Boku no Hero Academia Un par de miradas.

Tema en 'Fanfics de Anime y Manga' iniciado por isavetthdz, 13 Abril 2024.

  1.  
    isavetthdz

    isavetthdz Una letra a la vez, la fantasía continúa.

    Cáncer
    Miembro desde:
    1 Marzo 2017
    Mensajes:
    77
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Un par de miradas.
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Comedia Romántica
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    1197
    Serie de cortos Shinkami.

    ***

    Travesuras del bakusquat

    Todo iba perfecto hasta el momento, estaba todo tan fríamente calculado en esa ocasión que hasta podían ganarse un premio a mejor guion.

    Empezando porque Kaminari finalmente era puntual para algo en su vida, solo faltaba la chica, solo que ella saliera de la clase extra y pudiera seguir en marcha su plan.

    — ¡Kaminari! — y allí estaba, Jirou Kyouka, tan bella y esbelta cómo de costumbre, con su ropa en tonos oscuros y la guitarra colgando de tras alzando la mano en forma de saludo caminando a paso rápido hasta donde su amigo de cabellos rubios.

    — Te estaba esperando, quedamos en ir por las plumillas — Para su suerte, Denki se había aprendido bien el guion, las primeras veces que trato de invitarla a salir termino tartamudeando y diciendo incoherencias.

    — Falta poco... — El paso en falso de Kirishima casi los delata detrás del arbusto, no era muy honesto de su parte estar espiando, pero debían asegurarse de que todo saliera bien ¡Perfectamente bien!

    Ahora nada más faltaba que se fueran y tuvieran una cita quizás inolvidable, estaba tan cerca.

    — Oh, espera, venía a decirte, tengo que regresar a casa, pero da la casualidad de que Shinsou también quiere ir a comprar plumillas cómo tú.

    Consecuentemente, apareció el mencionado a paso lento y ambos chicos colocaron una expresión inconforme.

    — Kaminari.

    — Shinsou.

    A forma de saludo se llamaron secamente y se miraron poco amigables, la chica ajena a todo terminó de despedirse y salir corriendo de la escena. Ambos chicos empezaron a caminar a su paso, con la tensión e incomodidad en el aire y fue cuando Bakugo estalló y salió del arbusto.

    — ¡Puta madre, otra vez Shinsou!

    Estaba harto, cansado de que siempre que Kaminari parecía tomar un paso al frente aquel tipo siempre les arruinaba los planes.

    — ¡De nuevo Kaminari se puso en medio!

    Del otro lado del paso, también de los arbustos salieron el grupito de Shinsou, el "Deku squat" y en cuanto ambos se miraron entendieron que se habían metido en el camino del otro.

    Otra vez.

    Su grupito de amigos, el "Baku squat y el Deku squat" nunca se habían llevado bien, empezando desde que Bakugo y Midoriya no se toleraban aunque se conocieran desde niños. Midoriya no quería problemas, solo ayudar a sus amigos, por su parte Bakugo detestaba a cada uno del grupito ajeno, especialmente a Deku y al tonto de su novio mitad-mitad quienes siempre interrumpían sus planes.

    — ¡Otra vez ustedes! — Mina se quejó aún con hojas en la cabeza mientras Sero suspiraba con resignación y Kirishima detenía a Bakugo de ambos brazos antes de que causará una masacre.

    Ochako del otro lado los ignoro enfada mientras Iida ayudaba a Shouto a salir de los arbustos.

    Ambos grupitos no se toleraban mucho, pero nunca habían tenido tantos roces hasta que empezaron a causarse problemas unos a otros.

    Y el nombre del inicio de sus pleitos tenía nombre y apellido.

    "Jirou Kyouka" la bella chica de la clase de Música de la que por infortunio Kaminari Denki y Shinsou Hitoshi se enamoraron a primera vista al entrar en su clase.

    Ambos grupitos apoyaban a su respectivo amigo en sus avances con la chica, que era más densa y despistada en cosas del amor de lo que aparentaba, y como sus amigos no tenían experiencia por eso les ayudaban.

    Pero cada que hacían un plan y Kaminari conseguía una "cita" con Jirou, Shinsou terminaba metiéndose o siendo agregado a ella sin querer, y cuando Shinsou lo hacía era lo mismo, Kaminari terminaba interrumpiendo sin pensar.

    Así que ambos chicos terminaban teniendo una salida de amigos con la chica en medio, o en el peor caso, teniendo que ir juntos para mantener su palabra.

    — Maldita sea ¿Qué no pueden darse por vencidos? Dejen en paz a Kaminari y Jirou — Bakugo aun forcejeaba en manos de Kiri, mientras a su vez, Midoriya, buscando en su voz interior, también se defendía.

    — ¡Ustedes son los que deben rendirse, tarde horas en este plan!

    — nosotros tan bien imbécil —Llevaban meses peleando y esa disputa no más no llegaba a nada, todos los planes fallaban, todas las citas arruinadas.

    ¡Pero no sé iban a rendir! Alguno de sus amigos ganaría el corazón de la chica, aunque tuvieran que aplastar al grupo ajeno.

    — Hey Bakugo, Denki dice que irá con Shinsou por las plumillas para que Jirou no piense que le mintieron, vámonos a casa — Sero, el más cansado de todo, solo quería regresar a casa, recostarse en las piernas de mina mientras lo alimentaban de uvas en la boca cuál emperador romano con una película de fondo y Bakugo y Kirishima quizás peleando por qué botanas comprar.

    El rubio cenizo inmediatamente a ello se detuvo, mando al demonio al otro por última vez y jalo de la ropa al pelirrojo con el argumento "déjenos de perder el tiempo" mientras Mina únicamente reía bajito por la situación que empezaba a volverse cotidiana.

    Midoriya sudo frío y perdió las pocas fuerzas que le quedaban siendo auxiliado por Iida, quien argumento que debían también regresar y discutir en que hacer después.

    ***


    Colgando el teléfono y guardándolo en la mochila, Denki suspiro tan largo que quizás perdió algunos años de vida, miro a Shinsou de arriba a abajo y se rindió.

    — Otra cita arruinada.

    — Si, nuevamente terminamos teniendo el mismo plan en mente.

    Shinsou dejo de ver la pantalla de su celular, miro los ojitos dorados y ambos sonrieron divertidos.

    — Te odio.

    — Aja.

    Volviendo a su celular leyendo los mensajes de Midoriya y compañía, Hitoshi solamente coloco su mano libre en la cadera ajena y empezaron a caminar para ir a comprar las plumillas.

    — Por cierto ¿No es Bakugo más violento últimamente?

    — ¿Mm? No sé, le desespera que ningún plan sale bien — Denki se pegó más al contrario rebuscando en su mochila por su cartera.

    — Midoriya es igual, aunque supongo aún no contemplan que Jirou ya tiene pareja.

    — aja — Ahora el distraído era Kaminari, enfocándose en su mochila dejando el mundo de lado. Shinsou alzo las cejas sintiéndose ignorado, guardo su celular y se pegó al otro tanto que ya le hablaba al oído.

    — Ni que sus planes terminaron juntándonos más a nosotros.

