —Sí, sí, sí; aquí está el pase… —contestó la entrenadora de ojos marrones de mala gana.

    Misty recibió el papelito de su alumna, y notando el evidente cambio de ánimo de la chica, preguntó:

    —¿Ocurre algo?
    —¡Oh, no! —respondió la joven Silverwinds con sarcasmo—. No, no, no…

    Misty abrió los ojos un tanto estupefacta ante la reacción poco usual de la comúnmente alegre entrenadora. Ésta última expiró aire y siguió su camino.

    —¿Y ésta que tiene? —preguntó Norman—. ¿Y por qué está con ropa de calle?
    —Quién sabe. Quizá sea, ya sabes… ¿la pubertad? —respondió la tutora de cabello anaranjado, encogiéndose de hombros.

    Lyra seguía su camino sin mirar bajo ninguna circunstancia hacia los lados. El momento que había visto esa mañana se reproducía una y otra vez en su cabeza, y eso sólo había crecer cada vez más y más su enojo…

    —¿Lyra? —preguntó una voz. Era el castaño entrenador, saliendo de la nada—. ¿Qué haces llegando tan tarde y vestida así?
    —¡Oh! Es culpa de tu amadísima Marina —contestó la joven Silverwinds—, que por cierto, se besuqueó con Jimmy esta mañana.

    Vincent se puso gris al escuchar la última frase emitida por la chica de cabellos marrones, ¿había escuchado mal?

    —¿C-cómo? —preguntó Vincent.
    —Tal como lo oyes, compañero… —afirmó Lyra, poniendo una mano sobre el hombro del chico con una pose super dramática.
    —¡Ese infeliz! —gritó el castaño entrenador, para luego echar a correr en una dirección determinada.

    El chico con peinado de cresta emprendió paso veloz hacia dos entrenadores, Ash y Jimmy, que en esos momentos estaban en posición de combate y con una pokébola en mano…

    —¿Listo, Ash?
    —List…
    —¡Tú, el baboso Goldenstone! —lo interrumpió el castaño.

    Jimmy y Ash voltearon a ver bastante extrañados al chico que hizo una acelerada y repentina aparición. Éste se veía agitado y molesto, para variar.

    —¿Ajá…? —preguntó Jimmy desganado.
    —¿Con qué andabas de lengüitas con Marinita? Eres un sirvengüenza

    Jimmy y Ash intercambiaron una mirada burlesca ante el reclamo de Vincent. A continuación, el azabache prosiguió a decir:

    —Que rápido vuelan las noticias en este instituto…
    —¿Celosillo, Vincentillo? —preguntó un muy satisfecho Jimmy.
    —¡Yo te enseñaré a…! —Mientras decía esto, Vincent empezó a moverse, remangándose uno de sus brazos. Ante eso, Jimmy adoptó una pose desafiante, esperando a que su rival actuara.
    —¿Ya todos tienen sus parejas listas? —preguntó Misty en voz alta, interrumpiendo al par de rivales.

    Vincent sonrió maliciosamente y se acercó a Jimmy a la velocidad del rayo.

    —¡Sí! Jimmy y yo seremos compañeros.
    —¿¡Qué!? Eso no… —No obstante, Jimmy fue reprimido por el castaño, quién le tapó la boca para que no lo contradijera.
    —Vas a probar el sabor del polvo, babosillo… —susurró Vincent.

    Jimmy, sintiéndose desafiado, se quitó la mano del chico de su boca bruscamente y le dijo:

    —Quiero que lo intentes, novato.
    —¿Novato? —cuestionó el joven Jackson— ¡Ya quisieras…!

    Vincent partió a correr en dirección hacia Ash, y poniéndose justo al frente de él y sin darle tiempo de reaccionar, lanzó una pokébola, de la cual salió una especie de dinosaurio verde con una gran flor rodeando el final de su cuello, y unas antenas amarillas saliendo de su cabeza.

    —¡Ríndete ante el gran Meganium!

    Jimmy lanzó una cápsula esférica, y de ella salió su gran inicial tipo fuego, rugiendo ferozmente, estando listo para la batalla.

    —¡Vamos a darle una lección, Typhlosion!
    —La ventaja de tipos no te salvará… ¡Terremoto! —gritó Vincent.
    —¡Cuidado, Typhlosion, salta! —exclamó Jimmy apurado.

    Typhlosion logró pegar un salto, esquivando la sacudida, que curiosamente fue mucho más breve de lo normal. Sin embargo, al volver a tocar tierra, Meganium pegó otra pisotada, mandando a Typhlosion unos metros al aire.

    —¡Typhlosion! —gritó Jimmy.
    —¡Toma eso, perdedor! —se burló el castaño.

    Jimmy sintió que la vena le iba a explotar de la ira luego de escuchar la mofa de su contrincante. Empuñó fuertemente sus nudillos y vociferó:

    —¡¡Humareda!!

    Typhlosion abrió los ojos y se preparó para aterrizar, pegando una fuerte patada contra el suelo. Una vez en tierra firme, el pokémon volcán liberó una flameante cortina de humo, eliminando toda visibilidad posible por unos diez segundos.
    Cuando el humo se fue disipando, Meganium se mostró notoriamente herido.

    —¿Qué tal eso, holgazán? —comentó Jimmy con mirada burlona.
    —¡Esto no ha terminado! —gritó Vincent alocado—. ¡Vamos, Meganium!
    —¡Prepárate, Typhlosion! —exclamó el joven Goldenstone.

    Meganium se puso de pie y adoptó una posición de combate, al igual que Typhlosion.
    El par de entrenadores de Johto se dirigió una mirada mutua de rivalidad y cada uno preparó una orden para seguir el combate…
    Ash, por su parte, se disponía a mirar entretenido de un lado a otro al son de los ataques al igual que Pikachu, hasta que ambos pusieron los pies sobre la tierra, y reaccionaron…

    —¡Oigan! —alegó el azabache—. ¿Y qué se supone que yo haga?
    —¡Pika, Pikachu! —apoyó el roedor eléctrico.

    Norman se percató que Ash estaba sin compañero al igual que Lyra, por lo que llamó la atención del joven con “z” en las mejillas y dijo:

    —Ash, combate con Lyra.
    —¡No!, ¿con el fama de ex y traidor? —reclamó la joven Soulsilver.

    Ash sintió la vena hervir a más de 30°C al escuchar el imprudente comentario de Lyra. Si era incómodo tener que interactuar con la ex, también lo era con la amiga de la ex…

    —¡Bah! Ni creas que para mí es una dicha esto —alegó el azabache.
    —¿¡Ah sí!? —contestó la chica de cabellos marrones—. ¡Pues para tu información tú eres la fuente de todas nuestras desgracias!
    —¿¡…qué!? —cuestionó el azabache, perplejo.
    —¡Ajá…! —afirmó Lyra infantil y odiosamente—. ¡Desde que terminaste con Dawn todo nos sale mal, es como si hubieses creado una cadena de tragedias!

    Ash arqueó una ceja mientras la entrenadora de Johto se dispuso a relatar una serie de sucesos que no tenían precisamente relación directa uno con el otro, y entonces, el entrenador con “z” en las mejillas sacudió su cabeza, exasperado.

    —¿¡Quieres comenzar el combate de una vez!? —le interrumpió el joven de pueblo Paleta.
    —¡Kachu! —añadió Pikachu, igual de desesperado.

    Lyra se mostró muy ofendida al ver cómo le interrumpieron su reclamo, así que luego de sacarle la lengua bastante mosqueada, se dispuso a sacar una pokébola de su mochila y cuándo estuvo a punto de lanzarla…

    —¡Lyra! —le llamó Misty—. Te necesitan en la oficina de la directora.

    Ash reprimió lo más que pudo un potente gruñido de frustración en su interior, mientras que Lyra volteó la mirada confundida, y vio a lo lejos a Dawn y Brianna, cada una ondeando la mano con una sonrisa incómoda, y también a May y Marina, cruzadas de brazos y moviendo el pie impacientemente.

    —Este… sí, ya voy —respondió una confusa joven Silverwinds, rascándose la nuca.

    A medida que fue caminando hacia la salida, los demás entrenadores emitieron un “¡Uhhh!” para generar tensión, a lo que Lyra respondió con una mirada de indignación.

    Ash, desesperado, se dirigió rápidamente hacia donde Vincent, que estaba a punto de comandar un nuevo ataque…

    —¡Bien, Meganium, usa…! —pero en vez de terminar su orden, el joven Jackson soltó un grito una vez que fue derribado por un enfadado Ash Ketchum, hambriento de combates.
    —¡A un lado, peinado de cresta, es mi turno! —sentenció el chico de cabellos puntiagudos.

    Jimmy, que tenía su dedo estirado para dar una orden antes de que Ash apareciera, bajó la mano lentamente, mostrándose atónito por el mal humor de Ketchum. Parecía que si el chico no tenía su batalla correspondiente, las cosas pueden llegar a ponerse feas…

    ————————————————————————————————————————​

    Luego de pasar a buscar a Lyra, aquellas chicas emprendieron el rumbo a la oficina de la directora, aunque cada grupo iba a cierta distancia del otro, puesto que no eran precisamente las mejores amigas.

    —¿Y por qué tenemos que ir a la oficina de la directora? —preguntó Lyra—. No me digan que es por acompañarlas a pedir el pase, porque yo se los advertí y no me hicieron caso…
    —No, nada de eso —negó Dawn—. O bueno, sí, en parte; pero también tenemos que ir a hundir a ese par por lo que nos hizo…
    —Sí, bueno… —añadió Brianna—, le dijimos a Solidad lo que ocurrió y nos mandó a todas con la directora Helen.
    —¡Exacto!, ¡vamos a ver cómo van a sancionar a este par de perdedoras! —vociferó Dawn maliciosamente.

    Marina y May levantaron la mirada con alerta. Si bien era probable que la joven Berlitz tuviera razón, lo negaron en el exterior por el simple hecho de no querer darle la razón.

    —¡Ya lo veremos! —contestó Marina.
    —¡Aww, se están haciendo las desafiantes! —comentó la coordinadora de Sinnoh con tono burlón—. ¿Por qué no mejor prueban un disfraz a la vez? Digo, primero terminen con el de coordinadoras buenas y luego pasen al de chicas rudas.
    —¿Quieres callarte? —intervino May—. ¡Cada vez te soporto menos!
    —¿En serio?, ¡yo igual! —respondió, con ironía, la chica de pueblo Hojas Gemelas—. Y tengo la solución perfecta para eso: ¡Lárgate de la Poké-academia y así no tenemos que vernos la una con la otra!

    La castaña sintió que no aguantaba más y estuvo a punto de abalanzársele a su rival si no hubiese sido porque Marina la contuvo.

    —¡No le des más razones para quejarse con la directora! —susurró Marina.

    May soltó un suspiro de resignación y relajó todos sus músculos. Si bien detestaba a aquella chica con todas sus fuerzas, su amiga tenía un punto: en esos momentos estaban un poco en desventaja y debían andar con cuidado si querían salir ilesas del asunto.

    Luego de eso, las cinco estudiantes siguieron caminando en silencio, cada grupo bien definido y separado del otro. Finalmente, llegaron a la oficina de secretaría, en la cual se ubicaba la puerta de entrada para la oficina de la directora.

    Ambos grupos se miraron con recelo, y prosiguieron a caminar rápidamente hacia la puerta…

    —¡Epa, epa! —Una voz las detuvo.

    Las cinco alumnas se voltearon hacia la fuente sonora, y vieron a una mujer de largo pelo castaño, tez clara y ojos color miel. Vestía de una blusa a botones de color blanca, cubierta por un chaleco de color rosa, una falda de la misma tonalidad del chaleco, unas pantimedias grises y zapatos de tacón negro. Era Wren, la secretaria de la directora.

    —La directora se encuentra bastante ocupada en estos momentos con un asunto de importancia extrema, así que no pueden pasar —explicó ella.

    Dawn, que era la que más cerca estaba en esos momentos de la puerta, logró captar un sonido que para ella eran fácil de reconocer por su gusto por la moda: un secador de pelo.

    —¿Qué, acaso tiene un ataque de frizz en el pelo? —cuestionó incrédula la coordinadora de Sinnoh, llevando sus manos a la cintura y arqueando una ceja.
    —Yo sólo sé que está ocupada y que no quiere que nadie la moleste en este momento; así que tendrán que volver más tarde, niñas —fueron las palabras de Wren, ignorando por completo el comportamiento descarado de la joven de ojos lapislázuli.

    Dawn y Lyra echaron un resoplido lleno de ira, mientras que Brianna miraba hacia el suelo ansiosa. May y Marina por su parte, se mantuvieron serias para no hacer notar de a mucho su nerviosismo.

    Finalmente, las cinco chicas no tuvo más remedio que irse del lugar luego de la insistencia de la secretaria.
    Cada grupo, con una emoción distinta, iba caminando en silencio por los pasillos.

    —Sólo tienen un ratito más de alegría, créanme que se les vendrá algo pesado… —afirmó Dawn.
    —Hemos escuchado taaaanta amenaza tuya, como si tú no hubieras quebrado ni un huevo —la confrontó May.
    —¡Son una escoria! —gritó Lyra—. Ustedes son una plaga que nos complica la existencia. Lárguense de la Poké-academia ahora, ¡están sobrando!

    Las cuatro chicas voltearon a ver impresionadas a la entrenadora de Johto. Por primera vez, todas sin excepción, la habían visto tan enojada e insultando tan directamente.

    —Sí, lo dije, ¿y qué? —comentó una desafiante Silverwinds.
    —¡Y vaya que has dicho cosas, Lyrita! —intervino Marina—. Digo, Dawn debe de saber que tú fuiste la que me vino a confesar toda esta patraña de los aviones de papel, ¿cierto?
    —…¿¡qué!? —exclamó la chica de cabellos azules, impactada.

    Lyra abrió grandemente los ojos y sintió como su temperatura corporal disminuyó notablemente en un pequeñísimo instante. De tanta rabia que tenía, se le había olvidado ese pequeño pero importantísimo detalle que le podía meter en aprietos.

    —¿Cómo?, ¿no sabías? —preguntó la coordinadora de Johto, fingiendo preocupación—. ¡Ay no, pero Lyrita! Debiste haberlo comentado…
    —¡Vaya, Berlitz! Tus secuaces les falta eficiencia por lo visto —se burló la castaña con una amplia sonrisa en su rostro.
    —Vamos, May. Creo que estas amiguitas deben conversar en privado…

    El par de amigas se alejaron de las chicas de la 21D con un poderoso aire de triunfo, dejando a una asustada Lyra, a una sorprendida Brianna y a una estupefacta e indignada Dawn.

    —Dane, p-puedo explicarlo…
    —¡Ush! Lo hablamos después —la interrumpió una fastiadada joven de apellido Berlitz, que se dio media vuelta para dar zapatazos en dirección al salón de coordinadores.
    —Este… ¡chao! —se despidió Brianna con una sonrisita nerviosa para irse corriendo torpemente tras la coordinadora de Sinnoh.

    Lyra se llevó sus manos a su cabeza, para luego deslizarlas lentamente hasta sus mejillas en señal de desesperación.

    —¡Por Arceus!, ¿qué voy a hacer?

    (…)

    Unos siete minutos más tarde, May y Marina se encontraban ingresando con total tranquilidad al salón de coordinadores, sintiendo que habían ganado otra ronda más contra Dawn Berlitz y sus secuaces, cuando entonces…

    —¡Oh! May, Marina: ¿pudieron arreglar lo ocurrido? —preguntó Solidad al verlas llegar.
    —La directora se encontraba ocupada, así que nos dijeron que fuéramos más tarde —respondió May.
    —Ya veo. Entonces por favor pasa adelante, May; tú y Drew serán evaluados ahora.

    La castaña tragó saliva nerviosamente. Luego de todo el drama con las chicas de la 21D, se había olvidado por completo del evento más importante de su día: La evaluación de las Presentaciones Aleatorias.

    —Tranquila, May, puedes hacerlo… —susurró Marina, poniéndole una mano en su hombro.
    —No lo sé, Marina… ¡el drama con la princesita Berlitz me desorientó por completo!
    —¡Pero eso no cambia nada! —aseguró la chica de cabello cerúleo—. Aquí evalúan la espontaneidad y la capacidad de improvisación, así que lo que haya pasado antes no tiene por qué afectarte ahora.

    La chica de ojos zafiro, sin estar muy convencida, asintió y dio unos pasos inseguros hacia el frente. Y entonces, Drew De Larousse hizo su aparición y se las arregló para que la castaña le agarrara del brazo sin que se diera cuenta.

    —¡D-Drew! —exclamó May, asustándose por la repentina aparición.
    —¿Lista para brillar?
    —¿S-sí?
    —…claro —La sonrisa que el chico de ojos verdes portaba en esos momentos desapareció por completo. Él sabía que algo no andaba en orden—. ‘Por favor, pone-condiciones, no seas malo…’.

    Mientras tanto, Dawn y Brianna acababan de llegar, y lo primero que notaron fue al par de coordinadores encaminándose al escenario…

    —¡Mira! Les toca a Drew y May hacer su presentación —comentó Brianna.
    —Sí… —dijo Dawn, para luego cruzar sus dedos—. ‘Por favor, pone-condiciones, ¡sé malévolo!’.

    Finalmente, los coordinadores llegaron al escenario y se pusieron delante de dos pilares con un botón rojo encima. Ambos presionaron su respectivo botón luego de que Solidad se los indicara.
    El monitor se encendió y aparecieron ambos coordinadores y una serie de opciones que fueron rotando continuamente de manera análoga a una ruleta.
    Fueron cerca de 10 segundos que duró la selección al azar, y los resultados fueron los siguientes:

    “Tipo presentación: Mixta
    Tiempo: Sin restricción
    Escenario: Libre elección

    May Balance: Pokémon tipo eléctrico
    Drew De La Rousse: Pokémon tipo bicho"

    Al ver las condiciones indicadas, May frunció el ceño confundida, específicamente por la que le tocó a ella…

    —¿Eléctrico? —cuestionó la coordinadora de Petalburgo— Yo nunca he usado un pokémon eléctrico…
    —¿Estás segura? —preguntó Solidad—. El sistema nunca te pedirá un tipo de pokémon que no tengas, puesto que las opciones se basan en el registro de tu equipo.

    La castaña se quedó en silencio. Si las opciones se generan en base a un registro previo, no debería haber error alguno. Y fue entonces cuando abrió los ojos como platos y sintió que podía tragarse la lengua del pánico. Efectivamente tenía un tipo eléctrico, pero precisamente era uno que no tenía nada de experiencia, nada de nada…

    —¿Y bien? —cuestionó Solidad, al ver que su alumna no daba respuesta.
    —Bueno… sí tengo uno, es Pichu —comentó May tímidamente—. ‘No puede ser, justo hoy que quiso estar en su pokébola’.
    —¡Oh, no inventes! —alegó Drew, exasperado.
    —¡Oh, wow, wow, wow! —susurró la coordinadora de Sinnoh—. Esto es perfecto.

    Dawn comenzó a reír en voz baja, de manera que no mucha gente podría percatarse de su celebración a excepción de Brianna, a la cual le comenzó a dar codazos para que se ríera con ella. Ésta, por su parte, soltó un par de risas inseguras y volteó a mirar con preocupación al escenario. Sí, quizá se sentía un poco mal por May, pero quien más le preocupaba era su amado ídolo de ojos esmeralda.

    —Oh, no… —murmuró Marina, tapándose la boca aterrada.

    Solidad frunció el ceño un tanto desconcertada ante la reacción del chico de cabellera verde.

    —¿Y es que hay algún problema con eso? —preguntó, llevando las manos a su cintura y mirando a Drew fijamente.
    —Por favor, es sólo verlo, él es… —Pero el tono desaprobador y arrogante del chico se fue apagando lentamente al ver cómo la tutora se iba indignando más y más ante su actitud pedante.
    —…él no tiene experiencia, Solidad, es apenas un bebé y nunca ha participado en una batalla ni nada —afirmó May, apenada.
    —Oh… bueno. En ese caso podemos cambiar la opción, si quieres —propuso la coordinadora de élite.
    —¿Cómo? —intervino la chica de ojos lapislázuli—. ¿Osea que a ésta le van a dar un trato especial? ¡Me opongo!

    Todos voltearon a ver a Dawn, sorprendidos por su abierta actitud desafiante.

    —¿¡Qué rayos te pasa!? —le dijo Marina.
    —En un concurso oficial no le van a preguntar si entrenó al pokémon que le pedirán usar, ¿o sí? Es su culpa no tener entrenados a sus pokémon sabiendo que está en el Grupo Avanzado.

    Solidad no supo que decir. Si bien consideraba que la actitud de la joven Berlitz no era la adecuada, de cierta manera tenía razón. La situación era comprensible, pero quizá si podía ser un trato especial que no correspondía… ambas perspectivas podían ser perfectamente válidas.

    —Emm, bueno…
    —Bien —la interrumpió May, empuñando las manos al sentirse desafiada—. Usaré a Pichu, no hay problema.
    —¿¡Qué!? —susurró Drew—. Por favor, May, ¡usa la cabeza! Una evaluación es más importante que una pelea con Dawn.
    —Y dejarla callada junto a una buena calificación sería matar a dos Fearow de un disparo —aseguró la castaña, cegada por el sentimiento intenso de rivalidad.

    Drew se golpeó el rostro con su mano mientras daba todo por perdido. ¿En serio esta chica iba a caer en la trampa de su archienemiga así de fácil?
    Quizá era inútil seguir discutiendo sobre la decisión de la chica, así que el joven Larousse decidió manejar el cómo ocurriría la situación…

    —Bien, May, usa a tu Pichu si quieres, pero por favor, déjame dirigir la presentación a mí y tú sólo sígueme, que el riesgo es alto.

    La alumna de ojos zafiro, levemente bajoneada, asintió. Las palabras de Drew eran algo duras, pero definitivamente eran realistas. Eso pensaba por un lado. Por el otro, quería asumir el riesgo para ver si existía la posibilidad de cerrarle la boca a su tan repelente rival.
    Y en eso... se percató de un detalle. La joven ni siquiera sabía qué ataques tenía por aprendidos el ratoncito eléctrico, así que sacó su pokébola y la escaneó con la Pokédex que le había brindado la Poké-academia.

    —A ver… Pichu conoce Impactrueno, Encanto… —Hasta el momento Drew no se había impresionado para nada, eran ataques bastante básicos—. ¡Oh, vaya! También conoce Levitón.

    Al escuchar ese último ataque, el coordinador originario de Hoenn volteó a mirar a su compañera con interés. Levitón era un movimiento, que como bien dice su nombre, permite levitar al pokémon por un tiempo determinado —y como efecto secundario ofrece una inmunidad frente al tipo tierra—, y no era precisamente muy común en los Pichu, así que había que sacarle provecho.

