En su segundo año en Hogwarts, Harry se lo advirtió, pero él no le hizo caso, pero la amistad que les unía era mucho más fuerte que una simple promesa, Dobby murió a pesar de que Harry le hizo prometer que nunca más le volvería a tratar de salvar su vida. Aquella vez era diferente, porque las consecuencias fueron las peores para Harry, ver morir a su amigo Dobby en sus brazos, pero al menos murió como un elfo libre y con una sonrisa de haber salvado al mago. Otro motivo que le dio fuerzas al joven para seguir luchando, para que la muerte de aquellos que dieron su vida por él, no fueran en vano.
Sí, porque si se daba por vencido, ¿habría valido la pena tantos sacrificios? Por eso me encanta cuando Voldemort trata de desmotivarlos cuando lleva a Harry supuestamente muerto y Neville interviene, haciéndoles ver, que más pierden al dejarse vencer, porque sino todo habría sido en vano.