Un amor irrompible

Hola chicas aqui les dejo el capitulo de hoy, espero sea de su agrado y lo disfruten... y gracias a a ustedes por ayudarme a mejorar la histori, no lo fuera logrado sin su apoyo y sus consejos... sobre todo a ti Alainne... Bueno sin nada mas que decir aqui les dejo el capitulo, disfrutenlo...

CAP: 4

CONOCIENDO JAPÓN​

Al salir de aeropuerto Kagome y Shippo estaban sorprendidos ante todo lo nuevo que estaba ante sus ojos, Konami y los demás estaban listos para tomar un taxi que los llevaría directo a la casa de los Higurashi, pero Kagome se opuso.

—Yo quiero conocer un poco y caminar ¿podemos?
—Pero prince…— Pero en ese momento fue interrumpido por Kagome.
— ¡Kouga¡— Regañó —Aquí solo soy Kagome Higurashi, la princesa se quedo en Grecia ¿Entendiste?
Kouga quedo u minuto e silencio y luego dijo— Si, pero ¿Se le puede llamar señorita? — Pregunto con la mirada hacia el suelo.
—Si, eso esta bien— Aceptó Kagome gustosamente, y luego le pregunto— ¿Qué querías decirme?
—Señorita Kagome, es que tenemos muchas maletas como para caminar por todo Japón con ella— Dijo señalando las 11 maletas que traían consigo.

Kagome se puso a buscar una solución para poder conocer Japón y mandar las maletas a casa, en eso le vino una idea.

—Y ¿si tú y Shinta llevan las maletas a casa?
—No, eso nunca me enviaron a protegerla y no la pienso dejar sola— Respondió aquel muchacho pelimarrón viéndola frente a frente, lo que izo que aquel muchacho se sonrojara y quedara igual a un tomate, Shinta quien noto que su amigo casi no respiraba de lo nervioso, se acerco a ellos y se ofreció a llevar las maletas el solo, Kouga se voltio para ocultar a Kagome su sonrojo y dio un si a Shinta y este partió hacia la casa de los Higurashi, Kagome y el resto empezaron a explorar aquel “nuevo mundo” para ella, de tanto caminar y conocer llegaron a un centro comercial, Souta invito a Shippo a jugar vídeos juegos con el mientras descansaban un poco.

—Vallamos pues—Espero que sea algo muy divertido —Pensó en aquel momento Shippo.
—Kagome vamos a la cafetería a platicar— Dijo la mama mientras caminaba hacia dicho lugar.
Kouga que estaba indeciso hacia donde agarrar, pregunto—¿Que hago yo? Señorita.
—Ve con ellos , yo estaré bien—Respondió Kagome.
—Esta bien, si eso es lo que ordena.

Kouga se fue tras los chicos y Konami y su hija iban hacia la cafetería, ya en dicho lugar pidieron dos tazas de café y empezaron a platicar, cuando tocaron un cierto punto.

—¿Estudiaras aquí por un año?
—Si al igual que Shippo,quiero saber que es estudiar como una chica normal.—Respondió Kagome viendo como pasaba la gente tan tranquilas tras el vidrio de la ventana.

—En que instituto estudiaras.
—En el instituto Toshiba— Dijo revolviendo el café— Mi abuela me dijo que era el mejor ya que el dueño es un gran amigo de la familia.

En esos momentos los chicos llegaron y le notificaron que tenían hambre, ellas piden la cuenta y salen de aquel lugar, Konami suguirio ir a un restaurante en particular llamado “Estrellas Centelleantes” el cual pertenecía a Inutaisho Yamasaki, llegaron al restaurante ya que quedaba a la vuelta de la esquina, pidieron su orden, no tardo mucho en que se la trajeran, ya después de haber comido, eran las 10 de la mañana, siguieron su misión de explorar aquel hermoso país, pero Kagome ya no tenia mas lugares que visitar, a lo que pregunto.

