Un amor difícil de encontrar (Naruhina)

Re: Un amor difícil de encontrar (Naruhina)

Siento muchisimo el retraso es k no tuve tiempo y cuando tenía me daba pereza ^^U se k es un poco corta espero k la proxima conty sea más larga de verdad lo siento
muchas gracias por sus comentarios y por dedicar tiempo a leer mi fic ^^ sin más que decir la conty
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Una tiza flotaba sola en el aire y parecía estar escribiendo algo… “Ayudadla” esa era la primera palabra que apareció “Ella no esta loca”

Capitulo 14

Los alumnos estaban cada vez más asustados, ellos no sabían a que se debía eso, ni a quien se referían al decir esas palabras, tan solo los amigos de la joven comprendían un poco lo sucedido, pero aun así seguían sin poder creerse aquello que estaban viendo sus ojos.

Incluso la profesora, no sabía que hacer, hasta que decidió que lo mejor sería desalojar la clase e ir a hablarlo directamente con la Directora del instituto. Los niños salieron en orden de la clase a pesar de que aun no era la hora, se les llevó a la sala de estudios para poder tenerlos controlados y una vez estaban todos allí, la profesora se dirigió a la sala del director.
Los alumnos comentaban lo ocurrido algunos decían que se trataba de una estúpida broma que alguien les había querido gastar, otros decían que se trataba de un fantasma pidiendo ayuda por algún motivo y ciertamente sus suposiciones eran las que más se acercaban a la realidad, otros opinaban que se trataba de un espíritu maligno que tenía pensado acabar con todos.

-Creéis… ¿que se trata de Naruto?- la voz de la pelirrosa sonaba asustada o más bien preocupada.
Se miraron entre ellos ¿Qué otra cosa podría ser si no? La única explicación lógica es que fuera él, pidiendo ayuda por su amiga y eso les demostraba cada vez más que ella no estaba loca, o de lo contrarío lo estaban todos los alumnos de esa clase que habían podido ver lo sucedido.

La directora fue informada de lo sucedido y se encamino de inmediato al aula, al llegar examino la pizarra, era cierto que aquello estaba escrito allí tal y como había dicho la profesora, pero aun así no se descartaba la posibilidad de que algún alumno en un intento de gastar una broma, o quizás los propios amigos de la joven intentando ayudarla, fueran los causantes de eso.

-Le aseguro Tsunade-sama, que esas pintadas no fueron hechas por ningún alumno, yo misma vi como se escribían solas en la pizarra- en su cara se reflejaba el miedo y esto hacía ver que no mentía.

Por supuesto la directora no podía olvidar el hecho de que realmente Naruto Uzumaki existió y era algo extraño que una joven que nunca escuchó hablar de él fuera capaz de verle, es decir, si quizás nadie supiera de la existencia del joven, si quizás el no hubiera vivido en algún momento, la posibilidad de que Hinata estuviera loca sería lo más lógico de pensar, pero… no era así, aunque casi nadie supiera ya de ese caso, Naruto estuvo vivo una vez, y resultaba extraño pensar que ella coincidiera en el nombre apellido y apariencia del chico al imaginársela, por lo que…

-Es posible que Hinata no estuviese loca- suspiro mirando la pizarra. “Es posible” no, no era posible era seguro, y desde un primer momento lo supó, pero no hizo nada por evitar lo ocurrido y ya era hora de que hiciera algo, no podía permitir que la cosa empeorase Debía ayudar a Hinata a salir de ese lugar. Y si era necesario iría esa misma tarde para hablar sobre ello al sanatorio mental.

-¿Qué debemos hacer?- preguntó la profesora de música.

-De momento intentad mantener la calma, que los alumnos no le cuenten lo que han visto a nadie, yo me ocupare del resto- Tras esas palabras salió del aula en el que se encontraba y se dirigió a su despacho.

-Espero que de este modo puedan sacar a Hinata-chan de ese lugar- pensó Naruto mientras se marchaba de ese lugar.

continuara...
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espro k os halla gustado la hice un poco corriendo por tal d k no m cerraran el fics la proxima conty estara aun mejor gomen de nuevo
bye! cuidense ;)

 

Re: Un amor difícil de encontrar (Naruhina)

Wenaaaas gracias por los comentarios ^^ me alegro de que os guste, y no te preocupes Fryda ya vi k solo era una broma así que no te odio es solo k ese día me pillasteis de MUY mal humor estaba destrozada por un monton de cosas y me sentó fatal pero no os guardo rencor sin más k decir el capi
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-Espero que de este modo puedan sacar a Hinata-chan de ese lugar- pensó Naruto mientras se marchaba de ese lugar.

