Colección de Pokémon - [TERMINADO] Poké-webadas a tope [30 días de Pokémanía]

Buenas tardes, familia de FFL :D. Seh, llego BIEEEEN tarde y ya no cumplí con hacer todo en 30 días, pero al menos planeo seguir esto hasta el fakin' final xD. Volvió parcialmente la inspiración a mí, y me susurró lo siguiente: "El concepto de @Rojo y naranja de reemplazar a Oak con Rowan fue algo interesante". Así que decidí hacer un escenario "What If...?" con todo eso... pero con mudanza incluida. Y quizás algo más -w-

¡Vamos allá!

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Día 24: Profesor
[El relevo]​

Entré al laboratorio situado en Pueblo Paleta. Era mucho más grande que el mío, sin lugar a dudas. Mis maletas eran algo pesadas, así que las dejé al lado del perchero, el cual usé para colgar mi chaqueta. No llevaba puesta mi bata de laboratorio desde el vamos. Vestía de forma cómoda y a la vez vistosa, con una tenida muy sobria y una Fedora de color negro.

De inmediato me recibió un joven de pelos negros, una bandana naranja, una polera de color calipso y unos shorts de color bermellón.

—Muy buenos días, Profesor Rowan. Veo que usted se encargará de este laboratorio.

—Me enteré de todo. El Profesor Oak decidió retirarse a las montañas para estar en contacto con la naturaleza y componer poesía. Últimamente a todos los viejos les llegan las ganas de hacer eso.

—Sí, a mí también me parece curioso… — Respondió el jovencito, con un goterón en su cabeza — Pero bueno, permítame presentarme. Yo soy Tracey Sketchit, y llevo años trabajando aquí. Espero poder seguir con esto un buen tiempo más. Me encantan los Pokémon y por sobre todo dibujarlos.

—Interesante pasatiempo. Y por lo visto siempre estás atento a los Pokémon y a tu entorno, ¿No es así?

—¡Efectivamente, señor!

—¿Me dejarías ver algunos de tus dibujos, muchacho? — Inquirí de repente

—¡Cómo no, Profesor Rowan! — Me dijo sin dudar, y rápidamente me entregó una de sus carpetas.

Yo la ojeé y me sorprendió el talento que tenía Tracey. Realmente le hacía honor a su apellido, ya que los dibujos de ahí dentro tenían una calidad excepcional. Y de repente, encontré algo totalmente inusual

—Pero… ¿Quién es esta mujer?

Rápidamente él me quitó la carpeta, como si intentara ocultarme algo

—L-l-lo siento, señor — Tartamudeó nerviosamente el chico — N-no sé c-cómo llego eso a mi carpeta, pero le juro que solo he dibujado Pokémon

Decidí no darle importancia al asunto y caminé un poco

—¿En dónde está la oficina? — Le pregunté

—¡Oh, cierto! — Se sorprendió éste — Se la abro de inmediato

Dejé que el jovencito se adelantase y usara las llaves. Mientras, me quedé pensando en aquel boceto que hizo. Era más que obvio que él tenía sentimientos por aquella mujer de cuerpo esbelto y cabellera de mediana longitud con una cola atrás, ¡Porque no cualquiera hace un boceto de ella usando un Bikini tan apretado!

—¡Puede entrar, señor!

El chico logró abrir la oficina. Le di las gracias y procedí a instalarme. Era un lindo lugar. La atmósfera era acogedora y pude sentir un ligero aroma a incienso. El escritorio estaba desordenado, pero era de esperarse de Oak. Desde que lo conocí en la universidad que era así de desorganizado. Oh, viejos tiempos…

—Disculpe, ¿Le molesta si paso?

Una voz femenina me distrajo de mis pensamientos. Volteé a ver…

¡Y resultó ser nadie menos que la mujer que Tracey había dibujado!

¿Cuáles eran las probabilidades?

—¿Está usted muy ocupado? — Insistió ella — Le traje galletas y leche

—Oh, muy amable, señorita… — Le dije

—Me halaga. Resulta que yo ya tengo un hijo, y mi esposo sigue de viaje… a veces me pregunto qué cosas hará… ¡Oh, y mi nombre es Delia Ketchum! ¿Es usted el Profesor Rowan?

—Afirmativo — Le dije, mientras me quedé embelesado con su cuerpo. ¡Toda una lástima que ella ya esté casada y tenga un hijo! ¡Cualquiera se hubiese enamorado de esas bellas curvas, sus anchas caderas y sus magum-! ¡Ejem!

—¿Pasa algo, profesor? — Me dijo ella

—No, nada… solo me dio un golpe de calor. Abriré la ventana

Para evitar quedar en ridículo, abrí la ventana. Era un hermoso día allá afuera… los Pokémon jugaban o dormían la siesta, sin preocupaciones. Un Sceptile y un Infernape estaban teniendo un sparring amistoso… todo normal, supongo yo.