    —Creo que se puede sacar algo interesante de ahí, úsalo a mi señal —indicó el idolatrado chico, a lo que la joven Balance asintió—. ¡¡Bien, Butterfree, ponte en acción!!

    El chico de cabellera verde lanzó una cápsula esférica, y de ella salió una mariposa morada con ojos rojos y alas blancas. Ésta empezó a mover sus alas con una mezcla de elegancia y vigor.

    La muchacha originaria de ciudad Petalburgo tomó aire. Apretó la pokébola y se la acercó al pecho por unos segundos, y tomó aire. Iba a ser la primera vez que Pichu actuaría, y no había planificación previa; pero bueno, en una de esas se podía llevar una buena sorpresa…

    —Llegó el momento de tu debut… ¡Pichu, sal a escena!

    Pichu salió de su pokébola un tanto feliz, pero cuando se vio en medio del escenario se mostró un tanto confundido, y prosiguió a observar todos sus alrededores.

    —¡Pichu, tu momento ha llegado! —exclamó su entrenadora—. Pase lo que pase, hemos entrenado en un par de ocasiones. ¡Pongámonos a prueba!

    Los ojos del ratoncito se llenaron de un potente brillo de ilusión, que dio lugar a una gran sonrisa acompañada de una patita empuñada, para denotar su determinación de dar lo mejor de sí.
    Ante esto, tanto May como Drew sonrieron.

    —¡Bien Butterfree, Psicorrayo! —ordenó Drew—. Ahora, May.

    De los ojos rojizos de la mariposa salieron disparados dos rayos multicolores en dirección al pequeño roedor eléctrico.

    —Bien, Pichu: ¡Levitón! —ordenó la castaña. No entendía muy bien lo que su compañero quería hacer, pero sin duda debía ser una idea buena. Demás está decir que, todo el público se sorprendió al escuchar tal comando; nadie se esperaba que Pichu conociera dicho ataque.
    —¿¡Qué!? —exclamó Dawn, picada.
    —¡Wow! —celebró Marina, fascinada.

    Y entonces, cuando el ataque tipo psíquico estaba a punto de tocarlo, el ratoncito se vio rodeado por un aura amarilla y se elevó unos pocos centímetros, y luego pasó algo único: Pichu comenzó a mover sus pies, haciendo que la energía del Psicorrayo se fuera esparciendo hacia atrás, y gradualmente tomó impulso para subir corriendo como si se tratara de una pista de carreras. En resumen, se veía a un pequeño roedor amarillo correr por una pista de energía multicolor, cuya aura empezaba a esparcirse por todo el escenario como si fuese un color de fondo.

    —¡Hermoso…! —susurró Brianna.
    —Fantástico —afirmó Timmy.
    —Bien, dile a Pichu que use Impactrueno… —indicó Drew.
    —¿E-estás seguro? —preguntó la castaña dudosa—. Aún no lo domina bien…

    Pero el chico de ojos esmeralda insistió. Como bien había dado su palabra, la joven Balance se resignó a seguirle la corriente.

    —¡Impactrueno! —exclamó no muy convencida.

    Pichu, sin pensarlo mucho, comenzó a emitir chispas de sus pequeñas mejillas rosadas.

    —¡Confusión!

    Cuando Pichu disparó una descarga descontrolada de electricidad, los ojos de Butterfree adoptaron una tonalidad azul, y entonces un gran aura del mismo color envolvió a los rayos eléctricos, dándole la capacidad a la mariposa de moverlos a su gusto…
    Y entonces, pasó algo inusual y alarmante… ¡Los rayos salieron disparados en dirección a los pokémon!

    —¡Drew…! —se alarmó la castaña.

    No obstante, el chico seguía tranquilo. Hizo su típico movimiento de flequillo y gritó:

    —¡Protección!

    Y entonces, un gran campo de fuerza envolvió a Pichu y a Butterfree, provocando una brillante colisión que duraría tan sólo unos segundos…

    —Dile a Pichu que use Encanto. Esto es crucial para el final.

    La castaña, al ver que todo iba saliendo bien, no dudó mucho de la indicación de su compañero y le ordenó al ratoncito usar el movimiento mencionado…

    —¡Mimético, Butterfree! —comandó Drew.

    Y entonces, el campo de fuerza estalló, y asimismo los rayos, dando lugar a una gran masa de fuegos artificiales amarillos; y en medio de todos ellos, se podían apreciar a un Pichu y a un Butterfree con una notable expresión de dulzura en sus rostros, logrando emocionar y conmover al público.

    —¡Wow! —exclamó Solidad—, ¡felicitaciones, chicos!
    —¡Drew estuvo fantástico! —comentó Brianna, fascinada.
    —Pff… de pura suerte que le tocó un coordinador experimentado a esa babosa —refunfuñó la coordinadora de Sinnoh.

    Marina lanzó un suspiro de alivio, Timmy y el resto de los coordinadores aplaudieron con notable alegría, y Drew y May chocaron las palmas luego de que ver que todo salió bien.

    —Espero que ya no estés molesto… —susurró la castaña con una tímida sonrisa.
    —Tenlo por seguro —Drew sacó, de quién sabe dónde, una de sus famosas rosas para su compañera. Ésta la aceptó gustosa, sonrojándose levemente por el halago.
    —Ahora es el turno de Susie y Oscar, y con eso damos por concluida la sesión —anunció Solidad—. Debido a los “pequeños inconvenientes” ocurridos esta mañana, no todos alcanzarán a pasar hoy, así que los pares Brianna-Marina y Timmy-Dawn deberán presentarse la próxima clase.

    Los susodichos asintieron, y luego se quedaron en silencio para observar la última Presentación Aleatoria del día.

    ————————————————————————————————————————​

    Cuando sonó el timbre de salida, todos los alumnos salieron directo al comedor. Era el último día de la semana y se encontraban todos muy agotados. Algunos sólo querían quedarse echados en cama por el resto del día, pero lamentablemente eso no era posible.
    Como bien sabían, después de almorzar debían ir todos, sin excepción, al auditorio de la Poké-academia por el anuncio de extrema importancia por parte de la directora Helen.

    May y Marina estaban almorzando —luego de harto tiempo y no para la comodidad de todos— en compañía del coordinador más idolatrado de todo el instituto, con el fin de celebrar el buen resultado de la Presentación Aleatoria.

    —Todo salió estupendo —dijo la chica de ojos zafiro—. Aunque… debo admitirlo: tú hiciste todo el trabajo, si no hubiera sido por ti, es probable que hubiese entrado en pánico.
    —Nah, estuviste bien… sólo necesitabas concentrarte un poco —comentó el joven de ojos esmeralda, haciéndose el interesante—. Aunque sí, se puede decir que fui tu héroe hoy.

    La castaña se rio ante el comentario del joven Larousse, mientras que Marina alzó notablemente una ceja con ironía.

    —¡Ja, ja, ja, claro! —intervino con un gran sarcasmo la ídolo pokémon—. Es diviertido ver como todos somos amigos aquí, ¿no es cierto, Drew? ¡Es la mesa de la friendzone!

    Drew soltó una odiosa risa irónica hacia la coordinadora de Johto, la cual le devolvió el gesto. La tensión era más que notable…

    —Bueno, iré a botar la basura… —dijo Drew a regañadientes, tomando todas las bandejas y levantándose de la mesa.

    Cuando vieron que el chico estaba lo suficientemente lejos, May se acercó a su amiga y le dijo:

    —No tienes por qué ser tan repelente, él ya sabe que sólo lo quiero como amigo…
    —¡Oh, claro! —respondió Marina sarcásticamente—. Puede saberlo, pero no aceptarlo, amiga mía. ¿Qué no viste que estaba intentado coquetearte?
    —Sí, pero simplemente lo pasaré por alto — comentó la joven Balance girando sus ojos con una sonrisa irónica.
    —Pues no deberías, le estás dando más y más espacio…
    —¿Y…?
    —¿"Y”? —cuestionó la chica de cabello cerúleo—. Muy bien May, te seré súper directa: desde que empezó a juntarse con Dawn, Drew no me agrada nada. Me da la sensación de que son algo así como aliados.
    —¿Aliados?
    —¡Claro! —exclamó Marina—. A ti te gusta Ash, a Dawn también. Y resulta que tú le gustas a Drew, el cual tiene un odio mutuo con Ash, ¿no ves que esto es como un cuadrado amoroso?

    La castaña quedó pensativa. Comenzó a susurruar los cuatro nombres y mover el dedo de un lado a otro, repitiendo la idea de su amiga.

    —Vaya, de hecho tiene sentido —dijo, luego de procesar todo.
    —¡Sí que lo tiene! Si quieres ser amiga de él, bien, pero anda con cuidado…

    La castaña, asintió. Luego, se dio media vuelta y vio a dos personas conocidas que estaban a punto de salir del restaurante.

    —Mira quiénes andan ahí… —le dijo a su amiga.

    Marina volteó a ver y luego de que una gigante sonrisa se formara en su boca, se levantó de golpe y gritó al correr:

    —¡Jimmy!

    El entrenador de pueblo Primavera se dio media vuelta y al ver como la chica que le gustaba se acercaba a él a paso veloz, abrió sus brazos para compartir un abrazo de saludo.
    Finalizado el abrazo, se miraron fijamente a los ojos y se dieron un pequeño piquito para concluir el saludo.
    Ash y Pikachu, tan sólo se dignaron a mirar a cualquier otro lado, sintiendo que estaban “tocando el violín”, como dicen por ahí.

    —¡Hola, Ash! Espero no haberte hecho sentir sujeta-velas —se disculpó Marina.
    —Eh, no, no creo… Casi ni entiendo estos temas, así que da igual —respondió el azabache, tranquilo—. ¿Andas sola?
    —No. Aandaba con May almorzando, está en la mesa de allá —afirmó, apuntando hacia la castaña.

    Sin embargo, la reacción deAsh no fue tan buena como él esperaba, puesto que cuando se volteó para ver a la coordinadora de ciudad Petalburgo, notó como ésta estaba devolviendo a sus pokémon a las pokébolas a excepción de Pichu; todo esto con “cierta” compañía.

    —Ah, y estabas almorzando con Drew también… —dijo un no muy feliz azabache.
    —Oh, sí. Es que les fue bien en la Presentación Aleatoria así que almorzaron juntos para celebrar… pero no es la gran cosa.

    Y entonces, el par de coordinadores originarios de Hoenn se acercaron al dúo de entrenadores y a la ídolo pokémon, y cada uno saludó a su manera:

    —¡Ash!, ¡Jimmy! —saludó la castaña ondeando la mano—. ¿Cómo están?
    —¡Chu, Pichu! —añadió el ratoncito.
    —Hola, May —dijeron ambos al unísono.
    —¡Pika-chu! —agregó el ratón eléctrico.
    —Ketchup… —dijo Drew de mala gana.
    —Lechuguín… —respondió Ash de la misma manera.
    —¿Y tú eras…? —preguntó el idolatrado coordinador al entrenador de pueblo Primavera.
    —Jimmy —respondió éste, un tanto incómodo ante la actitud del chico.
    —¿Cómo dices?
    —¡Jimmy!, ¡JI—MMY! —repitió Marina—. ¿Te sacaste el cerumen hoy o no?

    Drew frunció el ceño irritado. La coordinadora de Johto no estaba muy a gusto ante su presencia, y no tenía rollo alguno en hacerlo notar.
    May, por su parte, le hizo una seña a Marina para que disimulara un poco. Ash, en cambio, rio por lo bajo.

    —Tranquila… —le susurró Jimmy a la ídolo pokémon, acariciándole la cabeza.

    En eso, una corta alarma sonó por las bocinas de toda la Poké-academia, y a continuación, una voz comenzó a hablar:

    “Se solicita a todos y cada uno de los alumnos y funcionarios de la Poké-academia comenzar a dirigirse al auditorio, puesto que en unos quince minutos se comunicará el gran anuncio”.

    Esa voz era la de la directora Helen, aunque pudieron notar algo diferente. Había un “no sé qué” en su timbre de voz, muy sutil, pero algo había.

    Los cuatro chicos se miraron unos a otros, y sin pensarlo de a mucho, se dirigieron al auditorio.

    (…)

    Exactamente quince minutos después, el auditorio estaba repleto de gente. Alumnos, tutores, supervisores y demás funcionarios estaban en dicho lugar, hablándose unos a otros con intriga total. ¿De qué se trataba el famoso anuncio?, ¿y por qué todos tenían que estar ahí?

    —Vaaaya, la directora no pierde el tiempo —afirmó Vivi—. ¡De seguro va a venir con una lista de regalos del porte de una casa!
    —Ya quiero ver tu cara cuando veas que no se va a casar… —comentó Landis.
    —Yo quiero ver la tuya cuando estés eligiendo el regalo de bodas.
    —Vivi, esto no tiene nada que ver con matrimonios. Mi sentido intelectual me lo dice —dijo Max, acomodándose los lentes.

    Vivi bufó en voz baja y volteó a mirar al escenario de brazos cruzados

    Luego, las luces del auditorio se apagaron, quedando encendidas sólo unas a baja intensidad en el mero escenario.
    Unos segundos después, llegaron Scott, Wren y un señor rubio vestido en un traje formal, se trataba del famoso Edward, el señor con quién hablaba, según escucharon Max y sus amigos.

    El solo hecho de que Scott estuviera presente hizo crecer la curiosidad en el público. La directora ya había hecho bastante parafernalia con el asunto, y si la cosa era tan importante como para que el dueño de la Poké-academia estuviese presente, de seguro iba a ser algo grande.

    Y entonces, una elegante mujer apareció en el escenario, y se dirigió al atril. Era alta, de tez clara y contextura delgada. Su pelo, recogido en cuatro curiosas coletas, era de color violeta; color que compartía con el delineador de sus ojos y el gran vestido que llevaba puesto.
    Esa mujer era fácilmente distinguible. La gran mayoría, por no decir todos, sabía perfectamente de quién se trataba.

    Landis, Vivi y Max quedaron con la boca abierta al ver a aquella señora, y cada uno articuló respectivamente las siguientes palabras:

    —Oh…
    —Por…
    —Dios.

    La mujer aclaró su garganta nerviosamente. Miró al público por un momento y prosiguió a decir:

    —Bueno, muchos saben quién soy de seguro, pero lo más probable es que no sabrán porque estoy aquí.

    Hubo una pausa. El silencio era absoluto. Las emociones ocasionadas por la presencia de aquella mujer eran mixtas, pero lo que no podían entender era, como bien había dicho, el motivo de su aparición; más aún porque se supone que esperaban a alguien más, y dicho alguien no se veía por ningún lado…

    —Quizá se les haga más fácil si les digo que en un inicio me presenté como “Directora Helen” —continuó.

    La multitud arrojó varios gritos de asombro. ¿Aquella señora que estaba parada en frente de ellos era la directora Helen?, ¿pero cómo? Si lucía tan distinta, no tenía nada en común salvo la voz, la cual de hecho, tenía un timbre diferente pero igual se le podía pillar la similitud.

    —Y quizá ahora se preguntarán: “¿Pero qué es esto?, ¿por qué se presentó como alguien más?”. Bueno, primero debo partir por disculparme, por no haber sido del todo sincera con ustedes.

    >>Yo estuve haciéndome pasar por alguien más para calmar a la prensa. Ya sabrán ustedes que yo suelo viajar por el mundo, mis retadores lo saben más que nadie —Ante eso último, tanto ella como varios del público se rieron—. Y a veces, los periodistas invaden la vida privada y justo en esos días yo no daba más, así que con permiso del señor Scott, creé la identidad de la directora Helen mientras la prensa se calmaba, ¡porque vaya que se ponen molestos!

    >>… sin ofender, Gabriela y Tyler.

    Gabby y Ty, con una sonrisa, asintieron tranquilos.

    —Ayer hablé con mi representante, que es el hombre que ven allá sentado —prosiguió, señalando a Edward—, y le dije que de ahora en adelante quería asumir el cargo de directora con total trasparencia. Y es por eso que los cité aquí. Para disculparme por lo ocurrido, y para decirles que de ahora en adelante seré: ¡La directora Fantina!

    Terminado su discurso, todos los presentes dieron un gran aplauso a la que ahora llamarían Directora Fantina. Para muchos, era un honor que alguien como ella fuera la dirigente de la Poké-academia, y de hecho, tenía sentido…

    —¡Pero claro! —exclamó Nicolette—. Fantina es líder de gimnasio, coordinadora experta, cuando niña fue a una escuela teórica, ¡y en su adolescencia tuvo una carrera como ranger famosa! Maneja todas las áreas que aquí imparten. Y aparte, es una gran bailarina.

    Mientras tanto, Max y Landis voltearon a mirar a Vivi con una expresión de burla...

    —¡Alguien nos debe unos dulces de Baya Aranja! —exclamaron el par de niños.
    —Sí, ya lo sé... —dijo Vivi, entre risas.

    La directora Fantina, agradecida, lanzó besos al público, y luego prosiguió a decir:

    —¡Oh! Y hablamos con el señor Scott, ¡y mañana tendremos un nuevo paseo de fin de semana! Iremos a acampar al Bosque Viridian.

    Muchos se fascinaron con la idea, no todos, pero si la gran mayoría…

    —Iugh, justo yo había evadido ese bosque antes de llegar a la academia… —susurró Dawn.

    Los aplausos siguieron, mientras la directora lanzaba y lanzaba besos a lo que en ese momento era la audiencia. Afortunadamente, todos habían recibido bien la noticia, y era bastante sensato… ¡era prácticamente una celebridad!

    —Directora, sé que odia a la prensa, ¿pero nos deja hacerle unas preguntas? —dijo Gabby, acercándose junto a Ty a la señora con acento francés.
    —¡Oh, pero claro, mademoiselle! —exclamó Fantina abrazando a ambos de costado—. Ustedes son mis periodistas favoritos.

    ————————————————————————————————————————​

    Luego del emocionante anuncio, la gente fue saliendo poco a poco del auditorio. Entre ellos, iba una alegre castaña llegando al patio de recreos, con el fin de sentarse en una banca para relajarse en compañía de Pichu, pero entonces…

    —¡Oye, May!

    Una voz que para ella era bastante agradable de escuchar, la llamó. Contenta, se dio media vuelta y esperó a que dicha persona se acercara.

    —¡Ash, hola! —lo saludó la castaña.
    —Hola —dijo el azabache con una sonrisa—. Oye, quería preguntarle algo…
    —Claro, dime.

    El joven con “z” en las mejillas abrió su boca, pero antes de que pudiera articular palabra alguna, sintió que una mano le tocó el hombro y lo echó hacia atrás, al mismo tiempo que alguien le decía “Con permiso, Ashito”.

    —Adivina qué, May Baloser —dijo la recién llegada, que se trataba de nada más ni nada menos que Dawn, acompañada de sus amigas—, antes de salir del auditorio hablamos con Wren y nos dijo que la directora Fantina nos llamará en un rato. Deberías ir haciendo tus maletas.
    —¿Estás segura que soy yo quién debo empacar? —cuestionó la coordinadora de Hoenn.
    —Nena —dijo Dawn luego de lanzar una risa irónica—, yo conozco a Fantina, la suerte está de mi lado.
    —Ah, ¿en serio? ¡Vaya! Eso es muy extraño, porque no le costó para nada mandarte a limpiar baños hace una semana…

    La coordinadora de Sinnoh se irritó ante el reproche de la chica de ojos zafiro…

    —Eso es porque no podía salirse de su personaje o podía levantar sospechas —replicó la chica de ojos lapislázuli, sin mucha seguridad.
    —Oh, sí, seeeguro….
    —Oye, Dawn —intervino Ash, que con voz robusta prosiguió a decir:— Por qué no mejor te largas, ¿sí?

    Esa frase dejó a las cuatro chicas con la boca abierta. Dawn, Lyra y Brianna quedaron aterradas, mientras que May se impresionó pero de manera positiva.

    La coordinadora de Sinnoh, mosqueada —y un poco herida—, miró al azabache y a la castaña consecutivamente, y luego de dar una fuerte zapatada en el suelo, se fue caminando rápidamente del lugar, siendo seguida por sus dos amigas.

    —Vaya, eso fue un poco rudo —comentó la castaña—. No me lo esperaba en ti…
    —¿Qué?, ¿vas a decir que no se lo merecía? —cuestionó el azabache, sonriendo.
    —¡Oh, no! Para nada, en realidad esa chica me tiene harta —aclaró la joven Balance, riendo—. Gracias por defenderme.
    —Para eso estoy…

    Ash y May quedaron mirándose fijamente a los ojos, sintiendo como el viento recorrió sus rostros durante unos segundos. El joven originario de pueblo Paleta, entonces, espabiló y volvió a re-anudar su idea inicial:

    —¡Oh, claro! May, quería invitarte a algo.

    La castaña abrió grandemente sus ojos, los cuales desprendieron un gran brillo de ilusión, y sus mejillas se tornaron de un color rojizo. ¿Una invitación?, ¿de que trataría?

    —¿A-ah, sí? —preguntó nerviosamente la coordinadora de Hoenn.

    Ash pasó a rascarse su nuca y se rio por un momento breve, parecía tener algo de vergüenza.

    —¿Qué te parece si vemos una película esta tarde? —propuso el joven con “z” en las mejillas—. Paul andará entrenando toda la tarde y Jimmy irá a tu habitación, creo que Marina le iba a hacer un postre o algo así; y no creo que quieras tocar el violín, ¿o sí?
    —Oh, c-claro, pero, ¿no es contra las reglas que yo vaya a…?
    —No, las chicas pueden ir al dormitorio de los chicos antes de las 9 y viceversa —afirmó Ash.
    —¡Oh! Pues entonces acepto —aceptó una sonriente May.

    “Señoritas: Balance, Berlitz, Kristalli, Silverwinds y Wuscovi. Por favor presentarse en la oficina de la directora Fantina”, fue lo que se escuchó a través de la bocina del patio.

    —Bueno, nos veremos luego de que salga de este rollo… —dijo la chica de pañoleta entre risas.
    —¡Te espero en mi habitación con la película y unas palomitas…! —dijo Ash alzando una mano para despedirse.

    Pikachu y Pichu, que se habían quedado contemplando en silencio a sus entrenadores, intercambiaron una mirada pícara. Ellos sabían muy bien qué estaba pasando entre ellos…

    La castaña, por su parte, se mordió los labios por unos segundos con cierta emoción, y se acercó rápidamente al azabache para darle un dulce beso en la mejilla.

    —Adiós, Ash… —dijo una sonriente y ruborizada May, para después salir corriendo alegremente.