—¿ Alguien tiene sugerencias?
—Si, yo tengo varias—Respondió su madre—Y se que te gustaran,podemos ir a la casa antigua o también a la plaza donde conocí a tu padre, tu desides.
—Si es buena idea, en especial quiero observar de cerca la estatua que esta en medio de la plaza—Dijo mirando el cielo—Me han dicho que es muy hermosa y que se llama la plaza de los príncipes o la plaza del amor.
—Si, tiene muchos nombres, pero es mas reconocida por la plaza del amor.

Todos partieron hacia la casa de los Pankoski, la cual no quedaba cerca, había que caminar mucho para llegar a ella. Pero para ahorrarse las energías prefirieron tomar un taxi, aunque Kagome se opuso a esa elección no tuvo otra opción mas que aceptarlo, ya a las 11:30 llegaron a aquella casa, Kagome estaba muy emocionada con ese pequeño viaje que hicieron, pero nada se comparo con la emoción que sintió al ver aquel lugar. Su vista desde fuera era encantadora se podían ver los pequeños arbustos que estaban de cada lado de la entrada, aquel hermoso jardín que había frente la entrada de la casa para ella era como si estuviera aun en el castillo, pues esta casa se le parecía mucho la única diferencia era que la casa solo contaba con dos pisos y el castillo era de mas, en la entrada había un señor, el cual era el guardián de aquel lugar, Kouga pidió entrar, pero el señor se negó rotundamente, Konami quien estaba detrás de ellos reconoció el señor de inmediato.

—Señor Mioga ¿Como ha estado?— Señora Higurashi, es un placer volver a verla, yo estoy muy bien ¿Y usted?
—Muy bien gracias, veo que no se le ha olvidado como llamarme, después de tantos años.
El señor empezó a rascarse la cabeza y a reír, el abrió las rejas y pregunto que ¿Quienes eran sus acompañantes?
—Ellos son mis hijos, mi sobrino el hijo de Bankotsu y Hitomi y el hijo de Asaka Sukishi— Respondió Konami.
—¿Como? — Se quedo paralizado por un momento ante aquella sorpresa, luego se arrodillo rápidamente— Princesa, Príncipes, que descortés de mi parte.

Kagome a quien no le gustaba que se arrodillaran ante ella, simplemente se limito a levantarlo y decirle— Levantece no es medested que se arrodille ante mi,solo con una reverencia o agachar la cabeza es suficiente, y por favor llameme solo Kagome.

El señor quedo un tanto pensativo lo que Kagome había sugerido y pensó —Es igual a su madre, pero con el carácter de su padre— Señorita Kagome, me alegra mucho verla después de 14 años.

CONTINUARA…

Bueno sera hasta el proximo jueves que ponga la continuacion... Hasta entonces.

 

Bueno chicas aquí les dejo la continuación, pido perdón nuevamente pero es que no había tenido la oportunidad de publicar gracias a todas por su apoyo y sus comentarios, bueno no les quito más tiempo…
CAP: 5

UN PRINCIPE AZUL​

Flash back

Era un día radiante en Japón, la casa de la familia Pankoski estaba muy bien adornada, los sirvientes estaban acomodando la casa, ya que por la tarde llegarían los dueños, el señor Mioga como era su deber estaba en la puerta esperando a los carros donde llegarían, cuando de pronto a lo lejos se notaban los carros que llegaban.

—! Ya llegan ¡— Decía un chico que estaba montado en uno de los arboles, a la alerta de el todos salen a recibir a los señores como era la costumbre.

—Rey Tetsuya, Reina Midoriko, es un places verlos después de tanto tiempos— Dijo el señor Mioga arrodillándose ante ellos.

Ellos saludaron cordialmente y entraron a la casa pero en la puerta dijeron— Señor Mioga no cierre las rejas, mi hijo Hakudoshi y su esposa están visitando a su padre.

—Si señor.

Ellos terminan de entrar, una hora después aproximadamente se ve llegar a otro carro, este se para en las rejas y una chica saluda al señor.

—Señor Mioga ¿Qué tal esta?
—Señorita Konami muy bien ¿y usted?
—Bien gracias.
—Señor Mioga tiempo sin verlo— dijo un joven atractivo que acompañaba a Konami.
—Príncipe Hakudoshi ¿como ha estado?