—Si necesita algo más, no dude en visitar mi casa. Está a pocos metros de este lugar — Y con esa frase, ella me dedicó una linda sonrisa. Era una mujer muy amable…

—Gracias. Lo tomaré en cuenta. — Le respondí escuetamente, y ella se marchó, contoneando su lindo derrière.

Hmmm… vaya que me comienza a gustar este lugar. No tenía muchas ganas de suplir a Oak, pero creo que a final de cuentas, trabajar aquí va a ser un verdadero paraíso.

Y voy a disfrutar mi estancia, quizás hasta el final de mis días…

FIN.​

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¿Algún ElderShipper en la sala? ¿No? Mejor para mí, supongo... pero si quieren venir aunque sea a tirar tomates, bienvenidos :L

 

Bueno, mis amigos de FFL, les traigo el escrito número 25 :D. Pero antes, un poco de quoteo...

Nada más una pregunta... ¿Los caballeros consideraban la fama como algo importante? ¿Qué tan importante? En estos tiempos la gente famosa vive atosigada por el resto del mundo y a veces sin quererlo los distraen de temas REALMENTE importantes como las elecciones políticas y el medio ambiente. Claro, muchos famosos concientizan, pero siguen siendo muy pocos. Considero mejor atacar desde las sombras a aquellos que NO tienen honor, e ir de frente contra aquellos que sí lo tengan.

Entre los fans Pokémon, hay tantos que admiran a unos pocos como son Lucario, Blaziken, etc. que se olvidan del resto. Por eso es que elijo escribir sobre los "olvidados", ensalzándolos mientras pongo a los "populares" como los malos.

1- La niña del Piplup es la hermanita de mi OC xD. Si re-lees los primeros episodios de mi fanfic del blog, entenderás.
2- Lo de Casey sucedió para que se pudieran dar los eventos de tus últimas temporadas del Poké-Comic. Busco siempre compatibilizar nuestros Universos Alternos ;). Aunque quizás me equivoqué un poco con la fecha xD.

En fin, dejo este escrito, que por cierto, podría considerarlo continuación del escrito #18. Solo espero lo disfruten :D

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Día 25: Victoria
[La venganza… no es tan dulce]​

—¡Nagase, ahora usa Viento Cortante!

Mi confiable Floatzel saltó con una voltereta hacia atrás y desprendió dos cuchillas de aire, dando con excepcional precisión en el Inkay de James y estrellándolo contra un árbol. No había réferi, pero no era necesario para determinar que el pequeño calamar estaba fuera de combate

—¡Aaaaaiiiirk! ¡No, mi pequeño calamardito! — Exclamó él, mientras corría hacia su Pokémon, visiblemente preocupado por el daño que el mío pudo infligir.

—¿¡Eso es todo lo que tienes, pendejo!? — Le dije en voz alta — ¡Apenas saqué a mi Floatzel y ya se sirvió a tres de tus Pokémon en bandeja de plata!

James estaba petrificado ante mí. Pensé que sí había escuchado, así que decidí seguir.

—¿Acaso tienes tanto miedo de los pecados que has cometido que ya no puedes pelear? — Pequeña pausa — ¿Será acaso que ya no te quedan Pokémon que te defiendan? Lo dudo… una organización de ladrones, tan importante como el Team Rocket siempre puede tener a sus soldados con un equipo lleno. ¡Por eso es que siempre llevo el mío repleto también!

Me sentí tan, pero tan confiado, que mostré mis otras cinco PokéBalls en la mano.

—¡Ustedes no me van a quitar mis Pokémon! ¡¡Jamás!! ¡Porque nos protegemos los unos a los otros! Y si lastimas a uno, los otros te vamos a caer encima… ¡Como un enjambre de Beedrills!

Otra pequeña pausa de mi parte. Tomé un poco de aire, ya que sentí mi garganta secarse.

—De acuerdo, ¿Tienes más Pokémon que te defiendan o no?

Tuve que esperar unos ocho segundos que me parecieron una eternidad, hasta que al fin balbuceó…

—N-no los tengo…

—¡Ja! ¡Eres más pusilánime de lo que pensé! — Le contesté, para luego darle una orden a mi Pokémon — ¡Nagase, ahora ve por él!

Pero justo cuando mi confiable nutria de río iba a golpear a ese idiota, un Mime Jr. salió de la nada y la tacleó para proteger a James.

—¡Ah! ¡Con que todavía tenías un Pokémon!

—¡No! ¡Mime Jr.! — Exclamó el de pelos color azul — ¡Esa Floatzel es demasiado fuerte!