    El azabache se sonrojó ante el gesto de la chica. Y esta vez fue consciente de ello, porque sintió como sus mejillas desprendieron un intenso calor. Llevó su mano al lugar donde recibió el beso y luego susurró, con una enternecida sonrisa:

    —Adiós, May, te veo esta tarde…

    Pikachu observó alegre a su entrenador. Quizá esta vez estaba acercándose a la chica indicada, según decían sus instintos.

    ————————————————————————————————————————
    Mientras tanto, una misteriosa camioneta de color negro con una insignia en particular se encontraba llegando a la caseta de guardabosques del Bosque Viridian. El vidrio de la ventana se bajó lentamente, y el guardabosques vio a dos hombres acompañados de una mujer.

    El que iba al volante le dijo las siguientes palabras:

    —Caballero, su reemplazo acaba de llegar. Puede ir a descansar a su casa por el fin de semana.

    El guardabosques se alegro enormemente ante la noticia y les indicó donde podían estacionar la camioneta. Los sujetos, después de darle las gracias, subieron el vidrio y emitieron una siniestra carcajada.

    —Mordió el anzuelo. ¡Comienza la misión, señores! —declaró el sujeto al volante, poniendo en marcha la camioneta

    ¿Quiénes serán esos extraños sujetos y qué estarán tramando?, ¿qué pasará entre las cinco chicas en la oficina de la directora?, ¿cómo les irá a Jimmy y Marina en lo que parecerá ser su primera cita?, ¿será que Ash y May también tendrán una cita? ¡Atentos al próximo capítulo!
     
    Última edición: 24 Octubre 2015
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  3.  
    FanDeFic Sama

    FanDeFic Sama Guardián de las joyas más hermosas (Aria y Serena)

    Libra
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    Hola mi amigo, he esperado un capítulo por mucho tiempo, y déjame decirte que ha valido la pena la espera. No sé por qué salió esa rima.

    Me encantó, drama, comedia, acción, romance. De todo. Me gustó y enserio. Es un gran fic, solo que, tardas y entiendo que es por tus estudios. Pero no lo dejes, o te demandaré, ok no, jajaja.

    Jajaja nunca podrán decir bien su nombre. Bater, ¿verdad?

    --¡¡Mi nombre es Butch!!!--. Se escuchó un grito, proveniente del fic.

    Jajaja.


    Jajaja re precisa Dawn, la conoce bien.


    ¿De qué rayos habla Misty? Si ella también está en ésa edad.


    Jajaja éste chico, me gusta su desempeño en el fic.


    Jajajaja. Típico en las escuelas, cuando pasa algo así. Bueno al menos en la mía sí.


    Jajaja, una sed insaciable de batallas, típico de Ash.


    Quisiera ver una batalla entre Drew y Dawn.


    Jajaja, ya ni tú sabes de donde hacer que saque las rosas.


    Jajajaja, no paré de reírme cuando leí esto, no es que no me agrade Drew, pero me desagrada que él se burle de Ash. Pero me mató de risa esta parte.


    Jajaja, cuando se enoja se enoja. Jajaja.


    Solo Ash no sabe que se puede hacer “eso” antes de las 9. Jajajaja.


    Bueno pasaré a responder las preguntas.


    ¿Quiénes serán esos extraños sujetos y qué estarán tramando?---- Supongo que son del equipo Rocket. Y bueno, qué estarán tramando, no sé. Jeje.


    ¿Qué pasará entre las cinco chicas en la oficina de la directora? Solo espero que las regañe, nomas, que no llegue a otras circunstancias.


    ¿Cómo les irá a Jimmy y Marina en lo que parecerá ser su primera cita? Ellos se quieren mucho, y supongo que bien. Solo espero que una personita no lo arruine.


    ¿Será que Ash y May también tendrán una cita? Supongo que es obvio. Bueno si fueses a ver una película con tu hermana o prima, no sería una cita, pero con una chica que no tenga parentesco alguno, es obvio que sí, definitivamente es una cita. (Mi opinión)


    Bueno, te lo vuelvo a repetir, me gustó mucho y en verdad que compensó los 10 meses que te atrasaste, por tus estudios claro está. Es un gran fic. Solo espero que tengas más tiempos, pero supongo que la UNI no te lo dará. Jejeje.


    Desde ya saludos y suerte. Espero la continuación con ansias.

    Atte: FanDeFic, fiel seguidor de esta hermosa historia. Jajaja.
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    Última edición: 13 Agosto 2015
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  4.  
    Hygge

    Hygge Game Master

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    ¡Mi turno de comentar! :3 Bueno Steve, me alegró mucho ver que nos trajiste continuación de este interesante fic luego de un tiempo inactivo, sin duda el capítulo y su autor volvieron con las pilas cargadas :D Normalmente diría que tus capítulos me toman un rato en leerlos por la longitud que tienen (cosa que te agradezco, así no se acaba taan rápido) pero este a mi parecer se me hizo corto, será que como dicen, el tiempo vuela cuando te la pasas bien ^^

    Un capi con varias escenas de humor, una actuación original y muy bien narrada de parte de Drew y May (a pesar de sus dificultades pudieron lograrlo, menos mal :'3) y que no faltasen las riñas del trío contra Marina y May, qué bien xD Si bien no se concentró el advance como en otros capítulos (que tampoco es necesario, existen otros personajes interesantes al fin y al cabo) el final me dejó con ganas de más xC Jo, ¡así me haces esperar con más ganas la contii! Y hablando de parejitas, Marina y Jimmy son... asfg <3 Qué adorables, que se queden con las ganas Lyra y Vince e-e (Algo me dice que estos dos al final acaban juntos, no sé por qué xD)

    Y... OMG! De verdad que se me formó una sonrisilla en la cara al ver que mis sospechas no andaban tan lejos de la realidad, ¡la directora era Fantina! ¡Lo sabíaaa! xDD Es que desde que habló en francés... No podía ser otra que mi querida líder de gimnasio (? *^* Lo de la gramática y narración, estuve tan entretenida leyendo que no me percaté de nada raro, pero vamos, así a simple vista se nota que no hay ninguna falta por aquí.

    Paso a las preguntitas:

    ¿Quiénes serán esos extraños sujetos y qué estarán tramando?
    -Antes no lo entendí, pero luego de releerlo caí en ello xDD Me apuesto lo que sea a que son Cassidy, Butch y... Petrel, supongo xD

    ¿Cómo les irá a Jimmy y Marina en lo que parecerá ser su primera cita?
    -Espero que les vaya muy bien, suficiente han liado ya, les toca pasar un buen rato juntos :3

    ¿Será que Ash y May también tendrán una cita?
    -¡Sí sí sí sí! Deben de tenerla, te lo exijo >:c Porfi... (??

    Bueno, hasta aquí mi comentario, ¡sigue como hasta ahora y nunca abandones la historia, sin duda es uno de mis fics favoritos del fanfom! Espero ver conti pronto~

    ¡Nos leemos!

    Liza White
     
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  5.  
    Blaziken

    Blaziken Iniciado

    Acuario
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    Hola, te quiero decir que me enamore de tu historia por favor continuala.
    Soy nueva en esto asi que en pocas palabras me encanto esta muy lindo y mi parte favorita fue el casi beso de may y ash
    Y eso de que dawn fuera la villana me encanto y espero que resiva su merecido
     
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  6.  
    Paulo

    Paulo Athena no Seinto (Santo de Athena)

    Capricornio
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    Hola, me tóca comentar e.e
    Sinceramente me encantó tu fic,
    incluso llegué a pensar que si se le hiciéra
    un anime a ésta historia sería *súper cool* como diría Dawn xD

    Ese momento fue Épico c:

    Me gustó muchísimo esta escena,
    me la imaginé tal cual escrito está xD

    Aparte de eso, sobre las correcciones,
    no me especializo en señalar errores ya que
    yo aún tengo mucho que aprender jeje

    Y como uno de muchos seguidores de este fic dirían: Espero la conti :v

    Mucha suerte, y saludos amigo. n_nU
     
    Última edición: 25 Agosto 2015
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  7.  
    BlackAuraWolf

    BlackAuraWolf Entusiasta

    Capricornio
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    Jajaja! genial, me gusto el capitulo, y la frustración de Ash por no combatir? me pareció apropiada, yo estoy igual cuando no juego nada en todo el dia o cuando ninguna hiitoria que sigo es actualizada en una semana o mas.

    Ahora ansio mucho ver como les va en el bosque Viridian, pero tengo estas dudas, 1: ¿habra aparicion especial de pidgeot? creo recordar algo sobre el en tu hsitoria pero no recuerdo bien que, y 2: ¿meteras algo de Kalos ya sea un pokemon o las megas? eso seria algo interesante.

    En fin, esperare por el siguiente, tal vez logre subir un capitulo de la mia pronto. Nos vemos
     
    Última edición: 6 Septiembre 2015
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  8.  
    Keromatsu

    Keromatsu Diclonius

    Aries
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    jeeje tu historia es genial me encanto nunca eh visto una igual es unica para mi claro creo que promete mucho hasta luego sigue asi
     
  9.  
    George Asai

    George Asai Maestro del moe

    Aries
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    ESTIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIF

    Bueno, por fin puedo leer el capítulo, debo decir que Drew tuvo que sacar las papas del fuego para salvar la presentación, de no ser por su habilidad como coordinador habría ocurrido un incidente poco deseado. Lyra sí que tiene serios pedos xD, no sé como va a safarse porque no está del todo bien con los dos bandos, mientras la guerra entre May-Dawn continua, yo sigo esperando la introducción de Serena para que el harem de Ash se vuelva más grande. Si sale Iris igual me gustaría que fuese parte del harem <33 ya que amo el harem.

    Lo de la cita, quizá, pero espero no sea un bait, la guerra entre puras chicas está ardiente mientras los chicos son más directos. Los hombres de negro, ¿seran del TR?, o alguien más. Me gustó la parte donde Cassidy-Butch actuaron, le faltó decir: ¿eres chico o chica? xD para hacer la actuación más convincente xDDDD

    En fin, buen cap, Estif.
     
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  10.  
    capdevila

    capdevila Iniciado

    Acuario
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    tienes que continuarlo es un gran fic y a muchos les agrada...
     
  11. Threadmarks: Capítulo 24: ¡De Campamento!
     
    Steve Yops

    Steve Yops Usuario popular

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    Título:
    [Versión "beta"] Nuestros destinos se re-enlazan (Advanceshipping y otros)
    Clasificación:
    Para niños. 9 años y mayores
    Género:
    Comedia Romántica
    Total de capítulos:
    25
     
    Palabras:
    7861
    ¡Hola a todos! Sé que ha pasado un buen tiempo desde el capítulo anterior, pero estuve ocupado en varios asuntos. No obstante, no era plan dejar esta historia inconclusa... ¡No señor! La trama del capítulo la llevaba pensada desde hace tiempo, y afortunadamente, al fin se dieron las cosas para plasmar mis ideas en escrito, y aquí les traigo un nuevo capítulo. ¡Espero que lo disfruten!

    Capítulo 24: ¡De Campamento!
    Una camioneta negra con un logo muy particular iba recorriendo los caminos del Bosque Viridian. Su velocidad era tanta que todos y cada uno de los pokémon habitantes de la zona salían espantados cuando veían al vehículo acercarse. Éste continuó su trayecto sin disminuir la rapidez ni siquiera un poco, hasta que llegó a una especie de cabaña.

    Los tres sujetos se bajaron de la camioneta, y procedieron a entrar a la edificación rústica.

    —Bueno, ya llegamos —dijo el sujeto de cabello morado—. Ya envié la notificación para que envíen a un recluta para que tome el lugar del guardabosques, y a los otros refuerzos.

    >>Me imagino que ustedes tienen bastante claro lo que van a hacer, ¿verdad?

    Los individuos acompañantes, asintieron con convicción.

    ————————————————————————————————————————
    La puerta de la oficina de la directora Fantina se abrió y entró la castaña con su pequeño Pichu al lugar. Las otras cuatro chicas ya estaban presentes, por lo que su llegada era lo único que faltaba para comenzar la charla.

    Fantina lanzó un largo suspiro, y dijo:

    —Vaya, vaya… Yo me cambio el look mientras que ustedes siguen siendo igual de problemáticas, yo que pensaba que a partir de ahora todo iba a ser novedoso. ¿Cuántas veces han estado ya en este lugar? —preguntó con ironía, mirando a las de la 21D.

    El trío de chicas intercambió una mirada de incomodidad.

    —¡P-pero, Fantina…! —exclamó Dawn.
    Directora Fantina, Berlitz —la corrigió la experta en pokémon fantasma—. Primero que todo quiero que algo quede bien claro para todas y cada una de ustedes…

    >>El único cambio efectuado aquí fue mi aspecto y nombre, puesto que ya no estoy usando más ese disfraz. Pero el resto sigue funcionando exactamente de la misma manera: soy la directora de esta institución, y no por ser la “conocida Fantina” quiere decir que voy a tener mano blanda con respecto a asuntos académicos y comportamentales. ¿Entendido?

    Las cinco chicas asintieron muy rápidamente. Todas y cada una sintieron un notorio aire de tensión y sofoco ante las palabras de la directora.

    —Bien, ¿cuál es el problema? —preguntó Fantina—. Y por el amor de Arceus… ¿dónde están sus uniformes?
    —En la lavandería —contestó Lyra.
    —¿Todos?
    —Sí, todos.
    —¿Y por qué?
    —Porque se ensuciaron esta mañana.
    —¿Y por qué se ensuciaron esta mañana?
    —Porque les cayó lodo, agua, pasto y otras cosas.
    —¡Sacrebleu!, ¿y por qué les cayó lodo, agua, pasto y otras cosas?
    —Porque nos caímos.
    —¿…se cayeron? —cuestionó la bailarina líder de gimnasio, confundida.

    Lyra asintió inocentemente. May y Marina aguantaron las ganas de reírse, mientras que Dawn y Brianna se golpearon la frente con la mano, exasperadas.

    —Vayamos al grano —intervino la coordinadora de Sinnoh—. Éste par nos mandó unos mensajes anónimos diciendo que fuéramos al patio temprano, porque supuestamente nos íbamos a ver con los chicos que nos gustaban, y en lugar de eso fuimos empapadas por la regadera y nos resbalamos en el lodo. ¿Recuerda lo sucias que estábamos esta mañana? Bien, fue por eso.
    —¡Pero eso fue porque ellas antes nos hicieron pelear de la misma forma! —replicó Marina—. Me mandaron unos mensajes anónimos, haciéndome creer que May me estaba jugando sucio a mis espaldas.
    —¡Shh, shh! —puso orden la directora, aturdida—. Por todos los cielos, cada grupo le hizo algo terrible al otro, ¿pero qué significa todo esto?
    —Dawn Berlitz siempre hace este tipo de cosas —afirmó May—. ¿No recuerda lo que pasó en el Viridian Plaza la semana pasada?
    —¡Pichu, Pichu-Pichu! —añadió el pequeño ratoncito.
    —¡Basta! —exclamó Fantina—. ¿Acaso creen que están en “Chicas Pesadas” donde dedican su vida entera a sabotear a la de al lado?
    —Ahora que lo pienso, puedo sacar muy buen material de esa película… —susurró Dawn.
    —¡¡Suficiente!! —vociferó la directora, indignada.

    Fantina volteó a mirar a May y Marina, y luego al trío de la 21D, furiosa. En ese lapso, un silencio dominó el lugar; las chicas estaban paralizadas en espera de una potencial sanción, mientras que la directora continuaba alternando su mirada como si estuviese pensando qué hacer.

    —¡Ay, a quién engaño! —exclamó Fantina, con un abrupto cambio de humor—. Hoy estoy demasiado feliz como para poner alguna sanción.

    >>De acuerdo, por esta vez no pasará nada. Simplemente se darán las paces y prometerán ser buenas compañeras. ¡Pero, ojo! Una más y viene una sanción severa, para que aprendan a convivir al fin, ¿de acuerdo?

    Ambos grupos se miraron con desprecio y sonrieron forzosamente.

    —¡Eso es! —celebró la directora—. ¡Ahora dense un apretón de manos, queriditas!

    Las cinco chicas intercambiaron manos para darse las paces consecutivamente, no con mucho gusto, a decir verdad. La hipocresía mezclada con conformidad en dicha acción eran bastante notorias, pero esto no significó gran cosa para la directora, que con una gran sonrisa de oreja a oreja, les pidió que salieran de la oficina.

    ———————————————————————————————————————​

    Una media hora más tarde, Jimmy y Marina se encontraban en el patio, sentados sobre un mantel en el suelo, con dos platos, una canasta y una botella de refresco.

    —Fuiste listo al proponer que mejor nos viéramos aquí —afirmó Marina—. Hay más espacio, y nos evitamos luego rumores de pasillo…

    Jimmy rio ante el comentario de la ídolo pokémon.

    —Sí, es mejor evitarse rollos ahora que estuviste en la oficina de la directora…

    Marina asintió sonriente, y luego prosiguió a sacar de la canasta el postre que hizo con ayuda del Chef Eduardo en la cocina de la Poké-academia: Una tarta de fresa, con trozos de fruta en la superficie. Los dos se sirvieron una rebanada cada uno y luego disfrutaron del postre al aire libre, hablando de temas diversos e intercambiando risas sin parar. La conversación fue más que todo de temas triviales, hasta que…

    —Oye, Jimmy, ¿puedo hacerte una pregunta? —dijo Marina con algo de timidez.
    —¡Claro! Dime.
    —¿…qué somos exactamente nosotros dos? Es que, bueno, sé que fui corriendo como loca a besarte por la emoción, y simplemente lo dejamos fluir, pero creo que aún no hemos verbalizado nada, ¿verdad?

    Jimmy abrió los ojos nerviosamente y se puso rojo como tomate. Tal parece que había llegado la hora. El entrenador prosiguió a tirar del cuello de su camisa, y soltó una risa nerviosa. Marina lo miró sonriente y luego se mordió los labios, algo que Jimmy notó. Con ese gesto supo que la chica en serio estaba esperando algo.

    El joven Goldenstone lanzó un suspiro para calmarse, mientras se dijo a sí mismo en su mente: “Bien, Jimmy, tranquilo: ¡tú puedes, campeón!”

    —M-marina… —dijo el chico.
    —¿Sí? —preguntó, con una dulce sonrisa.

    Un poco tembloroso, el chico prosiguió a tomar las manos de la chica, y luego la miró directo a los ojos. Una suave corriente de viento pasó por dónde estaban, haciendo que los cabellos de ambos se movieran.

    —¿Te gustaría ser mi novia? —preguntó Jimmy al fin.
    —¡Creí que nunca lo preguntarías!

    Marina, feliz, puso su mano sobre la mejilla del chico, se acercó a él y le dio un lindo beso, respondiéndole no con palabras mas sí con el gesto a su pregunta: Sí quería ser su novia.
    Cuando el beso finalizo, los ahora novios se miraron e intercambiaron una sonrisa, para luego darse un gran abrazo como muestra de alegría por el inicio de su relación.

    ————————————————————————————————————————

    —¡Ash, ya llegué! —exclamó May tocando la puerta de la habitación 5A.

    Tras eso, se escuchó un “¡Pika, Pikachu!” dentro de la habitación. Tal parecía que la ratita amarilla fue la encargada de avisarle a su entrenador que la invitada ya había llegado. Entonces, May oyó como unos pasos se dirigieron hacia la puerta, abriéndose ésta con un sonriente Ash Ketchum.

    —¡Hola! Pasa…

    La castaña sonrió y entró a la habitación con sus manos atrás. Estaba un poco tímida, era la primera vez que entraba al dormitorio de los chicos.

    —Mira, compré palomitas en la cafetería —indicó la castaña, mostrando un paquete de palomitas de maíz.
    —¡Fantástico! Yo tengo refrescos.
    —¿Y qué película vamos a ver?
    —Es una que está de moda: “¡Luz, cámara, Pika!”. La hicieron en una lejana región, y ya adivinarás quién la eligió…
    —¡Pika, Pikachu! —exclamó Pikachu, divertido.
    —¡Oh, claro! Esa la rodaron en la región Kalos, ¿verdad?

    Ash asintió.

    —Oye, ¿y Pichu? Pensé que le gustaría ver la película igual… —preguntó el azabache.
    —Oh, bueno… el pobre quedó agotado por la presentación de esta mañana; fue su debut, así que se quedó durmiendo en mi habitación.

    Ash abrió la boca para responder, cuando entonces, la puerta volvió a abrirse. Ambos voltearon a mirar a la persona que iba entrando, y ésta, al ver a ambos, no puso una cara muy feliz que digamos…

    —¿Qué está haciendo esta niña aquí? —preguntó Paul robustamente.

    La chica de ojos zafiro volteó a mirar a Ash un poco incómoda por la actitud de su compañero de habitación.

    —Está conmigo, ¿algún problema? —cuestionó el joven con “z” en las mejillas.
    —Eh, sí —respondió el chico de cabellera morada—. Cancelé mi entrenamiento, así que voy a estar aquí y no estoy dispuesto a presenciar sus “planes”.
    —¡Mira, Paul, tú deberías…!
    —¡Ash…! —exclamó la castaña, calmándolo—. No te preocupes, creo que es mejor que me vaya, ¿sí? Otro día podemos re-tomar el plan… ¡Incluso puede ir Pichu para la siguiente vez!

    El entrenador de pueblo Paleta miró desanimado a la chica. Ésta, por su parte, le devolvió una sonrisa melancólica, luego miró muy brevemente a Paul con incomodidad, y salió rápidamente de la habitación sin mirar atrás.

    —¿Cuál demonios es tu problema? —preguntó un indignado Ash Ketchum—. Ella no te ha hecho nada, y hasta donde yo sé, tú y yo ya no deberíamos tener ningún conflicto… ¿o sí?
    —¿Y tenían que verse aquí necesariamente?
    —Las chicas pueden estar aquí antes de las 9 PM…
    —Oh, claro… Y trajiste muchas veces a Dawn aquí, ¿verdad?
    —Este… ¿no?
    —Exacto, Ketchum. No fue hace mucho que terminaste con ella y ya estás trayendo a tu nueva víctima a la habitación. Eso habla pésimo de ti.

    Ash suspiró aire pesadamente. Paul le había arruinado su tan esperada tarde con May, y aparte le echó en cara lo no muy buen novio que fue con Dawn Berlitz. En parte, el chico tenía un punto pero… ¿por qué se esforzaba tanto en hacerle ver eso?, ¿qué era lo qué tanto le molestaba? El azabache miró al chico un tanto escamado, y luego se dispuso a ver la película en compañía de Pikachu, dejándole de prestar atención a Paul.