Capítulo 15
Las clases terminaron de un modo tranquilo, los profesores ya le habían informado a los alumnos que no debian preocuparse por lo sucedido y que tanpoco se lo debían contar a nadie, estos sin entender aun muy bien que es lo que ocurría solo pudieron obedecer las ordenes de sus maestros. Aunque no todos las cumplieron, lógicamente los amigos de la chica no podían quedarse de brazos cruzados tra haber visto eso, por lo que se lo contaron todo a sus compañeros de la otra clase.

Mientras tanto en un lugar más apartado de la ciudad…

Un doctor se encontraba observando a la joven de cabellos azules que se encontraba tumbada en la cama sin apenas fuerzas para nada, como ya comente anteriormente, no quería comer, ni nada, a pesar de que la obligaban y hacían de todo para que comiera ella se resistía y es que, simplemente, no tenía ganas de seguir viviendo, ya no podía ver a sus amigos, no podía ver a su familia, no podía salir de ese maldito lugar en el que no tenía a nadie con quien poder hablar, estaba rodeada de gente, pero la gran mayoría tenían un estado mental pésimo, estaba sola, sin nadie, quería salir de allí o morir, pero no soportaba estar allí encerrada, la última visita que tuvo fue de su padre y desde entonces no había vuelto a ver a nadie y no solo eso, es que encima, continuaba sin saber como llegó allí, como llego a ese maldito infierno del que no tenía escapatoria.

Ren se acerco al doctor para hablar con él y preguntarle sobre la salud de la joven, este solo se quedo pensativo mientras terminaba de observar el estado de la joven que apenas podía moverse, se alejo de ella y le hizo un gesto a Ren para que le acompañase fuera de la sala.

-¿Cuánto lleva sin comer?- preguntó sin más mientras miraba a los ojos del psiquiatra, este se quedo pensativo, ya hacía bastante tiempo que la peliazul no pegaba bocado por más que lo intentaban.

-Dos semanas y poco más- el doctor lo miro sorprendido ¿Cómo habían podido dejar que una joven con esa edad que aun esta en desarrollo no tomase nada?

-Es una imprudencia lo que habéis hecho, es normal que se encuentre en ese estado si no come, deberíamos llevarla a observación y dejarla ingresada si no come nada esta claro lo que pasara- le miró seriamente a los ojos para después desviar la vista hacia la joven que yacía en la cama. Ren solamente asintió y también desvió la vista para ver a la joven.

Poco tiempo después la ambulancia llegó para trasladar a Hinata al hospital, cuando la joven abrió los ojos se encontró en una habitación de paredes completamente blancas y techo de color grisáceo, había una pequeña televisión situada sobre un soporte que estaba pegado a la pared para que esta quedara elevada. A la izquierda de la habitación había un gran ventanal que daba a la calle directamente sus cortinas eran también de un color blanquecino.

Una vez analizó la habitación se miró uno de sus brazos, para ser exactos, el derecho, en él llevaba inyectado un suero mientras que en el otro brazo también llevaba inyectado algo que en ese momento no supo exactamente que era, pero al parecer se trataba de los nutrientes necesarios que necesitaba en esos momentos su cuerpo.

¿Qué hacía ella allí? Esa era la pregunta que pasó de forma automática por su mente, ya no tenías ganas de seguir viviendo aquella pesadilla ¿Por qué no la podían dejar morir simplemente? que era lo único que deseaba en ese momento, ¿Por qué tenían que seguir insistiendo?

En otro lugar se podía ver a una mujer de cabellos rubios recogidos en dos coletas que se encontraba frente a una enorme puerta de hierro, si efectivamente, se encontraba justo delante del sanatorio mental en el que hacía un tiempo habían ingresado a una de sus alumnas.

Llamó al timbre de la puerta y un hombre de aparentemente unos sesenta años le abrió la puerta, tenía el pelo muy corto y de color blanquecino, unas arrugas muy pronunciadas en su rostro y vestía con un uniforme de conserje de color girsaseo.

