Una venganza amorosa -SasuSaku y NaruHina-

Bueno me apure la mas que pude, bien ya saben acepto todo tipo de comentarios y consejos, otra cosa no sé si leyeron que cada viernes o sábado voy a sacar continuación si es que no tengo mucha tarea.



Capitulo 5: Un cambio en Naruto.


Mañana me daban de alta, ya me había aburrido de estar acostado viendo televisión todo el día, así que decidí salir de la habitación a caminar.

Cuando salí de la habitación y mire a Karin de espaldas hablando con una enfermera, mire a la derecha del pasillo ahí se encontraba en reloj que marcaba las cuatro treinta y cinco, decide volver a meterme a la habitación Karin tenía que irse a la escuela y yo podría salir libremente.

Toc toc.

Esos toques si hicieron notar solo esperaba que no fuera Karin.

—Hmp pase— dije aburrido.

—Hola hijo—me saludo mi padre Fugaku.

—Hola padre—salude de igual manera.

— ¿Cómo estás? —

—Hmp bien…. ¿e Itachi? —pregunte yaqué pensaba que vendría a verme.

—No pudo venir……su vuelo no pudo despegar y ya sabes que su novia no le gusta mucho
viajar—me respondió.

—Hmp—

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Hinata-chan me había llevado a su casa, era grande y acogedora, tenía una cocina grande y tres cuartos con su propio baño, de los cuales solo se ocupaba uno, ella vivía sola.

— ¡Guau! Está bien bonita tu casa ¡Deberás!—exclame sorprendido

—G-gracias—

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—Yo quisiera vivir algún día en una casa como esta o dormir en una cómoda cama... —me
contaba sus sueños Naruto-kun mientras observaba mi casa.

Cuando lo miraba observando mi casa se me ocurrió otra idea pero…

—Na-naruto-kun... —ya había hablado y ya no había vuelta atrás— ¿T-tu y t-tu a-amiga n-no quisieran v-vivir a-aqui?

Era la segunda vez en el dia y todo por lo que yo le proponía.

— ¿Enserio Hinata-chan? —me pregunto mirándome fijamente.

—S-si—le confirme su duda.

—Entonces… ¡Sí! —me dijo felizmente Naruto-kun, estaba tan emocionado que me abrazo

—Gracias Hinata-chan eres mi ángel—me decía abrazándome más fuerte y yo solo pedía no desmayarme.

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—Na-naruto-kun t-te voy a-ah enseñar t-tu habitación—me dijo y yo solo deje de abrazarla
estaba roja de nuevo me preguntaba si estaba enferma.

Subimos a las escaleras era un pasillo grande y espacioso las paredes eran blancas y las
´puertas tan bien eran del mismo color, eran tres puertas, Hinata-chan abrió la puerta de hasta el fondo del pasillo esto era…. Un sueño.

—E-esta s-sera tu h-habitación N-naruto-kun—me dijo feliz con su tartamudeo el cual me parecía adorable— ¿T-t gusta?

Jamás había visto lo que vi en esa grande habitación, en medio había una cama con sabanas y cojines blancos, en la esquina izquierda estaba una gran ventana la cual te dejaba ver la hermosa ciudad, ah lado de la ventana había un escritorio con una computadora y una silla negra, ah lado derecho de la cama había una puerta la abrí y era un enorme ropero vacio y en la esquina derecha del cuarto había otra puerta blanca, cuando la abrí me sorprendí mucho, era un baño, jamás había visto uno, consistía de una bañera grande, el escusado y el lavamanos y en un mueble había todo de shampoos y toallas.

—Hinata-chan yo…gracias—dije no podía creer que alguien con dinero como ella pudiera ayudar, abrazar o saludar a alguien como yo.

—N-naruto-kun ahí e-están las t-toallas y to-todo lo que n-necesites pu-puedes to-tomarlo y-yo
m-me v-voy—me dijo saliendo del baño.

Todavía no me lo creía que yo pudiera bañarme o vivir en un lugar como este.

Deje de pensar y adivine como usar el shapoo, sentía como el agua tibia corría por mi cuerpo y con ella cada rincón se limpiaba.

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Estaba en la cocina preparando una comida para Naruto-kun.

— ¿Hinata-chan? —gritaba Naruto-kun en el piso de arriba.

—A-aquí—le respondí.

Jamás imagine que Naruto-kun se podría ver mejor pero fue posible, su cabello rubio brillaba, su piel blanca y tersa, sus ojos azules resaltaban mas ahora solo faltaba la ropa.

— ¿Cómo me veo? —me pregunto sonriéndome.

—N-naruto-kun te v-vez b-bien—le respondí toda roja por sus ojos azules.