—Muy bien.

El carro continuo su camino y Mioga cerro las rejas, se apresuro hacia la entrada de la mansión para seguir charlando con el príncipe y su esposa, pero cuando llego a ellos se llevo una sorpresa, vio a una pequeña niña que estaba tomada de la mano de Hakudoshi, se acerco rápidamente para saber quien era la niña, ya que no estaba enterado de que ellos ya tenían hijos, al llegar a ellos la pequeña se escondió detrás de su padre, ya que era muy tímida.

—Les pido disculpas anticipadamente pero me podría decir ¿Quién es esta pequeña?
—Ella es mi hija Kagome, creí que mi madre le había contado acerca de ella— Respondió Hakudoshi con una sonrisa y mostrando a la niña.
—Hola pequeña princesa mis mas sinceras disculpas, soy el señor Mioga encantado— Esta salió de su escondite y le otorgo una sonrisa, que fue correspondida por él.

Fin Flash Back.

—Mil disculpas jóvenes, soy el señor Mioga Neguishi, el guardián de esta mansión desde hace mas de 50 año.
—No se disculpe, no hay ningún problema— Dijeron en unisonó los tres chicos.

—Pero pasen no se queden allí.

Ellos entran y caminan hasta la entrada de aquella casa, pasan y se dispersan a recorrerla cada uno por su lado, Kagome quien quería conocer mas a fondo la casa reviso todo, incluso los cuartos, luego salió al patio este era muy elegante a todas partes que se viera habían toda clase de arboles ornamentales y de frutas, en medio de aquel lugar se hallaba una fuente, en todo su alrededor tenia matas de novios, y era muy espacioso, Kagome caminaba por aquellos lugares y recordaba el palacio, pues no tenia casi ninguna diferencias, lo único eran los pisos y los jardines. Mientras ella y los chicos exploraban la mansión se hicieron las 2 de la tarde estaban en la sala bebiendo un poco de agua cuando el señor Mioga les dijo que podrían ir a visitar cundo gustasen.

—Claro, lo tendremos muy en cuenta en cualquier momento libre nos pasamos por aquí para visitarlo—Acoto Kagome con una sonrisa, siguieron platicando hasta las 4 de la tarde que tomaron rumbo a la plaza ya que era algo tarde para estar caminando por allí, al salir de las propiedades de la familia caminan un trecho algo largo para tomar el bus que los llevaría de vuelta al centro de aquella ciudad, en poco tiempo llego uno, en mas o menos media hora estaban frente a la plaza, Kagome se sorprendió y se alegro al ver la estatua de sus padres en aquel lugar, tanto que se les escaparon unas lagrimas de alegría y tristeza la plaza era grande, tenia sus arboles que daban sombra y matas que la adornaban, en especial a la estatua, estaba en todo el alrededor de la estatua y un pequeña fuente, la estatua estaba echa con pedazos de vidrios, lo que hacia que cada ves que el sol pegaba en el agua y su reflejo en un pequeño fragmento de vidrio luciera muy hermoso, que en ocasiones parecía que la luz salía de ella.

—Mamá esto es bellísimo—Dijo secándose las lagrimas.
—Vamos hija no llores, el esta con nosotros desde el cielo—Acto seguido de un abrazo que correspondió Kagome.
—Bueno acerquémonos mas para verlo mejor—Sugirió Kouga al ver que Kagome estaba triste.
Kagome tomo sorpresivamente a Shippo y Souta de las manos y los halo hacia el otro extremo de la carretera.
— ¡Guao, esto es gigantesco!—Indicó Shippo con la mano en la frente viendo hacia arriba.
—Si es maravilloso y después de tantos cuentos e historia que papá me conto por fin lo puedo ver con mis propios ojos.
Después de estas palabras Kagome empezó a caminar hacia una pequeña tienda de dulces para comprar unos refrescos y golosinas, luego se sentaron a contemplar aquel hermoso lugar.
—Vamos Shippo, esto no sabe mal—Le decía Souta al pequeño de ojos verdes que se negaba a probar un dulce.
—Pero no estoy seguro, es la primera vez que lo como Souta.
—Bien solo pruébalo, sino te gusta no lo comes.
—Esta bien, solo un poco—Shippo metió la mano en la bolsa, saco uno, se lo metió en la boca, mastico y luego—Esta bueno, sabroso ¡Quiero más!