Pero Mime Jr. ignoró la advertencia y usó su ataque Psico-onda, el cual hubiese atinado de no ser porque ordené a Nagase esquivar.

—¡Parece que no hemos terminado de sacar la basura después de todo! — Añadí — ¡Chorro de Agua, Nagase!

—¡Cuidado, Mime Jr.! — Exclamó James, más como súplica que como orden. Pero a la postre sí funcionó, y más encima, Mime Jr. usó Copión, y le pegó en la cara a mi Floatzel con su propio Chorro de Agua.

—¿¡Vas a dejar que se burlen de ti, Nagase!? — Alenté a mi Pokémon de forma agresiva — ¡Usa Bomba Sónica en el piso!

Mi estrategia había cambiado. Ahora mi Pokémon dio un salto casi vertical y lanzó muchas Bombas Sónicas al piso para levantar polvo y desorientar a Mime Jr. Cabe destacar que una de ellas casi le cayó a James y logró asustarlo más

—¡¡Con cuidado, cafre!! — Exclamó él con una voz bien chillona

Mime Jr. intentó disparar su Chorro de Agua para limpiar el polvo y revisar el terreno, pero también delató su posición

—¡Embístelo con Acua Jet muchas veces! — Fue mi siguiente orden. Y dio resultados, ya que Mime Jr. nada pudo hacer para evitar múltiples tacleadas por diferentes direcciones.

—¡¡Noooo, mi pobechito Mime Jr.!!

—¡Liquídalo con una Cuchillada!

Por una última vez, mi Floatzel se acercó a Mime Jr. y con una de sus zarpas le asestó un rasguño bien potente. Hasta podía sentir en mi cabeza una vocecita que gritaba “¡¡It’s a Critical Hit!!”

Observé a Mime Jr. un momento… luchaba por levantarse pero le costaba muchísimo. Aun así seguía, hasta que James prácticamente se le abalanzó encima y lo cogió en brazos

—¡¡Noooo!! ¡Por favor, basta! ¡No lastimen más a mi pequeño! — Luego, me miró a mí con los ojos llenos de lágrimas — ¡Se los suplico! ¡Pueden hacer conmigo todo lo que quieran, pero dejen en paz a Mime Jr.! ¡Buaaaa!

Tanto Nagase como yo quedamos impactados. La furia que nos impulsaba se fue desvaneciendo lentamente.

—[Lo siento, Trainer… no quiero pelear más] — Me dijo Nagase.

—¿Pero por qué? ¡¿Por qué desperdiciar la oportunidad de hacer pagar a un miembro del Team Rocket?!

—[¡Él es un buen tipo! ¡No es como los otros que lo acompañan! Él sí se preocupa por sus amigos… no puedo, y no quiero hacerles más daño. Perdóneme, trainer…]

Me costó entenderlo, pero ella tenía razón. James no es el villano arquetípico, sino una víctima de las circunstancias… ¡Y yo estuve a punto de decapitarlo!

—No. Tú perdóname a mí, chiquita. Tienes toda la razón… él no merece esto.

Me acerqué al miembro del TRío y le ofrecí mi mano

—James, yo… — Sentí tanta vergüenza conmigo mismo que me costaba mirarlo a los ojos — Lo siento mucho. No debí enfadarme así… se nota mucho que tú quieres muchísimo a tus Pokémon y no te gusta verlos lastimados. Espero me perdones…

Hubo silencio. Incómodo silencio… quince segundos que se me hicieron más eternos todavía. Ese silencio solo se rompió con la pregunta de James.

—¿Tienes alguna forma de curar a mis amigos?

—Oh, sí la tengo. — Y entonces saqué de mi mochila un botiquín repleto de medicina — Puedo encargarme de eso. Solo entrega a tus Pokémon y déjalo en mis manos, que no solo saben destruir, como podrás imaginar luego de cómo me he portado.

—E-está bien… adelante.

Antes de que anocheciera, logré aplicar pociones y vendar a los Pokémon de James. Afortunadamente, Nagase no les hizo daños de consideración. Solo cortadas superficiales y moretones. Después, le pregunté a James el por qué trabajaba con los Rocket.

Me contó todo. Absolutamente todo.

Pobre chico… lo único que conseguí sacarle al fin y al cabo, fue una victoria muy amarga. La venganza no es tan dulce como la pintan…

FIN.​

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Ooookey, una última cosa: Prometo seguirle con mis fanfics estrella (PH y el del blog) cuando acabe con este reto xD. ¡Hasta la próxima! :p

 

Esta vez decidí no calentarme mucho la cabeza con el tema del Campeón o Alto Mando, así que lo convertí en canción :D. Imaginen que es Gary quien habla LOL.

