Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

Re: Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

Muchisimas gracias Zukita Yasha por tus comentarios y gracias a ti danielitaaxi, no te preocupes lo importante es que estás aquí. Y de verdad que sus palabras me motivan a seguir :)

 

Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

NUEVAMENTE AGRADEZCO SU APOYO A TOD@S QUE SERIA DE MI Y MI FIC SIN USTEDES :)
DOY LA BIENVENIDA A "IlEiN LoVe" Y MUCHAS GRACIAS POR SUS COMENTARIOS Y APOYARME.

QUISIERA PODER HACER MÁS LARGAS LAS CONTIS PERO TAMBIÉN TRABAJO Y NO PUEDO MUCHAS VECES PROLONGARLAS, PERO EN HONOR A "IlEiN LoVe" INTENTE EXTENDER UN POQUITO MÁS ESTA.

L@S DEJO CON EL FIC...


TE AMO A PESAR DE LA AMARGURA (SESSHxKAGxINU)
(Continuación del capítulo 5)


-¿Sesshoumaru que significa eso?-

-lo que oíste; vivirás aquí de ahora en adelante, hasta que yo lo diga, así que vete acostumbrando, por lo tanto me deberás un respeto... a Jaken...-

Los ojos de Jaken brillaban al imaginar lo que diría su amo.
(Mi señor es tan generoso conmigo, lo sabía me dará mi reconocimiento)

-a Jaken puedes llamarle como te venga en gana, no me interesa.-

Kagome estaba pasmada en su lugar, por su frente recorrió un sudor frío, veía al youkai impresionada, con los ojos abiertos de par en par, estaba estupefacta y su boca expresaba asombro. El miedo se apodero de todo su ser.
(Quedarme aquí hasta que el diga... no puede ser...)


…

Jaken reacciono a las palabras de su amo.

-¡Sesshoumaru-sama! Que dice, la humana no puede...-

La mirada penetrante del youkai lo decía todo.

(Sesshoumaru-sama)

Jaken se dejo caer al suelo extendido de brazos y pies, sus ojos eran como dos remolinos dando vueltas, en señal de no poder aceptarlo. Pero la que todavía no quería creerlo era Kagome.

-es una broma ¡verdad! jejeje, muy buena, casi me convenzo jajajaja.-

En el fondo sabía que el demonio no andaba con bromitas.

-Sesshoumaru yo se que me ayudaste y te debo mucho, prometo que intentare pagártelo de alguna forma, pero necesito regresar a mi época, lamento rechazar tu invitación para quedarme aquí, la cual es muy generosa, jejejeje.-

-ya te lo dije HUMANA, no tolerare que te quieras igualar con alguien que esta muy por encima de una débil criatura como tú.-

La puerta del castillo fue cerrada de un solo golpe, Kagome se asusto.

(¿Pero qué pasa?)

-si el amo bonito quiere que te quedes en el castillo, tendrás que obedecerle, a partir de hoy es tu amo también.-
(Aunque me duela aceptarlo, ¡Sesshoumaru-sama porque hace esto!)

Los ojos de Jaken ahora tenían la expresión de derramar un río de lágrimas y tenían una chispa de profunda tristeza, pero aún así había usado su báculo para “ahorrar tiempo” y cerrar la puerta principal.

-yo no puedo, abre la puerta Jaken, me iré por mi propia cuenta si “TÚ amo” no me quiere llevar- el "TÚ" lo recalco, dando a entender que no era posesión de nadie.

Kagome intento acercarse a la entrada y rogaba porque se abriera de nuevo la puerta, pero ante tan enorme trozo de madera era imposible salir.

(Si esto es una pesadilla ¡Ya quiero despertar!)

Estaba a punto de seguir su alegato para que la dejaran salir del castillo, pero reflexiono unos segundos, ante Sesshoumaru no era la actitud más conveniente, además podría hasta matarla.

-¡aaaaah! esta bien, ¿a dónde iré ahora Sesshoumaru-sama?-
(Ni creas que esto se quedará así, me largare en cuanto pueda y no volveré a verte… Prefiero estar con ese baka de Inuyasha.)

El youkai voltio a verla muy molesto, como “si hubiera leído sus pensamientos” (jejeje lo hizo.)

-Jaken llévala a la habitación riugan.-

-si amo bonit… ¿qué? ¿por qué a ese lugar?-

-has lo que te ordeno.- a estas alturas Sesshoumaru había perdido la paciencia y lo miro lascivamente.

-si, si, si lo que ordene señor.-
(porque tiene que tener la mejor habitación esta humana, pero me las pagara, yo me encargare de que su estancia aquí sea muy dolorosa.)

Sus ojos brillaron de pensar en todo lo que le haría a la miko.
Kagome de repente noto que por estar con lo de su estadía en el castillo, no había volteado a ver los ardedores, el majestuoso lugar era tan impresionante o más que su fachada.

Había espadas de muchos tipos adornando las paredes de lo que era la entrada principal, elegantes tapetes cubrían el recibidor, aunque era algo espantoso ver unas cuantas cabezas disecadas de demonios también, en ellas había pergaminos contando la historia de cómo fue vencido cada youkai.

(¡Que horror! Que excéntrico es Sesshoumaru.) una gotita resbalo por su frente.

Pero no todo era belleza y excentricidad en la morada de Sesshoumaru, también se sentía un escalofriante vacío, una sensación de soledad.

Jaken le guió a subir unas escaleras que la conducirían al siguiente nivel del castillo, había un largísimo pasillo y muchísimas habitaciones por todos lados, cada una con una puerta cerrada que impedía ver lo que había dentro.

Se dio cuenta de que el castillo parecía abandonado, en las paredes había telarañas, el pasillo era adornado también por armas de guerra, pero polvorientas y oxidadas muchas de ellas.

Caminaron en silencio hasta llegar a la habitación del final del pasillo, Jaken saco de entre sus ropajes un juego infinidad de llaves colgadas en un aro, eligió una y abrió la puerta de la habitación.

Kagome se quedo boquiabierta, si bien jamás se compararía con los cuartos de época, pero era hermoso ese lugar, estaba enorme, tenía lienzos con hermosas pinturas como decoración (algo que le extraño porque no sabía de muchos artistas en la era Sengoku) y había un enorme tapete verde oscuro en el piso.
Lo mejor era que todo estaba muy bien iluminado pues había una gran ventana con mirada al jardín.

(¡guau! Esto es maravilloso.)

-humana, este será tu lugar de descanso, así que aprovéchalo, el amo te esta teniendo muchas consideraciones.-

Dicho esto Jaken salió cerrando con agresividad la puerta y dejando sola a Kagome.

-bueno ya estoy aquí, por ahora estaré bien.- (supongo.)

El cansancio le llego subitamente, se acerco a un lugar donde había un acojinado tapete y unas mantas, supo de inmediato que ese era el lugar para dormir.

(bueno, nunca se comparara con mi deliciosa cama, pero es mejor que dormir en el suelo sin nada.)

Se recostó con cuidado pues cada movimiento que daba le dolía y la herida le estaba ardiendo, como queja a todo el ajetreo de ese día. Eso le recordó lo que deseaba olvidar.

(¡Inuyasha! que pensaras ahora que te diga lo que hizo Kikyou. Es ilógico, pero aún ahora después de que casi me dijiste que nunca ocupare el lugar de Kikyou, quiero estar contigo, no puedo evitarlo, pero contigo me siento protegida, segura, feliz.)

----------------

En la aldea donde vive la anciana Kaede todos los habitantes estaban reunidos fuera de su cabaña orando a sus dioses para el descanso eterno de una miko que muchas veces les ayudo, la noche parecía muy melancolica, no había salido la luna. Mientras tanto dentro de la cabaña había una infinita tristeza.

-Kagome, Kagome, Kagome, Kagome.-

Miroku intentaba mantener la compostura, a pesar de eso su cara estaba demacrada y triste, pero no podía dejarse caer pues Sango caería con él, la exterminadora, quien permanecía tirada junto al cuerpo de “Kagome” (la supuesta Kagome creada por la bruja Uranai) el cual estaba cubierto con una manta en el centro de la cabaña, lloraba en silencio fuera de si misma.

Ya no tenía fuerzas para llorar más fuerte y gritar, pues cuando Inuyasha llego con el cuerpo de la miko las había agotado todas. Miroku se acerco a ella en cuclillas y le tomo un hombro, dando a entender “puedes apoyarte en mi” Sango sintió la cálida mano sobre ella y se inclino de nuevo para abrazarse a él y sentir un sostén sobre el cual descansar su pena.

Shippou estaba en una esquina dormido, la impresión fue tan fuerte que no pudo mantenerse conciente, entre sueños repetía una y otra vez el nombre de la mujer que veía como madre.

-excelencia, me da tanta tristeza ver a Shippou en ese estado.-

-Sango es por eso que debemos ser fuertes, ella así lo hubiera querido, los cuatro debemos seguir buscando la Shikon no tama en su nombre.-

Esto ofusco a Sango “los cuatro” decirlo era como clavarle una estaca en el corazón, intempestivamente se levanto y comenzo a hablar en un tono muy alto, casi grintando.

