Todo empezó con una perdida [Sessho&Rin] [Kagu&Inu]

Hola este es mi primer fic espero les agrade e ir aprendiendo mas de sus comentarios sugerencias o criticas, todo es muy útil para mi ya que soy novataxD.
Sin mas les dejo mi fic:).

Capitulo 1

En la ciudad de Japón se encontraban una joven llorando amargamente.
- Tía Kaede no puede ser lo que estas diciendo nuestros padres no pueden estar muertos
- En eso entró su hermana menor a la habitación de la mayor – hermana que te pasa porque estas llorando así – dijo sorprendida al verla así.
- Hermana es… que… nues..tros padres… – dijo entre sollozos.
- Nuestros padres ¿QUÉ? – preguntó asustada al verla en el estado que estaba.
- Nuestros padres… murieron en un accidente cuando regresaban de ir con la tía Kaede - dijo aún entre sollozos.
- ¡No puede ser!, pero hace poco hablamos con ellos – dijo llorando amargamente.

Entonces se abrazaron ambas hermanas y lloraron por un rato mas tratando de asimilar esta terrible noticia, no podían creer lo que pasaba, hace poco de tres horas habían hablado con sus padres antes de que éstos regresaran a casa, ya que, habían ido a visitar a la tía Kaede, para la mala suerte de los padres de éstas dos jóvenes tuvieron que pasar por la carretera de regreso a Tokio justo cuando a un camión se le desataron una gran carga de troncos gruesos de madera que iban supuestamente bien amarrados con una soga, los cuales al soltarse aplastaron el carro donde iban los padres de estas dos chicas dejándolo totalmente destrozado y dejando a los ocupantes de éste coche sin vida.

Las chicas se llamaban Kagome y Rin Higurashi, ambas estaban estudiando para chef con especialidad en repostería, ya que amaban preparar postres pero con la muerte de sus padres quedaron desamparadas, su único familiar que les quedaba era su tía Kaede la cual ya estaba algo mayor y no podría ayudarles mucho ya que apenas y ella se daba a basto para poder pasar el día a día.

Pasó un mes de lo ocurrido y al darse cuenta Kagome y Rin de lo anterior supieron que tenían que hacer algo, ya que tenían muchas deudas en cima y ellas las tendrían que resolver solas. Estaba pagar la renta, pagar la colegiatura de su escuela de ambas, comprar despensa ya que se había acabado todo, tanto el dinero como la comida y pagar los impuestos del mismo departamento: la luz, el agua, el teléfono, el tele cable (este último decidieron que tendrían que suprimirlo ya que había otras prioridades, aparte que el estudio no les iba a dejar tanto tiempo para poder ver la tele).

Por todo lo último decidieron que ya era hora de reponerse, que ¿Qué iban a decir sus padres si las vieran así dándose por vencidas? Decidieron que tenían que trabajar y que tenían que hacerlo rápido así que sin mas se dispusieron a salir a buscar empleo, el primer día no tuvieron éxito y llegaron a su departamento de noche, en eso a Kagome le pasó algo por la mente.