    El rubio sintió que sus orejas se calentaban y empujó al otro causando una pequeña risa, le miro mal al fin con la cartera en mano.

    — Bueno, en algún momento se darán cuenta por ahora, vamos por las plumillas... Y vayamos a tu casa luego de eso, quiero escucharte tocar para mí — El más bajo se colgó del brazo ajeno, frotándose tratando de conseguir lo que quería poniendo su cara más tierna y consiguiéndolo. Shinsou se resignó y acepto el pedido.

    Quizás al principio su meta era salir con Jirou y al verse como rivales se detestaban, pero obligados a pasar tiempo juntos descubrieron más cosas en común que su gusto por la chica, terminaron cediendo y finalmente, saliendo entre ellos.

    Aunque no se lo dirían a sus amigos, después de causar una guerra abierta entre ambos grupitos quizás provocarían el fin del mundo al enterarse de que todo había sido en balde con la chica y ahora los enamorados eran ellos dos.
     
  2.  
    isavetthdz

    isavetthdz Una letra a la vez, la fantasía continúa.

    Cáncer
    Miembro desde:
    1 Marzo 2017
    Mensajes:
    77
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Un par de miradas.
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Comedia Romántica
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    6699
    Amigos de infancia.

    La primera vez que vio un baile de salón fue de casualidad mientras su madre cambiaba canales al azar y se detuvo en aquella trasmisión donde lo primero que lo asombro fue la energía, la vibra, el brillo que desprendían los concursantes que bailaban a un gran ritmo sin dejar de sonreír.

    Aunque su padre no lo entendió, su madre y él se quedaron fascinados ante esa vista, era como... Un encuentro predestinado.

    Fue sorpresivo cuando su madre regreso un día de las compras, emocionada y alterada, lanzando bolsas de mandado por aquí y por allá mientras llamaba a gritos a padre e hijo, podría considerarse secuestro, puesto que ni dijo a dónde irían, solo les subió al auto sin más explicación y manejo rápidamente hasta el centro comercial, recordaba bien a su padre rezando por su vida pues cuando su mujer tenía una idea en la cabeza, no había fuerza humana que le detuviera.

    En su mente infantil de un niño de 6 años no entendió bien lo que sucedió, pero entendía la emoción de su madre, al entrar a un lugar en la parte más alejada del centro comercial y ver cara a cara a bailarines dándolo todo, escuchando los tacones resonando casi en parejo.

    Fue casi una competencia de ruido los tacones sonando y la discusión de sus padres, pues aunque su madre quería, su padre, un oficinista de tiempo completo, lo veía casi imposible.

    En realidad era normal que discutieran por todo, siempre era por cosas extrañas y nunca fue motivo de preocupación para él, por lo que camino alejándose curioseando por el lugar. Se quedó sentado obedientemente cuando algo captó su atención.

    Pequeños tacones que sonaban cuál castañas al tocar el suelo pulido, pequeños moretones en las piernas pálidas que revelaban semanas de esfuerzo, una mirada cansada, pero un cuerpo que se movía cuál robot sin tambalear, las manos alzadas como si estuviera bailando con una existencia invisible. Era un baile hermoso aunque solitario, un niño bailando sin pareja con toda la concentración del mundo.

    — ¿Es lindo, verdad? El baile — Tembló asustado cuando una mujer le hablo de la nada, de cabellos tan oscuros como los del niño y unos lentes que ocultaban una mirada fija. Solo asintió con la cabeza, no debía hablar con extraños — Hey, tienes unos lindos ojos ¿No te gustaría bailar con él? — Como si se conocieran de toda la vida, le tomo de ambos hombros y le encamino hasta quedar a unos pasos del niño, quien detuvo su baile y le miro fijamente, luego a la mujer, y de nuevo a él.

    — ¿De qué está hablando? Mi hijo es varón — Como un ángel, su padre fue a su rescate de tan extraña situación y quitó las manos de la mujer de encima suyo, se escondió tras sus piernas, pero no quito los ojos del otro niño.

    En su mente, únicamente podía escuchar a la mujer, ofreciendo bailar en ese lugar vacío, en ese espacio donde las manos ajenas solo sostenían aire, él... ¿Podría ser parte de esa linda escena?

    — La mayoría de bailarines en este salón son chicos, por ello está permitido parejas del mismo sexo, incluso en los concursos, claro, uno va travestido para respetar la tradición, pero no creo que sea un gran problema, mi hijo no tiene pareja de danza, mi deber es buscar una para que él pueda entrar en las competencias — La mujer y su padre se miraron desafiantes, quizás queriendo empezar una pelea con distintas opiniones.

    Pero él seguía embelesado con la posibilidad, de poder bailar y brillar tanto como las personas de su TV; tímido se acercó al otro niño mientras sus padres discutían, ambos se quedaron mirando fijamente y nada más se necesitó abrir la boca para empezar todo.

    — Tú... ¿Quieres que baile contigo? — Estaba emocionado, quizás se reflejaba en su cara, el otro niño pareció sorprendido, se agarró de la ropa con fuerza, busco ayuda con la mirada y al final se decidió.

    —... Si, me gustaría —

    Con eso, ambos sonrieron tímidamente y el cerro el trato tomándole de una mano llevando al otro a dónde estaba su madre.

    — Quiero bailar —

    La mujer rubia chillo de felicidad mientras su padre se quedó impresionado, no le importo la extraña sonrisa que puso la mujer de cabellos oscuros. Con nervios, pasaron a explicarle que significaría formar un duo con el otro niño, pero ¿Qué importaba? Tenía 6 años, no veía el problema en usar faldas o moños con tal de bailar aquello que lo había impresionado.

    Un par de formas, una hoja impresa y un apretón de manos fue suficiente para qué empezará...

    El infierno.

    ***

    Los pasos resonaron, el ritmo aumento y un par de vueltas y volvía a sentir el aire en su cabello. Shinsou se aferraba más a su cintura para no dejarlo caer y él debía restar su peso para que pudieran girar mejor, las manos juntas se apretaron y al finalizar las respiraciones agotadas se juntaban.

    — Tan bello como siempre — La madre del otro aplaudió encantada, mientras ellos se separaban y tomaban aire después de haber terminado las horas que debían de ensayar.

    Tenían más de 11 años juntos, desde el primer día habían encajado su baile y su cuerpo se había acostumbrado al otro. Shinsou y Kaminari, la pareja principal del salón de Danza del distrito, era quienes más tiempo tenían ensayando, quienes más participaban en concursos, quienes habían regresado con más victorias a casa.

    Ya no era un pequeño salón en la oscuridad del centro comercial, ahora era una academia respetable y también la mayoría de parejas de danza eran más o menos de su edad, muchos de los adultos se habían retirado, pero después de verles, muchos nuevos rostros se animaban a unirse e intentarlo.

    — Pronto estarán listos para ligas mayores, estoy segura de que llegarán alto — La madre de Shinsou aunque no era maestra de la academia, era quien más los presionaba, desde niños su meta fue que ganarán concursos, por lo que muchas marcas y heridas de su infancia fueron causadas por ella, pero fuera de lo aferrada que era, era una buena mujer.