    ————————————————————————————————————————

    En esa noche, las integrantes de la 21D estaban cada una en su cama, con las lámparas encendidas mientras conversaban antes de dormir. Sin embargo, la conversación parecía ser entre Lyra y Brianna, porque la coordinadora de Sinnoh estaba muy concentrada viendo algo en su laptop.

    —Oye, Dane: ¿qué crees tú?, ¿es más fácil hacer Poké-cubos o Pokochos? —preguntó Lyra.
    —Ehh… sí, claro, está chidísimo.

    Lyra y Brianna intercambiaron una mirada confusa.

    —Dawn, ¿qué estás haciendo que no nos estás prestando atención? —cuestionó Brianna—. Ojalá no estés escribiendo otra carta a tu club de fans, porque que vayan al bosque es como algo raro… ¿no crees?
    —No, estoy haciendo otra cosa.
    —¡Ah! De seguro debe estar revisando las fotos de Ash en su perfil de Poké-face —susurró Lyra.
    —¡Claro que no! —exclamó una enrojecida y avergonzada Dawn—. Estaba revisando el mapa del Bosque Viridian…
    —¿Y eso? —preguntó la entrenadora de ojos marrones.
    —Estoy investigando el lugar en el que vamos a estar para poder diseñar una broma perfecta para May Baloser y su amiguita.

    Lyra y Brianna se miraron con una expresión mezclada de inquietud e incomodidad, y luego ambas se pusieron de pie y se acercaron a su compañera de habitación.

    —Dane, quizá eso no sea muy buena idea…
    —Ay, no se pongan ñoñas…
    —¡No queremos que se repita lo del Viridian Plaza…! —comentó Brianna—. Te meterás en problemas de nuevo y…

    >>Espera, ¿qué es eso?

    Brianna se quedó mirando el mapa, acción imitada por Dawn y Lyra. La coordinadora de capul, entonces, apuntó a un curioso punto dorado que resaltaba en todo el oscuro mapa del Bosque Viridian. Estaba ubicado en un punto aislado, en el noroeste.

    —¡Ah! Sí, está bonito, pero el mapa no tiene información sobre ese punto —explicó Dawn—. Parece que nadie se ha acercado ahí, quién sabe por qué…
    —Vaya, yo revisé el mapa esta mañana y no vi nada de eso —afirmó Brianna—. Aunque yo lo revisé porque quería familiarizarme con el lugar en vez de hacer cosas malas.

    Brianna le dirigió una mirada acusadora a Dawn, la cual le devolvió un gesto de fastidio.

    —Es que es un mapa satélite en tiempo real —afirmó Lyra, señalando el logo del mapa—, así que quizá esa cosa dorada sólo debe verse en la noche, ¿creen que sea un farol o algo así?
    —No lo creo, los faroles se ven más chiquititos y con otro tono si los comparas… —corrigió la chica de cabellos azules, apuntando a los faroles del mapa.
    —¡Vaya! Qué curioso.
    —Sí, en fin… Terminaré de explorar los rincones de ese lugar y luego iré a dormir.

    Dawn les dijo a sus compañeras que se largaran con tan sólo la mirada, sobre todo a Lyra, con la cual aún seguía un tanto molesta por haber revelado todo el plan de una manera tan descuidada.
    El par de chicas suspiraron y volvieron a sus respectivas camas, mientras la coordinadora de Sinnoh hacía zoom en diversos puntos para ver qué cosa útil podía encontrar para sus objetivos.

    ————————————————————————————————————————--

    En medio de la noche, Petrel y sus sub-ordinados se encontraban en la cabaña del guardabosques, terminando de afinar los últimos detalles.

    —Bien, al menos hoy no logramos encontrar nada y como hoy la Oficial Jenny anda rondando por ahí creo que es mejor dejarlo para mañana —dijo el ejecutivo.

    Cassidy, mientras tanto, estaba observando un folleto bastante inquieta. Miró a Butch, luego al ejecutivo y dijo:

    —Ejecutivo Petrel, ¿sí sabe quiénes vienen mañana a visitar el bosque según la lista de reservación?
    —¡Ah, sí! —exclamó Petrel—. Los de la escuelita…
    —¿¡Qué!? —se precipitó Butch—. ¿Los mismos que se aparecieron en el Viridian Plaza?
    —¿Cuál es el problema…? —cuestionó el ejecutivo de pelos morados, encogiéndose de hombros.

    Cassidy y Butch intercambiaron una mirada de estupefacción.

    —¡Señor! —exclamó Butch—. Entre dos estudiantes y tres profesores de esa institución arruinaron todo el plan del Ejecutivo Proton…
    —¿Y? Si no hubieran aparecido, Proton se hubiese llevado una réplica falsa de la Piedra Magma. ¡Ay, sí! Qué emocionante…

    Cassidy y Butch luego de pensarlo un poco, asintieron dándole la razón al ejecutivo. Lo que dijo era realmente sensato. ¿De qué iba a servir una réplica de esa piedra? Petrel los miró a ambos con su típica sonrisa, y prosiguió a decir:

    —Escuchen, yo sé que ese establecimiento está dirigido por gente súper importante, con mucha habilidad y todo el cuento, pero… ¿realmente es para tener miedo? A diferencia de Proton, que es conocido como el miembro más cruel del equipo Rocket por usar la fuerza bruta y dejarse llevar por el impulso y ya, la táctica que usaremos nosotros es mantener al enemigo controlado y bien de cerca. ¿Recuerdan?

    —Bueno, sí. Eso es cierto… —susurró la rubia integrante del equipo Rocket.
    —¡Bien! —exclamó el ejecutivo—. Entonces sólo apliquen lo aprendido y verán como todo saldrá de maravilla.
    —¡Sí, señor! —exclamaron Cassidy y Butch.

    ————————————————————————————————————————​

    Finalmente, el sol iluminó los alrededores de la Poké-academia y la alarma despertadora sonó en varios de los cuartos. Casi de inmediato, Fantina anunció por el altavoz que se preparan lo más pronto posible ya que en dos horas aproximadamente los buses hacia el bosque Viridian iban a partir.

    Todos iban acelerados. Algunos se encontraban muy emocionados por ir, mientras que otros (como la peli-azul) iban arrastrando los pies del desánimo.

    La rutina mañanera se llevó a cabo sin problemas, y al cabo de hora y media ya se encontraba la gran mayoría de los estudiantes afuera, con un uniforme especial de la Poké-academia para actividades de terreno: Una playera blanca con el logo de la Poké-academia a un costado y bordes naranjas, unos shorts deportivos azules y zapatillas anaranjadas con detalles blancos.

    Algunas chicas como May y Lyra se pusieron una visera anaranjada para cubrirse del sol, mientras que otras como Dawn se tomaron el pelo en una coleta para mitigar un poco el calor. El resto de las chicas no usó accesorio alguno en el cabello como Marina, o lo mantenían en su estilo usual como Nicolette, Brianna y Caty.

    En el caso de los chicos, algunos se pusieron una gorra, como en el caso de Jimmy que se puso la gorra deportiva de la misma forma que la de actividades académicas y la de ropa de calle: con la visera para atrás. Vincent se puso la gorra con la visera para adelante, al igual que Keith. Otros como Drew y Timmy optaron por usar un sombrero deportivo, mientras que el resto, entre ellos Ash y Paul, tenían la cabeza y cabello al descubierto.

    Al cabo de un rato, se dio la indicación de subir a los buses. Había un tutor al lado de la entrada de cada bus (siendo dos buses de dos pisos cada uno), diciendo el nombre del estudiante para saber a qué bus debían subirse. Jimmy y Marina para su felicidad, quedaron en el mismo bus (el 1) así que se sentaron juntos. May, por su parte, se fue junto a Nicolette en el bus número dos. En ese mismo bus, se subió Drew, quién le guiñó un ojo a la castaña, la cual le respondió el gesto con una sonrisa a medias. El coordinador se sentó con Vincent, quién en ese momento se quejaba por no poder ir en el mismo transporte que Marina.

    —¡Ese bobo de Jimmy se la va a tragar entera! —alegó Vincent—. No es justo, hermano, no es justo.
    —Que la disfrute mientras pueda —respondió Drew—. Pronto será tuya, porque ese chico es igual de estúpido que el Ketchup de tienda mayorista.

    >>En todo caso, ¿qué Lyra no se había comprometido a ayudarte?

    —Está peor que yo. Ya se descubrió toda esa patraña de los aviones de papel y quedó más mal parada que comediante de chistes malos en TV nacional.
    —Buff… —bufó Drew a lo bajo, con una cara de ironía.

    El par de muchachos volteó a ver al frente y vieron como su compañero de habitación, Timmy Grimm, subía al vehículo, conversando y buscando un asiento en compañía de alguien inesperado para ellos… Ash Ketchum.

    —¿Y desde cuándo Timmy Grimm anda de amiguitos con el Ketchup de segunda? —cuestionó Drew, incrédulo.
    —No lo sé… creo que ya no le caemos tan bien —respondió Vincent, encogiéndose de hombros.

    Mientras tanto, Brianna se encontraba observando a su ídolo desde el otro bus, apoyando la palma de su mano contra el vidrio, deseando en su mente poder estar más cerca de él. No obstante, su fantasía no se desarrollaba en un contexto muy tranquilo que digamos, porque al lado suyo estaba Lyra, chillando por los acaramelados Jimmy y Marina, sentados varias filas más adelante.

    —¡No es justo, Bri! —alegó la chica de ojos marrones—. ¿Qué acaso no se les acaba el aire? ¡Se han besuqueado todo el rato!
    —De hecho sólo se estaban besando cuando nos estábamos subiendo y ahora Marina simplemente está recostada en su hombro…
    —¡Ay! Deja de bajarle el perfil al asunto. Esa chica es de lo peor, peor.
    —Hum… ¿Por qué fue que no te sentaste con Dawn? —preguntó Brianna apretando los dientes.
    —Porque mientras yo le contaba todos mis problemas, Paul le insistió hasta el cansancio que se sentara con él, y ella no tuvo más opción que aceptar…
    —¡Oh! Sí, verdad. Le insistió, terrible… —dijo una no muy convencida Brianna.

    Y en realidad no había sido así. Cuando se iban subiendo, Lyra hablaba y hablaba todo el rato de cómo la ponía furiosa la relación de Jimmy y Marina, y Dawn buscaba con urgencia un asiento vacío, hasta que encontró uno al lado de Paul y se sentó junto a él sin preguntárselo, para lograr eludir las quejas de Lyra durante el trayecto.

    (…)​

    Pasados unos cuarenta y cinco minutos aproximadamente, los buses de la Poké-academia llegaron a la entrada del Bosque Viridian. El guardia, antes de dejarlos pasar, dijo algo a través de un Walkie Talkie que el chofer no logró escuchar. Luego de unos segundos, el guardia les permitió el acceso sin mayor problema, pareciera como si simplemente hubiese esperado una indicación breve para haberlo hecho.

    Los autobuses condujeron hasta una zona despejada, que claramente estaba diseñada para camping. Ya llegando a su destino, el alumnado y tutores acompañantes de la Poké-academia (los cuales eran el profesor Oak, Norman, Solana, Solidad y Lance) se fueron bajando de su transporte para proceder a bajar sus pertenencias.

    —Yo en realidad no debería estar aquí… a mí ya me había tocado una salida académica la semana pasada en el centro comercial —dijo la tutora de cabellos rosados.
    —¿Estás diciendo que no quieres estar aquí conmigo? —preguntó Lance, con una sonrisa burlona.
    —¡Ay por Dios, no! —exclamó Solidad rápidamente, enrojecida—. Sabes que soy la chica más feliz al lado tuyo, es sólo que… me hace sentir un poco culpable la idea de que le quité el puesto a alguien más.
    —Fui yo el que lo pedí, ¿recuerdas? Además no le quitaste el puesto a nadie…

    Solidad lo miró un poco dudosa ante esa última afirmación.

    —Bueeno, sí… Brock no vino. ¡Pero fue un acuerdo mutuo! El quería pasar el fin de semana con Lucy, y yo quería que estuvieras conmigo.
    —¡Aww, eres un encanto! —exclamó una fascinada Solidad.

    Lance sonrió ante su gesto, y la conversación finalizó con un corto beso, debido a que como buenos tutores responsables, debían guiar a los alumnos con el repartimiento de equipaje, distribución y armado de carpas, entre otros asuntos.

    —Ugh… Tanto esfuerzo por no pasar por este bosque antes de matricularme y la bendita junta directiva nos trae para acá de todas maneras —dijo una incómoda Dawn, poniéndose unas gafas de sol—. Lyra, pásame el repelente.
    —Lo he estado buscando, Dane, pero no lo encuentro… —respondió la entrenadora de Johto, buscando urgida en su mochila.
    —¿No lo encuentras? —cuestionó la coordinadora de Sinnoh, volteándose para mirarla mientras bajaba levemente sus gafas para hacer contacto visual—. A ver Lyra: te pusiste de hocicona con Marina Kristalli, te quejas todo un viaje de tu fracaso con Jimmy cuando claramente nadie quiere escucharte, ¿y olvidas echar algo que te remarqué como siete veces que no olvidaras?

    >>Déjame informarte, linda, que te estás yendo cuesta abajo a una velocidad exorbitante…

    —B-bueno, pudiste haberlo empacado tú… —susurró Lyra.
    —¿¡Disculpa!? —vociferó la coordinadora de Sinnoh, caminando hacia su compañera de habitación—. No sé si me entendiste bien, castaña, ¡vas cuesta abajo! No has hecho sino meter la pata hasta el cansancio, ¿y vienes a dártelas de protestante?

    Lyra miró por unos leves segundos a Dawn un tanto insegura, mientras que Brianna observaba la conversación con un semblante de temor. No le gustaba como se estaba tornando la situación.

    —Eso es lo que pasa —afirmó Dawn—. Jimmy no te mira de lo tonta que andas…
    —¿¡Q-qué!? —respondió Lyra, ofendiéndose—. ¿¡Pues sabes qué!? Ash terminó contigo porque eres una mandona e irritante.
    —¿¡Cómo te atreves…!?
    —¡¡Chicas!! —exclamó Briana, poniéndose en medio de las dos—. Dawn, sé que estás enojada con Lyra por lo que pasó, pero ella no lo hizo a propósito, y ahora estamos en un campamento… ¿no deberíamos estar unidas?

    La chica de cabellos azules miró a la entrenadora de cabello marrón, y suspiró.

    —Está bien… —dijo con un tono más apacible—. Lyra: Lamento haberte gritado y llamarte tonta.
    —Y yo lamento habernos delatado con Marina y haberte llamado mandona irritante… —respondió Lyra.

    El par de chicas se miró con algo de indecisión, pero luego procedieron a darse la mano como señal de tregua.

    —¡Así me gusta! —celebró Brianna—. Vamos a armar la carpa.

    Y así, las chicas de la 21D comenzó a armar su carpa, cosa que ya estaban haciendo varios de los otros alumnos. Algunos la hicieron en cuestión de segundos, otros… estaban algo aproblemados. En el caso de las chicas de la 10D…

    —¡May, así no va el palito…! —alegó Nicolette.
    —¡Ya lo sé! —protestó ésta, tratando de unir bien la pieza con ayuda de Pichu—. Pero andar poniendo estacas, preocuparse del toldo y armar bien el “palito” es muy difícil para mí sola, ¿eh?

    >>¡¡Marina!!, ¡deja de besuquearte con tu novio y ayuda a hacer tu carpa!

    —¡Pichu, Pichu!

    No fue sino decir eso, y la chica de cabello cerúleo vino saltando alegremente mientras tarareaba una canción.

    —¡Te veo luego, Jimmisito lindo! —exclamó, lanzando un beso en el aire—. Ay, chicas… lo siento tanto.
    —¡Sí! Ya nos pediste disculpas las cuatro veces anteriores —la interrumpió Nicolette—. ¿Te importaría venir a sacar lo que falta de la carpa y ayudarnos a armar esto al fin?
    —¡Ah! ¡Sí, claro! —exclamó rápidamente, dirigiéndose al estuche de la carpa.

    May lanzó un suspiro. Le encantaba que su amiga estuviese feliz con su nueva relación, pero las había dejado botadas con la carpa ya unas cuatro veces en el intento, como bien había mencionado la aspirante a Ranger, y eso era evidentemente agotador.

    (...)​

    Luego de unos veinte minutos, las carpas en su totalidad estaban armadas, y lo siguiente fue que todos se formaran en un círculo, por órdenes del profesor Oak, quién iba a dar información sobre lo que se iba a realizar.

    —Bien alumnos —anunció éste—. Ahora que la armada de carpas está lista, les queda unos quince minutos libres de descanso, y luego de eso, vendrán dos guías turísticos que nos llevarán al Santuario Místico, donde tendremos una charla con los mega-abuelos.
    —¿Los mega-abuelos? —susurró el joven con “z” en las mejillas.
    —Son una pareja de ancianos, uno es originario de la región Kalos y la otra es de la región Hoenn —informó Lance—. Ellos son dos grandes sabios que dominan una técnica maestra denominada la “Mega-evolución”.
    —Y eso es, evidentemente, muy útil para su educación porque en su momento trataremos el tema en todas las áreas que impartimos, así que préstenles mucha atención —afirmó Solidad.

    Dichas esas palabras, el círculo se disolvió y de inmediato numerosos comentarios fueron emitidos por el alumnado. ¿Mega-abuelos?, ¿mega-evolución? ¿Qué era todo eso?

    En lo que corresponde a los ex-tres bromistas (se supone que dejaron eso en el pasado, se supone), Vivi se dispuso a trepar un árbol para conseguir un racimo de bayas zidra.

    —¡Ten cuidado, Vivi! —exclamó un nervioso Max.
    —¿Qué?, ¿estás preocupado por tu noviecita? —preguntó un pícaro Landis.
    —¡Q-qué estás diciendo!

    Vivi logró alcanzar el racimo con éxito, pero antes de bajarse, notó algo que le llamó la atención. La chica se bajó con cuidado de la rama y le hizo una seña a sus amigos.
    Entonces, el trío de infantes se dirigió a un arbusto, por el cual pudo observar a lo lejos a tres hombres vestidos de exploradores.

    —Señor, la señal de la Hoja Dorada es bastante débil, ¿no cree que es mejor buscarla de noche que es cuando se puede detectarla visualmente? —preguntó uno de ellos.
    —Sí, sí, ya dijiste eso, recluta… —respondió otro—. Lo que estamos haciendo ahora es descartar caminos, así que sigue poniendo ese rastreador, que quiero ver cuál es el camino potencialmente más corto.

    El trío bromista se escondió bajo los arbustos, cosa de que los tres misteriosos hombres no pudiesen verlos.

    —¿Hoja dorada? —preguntó Vivi—. ¿Qué es eso?
    —¿Y por qué la están buscando? —cuestionó Max.
    —Quizá sean gente del gobierno o algo así… creo que es mejor no meternos en enredos, muchachos. La idea de volver a leer libros con la directora me da sueño —afirmó Landis.

    Max y Vivi asintieron con cierto escalofrío, y volvieron sigilosamente hasta el punto de camping.

    (…)​

    Y efectivamente, luego de quince minutos, dos sujetos —una rubia mujer con el pelo tomado en una coleta y un hombre de cabello y bigote con tono verdoso— vestidos con una camiseta/blusa y zapatos café, pantalón y gorra verde se acercaron al profesor Oak.

    —¡Mucho gusto! —exclamó a mujer—. Usted debe ser el profesor Samuel Oak, ¡encantados! Somos Cassandra y Bruce, sus guías turísticos.
    —Nuestros registros dicen que vienen con motivo de campamento educativo y recreacional de parte de la Poké-academia, y ahora desean dirigirse al Santuario Místico, ¿no es así? —le preguntó Bruce.
    —¡En efecto! —exclamó Oak—. Muchas gracias por venir. Vamos a reunir a los estudiantes para ponernos en marcha de inmediato.

    El profesor Oak, con ayuda de los otros tutores, se dispuso a reunir a los alumnos de la Poké-academia, para poder dirigirse al Santuario Místico. Les presentaron a los guías turísticos, y luego de eso emprendieron el rumbo a su destino.

    Fueron unos diez minutos de caminata, donde alrededor no habían sino árboles, Caterpies descansando y Pidgeys asomándose en las ramas. Sin embargo, al final del camino la arboleda se despejó y ahora se encontraban con una gran reja, que en aquellos momentos se encontraba abierta. Más allá había una gran variedad de arbustos con formas de Pokémon como Absol, Lucario, Mawile, entre otros. También se encontraron con pequeñas fuentes de agua, y un camino de piedras que llevaba a una gran y elegante casa blanca de dos anchos pisos, con una fachada estilo oriental y varias velas a su alrededor con forma de Charmander.

    —Y hemos llegado —anunció Cassandra—. ¡Bienvenidos!

    El grupo continuó avanzando hacia la entrada, donde estaban siendo esperados por, como bien había explicado Lance anteriormente, una pareja de ancianos: el señor tenía la piel morena, cabello semi-corto blanco y barba del mismo color. Iba vestido de un kimono con la parte superior blanca con dos tiras moradas, y la parte inferior era de color negra. En cuanto a su esposa, ella era de piel clara, cabellera blanca recogida en una coleta estilo tomate, e iba vestida de un kimono con la parte superior blanca y la parte inferior azul, además de un cintillo rojo a la altura de su frente.

    —¡Timothy, Shelby! —exclamó el profesor Oak, estrechando las manos de los mega-abuelos con respeto—. Es un gran honor, gracias por recibirnos.
    —Profesor Oak, nos alegra mucho su visita —respondió Shelby.
    —¿Y estos jovencitos son las futuras grandes estrellas? —preguntó Timothy.
    —Sí, señores…
    —Pues, adelante, sigan por favor —dijeron los mega-abuelos, haciendo una seña para que todos entraran a la gran casota.

    (…)​

    La gente perteneciente a la Poké-academia, junto a los guías turísticos, se dirigieron a una gran habitación que en sí no tenía nada más que un gran tapete color vino tinto, y una gran variedad de repisas con objetos diversos.

    El alumnado se sentó sobre el tapete, mientras que los tutores junto a los guías turísticos se quedaron de pie, detrás de los estudiantes.
    En seguida, aparecieron los mega-abuelos, acompañados de un Alakazam y una Medichan.

    —Bien, jovencitos, ¿alguno ha escuchado alguna vez de la Mega-evolución? —preguntó Timothy.

    El silencio reinó en los segundos siguientes. Era una forma indirecta de decir que dicha palabra era completamente novedosa en los diccionarios de todos los presentes. ¡Quién diría que dos personas de tercera edad iban a hablar de algo totalmente nuevo, dirán algunos!