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Salí de la habitación del hospital, ya estaba harto de no hacer nada.

Alguna que otra chica se me quedaba viendo, ya estaba acostumbrado pero seguía siendo
incomodo.

Hmp, todavía me acordaba cuando choque con la pelirosa, se había enojado y me había llamado “imbécil”.

Caminaba por los pasillos blancos del hospital, estaba viendo el trasero de la secretaria cuando sentí un cuerpo chocar con el mío, cuando me fije quien había sido, era una chica de cabello rosa y ojos jade.

— ¡Fíjate! —me grito, cuando ella había caído al suelo.

—Hmp, tú fuiste la que choco con migo— le respondí sin interés alguno empezando a
caminar, cuando pase por su lado y le dije— “molestia”

Pasaron unos segundos cuando se escucho un grito diciendo “imbécil”

Cada vez que me acordaba una media sonrisa se dibujaba en mi rostro.

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No podía llevar a Naruto-kun con esa ropa al centro comercial yaqué si lo llevaba así se iban a burlar de él y es lo que menos quería, me acorde que el día que Neji-kun y Tenten-chan se quedaron a dormir en mi casa Neji-kun olvido una muda de ropa así que se la di a Naruto-kun, se veía mejor sus brazos fuertes y su sonrisa juguetona en sus labios.

Cuando llegamos a la primera tienda escogió unos pantalones de mezclilla negros y una playera naranja. Al principio Naruto-kun no quería entrar al vestidor.

— ¿Enserio Hinata-chan? — me preguntaba con un puchero un su rostro.

—S-si d-debes en-entrar p-para p-probártelo—le respondí metiéndolo a empujones al vestidor.

Se tardo como unos veinticinco minutos, cuando salió valió la pena la espera se veía tan guapo.

Le compre unas diez mudas de ropa y de zapatos a él y a su amiga, fue un poco difícil de convencerlo a que me dejara comprarle todo esto a él y a su amiga.

Llegamos a la casa y lo ayude a acomodar toda la ropa en si respectivo lugar y también los zapatos, después acomodamos lo de su amiga, le prepare de comer algo y después de eso se fue al hospital.

Yo también tenía que ir al hospital a ver a mi primo Sasuke-kun pero en lo único que podía pensar era….

“Ese había sido el mejor día de mi vida hasta ahorita”​

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Cuando vi a Naruto me quede sorprendida, estaba limpio, bañado y usaba ropa y zapatos nuevos.

— ¿N-naruto? — le pregunte dudosa.

— ¿Cómo estas Sakura-chan? —me pregunto con esa sonrisa tonta y ahí fue que no dude que era Naruto.

—Bien pero… ¿Quién te compro esa ropa y los zapatos? —

—Sakura-chan, cuando te atropellaron el que iba en el auto quedo inconsciente y una chica llamada Hinata-chan me pidió que lo sacara y así lo hice y pues ella me está ayudando ahora a mí y a ti—acabo de explicarme lo único que no me quedo claro fue la parte…

— ¿Cómo que me ayuda a mi? —le pregunte confusa.

—Si Sakura-chan, Hinata-chan también te compro ropa a ti…—me decía Naruto.

Toc toc.

Se escucharon unos golpes del otro lado de la puerta.

—Pase—dijo Naruto.

Cuando se abrió la puerta me sorprendió mucho al ver al chico de esta mañana.

— ¡Tu!—dijimos al mismo tiempo el y yo.

— ¿Se conocen? —pregunto Naruto.

—Hmp, molestia—me dijo él.

— ¡cállate imbécil! —le grite.

— ¿Na-naruto-kun? —se escullo una voz atrás de ese tonto.

Era una chica bonita, con el cabello negro largo pero… ¿Cómo conocía a Naruto?

— ¿Hinata-chan? ¿Qué haces aqui? — le pregunto a Naruto a ella.

Espera Hinata-chan es la persona que le compro todo eso a Naruto.

—S-sasuke-kun es m-mi p-primo—le respondo a Naruto.

Asi que se llama Sasuke, ese nombre lo había escullado antes en algún lugar.

—Hola soy Naruto y yo te saque del auto—se presento Naruto con Sasuke.

—Hmp, Sasuke Uchiha—

¡Lo sabia! ¡Era el hijo menor de los Uhiha!

—¿Encerio? —pregunto Naruto.

—Hmp—

—Entonces… ¡Tú fuiste el tarado que me atropello! — le grite.

—Hmp—

—Que no te sabes otras palabras—le dije a Sasuke directamente.

—Sakura-chan calmate—me dijo Naruto para que me calmara.