    — Trabajaremos mucho, seguro que si — Uno de sus compañeros le pasó una toalla, Shinsou inmediatamente tomo sus cosas para retirarse, y Denki no le detuvo.

    Pronto cumplirían la mayoría de edad, por lo que no podrían participar más en concursos Junior, las ligas mayores estaban llegando a sus vidas y sabía que su pareja tenía ciertos problemas con ello. Pero no sé preocupaba, habían bailado todo ese tiempo juntos y habían superado muchos problemas, solo debía darle su tiempo.

    — Realmente brillas en la pista Kaminari — Midoriya se acercó con una botella cristalina, agradeció suavemente y decidió que dejaría la práctica en solitario para otro día.

    — ¿Vamos por helado? Muero por algo frío — Kirishima se acercó amable y sonriente con las cosas de ellos encima, su pareja de baile ya se había ido por lo que invito a sus amigos. Kaminari acepto mientras que Midoriya amablemente se negó.

    — Tengo clases suplementarias, será la otra —

    — Siempre tan serio Midoriya, Todoroki tiene suerte de que su compañero seas tú — Iida llegó por detrás, de la mano con su pareja de baile y novia, Ochako, quienes habían terminado también de practicar.

    El de pecas únicamente sonrió, sin decir nada más se despidió y aunque lo vieron algo extraño decidieron que era mejor no preguntar.

    — Bueno entonces vamos por helado ¿Te unes Monoma? — Kaminari se acercó hasta el novato, quien aún no tenía pareja de baile, pero su danza era decente y limpia, por lo que practicaba a diario para mejorar y conseguir pareja.

    — No, me quedaré un rato más — Aunque era algo arisco, solamente les ignoró como siempre y siguió estirando. Se alzaron de hombros y salieron de la academia con dirección a la heladería, Kaminari noto entonces el letrero en la puerta principal.

    "Concurso de baile interno, sean bienvenidos a ver y adentrarse en el mundo de la danza"

    Ocasionalmente, había concursos no oficiales en la academia para que la gente se interesaba más, aunque no recordaba cuando fue el último, igual, siempre ganaban.

    ***

    — Shinsou, Shinsou, apúrate — La estruendosa voz de Denki fuera de los vestidores le dejo sordo, suspiro con frustración mientras se sentaba en el piso con pereza.

    Día tras día, desde que tenía memoria, había estado ensayando y bailando para complacer a su madre, ahora no únicamente eran los sueños de ella, sino también los de Denki... Su pareja de baile, tan alegre y efusivo, no había cambiado nada desde que eran niños.

    ¿Cómo mantenía ese amor por el baile? ¿Cómo había olvidado el infierno que pasaron para ser los mejores? Estaba harto, cansado, quería ver qué más hacer con su vida antes que seguir haciendo lo mismo día tras día.

    — Vamos, maestro, tu princesa te está esperando — Sintió un pequeño golpe en el hombro, Monoma había llegado también a cambiarse y nada más se reía de él, como siempre.

    — No me molestes, Denki no es una princesa, ni me digas maestro me hace sentir más viejo — Le había enseñado lo básico del baile, solo eso, después de ensayar con Denki, ir a casa a hacer su tarea, en la noche regresaba para bailar con Monoma y ayudarle, ya que iban en la misma escuela sentía que debía hacerlo, pero ¿Maestro? Para nada.

    — Eso dices tú, todos consideran a Denki la princesa de este lugar — Quizás lo que más se les dificultaba a muchos, era que si su pareja era del mismo sexo, uno debía vestir del género opuesto.

    Muchos no se acostumbraban a los vuelos de las faldas, al maquillaje, a las extensiones del cabello, a muchos les parecía ridículo, pero Denki había trabajado mucho, desde el cuidado en su cabello al dejarlo largo, a los muchos cursos que tomo para mejorar su maquillaje y hacerle honor a los bellos vestidos que le confeccionaba su padre.

    El que más se había acostumbrado y que parecía no importarle disfrazarse de aquella manera era Denki, por lo que brindaba confianza a los otros al hacerlo y aunque de broma le decían "princesa" él se reservaba el derecho de hacerlo.

    — Denki es un chico más, deja de decir estupideces —

    Dio un golpe en la frente contraria y finalmente salió hasta la pista, donde Denki ya practicaba el vuelo de la falda con una falda muestra enseñando a los novatos.

    Shinsou se quedó observando aquella escena, su compañero brillaba en la pista, desprendía un aura angelical que atraía las miradas y parecía una flor abriendo sus pétalos cada que se movía. Sintió sus orejas levemente calientes y trato de que no se notará el rojo en sus mejillas.

    Era un infierno, odiaba seguir bailando sin ponerle amor, odiaba no poder salir y descubrir por sí mismo que quería hacer, pero, amaba bailar con él, amaba ver sus ojos brillando de emoción y su risita al conseguir el triunfo, amaba ser el líder de aquel chico, lo amaba, pero ya no era suficiente... Ya no quería seguir bailando solo por amor a su pareja.

    Estaba jodido, si Denki quería ser profesional, se negaría rotundamente, aunque amara su sonrisa.

    ***

    La semana donde se abrían las convocatorias para inscribirse en el concurso no oficial de la academia fueron todo un combate, algunos tenían su pareja establecida, pero algunos querían experimentar e intercambiar, por lo que todos querían causar una excelente impresión y las propuestas volaban por todos lados.

    Kaminari sentía quizás un poquito de envidia al ver a varios pedirle a uno ser su pareja, quizás ese tipo de energía es la que sentía que le hacía falta, pero él estaba fuera de cuestión, Shinsou era su compañero, nunca aceptaría a alguien más, pero tampoco estaría mal un poco interés ajeno ¿Verdad?

    — Se están devorando vivos, es una masacre — Kirishima tenía como pareja de baile a Mina, pero durante los concursos no oficiales de la academia la chica siempre quería bailar su novio, Sero, quien solo era un bailarín ocasional.

    — Ni me digas, que problema, es una lástima que no bailes en los concursos Kiri, es un baile con mucha energía — Denki soltó una risita al decirlo, pero sin burla alguna, los bailes de Kirishima eran enérgicos, con fuerza y pasión por cada movimiento, quizás hasta bruscos y toscos pero admirables.

    Pero cuando su compañera no estaba a su lado, el único que le seguía el paso era su novio, Bakugo, quien se negaba rotundamente a usar un vestido, él era de la nueva escuela, ambos chicos debían usar trajes para bailar, no le interesaba la tradición.

    — No me pierdo de nada, tú siempre ganas, son una pareja invencible —

    El rubio se puso algo rojo, siempre se enorgulleció de su pareja, pero también había una felicidad diferente al escuchar esos comentarios, algo en su corazón que burbujeaba y le hacía sonreír como bobo solo con ver al otro, podría decir que amor, quizás desde el primer día que le vio bailar le amo como bailarín.

    O eso pensó, que únicamente amaba como se veía al bailar, que solo amaba sus pasos y sus movimientos, pero al ver a Shinsou tomar de la mano al novato y sacarlo a bailar sintió un profundo dolor, se levantó inmediatamente de dónde estaba sentado, casi empujando a Kirishima mientras Shinsou tomaba la cintura de Monoma y empezaban a hacer una rutina que él jamás había visto.