Souta le dio la bolsa y Shippo empezó a comer como loco, Kagome por lo contrario ya estaba aburrida de estar allí y se decidió a caminar por el alrededor de la estatua, pero no estaba muy al pendiente por donde caminaba que de repente tropezó con alguien e iso que el jugo que esta persona traía se lo derramara en la camisa y cayeran al suelo.

—Auch…—Callo sentada al piso.
— ¡Lo siento! ¿Te lastimaste?—Pregunto el chico levantándose luego le extendió la mano para ayudarla a levantar.
—Solo un poco, no te disculpes la culpa fue mía—Kagome lo dijo con los ojos cerrado, pero la sorpresa se la llevo cuando los abrió y vio frente a ella a un chico guapo, cabellos plateados, catire y de ojos color ámbar—Que chico mas guapo, parece el príncipe azul de los cuentos de hadas—Pensó para si misma, mientras le daba la mano para levantarse— ¿Te paso algo a ti?
—No tranquila, nada grave solo estoy lleno de jugo.

Kouga quien estaba sentado con los demás el banco, se dio cuenta de que Kagome estaba hablando con un extraño, se enfureció tanto que fue directo hacia ellos con la escusa de “este es mi deber como el guardaespaldas de la princesa y debo protegerla”, rápidamente estaba tras ellos.

—Señorita ¿Le paso algo?
—No Kouga, no fue nada, solo tropezamos.

Kouga se puso delante de Kagome con ganas de golpear a el chico, pero Kagome se adelanto a los hechos y tranquilizo a Kouga, aunque no le sirvió de mucho.

—Ya basta Kouga ¡Tranquilízate!—Dijo Kagome con un tono molesto.
Él solo la vio con su cara apenado ante el regaño recibido por parte de ella, Kagome se disculpo con aquel chico y ordeno a Kouga retirarse con ella, pero él por lo contrario se voltio quedando frente a frente al chico desconocido y le dijo—No te vuelvas a meter con ella o la pagaras perro sarnoso.
—Oye ¿Qué te pasa? Lobo inútil.
—Kouga vámonos—Grito Kagome.

Kouga lo vio de arriba a bajo, dio media vuelta y se dirigió hacia Kagome, el chico iso lo mismo que Kouga y siguió su camino, iba pensando en aquella chica—Parece un ángel, es muy hermosa—Se decía, pero algo o alguien lo saco de sus pensamientos.
—Oye hermanito ¿Muy pensativo?—Le pregunto un chico muy parecido a el pero este era mayor— ¿Cómo echaste eso en la camisa?
El chico empezó a relatarle lo sucedido con “ese ángel”, como le llamaba constantemente, su hermano solo reía de lo que escuchaba, Kagome u los demás emprendieron su camino hacia la casa de los Higurashi.

CONTINUARA…

Bueno espero les allá gustado y dejen sus comentarios… Hasta la próxima.

 

Hola chicas disculpen la tardansa...Pero es que en esta semana santa fue para divertirse y mi familia tiene la costumbre de reunirse solo los dias de fiestas o cumpleaños, asi que no me lo podia perder... Bueno sin mas tiempo que quitarles aqui les dejo la conti que la disfruten...

CAP: 6

¿Por qué pienso en él?​

Luego de llegar y haber cenado, todos se fueron a dormir ye hacia horas que Kouga y Shinta se habian marchado a sus respectivas casas, Kagome en su cuarto no podia consiliar el sueño, estaba cerca de su ventana uando de pronto recordo al chico que habia tropezado esa tarde.

— ¿Quién seria? …¿De qué familia es? …¿Cómo se llamara? — Se perguntaba, de pronto algo la saco de sus pensamientos, pues al ver el telefono recordo que no habia llamado a su abuela como lo dijo al salir del palacio, toma el telefono y marca, luego de unos repiques del otro lado contestan.