Y disfruten la melodía en sus cabezas. ¡Corre Videoclip mental! xD

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Día 26: Alto Mando/Campeón
[Fuera de tu alcance/(Universo de los juegos y el Animé, mezclados)]​

[GARY CANTANDO]
¡Oh, sí! Mucho tardaste
¡Y ahora el campeón yo soy!
Jamás podrás a mí comparart
¡Fuera de tu alcance estoy!

Siempre has sido demasiado lento
Pendejo, ¿Qué excusa tienes hoy?
¡Ninguna! Solo eres un jumento
¡Fuera de tu alcance estoy!​

[CORO DE PORRISTAS]
¡Gary, Gary, ídolo mundial!
¡El campeón más especial!
¡Es nuestra estrella invencible!
¡Gary, Gary, Ooooooooh!

[GARY]
Ni siquiera intentes desafiarme
Molestas más que una liendre
Y tienes la misma habilidad
¡Fuera de tu alcance… estaré siempre!

¡Admítelo! Nunca aquí llegarás
A menos que sobornes a algún juez
Mientras tanto, yo me mantendré
Fuera de tu alcance, ¡Una eternidad!


[CORO DE PORRISTAS]
¡Gary, Gary, ídolo mundial!
¡El campeón más especial!
¡De Kanto, por siempre, será el rey!
¡Gary, Gary, Ooooooooh!


[GARY]
Mejor ve a llorarle a tu mamita
Para que te compre tu caja feliz
Y luego pídele que tu pañal cambie, cuando…
​

<<Repentinamente, la música se detiene. Suena el teléfono y Gary contesta. Es la recepcionista>>

—Señor, le ha llegado su retador. Dice que se llama Ash Ketchum

—¡Wow! ¡Con que él sí pudo llegar acá! Hazlo pasar, que ya me encargo.

Y colgó de inmediato. Pensando para sus adentros

—¡Ahora sí te lo dejo en claro! ¡Estoy y siempre estaré un paso adelante tuyo! ¡Fuera de tu alcance estoy!

FIN.​

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Y ya sabrán cómo termina esto xD. Espero sus comentarios y sellitos como siempre ;). ¡Nos vemos en otra ocasión!

 

Saludos a toda mi familia, la comunidad PokéFanfiquera xD. Si quieren les invento un mote más corto n_nU

Bueno, me he quebrado la cabeza durante más de tres días para hacer esta parte. Ya quedé "fuera de plazo" hace rato así que el tiempo no es presión... pero mi trabajo y las visitas de mi revoltoso sobrino sí n_nU. Mi novia y yo llegamos al consenso de que no tendremos bebés. Solo "hijos" de 4 patas.

Como sea, les traigo paz... y el escrito número 27. Disfruten xD

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Día 27: Batalla de la Frontera/Mansión Batallas
[Rueda de la Fortuna]
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<<Es Greta quien nos cuenta la historia en esta ocasión>>

Cuando era una pequeña de apenas cuatro años, yo era una niñita muy, pero muy curiosa. Husmeando entre las cosas de mi madre, encontré un mazo de cartas. Esperaba ver aburridas ilustraciones de reyes y reinas de corazones o tréboles, pero encontré muchas cosas más interesantes… había un rey y una reina, sí, pero tenían los números cuatro y tres en romano, marcados arriba y abajo

En eso, mi madre me pilló y me dijo

— ¡Niña! ¿Qué estás haciendo?

Ella me quitó el mazo de cartas y me dio el sermón típico de “no debes tomar las cosas de los demás sin permiso”. Pero después me explicó todo sin problemas: Eso era un mazo de cartas del Tarot. Me preguntó si quería que le leyera el futuro con ellas. Yo le dije que sí

[Nota del Autor: El significado de las cartas del Tarot en el Mundo Pokémon pueden tener significados ligeramente distintos a las del mundo real]

Mi madre barajó todas las cartas como una profesional. Después de eso me hizo escoger tres cartas de entre las… bueno, no recuerdo el número exacto. Creo que eran setenta y ocho.

Escogí las tres. Primero, me reveló una que me pareció familiar. Creí haberla visto en otra especie de baraja

— ¿Es un 10 de espadas?

— Sí, cariño. Normalmente augura una vida corta y acelerada. Pero está invertido, así que muy probablemente tu vida sea larga y quizás ardua.

— ¿Viviré mucho? — Le pregunté — ¡Me gusta la idea! Solo espero no quedar como la abuela… jejejeje

— Bueno, veamos qué más hay aquí

Ella dio vuelta la segunda carta. Era La Fuerza, representada por un Conkeldurr dejando sus pilares de lado, y sofocando a un Pyroar con una llave al cuello.