    Quizás fue porque nadie lo esperaba que el silencio se propagó rápidamente y las miradas cayeron en la pareja bailando y en el chico rubio que parecía brillar aún en solitario mirando la escena.

    — ¿Shinsou? —

    El líder casi tropezó del susto, no había notado que Denki ya había llegado y detuvo el baile, Monoma suspiro rendido y espero con paciencia, mirándole directamente y Shinsou se sintió acorralado. Debía decirle, había planeado toda la noche como decirle, pero al ver la preocupación en los ojos de Denki se arrepentía.

    — Lo siento Kam, ya que es una competencia falsa, decidí que mi pareja sería Monoma, no te importa ¿Verdad? Sirve que te tomas un descanso para la siguiente competencia — Sonrió levemente, fue cobarde, no pudo decirle que quería empezar a retirarse, pero esperaba Denki entendiera, poco a poco, quería bailar como con él, pero no por obligación, quería...

    — Yo quería participar — Los ojos ámbar se humedecieron por reflejo, no entendía por qué le dolía tanto, se sentía... Traicionando de alguna manera, Kirishima no lo tomaba mal ¿Entonces porque él si? Era la pareja del mejor líder de la academia, nadie más le había pedido nunca bailar entonces ¿Solo le quedaba rendirse y aceptar eso?

    Shinsou suspiro, le explicaría después, pero tenían todas las miradas encima, no era momento par discutir, así que solo le hizo una señal para hablar más tarde y volvió a tomar del brazo a Monoma para retomar su baile. Aunque lo más sorprendente y que le hizo sentir terrible culpa al de cabellos oscuros fue ver al rubio caer sobre sus rodillas completamente afectado.

    La mente de Kaminari era un rollo, odiaba la idea, pero tampoco veía razones con las que detenerlo, únicamente quería bailar con él ¿Se abría aburrido? ¿Estaba cansado de él? ¿Ya no le satisfacía su baile?

    — ¿Te gustaría bailar conmigo? —

    Denki elevó la vista aún atontado por lo sucedido, encontrándose con los ojos amables y la mano extendida de Todoroki quien se había arrodillado frente a él y parecía sinceramente preocupado.

    — Midoriya dejo la academia hace unos días, así que... Me encantaría bailar contigo, si me das el honor —

    Nadie entendió bien lo que pasó, pero hasta Shinsou entendió en el momento que Denki tomo la mano ajena, que estéticamente habían entonado bien solo con levantarse juntos. Bien, estaba agradecido de que Shouto hubiera salido a ayudar a tan extraña situación, ahora únicamente quedaba ganar la competencia, y con el premio en mano hablar finalmente con Kaminari seriamente sobre su futuro.

    ***

    Al principio fue un total desastre los ensayos, quizás porque ya estaba demasiado acostumbrado a su pareja de baile, pero Shouto era completamente diferente y no lograban acoplarse. Todoroki Shouto aunque tuviera rostro de ángel tenía una danza más fuerte, bestial y poderosa que la de Kirishima, cada paso hacía mover todo el cuerpo, cada vuelta llevaba tanta fuerza que si se soltaban era una caída estruendosa y dolorosa.

    No recordaba que el baile le causará moretones desde los 10 años, ahora incluso sus brazos estaban marcados en rojo vivo por los dedos ajenos de tanta presión que le ponía.

    Su cintura especialmente empezaba a doler frecuentemente de lo fuerte que Shouto lo sostenía y lo mucho que se estiraba con las poses, podía jurar que un día de esos llegaría a partirse a la mitad de tanto que arqueaba su espalda para ayudar en su guía a Todoroki.

    Lo único que agradecía de aquello es que Shouto, siendo todo un niño ricachón, contaba con su salón privado para practicar, así nadie le vería caer y tropezarse, su orgullo como bailarín era terriblemente grande.

    — Céntrate Kaminari.

    Dos vueltas más, casi le rompe la espalda nuevamente, una figura alta y el baile había acabado. En cuanto el líder le soltó, sus piernas perdieron fuerza y termino en el suelo, sudando y sin respiración mientras sentía el dolor de los moretones empezar a cobrar factura.

    — Esto no está funcionando.

    Todoroki suspiro profundo, acomodándose la ropa mientras tendía la mano para qué se levantará, Kaminari le miro con odio por sus comentarios y se levantó solo con trabajo.

    — Claro que no funciona ¿Qué clase de baile es este? Estás loco Todoroki, esto es el purgatorio — Molesto porque no había progresos en su baile escupió esas palabras con enfado siendo ignorado y molestándose aún más — Así menos esto se arreglará, ¿Sabes que? Esto es un asco, ni siquiera nos llevamos bien, el baile es un desastre, la coordinación, apenas su aguanto tu ritmo, con Shinsou siempre era... —

    — Yo no soy Shinsou — Como si lo único importante fuera su último comentario, Shouto respondió aquello con enfado cruzándose de brazos.

    —... Sí, lose, eso estuvo de más, lo lamento — Aún estaba enfadado, pero era poco profesional de su parte mencionar a su líder frente a su líder provisional.

    — No, no lo sabes Kaminari, tu mente sigue con él, por eso no logras ver qué está pasando aquí — Shouto se acercó hasta él, impidiéndole replicar y llevándolo hasta la pared espejo quedando ambos mirándose.

    — ¿Ajá? —

    — Kaminari, dime qué ves.

    — ¿Nosotros? Vamos Todoroki esto es estúpido...

    — Tu líder.

    Cómo su fuera lo más obvio del mundo, Denki le miro intrigado, siento sostenido de los hombros para que siguiera mirando.

    — No es Shinsou, ni su "princesa", somos tú y yo en ese reflejo, y lo que yo veo, es un líder, y un capullo — Aunque la conversación sonara tonta, en realidad Kaminari se quedó viendo su reflejo — Dime Denki ¿Me viste bailar alguna vez como bailo ahora? —

    En realidad, no. Shouto y su pareja de baile Midoriya tenían una forma de bailar muy tradicional y tranquila, quizás caía en lo aburrida, tan lenta y elegante que servía para fotos pero no para destacar en concursos, tan relajado... La mente del rubio se activó, no, no podía ser, el baile de Shouto era de todo menos relajado.

    — Quizás mi pasión por el baile sea más que la de otros, pero he trabajado mucho, pero no muchos me siguen el paso. Pero desde que te vi supe que podrías, cultivando el talento que tienes podríamos alcanzar un nuevo nivel, hasta ahora por respeto no mencioné nada, pero ya sea casualidad o destino, finalmente puedo bailar contigo y lo confirmo, Kaminari, volaras muy lejos — Aunque parecía un discurso motivacional barato, el más alto estaba extremadamente serio, el rubio tembló ante sus ideales.

    Y de alguna manera, su reflejo cambio.

    Antes de aquello, no había notado la cantidad de marcas en su cuerpo, pero con ellas venían marcas de sus músculos trabajando, lo fuerte que se veía aún con un cuerpo esbelto y delgado. Tenía razón, había avanzado, cuando iniciaron no podía aguantar ni una canción, ahora aguantaba todo el acto aunque acabará hecho pedazos.