-¿buscar la perla de Shikon? Por favor houshi-sama, sin Kagome como veremos los fragmentos.- apreto los puños con coraje. –además no quiero que estemos los cuatro, no deseo que Inuyasha nos ayude.-

-Sango.-

El monje con cara de suplica a que no volviera a tocar el tema.

-lo siento excelencia, pero es verdad, él es el culpable, por su causa sucedió esta desgracia. Además es un sin vergüenza, como se atrevió a dejar que ella...-

Los recuerdos regresaron…

***flash back***

​

Inuyasha sentía que no podría continuar, con debilidad se reincorporo, seguía con “Kagome” en brazos, no supo como pudo lograrlo pero pronto estuvo en la aldea donde sus amigos lo esperaban a él y a la miko.

(Kagome, Kagome… Ahora como voy a poder ver a Sango, Miroku, Shippou y Kaede, que voy a decirles... Y yo… ¿cómo voy a poder seguir?)

El hanyou caminaba tambaleandose aferrandose más que nunca al cuerpo de “Kagome” en eso escucho muchos gritos.

-¡lárgate! Cuantas veces tengo que repetirte que no queremos verte, Kagome regresara en cualquier momento con Inuyasha y si te encuentra aquí se pondrá mal.-

Kikyou seguía tan muda como desde hacía más de media hora que había llegado a la aldea y entrado a la cabaña, donde no encontró a su hermana Kaede ya que esta se había ido a traer plantas medicinales cerca de una aldea vecina.

Se topo con el monje, la exterminadora y el zorrito. Miroku fue quien le dijo a donde había ido Kaede por cortesía, cuando la sacerdotisa escucho esto solo se limito a sentarse cerca de la entrada.

Sango le hablo en tono de suplica.
-Por favor Kikyou, es que no sabes, Kagome no esta muy bien últimamente.-

En eso entro Inuyasha, tenía sus dorados ojos opacados por un color rojizo que los rodeaba, pero no era el de su transformación, no, era diferente, estaban tan tristes que de verlo daban ganas de llorar. Su expresión era de dolor, su cuerpo parecía una frágil hoja que a penas y podía permanecer en pie.

-¡Inuyasha!-

Todos le hablaron a coro, luego Sango se temió el encuentro que tanto quería evitar.

-¿y Kagome?- pregunto temerosa de que se empeorara su situación con Inuyasha y consigo misma, al ver a Kikyou.

El corazón de Inuyasha se volvió a quebrar al escuchar el nombre. Kikyou al verlo supo lo que estaba pasando, sus ojos se dilataron y tomo una expresión de aterramiento.

(No… no puede ser… a caso yo de verdad la…)

Inuyasha permanecía en silencio, agacho la cabeza y apretó los puños para tomar valor. Todos notaron que algo malo sucedió, Miroku fue el primero en preguntar.

-Inuyasha, dinos donde esta la señorita Kagome, ¿a caso no la encontraste?-

-contesta perro pulguiento, ¿dónde esta Kagome?- reprocho Shippou.

Inuyasha sabía que no podía darle más rodeos, y aunque le doliera, pese a sentir que si lo decía no sobreviviría, tenía que aceptarlo, debía decirlo irremediablemente.
-Kagome ha muerto.-

Lo dijo de tan fríamente como pudo, sin rodeos, sin vueltas ni tartamudear.

Kikyou no podía aceptar lo que escuchaba (De verdad lo hice, yo pensé que Sesshoumaru… pensé que… “la mate” he matado a esa sacerdotisa.) Estaba horrorizada, pero también se sentía delatada, debía guardar las apariencias.

Sango, Miroku y Shippou quedaron congelados, parecía una terrible equivocación sonora en sus oídos “Kagome ha muerto” ¡muerto! ¡muerto! ¡muerto! una y otra vez la misma palabra pasaba por sus mentes.

-Inuyasha.- dijo Kikyou casi en susurro, como queriendo esfumar su crimen.

Inuyasha reacciono a la voz.

-Kikyou- dijo en voz baja y la vio con sufrimiento, como sintiendo que con ella podía desahogarse, conteniendo muy en el fondo las lágrimas que deseaba volver a derramar.

Un fuerte grito inesperado interrumpio la escena.
¡aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah, no es cierto, no es verdad, mentiroso, mentiroso! Sango le reclamaba enojada, como sintiendo que mentía, desesperada por escuchar que no era verdad.

Shippou lo hubiera hecho de igual forma pero percibió un olor inconfundible.
-¡Kagomeeeeeeee!-

Corrió hacía afuera como si en ello se le fuera la vida, pensó que Kagome estaba viva y venía hacia ellos.

-Shippou ¡¡¡espera!!!- Inuyasha intento detenerlo pero era demasiado tarde, Sango y Miroku le siguieron.

Lo que contemplaron era muy diferente de lo que imaginaron, “Kagome” estaba en el suelo, fuera de la cabaña, completamente pálida y con ese tono característico en los muertos. Además era evidente que había muerto por una profunda herida en el pecho. No querían aceptarlo pero era verdad, ninguna palabra hubiera podido describir la forma en que se encontraban al contemplar a su amiga.

Una rabia infinita invadió a Shippou y Sango, imprevistamente entraron a la cabaña.

-¡¡¡asesinooooo!!!- grito Shippou a Inuyasha con lágrimas corriendo por su cara, dolor y furia.

Sango le reprocho. –Inuyasha bien sabes que si tu… si tu…- no pudo continuar, en el fondo sabía que el amor que deseaba que Inuyasha le tuviera a Kagome no hubiera podido existir, debido a su amor por Kikyou.
-para mi eres culpable.- eso fue lo único que externo, las lágrimas recorrían su rostro aunque intentaba contenerlas.

Miroku aún contemplaba la escena atónito, sinceramente tenía ganas de llorar pero sabía que no era prudente, lo más duro venía con Sango y Shippou.

Con dolor tomo una mano de “Kagome”
(Señorita Kagome…) ni sus pensamientos podía expresar su dolor, hizo una señal con su mano y un rezo, dándole el descanso eterno.

Los gritos de reproche del pequeño kitsune lo regresaron a su realidad, entro a la cabaña, dejando a “Kagome” con las manos entrelazadas.

-basta Shippou, nada remediaremos ya.-

Esta dura respuesta, pudo mucho en Shippou, salió llorando a su encuentro con “Kagome” y se lanzo sobre ella a desahogarse abiertamente.

-Miroku, Sango yo…- de Inuyasha no salía ni una palabra.

Kikyou salió de la cabaña sin proferir un solo sonido.

Miroku vio a Inuyasha y pudo comprender el dolor tan inmenso que estaba pasando.
(Inuyasha)

Kikyou se topo con el cuerpo de “Kagome”, se acerco al mismo sintiéndose asesina, como deseando que no fuera Kagome la que estuviera ahí.

Vio al Kitsune sobre sus piernas, llorando amargamente y repitiendo su nombre, lo primero en lo que se fijo fue en su rostro, no había duda era ella, pero…

(No esta, la herida en su vientre no esta)

Pensó que su vista la engañaba, volvió a mirar.

(Este es un trabajo muy bien hecho, pero definitivamente ella no es Kagome, es otra persona.)

La miro detenidamente, en primera ella se la topo con esa extraña vestimenta que siempre usaba, pero esta “Kagome” traía un kimono, cosa que quizás por la impresión ni el mismo Inuyasha había reparado.

En segunda la herida estaba en su pecho, eso era imposible, si hubiera muerto herida por alguien más, aún así debería tener la herida en su vientre también.

Un pensamiento cruzo su mente, solo había visto una sola persona que era capaz de algo así.

(La bruja, a caso ella…)

Inuyasha seguía intentando decir algo, pero como podría si se estaba quebrando y su voz no emitía un solo ruido. El hanyou no resistió más, salio corriendo de la cabaña, dio un vistazo hacía donde estaba Kagome, se topo con Kikyou quien estaba parada y lo contemplo unos momentos.

Hubo una mirada suplicante de su parte, casi diciéndole que le dijera que eso era un mal sueño, la sacerdotisa la noto, luego de esta mirada Inuyasha comenzo a correr para internarse en el bosque.

-¡¡¡Inuyasha!!!- recibió un grito por parte de la miko que lo detuvo un momento.

-tengo que decirte algo.-

Pero casi al instante pensó en un “que pasaría si en lugar de ella estuviera yo a su lado, sanando su corazón como tanto he querido” aunque fuera un solo día hasta que apareciera o una semana o más, dependiendo cuando la miko regresara, aunque sabía que eso sería pronto. Enmudecio ante la verdad.

-¿a dónde iras?- pregunto serenamente.

Inuyasha le dedico otra mirada que indicaba su deseo de estar solo, no dijo más y se perdió entre los árboles.

***fin flash back***

​

La anciana Kaede lloraba solitaria cerca de su cabaña.
(Kagome, me ayudaste a superar la muerte de mi hermana que me a dolido tanto con tu presencia, ahora que te has marchado dejas un profundo dolor de igual magnitud en mi ser.)

----------------

Los días pasaron, desde aquel trágico momento para los que amaban a Kagome, había transcurrido 13 días.

Al otro día de la supuesta muerte de Kagome enterraron su cuerpo e hicieron oración todo ese día en su honor. Inuyasha tuvo que encontrar el valor para seguir, lo hizo por Kagome, sabía que ella así lo hubiera querido, pero lo peor no había terminado, tenía que darle la noticia a su familia.