    —Definitivamente es una novedad de lo que vamos a hablar, Timothy, ¿no te hace sentir más joven?

    Risas fueron emitidas en lo que en ese momento era la audiencia. Era evidente que ese fue un comentario de humor para romper el hielo por parte de Shelby.

    —Bueno, como ustedes bien saben, gran parte de los pokémon van evolucionando, y conforme eso ocurre, se van haciendo más fuertes, y hay un máximo de tres etapas en ese proceso, ¿verdad? —dijo Shelby.
    —Sin embargo, hay ciertos pokémon que pueden lograr alcanzar aún más poder —intervino Timothy—. Con ciertos objetos especiales, llamados la piedra activadora y la mega-piedra…

    El mega-abuelo mostró un brazalete con una piedra multicolor con un signo de ADN, y su Alakazam hizo énfasis en un brazalete muy similar, pero en su interior tenía una piedra blanca con una figura de tres colores (amarilla, café y blanco). Timothy apretó la piedra activadora, y entonces la esfera que portaba Alakazam comenzó a brillar. Un poderoso fulgor comenzó a envolver al pokémon, quedando todos pasmados frente a semejante evento. El fulgor tomó mucha más fuerza y pasó a ser un rayo de energía veloz y… ¡Flash! Al mismo tiempo que el pokémon emitió un potente rugido, el fulgor se desvaneció por completo.

    Lo que sucedió dejó a todos boquiabiertos, ¡Alakazam había cambiado su apariencia por completo! Un rubí apareció en su frente. Las partes café de su cuerpo crecieron notablemente, y una larga barba apareció en su rostro.

    —...se puede llegar a la mega-evolución: una etapa donde se dice que el pokémon alcanza su verdadero máximo potencial. Sin embargo, a diferencia de la evolución tradicional que todos conocemos, está es temporal y generalmente dura sólo en los combates.
    —¿Alguna pregunta, mis amores? —dijo Shelby.

    El joven Ash Ketchum levantó la mano.

    —¿Dónde y cuándo descubrieron todo esto?
    —¡Oh! Es una larga historia, de hecho —afirmó Shelby—. En lo que a mí corresponde, yo soy parte de una familia llamada “El clan meteoro”, y de generación en generación nos han contado una historia sobre el primer pokémon que mega-evolucionó en todo el mundo: Rayquaza.

    Todos los presentes estaban asombrados, sobretodo los que venían de la región tropical… ¿por qué nunca habían escuchado de tal cosa?

    —Hace muchos años, Groudon y Kyogre adquirieron unas formas potentes que se conoce como “la regresión primigenia”, un proceso algo similar a la mega-evolución. El asunto es que estos dos legendarios ansiaban más y más poder, pero como la energía era limitada, Groudon y Kyogre primigenios se vieron en disputa y tuvieron un enfrentamiento feroz.

    >>La gente de Hoenn estaba desesperada, por lo que lanzaron un ruego a los cielos, y entonces, una gran “flecha verde” apareció. Era Rayquaza, el cual iba descendiendo a gran velocidad, y conforme el legendario iba volando, su cuerpo se vio envuelto por un gran brillo y cambió su apariencia. Entonces, este nuevo Rayquaza, con un poder superior, pegó un gran rugido y detuvo la batalla de los primigenios, salvando a Hoenn de un posible caos climático.

    Todos quedaron asombrados. Algunos sabían de la batalla entre Groudon y Kyogre, pero tan a detalle no la conocían, y a decir verdad, sonaba muy interesante.

    —En lo que respecta a mí, yo soy uno de los descendientes del primer entrenador que logró mega-evolucionar a un pokémon de su equipo: Lucario —dijo Timothy—. Se dice que este entrenador logró desarrollar un fuerte lazo con su pokémon, y por cosas del destino, Lucario detectó algo que le atrajo su atención en el camino, y ahí fue cuando descubrieron una piedra-activadora, y la otra no era nada más ni nada menos que la Lucariosita, la mega-piedra de Lucario. Cada uno tomó la que le correspondía tomar, aunque en ese momento lo hicieron de puro instinto, y entonces… la mega-evolución surtió efecto.
    —Entonces… ¿es necesario tener un lazo cercano con tu pokémon para poder mega-evolucionar? —preguntó Paul.
    —¡En efecto! —exclamó el mega-abuelo—. Si intentas mega-evolucionarlo sin tener un fuerte lazo de amistad, el pokémon no logrará contener todo ese poder y podría armar un caos tremendo.
    —Tendré que esforzarme en eso entonces… —susurró el muchacho de cabellera morada.
    —Papá —dijo Max, aprovechando que su padre estaba caminando al lado suyo, por lo que éste se agachó—. ¿Por qué nunca supimos de esta historia?
    —Bueno, Max, esto fue un secreto de sabios durante mucho tiempo —explicó el líder de gimnasio—. De hecho, era un mecanismo que se consideraba escaso de uso al no saber existencia de más mega-piedras, pero eso está cambiando hoy en día con las investigaciones… además del perfeccionamiento de su uso.

    Mientras la audiencia continuaba haciendo preguntas, el dúo experto en turismo se dispuso a conversar en privado.

    —Oye, ¿ves lo mismo que yo? —preguntó Cassandra.
    —¿De qué hablas? —dijo Bruce.
    —Esa esfera azul... y esa flauta de madera, se me hacen muy familiares —afirmó la rubia.
    —Pues, tomémosle un par de fotos y le preguntamos a Petrel después.

    Cassandra y Bruce se llevaron un dedo a sus gafas, y un sonido casi inadvertido fue emitido por estas. Al parecer, tomaron una foto sin flash a través de una cámara oculta.

    ————————————————————————————————————————​

    No hubo nada más remarcable durante dicho día. Luego de la lección sobre la mega-evolución, los estudiantes se dispusieron a dar vueltas por el santuario, y finalmente volvieron a la zona de camping con ayuda de los guías turísticos, de los cuales se despidieron una vez llegaron a dicho destino.

    Llegada la noche, los alumnos se sentaron alrededor de una gran fogata. Está de sobra decir, que Marina y Jimmy, al igual que Solidad y Lance, se sentaron juntos. Las dos parejas estaban muy acarameladas y no iban a dejar pasar la instancia, que estaba muy romántica por el fuego y la noche estrellada.

    —Oye, Ash, ¿este campamento no te ha traído algún recuerdo? —preguntó el profesor Oak.
    —¡Claro que sí! —respondió el joven Ketchum—. Hace poco estaba acordándome cuando asistí a su campamento cuando yo era más pequeño.
    —¿No fue en ese donde ayudaste a la chica que se lastimó la rodilla?
    —¡Oh, es cierto! —exclamó el azabache—. ¡A la chica del sombrero de paja!

    May y Dawn voltearon a ver al joven con “z” en las mejillas algo inquietas. ¿La chica del sombrero de paja?, ¿y quién era esa? Sólo al decir esa frase, Ash Ketchum logró despertar una pequeña sensación de celos y alerta en ambas chicas.

    —¡Vaya, vaya! —exclamó Jimmy—. Así que desde pequeño rompiendo corazones…

    Varios de los estudiantes se rieron frente a tal comentario, con algunas excepciones, entre ellas May, Dawn y sus amigas. Marina le dio un pequeño golpe a Jimmy, para que dejara de bromear.

    —Y bien rotos, de eso no debe caber duda… —comentó Paul.
    —Más bien rompió la armonía visual con su cara de Mankey —susurró Drew.
    —Vamos, Ash, ¡cuenta la historia! —pidió Jimmy, ignorando la indirecta advertencia de su novia.
    —¡Pikachu, Pikachu!
    —De acuerdo, de acuerdo…

    ///Flashback///

    Un Poliwag saltaba y saltaba sin parar de un arbusto a otro. El pequeño renacuajo se encontraba bañándose en un charco inicialmente, cuando un pequeño y moreno niño de pelos puntiagudos se emocionó al verlo, por lo que el Poliwag emprendió una huida de puro instinto. El pequeño, que no era nadie más ni nadie menos que Ash Ketchum, no dudó en perseguirlo para poder verlo de cerca y jugar con él. Sin embargo, Poliwag pegó un salto gigante, y luego se fue corriendo a toda velocidad.

    —¡P-Poliwag! —exclamó Ash.

    El pequeño con “z” en las mejillas llegó a un pequeño claro, y volvió a gritar el nombre del pokémon, pero ya no habían rastros de éste. Sin embargo, algo más le llamó la atención. En medio del claro, una joven chica de su misma edad, de piel blanca, ojos azules, pelo color miel, con un vestido rosa, sandalias y un sombrero de paja se encontraba en el suelo, con lágrimas saliendo se sus ojos.

    —¿Estás bien? —preguntó el azabache—. Mi nombre es Ash, ¿qué sucede?
    —Me duele mucho la pierna… —respondió tímidamente la chica, señalando su rodilla derecha.
    —¡Oh! Pues quizá esto ayude…

    El pequeño Ketchum sacó un pañuelo azul de su bolsillo y con éste cubrió la herida de la rodilla de la chica.

    —Y terminemos con un pequeño truco de magia… ¡Sana, sana, colita de rana! —exclamó el chico entusiasta, ondeando sus manos cerca de la rodilla herida.

    La chica intentó moverse, pero apenas hizo un movimiento mínimo, soltó un quejido.

    —¡N-no funciona!, ¡no puedo pararme!

    El pequeño Ash Ketchum, sin perder su sonrisa, se levantó y le tendió su mano.

    —Nunca te rindas, ¡hasta el final!

    La chica extendió su brazo tímidamente, hasta que Ash logró tomar su mano y la levantó rápidamente, sujetándola del codo con su otra mano para que pudiese pararse sin problemas.

    —¡Lo lograste! —exclamó el azabache, sonriente—. Ahora tenemos que volver al campamento, vamos...

    Sin soltarla de la mano para que no se cayera, el pequeño Ash Ketchum caminó junto a la chica del sombrero de paja, logrando así volver al campamento sin mayores problemas, donde luego la chica fue atendida por primeros auxilios para que se recuperara óptimamente de la herida de su rodilla.

    ///Fin Flashback///

    —¡Aww! Qué tierno de tu parte, Ash —dijo Solana.
    —Un pequeño casanova… —comentó el entrenador de pueblo Primavera.
    —¡Ya, Jimmy…! —susurró Marina, golpeándole la mano y señalando con la mirada a su amiga.
    —¡Oh! Lo siento…

    May, por su parte, dejó de mirar al joven originario de pueblo Paleta, y se dispuso a concentrarse en la fogata.

    —May, ¿estás bien? —le preguntó Nicolette.
    —Eh… sí, tranquila —respondió la castaña—. ‘Debo admitir que… sentí algo extraño cuando mencionaron a esa chica, aunque no sé muy bien por qué. Pero me da una sensación más agradable que Dawn, eso sí puedo asegurarlo’ —añadió la joven de ojos zafiro en sus pensamientos.
    —Pichu, Pi… —susurró el ratoncito, preocupado. La coordinadora de Hoenn, por su parte, le sonrió levemente y le acarició la cabeza.

    Por otro lado, había una chica que se encontraba en su mismo estado, y era precisamente la susodicha coordinadora de Sinnoh. Ésta tenía marcada en su rostro una notable expresión de mosqueada, mientras jugaba con su cabello.

    —Dane, ¿todo en orden? —preguntó Lyra.
    —Sí, te ves un poco alterada —agregó Brianna.
    —¿Saben que es lo que menos hace falta? —comentó la chica de cabellos azules—. Otra aparecida. Ya tengo más que suficiente con la boba de May Baloser, ¿qué hay de esta “chica del sombrero de paja”?, ¿por qué rayos Ash sigue saliendo con chicas del pasado que nunca mencionó antes?

    >>Él conoció a Kenny, un amigo de mi infancia y el cual claramente sentía algo por mí. Mínimo debió haberme hablado de la babosa esa de la Baloser, le paso a esta otra que andaba gritando auxilio por rasparse la rodilla porque fue hace años atrás…
    —¿…te dieron un poquito de celos por esa chica? —preguntó la coordinadora de isla Crisantemo.
    —Un poco, debo admitirlo. Digo, Ash se emocionó un poco, aunque no tanto como cuando le mencionaron a la coordinadora de juguete de May.

    Cerca de ellas, se encontraba Paul, el cual logró escuchar ese pedazo de la conversación y no pudo evitar sentirse un poco desilusionado.

    —‘Ay, Dawn… y sigues perdiendo el tiempo pensando en ese idiota’ —dijo el entrenador de Veilstone, en sus pensamientos.

    Para evitar seguir sintiéndose de la misma manera, Paul se dio media vuelta de manera discreta, de forma que pudiera prestarle atención a otra conversación que estaba llevándose a cabo al otro lado suyo, conversación a la cual se integró unos segundos más tarde.

    —De todas formas, no te amargues —dijo Lyra—. Ya nos desquitaremos de ellas esta noche, ¿recuerdas?
    —Ah, cierto. Un plan que no implica que alguien pierda el bus pero sí que permita desquitarnos…
    —Chicas, ¿están seguras de hacer eso?
    —¡Ay, por favor! —exclamó Dawn—. ¡No te pongas ñoña, Brianna! Ellas nos embarraron los uniformes, ¿se te olvidó eso acaso?
    —B-bueno sí, pero eso fue por lo de los aviones…
    —Ay, sí. ¿Y vas a esperar que May Balance te quite a Drew también?

    Brianna miró a Dawn algo inquieta ante tal pregunta, y cambió completamente de parecer de forma abrupta.

    —¡Tienes razón! Hay que hacerlo.
    —¡Eso, Bri! —exclamó la entrenadora de ojos marrones.
    —Así me gusta, linda, así me gusta…

    (…)​

    Unas dos horas más tarde, los tutores dieron la orden de irse a dormir, por lo que los alumnos se fueron a sus respectivas carpas. Lyra mantuvo su ojo asomado por un pequeño orificio de su carpa, ya que no la había cerrado por completo, y apenas notó que los tutores también entraron a sus carpas, la chica les hizo una seña a sus amigas para salir de la carpa.

    —¿Dónde era? —preguntó Lyra.
    —Allá, el sendero de la derecha —respondió Dawn, apuntando a una determinada dirección.

    Las chicas de la 21D, entonces, fueron corriendo de manera silenciosa con unas cubetas en mano.
    Apenas desaparecieron del rango visual, Nicolette salió de su carpa con una botella vacía, un tanto adormilada. La chica caminó en línea recta hasta llegar a un pequeño caudal, y empezó a llenar su botella. En el proceso, la chica volteó a mirar a su derecha, y notó como unas siluetas se movía a gran velocidad.

    —¿Qué hace gente despierta a esta hora? —se preguntó la chica de cabellos revueltos. Sin embargo, lo que más le llamó la atención fue un gran y potente fulgor que se veía unos metros más allá de los sujetos. Era un árbol que… ¿brillaba?—. ¿Y eso qué es?

    Mientras Nicolette observaba dicha escena, Dawn y sus amigas iban llegando nuevamente a la zona de camping, y entonces, abrieron lentamente la cremallera de la carpa de las chicas de las 10D, y vaciaron el contenido de las cubetas.

    —¡¡¡Gahhhh!!! —gritó Marina.
    —¡Ay, por Dios! —exclamó la castaña—. ¡Ay, por Dios!

    El par de chicas salió gritando de la carpa, con varios Spinaraks en su cuerpo. Dawn y sus amigas no lograron aguantar las ganas de reírse, y celebraron su broma a más no poder.

    —¡Ustedes otra vez! —exclamó la castaña, saltando para que los bichos se le quitaran de encima.
    —¡No las soporto! —añadió Marina, realizando la misma acción.
    —¡Pichu, Pichu, Pi! —exclamó Pichu, saliendo de la carpa, preocupado.
    —Oigan, ¿qué no falta una de ustedes? —preguntó Dawn—. ¿Dónde está la granjera?

    ¡¡¡KA-BOOM!!!

    Un poderoso estruendo, acompañado de un leve temblor que hizo mecer a los árboles, caer unas cuántas hojas y espantar a algunos pokémon ave de sus nidos, tomó lugar e hizo caer a las cinco chicas al suelo. Los Spinarak huyeron despavoridos ante el pequeño remezón, y poco a poco algunos estudiantes y tutores comenzaron a salir de sus carpas, alarmados por ese potente ruido.

    Y no fueron los únicos. A muchos kilómetros de distancia, específicamente en la Cueva Frondosa, cierto ser reaccionó de inmediato al sentir "algo". De una u otra forma, el hecho ocurrido en el bosque puso a la criatura realmente inquieta, y en cuestión de segundos, ésta desapareció del lugar. Pero no fue que se desintegró, no. La silueta fulgurante acababa de teletransportarse.

    ¿Qué fue ese extraño y potente remezón?, ¿estará relacionado con el árbol brillante?, ¿Nicolette estará bien? Y cambiando un poco de tema… ¿quién será la “chica de sombrero de paja”? Varias de estas preguntas serán resueltas en el próximo capítulo, así que… ¡atentos y atentas, lectores!
     
    Última edición: 8 Marzo 2016
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  12.  
    Paulo

    Paulo Athena no Seinto (Santo de Athena)

    Capricornio
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    Holas, primero en comentar c:

    Genial, me arruina la única escena Advance de un Cap de casi 8.mil palabras -_-


    No se que mas decir :v así que responderé las preguntas finales:

    ¿Qué fue ese extraño y potente remezón? Ni idea xD
    ¿estará relacionado con el árbol brillante? Posiblemente e.e
    ¿quién será la “chica de sombrero de paja”? ...Serena? :v

    Por el momento me despido, y espero la conti n_nU
     
    Última edición: 7 Marzo 2016
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  13.  
    FanDeFic Sama

    FanDeFic Sama Guardián de las joyas más hermosas (Aria y Serena)

    Libra
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    ¡Hola! He esperado tanto para la continuación. Me sorprendiste, la verdad. No esperaba lo de Serena x'D
    Lo dije en el pasado y lo vuelvo a decir, tu fic es genial. Para serte honestos, me enoja un poco el simple hecho de que no le den la mayoría del protagonismo a Ash; pero éste caso es diferente, no sé qué será. Pero admito que me contentó más cuando leo las escenas de Ash y May, eso no lo dudo.

    No veo la hora de que eso pase con Ash y May :D

    Pero si te tengo que ser honestos, yo soy multishipper, pero el Amour me hace superar esas expectativas. Por ende, al ser multishipper, te puedo leer un fic de Ash y Marina (y tengo un long donde ella es pareja de Ash) o de cualquier chica en general. Pero al ser Amour y éste tener puntos más altos que los demás en mi persona, y si en el hipotético caso de que Serena llegase aparecer, no estuviera con Ash, me dolería (y si aparece no por eso dejaré el fic) Pero de alguna manera, no quiero que nadie se quede con las principales (porque son de Ash). Tengo un serio problema con eso, pero no me pasa simplemente con Pokémon, sino con otros animes.
    (EJ: Si me lo preguntas, yo en mi fic sabiendo que es Advance, y lo escribo porque soy multishipp, pero me agrada mucho más el Amour, no haría aparecer a Serena, ¿por qué? Porque sabiendo de los sentimientos de ésta, terminaría con el corazón roto de alguna manera... Pero como es tu fic y está buenísimo, lo toleraré -si aparece- y no lo dejaré por nada de leer, así que despreocúpate mano)
    Bueno, me gustó mucho, estuvo bastante épico. Y la parte que más me gustó fue cuando May y Dawn se pusieron celosas por lo de Serena.

    Quería matar a Paul, interrumpió la cita que tenían Ash y May: Si yo fuese Ash, lo saco a patadas en la cul*. ¿Cómo se atreve? Uhm. Y me gustó mucho la reacción de May en momento que entró a la habitación, cuando pasaba con las manos atrás. Fue moe. <3

    Pasando a las preguntas...

    ¿Qué fue ese extraño y potente remezón?: Ni idea.
    ¿Estará relacionado con el árbol brillante?: Y tiene que ser... supongo.
    ¿Nicolette estará bien?: Es media rarita, de seguro se anda bañando en un estanque.
    ¿Quién será la “chica de sombrero de paja”?: Obviamente que Serena 8) Es muy moe, May y Dawn no se quedan atrás.

    Bueno, no tengo nada para decir; solo que sigas sorprendiéndome. No te voy a desear suerte porque no la necesitas. ¡FICASO!
    En fin, nos leemos en la próxima que la estaré esperando con ansias.
    Atte. FanDeFic (no voy a poner el "Sama" en los comentarios ._.)
     
    Última edición: 7 Marzo 2016
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  14.  
    Keromatsu

    Keromatsu Diclonius

    Aries
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    *-* que cap mas largooo(aunque no me acuerdo cuantas palabras tenian los demas pero bue me gusto el cap estubo re etretenido
     
  15.  
    capdevila

    capdevila Iniciado

    Acuario
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    que buen capitulo hacia mucho que lo esperaba .
    Entonces aparecera un nuevo personaje que todos ya savemos cual es,
    sera mejor la historia ,pero seria bueno que su forma de ser sea igual que en el anime solo digo jejeje
     
  16.  
    BlackAuraWolf

    BlackAuraWolf Entusiasta

    Capricornio
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    Te tardaste, aunque no puedo reclamar nada, llevo un año sin actializar la mia (en mi defensa eh estado viendo el anime para ver mas sobre kalos por ciertas razones), aunque tengo otras dos historias nuevas (la profecia pokemon esta parada de momento, seriamente considerando la opcion de eliminarla), pero solo una esta aqui.

    Y rayos, ahora odio mas a Paul.

    Fue un muy buen capitulo, aunque fue una lastima que Paul arruinara el momento solo por su cariño a Dawn. Y no me esperaba a Serena, ahora solo queda ver que tienes pensado para futuro.

    GRan cap, espero el proximo.
     
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  17.  
    Hygge

    Hygge Game Master

    Acuario
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    Hum, hum, humm... Interesting. Un capítulo con ese halo de misterio solo hace que quiera acabar por saber qué está ocurriendo ahí, me matan este tipo de finales incompletos xD Todo esto del Team Rocket me tiene curiosa, no sé si acabo de comprender lo que está pasando, pero esperaré al siguiente capi pues.

    Vale, he de decir que a pesar de no haber advanceshipping como hubiésemos esperado esta vez, lo poco que interactuaron se me hizo muy tierno, asdfgh. Me molestó el hecho de que Paul les cortara el rollo a esos dos, pero bueno, para otra será (les cojo la palabra (?). Y Marina y Jimmy pls, qué gracia me hizo cuando May le pidió ayuda con la tienda y ella seguía tan feliz de la vida con su novio x'D Al menos ya son una parejita feliz, algo de avance se ha logrado al menos (?