    No es que no estuviera funcionado su baile, se estaban adaptando, el uno al otro para formar un dúo.

    — Kaminari — Cuando sus miradas chocaron, Denki decisión aceptar cualquier cosa que le fuera a decir — Déjame ser el líder que te haga florecer, prometo verás un cielo despejado para tu vuelo, después de todo ... También quiero ser profesional, déjame quitarte el título de princesa y darte la corona de rey que mereces —

    Ah, podría jurar haber escuchado un fuerte aleteo en ese momento.

    ***

    Quedaba una semana para el concurso, todos estaba ensayando con todo su ser y la pista estaba tan llena que era casi imposible seguir su rutina sin tener tropiezos. Shinsou aprovechaba su gran experiencia como líder para ayudar a Monoma a resaltar y evitar equivocaciones.

    — ¡Kami! —

    El saludo estruendoso de Kirishima fue lo que captó su atención, casi todos buscaron con la mirada al rubio quien había dejado de aparecer por la academia diciendo que ensayarían solos. Sonrió con alivio al ver a su rubio de vuelta, aunque apenas su veía unos mechones rubios atravez de la gente.

    — Volvió el hijo pródigo a casa — Con cinismo Monoma se soltó se Shinsou para descansar y que el líder fuera a saludar a su flamante crush, pero no lo hizo, se quedó estático en su lugar mirándolo desde lejos.

    — Sé... Corto el cabello —

    No le quedaba mal, al contrario, se veía realmente apuesto, pero era extraño, ya que Denki odiaba las pelucas para los bailes y se había dejado crecer el suyo. Además de eso, con la ropa de práctica se apreciaban demasiados moretones en su cuerpo, de aquellos que le veía cuando eran niños y se tropezaban ¿Qué demonios estaba haciendo Todoroki como su líder?

    — DenDen — La voz sin emoción alguna resonó en el salón, con la mano extendida esperando a su pareja mientras indicaba que iniciara la música, el rubio tomo su mano con gracia, con tanta elegancia que parecía un cisne bajo los rayos de la luna.

    La ilusión de un cisne que se volvió un águila en cuanto dieron el primer paso y la fuerza que ponían resonaba en cada tacón, cada vuelta y juraba ver articulaciones que no sabía que tenía el cuerpo humano trabajar para crear un baile salvaje y hermoso.

    Con un final donde podías jurar ver las plumas caer con el viento después del fuerte aleteo de un ave, con ambas figuras masculinas estático en el centro hasta que la canción terminaba y todo quedaba en silencio.

    — ... Cómo les decía, que bueno que no participaré — Kirishima soltó una leve risa, tratado de ocultar su vergüenza y al mismo tiempo su asombro. Solo podía pensar en un gran "wow" y como su orgullo como bailarín se veía roto.

    ***

    — Denki ¿Qué fue eso? — Casi persiguiéndolo en los pasillos a los vestidores, Shinsou trabaja de entender que había pasado exactamente en la práctica, Denki caminaba paso rápido ignorándole lo mejor que podía.

    — Un baile.

    — ¿Un baile? Denki sabes que no es lo que me refiero ¿Desde cuándo bailas así? — una alarma se encendió en su cabeza con fuerza, mientras seguía los pasos ajenos sus ojos iban desde su cabello rubio corto, hasta los moretones en sus piernas.

    — ¿Importa? — Denki se detuvo y finalmente le miro, con indiferencia y algo de malestar — No creo que tenga que ver contigo, déjame tranquilo debo volver a ensayar — Aunque trato de irse, el otro le tomo de la muñeca con una expresión preocupada.

    — ¿Nada que ver? Soy tu líder, Kaminari.

    — ¿No fuiste tú el primero que me cambio? — No quiso que sonará mal, pero sonó molesto y grosero ese comentario, el agarre se aflojó un poco, pero no le soltó.

    —... No pensé te pareciera tan malo — En realidad lo sabía, pero había tratado de huir para irse saliendo poco a poco.

    — ¿No pensaste? ¡Ese es el problema, nunca piensas! Siempre eres tú y tú, ¿Dónde quedan mis sentimientos? Yo quería bailar, quería bailar contigo hasta llegar a la cima de este mundo, tú me cambiaste.

    — ¡No te cambie! Escucha Kaminari, no es lo que piensas.

    — ¿Y qué es? Vamos Shinsou ¿Qué me falta? ¿Qué no te gusto? ¿En qué falle? Me han estado matando las dudas desde ese día ¿Qué es lo que hice mal para que me dejaras? — El rubio le tomo de las manos algo insistente, aún un poco afectado por lo que había pasado.

    — Nada, nada, no eres tú Kam, es... — Los nervios y la culpa le estaban ganando, no quería que Denki se sintiera así.

    — ¿Neito? ¿Es mejor bailarín que yo? ¿Más lindo? ¿Mejor compañero?

    — ¡Que no! Quiero... retirarme — Lo dijo, finalmente lo dijo, lo que había estado atorado en su garganta todo ese tiempo.

    — ¿Qué?

    — Lo siento, no sabía cómo decírtelo. Lo siento Kaminari, pero estoy cansado, agotado y agobiado de este mundo, solo quiero salir corriendo y dejar todo esto atrás, sé que mi madre hará un escándalo, pero ya no quiero bailar — Cerro los ojos tratando de juntar su valor, cada que daba un paso en la pista, recordaba las horas gastadas de su vida en ella, quería una vida normal, pronto iría a la universidad, quería ser como cualquier estudiante, tener una vida relajada y ver al rubio fuera de esa pista, quería tener citas, tiempo a solas, ni un solo ensayo más.

    — ¿Y yo? — El más bajo le miro atónito, estaba loco, debía estar loco para decir semejantes palabras — ¿Los años de ensayo? ¿Las caídas? ¿Las horas de trabajo? ¿Todo el esfuerzo que puse en mi perfil? —

    Debía ser mentira, tenía que serlo, él había... Lo había dado todo, y lo habría dado todo hasta secarse por él, las horas de ensayos, los mil cursos de maquillaje, los moños y tacones, todo, para poder encajar bien a su lado.

    — ¿Dónde quedó yo Shinsou? Yo eh... Eh pasado mi vida bailando a tu lado, tengo sueños, metas. Amo este mundo, amo bailar y ahora... ¿Dices que te retiras? ¿Solo así? — se tapó la boca con ambas manos atónito, así nada más, quería echar por la borda todo, cuando él ya les había construido toda una vida en su cabeza, seguro de que lo harían juntos.

    — Denki, quiero seguir bailando contigo, pero no profesionalmente, nada más a tu lado, sin miradas sobre nosotros, sin presiones, yo... — Sus orejas se pusieron algo rojas, iba a confesarse, finalmente derramaría los sentimos que había estado guardando por años, le tomo de los hombros con cariño, tomando aire para decirlo.

    — Ya no Shinsou — Las palabras frías del rubio desconectaron al otro que ni tiempo tuvo para pensar, el rubio sintió sus ojos vidriosos y nada más se safo de su agarre.