- Rin, oye y para poder disminuir nuestros gastos de colegiatura porque no sacamos una beca - dijo algo decidida.
- Pues si es perfecto, pero ¿porque no sacar dos? - dijo entusiasmada ya que eso podría ayudar con su situación.
- Eso no se va a poder acuérdate que somos hermanas y que si le dan una beca a una como somos de la misma familia y vivimos juntas es casi imposible que nos den otra -dijo pensativa.
- Tienes razón - dijo algo desanimada.
- Pero bueno por lo menos podemos sacar una, y aparte no contábamos con esto y de una a ninguna, pues una esta bien ¿no?- dijo Kagome tratando de animar a su hermana.
- ¡Tienes razón!... pero es que lo que pasa es que todavía no hemos conseguido ni trabajo – dijo agachando un poco la cabeza.
- Pero si apenas es el primer día no podemos rendirnos el primer día ¿o si? - dijo con algo de entusiasmo.
- ¡Claro que no! - dijo Rin mostrándole una sonrisa a Kagome.
- ¡Así se habla! - dijo la joven impetuosa - pero no hemos hablado de quien la tendrá.
- Es cierto… tu la debería tener porque eres la mayor - dijo mirando a su hermana.
- No te equivocas, pensándolo bien lo mas conveniente es que la tengas tú - dijo seriamente.
- ¿Yo porque? - dijo algo sorprendida.
- Porque a ti te faltan mas años para terminar de estudiar y entonces la beca nos serviría por mas tiempo, pero el problema es que siempre tendrás que sacar buenas calificaciones para mantener la beca - dijo volteando a ver a su hermana.
- No importa yo lo haré - lo dijo Rin pensando muy bien en como estaba la situación.
- Gracias Rin, pero como tendrás que estar concentrada en tus estudios tú solo podrás trabajar los fines de semana -dijo Kagome decidida.
- No te preocupes Kagome yo podré trabajar y estudiar.
- No dije que no pudieras, pero es mejor así, porque podrás mantener la beca mejor y me ayudaras mas con el departamento - dijo viéndolo ya que este estaba un poco sucio porque no había tiempo de asearlo como ellas quisieran.

Consiguieron trabajo al tercer día de meseras, Kagome de medio tiempo y Rin en los fines de semana como ya lo tenían planeado, y a Rin le dieron la beca.

Pasaron dos años…

Al día siguiente sería la graduación de Rin; Kagome ya tenía un año de haberse graduado y dejo de trabajar de medio tiempo y empezó a trabajar de tiempo completo. Para darse abasto y para ahorrar un poco para comprar un local en el que pudieran empezar a realizar su profesión de reposteras y justamente después de ahorrar dos años lo poco que les sobraba ya tenían para rentar un local, solo era cuestión de encontrar el local. Rin tenía 22 años y Kagome 23 años.

Pasó un día y ya era la graduación de Rin, para esta ocasión ella se había puesto un vestido largo color azul turquesa con una abertura en la pierna derecha y unas flores plateadas que tenían un poco de brillo en la pierna izquierda y un poco de escote en la parte de enfrente del vestido el cual no era muy pronunciado junto con unas zapatillas plateadas que hacían juego. Kagome se vistió con un vestido lila que tenía un escote un poco pronunciado en la parte de la espalda y otro no muy pronunciado en la parte delantera junto con unas zapatillas negras.
Kagome le dedicó una sonrisa a su hermana al verla como estaba vestida.

- Rin te ves hermosa, acaso hay alguien a quien quieres impresionar - le dijo juntándole un poco el codo.
- Claro que no, pero que cosas dices - dijo rin un poco apenada - aparte no soy la única tu también te ves muy bien.
- Yo solo me vestí para la ocasión - dijo desmintiendo las indirectas de Rin.
- Lo mejor será que nos vayamos porque ya se nos está haciendo tarde - dijo mirando el reloj.
- Vayamos entonces - dijo Kagome saliendo del departamento con Rin.

Llegaron a la graduación a tiempo, la graduación iba tranquila solo estaba un poco nublado, una compañera de Rin dio unas palabras por la graduación, y por consiguiente empezaron a llamar a las alumnas para entregarles sus papeles, pero entonces empezó a soplar un poco mas el aire, entonces dijeron Rin Higurashi y ésta fue en busca de sus papeles y justo después de un segundo de que se los entregaron sopló una fuerte brisa de viendo haciendo que se le cayera la carpeta que contenía los papeles de Rin.

- ¡No puede ser mis papeles! - dijo algo asustada ya que los papales eran originales.

Y se asustó mas al ver que la carpeta iba directamente a un charco entonces trató de alcanzar la carpeta pero estaba muy lejos de ella para poderla alcanzar antes de que cayera al charco, en eso un joven atrapa la carpeta un poco antes de que ésta cayera al charco. Entonces llegó Rin y vio lo ocurrido.