    Paul está detrás de Dawn fijo, desde que leí el fic navideño todo me cuadra y se me hace interesante :0 Se han formado una maraña de amores correspondidos y no correspondidos por la academia que se nota la tensión en el aire, buf (? Y Ash siendo odiado por unos cuantos, pobre, me da penita xD

    Me gustó el cap, como puedes ver, has introducido la mega-evolución y eso es genial, me pregunto si llegará a ser relevante en la historia y si los abuelos marchosos (? ayudarán con el problema que se está liando en el bosque; ver a esos pokémon en acción estaría bien~ Y omg, ¡Serena fue mencionada al fin! *-* Por favor que aparezca pronto, o al menos que aparezca <3

    Por aquí ya no tengo nada que aportar así que sigue así, ánimo con la conti. ¡Nos leemos!
     
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  18.  
    Hekthoram

    Hekthoram Iniciado

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    Que bueno que continuaste la historia (la leí por ultima vez como en diciembre de el 2014 y para entonces solo haz actualizado 2 veces y una es "reciente" :V, pensé que para este tiempo ya estarías por acabar la serie o ya se habría acabado) pero bueno dicen mejor tarde que nunca :p cambiado de tema porque no haz actualizado mas que 2 veces en un año y pico? problemas escolares/familiares o simplemente no tenias ganas de escribir, sea cual sea espero que puedas publicar un poco mas seguido al menos una ves cada 2 meses o algo asi.

    y respondiendo a tus preguntas:

    ¿Qué fue ese extraño y potente remezón?
    R: No lo se una explocion talvez?

    ¿Estará relacionado con el árbol brillante?
    R: Obviamente lo estará

    ¿Nicolette estará bien?
    R: No lo se pero espero que si :/

    ¿quién será la “chica de sombrero de paja”?
    R: pues no estoy seguro no e visto pokemon desde que se acabo diamante y perla :V, pero de seguro alguien que hará la historia mas interesante seguro r.r
     
    Última edición: 19 Mayo 2016
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  19. Threadmarks: Capítulo 25: ¡Noche catastrófica en el bosque!
     
    Steve Yops

    Steve Yops Usuario popular

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    Título:
    [Versión "beta"] Nuestros destinos se re-enlazan (Advanceshipping y otros)
    Clasificación:
    Para niños. 9 años y mayores
    Género:
    Comedia Romántica
    Total de capítulos:
    25
     
    Palabras:
    9742
    ¡Hola a todos mis lectores queridos! Afortunadamente pude demorarme menos en actualizar esta vez :3 Aunque vaya que en un inicio me costó poder escribir el capítulo, porque estaba lleno de cosas y no lograba plasmar al 100% lo que tenía pensado para este capítulo, pero ahora que tuve un poco más de tiempo libre y la inspiración me llegó a full, ¡pude concretar todo lo planeado y quedé muy contento en como me quedó!

    Considero a este capítulo bastante mixto en lo que se refiere al tono ambiental, pues tiene escenas de mucho suspenso y tensión, pero también tiene ese toque comédico y romántico que conocemos en otras :) ¡Espero que lo disfruten mucho!

    Capítulo 25: ¡Noche catastrófica en el bosque!
    Minutos antes de los últimos sucesos del capítulo anterior…

    En una esquina específica del bosque, había una figura que iluminaba muy intensamente con una tonalidad dorada. Era sencillamente hermosa. ¿Lo más llamativo? Parecía ser luz propia del árbol; no habían lucesitas navideñas, ni enchufes, ni era un árbol sintético ni nada por el estilo: era un árbol real, tan natural como todos los otros del mismo bosque. Y entonces… ¿por qué será que tiene esa característica tan única que lo diferencia del resto?, ¿cuál es el truco?, ¿cuál es el secreto?

    Este árbol tan particular, parece estar especialmente protegido para que las manos del ser humano no puedan tocarlo ni manipularlo, porque a veces pareciera que dichas manos no siempre tienen buenos fines. Está ubicado en una colina realmente alta, y pareciera que hubiese algo más que impide el acceso humano hacia la gran planta. El mayor enigma es que dicha protección adicional no puede verse. Se dice que la gente cuando intenta poner un pie en la colina, rápidamente choca con una especie de “muro invisible”. Simplemente no tienen acceso.

    Este árbol especial resaltaba mucho de noche, era como un faro eco-amigable y 100% natural. Lástima que nadie pueda acercarse a su belleza, ¿no? Además… los alrededores andaban más bien silenciosos. ¿O quizás no? Quizá… esto se afirmó muy pronto.

    Unos pasos bastante veloces podían ser escuchados a no muy lejana distancia. Era tanta la tranquilidad de la noche que cuando se pisaba el pasto se escuchaba tan claro como el agua misma. Estas figuras corredoras iban a un paso tan veloz, que eran irreconocibles a simple vista... eran como ninjas prácticamente. Y la verdad es que… no pasó mucho tiempo para que dichas figuras aparecieran, precisamente, frente a la colina que se había mencionado hace un rato atrás. Como por fin estaban quietos, y con ayuda de la luz de la luna, los rostros de los sujetos se hicieron visibles. Eran tres; dos de ellos eran exactamente iguales: pelo verde oscuro, piel blanca, un gran gorro negro, y un traje del mismo color. El restante, que estaba en medio de los dos, era más distinguible: tenía pelo y barba morada… era más bien, una cara que ya habíamos visto antes.

    —Y aquí estamos señor Petrel —dijo uno de los gemelos, ubicado en la derecha.

    Petrel soltó un gran suspiro de satisfacción, y se estiró con su típico aire de soberbia tranquilidad.

    —Cuando quieras, amiguito… —le dijo el ejecutivo al gemelo ubicado en la izquierda.

    El susodicho al que le habían hablado, sonrió con un gesto más bien macabro, pero no dijo ni una sola palabra. Entonces, flectó lentamente sus rodillas y… pegó un salto que fue realmente sobre-humano, y aterrizó como si se tratara de un acróbata realmente profesional justo al frente de la colina.

    Este gemelo que parecía ser de pocas palabras, extendió su brazó con su mano empuñada, a excepción del dedo índice y… ¡brum! Una especie de barrera energética apareció por unos muy leves segundos.

    —Es energía psíquica, señor —-informó el gemelo hablador, mirando un escáner electrónico
    —Tal como lo sospeché… ¡Ya sabes que hacer! —exclamó Petrel.

    Y entonces… los ojos del gemelo de pocas palabras empezaron a alumbrarse como de un color turquesa, y…

    ¡¡¡KA-BOOM!!!

    Una explosión estruendosa y potente, que fue la misma que hizo caer a las alumnas de la Poké-academia, apareció estrepitosamente, liberando un cortina de humo y agitando los árboles de todos los alrededores. Varios pokémon salieron asustados en dirección contraria al epicentro de los hechos, y había una especie en específico que salió más bien irritada de que le interrumpieran el ciclo de sueño.

    —¿¡Q-qué… fue eso!? —exclamó Nicolette, levantándose del canal, al cual cayó abruptamente luego de la explosión.

    La joven ranger entrecerró los ojos para agudizar su vista y pudo divisar el humo que estaba siendo despedido a lo lejos. Ante esto, la chica apretó los labios con mucha intriga y estrés y comenzó a buscar algo en su bolsillo, y para suerte suya, encontró lo que estaba buscando: la pokébola de su Vileplume.

    —Debo asegurarme de que ningún pokémon esté herido… —susurró la joven pelirroja.

    Y la gente de la Poké-academia no fue la única en sentir la repercusión del atentado. Los mega-abuelos en esos momentos se encontraban meditando a la luz de la luna y las estrellas en el jardín del Santuario Místico, junto a sus pokémon: Medicham y Alakazam, y evidentemente el ruido del estallido los sacó abruptamente del trance.

    —¿Qué fue eso, Timothy? —preguntó una angustiada Shelby.
    —¡Kazamm! —exclamó el pokémon, señalando en dirección del humo resultante de la explosión.

    La pareja de ancianos fijó la mirada en el lugar donde el humo estaba saliendo y luego voltearon la mirada al árbol dorado… que no estaba muy lejos de ahí.

    —No… ¡El Árbol Fulgor! —exclamó Shelby—. Alguien debió haber pasado la barrera.
    —Y si lograron hacerlo es porque lo estudiaron todo y están empeñados en un objetivo que no tiene nada de bueno… —comentó Timothy—. Tenemos que ir ya…
    —¡Ni se les ocurra irse! —exclamó una voz femenina—. ¿Tan maleducados que son que no van a atender a sus visitas?

    Justo cuando la pareja de sabios estaba a punto de emprender el paso, frente a sus ojos aparecieron dos sujetos que compartían cierto parentesco con los guías turísticos que habían visto en la tarde, Cassandra y Bruce. Mas habían diferencias notables, y no era sólo el gesto facial para nada amigable, también era la ropa: eso trajes negros, con esa “R” particular en medio… decía claramente que pertenecían a una organización que no tenía buena fama.
    Estos dos, además, iban acompañados de un Granbull y un Mightyena.

    —¿Y como qué se les ofrece? —cuestionó Shelby, con recelo.
    —Vimos un par de objetos que adornaban su casa que nos gustaron mucho, así que queremos que nos los muestren —dijo Butch—. Y eso no es una petición en la que consideraremos un “no” como respuesta.
    —Yo me encargo de ellos —susurró Timothy.
    —¿En verdad creen que la dejaremos ir…? —cuestionó Cassidy.
    —Pues eso no se trata de algo en lo que consideraremos un “no” como respuesta —contestó Shelby, quién desapareció rápidamente frente a los ojos del dúo Rocket al ser envuelta en un aura enérgica junto a Medicham.

    Butch y Cassidy abrieron los ojos con gran sorpresa y estrés ante la repentina desaparición de la mega-abuela, o quizá el término más apropiado sea teletransportación. El viejo Timothý esbozó una discreta sonrisa, y Alakazam, quién había sido el que ejecutó el ataque de escape de Shelby y Medicham, se puso en posición de batalla.

    —La entrada al lugar no es gratis, el pago es la victoria… un precio que les va a quedar muy afuera de su alcance —afirmó el mega-abuelo.

    *****​

    Volviendo exactamente al último suceso ocurrido en el capítulo anterior….

    Un silencio reinó durante unos segundos que se sintieron eternos. Las cinco chicas estaban boca abajo, respirando agitadamente y sin mover ni una sola articulación para cambiar de posición. El estruendo fue demasiado potente, y terrorífico, dejando a las jóvenes petrificadas luego del acto.

    El pequeño Pichu, por su parte, se asomó tímidamente por la entrada de la carpa, asustado por la fuerte explosión.

    —¡May! —exclamó una voz masculina.

    De manera casi inmediata, el azabache salió corriendo en dirección a la chica de ojos zafiro, y la tomó con cuidado de los brazos, ayudándola a ponerse de pie.

    Max y Norman, al ver que su familiar estaba en el suelo, se alarmaron, pero luego bajaron los niveles de adrenalina al ver que el chico le había ayudado a levantarse, y aparentemente no le había ocurrido nada de malo.

    —¿Estás bien? —preguntó el chico, tocándole el rostro para que hiciera contacto visual.
    —¡Nosotras estamos fabulosas, gracias! —respondió la chica de ojos lapislázuli, indignada, poniéndose de pie y apretando fuertemente las manos.

    Ash soltó un suspiro ante el reclamo de la coordinadora de Sinnoh, sin emitir alguna respuesta de lenguaje verbal. A continuación, Jimmy ayudó a levantar a su novia y verificó que se encontrara bien. Dicha acción fue imitada por Solidad y Lance, quienes ayudaron a Lyra y Brianna ponerse de pie.

    —¡U-una explo-sión! —balbuceó Lyra—. Ll-llego e hizo... ¡Boom! Y luego, ¡ay! Qué miedo.
    —Sosténganme fuerte, creo que puedo desmayarme en tan sólo unos minutos y no será lindo… —susurró nerviosamente Brianna, mientras su cuerpo temblaba como boca de cascanueces.

    Dawn blanqueó los ojos con aire de hostigamiento y prosiguió a mirar con furia al azabache, el cual no soltaba aún a su rival del ámbito amoroso.

    —¿Y bien? —preguntó suavemente el chico con “z” en las mejillas.
    —Estoy bien… y ahora mejor. Muchas gracias por preocuparte —respondió la chica, calmada al fin, sonriendo enternecida.

    Ash se unió a la sonrisa de la chica, y quedaron mirándose durante unos cortos pero agradables segundos…

    —¡Súper! Ahora suéltala —replicó Dawn, quitándole el brazo a su ex-novio de la castaña de manera brusca.
    —¿¡Cuál rayos es tu problema!? —exclamó la castaña, irritada.
    —¡Ay!, ¿a la bebita le molesta que no la puedan consentir? —cuestionó la chica de cabellos azules, mirándola con fingido pesar.

    —¿Sabes qué? ¡Sí! —contestó la castaña irritada—. Me encanta que Ash sea tan lindo y atento, así que sí me molesta que siempre te metas en medio.

    El azabache, de manera un tanto inconsciente, esbozó una pequeña sonrisa de su rostro con un muy leve brillo en sus ojos. Si bien no era consciente de estos signos, sí sabía que ese dicho le sentó muy bien y de manera distinta a todo lo que ha experimentado antes. Por el contrario, la coordinadora de Sinnoh abrió los ojos, atónita y disgustada.

    En lo que se refiere a los espectadores, Drew apretó la mandíbula con gran frustración y empuñó sus manos para contener toda la impotencia sentida en ese momento. Marina y Jimmy abrieron los ojos y sonrieron con aires tanto de sorpresa como de satisfacción, y Norman… simplemente cruzó los brazos mientras observaba fijamente el rumbo de la discusión.

    La castaña, por su parte, continuó:

    —Y también me molesta que no pares con tus tonterías. ¿Qué el último castigo no fue suficiente?
    —¿Qui il iltimi quistigi ni fi sificinti? —se mofó la peli-azul—. A mí me molesta tu presencia y de todos modos tengo que lidiar con eso todos los días, ¿no?

    La chica de ojos zafiro tomó aire, irritada, y desvió su mirada a otro lado para tratar de eludir dicho conflicto que la verdad no estaba yendo a ningún lado. El chico con “z” en las mejillas, por su parte, negó con la cabeza como muestra de decepción hacia su ex, mientras que ésta giró sus ojos con fuertes aires irónicos.

    —Ya, suficiente. Basta de peleas —intervino Solidad—. ¿Y Nicolette dónde está?

    Pero apenas la tutora intentó dar un paso, un fuerte e intimidante sonido envolvió el lugar. Todos los presentes comenzaron a mirar de un lado a otro para ver de dónde venía dicho ruido. Con el pasar de cada segundo, la intensidad del misterioso fenómeno sensorial aumentaba más y más, y estaba comenzando a poner el ambiente realmente escalofriante e inquietante. Era un zumbido. No, varios zumbidos. Parecía que una horda se estaba acercando...

    —Oh… por… Arceus —susurró Max.
    —¡¡Bssssstt!!

    Era una manada. Gigante, muy gigante. Daba la impresión que se formaba como una gran masa amarilla con negro, y un millón de ojos rojos totalmente amenazantes con el que ganas de cruzar miradas no nacían. Y el ruido era completamente desesperante. ¿Y lo peor? Que no se quedaron quietos.

    —¡¡Corraaaaan!! —gritó Lyra.
    —¡No! —exclamó Solidad—. ¡Momen-!

    Pero ya era demasiado tarde. El miedo se había apoderado de todos y cada uno de los estudiantes, y como era de esperarse, estos corrieron despavoridos en dirección opuesta a las abejas. La castaña, por su parte, tomó a Pichu en brazos antes de empezar a correr como si no hubiese un mañana.

    El pánico era inmedible, los estudiantes tomaron distintos caminos sin detenerse ni un solo segundo, y los Beedrill comenzaron a perseguirlos.
    Afortunadamente, Solana y Norman lograron contener a los pequeños aprendices antes de que estos escaparan del susto, y les ordenaron agacharse.

    —¡Max! —exclamó Norman, abrazando a su hijo
    —¡Niños, manténganse en el suelo y no les pasará nada! —dijo Solana.

    La cantidad de Beedrill era impresionante. Si bien una buena cantidad se fue persiguiendo a los estudiantes, otra manada seguía llegando, y eso significaba más problemas; es más, algunos parecían ir disminuyendo la velocidad al llegar al campamento y eso no era signo de buenas noticias.

    De manera veloz, Plusle comenzó a olfatear por mero instinto en dirección a las abejas, y entonces, el roedor se levantó de golpe y sus orejas empezaron a moverse rápidamente.

    —¡Plusle! —exclamó el pequeño eléctrico de Solana, señalando el camino de donde provenían las abejas.

    Solana no comprendió del todo a qué se refería su amigo, pero de todas formas asintió, sacó el capturador y apuntó en la dirección que Plusle le había señalado. Éste tocó con su cola el capturador, y soltó una muy leve descarga eléctrica para activar la Poké-ayuda.
    La tutora ranger, entonces, con gran esfuerzo y dificultad debido a su postura corporal en ese momento, lanzó el disco capturador y empezó a trazar líneas en el aire con la vara lo más que pudo y terminó formando el círculo y entonces… el pequeño destello hizo acto de presencia.

    —Captura completada… —susurró Solana, aliviada.

    Y entonces, unos fuertes y pesados pasos comenzaron a escucharse a lo lejos. Las abejas comenzaron a elevarse lentamente por instinto defensivo, y entonces… apareció lentamente un gran bípedo oso pardo, con un círculo amarillo en su vientre y “mechones” notorios en sus hombros. Era un Ursaring.
    Solana lo escaneó rápidamente y se dio cuenta que tenía un ataque súper útil para una situación como en la que se encontraban.

    —¡Ursaring, usa Rugido para que los Bedrill regresen a su nido!

    Ursaring le dio la espalda a Solana para mirar a los Beedrill directamente. Entonces, su cuerpo comenzó a ser rodeado por un aura roja y luego de esto, Ursaring soltó un muy potente aullido que se propagó en forma de ondas casi visibles al ojo humano.
    Las abejas retrocedieron varios metros en el aire, y acto seguido, la manada abandonó el lugar yéndose exactamente por la dirección de donde vino.
    Asimismo, Ursaring luego de haber colaborado con la ranger, abandonó la zona de camping tranquilamente para volver a su hábitat.

    —Uff… logramos salvarnos —comentó Solana, aliviada.

    Apenas dijo eso, dos Beedrill aparecieron de los senderos de los costados y se detuvieron en la zona de camping.

    —Ay, no… —susurró la ranger—. Bien, Plusle, ayúdame…
    —¡Tranquila profesora Solana! —exclamó una joven voz femenina proveniente de uno de los senderos por los que llegó una de las abejas.

    A los pocos segundos, llegaron unos sonrientes y seguros Keith y Caty, con las varas de sus capturadores apoyadas en sus hombros.

    —Son nuestros aliados ahora —informó Caty.
    —Apenas logramos quedar en una posición estratégica, logramos capturarlos y tenemos un buen movimiento de campo que puede ser de ayuda: Dulce Aroma.
    —¡Vaya, vaya! —exclamó la profesora ranger—. Estoy muy orgullosa de ustedes muchachos.
    —Sugiero que entonces vayan en búsqueda de los estudiantes —intervino el profesor Oak—. Norman, Solidad y yo podríamos cuidar el campamento.
    —Claro, y yo puedo ayudar con la búsqueda por aire —añadió Lance.

    La tutora ranger y sus alumnos los asintieron y comenzaron su marcha por uno de los senderos. Lance, por su parte, lanzó una pokébola para que Dragonite apareciera y pudiera ayudarle en su búsqueda aérea. Pero justo antes de que el maestro de dragones pudiera montarse en el lomo de su pokémon…

    —Por favor, ten mucho cuidado, ¿sí? —le dijo Solidad, tomándolo del brazo.

    Lance sonrió, y le dio un beso en la mejilla para responderle a su pregunta, y finalmente, montó en el lomo de Dragonite y emprendieron el vuelo hacia la misma dirección que el trío de rangers.

    Y como si de coincidencia se tratase, el pelirrojo justo estaba dándole la espalda a la humareda que en aquellos momentos se estaba presentando producto de la explosión, por lo que aún no estaba del todo enterado de los hechos…

    ————————————————————————————————————​

    Nicolette llegó jadeando al epicentro de la explosión, y comenzó a jadear mientras agachaba su cabeza y ponía las manos en sus piernas para recuperar el aliento. La distancia que había recorrido no había sido menor, pero de todas maneras su espíritu solidario propio de una ranger le había servido de impulso para haber corrido sin detenerse hasta ese momento.

    Poco a poco, la joven pelirroja fue levantando la mirada lentamente, y entonces vio el rastro tal cual lo habían dejado Petrel y sus agentes: la “pantalla psíquica” estaba rota; tenía una abertura como si hubieran hecho una puerta prácticamente. Sintiendo un poco de inquietud, la chica sacó a Vileplume de su pokébola, y juntas, comenzaron a caminar con cautela hacia la abertura y entraron por ella, y entonces… fue que se concientizó del destello dorado que lograba verse desde la punta de la colina. Curiosamente, la chica no había podido verlo al llegar, porque parece ser que con la barrera revelada la luz era filtrada y por ende no lograba verse desde el otro lado.

    —Esto está pintando muy extraño, tenemos que tener cuidado… —susurró Nicolette.
    —Plume… —afirmó Vileplume.

    La ranger comenzó a subir la colina de manera muy precavida, mirando constantemente de lado a lado que no hubiera algún indicio de peligro. Paralelamente, la mega-abuela y Medicham aparecieron justamente donde Nicolette estaba hace un rato atrás, y entonces, vio la rotura en la barrera psíquica.
    Ante esto, Shelby se llevó una mano a su boca, preocupada.

    —Santo Arceus… —susurró la sabia—. Esto… esto no es bueno, Medicham. Alguien derribó la barrera psíquica, esto implica que alguien está detrás de las Hojas Doradas.

    Medicham volteó la mirada, observando lo poco que se podía ver la colina desde el llano del bosque, debido a la interferencia visual del campo de fuerza.

    —No hay tiempo que perder, querida. Tenemos que subir ya mismo.
    —¡Cham! —Medicham asintió frente a las palabras de su entrenadora, dándole ánimos en el proceso para comenzar el recorrido. Shelby, por su parte, sonrió orgullosa y luego de soltar un pequeño suspiro, emprendieron el paso.