    — Den, escucha —

    — Ya no quiero ser tu princesa Shinsou — Kaminari casi se muerde la lengua — No quiero ser un adorno más en tu baile, no quiero ser la muñeca abandonada que dejaras solo así, tengo sueños, metas por mi mismo, y ya no te seguiré — Finalmente se separó a una distancia aceptable — Voy a volar Hitoshi, tomaré la corona del rey con mis propias manos y alcanzaré nuevos sueños.

    Shinsou se quedó sin habla, procesando como habían terminado en esa situación mientras el rubio se alejaba.

    — Shinsou — Antes de encerrarse en los vestidores, Kaminari soltó la bomba — Cuando ganemos el concurso, le pediré ser mi pareja oficial a Shouto —

    ***

    Había momentos en medio de los ensayos en que el rubio se distraía de más y Shouto tenía que bajarle a la intensidad para no causar un accidente, pero no estaba tan conforme con eso. Se habían vuelto pareja para ganar, siempre pensó en ello, pero Denki estaba más perdido que de costumbre.

    Llegó un momento, dónde el baile se volvía perfecto, cada paso, cada vuelta, una coreografía elegante y completamente mecánica mientras el rubio tenía los ojos nublados y su mente en otro lado.

    — Paremos por hoy — En cuánto sus manos se soltaron, el rubio volvió en sí y asintió suavemente, no tenía mucho que decir, o bueno si ¿O no? Sinceramente, no tenía ni idea de por dónde empezar si debía decir algo.

    Así que mejor callaba.

    Shouto le pegó en la frente con la botella de agua, sonriendo levemente tratando de animarlo mientras el mismo descansaba. El rubio paso a verse reflejado en la pared espejo, cuando se sentía extraño la miraba, verse a sí mismo le ayudaba a aclararse.

    Le gustaba como se veía el resultado de su esfuerzo, aunque los moretones se hicieran menos notables co forme los días nuevos se hacían con el tiempo, y ahora en especial tenía marcados los dedos ajenos de lo preciso que era su compañero al bailar.

    — Me pregunto cómo le hizo Midoriya para ocultar esto — Se tocó levemente las marcas, con Shinsou hace demasiado dejo de tenerlas porque él siempre procuraba su bienestar, incluso a veces dejaban ensayos inconclusos por esas cosas. En cambio, Shouto era profesional, el mismo tenía marcas y moretones, y como su pareja anterior, Midoriya debería tener ¿No? Jamás le había visto.

    — Nunca tuvo, en realidad nunca pude bailar en serio a su lado — Con naturalidad el más alto le pasó dos dedos sobre las marcas más visibles, haciendo recuento del daño.

    — ¿En serio? Es buen bailarín, era.

    — Bueno, no quería hacerle daño de ninguna manera, es una desventaja de bailar con la persona que te gusta —

    Aunque el bicolor no lo menciono como algo importante, la piel del rubio se congeló, sus mejillas se tiñeron de carmín y miro sorprendido a su compañero, había parejas de baile que se enamoraban, incluso entre chicos, pero no pensó vivirlo en persona. Cómo su amigo, si podía imaginar a Shouto siendo delicado y controlándose para bailar con su amado, un baile muy diferente al suyo.

    — ¿Kam? —

    Sin pensar, recordó a su exlíder, quien aunque aún le tuviera coraje, siempre logro hacerle sentir completo con una sonrisa. Solo eso. Shinsou siempre fue delicado y amable a su manera, y lo ponía en una prioridad en casi todo. Él también, siempre le puso en un pedestal, el líder perfecto, a quien seguiría hasta el fin del mundo.

    — Sho ¿Te molestaría que bailará con alguien más de juego? —

    Su mente empezó a trabajar, ahora que caía en cuenta, Shouto también era importante para él, no era su líder perfecto, pero si su líder, el que le daría alas para volar. Quizás como bailarín era hasta más relevante para él que Shinsou.

    — ¿No? No sé, depende, pero es tu vida DenDen, tampoco es que tengamos que estar pegados, mientras en lo profesional estemos bien, tu vida privada es completamente tuya — Shouto estaba intrigado de que estaría pensando esa cabecita rubia.

    Para Denki esa respuesta lo complicó más. Pensándolo, tampoco le molestaría que Shouto bailara con otros, entonces ¿Por qué con Shinsou si? Estaba que hervía del coraje el día que saco a Monoma, pero ¿Qué tenía de diferente?

    No fue enojo, tampoco indignación ¿Celos? Quizás, sí, estaba celoso, de que alguien más bailará con Shinsou ¿Por qué? ¿Era por Neito? No, no, le daba celos que bailará con otro, entonces ¿Era por Shinsou? Eran amigos de la infancia, eran cercanos ¿Le robaba su lugar? No, no se podía robar, pero entonces...

    — ¿Me gusta Shinsou?

    El estallido en risa del bicolor no se hizo esperar, había estado observándolo atentamente por si tenía algún problema, mirándolo mientras pensaba y pensaba ¿Era por eso?

    — Creo todos lo sabemos ¿Te preocupa que este incómodo? Para nada, creo harían una linda pareja, mientras bailes conmigo lo demás está bien — Entendiendo otra cosa en vez de la realidad, Todoroki paso a revolver le los cabellos rubios con cariño y a decirle que recogieran sus cosas.

    El rubio sintió que su corazón se encogía, si realmente le gustaba Hitoshi ¿No había probabilidad de que el peli morado sintiera lo mismo? Quizás... Por eso era tan amable, por eso le costó tanto decirle la verdad, por eso... Esquivo los problemas con tal de que no pelearán.

    — Entonces... Me gusta — Más decaído que feliz por su reciente descubriendo el rubio tomo sus cosas y volvió a mirarse al espejo una vez más.

    ¿Qué era exactamente lo que quería?

    ***

    El día del concurso, el lugar estaba lleno de gente, los vestidores eran un caos y el aroma a polvo de maquillaje empezaba a causarle alergia a alguno que otro.

    De lejos podía mirar a Monoma, con un cuerpo delgado más no esbelto, logro entonar un vestido verde turquesa simplemente hermoso, con un maquillaje suave y la peluca fina, realmente se notaba el trabajo que puso en ello. Cuando regreso su mirada a su propio reflejo, no encontró nada de eso.

    Por primera vez, tenía un maquillaje casi nulo, su cabello ahora corto se acomodaba en un simple moño bajo, y el vestido mandado a hacer a la medida por Shouto era de un pulcro blanco. Más que para el baile, parecía una novia a punto de entrar a la marcha nupcial.

    — Perfecto para la ocasión ¿No crees? — Tomándole de los hombros, Todoroki llegó para avisar que empezarían, mirándole con atención y sonrió algo divertido al saber de qué iba todo el show, y siendo cómplice de la treta.

    — Si, perfecto — Sonriendo cómplice, el rubio se levantó y al sonar elegantemente sus tacones la mayoría de los participantes entendieron que era la hora.