— Arcano número ocho: La Fuerza. Significa que si mantienes el valor en tu vida, todas tus metas podrán cumplirse tarde o temprano

— ¡Súper! — Celebré por un momento, y luego comenté por el Conkeldurr de la ilustración de la carta — ¡Se ve súper chido! ¡Me gustaría tener uno de esos y estrangular leones!

— ¡Niña, tan pequeña y ya sueñas con llevarte el mundo por delante! Bueno, supongo que coraje no te va a faltar nunca — Ella rió un poco. Yo también me sentí feliz… y ella aún tenía que develar la última carta — De acuerdo. A ver qué te toca ahora

La tercera carta escogida tenía un dibujo de una rueda enorme, con una rueda más chiquita dentro… y la parte exterior seccionada en ocho pedazos idénticos. Por arriba se encontraba una Latias, encaramada al extremo superior izquierdo de la rueda y con un rostro sonriente, mientras que en la parte inferior derecha estaba un Latios volando bien cerca.

— ¡¡Wooooow!! — Mi lado Fangirl afloró de inmediato. No sabía entonces si era por los dragones legendarios o por cómo dibujaron la rueda — ¡Está perronsísimo!

— Este es el arcano número diez. La Rueda de la Fortuna. Esta carta dicta que cuando no sepas qué hacer, solo déjalo al azar. Pero intenta no abusar de tu suerte.

— ¿Ah? — Cuestioné — Pensé que significaba que si voy a la feria del pueblo, seguro ganaré algo.

Ella rió un poco antes de responderme.

— Pues si gustas, mañana iremos juntas. Voy a ver si puedo ganar algo de dinero leyendo la fortuna a la gente, y mientras, tú disfrutas de lo que hay.

— ¿En serio, ma? ¡Yupiiii! — Celebré — ¡No puedo esperar!

— Si te vas a dormir ahorita, seguro que no tendrás que esperar mucho. Ahora vete, a la cama.

— ¡A la orden! — Y le di un besito de las buenas noches a mi madre.

****

Al día siguiente, mi madre y yo fuimos a la feria, y encontré una atracción interesante. Parecida a la carta que me reveló mi madre la noche anterior. Era atendida por un hombre con apariencia de charlatán. Pero en fin, mi madre siempre dijo que no hay que juzgar un libro por su portada, así que decidí entrarle.

— Adelante, pequeña. — Me dijo el tipo, con total confianza — Prueba tu suerte. El coste por entrar es de apenas 50 Pokedólares

— ¡Wow! Interesante — Exclamé — ¡Quiero intentar!

Puse mis moneditas donde él pudiera verlas y dejé que las tomara. El evento era sencillo. Había que apostarle a un número del uno al doce. Si le atinaba a dicho número, me ganaba un premio de los que había en un estante, marcados con un numerito.

El número ocho tenía un peluche de Conkeldurr de unos treinta y cinco centímetros. ¡Era hermoso! ¡Y muy parecido al de la segunda carta que me mostraron!

¡Lo quería a como diera lugar!

— ¡El número ocho! — Le dije al viejo — ¡Le voy al ocho!

— Como gustes, niñita.

El tipo comenzó a girar la rueda. Apreté mis puños mientras veía cómo cambiaban los números debajo de la flechita roja… la rueda desaceleraba despacio y podía ver el orden en que los números pasaban por debajo de la flecha: Tres, Once, Nueve, Cuatro, Siete, Uno, Cinco, Dos, Ocho, Doce, Seis, Diez… y el tres nuevamente. Seguía nerviosa, atenta a las cifras… hasta que de repente, cayó en el dos.

— ¡Awwwww noooo! — Hice un puchero

— ¡Uuuuuh! Eso estuvo cerca, nena. ¿Quieres intentarlo de nuevo?

Pero entonces, un viento corrió e hizo girar un poco más la rueda. ¡Ahora sí había caído en el ocho!

— ¡¡Síiiii!! — Grité felizmente — ¡Ha caído! ¡Ha caído!

— ¿¡Pero cómo!? ¿Que no había caído en el dos? Hmmm… mi vista ya no es lo que era, al parecer. Pero está bien, quizás es una señal de Arceus. Te has ganado tu peluche

Sin chistar, el buen hombre me dio mi premio… ¡Lo había conseguido a la primera!

Al parecer mi suerte comenzó bien… ¡Y esperaba que siguiera así!

****

Con el pasar del tiempo, siempre que veía un juego de azar basado en una rueda de la fortuna, jugaba una ronda en él, ¡Y siempre conseguía lo que quería! Cuando cumplí siete años, conseguí dinero extra para comprar un regalo para el día de las madres, el cual era cinco días después. Cuando tenía ocho, conseguí unos guantes de boxeo firmados por una estrella del deporte… ¡Gregoria Rousey! Y cuando tenía nueve gané una lavadora en un sorteo que, obviamente, involucraba una rueda de la fortuna. ¡Mi madre no volvería a lavar la ropa a mano con agua helada!