-¿Qué desea?- le preguntó amablemente el hombre mientras volvía a cerrar la puerta.

-Quería ver a la señorita Hinata Hyuuga.

-Sígame, le llevare a la sala de visitas- ambos pusieron rumbo al interior del edificio pasando por ese enorme patio en el que Hinata estuvo por primera vez.

Una vez llegaron el conserje dejo a Tsunade sentada en una habitación que lo único que tenía era una pequeña mesa de color café y cuatro sillas y arriba cerca del techo una pequeña ventana que permitía la entrada de luz y aire fresco.

Mientras Tsunade estaba entretenida observando la simpleza de aquella habitación la puerta se abrió dejando ver a Ren en ella que entró y tomó asiento en una de las sillas frente a Tsunade.

-Debo decirle algo, la señorita Hyuuga en estos momentos esta ingresada en hospital- hizo una pausa para observar la reacción de la mujer que tenía delante la cual solo permaneció con una mirada seria y penetrante con la que le indicaba que siguiera –Al tiempo de ser ingresada dejo de comer… no le dimos mucha importancia, pero por lo visto es serio.

Tsunade trató de contenerse la rabia, pero no pudo, se puso en pie de un bote y le dio un puñetazo a la mesa partiéndola por la mitad.

-¡¿Cómo no se le va a dar importancia a algo como eso?!- tuvo que reunir toda su fuerza de voluntad para no hacer con aquel hombre lo mismo que le había hecho a la mesa.

-Pues, pensamos que después de todo, algo si comía- Tsunade no cabía en si de su enojo, por muchas excusas que le diera de poco iban a servir.


Nos volvemos a situar en la habitación del hospital donde la joven Hyuuga miraba con tristeza todo esos cachorros que tenía enchufados a sí misma como si de una máquina se tratase.

Una pequeñas lágrimas surgieron de sus blancos ojos, realmente ya no sabía que era verdad y que mentira, quizás, tal y como decían, Naruto tan solo era producto de su imaginación y eso le hacía sentir aún peor.

Llevó su mano izquierda a la derecha y agarró con fuerza ese cable que la unía al suero, en lo único que pensaba era en quitarse todos esos aparatos y marcharse lejos a un lugar donde pudiera estar tranquila hasta desfallecer. Pero justo antes de dar el tirón definitivo una mano fría la agarró con fuerza impidiéndoselo y un escalofrío recorrió todo su cuerpo.

Se quedó mirando casi petrificada aquella mano y levantó la vista lentamente para ver de quien era encontrándose con el rostro de Naruto que la miraba seriamente.

-No lo hagas- le dijo mientras se sentaba en el borde de la cama y la acercaba a él para abrazarla y tratar de calmar ese llanto tan repentino que se le había producido a la pobre. –Tranquila, ya a pasado todo- le susurró al oído aun abrazándola –no dejare que te pase nada.

continuara...
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espero k os halla gustado y perdón por la tardanza es k me puse mala y no la pude acabar :(

bye! cuidense ;)

 

Re: Un amor difícil de encontrar (Naruhina)

Hola a todos, antes que nada pido disculpas por el retraso, pero es que entre una semana que estuve mala y la otra que la tuve llena de exámenes no tenía tiempo de subir la conty, además me quede sin inspiración y me costo mucho continuarla :s pero les estoy muy agradecida a vuestros comentarios que siempre me animan a seguir escribiendo, espero que les guste la conty sin más que decir el capi...
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Se quedó mirando casi petrificada aquella mano y levantó la vista lentamente para ver de quien era encontrándose con el rostro de Naruto que la miraba seriamente.

-No lo hagas- le dijo mientras se sentaba en el borde de la cama y la acercaba a él para abrazarla y tratar de calmar ese llanto tan repentino que se le había producido a la pobre. –Tranquila, ya a pasado todo- le susurró al oído aun abrazándola –no dejare que te pase nada.

Capitulo 16

Al fin, después de tanto tiempo y de toda esa pesadilla podía volver a ver el rostro de aquél joven que tanto había echado de menos. Se sintió aliviada de ver que no estaba loca y que realmente Naruto Uzumaki existía, ya que, aquella sensación que sentía al estar tan cerca de él no podía ser obra de su mente, pero una cosa si le había quedado clara y era que realmente estaba muerto, y lo que más lo demostraba era la palidez de su piel y el frío que desprendía. ¿Cómo es que nunca se había dado cuenta de eso? Seguramente, por que al estar con él no había nada que le importase.

Le daba igual que estuviera muerto, de hecho le hubiera dado igual que fuese un zombi, un vampiro, o un extraterrestre. Ahora se daba cuenta más que nunca de lo mucho que le quería y que por nada del mundo le gustaría perderle de nuevo.

El silenció se rompió cuando Naruto se separo de ella para mirarla a los ojos fijamente y comenzar a hablar.

-Hinata, no vuelvas a hacer locuras como esa, debes recuperarte lo antes posible- la joven asintió ante las palabras del chico, el cuál continuó hablando –He dejado un mensaje en clase, por lo que la directora debe de estar haciendo todo lo posible por sacarte de ese lugar.

-Gracias, Naruto-kun- La puerta de la habitación se abrió de golpe dejando ver a la directora del instituto la cuál tenía una expresión que no se sabía muy bien si era una furia, preocupación o alivio.

Furia, lógicamente por el hecho de que no se hubieran encargado bien de la joven Hyuuga y hubiera acabado en ese estado, preocupación por la salud y el bienestar de la ya mencionada y alivio de ver que aunque fuera un poco, ya se encontraba mejor.

Se adentró rápidamente en la habitación y se acercó a la cama donde se encontraba Hinata. Naruto se levantó y se quedo de pie en una esquina de la habitación observando lo que ocurría.

-¿Cómo te encuentras?- le preguntó Tsunade, intentando no parecer alarmada, pero cualquier persona que la hubiese visto entrar a la habitación o incluso que la hubiera visto correr por los pasillos como una loca para encontrar la habitación podía imaginar perfectamente su estado de ánimo.

-Estoy algo cansada- un pinchazo repentino le llegó a la cabeza a causa del cansancio y de la debilidad que tenía y no pudo evitar volver a echarse en la cama cuando comprobó que la habitación le empezaba a dar vueltas.

-Debes descansar, y no te preocupes- la arropó como suele hacer una madre al acostar a su hija a dormir y continuó –Te vamos a sacar del psiquiátrico, lo hemos hablado y aunque a costado te dejan volver a casa- Hinata asintió y sin poder evitarlo se quedo profundamente dormida.

Cuando volvió a abrir los ojos apenas entraba claridad por la ventana debían de ser cerca de las nueve o las diez de la noche y frente a ella se encontraban sus mejores amigos que la observaban preocupados.

Cuando entraron a la habitación hacía ya más de dos horas y vieron el rostro tan pálido de la joven y aquel estado tan lamentable que tenía se les oprimió el pecho. Les dolía ver así a una de sus mejores amigas.

Ninguno dijo nada y esperaron a que la joven fuese la primera en hablar, pues no querían atosigarla ni molestarla.

-Cuanto tiempo…- aunque apenas tenía fuerzas para hablar intento parecer que ya estaba mejor y disimulo una sonrisa. –Os echaba de menos.

-Nosotros a ti también- le sonrieron sus amigos, aunque Hinata se había esforzado se dieron cuenta perfectamente de cómo se encontraba.

-Espero que vuelvas pronto, tendré que dejarte mis apuntes para que te pongas al día y no tengas que repetir curso- dijo Sakura mientras abrazaba a la joven y contenía las ganas de llorar.

-Gracias Sakura-chan, Gracias a todos por estar aquí.

-Ya es tarde, será mejor que no vayamos- comentó Kiba –mejórate Hinata.

Los jóvenes fueron abandonando la habitación poco a poco y le dejaron a Hinata unos cuantos regalos sobre mesita que había al lado de la cama. Le habían dado un osito de peluche, un ramo de flores, etc.

Mientras tanto, el joven rubio seguía allí de pie observándola, sin querer apartarse de su lado ni un solo momento más, sin querer dejarla sola de nuevo, quería protegerla y estar a su lado a toda costa y el hecho de tenerle tan cerca era una de las cosas que animaban a Hinata a continuar luchando por salir adelante.

Continuara....
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Espero no tardar mucho en subir la próxima conty, el viernes me voy de viaje durante casi una semana así que lo más seguro es que no la tenga hasta el sábado siguiente, pero intentare subirla pronto, de nuevo gracias por comentar, espero que os halla gustado y perdon si es algo corta pero ya explique los problemillas que tuve :vergüenza:
bye! cuidense ;)

 

Re: Un amor difícil de encontrar (Naruhina)

Wenas ^^ de nuevo pido perdón por el retraso pero es k siempre me surgen cosas que hacer y entre eso y k soy vaga pues... :( por eso kería agradecerles mucísimo a todos los que leen mi fic por k son ellos los que me animan a continuar. No tenía mucha inspiración así que este capítulo es algo corto.

Es que los sabaku no, no estan en la historia al menos que yo recuerde xD (hay k ver es mi historia y no me aclaro xDDD) pero saldrán un poco más adelante.
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Mientras tanto, el joven rubio seguía allí de pie observándola, sin querer apartarse de su lado ni un solo momento más, sin querer dejarla sola de nuevo, quería protegerla y estar a su lado a toda costa y el hecho de tenerle tan cerca era una de las cosas que animaban a Hinata a continuar luchando por salir adelante.

capítulo 17
El tiempo fue pasando, poco a poco Hinata iba recuperándose, sus amigos iban siempre a visitarla al hospital, no había día en el que no fueran y cuando la joven fue sintiéndose mejor comenzaron a llevarle los deberes para que pudiera ir poniéndose al día de las clases, pero eso no era algo fácil teniendo en cuenta todo el tiempo que había perdido de clases.

Naruto estuvo todo el tiempo a su lado, sin separarse de ella ni un instante, la mayoría de las veces le contaba historias o anécdotas que tan solo alguien como él sabría contar y siempre conseguía hacerla reír incluso en los momentos en los que peor se encontraba, no había mejor medicina para la joven Hyuuga que la compañía de aquel chico.

Al fin, después de un mes ingresada en el hospital había llegado el día tan esperado para todos. Hinata había sido dada de alta y por fin podría volver a llevar una vida “normal” sabía que le iba a costar demasiado recuperar las clases y volver a la rutina diaria. Tenía ganas de llegar a su casa, de poder sentir la suave brisa meciendo sus cabellos.

En el momento en que sintió los suaves rayos de sol rosar su pálida piel recordó una sensación que había olvidado después de pasar tanto tiempo encerrada tanto en un lugar como otro. La claridad que hacía esa mañana era increíble, el sol brillaba con fuerza, pero la suave brisa otoñal daba una agradable sensación de frescura.

Respiró hondo sintiendo en sus pulmones penetrar aquel aire puro que la llenaba de calidez, por unos segundos olvido todo lo que había pasado, todo su dolor y su sufrimiento. Dejó su mente soñar mientra observaba como el viento mecía las hojas de los árboles lentamente. Sus amigos sonrieron al ver que la joven parecía estar mucho mejor, se alegraban de poder tenerla de vuelta con ellos y deseaban que todo pudiera ser como antes.

--Gracias por todo— del interior del edificio salió Hiashi, quien se despedía muy agradecido del doctor que se había encargado de cuidar a su hija.

Naruto se acercó a la joven y la contempló en silencio, sabía que estaba mal, que no podía sentir algo así por ella. Ambos eran completamente distintos y nunca tendría ninguna posibilidad de estar con ella como lo hacían las parejas formales. Él estaba muerto e Hinata debía llevar una vida feliz con gente como ella, pero aun así no podía evitar amarla como nunca antes había hecho con nadie.

La joven se giro al notar su presencia detrás de ella y le dedico una amplia sonrisa agradeciéndole todo lo que había hecho por ella.

--Cuando regrese a clases—hizo una ligera pausa –volveremos a desayunar juntos ¿verdad?- él sonrió aunque se notaba en aquella sonrisa que algo le inquietaba.

--De acuerdo— las cosas no debían ser así, debía dejarla rehacer su vida, pero le había prometido que nunca más la abandonaría.

Hiashi hizo un gesto con la mano indicando a Hinata que era la hora de irse, la joven se despidió de sus amigos y se acerco ha su padre para dirigirse por fin después de tanto tiempo hacia su hogar.

continuara...
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de nuevo perdonad que el capítulo sea corto y que no este muy interesante pero fue falta de inspiración :(
espero que aun así les halla gustado y prometo esforzarme mucho más para la continuación
bye! cuidense ;) y de nuevo gracias por leer