    Fue curioso, como los reyes de la pista ya era tradición que Shinsou y Kaminari entraran como la primera pareja en el salón donde sería el concurso. Pero esa vez todos sonrieron asombrados pensando con curiosidad e intriga por el futuro al ver entrará a Shinsou, con un elegante acompañante, y justo de tras, a Kaminari, resaltando junto a su compañero.

    Quizás por diversión del jurado y para los espectadores, fueron colocados en números continuos, por lo que ambas parejas al posicionarse, se miraron con atención.



    >Sí consigo el primer lugar Kaminari, yo ... >>

    << Cuando consiga el primer lugar, yo... Shinsou... >>

    <<Lo conseguire todo, a toda costa >>



    Aunque el concurso no era tan pesado como los reales, si eran varios sets, dónde cada pieza de baile hacía resaltar diferentes cualidades, pero sin duda, el mayor entretenimiento de la noche era ver a las primeras parejas, como un juego de miradas, el líder de la pareja uno, con un baile elegante y perfecto, solo tenía su mirada sobre el compañero ajeno del líder de a lado. Mientras ese compañero, haciendo resaltar sus cualidades con un baile fuerte y brusco, solamente tenía ojos para el líder de a lado.

    Aun cuando parecían distraídos de su labor, al final el resultado era el esperado, eran las parejas con mayores puntajes y estaban a nada de dar paso a la ronda final.

    Y para esa ronda, Todoroki Shouto hizo la primera jugada, colocando a su compañero justo a lado del líder ajeno, con una mano en su cintura y la otra tomando su mano. Cómo un chico con ansias de alcanzar el baile profesional, teniendo entre sus manos el ansiado compañero de baile, sonrió orgulloso de sí mismo, declarando fuerte y claro su posición sin necesidad de decirlo en voz alta.

    << Lo siento. Está noche, robaré a tu compañero>>

    Los bailarines eran orgullosos, dignos y honorables, y sus compañeros no nada más eran sus parejas al bailar, eran parte de ellos, una extensión de su propio cuerpo, eran 2 en 1. Incompletos solos, pero perfectos uno junto al otro.

    Y Todoroki estaba dispuesto a robarse eso tan preciado, con la confianza de poder llevarlo más alto aún. Shinsou sonrió amargamente para la presentación, entendiendo ese lenguaje de miradas.

    — Hitoshi — Como el sonido de un globo estallando, Denki hizo brillar su presencia en medio de los dos líderes que se mataban a miradas, digno y con la mirada en alto — Toda mi vida solamente te veía, pero ahora... Te dije que tomaría la corona del rey — La música de entrada para ese último baile empezó a sonar, mejoró su postura, sintió a Shouto hacer lo mismo, y puso la mejor sonrisa que tenía.

    — A partir de ahora, serás tú el que no podrá dejar de verme.

    Nada más basto con sonar el primer tacón en la pista, para que el ambiente cambiará de golpe y la pareja no.2 sacará sus alas y volará tan alto que nadie podía creerlo. Con pasos fuertes y firmes, pero delicados y flexibles, sin mirar nada más que entre ellos dos, él vuelvo del vestido blanco pareció ondear cómo las olas, las sonrisas profesionales les hicieron brillar como las estrellas, y nadie pudo apartar la mirada de su baile hasta que terminó.

    ***

    La ceremonia de premiación fue corta y divertida, al ser algo no oficial era más divertido convivir todos que hacer muchas ceremonias, al final, los únicos formales y posando para la foto fueron los ganadores, con sonrisas cansadas, el cabello pegándole a su rostro por el sudor y el ramo de flores en mano atendían a todas las felicitaciones.

    Más que premiación, parecía un pequeño convivió pues hasta comida había, el aroma en el aire era mayormente dulce y entonaba bien con el entorno.

    — ¡Muchas felicidades! Verlos bailar hasta me hizo sentir envidia, no sé cómo deje de bailar — Midoriya con una gran sonrisa se acercó a entregar otro regalo de celebración. Había dejado la academia para centrarse en sus estudios pero ahora... Envidiaba ese mundo tan brillante, bailar era... Demasiado divertido.

    — El resultado fue bueno, nada más.

    Pese a tener el puesto principal, las calificaciones habían sido reales y profesionales, habían ganado el concurso, pero teniendo en cuenta que la escala del baile profesional para la sección adulta era mucho más estricta, el resultado no era lo que deseaban, aprenderían más, mucho más.

    — Volaremos aún más alto — Con una sonrisa enorme y sosteniendo firmemente la corona artificial del ganador, Denki encendía nuevamente sus ansias de lucha mientas Shouto apoyaba sus palabras con mucha más tranquilidad. Midoriya soltó una pequeña risita y tomo del brazo al bicolor para ir a celebrar junto a los demás.

    Entonces el rubio, con corona y ramo en mano, entendió que era el momento, sus tacones se escucharon más debido al silencio que se interpuso al verle acercarse a su antiguo líder. Incluso Monoma se hizo a un lado aún enfadado por no haber ganado.

    — Felicidades, Kaminari, supongo era el resultado que deseaste — Tratando de sonar amigable, pero aún sintiéndose devastado Shinsou sonrió débilmente.

    — Algo, conseguiré aún mejores resultados, iré con Shouto a ligas mayores —Era una declaración oficial del cambio de compañero, y él tenía que aceptarlo tranquilamente — Ahora tú te centraras en la universidad, y yo bailaré en escenarios más grandes, supongo ya no nos veremos mucho —

    — Somos amigos de infancia — Como algún tipo de excusa, quizás buscando como tratar de mantener su conexión Shinsou menciono aquello como un lazo inquebrantable, dando a entender que no lo dejaría, quizás ese día no se pudo, pero seguiría apoyándolo y estando siempre con él.

    — Cierto, pero aun así, yo si quiero tener más tiempo — La sonrisa burlona cambio a una risita infantil y dulce del rubio quien de un solo movimiento, acomodando la falda, se inclinó ante el otro ofreciendo el ramo del ganador dejando caer una lluvia de pétalos.

    — Quiero tenerte de pareja, pero no de baile, decidí que te lo diría si ganaba, me gustas — Se inclinó suavemente e incluso su mirada termino en el piso, varios soltaron pequeños grititos de alegría y empezaron a hacer burla y cantar victoria. Hitoshi se quedó sin habla, viendo el ramo y al rubio que tanto adoraba confesándose primero que él, quien se supone estaba decidido.

    — Que curioso... Yo pensé exactamente lo mismo — Sonrió derrotado tomando el ramo y ayudando a levantarse a su chico, el pacto se selló con un tímido beso en los labios y unas sonrisas infantiles al recibir las felicitaciones.

    Quizás, desde el primer día aquel niño rubio no solo se había enamorado del baile, sino también del niño de cabello oscuro que bailaba tan solitariamente aquella vez. Aunque tardo en darse cuenta. Ahora seguiría bailando, con el compañero perfecto, entrenando y mejorando, cayendo y fracasando estruendosamente, ganando y sonriendo, pero siempre con su querido primer líder animándolo desde las gradas y bailando con él dulcemente cuando no hubiera público al cual impresionar.

    Fin.
     
  3.  
    isavetthdz

    isavetthdz Una letra a la vez, la fantasía continúa.