—S-sakura-chan S-sasuke-kun se h-hará re-responsable del a-accidente—me dijo
Hinata-chan

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Bueno creo que está más largo este que el pasado, cuando coementen no se les olvide su comentario aparte de las preguntas para que no lo borren, pero bueno aquí van las preguntas:

¿Les gusto?

¿Parte favorita y porque?

¿Les gusto como quedo Naruto?

¿Qué pasara entre Sasuke y Sakura?

 

Hola!
Perdón por el atraso y la tardanza es que tuve un problema de salud, pero bueno aquí la continuación.

Capitulo 6: Recordando

Se había armado una discusión entre Sasuke y yo, Hinata y Naruto solo nos observaban sin decir o hacer algo.

— ¡Ya cállate!— le grite a Sasuke.

El solo me miraba con una media sonrisa, sus ojos negros dejaban ver orgullo de que había ganado esta pelea.

—S-sasuke-kun n-no d-digas eso — interrumpió Hinata nuestra pelea.

—hmp—

Y él solo pudo pronunciar su maldito monosílabo.

— ¿Sakura-chan estas bien?— me pregunto mi amigo Naruto.

—Si- le respondí con la cabeza agallada.

Hinata y Sasuke estaban cerca de la puerta, mientras Naruto estaba a mi lado.

—Yo c-creo q-que m-mejor n-nos va-vamos Na-naruto-kun— le dijo Hinata a Naruto.

— ¡Si, al rato nos vemos Hinata-chan!— se despedía Naruto sonriéndole tontamente a Hinata la cual se puso toda roja.

Hinata y Sasuke salieron de la habitación, dejándome sola con Naruto.

—Sakura…—

— ¿Quien se cree?— interrumpí a Naruto —¿Solo porque tiene dinero puede venir a decirme
que soy de la calle?...—

—Sakura-chan, ya sabes cómo son los ricos — trataba de consolarme.

— ¡Pero eso no le da derecho de tratarme así!— grite enojada apretando la sábana blanca.

Ahora había provocado que Naruto se sintiera triste, le había gritado sin pensar por culpa del
Uchiha.

—Naruto perdóname no debí haberte gritado — le pedi.

—No te preocupes Sakura-chan yo estoy bien ¡Deberás!— me perdono, como quisiera ser como Naruto el tiene un corazón tan noble.

—Gracias—

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Por otro lado se encontraban Sasuke e Hinata en el auto de esta, iban por una de las calles más transitadas de la ciudad, así que estaban parados desde hace veinte minutos.

Ninguno de los dos quería decir nada sobre lo ocurrido hace unos momentos en el hospital.

—Sa-sasuke-kun ¿te-te dejo e-en tu c-casa?— pregunto Hinata empezando a conducir de nuevo.

—Hmp, no — respondió Sasuke mirando por la ventana.

— ¿E-entonces a-ah do-donde te lle-llevo?— volvió a preguntar sin dejar de ver la calle.

—A tu casa— respondió este sin siquiera mirarla.

Hinata no comprendía totalmente a su primo Sasuke pero si entendía que no quería llegar a su
casa con su padre, a Hinata si le hacía más fácil comprender a Itachi y a Neji los tres eran hermanos pero siempre se pregunto porque Neji en lo físico era notablemente diferente a sus hermanos ya que en el carácter eran idénticos los tres.

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Hinata me había llevado a su casa era tal como lo recordaba, me acosté en el sillón más grande era suave y cómodo, era totalmente diferente a mi “casa” si se le puede llamar así la mía es de tres pisos y enorme pero también solo y fría.

Estaba pensando en mis hermanos Neji si veía feliz con su esposa Tenten y su hija Ren, le habían llamado así por la mamá de Tenten que había muerto en un accidente no hace mucho, mientras de Itachi hablaba con el por teléfono o vía internet tenía mucho tiempo de que no nos veíamos, el estaba comprometido desde los diez años, me acuerdo que era la fiesta de diez años de Itachi y mis padres habían ello un contrato de compromiso con los señores Haruno, pero un asesino los había matado y de su hija no se sabía nada, pero Itachi sigue con la tonta ilusión de encontrarla.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por la tímida voz de mi prima Hinata la cual me decía…

—Sa-sasuke-kun, I-itachi-san t-te ha-habla por t-teléfono — me dijo con el teléfono en la mano.

—Hmp, ya voy — le dije levantándome del sillón, tome el teléfono blanco y Hinata se retiro a la cocina — Bueno — conteste.

—Hola Sasuke ¿Cómo estás?— me pregunto su voz seguía siendo igual.

—Bien ¿por qué no viniste?— le pregunte.

—No pude, la búsqueda aun no termina, pero mañana llego — me respondió.