- Gracias por rescatar mi carpeta de verdad me salvaste la vida - dijo rin con una cara de alivio.
- De nada, no te preocupes, toma - dijo entregándole la carpeta.
- Por cierto, donde están mis modales, son Rin - dijo con una sonrisa.
- Yo soy…

Continuará…

 

Capitulo 2

- Yo soy Kohaku - dijo presentándose.
- Mucho gusto Kohaku.

En eso se oye una voz.

- Rin ¿Dónde estás?- dice Kagome gritando.
- ¡Aquí estoy! - dijo Rin alzando el brazo.
- Y ¿él es? Dijo refiriéndose a Kohaku.
- Ahh, Kagome él es Kohaku, Kohaku ella es Kagome - dijo presentándolos.
- Mucho gusto - dijo kohaku.
- El gusto es mío - dijo Kagome.
- Kagome él fue el que salvo mis papeles antes de que cayeran al charco - dice Rin mirando el charco.
- En ese caso muchas gracias Kohaku - dice Kagome.
- Como le dije a tu hermana no hay nada que agradecer simplemente estaba aquí y de repente vi que una carpeta y que era como las de la graduación iba a caer en un charco y pues solo la agarré.
- ¿Y como sabes que somos hermanas? - dijo Rin sorprendiéndose.
- Pues es que las dos se parecen mucho - dijo Kohaku mirándolas.
- Y pues me imagino que hoy te graduaste, lo digo por como estas vestida y por la carpeta - dijo mirando a Rin.
- Estas en lo correcto hoy me gradué - dijo Rin feliz.
- Pues entonces felicidades - dijo Kohaku acercándose para abrazar a Rin.
Kagome solo observó esto - a mí se me hace que a Kohaku le gusta Rin – pensó Kagome y entonces mostró una ligera sonrisa, lo cual lo notó Rin.
- ¿Por qué sonríes Kagome? - dijo Rin dejando de abrazar a Kohaku y volteando a ver a Kagome.
- No, no es nada - dijo Kagome negando con la cabeza.
- Bueno Kohaku me despido hoy será un día muy pesado para nosotras dos - dijo Rin.
- Sí, entiendo, pero me podrías dar tu número de celular.
- Sí, claro.
- Este es - dijo enseñándole el número cuando lo guardó en el celular de Kohaku.
- ¿Y el tuyo? – dijo Rin dándole su celular.
- Es este - dijo regresándole su celular a Rin.
- OK, ya nos tenemos que ir fue un gusto conocerte dijo Rin.
- El gusto fue mío, estamos en contacto - dijo Kohaku.
- Adiós dijo Kagome moviendo la mano y yéndose con Rin.
Kohaku también movió la mano en señal de despedida.

Kagome y Rin iban caminando en eso Kagome rompió el silencio al acordarse de algo.

- Rin oye te tengo una sorpresa - dijo Kagome con una sonrisa.
- ¿Qué es? - dijo Rin ansiosa.
- Pues ya tenemos dinero para comprar un local solo es cuestión de ver que locales hay disponibles y rentar uno claro según nuestras posibilidades.
- Sí, que bien, ¿y porqué no hoy mismo empezamos a buscar locales? – dijo Rin entusiasmada.
- Es buena idea.
- Entonces que esperamos ¡Empecemos! - dijo Rin totalmente emocionada.
- ¿En este preciso momento? - dijo Kagome con una leve sonrisa volteando a ver a Rin como estaba vestida.
Rin al darse cuenta de cómo estaba vestida se sonrojo un poco.
- Bueno mejor primero vamos a cambiarnos y luego salimos a buscar el local dijo algo avergonzada por haberse llevado por el momento.
- Vamos a cambiarnos entonces - dijo Kagome yéndose con Rin al departamento.

Llegaron al departamento arreglaron un poco el mismo y se cambiaron las dos con unos jeans y una musculosa de color rosa y amarilla, la amarilla era de Rin y la rosa de Kagome y salieron en búsqueda de el local en el que empezarían a realizar su profesión y su sueño.
Después de buscar mucho tiempo y ver varios locales encontraron uno muy bueno para su presupuesto y un poco amplio y tenia un lugar donde podía ir la cocina y tenia un poco de patio trasero donde podrían plantar uno que otro árbol frutal, ya que ha ellas siempre les encantó cocinar con cosas que ellas mismas cosechaban y sabían de donde habían venido las cosas con las que ellas cocinaban y sobre todo la calidad de ellas.
Lo único malo que tenia aquel local era que estaba muy mal y sucio en el interior, la pintura ya se estaba cayendo, el piso estaba horrorosamente sucio y las ventanas estaban sucias y no contaban con protectores, las puertas estaban en mal estado igual que la perilla de éstas sin contar que igual estaban sucias.
Pero en realidad no iban a encontrar un lugar de ese tamaño a ese precio así que se decidieron por comprarlo y luego decorarlo a gusto y restaurarlo más que nada.

- Ya veras que este local va a quedar perfecto - le dijo rin a kagome al verla algo desanimada.
- Sí, solo que esto nos va a costar algo de dinero y trabajo - dijo viendo el local.
- Pero como ya nos dimos cuenta es muy amplio para el precio que tiene y pues aunque nos cueste un poco mas de trabajo y dinero, pues creo que vale la pena - le dijo mostrándole una sonrisa a kagome.
- Tienes razón no entiendo porque me pongo así, si estamos a punto de cumplir nuestro sueño que tanto deseamos - dijo correspondiendo a la sonrisa de rin.
- Así que ahora lo que debemos de hacer es arreglar un poco esto así que, que dices si vamos para comprar algunos productos de limpieza.
- Sí vamos - dice mostrándole una sonrisa a su hermana en señal de que ya no se va a deprimir por cosas como esas.

Entonces se fueron las dos hermanas del local al súper más cercano para comprar algunos productos para la limpieza del local. Después de dejar los productos de limpieza comenzaron a notar que también necesitarían cosas de la ferretería como un martillo clavos, etc., después de comprar varias cosas que necesitaban y quedarse solo con algo de dinero comenzaron a limpiar el lugar, primero iniciaron con sacudir todo el lugar para tirar el polvo al piso para luego poder barrer todo el mismo polvo y poder recoger la basura y meterla en las bolsas de basura que habían comprado cuando fueron al súper.
Luego lavaron el lugar y prosiguieron por resanar unas partes de la pared que tenían como grietas. Después de su arduo trabajo se dispusieron para ir a su departamento a dormir ya que era demasiado tarde, se habían pasado todo el día en el local y por supuesto kagome pidió el día libre. A partir de mañana tendría que trabajar y también su hermana ya que mañana era sábado.

Al día siguiente se dispusieron a irse a trabajar a un restauran en el que las habían contratado como meseras, por cierto el lugar era muy elegante, tenía cortinas rojas adornando perfectamente las enormes ventanas del lugar, las cuales estaban atadas elegantemente con unos cordones de color dorado, también contaba con un piso de mármol y unas mesas decoradas con manteles rojo y blanco y con todos los cubiertos, platos y tenedores en su lugar estéticamente, y las sillas adornadas con fundas de color blanco con unos listones atados de color rojo. En el techo tenia varios candelabros de cristal colocados estratégicamente para que el lugar se viera mejor.
En ese restaurante en su mayoría por no decir que todas las personas que asistían eran personas de dinero, por lo mismo que el restauran casi no contaba con platillos económicos o alcanzables para todo tipo de personas.
Cuando ellas llegaron todos estaban más eficientes de lo normal y cuando esto pasaba solo significaba una cosa, que un cliente importante iba a llegar.

- Hoyo tu sabes porque tanto ajetreo - preguntó Kagome refiriéndose a otro mesero.
- Es que hoy va a venir la familia Taisho - dijo el joven con cara de presión.
- ¡Pero daremos nuestro mejor esfuerzo! Dijo Rin mostrándole una sonrisa a hoyo.
- Ahora me tengo que retirar porque me faltan muchas cosas por hacer - dijo hoyo retirándose de ahí.
- Bueno Rin ¡manos a la obra! Tenemos que ir a reportarnos para empezar nuestras labores dijo Kagome caminando en dirección hacia con su jefe seguida por Rin.

- Buenas tardes señor Kaisho - dijeron Rin y Kagome al unísono.
- Buenas tardes señoritas, como ya se habrán dado cuenta hoy vamos a tener un cliente muy importante será la familia Taisho y les informo desde ahora que ustedes serán las meseras que les sirvan - dijo el señor Kaisho mirándolas.
- ¿Nosotras? - dijeron al unísono.
- Sí ustedes, al parecer al hijo menor les gusta mucho las jóvenes como ustedes y lo siento chicas pero necesitamos dar buena impresión - dijo Kaisho.
- Ya entiendo - dijo Kagome algo pensativa.
- Bueno ellos llegaran dentro de unas horas, pero hay mas clientes esperando así que váyanse a ponerse el uniforme.
- Sí señor - dijeron ambas yéndose a cambiarse.

Tanto Kagome como Rin se dispusieron a cambiarse para atender a los clientes y prepararse ya que por lo visto hoy sería un día pesado, aunque ni ellas sabían lo que iba a suceder.
Pero en sí todo iba bien ellas recibían pedidos, los llevaban y cosas así, pasaron algunas horas y de repente llegaron los Taisho, todos iban a atenderlos, llevarlos a su lugar reservado y dándoles todo tipo de atenciones, ya que los Taisho eran dueños de una de las mejores empresas que se encargaban de negocios nacionales e internacionales.

- Por fin salimos como familia de nuevo dijo una mujer mostrando una sonrisa a sus acompañantes.
- Keh, no es para tanto - dijo el hijo menor desinteresado.
- Espero que hoy no hagas una tontería Inuyasha- dijo el padre de éste mirándolo seriamente.
- Por favor padre del que hablas es Inuyasha - dijo el hermano mayor.
- ¿Qué dijiste Sesshomaru? - dijo Inuyasha algo molesto por el comentario hacia él.
- Inuyasha cálmate - dijo su madre con serenidad.
Los cuatro formaban una familia millonaria, ellos eran los Taisho, el padre y jefe de la empresa era Inu, una persona seria, firme en cuanto se trataba de decisiones o negocios, pero aún así cariñosa con su familia, lo único que parecía exasperar a este hombre era su hijo menor Inuyasha ya que no tenía un buen comportamiento para su punto de vista, lo único que lograba tranquilizar y servir de mediadora cuando discutía con su hijo era su esposa Izayoi, ella era una persona muy tranquila y esposa y madre cariñosa, el comprendía un poco la rebeldía de su hijo mas no justificaba que fuera mujeriego, Inuyasha era el hijo menor de los Taisho, el era muy rebelde y sobre todo testarudo, y aparte de lo anterior era mujeriego, pero en realidad era así por su rebeldía y porque según él se cansó de competir con su hermano mayor que siempre era perfecto y le ganaba en todo y su parecer sus padres siempre le ponían mas atención a su hermano y no a él, y al entonces decidió ser así para tener mas atención por parte de sus padres y para disfrutar la vida, ya que había perdido mucho interés en varias cosas porque siempre pensó que no sería mejor que su hermano Sesshomaru (aunque no lo aceptara si lo queria a pesar de todo eso que pensaba). Sesshomaru era el hijo mayor de los Taisho el era serio, tranquilo, sereno, nunca se inmutaba ante ninguna situación y siempre poseía una mirada fría, el era centrado y sabía que quería vencer en la vida y ser el mejor (aunque el ya pensaba que era el mejor).

- ¿Qué desean ordena? - preguntó Kagome acercándose a la mesa con Rin.
- Creo que ya encontré mi diversión de esta noche -pensó Inuyasha mirando a Kagome.

Continuará…