Se armo de valor y llegados siete días atravesó el pozo y se los dijo lo mejor que pudo ¿pero como se podían dar ese tipo de noticias?

Su madre se desmayo al saberlo, todo fue sufrimiento desde ese momento para ella, su hermano y el abuelo. Luego para sus amigas y los que la apreciaban (incluyendo a Hoyou) el abuelo comunico que su nieta no asistiría más a la escuela ya que había muerto por una “enfermedad” (ese abuelo con sus enfermedades hasta el final.)


En el castillo de Sesshoumaru las cosas comenzaron a cambiar, Kagome a la semana ya se sentia muy bien respecto a su herida, debido a la ayuda de las plantas medicinales que le ofrecio Sesshoumaru. Se dedico a limpiar el lugar hasta el último rincón (excepto la habitación de Sesshoumaru a la que no podía entrar y un cuarto en la parte más alta del castillo que era todo un misterio y le quedo prohibido siquiera acercarse a el.)

(Inuyasha, tan poco te importo que ni siquiera me buscaras.)

-aaaaaah.- dio un suspiro recordando tantos días intentando escapar y esperando muy para sus adentros que Inuyasha la rescatara, pero ninguna de las dos cosas sucedió. La primera por la barrera que tenía Sesshoumaru en los alrededores del castillo, la segunda por obvias razones que ella no conoce.

Además estaba aburrida de lavar su uniforme y volver a usarlo, en su casa tenía varios de ellos, el que tenía estaba muy desgastado y roto de su blusa por aquella daga que le fue clavada y por la flecha que rozo su brazo.

Lo peor de todo es que Sesshoumaru nunca estaba, siempre lo veía apresurado, pensando en no se que y con un semblante de preocupación.

Jaken era su única compañía, pero tampoco lo entendía, no le hablaba y siempre se hacía cosas a él mismo muy raras (ella no sabía que en realidad eran para ella pero no le funcionaban.)

Mientras pensaba en todo estoy Jaken le preparaba otra de sus acostumbradas y fallidas trampas, con la esperanza de que fuera la acertada.

(jajaja, esta vez si va a funcionar) estaba frustrado por no poder acompañar a su amo en busca de Rin, por tener que cuidar a la “fea humana” como el la bautizo.

Kagome preparaba la comida.
(No se porque me esmero tanto, Sesshoumaru no me trae demasiados víveres, además no se para que me molesto en hacer para los tres, Jaken devora lo que preparo, pero el jamás lo ha probado. ¿De verdad comerá monstruos y humanos?)
Su imaginación voló, visualizo a Sesshoumaru con sus ojos rojos, su aspecto de youkai transformado en esa bestia que recordaba bien y saboreándose un aldeano.

(¡Que horror!)

Termino de preparar la comida rápidamente, debido a que diario cocinaba (lo que la época le permitía) se estaba haciendo una experta en poco tiempo.

-¡listo!-

Jaken entro sigilosamente al lugar que Kagome adapto como cocina, vio la comida y sus ojos tomaron un maldoso brillo.

(jajajaja, ahora si fea humana, sabrás quien es el poderoso Jaken)

En una pequeña olla (de las que Kagome tuvo que rogar que Sesshoumaru trajera) introdujo una planta amargosa y muuuuy picante a la lengua.

Los rayos del sol se ocultaban y Sesshoumaru regreso.

-bienvenido Sesshoumaru-sama-

Kagome se sorprendió de si misma, en tan pocos días y ya se había acostumbrado a llamarlo de esa forma de manera tan natural.

Como siempre el youkai no contesto, pero ella había aprendido a entender un poco de su “aparente” frío comportamiento.

Él la miro secamente y le entrego un costal amarrado que traía consigo.

-tómalo son algunas cosas para ti.- eso fue lo más cortes que pudo decir.

Kagome asintió y le dedico una sonrisa sincera, como le molestaba al demonio, pero siempre era lo mismo, ella le tenía esa sonrisa para todo. Dicho esto tomo el mismo rumbo, ir a encerrarse a su cuarto.

Kagome subió a su habitación, abrió el costal impaciente y vio su contenido, lo primero en sacar fue un precioso kimono.

-¡que kawaii! Este kimono es hermoso.- (después de todo Sesshoumaru noto lo maltratado de mi uniforme.)

Luego saco más cosas, había más kimonos, en total eran dieciséis, además traía adornos para el cabello y sandalias para calzar.

(Ahora entiendo, con razón pesaba ese costal, todo esta muy bonito, muy de está época, pero lindo de verdad.)

Una emoción y simpatía por Sesshoumaru le invadió, corrió a su cuarto a tocar.

-toc, toc, toc, toc.-

Parecía que se desvivía por que le abriera, el youkai se enojo por la insistencia, el único que podía y tenía derecho de tocar era Jaken, pensó que era él, abrió la puerta enfurecido.

-Jaken si vuelves a hacer eso te…- sus ojos estaban rojos como si se fuera a transformar, Kagome se asusto recordando lo que imagino cuando preparaba la comida, pero también pensó en el regalo que le había hecho y le volvió la calma.

-gomenasai Sesshoumaru-sama, de verdad lo siento.- se inclino varias veces ofreciendo disculpas. Pero Sesshoumaru no esperaba que fuera ella, su rostro regreso a la normalidad con la misma frialdad acostumbrada.

-¿Qué quieres humana?-

-eee…yo…pues… quería agradecerle los kimonos que me a traido, de verdad que son muy bonitos y…-

-¿y para decirme una tontería como esa me importunas?-

-lo siento, es que como muestra de agradecimiento quería ofrecerle la cena de hoy.- Kagome le dedico otra de sus dulces sonrisas con sus ojos cerrados en señal de gusto. ^^

Luego volvió a ofrecer disculpas al ver la cara tan indiferente de Sesshoumaru.

-lo lamento, no quise…-

-esta bien, bajare en un rato.- el youkai le lanzo una mirada furtiva.

-¡arigatou Sesshoumaru-sama!-

Kagome se sintió contenta por que Sesshoumaru hubiera aceptado.

(Después de todo no es tan frío.)

Corrió a su habitación a prepararse para la cena (no quería ir en las mismas fachas) luego de estar lista bajo a tenerlo todo en orden para cuando Sesshoumaru bajara.

Después de un rato como Sesshoumaru lo prometió, bajo al comedor, Kagome le explico dos días atrás que necesitaba una mesita de té para comer en paz sus alimentos, aunque el no entendía mucho de eso, ni el porque hacía caso a las peticiones insolentes de la miko, refunfuñando fue a buscar un aldeano que se la facilitara y amenazándolo de muerte, se lo entrego rápidamente.

Kagome escucho los pasos del youkai, su corazón se acelero, estaba nerviosa porque sería la primera vez que probara sus alimentos. Jaken ya estaba listo para cenar.

(Ahora si fea humana, cuando quieras servirme de esa comida te diré que yo no quiero, más que de la otra y tu…)
-Mua ja ja ja- estaba burlesco, pero algo le llamo la atención.

-humana ¿y ese tazón para quien es? Nada más somos dos y veo tres.-

Kagome no contestaba, seguía adornando el lugar, había cortado unas flores y las coloco en una taza en el centro de la mesa.
-lalalalala-

Jaken se molesto porque no contestaba.
-¡oye Kagome te ordeno que me digas que estas haciendo ¡ahora!- solo le llamaba por su nombre cuando quería imponer más autoridad.

Fue entonces que Sesshoumaru entro.
-¡señor Sesshoumaru que bueno que nos visita! Esta humana no se que hace, pero se ha vuelto loca.- señalo a Kagome efusivo.

-cállate Jaken.-

Kagome le extendió la mano indicando que se sentara y le dio una pequeña reverencia.
-gracias por aceptar mi invitación Sesshoumaru-sama, le sirvo en un momento.-

-Sessh… Sesshoumaru-sama, no sabía que iba a cenar con nosotros.-

Sesshoumaru voltio a ver a Kagome, nunca se espero verla así, lucía un Kimono azul marino con grabados de abanicos amarillos oscuro el cual se pegaba a su cuerpo, acentuando su esbelta figura. Su cabello estaba recogido de media coleta con un prendedor de flor de loto y noto que tenía un tono rosado en sus mejillas seguramente porque el llego y estaba apenada.

La contemplo embobado, para ser humana era hermosa, además lo que más le agradaba era el aroma que desprendía, realmente embriagador. Kagome se sonrojo aún más por la mirada tan directa a su persona.

-pasa algo.- pregunto tímidamente, Sesshoumaru se limito a acercarse a la mesita y colocarse como era debido para ser atendido.

Ella acerco a una pequeña cazuela con un delicioso guiso, nerviosa.
-este es mi platillo es mi especialidad, espero le guste.-

Jaken casi se infarta, era el mismo guisado al que le había agregado su planta “especial”

(Sesshoumaru-sama… nooooooooooooooooooooooo)

Kagome le sirvió inocentemente y coloco la cazuela en otra parte de la mesa.

-aquí lo dejo por si desea que le sirva más.-

Luego se dispuso a servir el platillo que faltaba.

(Ahora que hago, que hago, no amo bonito no lo debe comer.)

Sin aviso tomo el tazón de Sesshoumaru y trago su contenido como si fuera agua, lo mismo hizo con la cazuela, no dio tiempo ni de que reaccionara el youkai o Kagome.

-Jaken, no… no sabía que tenías tanta hambre.- la miko estaba sorprendida.

Pero al que no le hizo gracia fue a Sesshoumaru, una pequeña vena saltada se formo en su frente y luego Jaken fue la víctima. Su cabeza quedo adornada con tres chipotes.

Pero ni esto le dolió más que el ardor que sintió, su lengua le picaba, la saliva parecía no ayudar y conforme la pasaba toda la zona del tubo digestivo le calaba. Sintió que se le iba el aire, su planta resulto muy efectiva, su tono verde cambio a rojizo en la cabeza. Y salió corriendo en busca de agua, el lago de afuera del castillo quizás calmaría su agonía.

Kagome se quedo extrañada con una gotita de sudor en la frente y una risa de nerviosismo, Sesshoumaru recupero la compostura, tenía los ojos cerrados y los brazos cruzados en señal de molestia por que Jaken se comió su alimento.

-no se preocupe Sesshoumaru-sama, tengo más aparte, es que era una comida que me gusta mucho.-

Fue por su reserva y sirvió en los tres platos, pero Jaken no volvía.

-creo que tal vez no regrese, será mejor que vaya a buscarlo para ver que pasó.-

-no- Sesshoumaru hablo ordenando.
-si no quiere venir no tenemos porque esperarlo, cenemos ya.-

Comenzaron a cenar, la cara de Sesshoumaru cambio un poco al probar los alimentos, esto asusto a Kagome, pues parecía desconcertado.

-¿no sabe bien? Jejeje.- parloteo aún más nerviosa que antes.

En cualquier momento Sesshoumaru podía pararse repudiando sus alimentos, o peor aún dignarse a hablar y decirle que sabía horrible.

-esta bueno.- contesto el youkai secamente y siguió comiendo, en el fondo le gusto demasiado.

Kagome suspiro aliviada para sus adentros, aunque lo expreso un poco en su cara. Había un silencio incomodo que no encontraba como romper, lo primero que atino a pensar fue lo que dijo.

-¿cuándo podré irme? Mi familia debe estar preocupada porque no he ido a verlos, mi mamá esta angustiada, estoy segura.-

Sesshoumaru la vio con la vio directo a los ojos.

-hasta que yo diga.-

Los dorados ojos del youkai la cautivaron, eran tan hermosos, no era para menos, Sesshoumaru le resultaba muy atractivo. El youkai noto que ella lo veía de igual forma, directamente, sus ojos chocolate se clavaron unos momentos, ambos se perdieron esos segundos en verse el uno al otro. Pero de inmediato reaccionaron.

Sesshoumaru voltio hacía su comida, Kagome desvió la mirada igualmente a su tazón, no podía evitarlo, no paraba de tener una y otra vez ese tono rosado como los pétalos de cerezo. Hubo otro silencio abrumador que la miko insistia en romper.

Se le ocurrio externar algo que desde hace mucho se preguntaba.

-Sesshoumaru-sama… ¿puedo saber que paso con Rin? Ella antes lo acompañaba pero desde que estoy con usted no la he visto y…-

Los ojos de Sesshoumaru se volvieron un mar de ira, sus venas se saltaron, el cuerpo parecía imponerse como si fuera atacar. Kagome no pudo evitar mostrar temor, pero no propio, sino por Rin, de inmediato el youkai noto eso, el tono de sus mejillas había desaparecido, estaba un poco pálida, la sonrisa de sus labios se fue y sus dulces ojos se transformaron en unos ojos preocupados. Se calmo inmediatamente para no asustarla más.

-ciento haber preguntado algo que no debí.- intento remediar lo sucedido, noto que algo malo había pasado por la expresión de Sesshoumaru, quería que se lo contara pero no se animo a presionar con algo que no debía.

Sesshoumaru se quedo con el pensamiento de Rin clavado en la mente, la había buscado tanto, durante 12 días estuvo tras ella como si en eso se fuera todo lo que era, aún así no la logro hallar, su olor desapareció, pensaba en la promesa de Naraku, no se había aparecido, ni siquiera para espiarlo como decía, pues no había visto u olido un solo sirviente, insecto o extensión.

Después de terminar su cena se retiro sin decir más a su habitación.

(Sesshoumaru, quisiera saber que es lo que te pasa, seguro que a Rin le sucedió algo verdad, espero que no sea nada grave… Un momento… Se me olvidaba ¿qué fue de Jaken?)

-------------------

Sesshoumaru estaba en su cuarto, sentado sobre en un tapete guinda donde dormía y recargado en la pared. Pensaba y pensaba en todo lo sucedido a raíz del secuestro de Rin.

(No debí descuidarla, si no fuera por eso no tendría que retener a Kagome, tampoco tener tratos con ella.)

Voltio a ver a su alrededor.

(Hasta antes de hace 13 días, tenía muchisimo tiempo que ni siquiera me había vuelto a parar en este lugar, le dije a Jaken que volviera porque pensaba que Rin tal vez estaría mal y me la tendría que traer a un lugar seguro. Pero a la que me toco traer es a esa humana, estaba obligado, o sino el inútil de Inuyasha la encontraría fácilmente, el jamás vendría aquí pues fue el lugar donde vivió mi padre y mi madre.)

Luego volvió a su pendiente más fuerte, a Rin.

(No me queda otra opción, pero en cuanto tenga a Rin de vuelta destrozare a Naraku con mis propias manos, por ahora solo intentare hacer que me deje ver por ese extraño remolino que se encuentre bien.)

Una sonrisa instintiva se formo en su rostro.

(Haría lo que fuera por rescatar a Rin, ya lo decidí, lo siento por esa humana, pero la tendré hasta que se requiera y si fuese necesario la aniquilare.) *perverso*


CONTINUARA…

 

Re: Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

gracias otakuhime por tus comentarios, bueno espero mañana seguir con fic, pero sino pasado mañana ya tengo continuación. Agradezco mucho tu apoyo siempre al pie con tus comentarios. :)

sobre sesshy y Kagome, esperan muchas sorpresas, pero veremos más adelante, porque también esta "Inuyasha" pero bueno, a ver como surjen las cosas, el tiempo lo dira. ;)

 

Re: Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

Muchisimas gracias por el apoyo a tod@s, a Zukita Yasha que es tan linda y también a otra amable personita, Turquoise_Kagome, no te preocupes, la escuela va primero y hay que hecharle muchas ganas ;)
Lo que se agradece es todo el cariño de su parte y sus comentarios, yo se que muchas chicas que postan tienen deberes y no se preocupen si no pueden postear a veces, pongo conti en un ratito, esta decidido :)

 

Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

Hola de nuevo (espero que esto no se tome como spam) quería dejar limpia la conti y creo que no rompo las reglas, a partir de este capitulo pondre entre parentesis en negritas al final, las palabras que pudieran parecer raras por ser japonesas, si alguna en español no saben que significa comuniquenme y con gusto la traduzco ;) l@s dejo con el fic.

TE AMO A PESAR DE LA AMARGURA (SESSHxKAGxINU)

(CAPITULO 6)

(No me queda otra opción, pero en cuanto tenga a Rin de vuelta aniquilare a Naraku con mis propias manos, por ahora solo intentare hacer que me deje ver por ese extraño remolino que se encuentre bien.)

Una sonrisa instintiva se formo en su rostro.

(Haría lo que fuera por rescatar a Rin, ya lo decidí, lo siento por esa humana, pero la tendré hasta que se requiera y si fuese necesario la aniquilare.) *perverso*


…


Sango seguía enojadísima por la petición de Inuyasha.

-¿estas loco? Eres un sin vergüenza, como te atreves a sugerir eso.- lo vio enardecida, de sus ojos parecían salir llamas de coraje.

-Pero Sango analízalo, es nuestra mejor opción.- esto último le dolió decirlo, si bien Kikyou era muy querida por él, pero el lugar de Kagome era irremplazable.

Shippou le gruñía a la sacerdotisa, Miroku suspiro intentando comprender.
-¡aaaah! Debo admitir que Inuyasha tiene razón, Sango, nos sería muy difícil reunir los fragmentos sin alguien que los viera.-

-pe…pero…su excelencia.- Sango quiso objetar, pero era verdad, tenían que seguir adelante.

Kikyou no dijo nada, sabía que no era prudente, esperaba la decisión final de todos.

-esta bien, entonces que venga con nosotros.- la bella exterminadora de cabellos cafés, agacho la cabeza resignada.

En agradecimiento Kikyou les dedico una cálida sonrisa; así comenzaban de nuevo su búsqueda de la perla de Shikon pero sobre todo de “Naraku” la muerte de Kagome era muy reciente y deseaban encontrarlo para destruirlo con todas las fuerzas que poseían, o las que tuvieran que sacar, después de todo era el responsable real de su fallecimiento.

(Kagome, me pregunto si te habrás marchado a tu época, ya han pasado tantos días, tal vez no querrás regresar, temiendo por tu vida. Lo siento, siento haber ocupado tu lugar, pero creo que necesitaba un poco de alegría en mi reciente vida, tan solo un poco, ¿será pecado desearlo tanto y cumplirlo? Hasta hace unos días me dolía el corazón de una forma tan dura que sentía no iba a poder seguir, pero ahora soy feliz tan solo con el hecho de estar aún lado de mi querido Inuyasha, perdóname.) En el fondo se sentía culpable del sufrimiento de los demás y de que Kagome no hubiera regresado, se reprochaba su actitud, pero a la vez, quería pensar un momento solo en ella, en una simple mujer con condición de sacerdotisa que acompañaría al hanyou que amaba.

------------------

Ese día le había extrañado a Kagome que Sesshoumaru no saliera del castillo como siempre lo hacía. A penas amanecía y no lo encontraba, pero ahora permanecía encerrado en su habitación.

Fue a preparar el desayuno, gustosa de que sería con esta la segunda vez que pudiera compartir los alimentos con él. Hacía ese almuerzo con una partícular alegría, cuidando de no ensuciarse su lindo kimono hecho de tela satín en tono rosa pálido y grabados de flores rojas. En su cabello había colocado dos palitos a tono con su kimono en color rosa fuerte, amarrando su cabello azabache en un chongo. Ni siquiera se acordaba de todo lo que había fuera del castillo y de su vida, estaba distraída en su labor.

Cuando termino se dirigió al cuarto de Sesshoumaru, el cual estaba en el segundo nivel pero hasta la otra orilla del suyo, en el pasillo se topo con él.

-¡buenos días Sesshoumaru-sama! El desayuno esta listo.-

El youkai siguió de largo sin voltear a verla siquiera, camino hasta bajar las escaleras que lo llevarían al primer nivel, esto enojo a Kagome.

(¡Baka! Retiro lo bueno que haya dicho de él, es desagradable, creído, orgulloso, un cretino.)

Pero diciendo esto siguió sus pasos.

-¿lo sirvo ya?- pregunto tímidamente, como no haciendo caso al recien desplante.

Sesshoumaru se dispuso a salir al jardín, esto fue el colmo, la paciencia de Kagome llego a su límite.

(¿De que sirvieron mis buenos modales? ¿De que sirvió mi paciencia? ¿De que valía mi dulce y encantador comportamiento? ) Estaba realmente enfurecida, cuando lo estaba decia incoherencias. Soportaba tener que aguantar el encierro, la molestia de seguir las ordenes de Sesshoumaru como si fuera su esclava, pero lo que no toleraba ya, era esa altanería y que la ignorara peor que a un sirviente.

-¡¡¡BASTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!-

grito lo más fuerte que pudo, el castillo retumbo un eco sonoro con su enorme queja, apretaba sus puños cerca de su estomago, unos centímetros más adelante, estaba llena de coraje, sus ojos estaban encendidos, sus negros cabellos crispados y su boca decía injurias en tono bajo, las cuales Sesshoumaru con su oído agudo alcanzaba a entender. Luego no se pudo contener.

-ya estoy harta, hartaaaaaa, te exijo que me saques de esta pocilga, no te quiero ver, no te volveré a molestar, es más a lo mejor no regreso a esta época, pero déjame ir, quiero que me dejes en paaaaaaaaaaaaaaz.-

Sesshoumaru solo volteo medio cuerpo para verla fríamente.

-¿ya terminaste?-

Esa contestación no hizo que su mal humor disminuyera.

-pareces un ¡animal!- lo decía sin notar que en realidad Sesshoumaru era una bestia.

-eres un orgulloso, un prepotente, insoportable, altanero, abusivo…- las demás frases eran tan fuertes que se las guardo en la boca antes de que salieran.

Sesshoumaru ya estaba cansado de tanto alegato, pero no era de los que caían fáciles en los juegos de “una niña”, pensaba. Se volvió a girar para salir por la puerta principal.

-eres peor que tu hermano.-

Fue como una candela que se encendio instantáneamente, se agoto su tolerancia. De pronto se acerco a ella, la tomo de ambas muñecas y la pego contra la primer pared que tuvo enfrente, subiendo sus manos y aprisionandolas, ambos quedaron con sus cuerpos casi pegados, él la miraba lleno de furia directamente a los ojos y le hablo con un tono de advertencia.

-si vuelves a decir eso, te juro que te haré trizas.- crujió sus colmillos amenazante.

Sus respiraciones eran agitadas, la de él por la rabia, la de ella por el miedo.

-entonces…- Kagome hablo en tono bajo, casi suplicante.

-entonces, ¿por qué no me dejas ir? No nos soportamos, déjame ir.- se lo dijo dando a entender que era lo indicado.

Pero por Sesshoumaru atravesaba la frase comparativa con su medio hermano, además de sus deseos de volver a ver a Rin.

-no- exclamo tajante. -tienes que estar aquí por un tiempo, luego te marcharas, no soy de muchas palabras, si eso es lo que te molesta.- luego su descompuesto semblante cambio a uno burlesco, repentinamente acerco su rostro al de ella.

-Se…Sess…Sesshoumaru ¿qué vas a hacer?- sintió su respiración tan cerca como la propia, se estremeció unos instantes, pero no de gusto, sino de temor a que algo malo quisiera hacerle.

(No, no creo que sea un hentai.) Pero contrario a lo que pensaba, él se acerco a susurrarle a su oído izquierdo con el mismo acento de burla que mantenía en el rostro.

-no volveré a comer contigo si eso quieres saber, tu comida es una molestia.-

Eso fue lo único que dijo, aunque sabía que mentía, la soltó de inmediato y salio del castillo tan rápido que no había podido dejar reaccionar a la miko, le dolieron sus palabras. “Tu comida es una molestia” eso era peor que sus amenazas.

(Si eso pensaba, porque la comió anoche.) la miko quedo afectada por su última frase.

------------------

Shippou, Miroku, Sango, Inuyasha y Kikyou se detuvieron a descansar un rato, Inuyasha se alejo con Kikyou del grupo internandose un poco en un bosque en el que estaban.

-se lo dije excelencia, el iba a correr a los brazos de Kikyou, a veces creo que le alegra que Kagome…- no pudo terminar, le lastimaba pensar en ello.

-la verdad no se que decir Sango, no creía que tan pronto se resignara.-

Shippou permanecía mudo, era tan raro verlo así, pero desde la muerte de Kagome no había dicho una sola palabra, excepto por los gruñidos que de vez en cuando le lanzaba a Kikyou.

Mientras tanto Inuyasha conversaba con la sacerdotisa.

-¿para qué querías que viniéramos acá Kikyou?- la vio con esa expresión ahora común en él, triste y derrotada.

Kikyou lo observo y le hablo con franqueza. –porque se que casi no te has desahogado y frente a ellos finges ser fuerte, aunque yo se muy bien que no es así.-

Inuyasha la vio con ojos agradecidos por sus palabras, aunque aún así, frente a ella no podría sacar el dolor que sentía plenamente. –gracias Kikyou, pero no hacía falta.-

Los ojos de Kikyou lo veían con compasión y una fuerte determinación. –te he visto muy mal Inuyasha, por eso quiero preguntarte algo.- hizo una breve pausa y continuo hablando. –sinceramente dime, ¿qué significaba Kagome para ti?-

Esta pregunto helo a Inuyasha, se desconcerto por ella y vinieron a su mente las palabras que menciono el día de la partida de “Kagome” (su supuesta partida) que ni el mismo entendió porque dijo.

***flash back***​

-Kagome, te amo. No me dejes solo por favor.-

Tenía aprisionada a “Kagome” contra su pecho, y su rostro estaba pegado al de ella, le beso la frente con dolor y no pudo contenerse más. Unas lágrimas resbalaron por sus mejillas cayendo en la cara de “Kagome”

-perdóname Kagome, soy un tonto, perdóname.-

La abrazo queriendo estrujarla hasta fundirse con ella, pero no podía remediar lo sucedido. Sentía que su pecho se partía, que su corazón le dolía hasta matarlo en vida, no podía parar ese tormento, quería detenerlo, pero era como si fuera apuñalado una y otra vez.

***fin flash back***​

-¿por qué preguntas eso?- le dijo secamente, pero su mirada lo delataba.

La sacerdotisa se dio cuenta de la respuesta, quería imaginar que era mentira, pero algo en su latiente corazón se lo afirmaba.

-¿entonces todavía siguen en pie las palabras que me dijiste el día que me encontraste cerca del pozo de los huesos?-

Inuyasha deseba decir que “si”, pero se preguntaba porque en su dolido corazón solo había espacio para un “no”. Aún así permaneció callado, aunque con su silencio lo decía todo.

La mirada de Kikyou se torno triste. Ya veo.- miro al cielo con unos ojos apagados. (Inuyasha; deseaba recuperar tan solo unos instantes de todo lo que perdimos aquel día que caímos en la trampa de Naraku, no importaba un puñado de mentiras, de pecado.) No pudo ni siquiera pensar para si misma lo demás, le dolía profundamente el solo plantearselo. –Tanto la amas.- dijo en un susurro melancólico, pero perceptible por Inuyasha.

Esa sacerdotisa que parecía tan dura a todo, en el fondo tenía un buen corazón, pero uno muy lastimado, aún después de tener uno nuevo que sabía no le debía pertenecer, seguía teniendo el mismo efecto. “Tonta” se reprocho, tonta, frívola y egoísta.

