One-shot de Naruto - Todo por las galletas.

Hace decenas de años que no publico nada, así que les traigo este pequeño escrito para que lo lean y espero que les guste.

Autora: LacrymosA/Lowenthal
Título: Todo por las galletas.
Pareja: Naruto & Sakura.
Género: ¿Comedia? Infancia.
Tipo: One-shot.
Sumario: <<Sakura, por su parte, quedó encantada de la forma en que Naruto la protegió, ya no lo trataría tan mal… por lo menos, no tan seguido.>>
Dedicado a: A todos los que lean <3

Todo por las galletas​

Sus orbes celestes miraron hacia ambos lados de la cocina cerciorándose de que estuviera vacía y que cierto hermano mayor de Sasuke no estuviera por los alrededores. Al comprobar que el sitio estaba completamente desolado, el pequeño le hizo señales a otra niña para que le acompañara en la misión que estaban a punto de emprender.

Ambos se acercaron silenciosamente al refrigerador y alzaron las miradas encontrándose con el objetivo por el cual estaban arriesgando sus diminutas vidas.

—Naruto, espero que esto funcione... Te mataré si me metes en líos —amenazó la pequeña, mirando con molestia al recién nombrado. Éste temió por su vida al escuchar esas palabras; preferiría morir en manos del Uchiha mayor.

—Tra-tranquila, Sakura-chan, yo te protegeré ¡de veras! —exclamó el jovencito en voz alta, tratando de apaciguar la ira de su amiga. Pero lo único que consiguió fue un golpe de parte de ella por haber gritado.

Después de esa temible advertencia, Naruto estaba listo para comenzar. El niño rubio tomó una silla que se encontraba cerca de la mesa y la arrastró con todas sus fuerzas hasta llevarla cerca del refrigerador. Una vez ahí, era el turno de Sakura para continuar. La de cabellos rosados, al ser la más alta de los dos, se subió a la silla y estiró su delicado brazo en un intento inútil de llegar a su apreciado tesoro.

—¡No alcanzo! ¡Tráeme otra silla! —susurró Sakura con fuerza.

—Pero, podrías caerte… —titubeó Naruto moviendo sus manos con desesperación.

—¡No seas baka y tráeme otra! —masculló con voz amenazante.

El pequeño Uzumaki no tuvo otra opción que ir a buscar otra silla y llevársela a su encolerizada amiga. Entonces la de orbe jades se bajó y con ayuda del de ojos celestes colocaron la silla sobre la otra para después levantar a Sakura y subirla nuevamente.

Y la acción se volvió a repetir... Ella estiró su mano y trató otra vez de llegar a su meta; incluso se paró de puntillas para poder lograrlo. Mientras él la observaba desde abajo y rezaba para que pudiera conseguirlo.

Sin embargo, para su mala suerte, Naruto sintió que la puerta principal se abrió: sudó frío al saber que podría ser Itachi que volvía de hacer los mandados.

—¡Itachi-san está en la casa! —advirtió el niño rubio con mucho nerviosismo.

—Espera, ya casi lo alcanzo… —musitó la chica tocando con sus dedos el frasco sobre el refrigerador. Pero justo en ese momento, justo cuando ella tomó el objeto con su mano, perdió el equilibrio cayendo en dirección al suelo.

Inmediatamente la reacción de Naruto fue alcanzarla, convirtiéndose él mismo en una almohada se tiró al suelo y recibió el impacto del cuerpo de Sakura sobre el suyo.

—Naruto, ¿estás bien? —preguntó la niña con preocupación, mientras se bajaba de él.

—Sakura-chan, huye, huye con el tesoro.

—Baka, no pienso…

—¡Huye, Sakura-chan! Por el bien de ambos, yo estaré bien, dattebayo —la interrumpió esbozando una sonrisa tranquilizadora.

Ella afirmó desconfiada tomando el frasco entre sus brazos y corrió con prisa hacia su habitación.

Naruto, por su parte, quedó tendido en el suelo hasta que Itachi apareció en la escena. Algo sorprendido, el de cabellera larga cuestionó al infante sobre lo ocurrido mientras él estaba ausente, recibiendo como respuesta que estaba jugando a los castillos con las sillas y que rápidamente se aburrió jugando solo ya que Sakura se encontraba en su cuarto y no quería jugar con él.

—¿Seguro? —interrogó Itachi algo desconfiado.

—Claro, ¿qué más podría haber pasado, dattebayo? —contestó con una sonrisa juguetona y con las manos detrás de la nuca.

El Uchiha quedó conforme con la respuesta, pero algo le decía que no estaba del todo convencido. Pero no le tomó mucha importancia y se alejó del chico.

En cuanto el mayor abandonó la escena Naruto cambió su expresión juguetona para dar lugar al dolor; su brazo derecho le dolía mucho gracias al golpe de recibir a Sakura sobre su cuerpo. Aún así, esa sensación se fue al recordar las sabrosas galletitas que habían conseguido, así que subió las escaleras hacia el cuarto de Sakura para poder comerlas juntos.

Sakura, por su parte, quedó encantada de la forma en que Naruto la protegió, ya no lo trataría tan mal… por lo menos, no tan seguido.

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Agradecimientos a Nichole y Chaos Lady por el beteo :3​

Espero que les haya gustado <3​