Dejé los juegos de azar por un tiempo cuando comencé mi viaje Pokémon, con un Makuhita que mi madre me regaló. No obstante, cada vez que encontraba una rueda, no podía evitar apostar a ella… ¡Mi racha continuó y continuó por años!

Era una lástima que no se pudieran ganar campeonatos girando una rueda… nunca conseguí un trofeo de campeona, la verdad. ¡Lo más cerca que estuve fue perder en la final cuando tenía quince años! ¡Fue frustrante!

Hasta que conocí a Scott, quien me invitó a formar parte de La Batalla de la Frontera, como líder de insignia, y me dijo que podía modificar las reglas como me gustara.

Accedí gustosamente y estrechamos la mano.

****

Desde que comencé siendo Líder de Frontera, apliqué los juegos de azar para definir las reglas. Me sentía con suerte, así que incluso llegué a apostar mi símbolo por un corto tiempo, hasta que Scott me dijo que no debería hacerlo pues iba en contra de las reglas… solo lo llegué a hacer unas cinco veces, cuando no estaba de ánimos para pelear. Podía entenderlo, ya que podía fomentar la flojera.

Pero por lo demás, mi método favorito era el de usar una rueda de la fortuna, para así definir de cuántos Pokémon por lado debería ser cada encuentro. Pero para no abusar, me planteé usarlo solo una vez por semana.

¡Y cuando la uso, tengo preciosos recuerdos de mi familia allá en mi pueblo, y de mi amor por los Pokémon de tipo Luchador!


<<Fin del relato. Volviendo a tiempo actual>>

Me llamó Scott esta mañana. Un tal Ash Ketchum viene hacia acá. Me dijo que es un entrenador tenaz como pocos.

¡Es hora de usar mi método favorito en él! ¡Prepárate a perder, Ash! ¡Yo, Greta, Líder de la frontera, no te la voy a dejar fácil!

FIN.
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Y acá también ya saben cómo terminó la cosa :V. No todo es suerte, chicos... es un aditamento muy interesante en la vida, pero jamás hay que depender de ella -w-. Ni aunque te llames Cameron y tengas un Putario... digo, Lucario xD

Hasta la próxima, amigos :L

 

¡Hola, familia de FFL! Ya habiendo cumplido con la conti de mi Fanfic de PokéHumanos, procedo a intentar acabar con este reto de la Plochi xD.

Para esta ocasión intentaré un relato en segunda persona. Jamás lo había hecho antes... pero esta ocasión es idónea. Así que se los dejo... ¡A leer! :D

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Día 28: Megaevolución
[Héroes Inesperados]​

Puedes ver que el Centro Pokémon está siendo invadido por el Team Flare. Andan todos con pistolas y otras armas de un nada despreciable calibre. Te ocultas bajo el escritorio. Rezas para que no te vean, a pesar de que Pokémon enfermos inocentes podrían morir. No sabes qué hacer.

Repentinamente, encuentras una cajita de madera. La curiosidad te tienta. Se te ocurre brevemente que con los contenidos podrías ayudar a remediar la situación. La abres, con las manos temblorosas. Ruegas a Arceus

—Por favor, que esto me sirva…

Abres la caja. Todo lo que encuentras es una brillante piedra esférica y traslúcida, con una extraña figura en el centro. Te desesperas, al no saber en qué podría ayudarte dicha piedra. Pero entonces, recuerdas que esa piedra es una Audinita. Después recuerdas que tu lugar de trabajo hay muchos Audino ejerciendo sus labores de enfermería. Entonces esperas que uno pase cerca.

No tienes que esperar demasiado, puesto que un Audino aparece corriendo. Lo jalas de la mano para esconderlo. Le explicas que él puede convertirse en un héroe. Que las Oficiales Jenny podrían no llegar a tiempo.

—Por favor, Audino. Toma la MegaPiedra y usa tus poderes para ahuyentar a los maleantes — Le ruegas. Éste duda por un momento, pero acepta. Se concentra…

Posteriormente brilla y su aspecto cambia. Su color es más claro, sus ojos más brillantes y de color rosa. Pero puedes sentir que dentro de sí tiene un gran poder.

Echas un vistazo para ver qué sucede. El lugar es un caos. El jefe de los maleantes está ahí. Parece un sargento gordinflón vestido casi como Santa Claus… pero tiene unos lentes futuristas y solo planea regalar destrucción. No se te ocurre cómo hacerle frente, pero MegaAudino usa Superfuerza, toma una loza de cerámica con un montón de concreto debajo, y lo lanza hacia el maleante.