(Nunca debí volver a la vida, fue malo de mi parte haber dañado a Kagome por esa causa, al final reconozco que ella no haría lo mismo que yo, aún teniendo los sentimientos que tiene por Inuyasha.)

Inuyasha estaba estupefacto con lo que le dijo, por eso no había dicho palabra y no pensaba mencionarla, estaba confundido con sus propios sentimientos.

Kikyou retorno esa mirada cálida y amorosa.
-¡ve a buscarla!- le dijo decida.

Pero el hanyou no entendia.
-¿buscarla? ¿a quién?-


-a...-

no pudo completar la frase, Inuyasha estaba a la defensiva corriendo tras unos insectos de Naraku que aparecieron repentinamente.

(Inuyasha, a Kagome... ella esta viva.) completo las palabras a proferir, en su mente. Luego siguió a Inuyasha para cumplir su principal objetivo, "destruir al enemigo".
Sus amigos no tardaron en darles alcance, también habían visto los saimyoushou (insectos de Naraku) y no dejarían ir la oportunidad de encontrarlo.

Mientras esto sucedía, en otra parte cercana a ese bosque se encontraba un guapo youkai de ojos como la miel, de fino cabello plateado, marcas moradas que lo distinguian y su porte tan frío y abrumador, pero a la vez encantador. Estaba hablando con la nueva extensión de Naraku, con Banguetsi.

-como le decia Sesshoumaru, me mando a darle un pequeño regalo.- diciendo esto, le mostraba ese remolino por el que podía ver a otras partes (cumplia funciones parecidas al espejo de Kanna)
y ahí estaba, Rin parecía bien, comia algunos manjares que tenía al lado. Sesshoumaru no decia nada, la contemplo aliviado y feliz pero solo para si mismo, pues sus ojos eran de indiferencia.

-debido a que a seguido todo al pie de la letra, también le dará otro regalito.-

Entonces apareció otro remolino pero donde se encontraba Rin, al principio la niña se asusto, pero al ver lo que había del otro lado abrio los ojos más de lo normal y en ellos aparecío un brillo de felicidad inmensa. (¡que generoso es Naraku! ¿no creen? esta bien, por favor no me maten. :( )

-¡¡¡Sesshoumaru-sama!!!- le grito la niña muy contenta, se acerco al remolino y lo saludaba. El escuchar su dulce voz lo alegro.

-Señor Sesshoumaru, no se preocupe por mí, estoy bien, estaré esperando hasta que venga a rescatarme.- se lo dijo moviendo la mano de un lado a otro en señal de saludo y dandole una gran sonrisa con esos singulares ojos de alegría. ^ ^

Sesshoumaru se acerco rapidamente al remolino con la esperanza de atravesarlo y poder llegar a ella, pero en lugar de eso fue como si atravesara la neblina pues paso al otro lado y la imagen desapareció.

Banguetsi le hablo quitado de la pena. -mmm, pense que querría ver más a la niña, pero veo que a deshecho mi psikis- (asi le llama a su poder del remolino) -bueno, entonces me retiro.- dicho esto se esfumo en medio de una nube negra y detrás de él iban los saimyoushou, algunos lentos eran los seguidos por el grupo de Inuyasha, quienes llegaron justo para presenciar la partida.

-¿qué era eso?- pregunto Sango mientras con si hiraikotsu acababa algunos insectos.

Miroku también estaba intrigado. -no lo se Sango, pero no era Naraku, seguramente era alguna de sus extensiones.-

Inuyasha se extraño de ver a su medio hermano.
-¿por qué estaba ese monstruo contigo Sesshoumaru?- (en realidad no se de donde decía eso, Banguetsi era muy bien parecido. :) )

Sesshoumaru se irrito con el tono de mando de Inuyasha, aunque se sorprendio de verlo tan decaído.
-¡parece que te hubiera chupado la tierra y luego vuelto a escupir! jm jm jm jm.- le dijo con una notoria burla, luego de eso voltió a ver a Kikyou, quien lo veía desde que llegaron fijamente, como deseando obtener alguna respuesta a algo. Sesshoumaru bien sabía lo que ella seguramente estaba pensando.

Kikyou se animo a preguntar hablando de tal forma que solo él y ella se entenderían.
-¿y que sucedio aquel día?- pregunto haciendose la que tenía solo mera curiosidad.

-ja, ahora si te preocupa, después de tu "gran intento de desaparecer su rastro"- le dijo irónicamente el youkai.

Ella correspondio la ironía, en el fondo lo que más deseaba era saber lo que había sido de Kagome.
-la verdad, es solo una simple curiosidad.-

-la curiosidad "mato al gato", no has escuchado ese viejo dicho.- la vio friamente y ella le sostuvo otra helada mirada.

Todos estaban O.o desconcertados por al actitud tan rara que tenían, pero no decían nada.

Sesshoumaru dió su estocada final, la misma por la cual valía la vida de Rin.
-si quieres que sea sincero, ha pasado a mejor vida.- lo dijo seco, sin importancia, justo como era él, luego camino dando la espalda, marchandose.

Kikyou abrió los ojos como platos, no podía creerlo, más bien no quería creerlo.
-¡ESPERA!- le grito con un ligero tono de desesperación -necesito aclarar algo contigo "por ese lugar"- se atrevio a mencionarlo espero el rechazo, sabía que a él no el importaba el tema.

-esta bien, será a la hora "marcada" de aquel momento.- dijo indiferente.

Kikyou agradeció con la mirada, pero él no había volteado a verla, siguió caminando para perderse entre la vegetación.

Inuyasha se acerco inmediatamente, tenía cara de celos.
-¿oye de que hablabas? ¿a qué se referian con aclarar algo y "ese lugar"?- le dijo seriamente molesto, recuperando un poco la compostura común que siempre tenía.

Kikyou sonrió debido a esto, le quedaba una ligera esperanza, intento contestar para que no hubiera sospechas, todos la veían atentos, excepto por el pequeño Kitsune que se había quedado dormido en brazos de Miroku. (algo estraño, pero a falta de Kagome, pues...)

-fue el quien me ayudo a devolverme la vida, eso es todo.-

Aunque se quedaron boquiabiertos por la respuesta no dijeron nada (Sango, Miroku, Shippou y Kaede ya sabían que era humana, su hermana estaba feliz de volverla a ver y poder calmar un poco su pena por lo de Kagome, ahora tenía de vuelta a su "Kikyou onee-sama")

Se fueron en busca de una aldea, pues la tarde comenzaba a declinar y la noche anunciaba su aproximación.

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Sesshoumaru vago por la tarde pensando en su "encuentro" con Rin y en lo que dijo la sacerdotisa Kikyou.
(ja, todavía quiere saber que le sucedio, que ironías, pero a final de cuentas los humanos son unas débiles criaturas.)

La noche era avanzada cuando el regresaba al castillo, la luna formaba un cuarto menguante con color blanquecino, las estrellas resplandecian, el castillo parecería desértico, sino fuera por la radiante luz de las velas alumbrando en la habitación de Kagome.

(esa mujer, hace lo que quiere, estas no son horas para que este despierta.)

-toc...toc...toc...toc...- la puerta de la habitación de la miko era tocada con fuerza.

(¿será Sesshoumaru? pero que tonterías digo, eso es imposible jamás en los días que llevo aquí a venido a verme, seguramente es Jaken, ¿tendría otra pesadilla?) asi como era de orgulloso Jaken, muchas veces iba como niño pequeño a refugiarse con Kagome debido a sus pesadillas.
Kagome estaba en ropa interior, se cubrio con una manta de tul y se dispuso a abrir.

(al cabo que Jaken es un inocente, siempre que viene esta asustado, pero adormilado y solo ve el tapete fijamente y se va a dormir, se parece a mi Shippou ) -ji ji ji- recordo a su querido Kitsune y su expresión cambio a nostalgia.

La puerta fue abierta, pero no se esperaba el visitante, su cara cambio de blanco a rojo como un tomate, Sesshoumaru tampoco lo pudo evitar se voltió inmeditamente al verla, dandole la espalda, estaba ruborizado.
(que descuida es.) penso aún avergonzado por haberla visto "en poca ropa"

Kagome tomo el primer kimono que encontro y sin darse cuenta se lo puso al revés, estaba demasiado apenada, ni siquiera pudo ver a Sesshoumaru a la cara al acercarse nuevamente a la puerta, solo atino a disculparse.
-lo lamento, lo siento de verdad, gomen.- el rubor de sus mejillas no había cambiado.

El youkai en cambio había recuperado la compostura por completo.
-solo venía a decirte que mañana vamos a salir los tres, temprano.-

Kagome no podía creer lo que escuchaba. -de... de verdad... ¿entonces me voy mañana?- dijo al borde de la alegría.

-no; solo dije que íbamos a salir.-

Sesshoumaru la vio autoritario y apago sus ilusiones, pero el salir ya era ventaja.

-esta bien me parece perfecto.- sonrio sinceramente, por dentro el corazón le palpitaba nervioso debido al bochorno ocurrido minutos antes y a su felicidad por esa salida. En cuanto comunico esto, el demonio se fue sin decir nada.

(¡bien! es la oportunidad que estaba esperando, me escapare, iré a refugiarme en donde pueda y luego al fin podre regresar a ver a los muchachos y a mi casa. ) sonrio efusiva. ^ ^ (Inuyasha ya no quiero más tontas peleas entre nosotros, en cuanto regrese olvidaremos lo de Kikyou.)

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El otro día llego anunciado por el sol brillante y los animales diurnos que hacían sus ruidos acostumbrados. Muy temprano las mariposas revoloteaban en el bello jardín del castillo, los pequeños pájaros piaban y los mayores entonaban verdaderas melodías, una que otra lagartija corría alborotada escondiendose entre las hierbas y los saltamontes brincoteban entre las flores.

Kagome se había levantado tarde (muy raro en ella) -no puede ser, se que es muy tarde, el sol ya se puso.- se coloco un Kimono amarillo bajito con adornos de tejido en colores rosa pastel y su cabello lo dejo suelto, adornandolo con un prendedor brilloso de florecitas amarillas en su costado derecho, su sandalias eran del mismo tono que los tejidos de su kimono. Se arreglo a una velocidad sorprendente y bajo casi corriendo las escaleras.

Sesshoumaru ya la esperaba con los brazos cruzados a fuera del castillo recargado cerca de la entrada principal, Jaken estaba molesto por su tardanza, le había dicho a su amo que iria a despertarla desde hacía rato, pero él con una desgarradora mirada lo freno.

Kagome bajo y no vio a nadie, por inercia corrió hacia a fuera del castillo, ya sabía como se abría la puerta. Para su tranquilidad se topo con Sesshoumaru y Jaken.
-de verdad lo siento, me quede dormida.- dijo con mucha verguenza.

-¡humana tonta! llevamos horas esperandote, ¡quien te haz creído!- lo dijo muy enojado dando pequeños saltos entre pie y pie, con las manos en alto acusadoramente. En eso un "regalo" de pájaro cayo sobre su calva cabeza.

-Jaken.- con esa sola palabra, Jaken dejo de emitir sonidos, además tenía una "asquerosa" situación por la cual preocuparse.

Sesshoumaru examinó a Kagome de reojo desde las sandalias que traía puestas hasta el adorno en su cabello, con total frivolidad y una mirada tajante que parecía más bien repudiarla, en lugar de apreciarla, pero en el fondo algo en él le hacía contemplarla con ese disimulo y necesidad extraña.

La miko no se percato, observaba el paísaje, el jardín le parecia especialmente bello ese día. "Al fin libre" se decia para sus adentros.

-Jaken, Ah-Hun.- le replico el poderoso youkai.

En cuanto recibio la orden asintió y fue a la parte trasera del castillo (donde había caballerizas) por la peculiar bestía, tan apreciada por Sesshoumaru.

Cuando todo estuvo listo Kagome monto en Ah-Hun junto a Jaken y salieron, la barrera que se mantenía en el castillo desapareció.
(para que gastar energía mientras no este esa mujer en el castillo.) voltió a verla con la mirada disimuladamente, señalandola para si mismo, ante su pensamiento anterior.

Kagome iba sonriente, realmente alegre de haber salido del encierro por tantos días, pero más de poder irse a su casa y con los que amaba. Caminaron sin rumbo fijo, pero paso algo que no se espero.

(¡que! los insectos de Naraku nos estan siguiendo, esa es mi impresión.) se quedo temerosa de que sus planes de irse se vieran frustrados debido a Naraku, sin armas con que defenderse como escaparía de ellos, pero la valiente Kagome regreso al sentirse libre (ja, ya me las arreglare pero de que me voy del lado de esta bestía, me voy.) -¡Sesshomaru!- le dijo en señal de los insectos.

El la vio con una mirada matadora por haberlo tuteado, pero no replico ante ello, tenía otras ocupaciones, lo de los insectos lo ignoro, pero si lo analizó para si mismo.
(lo sabía, Naraku me espiaba, pero sabe que mientras Kagome este en el castillo, nadie sabrá que esta viva, por eso no había visto a los Saimyoushou. Bueno, no la he traído para liberarla, solo para que me deje de fastidiar.) penso burlesco e hizo una mueca de agrado a su hiriente y guardado comentario.

Pasaba del medio día y se toparon con unas aguas termales, Jaken se alejo un poco a un riachuelo cercano a darle agua a Ah-Hun.

-¿puedo bañarme?- pregunto Kagome, emocionada al ver las aguas termales que estaban cerca.

Sesshoumaru contesto más a fuerza que de ganas.
-como se te pegue la gana.-

Kagome no se molesto asintió con una sonrisa "inocente".
(bien, esta es la oportunidad perfecta.) -no me vayas a espiar Sesshoumaru.- le volvio a hablar con ese tono tan familiar que usaba antes de que pasara lo de Kikyou.

El youkai se burlo de ella.
-ja, no me tomaría la molestia, nadie querría ver a una humana como tú, menos yo, me daría asco.-

Kagome se molesto muchísimo, pero sabía que no se volvería a topar con el arrogante youkai ni por equivocación y si lo hacía, sería con la protección de su amado hanyou.
Se fue supuestamente a bañar, pero en lugar de eso camino con sigilo por la orilla del lago de aguas termales y en cuanto pudo corrió internandose en el bosque.

(al fin me libre de Sesshoumaru... seguramente...) pensó unos momentos, preguntandose aún la razón de su secuestro. (no se me ocurre nada... ¡ah! a... a... a lo mejor me quería engordar hasta que pudiera comerme, ¡que horror!) se sacudio la cabeza para quitarse todo pensamiento y siguio corriendo lo más rápido que podía pero el kimono le estorbaba.

(tendré que hacer algo, debí traer mi uniforme pero se hubiera visto sospechoso.) cuidando que nadie la pudiera ver, se quito el kimono y se lo envolvió como si fuese una toalla de baño, cubriendo desde el pecho hasta los muslos, lo amarró como pudo, con el lazo que traía el mismo para atarse.

Se sentía más ágil y siguió a todo lo que daban sus piernas, esperaba que Sesshoumaru no se diera cuenta. Y en efecto, esta vez el youkai seguía esperandola cerca de las aguas termales.
(que se esta creyendo, lleva mucho tiempo metida en esas aguas, me obligara a ir a sacarla como este.) sepuso algo nervioso y colorado por su idea, pero esto lo abochorno. (¡va! tonterías, es solo una simple humana insignificante, además esta fea, escualida y no tiene gracia) intentaba convencerse de eso.

Pero su "meditación" fue interrumpida por los insectos de Naraku.
(estas repulsivas criaturas ¿que quieren aquí?) lo que le intentaban decir era más que obvio.

"Kagome" pensó al momento y sin más corrió hacía las aguas.
(¿se abra ahogado? no lo dudo es una torpe) se imagino esto inocente, algo raro ante su inteligencia, pero al ver que no estaba la ropa se dio cuenta de lo que pasaba, sus ojos enrojecieron de rabía y sus colmillos se mostraron más prominentes, su cuerpo se crispo casi al punto de parecer que se iba a transformar en un demonio total en cualquier momento.

De inmediato siguio su aroma.

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Kagome se sintió aliviada al ver que se acercaba a una aldea, más aún cuando vio no muy lejos dos aldeanos caminando tranquilamente, llevando alimentos en las manos.

(estoy salvada.) sus ojos brillaron de gusto y se preparo para lanzar un grito.

-¡BUENAAAas! mmmmm...- su grito fue apagado por unas manos que la tapaban fuertemente, lastimandola.

-¿escuchaste algo Miyamoto?- le dijo un aldeano al otro.

-no nada, debió ser algún animal que anda por ahí.-

siguieron caminado tranquilamente.

Kagome se intento safar pero era algo imposible, la fuerza era tremenda, sentía que se ahogaba. Pero como sabiendo esto las manos la soltaron y le dieron la vuelta inmediatamente por los hombros, era Sesshoumaru, tenía más furía de la que jamás le vio.

La arremetio contra un árbol, el tronco le dio un golpe fuerte en su espalda, luego le apreto los hombros estrújandolos al punto de dolerle, dejándole rosaduras.
-Se...Sessh...Sesshoumaru.- terminó el nombre, mientras ponía una mueca de dolor. -me estas lastimando.- le replico.

El youkai ardía en enojo. -no soy burla de nadie, te adverti que no intentaras escapar.- su voz era ronca y aterradora, los ojos rojos lo hacían ver más terrible.

-lo... lo... lo siento.- le dijo Kagome evitando verlo a la cara.

Su ira no ceso, sus garras se clavaron un poco, dejando que un hilo de sangre saliera por los descubiertos hombros de la miko.

-siempre piensas que un "lo siento" arregla todo.- le reclamó con su estruendosa voz.

-Sesshoumaru, onegai, no volvere a irme.- le repitó con dolor, estaba sudando, mientras unos leves quejidos de molestia por las garras semi enterradas, salían de su boca.

Pero ella no solo se enfrentaba a su enojo, sino a ese lado iracible del demonio, al más puro instinto salvaje del youkai, no había razón en sus pensamientos ni por equivocación.

-ya estoy cansado de tu comportamiento, si no deseas quedarte por la buenas, entonces te obligare a hacerlo por las malas.- le dijo, aprisionandola más a él, acerco totalmente su cuerpo al de ella, como si fuese su presa, pero no, había algo más profundo que eso, la olfateaba.

-¿qué... qué estás haciendo?- ahora Kagome si estaba asustada, el dolor en sus hombros ya no era su prioridad, además la garras de Sesshoumaru ya no la lastimaban. Respiraba con dificultad, había mucho aire, pero la presión de su cabeza y cuerpo ante la reacción de Sesshoumaru, le daban la sensación de asfixia.

El youkai siguió olfateandola, desde su cabello hasta su rostro, su respiración era agitada, una agitación diferente a un enfado, como si disfrutara de lo que hacía, aspiraba el aroma de Kagome con placer.

Ella intento moverse, pero no podía, no solo por que estaba prisionera, si no que un "algo" le impedía hacerlo, el sentir la respiración de Sesshoumaru tan cerca le aturdía, su propia respiración cambio por una agitada.

(que...que... me pasa.) entre se pregunto y afirmó, reprochandose su actitud; dejo de ejercer fuerza y dió soltura a Sesshoumaru. Vio su rostro, sus ojos permanecían con ese tono rojizo, su cara seguía en esa inconsciencia vanal.

De un momento a otro, el árbol dejo de ser su soporte para ser atraída por Sesshoumaru, la abrazo a él cruzando sus manos por su espalda, bajando un poco el kimono que la envolvia tan ligeramente. Ella intento replicar pero ningún sonido salía de su boca, se sentía impotente consigo misma, pero por otra parte con cierto gusto. El youkai acarciaba su espalda, sus hombros lastimados anteriormente, su cabello, lo hacía lenta y suavemente.

(no, no, no, esto es repulsivo.) trataba de creerse lo que pensaba.

Sesshoumaru olfateo su cuello como si fuese todo lo que le importaba en ese momento, repasó su lengua ligeramente sobre él, esto estremeció totalmente a Kagome, parecía también no tener consciencia de lo que estaba pasando, ni quería recuperarla tampoco.

Ella misma se apreto más hacía su cuerpo y con esto indico libertad de dejarse hacer lo que el youkai buscara. Leves quejidos se escucharon en sus labios, pero esta vez eran de satisfacción, intento ahogarlos pero le fue imposible.

Ahora el instinto de Kagome, hizo que lo abrasara, sintió la temperatura elevada de su acompañante, ni ella entendía porque disfrutaba lo que estaba sucediendo. Sesshoumaru levanto una mano y acarició su cuello con delicadeza, haciendo que Kagome vibrara, cerró los ojos para sentir más intensamente ese roce tan sublime.

Culminando este juego seductor, el youkai retiró los cabellos azabache de su compañera, que traviesos se colaban hacía el cuello, mostró de improvisto su afilados colmillos, los acerco peligrosamente en señal de morder ese cuello, la aferro totalmente hacía a él y se dispuso a clavarselos...

CONTINUARA...

¡OJALA LES HAYA GUSTADO, INTENTE INSPIRARME COMO SI LO VIVIERA, JEJEJE!
No era nada de otra cosa lo que iba a pasar ¡he! para las malpensadas, ya se supo que buscaba el youkai en las útlimas cuatro líneas ;)

Repasando un poco mi forma de escribir por si a alguien se le hace confuso (espero que no :))
En negritas lo narrado.
(entre paréntesis y negritas comentarios, aclaraciones o significados)
-entre guiones los diálogos.-
(entre paréntesis los pensamientos de los personajes)


PALABRAS QUE PUDIERAN NO SER ENTENDIBLES:
(Hentai = pervertido)
(onee-sama = hermana mayor "hermana dicho con mucho respeto")
(gomen = lo siento "abreviado")
(onegai = por favor )

 

Re: Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

¡muchisimas gracias! IlEiN Love ¡yupi! es verdad ya esta la segunda página gracias a tus lindos comentarios ^^ ¡¡¡arigato!!!

jajaja, me encanto este comentario.

Es verdad jejeje hago muy seguido continuaciones, pero bueno la verdad soy también lectora y creo que a veces ansio continuación, así que me gusta estar al día. Casi siempre escribo diario (hasta ahora he podido ;) ) y ojala pueda seguir así.

En un rato pondré otra continuación, de nuevo gracias a tod@s por su gran apoyo, es un motivamente a seguir.

 

Re: Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

Hola Turquoise_Kagome gracias por leer ^^ jejeje, si ese Sesshoumaru se esta pasando, ya es que es frío y todo, pero no tan maldito jejeje, pero bueno, ya se verá luego porque sus posesivas reacciones (a parte de su desesperación por recuperar a Rin)

Contestando a tu pregunta, ejem, bueno es algo que viene en la próxima continuación, pero no pude ponerla hoy porque estoy ocupada con un trabajo que tengo que entregar, pero mañana va la siguiente parte y en compensación será larga.

Por cierto pasare a ver tu fic ;)

 

Re: Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

A TOD@S LES AGRADEZCO NUEVAMENTE SU APOYO Y CARIÑO AL SEGUIR CONMIGO EN EL FIC, POR LA TARDE PONDRÉ LA CONTINUACIÓN YA QUE MI TRABAJO NO ESTA TERMINADO ToT (de eso que me dormi hasta las 5 de la madrugada y pasadas jejeje)

HOLA DE NUEVO mariiChelo ME ALEGRO DE QUE PASES POR ESTOS RUMBOS :) Y SIGAS APOYANDOME.

LE DOY LA BIENVENIDA A "lesley" QUE BUENO QUE TE HAYA GUSTADO, ME DEBO A USTEDES Y VOY A HACER LO POSIBLE POR MEJORAR, GRACIAS POR TUS COMENTARIOS.

lesley ojala me pudieras poner tus dudas por favor :) con gusto te las resuelvo y para saber en que me estoy equivocando. ;)

Me gustaría que todas me externaran sus dudas o si tienen alguna confusión con el fic, porque hay cosas que quedan sin resolver intencionalmente durante la trama (esas se destapan más adelante) como por ejemplo ¿cuál fue el "pago"? que tiene que hacer Kikyou a cambio de su vida.

Pero si es alguna duda del escrito, confusión porque no esta bien redactado o alguna cosa similar, les agradeceria me lo comuniquen y poder corregirlo para mis futuras continuaciones o aclarar si se da el caso. MUCHISIMAS GRACIAS.

Cuidense muchisimo y ¡MUY BUEN DÍA!

 

Re: Te amo a pesar de la amargura (SESSHxKAGxINU)

¡Hola danielitaaxi! Que bueno que me planteas estas dudas.

Respondiendo a tus preguntas:

Bien, el pago de la bruja es algo que por el momento esta reservado solo en la mente de Kikyou, la de Naraku y la de Urani jejeje.

:P R= Bueno sinceramente eso fue INTENCIONAL, lo deje precisamente a la duda porque es parte de un capitulo de más adelante que tendrá un flash back al momento del pago y además como se las cobra la bruja. ;)

:o R=EFECTIVAMENTE, ella es hermana de Urasue, por suerte el siguiente capítulo hablara más de Uranai y sus planes y te resolvera por completo esta duda y también la duda de tu otra pregunta:

Pero adelantandome, SI, ella esta aliada con Naraku, lo que busca es vengar la muerte de su hermana Urasue, Naraku la busco y le propuso un trato, ayudarle a cambio de la venganza "anhelada" contra Kikyou (de esto se verá un flash back en la siguiente continuación como ya mencione antes ;) )

Creo que eso ni el propio Sesshoumaru lo ha podido resolver jajaja

R= Por ahora no me he metido tanto en aclarar donde esta Rin, pues me parece bien tomar en cuenta los sentimientos de los personajes, hasta ahora Sesshoumaru no sabe del paradero de la pequeña y esa es la terrible duda (para el impotencia y desesperación) quisiera transmitirla a los lectores. :si: Pero te aseguro que en la siguiente continuación también aclarare un poco este tema.

R= ¡ups! esa es la cuestión, esa pregunta la dejare hasta sus últimas consecuencias, se resolvera mucho después.*perverso*

Tu sabes que él es un indeciso de primera, tiene sentimientos encontrados, no sabe ni para donde hacerse a veces (¡hay Inuyasha ya cambia!)
Pero como el fic es un SESSH x KAG x INU, creo que Kikyou va a tener que seguir influyendo en su vida. :mareo2:

Creo que esta duda y la de ¿a final de cuentas con quien va a quedar Kagome? seguira vigente, pero les pido un poco de paciencia, llegado su momento el corazón de la miko va a alegir a su amor :) :besito:

TE AGRADEZCO MUCHO ME DIJERAS TUS DUDAS, :P SOBRE LO DE ¿QUÉ FUE DEL CUERPO DE BARRO? Y TANTOS SECRETILLOS POR AHÍ, VAN A IR SALIENDO CONFORME AVANCE LA HISTORIA. *verguenza*

ESPERO NO DEFRAUDARLAS ToT Y PODER DESPEJAR TODO POCO A POCO, ESA FUE MI INTENCIÓN DESDE EL PRINCIPIO.xD

Les pido su paciencia de verdad, muchas gracias por seguir leyendo mi fic.