    (…)​

    —No puedo creer lo que ven mis ojos…

    Un encantado Petrel, acompañado de sus dos secuaces, acababa de llegar al Árbol Fulgor, y contemplaron su belleza. Ese resplandor que emitía desde, por decirlo así, su “núcleo”, se reflejaba en todas sus hojas y ramas. Era un espectáculo digno de ver; el mismo árbol iluminaba la noche más que la luna y los faroles del bosque, y la verdad es que si no hubiese estado bloqueado el acceso, de seguro que sería un punto de turismo muy popular y concurrido.

    El ejecutivo Rocket sonrió con malicia, y estiró sus extremidades.

    —Bien, hagamos esto rápido…

    Pero apenas dio un paso, el gemelo de pocas palabras saltó hacia él, lo tomó de la cintura y lo echó hacia atrás bruscamente. Mili-segundos después, una especie de rayo azul cayó exactamente donde estaba Petrel parado antes de que le salvaran el pellejo.

    —Por lo visto, tenemos compañía —susurró Petrel, mirando hacia todos lados.

    Y entonces, un ráfaga de viento hizo su entrada y numerosas hojas de pasto comenzaron a volar por los aires. Petrel y los reclutas tuvieron que, literalmente, poner bien los pies sobre la tierra, porque si se descuidaban el viento se los llevaba lejos en cualquier momento.

    —¡Allá está! —exclamó el gemelo hablador, apuntando hacia el frente.

    Frente al Árbol Fulgor, ahora se encontraba una pequeña pero amenazante figurita. Tenía color verde oscuro en la mitad inferior de su tronco, mientras que la parte superior tenía una tonalidad algo más clara. De su cabeza, que tenía una forma muy similar a la de una flor de azucena cerrada, salían dos antenas con las puntas azules. Con sus azules ojos, rodeados por una gruesa línea negra, miraba furiosamente a los recién llegados.

    —Pero que gusto verte, Celebi… hasta que al fin saliste de tu escondite —dijo Petrel—. No sabes lo oportuna que es tu aparición.

    >>Bueno, harás que las cosas sean más largas y difíciles, pero quizá nos vayamos con más premios de los que teníamos previstos.

    Sin emitir ni un solo sonido, los ojos de Celebi emitieron un resplandor verde, y a su alrededor, numerosas hojas verdes fulgurantes aparecieron y salieron disparadas hacia el ejecutivo Rocket y sus agentes.

    Sin embargo, pareciera ser que hubo una especie de colisión, debido a que sonó como tal y una pequeña y breve humareda tuvo lugar antes de que las hojas llegaran al trío de criminales.
    Apenas la cortina de humo se disipó, Celebi vio sorpresivamente como al trío de individuos no le ocurrió absolutamente nada. Lo único que había cambiado era la posición de ellos, estando el gemelo mudo en el centro.

    —¡Golbat, mantén ocupada a Celebi! —exclamó el gemelo hablador lanzando una pokébola—. ¡Usa Aire afilado!

    El murciélago bocón apenas salió de su pokébola comenzó a aletear rápidamente, disparando así numerosas “x” de color azul en dirección a Celebi. El pokémon Viaje Tiempo, para su suerte, eludió todas y cada una de las “x” con gran agilidad. No obstante, logró notar que una de las “x” iba a dar directo en el Árbol Fulgor.
    Justo en ese momento, Nicolette y su Vileplume estaban llegando y observaron inmediatamente el panorama a una distancia relativamente prudente para pasar desapercibidas, muy impactadas vale decir.

    Rápidamente, Celebi retuvo la “x” con el movimiento Psíquico, y con esfuerzo la fue moviendo hacia el cielo para que se disolviera. Golbat, por su parte, aprovechó ese momento y comenzó a fijar la puntería para luego lanzar un nuevo ataque a la pequeña pokémon legendaria, aprovechando que se encontraba ocupada en esos momentos.

    —¡No! —exclamó Nicolette—. ¡Rápido, Vileplume, Bala Semilla!

    Y para suerte de Celebi, antes de que Golbat pudiese concretar su ataque, el murciélago cayó directo al suelo luego de recibir una fuerte ráfaga de semillas doradas rodeadas por un tono verde brillante, cortesía del pokémon flor.
    Los Rocket voltearon la mirada sin entender del todo lo que estaba ocurriendo, y se encontraron a una entrenadora de cabellos rojizos y revueltos junto a su Vileplume, mirándolos de manera desafiante.

    —Mira nada más, alguien quiere unirse a la fiesta —exclamó Petrel, llevándose los brazos detrás de la nuca en una pose bastante relajada—. Atiende a la recién llegada, nosotros nos encargaremos de la amiguita verde.
    —Sí, señor —respondió el gemelo hablador, mientras su Golbat volvía al aire.
    —No voy a permitir que le hagan daño a ese pokémon —afirmó Nicolette.
    —Disculpa, pero… no pedimos tu permiso para hacerlo así que están de más tus palabras —dijo Petrel, para luego darle la espalda.
    —¡Golbat usa Supersónico! —ordenó el gemelo que sí conversaba.
    —¡Vileplume, Velo Sagrado! —exclamó Nicolette.

    Lo que pasó a continuación fue mera cuestión de suerte. Golbat lanzó numerosas ondas de sonido en dirección a Vileplume, pero justo antes de que la primera onda tocara al pokémon Flor, su cuerpo se vio rodeado por un aura blanca y al frente suyo apareció un campo de fuerza plateado.

    Vileplume tuvo que aguantar a duras penas el alarido de su contrincante, pero afortunadamente su Velo Sagrado la liberó del efecto primordial que éste en sí podía causar: dejarla confusa.

    —Comienza —le dijo Petrel al gemelo mudo.

    El recluta de pocas palabras comenzó a correr a una velocidad abismal, cosa que Nicolette percibió muy desconcertada, era como si se hubiera puesto patines o algo parecido, porque simplemente era una velocidad fuera de lo natural.

    —¡Vileplume, no dejes que se le acerque: Bala Semilla!
    —No tan rápido: ¡Colmillo venenoso!

    Vileplume pegó un salto para salir del rango del supersónico y disparó otra ráfaga de semillas, sin embargo, en medio del proceso, Golbat salió volando velozmente hacia la Flor y le clavó los colmillos, que adoptaron una tonalidad morada, interrumpiendo así la intervención de Vileplume.

    —¡Vileplume! —exclamó Nicolette, angustiada.

    El recluta mudo pegó otro de sus sobrenaturales saltos para esquivar sin problema alguno las semillas que le fueron lanzadas, y retomó su corrida, estando ya a muy pocos pasos de Celebi, y eso era un problema gravísimo.

    La viajera del tiempo sabía que era momento de defenderse. Sus ojos volvieron a iluminarse con aquella energía psíquica azul, y a continuación, el cuerpo del mudo se vio rodeado por esta misma energía.
    Pero… ¡wow! El recluta seguía corriendo como si nada hubiera pasado. Celebi, angustiada, intentó con más fuerza tratar de empujarlo con Psíquico, pero era inútil. ¡No funcionaba ese ataque con él!

    Nicolette observó esta misma escena muy confundida. No lograba descifrar si acaso ese hombre tenía alguna especie de protección en su traje o qué, aunque la chica no pensaba quedarse de brazos cruzados. Si bien la distancia de separación y la diferencia de velocidad era exorbitante, la chica se sentía compromeitda a salvar a la pequeña legendaria, así que empezó a correr, pero en medio del camino, Golbat botó a Vileplume, por lo que la chica tuvo que hacer una maniobra casi de acróbata para poder salvar a su pokémon de una fuerte caída.

    —¿Estás bien? —preguntó Nicolette.
    —Plume… —respondió asintiendo.
    —¡Bii! —exclamó Celebi con dolor. Finalmente, el recluta de pocas palabras llegó hacia ella y la agarró con su mano fuertemente.
    —¡Bravo, bravo! —celebró Petrel—. Mientras tú la tienes en tus manos, puedo ir tranquilamente por las Hojas Doradas…
    —¡¡Megapatada!!

    Una nueva voz pronunció dichas palabras. Y la verdad es que no pasó mucho tiempo para que ante los ojos de los presentes, apareciera una nueva figura en lo que en ese momento era el campo de batalla y le propinara un buen golpe en el estómago al recluta mudo.
    En el proceso, Celebi pudo liberarse del agarre, y una vez que el recluta cayó al suelo su cuerpo se vio envuelto en una luz morada, lo cual descolocó aún más a la ranger. ¿Qué era lo que tenía ese sujeto? Y no pasó mucho tiempo para encontrar la respuesta, porque una vez que la luz se disipó, apareció ante sus ojos una especie de zorro gris con una larga cabellera roja, garras del mismo color y una pequeña parte del pelaje de color negro.

    —Este pokémon me lo mostró Keith una vez… ¡Es un Zoroark! —exclamó Nicolette en voz baja.

    Y no era la única novedad que acababa de aparecer ante sus ojos. Al lado de Celebi estaba quien se encargó de liberarla de las garras de Zoroark; era muy similar a un Medicham, pero tenía un par de diferencias: en su cabeza tenía una especie de turbante blanco con una piedra amarilla en el centro. Sus ojos eran azules, y tenía unas bandas doradas en sus muñecas, y otras tres bandas en su cintura —y en la más baja de éstas, tenía colgadas unas piedras azules en forma de lágrima—. Además, tenía como una especie de “brazos fantasma” a su alrededor, dos a cada lado para ser exactos.

    —Una mega-evolución, ¿eh? —comentó Petrel.
    —Será mejor que se vayan de aquí cuanto antes —dijo Shelby, apareciendo al lado de Nicolette.
    —¡Señora Shelby…! —susurró Nicolette.
    —¡Cómo cree! Aún no hemos completado el carrito de compras —respondió el ejecutivo Rocket. A continuación, volteó a ver a su recluta acompañante—. Tú ocúpate de la niña, yo me encargo de la abuela.

    Los pokémon de Shelby y Nicolette se pusieron en posición de batalla. Zoroark se levantó y miró furioso a Mega-Medicham. Celebi, por su parte, se escondió detrás de la joven ranger. Una nueva batalla estaba a punto de empezar…

    ————————————————————————————————————​

    En esos mismos momentos, Pikachu se encontraba escapando de los Beedrill, y en la mitad del sendero y al ver que había perdido al enemigo de vista, el roedor comenzó a mirar a sus alrededores, y se encontró con la no muy grata sorpresa de encontrarse solo.

    —¿Pikapi?

    No. Ash Ketchum no estaba con él. En medio del tumulto Pikachu había caído el suelo y por mero instinto había comenzado a correr confiando en que iba a estar con su entrenador, pero ahora que la vía al fin estaba despejada, se dio cuenta de que no era el caso.

    No obstante, el eléctrico ratón no iba a estar solo por mucho tiempo. Sus orejas comenzaron a moverse apenas detectó algo… eran los zumbidos de nuevo.

    —¡Bsssst! —Cuatro Beedrill aparecieron de golpe y de manera inmediata lanzaron una multitud de agujar moradas: era Picotazo Venenoso.
    —¡¡Pika…!! —exclamó Pikachu, angustiado, tratando de esquivar lo máximo posible.

    Paralelamente, Dawn y Brianna se habían encontrado con Timmy, y al ver que no había moros en la costa, el trío de coordinadores se encontraba caminando sigilosamente de vuelta detrás de los arbustos, cuando…

    —Dawn, ¿ese no es el Pikachu de Ash? —comentó la coordinadora de Isla Crisantemo.

    La coordinadora de Sinnoh volteó a ver a la dirección que le había apuntado su amiga, y entonces presenció el momento en que Pikachu estaba haciendo lo posible por defenderse de los cuatro Beedrills.

    —¡Lo tienen acorralado! —exclamó Timmy, aterrado.
    —Pika… ¡¡Chuuuuuu!! —Pikachu soltó una fuerte descarga eléctrica de Rayo, logrando darle a dos de los Beedrill. Sin embargo, los dos que pudieron evadir el ataque lo atacaron por la espalda con sus aguijones, haciendo que el ratón cayera boca abajo.

    Con algo de esfuerzo, Pikachu se dio vuelta para levantarse, pero no pudo dar más que media vuelta. Apenas logró estar boca arriba, uno de los Beedrill lo acorraló, clavando levemente su aguijón en cerca de la cara del roedor.

    —¡Hay que hacer algo…! —susurró Brianna, angustiada.
    —¡…uy, no puedo creerlo! —exclamó Dawn, frustrada—. ¡Mamoswine, sal y usa Canto Helado!

    La chica de ojos lapislázuli lanzó una pokébola y salió su conocido mamut tipo hielo-tierra. Éste pegó un gran rugido, provocando que los Beedrill voltearan a mirarlo algo asustado, y eso era sólo el comienzo. A continuación, Mamoswine inspiró aire y soltó una enorme ráfaga de fragmentos de hielo, dándole de lleno a las cuatro abejas.

    Un tanto heridos, los cuatro Beedrill huyeron despavoridos al ver que se encontraban en desventaja, por lo que Pikachu estaba a salvo nuevamente.
    El pequeño eléctrico, aliviado, se acercó al mamut para agradecerle por su ayuda, y para su sorpresa, una chica apareció detrás de él, acompañada de otras dos personas.

    —¡Pikaka! —exclamó Pikachu, reconociendo a Dawn.

    La chica de cabellos azules con los brazos cruzados, inhaló aire lentamente, tratando de mantener la posición “dura” con la que siempre se suele mostrar.

    —…bien, tenemos que volver al campamento. Chicas, bola de pelos: vamos.
    —¿Eh? —cuestionó Timmy.
    —¡Ah, cierto! Lo siento, es la costumbre… Por un momento pensé que eras Lyra.

    Tras esas palabras, una disimulada Dawn, un incómodo Timmy y una divertida Brianna comenzaron a dar el paso de vuelta. Pikachu quedó mirando por unos segundos a la ex de su entrenador, y luego de sonreír levemente, emprendió el rumbo junto a los tres chicos y el mamut.

    ————————————————————————————————————​

    Mientras tanto, el entrenador de dicho pokémon se encontraba corriendo en otro de los senderos, y la verdad… no podía para. Dos Beedrill iban pisándole los talones y hasta lanzaron ataques un par de veces. El azabache tuvo que doblar hacia la izquierda para evitar golpearse con un árbol pero…

    —¡Gahh! —gritó Ketchum.

    En el proceso, el joven con “z” en las mejillas tropezó con una gran piedra en el suelo y cayó de golpe. Algo apurado, Ash trató de levantarse, pero apenas hizo el intento sintió un dolor en el pie izquierdo realmente insoportable y no pudo lograrlo.
    Y lo peor de todo, era que la compañía seguía allí.
    A continuación, los Beedrill comenzaron a lanzar numerosos rayos blancos con la punta de alfiler: Misil Aguja.

    —¡¡Aaaagh!! —se quejó Ash, cubriéndose la cabeza con el brazo, tratando de aguantar lo máximo posible.
    —¿¡Ash!? —susurró una voz.

    La castaña se encontraba escondida detrás de un árbol. Apenas había escuchado los zumbidos de Beedrill, ella y Pichu rápidamente se acurrucaron detrás del tronco más alto que vieron y esperaron que pasaran de largo. No obstante, apenas escuchó esa voz que reconoció al instante quejarse de dolor, se asomó sigilosamente y vio que el chico se encontraba en pleno peligro.
    La chica, angustiada, tomó aire y miró a su pokémon. Éste, por su parte, asintió con determinación sin necesidad de que su entrenadora le dijera algo. Él quería ayudar.

    —Gracias… —susurró con los ojos vidriosos.

    Los Beedrill estaban irracionalmente furiosos. Las abejas continuaban con su ataque sin darle un respiro al pobre chico. Aunque eso fue un arma de doble filo; cómo ambos estaban con la atención tan enfocada en su víctima, no lograron ver como en el aire un pequeño corazón se estaba acercando a uno de ellos y… ¡muack!
    El Beedrill que se encontraba más cercano al escondite de May y Pichu detuvo su ataque y comenzó a ver a una ronda de Torchic bailar alrededor de su cabeza, y entonces… ¡comenzó a atacar al otro Bedrill!
    Éste recibió el ataque de lleno y al ver que empezaba a correr peligro y que su compañero no estaba del todo consciente, comenzó a volar de vuelta a su nido, siendo perseguido por su nuevo victimario.

    El azabache, jadeando, mostró una expresión mezclada entre alivio y dolor. Los Beedrill lo habían golpeado bastante fuerte, cosa que se hacía evidente en los rasguños presentes en su cuerpo.

    —Santo cielo… ¡Ash! —exclamó la chica de ojos zafiro.

    May salió corriendo en dirección a Ash, y prácticamente sin pensarlo, lo abrazó y le acarició el pelo, un tanto preocupada al ver el estado de su compañero.

    —¿Te sientes bien? —preguntó, separándose del chico y acariciándole ahora la mejilla.

    Ash, aun jadeando un poco, sonrió levemente y puso su mano sobre la de la chica.

    —Ahora mejor —afirmó el azabache—. Pero mi pie izquierdo me está doliendo mucho, no me puedo mover.

    La castaña procedió a revisar el pie del azabache, y notó que estaba inflamado. El golpe con la piedra le provocó un moretón, y a juzgar por el estado de éste y al ser reciente, el dolor debía ser bastante elevado…

    —Escucha, detrás del árbol del que nos escondimos había un pequeño canal, iré por un pañuelo para humedecerlo y así limpiarte esos raspones y calmar la inflamación del pie, ¿de acuerdo?

    Ash asintió.

    —Pichu, por favor cuida a Ash mientras yo regreso; no dejes que le pase nada, ¿sí?
    —¡Pichu, Pichu! —exclamó el ratoncito, inflando su pecho orgullosamente.

    La coordinadora de Hoenn miró al joven de cabellos puntiagudos antes de irse y le estrechó un poco las manos con la del chico y le susurró “todo estará bien”, para finalmente salir corriendo hacia el canal, luego de sacar el pañuelo de la mochila.
    El chico de ojos café oscuro siguió con la mirada a la chica, sintiéndose bastante enternecido. Incluso el estar sumido en esa situación hacía sentir que de cierta forma el dolor de su pie era menor.

    —‘Eres fantástica, May…’ —dijo el chico en sus pensamientos.

    ————————————————————————————————————
    Mientras tanto, Lance se encontraba regresando con Paul, Lyra y Vincent en el lomo de Dragonite.

    En la zona de camping afortunadamente se encontraban ya varios estudiantes de regreso, y todos recibieron a los recién llegados con expresiones de alivio. Lance, sin embargo, no tenía esa misma expresión al aterrizar.

    —Al fin… —susurró Paul exasperado, bajándose del dragón.
    —¡Fue un paseo tan divertido! —exclamó Lyra, pegando saltitos al bajar.
    —Y Paul es buena onda, ¿no? —comentó Vincent, sonriente.
    —Ugh... ya cállense —dijo el entrenador de cabellera morada.

    Paul se alejó lo más rápido posible del dúo de alegres hiperactivos. Quizá… era algo más bien predecible. Él era serio y reservado y justo se eligió el mismo sendero que habían elegido sus polos opuestos.

    —Quizá tiene sueño… —dijo el castaño entrenador.

    A continuación, Lyra se despidió de Vincent y fue a saludar a sus amigas que ya habían llegado para ese entonces. No obstante vio que aún faltaban algunos conocidos…

    —Vaya, Jimmisito no está por aquí. Y por lo visto Ash tampoco…
    —Ni lo menciones —comentó Dawn—. La insoportable de la Baloser tampoco ha llegado...
    —Bueno… en una de esas ella está con Marina y Ash con Jimmy, ¿no? —dijo Brianna para calmar por el ambiente.

    La coordinadora de Sinnoh tomó aire, y al ver que Paul ya había llegado, lo saludó a lo lejos. No obstante, él la ignoró por completo y siguió con lo suyo, lo cual la descolocó un poco.

    Por otro lado, Solidad notó la extraña mirada en Lance, por lo que fue a preguntarle qué había ocurrido.

    —Al volver, vi una cortina de humo, algo débil pero aún seguía ahí… Definitivamente la explosión ocurrió en ese lugar.
    —Hmm… De seguro fue por eso que los Beedrill se alborotaron. Bueno, eso y la miel regada.
    —¿Miel regada?
    —Cuando los Beedrill se fueron, el profesor Oak, Norman y yo examinamos el lugar y nos encontramos con varios charcos de miel a los costados del camping. Los limpiamos hace poco para prevenir que los Beedrill regresaran.

    Ante la revelación de la coordinadora de élite, la expresión de Lance cambió a una de sospecha y volteó la mirada a su Dragonite…

    —Solidad, tengo que ir a ver que ocurrió en el lugar donde está el humo —dijo el pelirrojo.
    —¿Qué? ¡Lance, no!
    —Tranquila, sólo quiero asegurarme que todo esté bien. No tardo…

    Lance le tomó la mano a su novia para reforzar sus palabras, y finalmente, luego de darle una cálida sonrisa, subió en el lomo de Dragonite y le pidió ir al lugar donde había ocurrido la explosión.
    Solidad, un poco preocupada, se llevó la mano a su pecho y tomó aire.

    —Tranquila, linda, ya sabes cómo es él… —dijo Solana, acercándose a la muchacha de cabellos rosados—. Además ya van quedando muy pocos alumnos por encontrar, ya Keith y Caty vienen con otros dos y yo voy a buscar a los que quedan…

    Solidad, no muy convencida, asintió. Por la parte de los estudiantes, estaba algo tranquila puesto que como bien había dicho Solana, iban quedando ya muy pocos por encontrar y los rangers estaban haciendo un trabajo fantástico en ello. No obstante, estaba un poco preocupada de que su novio se metiera en algún problema. Y no era falta de fe, porque ella sabía que era un entrenador excepcional, pero le preocupaba que la fuente de semejante explosión fuera algo muy peligroso para él solo.

    Y de repente, un viento fuerte recorrió la zona de camping y varias hojas de los árboles comenzaron a caerse, creándose una especie de lluvia de hojas. Esto alarmó un poco a Solana, pues parecía conocer el significado de ese fenómeno.

    —‘¿Celebi?’ —dijo la ranger en sus pensamientos.

    ————————————————————————————————————​

    —¡Colmillo Veneno!

    El Golbat del recluta Rocket comenzó a dirigirse a toda velocidad hacia el Vileplume de Nicolette, mientras que sus colmillos volvían a adoptar el tono morado…

    —¡Esquiva y usa Corte! —ordenó Nicolette.

    Vileplume saltó justo antes de que el murciélago pudiera darle un golpe con el ala, y a continuación, en una de sus manos apareció un sable de energía brillante y golpeó a Golbat en la espalda.

    —¡Aire Afilado! —exclamó el recluta.

    Antes de que Vileplume pudiera alejarse, Golbat se dio vuelta y. aleteó fuertemente, liberando las “x” azules que golpearon brutalmente al pokémon flor.

    —Medicham, Patada de Salto Alta —comandó Shelby.

    Medicham pegó un salto altísimo y apenas comenzó a ser arrastrada por la gravedad, extendió una de sus patas para darle una poderosa patada a Zoroark apenas llegase al suelo.

    —Ahora mismo, antes de que llegue: ¡Pulso noche! —mandó Petrel
    —¡Detección!

    Los ojos de Zoroark emitieron una luz azul y luego de eso todo su cuerpo se vio rodeado por un aura magenta. Levantó sus manos y las golpeó ferozmente contra el suelo, y a continuación un gran campo de fuerza comenzó a aparecer alrededor del zorro y comenzó a extenderse violentamente arrasando con todo a su paso.
    Afortunadamente, los ojos de Mega-Medicham se vieron iluminados por un aura verde, lo que le permitió agudizar mucho más su vista y pegó numerosos saltos hasta estar fuera del alcance del ataque de su contrincante.

    —¡Megapatada! —ordenó nuevamente Shelby.

    Mega-Medicham fue corriendo hacia Zoroark, y en el proceso, uno de sus pies fue adoptando un color celeste metálico, y apenas logró reunir la energía necesaria, extendió dicho pie para darle una patada al pokémon zorro pero…

    —¡Protección!

    A muy pocos segundos de que Medicham pudiera acertar con el golpe, un campo de fuerza redondo de color turquesa apareció en frente de Zoroark, bloqueando el ataque…

    —¡Ahora usa Juego Sucio! —ordenó el ejecutivo Rocket.

    Apenas la barrera desapareció, Zoroark aprovechó el impulso que Mega-Medicham había tomado, la agarró con los brazos y la empujó brutalmente, usando prácticamente la fuerza que la mega-pokémon había reunido. Y los resultados fueron fatales: Mega-Medicham fue lanzada demasiado fuerte en el aire que parecía un proyectil que no iba a parar pronto. Shelby le agarró la mano para intentar pararla… ¡pero la fuerza con la que fue lanzada fue tan colosal que la mega-abuela fue arrastrada con Medicham y ahora ambas iban a caer por la colina!

    —¡¡¡Shelby!!! —chilló Nicolette, agobiada.
    —Una menos; ya es hora de usar la técnica de emergencia para agilizar esto antes de que nos pase algo como lo de Proton —comandó el ejecutivo en susurro.

    El recluta asintió e inmediatamente exclamó:

    —¡Golbat: usa niebla!

    El murciélago bocón liberó una densa cortina de humo negro, reduciendo muchísimo la visibilidad para Nicolette y compañía…

    —¡Celebi, Vileplume! —exclamó Nicolette, abrazándolas fuertemente para protegerlas de una potencial captura.

    Tomó como medio minuto para que el humo se dispersara poco a poco, y Nicolette no soltó al par de pokémon planta ni por un segundo hasta verificar que estuvieran a salvo.
    Y apenas la visibilidad pudo ser recuperada, Nicolette y compañía notó que ahora el Árbol Fulgor no iluminaba de forma alguna y que un gran hoyo en la tierra había aparecido.

    —No… ¡Escaparon! —exclamó la estudiante ranger, aterrada.
    —Ce… ¡Celebi! —exclamó Celebi nerviosa, despegándose de Nicolette.
    —¡Celebi, espera! —Pero fue demasiado tarde. Apenas Nicolette llamó a la especie legendaria, ésta ya había desaparecido.

    Segundos más tarde, apareció Lance montado en Dragonite, y con él, la mega-abuela y Medicham (ya en su forma regular). Afortunadamente, el maestro de dragones la había pillado mientras estaba subiendo con su dragón, por lo que pudo salvar a Shelby y su pokémon de una caída que pudo haber traído terribles secuelas.

    —¿Estás bien, Nicolette? —dijo Lance, bajándose de su pokémon

    Nicolette, sin bajar de a mucho los niveles de angustia, asintió. Lance, al verla en ese estado, se acercó para abrazarla. La chica comenzó a sollozar silenciosamente al corresponderle el abrazo, sacando así todo el estrés vivido en esa noche. Primero escuchó una explosión súper fuerte, luego se encuentra con integrantes de una organización criminal que se robaron las Hojas Doradas y por poco capturan a un pokémon legendario.

    La mega-abuela se acercó y comenzó a acariciarle el brazo de manera cálida…

    —Eres una jovencita muy valiente, Nicolette —comentó Shelby—. No tengas ninguna duda de que serás una ranger excepcional.

    La pelirroja se separó de Lance, y mirando emocionada a la mega-abuela, la abrazó fuertemente, gesto que Shelby no dudó en corresponder.

    —Escucha, ahora debes volver al campamento; todos andan muy preocupados por ti. Todo estará bien, ¿de acuerdo? —le dijo la sabia al finalizar el abrazo.

    Nicolette, tomando aire profundamente, asintió y se secó las lágrimas de la cara.

    ————————————————————————————————————​

    La castaña ya había regresado con Pichu y el azabache, y en esos momentos se encontraba limpiando cuidadosamente los raspones de la cara del chico. En el acto, los chicos cruzaron miradas y sonrieron tiernamente, y como no, a la joven Balance se le escapó otro de sus ya típicos sonrojos.
    Finalmente, la joven puso el trapo húmedo sobre el pie del chico, esperando así que la inflamación bajara.

    —Bien, ahora sólo debemos esperar un ratito… —señaló May sonriente.
    —Gracias, May, has sido muy atenta —le dijo el azabache muy honestamente.
    —Tú también lo has sido conmigo… ¿no? —comentó la joven Balance.

    Los chicos se miraron sonrientes por un momento, aunque luego de unos segundos, May bajó la mirada y su sonrisa cambió a una expresión más bien ansiosa. Y la verdad es que esto no pasó desapercibido para el joven Ketchum, que aún no despegaba los ojos de ella.

    —¿Qué ocurre? —preguntó él.
    —¡Oh! Pues… —La chica tomó aire por unos segundos y miró pensativa a Ash, hasta que continuó—. Sé que puede sonar un poco extraña mi pregunta pero… ¿Qué hay con “la chica de sombrero de paja”?

    En un principio, Ash miró confundido a la chica y luego soltó una pequeña risa…

    —¿Cómo que qué hay con ella?
    —Bueno… no sé, ya sabes —balbuceó la joven Balance—. Jimmy dijo eso de que eras un rompe-corazones y…
    —¡Ay, por favor, May! —exclamó Ash, riendo—. ¡Me extraña! Tú misma me conoces...

    >>¿Qué no recuerdas lo del festival del lago May? Cuando conocimos a este chico llamado Romeo que estaba enamorado de Julieta, y bueno… yo no me enteraba de nada —El azabache se rascó la mejilla con algo de vergüenza con esas últimas palabras—. Y bueno, tú misma me dijiste que cuando creciera lo entendería todo.

    >>¿Y ahora me preguntas si sentí algo por una chica que conocí siendo aún más pequeño?

    La castaña, ruborizada, se rió ante el comentario del chico. Le causaba dulzura que recordara tan bien los momentos compartidos en su viaje por la región de la que ella era originaria. Posteriormente, tomó un poco de aire, y respondió con un poco timidez:

    —B-bueno, lo que dices tiene mucho sentido…
    —¿Y tú conociste a alguien en Johto? Ya que me preguntaste por alguien del pasado.
    —¡N-no! —exclamó la coordinadora de ojos zafiro, avergonzada—. O ahora que lo dices, quizá sí…

    Al decir la última frase, la coordinadora de Hoenn adoptó una expresión juguetona. Ash soltó una risa, divertido con la chica, y preguntó con algo de picardía de quién estaba hablando.

    —¡Oh! Bueno… —respondió la chica haciéndose la interesante—. No sé si recuerdas a tu antiguo rival, Gary…
    —Sí, lo recuerdo…
    —Bueno, Marina y yo lo conocimos en la Ruta Helada de la región Johto, y no te voy a negar que estaba guapo...
    —¿Ah, sí? —cuestionó Ash haciéndose el indignado—. ¿Y acaso pasó algo de lo que yo deba enterarme?
    —¡Nop, nadita de nada! —contestó May, poniéndose las manos atrás, con los mismos aires juguetones.

    Ash, asintió con una sonrisa juguetona. Si Pikachu hubiese estado ahí, de seguro hubiera notado otra diferencia más en su entrenador; poco a poco el joven con “z” en las mejillas estaba mostrando actitudes que podían ser nuevas para todos lo que lo conocen… Incluso para la castaña de hecho, pero la verdad es que ella ni siquiera estaba analizando nada de eso porque está sumida, disfrutando el momento con el que ahora es el chico de sus sueños. De hecho, la chica se terminó sentando con el chico para seguir conversando, la estaba pasando bastante bien y lo único que quería era que todo siguiera fluyendo.

    Pichu, por su parte, estaba comiendo un racimo de bayas mientras observaba la conversación de su dueña y su compañero; digamos que es la versión forestal del paquete de palomitas.

    —En todo caso… si queremos saber si alguno anda en algo o si a alguien le clavaron la vista, deberíamos preguntarnos por gente de la academia, ¿no? —comentó Ash—. Porque la verdad… sí hay personas que creo que han dado señales claras.
    —¡Hey! Ya hasta estás reconociendo las señales —comentó la joven Balance—. Pero sí, tienes razón: Dawn y Drew… cómo olvidarlos. Presentes en todos los días de nuestras vidas desde que llegamos.

    Ash, con un poco de ironía, asintió al escuchar dichos nombres y recordar a los sujetos a los que les pertenecían…

    —¿Sabes? Ahora que caigo en cuenta, no te he preguntado… ¿cómo te has sentido desde que terminaste con Dawn? —preguntó May.

    El azabache soltó un suspiro con pesadez. Esa pregunta le hizo recordar de inmediato el incómodo momento en el que tuvo que ser franco con la chica y terminar la relación que habían intentado construir.

    —Pues… creo que es evidente que a ella le ha dado más duro que a mí. Y aunque al principio estaba molesta conmigo, parece que ya ha vuelto al modo de conquista otra vez.

    La castaña apretó los labios con algo de incomodidad ante este último comentario.
    Aunque, a decir verdad, para ella no era una sorpresa precisamente que la coordinadora de Sinnoh siguiera en el juego, pues por lo que ha conocido de ella, sabe perfectamente que esa chica es bastante perseverante, es más, usar la palabra “bastante” no es exagerar.

    —Y tú… ¿estás en plan de ser… conquistado? —preguntó tímidamente la castaña.
    —La verdad no sé qué decir con respecto a eso, puesto que… aún no he sentido “ese” sentimiento. O quizá sí y aún no me doy cuenta, pero con ella no es el caso, de eso sí estoy seguro.

    La castaña asintió sin dejar salir a flote ninguna emoción en particular. En el fondo las cosas seguían en modo estándar según esas palabras. Parecía que en esta implícita competencia ambas chicas estaban parejas, si es que se toma en cuenta lo dicho por Ash Ketchum.

    —¿Y tú qué onda con Drew? —preguntó el azabache.
    —Pues… nada, en realidad. No somos nada, si eso es lo que preguntas… ¿o quieres saber algo más específico?
    —Bueno, yo creo que él ha sido un poco obvio y ha intentado coquetear contigo, ¿no? —preguntó Ash con recelo—. Yo creo que quizá le gustas…
    —¡Oh! Bueno… eso es un hecho —respondió la chica de ojos zafiro—. Me lo dijo hace un tiempo atrás.

    El azabache apretó la mandíbula ante aquella revelación, y la verdad no pudo disimular nada de nada su incomodidad; el ceño lo tenía más fruncido de lo usual y su respiración se agitó levemente…

    —Y… ¿tú qué le dijiste? —cuestionó el joven con “z” en las mejillas.

    May se mordió los labios para disimular la sonrisa que tenía ganas de esbozar. Era un hecho, ya había pasado antes y está volviendo a pasar… ¡Ash Ketchum está celoso! Y lo más probable es que aún no es del todo consciente de ello, pero, hey, la sensación ya está ahí. Esta vez May fue lo suficientemente aguda como para pensar que eso era sólo una fantasía…

    —Le dije que no podía hacer nada porque me gustaba alguien más.
    —¡Oh! —exclamó el azabache, notoriamente aliviado—. ¿Y quién es?
    —¡No te voy a decir…! —exclamó la castaña pícaramente.
    —¿Por qué no? Somos amigos…
    —Pero tú no me has dicho quién te gusta a ti…
    —¡Eso es trampa! —protestó el azabache, sonriendo juguetonamente—. Me conoces y sabes que es difícil que eso pase.
    —Pues el día que pase, debes decirme para que yo diga quien me gusta a mí —le dijo sacando la lengua y guiñando el ojo.

    El azabache, sin dejar de sonreír, negó con la cabeza como si estuviese fingiendo indignación…

    —Eres malévola, ¿eh? Aunque… lo encuentro justo. Trato hecho —dijo el joven de cabellos puntiagudos, extendiendo la mano.
    —Un trato será —respondió la castaña, estrechando su mano—. ¿Tu pie está mejor?
    —Déjame ver…

    Sin soltarse de la mano de la chica por precaución, Ash comenzó a levantarse lenta y cuidadosamente. May le sujetó el otro brazo también, para prevenir alguna caída sorpresiva. Y fue bastante oportuno, debido a que el azabache dejó escapar un gemido de dolor y estuvo cerca de tambalearse.

    —¿Todavía duele? —preguntó la castaña.
    —Un poco… aunque ya menos, quizá pueda caminar.
    —Yo te ayudo —propuso la castaña—, apóyate en mí y así no harás tanta fuerza, ¿te parece?

    Ash miró a la joven Balance detenidamente por unos segundos bastante enternecido, y sin dudarlo, asintió.
    Pasó su brazo izquierdo sobre los hombros de la chica, cosa que no tuviera que forzar tanto su pie al caminar, mientras que May sujetó la mano del chico y con su otro brazo lo abrazó de costado para que estuviera bien afirmado y pudieran caminar sin mayor problema.

    —¿Listo? —preguntó la coordinadora de Hoenn.
    —Cuando tú digas… —afirmó Ash con una cálida sonrisa.

    May miró los ojos del azabache y, sin borrar su sonrisa, sus mejillas se ruborizaron de nuevo. Estaba consciente de que tenía al chico de sus sueños muy cerca suyo, y lo que más le alegraba era que le estaba siendo de ayuda, algo que sin duda alguna, va a fortalecer y estrechar mucho más sus lazos.
    Ahora tenían que seguir el camino, así que la joven Balance miró al frente y comenzó a caminar con mucho cuidado junto al chico de cabellos puntiagudos, siendo seguidos por Pichu, quién ya se había comido todo el racimo de bayas que tenía hace un momento…

    (…)
    Mientras tanto, Solana estaba volviendo a la zona de camping junto a Jimmy, Marina y Drew.

    —Pudimos haber hecho como que no lo vimos… —susurró Marina—. Digo, siempre tiene de esas rosas que le regala a May, pudo haberlas usado para distraer a las abejas.
    —Marina… —le respondió Jimmy.
    —¡Es que no lo entiendes! —exclamó ella en volumen de murmuro—. ¡Es tan molesto! Ocupa el tercer lugar en mi lista negra, luego de Lyra y Dawn.
    —¡Por poco y le llega un Picotazo Venenoso! Si no es porque lo llamamos para que fuera a esa mini-cueva del árbol con nosotros mientras Solana nos encontraba, quizá estaría camino al hospital.
    —…b-bueno, sí. Ay, de acuerdo, tienes razón —murmuró la ídolo pokémon.
    —Y con esto me doy cuenta que lo único bueno que tienes es tu amiga. Hasta luego, Kristalli —comentó Drew alejándose de la pareja. Había escuchado toda la conversación.

    Marina se quedó boquiabierta y volteó a mirar a Jimmy, indignada. No obstante, éste sólo se encogió de hombros, ya que encontraba que la postura anterior de su novia no había sido la mejor. Y es que pasado ese instante, Marina pensó lo mismo así que sólo expiró aire y pasó la página.

    Nicolette ya había llegado, y Marina definitivamente se alegró y alivió al verla, por lo que la abrazó fuertemente y le preguntó dónde había estado. La estudiante ranger, sin embargo, esquivó la pregunta por petición previa de Lance, ya que en el camino éste le había pedido que no dijera nada al respecto por el momento, mientras que las autoridades investigaban lo ocurrido y así no alarmar al resto de los estudiantes.

    —¿Y Ash? —cuestionó Dawn, dirigiéndose a Solana.
    —Debe estar en el último sendero que nos falta, tranquila.
    —Allá viene tu ex, niña —comentó agriamente Paul.

    Dawn miró a Paul algo impactada por su actitud, pero luego dirigió su atención hacia el sendero que le habían señalado y efectivamente, a lo lejos ya se podían ver las figuras de Ash, May y Pichu, acercándose a la zona de camping.

    —Uh… y viene acompañado por lo visto —comentó Lyra—. Dos adolescentes de 13 años en un bosque, ¿no te parece…?

    Brianna le pegó un codazo a Lyra, notando que Dawn se estaba irritando con el comentario que casi emite por completo.

    —¿…tenebroso? —dijo la joven Silverwinds en un intento de arreglar el dicho—. D-digo, estaban solos en medio del oscuro bosque, que bueno… tiene faroles pero de todas form…
    —¡Cierra… la boca! —dijo Dawn entredientes.

    Luego de que por fin habían llegado sanos y salvos a la zona de camping, la castaña dejó a Ash sobre una silla para que pudiera descansar su pie luego de la caminata.

    —Eres la mejor, gracias por todo —dijo Ash.
    —Me siento feliz de ayudarte —respondió la castaña.
    —¡Pikapi! —exclamó Pikachu, saltando a los brazos de su entrenador.
    —¡Amigo, que bueno que estás bien! —exclamó el joven Ketchum abrazando a su pokémon.

    Y entonces, Lance se acercó al par de chicos y revisó el pie del azabache luego de que éste le comentara que tenía el pie inflamado. Al mismo tiempo, Marina se acercó a su amiga para abrazarla, aliviada de que estaba a salvo.

    Drew observó la escena a lo lejos con recelo, pero sabía que tenía que mantener la calma en ese momento porque había pasado algo serio al ver que Ash estaba siendo atendido. Lamentablemente… no todos estaban en la misma sincronía.
    El coordinador de cabellera verde notó como alguien estaba pegando pesados zapatazos con una velocidad considerable en dirección a los recién llegados.

    —Oh, no… ¡Dawn!

    La coordinadora de Sinnoh estaba oficialmente cegada por la ira. Al llegar a donde Ash y compañía se encontraba, escuchó como su ex-novio decía que la castaña era su heroína y fue súper servicial con él, mientras que ella se reía con rubor en las mejillas.
    Dawn tomó aire y miró fijamente a su rival, bastante mosqueada…

    —Estúpida oportunista… —murmuró la chica de ojos lapislázuli.

    Sin poder aguantar ni un poco más, Dawn se acercó a la castaña, le tocó el hombro para llamarle la atención y… ¡Paf!, ¡le pegó una cachetada!

    —¡Dawn…!

    …no. Lo de la cachetada sólo había sido una fantasía de la chica Berlitz. Y la persona que había pronunciado su nombre, y por ende devolviéndola a la realidad, había sido Drew para prevenir alguna especie de conflicto.

    ¿Qué tan fuertes serán los lazos de Ash y May después de esta experiencia?, ¿qué es lo que en verdad hará Dawn (y Drew) al notar que nuestros protagonistas llegaron juntos y más cercanos?, ¿por qué Paul actúa tan esquivo con la coordinadora de Sinnoh? Y por último pero definitivamente no menos importante: ¿qué será de Celebi ahora que las Hojas Doradas fueron robadas? ¡Atentos al próximo capítulo!
     
    Última edición: 1 Agosto 2016
    • Fangirl Fangirl x 1
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    Fernandha

    Fernandha Maestre Usuario VIP Comentarista destacado

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    Buenos días/tardes/noches/madrugadas/opúsculos/crepúsculos, gracias por la invitación.

    Bien, bien. Ha pasado un laaaaargo tiempo desde la última vez que comenté esto —o cualquier fanfic de FFL—, así que como prometí comenzaré con el tuyo, Only; admito que tal vez esto sea algo corto jajaja.

    Recuerdo tus inicios con esta historia, el ánimo y dedicación que la parecer aún no desaparece, cambiaste en muchos aspectos para mejor y eso me alegra ya que fácilmente te puedo decir que al volver a leer todo —por que vamos, desde el 2013 hasta la fecha que tiene esta historia es algo largo— es magnífico ver tus grandiosos progresos y la trama, definitivamente va cada vez mejor. Te agradezco, de igual modo, tenerme paciencia para comentar x`D Sabrás que me cuesta mucho leer sobre parejas en este fandom.

    Ahora, si bien no me gustan los shippings, te admito que la evolución en su relación fue tan palpable que me terminó por guardar un cariñito muy especial x`D
    Oh, my~ Leer todo y darme cuenta de cuánto me he perdido me pone nostálgica :'c han pasado tantas cosas en la historia que fue cool no esperar tanto y leer los 25 capítulos de corrido x`D Yey for me!

    Marina & Jimmy, cosita de pareja más hermosa ❤
    Sigo pensando que la actitud de Dawn es rara, pero es tu Dawn así que después de dos días leyendo terminé por aceptarlo. Por lo que, finalmente, puedo decir que tiene un actitud de B para con todos (?) lo cual hasta cierto punto es "entendible" pero termina sin gustar —y con esto me refiero que de verdad quiero que abra los ojazos que se carga y deje de ser tan B jajajajaja—.

    May toda tierna y Ash un, al parecer, galanazo que la encanta con acciones tan simples.

    Auch for you, Dawn. Jajajaja. Y Lyra tan buena pensante, bien sabe de qué habla jaja.

    ¡Drew salvador!

    ¿Qué tan fuertes serán los lazos de Ash y May después de esta experiencia? Posiblemente más fuertes y especiales.
    ¿Qué es lo que en verdad hará Dawn (y Drew) al notar que nuestros protagonistas llegaron juntos y más cercanos? Dawn seguirá con su actitud de B, tal vez. Pero no sé, ¿qué hará nuestro chico?
    ¿Por qué Paul actúa tan esquivo con la coordinadora de Sinnoh? Hmmm, no lo sé.
    ¿Qué será de Celebi ahora que las Hojas Doradas fueron robadas? Hmm, I don´t know, a fight?

    Saludos, Only.
    Siéntete feliz, eres el primer fic que comento (?) jaja.
    Gracias por tomarte el tiempo de avisarme, again <3

    -Fer-
     
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