Aun seguía con eso de la búsqueda interminable, va a tener ochenta años y va a seguir
buscando, pero...

— ¿Por qué le dijiste a nuestro padre que ya la habías encontrado?— pregunte, ya que
nuestro padre la última vez que lo ve me había dicho que “su esposa”.

—Te dijo eso, no me entendió, es que ya tengo noticias de ella, aparte de ir a verte también voy a buscarla allá — me explicaba, entonces al fin había encontrado pistas sobre ella.

—Hmp, está bien ¿a qué hora llegas mañana para ir a recogerte?— le pregunte.

—A las diez y media de la mañana, había un boleto a las seis pero no me iba a parar a esa hora — me decía, seguía siendo el mismo irresponsable de siempre.

Cuando mamá murió Itachi se volvió todo lo contrario a lo que era antes.

—Hmp, voy a ir a recogerte con Neji, Tenten e Hinata — le avise.

—Sí, está bien ahí los espero — me respondió feliz.

—Adiós — le dije para finalizar la llamada.

—Adiós— fue lo ultimo que escuche de su voz para despues escuchar el sonido del telefono.

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Hoy al fin salía del hospital, ya había arreglado las cosas con Naruto, me estaba quitando la bata en el baño.

Naruto me había traído un pantalón de mezclilla y una blusa color rojo la ropa era hermosa, también me había traído unos zapatos de meter color rojo y aun no podía creer que Hinata nos allá comprado todo esto a Naruto y a mí, tenía un corazón noble y bueno como el de Naruto.

De repente mire mi mano derecha y observe el curita que me habían puesto al quitarme el suero...

Entro una enfermera a mi habitación y le pidió a Naruto que se retirara por un momento.

—Señorita… — reviso en unos papeles que tenía en la mano — Sakura hoy la damos de
alta pero tengo que quitarle el suero — me dijo acercándose a mí, no se pero esto me daba
miedo — Le dolerá un poco pero no se preocupe.

Agarro mi mano y le quito la cinta que sostenía la aguja fija, de repente sentí un jaloncito y un dolor fuerte en mi mano derecha y vi unas gotitas de sangre correr por mi piel.

No pude evitar gritar por el dolor y por eso entro Naruto y en vez de que me preguntara si estaba bien se empezó a reír de mi, por la cara que tenia.

Me acordaba de esa escena aun podía sentir el dolor y las carcajadas de Naruto.

Salí del baño lista, Salí a unos de los pasillos blancos y enseguida vi el cabello rubio de Naruto.

Una que otra chica lo observaba torpemente, había otras que se paraban para obsérvalo bien, estaba recargado en la pared con una molilla en el brazo derecho, me acerque a él con una sonrisa.

— ¿Estás lista Sakura-chan?— me pregunto emocionado.

—Si— conteste entusiasmada.

¿Cómo sería la casa de Hinata?

Salimos al estacionamiento y esperamos unos minutos cuando llego un auto blanco, se
escucho cuando se quitaba el seguro de las cuatro puertas, Naruto abrió una puerta de enfrente.

— ¡Hola de nuevo Hinata-chan!— saludo Naruto con alegría.

—H-hola — se escucho la tímida voz de Hinata adentro del auto — Su-suban.

Naruto abrió la puerta que estaba delante de mí para que yo pudiera subir, cuando subí al auto, los asientos eran color negro y eran tan suaves, era la primera vez que me subía a un auto tan elegante.

—Hola Hinata-san — la salude acomodándome bien en el auto.

—H-hola, n-no me di-digas Hi-hinata-san so-solo Hi-hinata — me dijo tímidamente y feliz.

—Está bien — le conteste Hinata era todo lo contrario a Sasuke.

— ¡Vámonos!— grito Naruto cerrando la puerta del auto.

Hicimos como treinta minutos al llegar a su casa, ya era tarde eran aproximadamente las once de la noche, cuando salimos del auto pude ver su casa veía hermosa era de un color blanco con un jardín con unas flores hermosas entre ellas estaba la flor de sakura que tanto me gustaba.

Me agarre el collar que traía en el cuello con la figura de un pétalo de la flor de sakura, me lo había regalado mi mamá cuando cumplí mis ocho años era lo único que me quedaba de ella.

—E-entremos — dijo Hinata empezando a caminar a la casa.

— ¡Vamos Sakura-chan!— me dijo feliz Naruto siguiendo a Hinata.

—Sí ya voy — conteste débilmente.

Me quede pensando unos segundos más sosteniendo el collar con mis dos manos fuertemente, como la extrañaba, pero todo iba hacer diferente a partir de ahora.

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Bien… ¿Qué les pareció?... Otras vez perdón por la tardanza.