    Cáncer
    Miembro desde:
    1 Marzo 2017
    Mensajes:
    77
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Un par de miradas.
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Comedia Romántica
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    1138
    Primera vez.

    Debía admitir que era algo complicado, si trataba de analizarlo parte por parte la única conclusión a la que llegaba es que era complicado.

    Primeramente, para alguien como el que pocas veces en su vida pensó en otras cosas aparte de la escuela o sus sueños a futuro, ya era difícil asimilar algo tan abstracto cómo el romance, no lo negaba en su vida, tampoco era tan desinteresado, pero lo dejaba todo "a su tiempo" y no se preocupó por ello hasta que le pegó.

    Y como segundo, dejando de lado lo difícil que fue darse cuenta de que era algo parecido al amor lo que empezaba a sentir, lo que realmente le cayó como hielo frío fue darse cuenta a quien miraba con esos ojos.

    Tenía que ser una terrible broma del destino.

    — Shinsou, Shinsou ¡Ayúdame con mi tarea!

    — ¿Otra vez? Kaminari nunca la haces, solo me distraes y me haces perder el tiempo.

    — ¡Te lo suplico! — Las mejillas rojas de vergüenza hicieron menos perceptible el latido rápido del corazón del rubio al aferrarse al brazo ajeno.

    — ... Ya que, nos vemos en tu cuarto al rato — Con desinterés y hasta molestia el pelimorado lo empujó para qué le soltará y dio pasos rápidos para alejarse, el rubio atrás sonrió orgulloso de que había obtenido lo que quería y dio saltitos pequeños.

    — ¡Te adoro Shinsou! — Y aunque estuvieran ya separados por un tramo, la sonrisa de Denki brillo más que lo demás y empezó a correr con emoción para prepararse para su cita de estudio.

    En cuanto dio la vuelta en la esquina del edificio y no se veía ni rastro del rubio fue que el más alto cayó de rodillas cubriendo con ambas manos su rostro.

    — Maldición — Dudo al levantarse, su rostro ardía, y cuando vio su reflejo en la ventana del salón noto el color carmín dominar toda su piel.

    Era difícil, terriblemente difícil tener tu primer amor, pero era aún más difícil que ese primer amor fuera el de Shinsou Hitoshi, quien nunca había experimentado el romance, y la dificultad subía a un nivel 2 al tener como objeto de su afecto, al tonto y ruidoso Kaminari Denki.

    Era una cruel jugada de la vida que su corazón lo eligiera, teniendo tantas personas grandiosas en su entorno, ya no pedía ni siquiera una chica pero ¿Kaminari? ¿Uno de los chicos que menos mostraba pudor y coqueteaba con toda mujer hermosa? Claro...

    Estaba jodido.

    Ya ni hablar de ser amigos, podía intuir que si él se le confesara a alguno de sus amigos como Midoriya, este le rechazaría, pero seguirían su amistad. Kaminari, en cambio, si se hacía consiente de sus sentimientos, podría querer buscarle una chica para que no se "confundiera".

    No, no, y no, jamás podía dejar que el rubio supiera de sus sentimientos.

    Pero en cuanto llego a la hora de su estudio y lo encontró profundamente dormido, recostado despreocupadamente en el piso de su habitación con una sonrisa tonta en el rostro supo que sería difícil, una sonrisa pequeña surgió en su rostro y le contempló algunos minutos antes de volver a regañarse a su mismo.

    — Kaminari, despierta — Soltó un golpe en sí cabeza para despertarlo, causando que el chico reaccionara asustado y dejara salir un pequeño grito, cuando recálculo donde estaba y que estaba haciendo paso a sonreír a su visitante.

    — Perdón, se me olvidó —

    Increíble ¿Ese era el chico que robo su corazón? Estaba jodido.

    — Ya no importa, estoy acostumbrado a que nada dure en tu cabeza más de 5 minutos, la tarea — Más que pasar su tarde discutiendo y peleando con el rubio por no poner atención, ese día decidió firmemente que preferiría pasarle la tarea ya hecha y regresar a su cuarto a seguir regañándose.

    El rubio entendió a la primera, pues tomo la libreta y rápidamente empezó a copiar las respuestas, terminando sonrió cuál niño abrazando la libreta ajena.

    — Eres mi héroe Hitoshi, te debo una.

    — Me debes muchas.

    Tomando su libreta de regreso guardo sus cosas listo para irse en cualquier momento.

    — Vamos no seas así, es más, ya que estoy de buen humor pídeme lo que quieras para quedar a mano — La sonrisita traviesa del más bajo junto a su mirada divertida era una de las cosas que más aceleraba el pulso del controla mentes, este se sintió algo nervioso sin mostrarlo, pensándolo muy poco ante su tentativa oferta.

    — Cuida tus palabras, porque entonces pediré un beso.

    Pensó lo dicho hasta que ya se le había escapado, pero también pensó rápidamente en mil maneras de contestar que aquello era una broma cuando el rubio reaccionara, noto un par de ojos dorados verlo fijamente con sorpresa, después estos se relajaron y aunque había pensado mil y un movimientos para después de sus palabras, todo se borró cuando los labios ajenos se posaron sobre los suyos suavemente.

    Su mente se congeló, Kaminari Denki lo estaba besando, sus labios estaban unidos y tardaron más de lo debido en despegarse, estaba atónito.

    — Listo, estamos a mano.

    Tan pronto como sentía el cielo en sus manos, lo regresaba de golpe al suelo, sintió aquello duramente como un ataque al corazón al notar que no había significado nada para el rubio ese beso, quizás hasta estaba acostumbrado con lo rápido que lo hizo.

    ¿Era en serio? Había Sido besado por su crush y para él no había Sido nada, la sensación gloriosa de hace algunos momentos se volvió terriblemente amarga, callo sus palabras y sintió su pecho encogerse.

    Debía irse.

    Tomo su mochila para salir huyendo de allí, pero cuando paso su mano por la mesa para tomar lo que faltaba lo noto, un leve rojo en la nuca ajeno, que paso a ser un rojo encendido en poco tiempo que empezó a extenderse hasta sus orejas, para después adornar bruscamente el rostro ajeno haciendo un desentone con su cabello rubio.

    Más que esconderse, el rubio estaba más sorprendido que él por esa curiosa reacción en su cuerpo, paso a verlo y volverse aún más rojo apretando sus labios con fuerza tensándose por completo.

    — ¿Ka... Kaminari?

    — Espera, dame un momento...

    — ¿Estás bien? — Aunque trato de acercarse el rubio reacciono cubriéndose un poco el rostro con sus manos.

    — Es la primera vez ... Que me gusta un chico, espera, creí me vería más genial.

    Con solo esa frase, mientras el rubio parecía tratar de entender como había perdido su faceta de chico genial tan rápido, el más alto sintió el alivio recorrer todo su cuerpo.

    — La mía también.

    Ambas miradas chocaron aún impresionadas, parpadearon un par de veces de forma lenta y al final la risita nerviosa del rubio quien escondió su rostro por completo en sus brazos fue lo que rompió la tensión, Shinsou suspiro resignado, dejo caer la mochila de nuevo al suelo y se acercó para sentarse a su lado.
     

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso