"TODO POR TI" (Kag&Inu)

Re: "TODO POR TI" (Kag&Inu)

Hi!!!!! :saludar:
Disculpen la demora pero por fin aqui esta!!!!
Jeje, espero que les guste.
Va dedicada a todos ustedes.

Capitulo XI.
“Lo más importante”

Rápidamente el nombrado se puso detrás de Sango y después de pasarle la mano por el cuello le puso la pistola en la sien..

Naraku: Solo un movimiento y te juro que ya no quedara nada de ella...

........

“Todo termino”... Fue lo primero que pensó Sango al verse aprisionada por los brazos de Naraku... Tenia miedo, pero no le temía a la muerte, si no que tenia miedo de no poder decirle a ese hombre que la miraba con desesperación que lo amaba, cerró los ojos esperando un milagro que jamás llegaría... “Te amo”... Pensó antes que se escuchara un disparo...

Sango – abriendo los ojos y mirando hacia donde llego el disparo -: ¡¡MIROKU!! – no, esto definitivamente no podía estar pasando, él, Miroku estaba en el suelo sujetándose la pierna.. Las lagrimas no tardaron en aparecer en sus ojos, y esto causo mucha satisfacción en el hombre que la sujetaba

Naraku: Te dije que no te movieras... Aunque no lo hiciste – nuevamente comenzó a reír... – Bueno ahora tu... – refiriéndose a Sango -... Y yo daremos un paseo... – empezo a caminar mientras luchaba con Sango, quien hacia todo lo posible por soltarse...

Se alejo junto a ella como pudo y desaparecieron al poco tiempo... Miroku se sentó lentamente y observo el camino que ellos habían tomado... La sangre comenzaba a agruparse en la mano con la que este trataba inútilmente de cubrirse la herida...

Miroku: Sango... - trato de ponerse de pie apoyándose en la pared – Debo ir a ayudarte... – con solo dar un paso perdió el equilibrio, la velocidad con la que estaba perdiendo sangre era impresionante... Al momento de caer unas manos lo sostuvieron y antes de perder el sentido pudo reconocer la voz de su amigo... de Inuyasha

.....

Había caminado bastante y ya se encontraba cerca de su lugar de destino, pero la chica que traía con él no le hacia las cosas nada fáciles, ya que trataba de huir en todo momento...

Naraku – forcejeando con Sango -: ¡Ya quédate tranquila!

En un descuido del hombre Sango le mordió la mano con la que la sujetaba y comenzó a correr a toda velocidad tratando de escapar...
Tras recuperarse del mordisco no se demoro mucho en alcanzarla y sin ninguna piedad la golpeo en la cabeza con el mango del arma...

Naraku: Casi te me escapas... – la tomó con facilidad y la cargo en su hombro hasta llegar a la casa abandonada – Es mejor que te esconda aquí... – sin decir mas y con un poco deprisa la oculto entre los matorrales y entro a su “hogar”...

Cuando se halló dentro escucho algunas voces provenientes de la sala... Tenia que pensar algo rápido ya que no quería que ninguno de ellos estuviera en ese lugar cuando llegara su invitado. No lo pensó dos veces y con paso seguro y la cara en alto llego al origen de las voces...

Naraku: ¿Aun no encuentran a Inuyasha?...

Todos los presentes lo miraron, pero uno de los miembros sonrió para sus adentros.. Sabia que Naraku anhelaba eliminar a Inuyasha con sus propias manos, pero gracias a su pequeña intervención eso seria algo difícil... Que equivocada estaba...

Ayame – con tono de fastidio -: No, no lo pudimos encontrar...

Naraku – sonriendo -: Dejaremos esto para otro momento... Hay un cargamento que deben ir a buscar ahora mismo...

Kagura: ¿Ya no quieres que encontremos a Inuyasha?

El hombre de mirada fría y sin sentimientos se acerco hasta la mujer que acababa de hablar y tomándola por el mentón dijo..

Naraku: ¿Estas cuestionando mis ordenes?

Kagura – asustada -: Claro que no... – Naraku la soltó con violencia y ella se acaricio la barbilla...

Naraku: ¡¡Váyanse ahora!!

Obedecieron inmediatamente y en menos de cinco minutos ya todos se habían marchado, todos excepto una persona...

Kikio – bajando las escaleras -: Veo que ya volviste... Tus gritos se escuchan por todas partes..

Naraku – volteándose para mirarla -: Veo que ya estas mas recuperada... Quiero divertirme un poco así que ve a la habitación – lo ultimo lo dijo con tono burlon.

Después de mirarlo con desprecio, subió las escaleras con resignación, después de todo ella no podía hacer nada contra él estaba completamente en sus manos...
Cuando Kikio desapareció escaleras arriba, volvió a donde había dejado a Sango, la cargo con cuidado para que esta no despertara y para que nadie se diera cuenta de lo que estaba haciendo... La llevo hasta una habitación del primer piso, después de atarla le tapo la boca con cinta adhesiva y se marcho con Kikio...

........

Trataba de abrir los ojos, pero esta tarea estaba resultando más difícil de lo que pensó... La cabeza le dolía demasiado y una terrible punzada lo ataco en la zona de la pierna derecha... Este dolor tan repentino hizo que se despertara de golpe y tratara de sentarse pero unas manos lo detuvieron. Miro con desconcierto a la chica que estaba con él y ella solamente le sonrió... La recordaba, ella era la mujer que ayudo a Inuyasha...

Kagome – recostándolo -: Es mejor que descanses un poco mas...

Miroku: ¿Que paso? ¿Por que estas aquí?

Kagome: Tranquilo... Vine con Inuyasha...

Miroku: ¿Inuyasha?

La chica de dulce sonrisa estaba apunto de contestar pero una voz que venia desde la puerta la detuvo. Ambos voltearon para mirar al dueño de esa voz...

Inuyasha: Ahora explícame que paso...

Miroku : Naraku... – la mirada ambarina reflejo un odio profundo y Kagome solo bajo la cabeza – Ese maldito se llevo a Sango... – Inuyasha cambio su mirada a una de sorpresa y rápidamente se acerco hasta el borde de la cama donde descansaba Miroku...

Inuyasha – tomándolo de la ropa -: ¿Que estas diciendo? - Miroku evadió la mirada acusatoria del chico mientras Kagome trataba inútilmente de calmarlo...

Kagome: Cálmate Inuyasha... – pero él no la escucho...

Inuyasha : ¿Y donde demonios estabas tu?.... Seguramente la dejaste sola para irte con una de tus amiguitas...

No sabia que decir, él tenia razón y no podía negarlo, solo por uno de sus descuidos Naraku había tenido la oportunidad de llevarse a Sango... Que arrepentido estaba...

Miroku: Lo siento...

Tras lo dicho por Miroku, Inuyasha lo soltó lentamente y luego se dirigió hasta la salida, pero una voz lo detuvo...

Kagome: ¿A donde vas?

Inuyasha: Iré a buscar a Sango...

Kagome: Pero...

Inuyasha – interrumpiéndola -: Quédate aquí hasta que yo vuelva... – Kagome solo asintió con resignación y segundos mas tarde Inuyasha salió de la casa donde vivían Sango y Miroku...

.......

Corría a todo lo que podía... A decir verdad Sango era una persona muy importante para él y por nada del mundo estaba dispuesto a perderla, no permitiría que Naraku le hiciera daño... Si quería lastimarla, primero tendría que pasar sobre su cadáver... Apresuro el paso y sintió un pequeño malestar en la herida que aun no sanaba por completo, pero prefirió ignorarlo para darse prisa...
No podía quitar de su cabeza el porque habían llegado junto a Miroku... Ahora sabia que tenia otra deuda con Kagome...

----FLASH BACK----

Después de que Sango se había ido, ellos se encontraban comiendo, mas bien Inuyasha estaba comiendo y Kagome mantenía su mirada perdida en el plato mientras jugaba con el tenedor...

Inuyasha: ¿Que te sucede?

Ante su pregunta evidentemente esperaba una respuesta pero esta nunca llegó por lo que miro a la chica frente a él y se dio cuenta que ella ni siquiera notaba que le estaba hablando... Se sintió por un momento ignorado y molesto pero esa sensación cambio cuando se percato del rostro de preocupación que tenia Kagome, ¿Acaso ella estaba molesta con él?... Porque era tan importante para él lo que ella pensara...

Inuyasha – su tono era extrañamente tierno -: Kagome... ¿Qué pasa?

La nombrada lo miro directamente a los ojos y trato inútilmente de ocultar lo que sentía tras una falsa sonrisa...

Kagome: No pasa nada... – se levantó y se llevo con ella el plato para luego dejarlo en el lavadero. Mientras lavaba los platos le dijo al chico que aun comía – Inuyasha... – él la miró mientras ella seguía hablando – ¿Tu quieres mucho a Sango?

Sin lugar a dudas esa pregunta lo había sorprendido y en ese momento solo miro a Kagome sin decir nada... Esta volteo al terminar su labor y lo miro...

Kagome: Lo siento... No quise incomodarte... – se dirigió a la puerta cuando paro al escuchar la respuesta del chico...

Inuyasha: Ella... Ella es una persona muy importante para mí... – antes no lo hubiera pensado y habría respondido que Sango era la mujer más importante para él, pero ahora... No pudo, cuando miro a Kagome, cuando vio sus ojos, no pudo decir eso... Es que ahora había alguien mas importante... Que tonto era, él sabia perfectamente la respuesta, pero no se atrevería a admitirlo...

Kagome – dudando -: ¿Recuerdas el día que llegaste aquí herido?

Inuyasha: No mucho... ¿Pero porque preguntas eso? – realmente las preguntas de la chica lo estaban confundiendo ya que para él la una con la otra no tenían conexión...

Kagome: Ese día... Tenia un terrible mal presentimiento... Yo preferí ignorar esa sensación, pero cuando te vi llegar en ese estado supe lo que estaba diciéndome mi corazón... – esto ultimo lo dijo llevando la mano hasta la altura de su pecho.

Inuyasha: Sigo sin entenderte...

Kagome: Cuando Sango se fue... Sentí la misma sensación... Creo que algo malo le va a pasar... – bajo la mirada para no enfrentar los ojos de Inuyasha. A decir verdad ella había decidido no decirle nada al chico pero esa sensación se le estaba haciendo insostenible, hasta el punto de no dejar de pensar en lo que podría pasarle a Sango...

Para cuando volvió a levantar la vista vio como Inuyasha pasaba a su lado y se dirigía sin decir nada a la puerta de entrada... Antes que él pudiera salir lo llamo con una voz tímida y algo quebrada...

Kagome: Inuyasha... ¿A donde vas?

El chico paro ante el llamado y sin voltear le respondió...

Inuyasha: ¿Pues a donde más?... Si es cierto lo que dices... Debo buscarla...

Kagome – alcanzándolo y tocando su hombre -: Entonces voy contigo...

Y sin decir mas ambos se pusieron en camino hacia la casa de Sango...

----FIN FLASH BACK----

Sus pensamientos se vieron interrumpidos ya que a lo lejos pudo divisar el lugar que estaba buscando. Se acerco con cautela y como un ladrón profesional abrió la puerta sin hacer ruido alguno... Cuando entro paso rápidamente por la cocina y cuando confirmo que no había nadie en el piso de abajo se apresuro a buscar en las habitaciones... Cuando estaba a punto de abrir una puerta un ruido lo distrajo. No era que de verdad le importara pero esos ruiditos lo ponían de mal humor, no sabia como podía haber sentido “Amor” por la mujer que ahora se revolcaba con otro...
Entro y ante sus ojos vio a su prima, ella estaba amarrada y apoyada en la pared, se acerco lo mas rápido que pudo y se arrodillo frente a ella, ¿Porque el maldito de Naraku era capas de tanto solo por una ambición? Sango no tenía nada que ver en el asunto y había resultado mas que involucrada solo por ayudarlo a él... Le acarició el rostro y fue cuando ella despertó, lo miro y una pequeña lagrima corrió por su mejilla... Que feliz estaba de ver a Inuyasha... Con sumo cuidado el joven le quito la cinta y las amarras...

Inuyasha: ¿Estas bien?

Sango: Si... Muchas gracias...

Sonrió y luego tomo a Sango en sus brazos... Cuando volteo para irse se detuvo en seco... El causante de todo estaba impidiendo el paso...

Naraku – con tono burlón -: Vaya, vaya... Miren lo que trajo la marea... – y se hecho a reír...

Inuyasha: ¡Quítate de mi camino! – trato de sonar calmado, ya que no podía ponerse a pelar con su prima en brazos

Naraku: ¡A mi nadie me da ordenes! – el comentario de Inuyasha había logrado enfurecerlo y no permitiría que un insecto lo pisoteara.. – Yo pensé que tardarías mas en llegar... – sonrió con arrogancia – Y por eso me estaba divirtiendo un poco...

Inuyasha estaba ignorándolo, parecía estar mas interesado en lo que estaba detrás Naraku, esto no paso desapercibido para el hombre de mirada fría y volteo para ver que era lo que mantenía entretenido a su eterno rival, cual fue su sorpresa al encontrarse con una muchacha que lo apuntaba casi a quema ropa, instintivamente retrocedió, pero este movimiento asusto a la chica y sin pensarlo le disparo arrojándolo inmediatamente al suelo...

Inuyasha: Kagome... ¿Que demonios haces aquí? – su tono debatía entre enojado y feliz...

La chica estaba a punto de responder cuando alguien se arrojo sobre ella y comenzaron a pelear en el suelo. Inuyasha dejo con cuidado a Sango en el suelo y se apresuro a socorrer a Kagome ya que se notaba que si seguía peleando con Kikio tendría todas las de perder... Tomó a Kikio por la cintura y la arrojo hacia atrás sin percatarse que al hacer esto la chica se golpearía contra la pared, cuando volteo a mirarla ella ya estaba inconsciente...

Naraku – desde el piso -: ¡¡Maldita mocosa!! ¡¡Juro que me las pagaras!! – siguió retorciéndose de dolor...

Inuyasha – ayudando a Kagome a ponerse de pie -: ¿Estas bien? – la chica asintió con la cabeza por lo que él fue hasta Sango y la tomo nuevamente en sus brazos para largarse de ahí... – ¡¡Vamonos!! – se fue junto a Kagome y Sango mientras escuchaban a lo lejos los gritos de Naraku...

Era extraño, Inuyasha pensaba que tendría que pasar por sobre los demás miembros del grupo, pero ninguno de ellos estaba en la casa ¿Qué estaba pasando?.. Mientras se alejaban de ese lugar observo a Kagome de reojo y una inevitable pregunta paso por su cabeza... ¿Qué haría sin ti?...

CONTINUARA...

Sinceramente espero que les haya gustado y que nos perdonen por la demora jeje.

Besitos y saludos.
Los quiere su amiga Jill. :chipote: