Microrrelato Una promesa cumplida

Aquí un pequeño Drabble como ya saben son relatos que nienen más de 100 a 500/600 palabras espero que les guste este pequeño relato


Un día un hombre apareció, de la nada, se le acerca a una chica deprimida, sentada en una banca, viendo hacia el cielo, y es que en medio de el campo, un lugar bello y tranquilo, en donde el hombre camina hacia la chica y le ve allí sentada, en medio de la nada, fuera de la gran ciudad, él se dio cuenta de que ella deseaba huir de un momento incómodo en su vida citadina, se le acerca con cuidado "Bonito día" le comenta, haciendo que la chica se de cuenta de su presencia, "Quién eres? " le pregunta, viendo su aspecto tranquilizador, la chica, por una extraña razón, no siente miedo ni desconfianza, "Soy solo un amigo, quién desea huir de la ciudad, a un río de tranquilidad " ambos platican por un rato, sin prisa y con cuidado, la chica se da cuenta, de que el hombre tiene mucho en común con sus gustos, ambos miran las estrellas, observando la tranquilidad del campo, una estrella fugaz aparece, en los cielos de lo alto, "Pide un deseo" le sugiere a la chica "Desearía que todos los días, fueran tan bellos como el de hoy, pasando el rato con mi amigo" la chica muy contenta, vio a lo alto y un suspiro, ambos recostados, viendo ese bello espectáculo de luces, que el cielo les ha ofrecido, "En la ciudad no se ven las estrellas, solo autos y edificios" mientras ambos se levantan el pone su mano en su delicado hombro y le dice al oído, "Te prometo que las verás de nuevo, aunque tarde días y noches, yo te digo y te prometo, esas estrellas te verán en lo alto, como tú a ellas " dicho esto se despiden, los dos se marchan en diferentes caminos, sin ver hacia atrás, ella dice "Es la promesa" A lo lejos sin que ella mire, él se marcha desapareciendo, sacando dos alas de su espalda y desvaneciéndose como la niebla, alas blancas y emplumadas, que lo llevan a lo alto, mientras ella camina, voltea y no le ve, pero sin dudar alguno, una sonrisa en su rostro, ese hombre era fiel, pues en varios días y noches, ella vio esas estrellas, desde la ventana de su apartamento, en la gran ciudad que ahora, era vista por las bellas y brillantes estrellas.