HEADSHOT!!

El tipo cae inconsciente. Rápidamente sales de tu escondite y lo atas de manos y pies con una soga. Ahora sí te sientes valiente, y puedes con cualquier cosa.

Media docena de ladrones vuelven al lugar de entrada. No han tomado rehenes, pero sí llevan sacos repletos de PokéBalls. ¡Es hora de actuar!

¡Mayúscula es la sorpresa de tus enemigos al ver a su líder maniatado! Antes de que ellos decidan atacar, ordenas a MegaAudino usar Brillo Mágico. ¡Y lo ejecuta a la perfección contra todos! ¡Los maleantes están cegados y empotrados contra la pared! Es momento de atarlos también

Cuando las autoridades al fin llegan, solo deben llevarse a los siete malacatosos a prisión. Te felicitan, pero correctamente le das el crédito a tu Audino, quien ya dejó su forma Mega.

Ambos son condecorados con una medalla, y no de Gimnasio, sino una dorada, grande y que te la puedes colgar en el cuello.

La crisis ha sido evitada. Al contar los daños solo hay humanos heridos. Ningún muerto y ningún Pokémon lastimado. ¡Vaya golpe de suerte, chica!

Pero ni te creas que este milagro ocurrirá dos veces. Mejor será que prepares a todo el staff.

Qué lástima que no haya suficientes Audinitas… y que las Chanseys y Blisseys no Mega-evolucionen. Todo quedará en manos de ti de ahora en adelante.

Prepáralos, y el mal jamás triunfará en tu Centro Pokémon.

FIN.

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Bueno, aquí lo tienen xD. Me costó escoger qué MegaEvolución tendría el papel protagonista, pero sí tenía claro que no habría Legendarios, MegaChorizords ni MegaPutarios -w-. Así que igual... espero que lo hayan leído todo xP

¡Adiosito! ¡Hasta el próximo capítulo!

 

Penúltimo escrito del reto de @Plushy Berry . Uno más y puedo volver a concentrarme en otras cosas xD. Pero bueno, esto es un pequeño experimento que quise dedicar a gente como @NathyKazeNeko , @George Asai, @Lionflute y @Jhosep Zar -w-. Espero al menos les saque una sonrisa ;P

¡Corre video!

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Día 29: Compañero
[¡No vuelvas a escapar así!]​

<<Tomamos el punto de vista de Clemont. Esto sucede justo después de que Ash tiene una batalla contra Sawyer y pierde contra él. Él sigue junto a Serena y Bonnie, descansando y tomando refrescos>>

Admiro el optimismo y seriedad que, casi siempre, Ash suele mostrar. Realmente se puede confiar en él como si fuera el hermano mayor que nunca tuve…

—¡Oye, hermano! ¡Mira a esa linda dama! — Me decía Bonnie, apuntando a una joven de pelo castaño, vestido verde y un paraguas del mismo color

—No interrumpas mis pensamientos, Bonnie — Regañé a mi hermanita. Ella solo hizo un adorable puchero y se fue.

Solo hay un par de cosas que no me agradan de Ash… y la primera es que preste demasiada atención a Serena…

¡No es que me esté sintiendo celoso! El problema es que casi no tenemos chance de conversar de temas de hombres, de machos que se respeten. Si no lo veo entrenándose con sus Pokémon, y en especial con Greninja, entonces está dándole ánimos a la pelimiel para que mejore sus “Performances”. Digo, no es que yo no apoye a Serena, ¡Pero el espectáculo de la Clase Maestra ya pasó! No debería estar todo el rato practicando el baile. Pareciera que lo único que Serena gusta hacer es bailar, cocinar postres y leer mapas. Solo por eso no he construido una máquina radar… o más bien, no lo hago porque no quiero que explote al más mínimo toque.

¿O acaso será que yo me estoy sintiendo atraído hacia él? ¡Nah! ¡Qué estupidez! Aunque eso podría explicar el por qué no pienso en conseguir novia como Bonnie pasa insistiendo. Pero bueno, también a veces Ash me preocupa mucho. Y esa es precisamente la segunda cosa que me desagrada…

Ash imprime un aura tan jovial y tan confiable a la vez, que las raras ocasiones en que se deprime, me pone inquieto. No lo admito en frente de Serena y Bonnie para no preocuparlas más… pero en cierto modo, me preocupan las infinitas posibilidades de un escape de él. Normalmente Pikachu está para vigilarlo, es cierto. Pero a veces se le podrían olvidar sus demás PokéBall. Greninja y Pikachu son fuertes, pero si lo atacan en gambote o por sorpresa, podría quedar malherido…

O peor…

—¡Chicooooos!

¡Oh! ¡Ash está aquí! ¡Y está enterito!

—¡Ya era hora de que aparecieras! — Serena le regañó.

—Lo siento mucho, chicos — Él respondió — Necesitaba tiempo para pensar.

No aguanto más y corro a abrazarlo fuerte, como quien recibe una visita de un primo lejano a quien estima mucho. Aunque Ash es mucho más cercano que eso… al menos para mí

—¡Clemont! ¿Qué te sucede?

—No te nos vuelvas a escapar, tontuelo… — Es todo lo que puedo decir. Espero pacientemente a una respuesta de Ash, o más bien a que me empuje, ya que debo admitir que la escena es muy poco varonil.

Afortunadamente, todo lo que me dice es…

—Te lo prometo, Clemont. No te preocupes.

Y mi corazoncito salta como un Spoink.

FIN.
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Bueno, amigos... espero esto lo estén disfrutando. Se viene el gran final... a más tardar este domingo xD. ¡Mucha suerte con todos sus proyectos! -3-

 

Okey, ¡Al fin lo conseguí! ¡Con esto completo el reto del mes! >=D

Es momento de cerrar esto, pero no la discusión en sí, claro está -w-U. En todo caso, no puedo decir nada parecido a "broche de oro" porque este capítulo no es el mejor que me ha salido n__nU. Si hubieran puesto como último el de los días 6, 7 o 23, quizás sí xD.

En fin, les dejo pa que disfruten -w-

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Día 30: Maestro Pokémon
[¿Qué rayos significa...?]​

<<Noche del día 14 de Octubre de 2015, a las 23:57>>

Nuestro buen amigo Nathan se encontraba escribiendo en su diario de vida, antes de dormir.

“Querido Diario,

Hace poco volví a mi casa. El día en que volví, me tiraron una enorme fiesta. Sobró comida, la cual nos cenamos. Creo que con tanto dulce me va a dar diabetes… o quizás ya me dio y por eso estoy con la cabeza atascada en un pensamiento…

¿Qué es ser un Maestro Pokémon?

¿Tendrá que ver con ser un campeón mundial entre los entrenadores?

Nadie tiene la respuesta.

¿De dónde vino ese término?

Bueno, Ash me lo dijo en una videollamada. Y no solo entonces, sino que también la primera vez que lo conocí y enfrenté. Ese es el sueño que él tiene. ¿No se lo estaré robando? Hasta la fecha, él no ha sido campeón ninguna vez. En cambio, yo me hice con dos trofeos en los nueve años que he viajado. He pasado por tantas cosas y salido airoso… quizás ESA debería ser la definición.

Pero quizás ese es un pensamiento demasiado egocéntrico. Aparte, seguramente en este vasto mundo, hay personas que han pasado por más calamidades que yo. Probablemente sean campeones en otras regiones, o quizás están en un sanatorio mental.

¿Acaso ellos también buscaban ser “Maestros Pokémon”?

Lo que sí debo admitir es que ellos tengan una determinación férrea para sus metas. En todo caso, habría que tomar los testimonios de los tipos, a ver si esto del Maestro Pokémon vale la pena, después de todo.

Ash opinará de manera positiva. Pero necesito ampliar la muestra…

Hasta la próxima. Diario.

Atte,
Nathan”​

En eso, la puerta de la habitación se abrió repentinamente, y entran los padres, la abuela y la hermanita de nuestro compadrito, cargando un pastel. Todos exclaman al unísono

—¡¡Feliz Cumpleaños, Nathan!!

—¿Qué? — Preguntó él — ¿Por qué se molestaron?

<<Medianoche del día 15 de Octubre de 2015>>

A Nathan le tomó poco más de tres minutos escribir en su diario. Tiempo suficiente para que llegase el día en que cumplía nada menos que los 25 años.

—Awww — la jovencita abrazó a su hermano mayor — ¡Al fin podemos celebrar el cumpleaños juntos, hermano!

—Más adelante celebraremos como se debe, nietito — Dijo la abuela — Perdona si te despertamos

—Nah, descuida, abue — Contestó el cumpleañero — Ya estaba por dormirme, de todas maneras.

Al rato, todos dejaron la habitación. La última fue la más pequeña, quien se despidió con un besito en la mejilla. Al rato, él apagó su lamparita y decidió dormir.

Antes de poder ir a los brazos de Morfeo, él se puso a pensar

—Maestro Pokémon… dudo mucho que algún día alcance a serlo. Ya soy feliz con lo que tengo, en todo caso, y no me preocupa… solo es curiosidad estadística.

​

FIN.​

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Gracias por su atención, público n__n. Nos vemos en otras historias ;)