—Buenos días, familia Pankoski ¿Qué decea?— Pregunto la criada que tomo el telefono.
—Hola buenos días Ayame, soy yo Kagome ¿Mi abuela esta despierta?
—Si princesa, ya se la comunico— La chica subio unas escaleras que llevaban al despacho, toca la puerta y entra— Reina Midoriko la princesa esta llamando— Dio una reverencia, le da el telefono y sale—Con su permiso.

—Alo Kagome ¿Por qué no habias llamado?— Pregunto un poco enojada.
—Bueno… Veras abuela, cuando llagamos aquí alla era de noche y no quise molestarlos, además se me paso por alto, las ganas de conocer que tenia y todo lo que vi, la casa, el señor Mioga…— Lo decia con mucha alegria que Midoriko no quiso intrerrumpirla—Y para colmo conoci ó atropelle a un chico muy guapo— Frase que la abuela no paso por alto.
—¿Un choco guapo?
—Si abuela es muy galan, ademas Kouga casi lo agarra a golpes y por mi culpa los dos caimos al suelo.
—Bueno ese es el trabajo de Kouga, tu muy bien lo sabes. Pero ¿Cómo es eso de que calleron al sualo?

Kagome le conto detalladmente todo lo que le habia pasado en ese pequeño accidente con “el chico de la plaza” como le nombraba constantemente, la abuela al escuchaba atentamente sin interrumpirla, al terminar se dio cuenta de que no lehabia dicho nombre alguno de aquel muchacho a lo que pregunto:

—¡¿Cómo se llama ese muchacho querida?!
Kagome quedo en silencio por un momento y luego agrego— No lo se, solo te puedo decir que es un chico de más o menos 17 años, catire, cabello plateado largo y ojos color ambar, algo distintos a otros chicos que he conocido.

—Bueno su nombre lo sabras a su devido tiempo ¿Cómo se porta Shippo?
—Marabillosamente ya esta dormido ¿Él tio Bankotsu esta por allí?
—Si ya te lo paso,que descances mi niña.
—Y tu que tengas un lindo día.

Midoriko le pasa el telefono a Bankotsu y este habla con Kagome, lo primero que pregunto fue ¿Cómo estaba su hijo? Como cualquier padre, ella le dio la mejor respuesta y le pidio de favor que llevase a Entei a Japón para cuando el fuese a visitarlos, el no se negó y los dos colgaron luego de despedirse y mandar saludos. Kagome se dispuso a dormar ya que era muy tarde.
Al dia siguiente se levanto muy temprano como de costumbre, vioel reloj apenas eran las 6 de la mañana, se dispuso a asearce, luego paso a la cosinodonde se encontraba su madre haciendo el desayuno.

—Buenos dias mamá ¿Cómo amaneces?
—Buenos dias Kagome, muy bien ¿Y tú?... ¿Por qué te levantastes tan tenprano?
—Bueno ya es una costumbre, en el palacio no me ha gustado dormir hasta tarde, por lo tanto esta esla hora de levantarme.
—Bien ¿Me quieres ayudar?
—Claro ¿Qué hago?

Empezaron a cosinar y poner la mesa cuendo terminaron todo se escucharon unos pasos, eran los chicos que venian bajando de su recamara.
—¡Shippo! ¡Souta! ¿Se les pegaron las cobijas?— Pregunto Kagome en tono de burla.
—Eso creo, esta mañana no me quise levantar tenia mucho sueño— Respondio Shippo aun frotandose los ojos.

—Esto es normal en mi cuando estoy en casa com mamá—Concluyó Souta.
Todos toman asiento el la mesa el abuelo de Kagome baja y empiezan a desayunar, despues que Kagome termina se pone a lavar los platos.
—Kagome necesito que hagas unas compras ¿Puedes ir?
—Claro, me llevare a los muchochos, de todos modos Kouga tiene unos dias libres.
—Esta bien saldras ahora, mientras yo voy a casa de Kouga a hablar con su padre.

CONTINUARA…
Espero que les alla gustado sera hasta la proxima, pero esta vez no me tardare mucho lo prometo...