[TCG] Senderos Eternos

Lion sonrió, gratamente sorprendido.

—Caray. Y yo que pensaba que mi jugada fue buena, ¡mira qué me has hecho! Casi me has igualado en la cantidad de daño que me has hecho, ¡y a cero coste! Ahora te encuentras en ventaja, pero no cantes victoria. Veamos si puedo sobreponerme.

Y esbozó una sonrisa confiada.

—Gracias por dejarme robar una carta extra, por cierto. Era justo lo que necesitaba. Yo cogeré, gracias a tu Pacto Amistoso, a otro Zorua, ¿de acuerdo? Activaré después otra carta Furaha… y sus robos, debo decir, me serán muy útiles. Sí, sin duda... —Lion miró con entusiasmo las cartas robadas, y rápidamente colocó dos de ellas en la reserva—. Voy a colocar a dos Vigoroth en la reserva. Pero durarán poco ahí: los relevaré a ambos para sacar a mi querido Snorlax EX al campo, en ataque. Ah, eso me será muy útil, porque ahora puedo curarme en 20 puntos de vida gracias a su efecto. ¡Eso siempre se agradece, huh!

>> Activaré también mi Valle Ilusorio, mi escenario favorito. Ahora, puedo enviar a mi Zorua de forma especial! Gracias a su habilidad Ilusión, copiaré una vez a mi Mewtwo en mi reserva. Mi último movimiento será enviar un Absol, la tercera carta que Furaha me dejó robar, al campo, en ataque.

>> Con esta situación, procedo a atacar: Zorua acabará con Gabite. Eso no solo lo debilitará, sino que causará una cantidad extra de daño a tus puntos de vida. Luego, con Snorlax, ataco a Beheeyem, causándole algo de daño. Y lo remataré con Absol, de paso logrando hacerte bastante daño residual.

Sonrió, una vez más.

—Bueno, he vuelto a hacer girar las tornas. ¿Qué tienes que decir ante esto? ¿Volverás a sorprenderme?

Puntos de vida: 270/500
Zoroarkstal Z: 1/1
Efecto: permite a cualquier Pokémon que lleve en su nombre "Zoroark" usar un ataque Z del tipo al que pertenezca uno de los Pokémon de tu reserva actual, con un extra de +40 de fuerza a la fuerza actual del usuario. Asimismo, si el usuario dispone de la habilidad "Ilusión", podrá reactivarla para transformarse en el Pokémon del que tomó el tipo del ataque Z.
Baraja: 25
Mano: 3
Descartes: 10

Deck extra:
Mega-Zoroark X
Mega-Zoroark Y
Mega-Mewtwo X
Mega-Mewtwo Y
Snorlax EX
Dragonite EX
Aggron EX
Zoroark EX


Activos:

ZORUA: Siniestro
Pokémon de evento.
Valor: 3
Salud: 50/50 >> 50/50
Ataque: 60 >> 190
Defensa: 30 >> 85
Este pokémon no puede ser enviado de forma convencional, únicamente puede ser enviado si es mediante evolución de un Zorua activo en el campo.
Habilidad: Ilusión: al salir al campo, este pokémon puede adoptar la habilidad y estadísticas de cualquier pokémon que tengas en tu mano (manteniendo, eso sí, su nombre y su tipo) o en la reserva. Volverá a la normalidad tan pronto como reciba daño por cualquier fuente o sea objeto de alguna habilidad del rival >> Onda mental: si este Pokémon derrota a un Pokémon rival, el rival pierde 1/3 del ataque o defensa del Pokémon debilitado en forma de puntos de vida (según la posición en que estuviese el Pokémon al momento de ser debilitado). A cambio, el Pokémon no es enviado a descartes, sino que vuelve a la baraja de su dueño.

SNORLAX EX: Normal [ATA]
Pokémon EX
Valor: 7
Salud: 150/150
Ataque: 100
Defensa: 90
Requisitos de envío: dos Pokémon de tipo normal.
Efecto: cúrate en tantos puntos de vida como resulte de la suma de los valores de salud de los dos Pokémon usados como relevo entre 5. (Resultado: 50 + 50 = 100 / 5 = 20)

ABSOL: Siniestro (ATQ)
Pokémon de efecto
Valor: 4
Salud: 60/60
Ataque: 95
Defensa: 20
Habilidad: Mal Presagio: aumenta su ataque en 5 por cada pokémon en los descartes del usuario.
​

Reserva:

GIBLE: Dragón
Pokémon normal
Valor: 2
Salud: 20/20
Ataque: 50
Defensa: 10​

BELDUM: Acero
Pokémon de efecto
Valor: 2
Salud: 40/40
Ataque: 60
Defensa: 10
Habilidad: Derribo: cada vez que este pokémon ataca, pierde 10 PS.

MEWTWO: Psíquico
Pokémon de efecto
Valor: 9
Salud: 50/50
Ataque: 190
Defensa: 85
Habilidad: Onda mental: si este Pokémon derrota a un Pokémon rival, el rival pierde 1/3 del ataque o defensa del Pokémon debilitado en forma de puntos de vida (según la posición en que estuviese el Pokémon al momento de ser debilitado). A cambio, el Pokémon no es enviado a descartes, sino que vuelve a la baraja de su dueño.
​

Cartas usadas/en activo:

VALLE ILUSORIO: Entrenador
Carta de escenario
Mientras esta casa esté activa, puedes enviar a cualquier Zorua al campo de forma especial, sin necesidad de usar "Ilusión Infinita" ni pagar puntos de vida. También podrás enviar a un Zoroark mediante relevos, como si fuese un pokémon normal, pero deberás pagar 50 puntos de vida para hacerlo. Mientras dure su efecto, no podrás retirar a ningún Zorua o Zoroark del campo a tu mano o baraja por ningún efecto, y si esta carta es eliminada, elimina a todo Zorua o Zoroark que haya en tu campo. Tu rival, igualmente, puede beneficiarse de este escenario con las mismas condiciones.

FURAHA: Entrenador
Carta de partidario
Roba 3 cartas


Descartes:
- Furaha
- Gloria Ball
- Ilsuión Infinita
- Llamada de titanes
- Zorua
- Furaha
- Vigoroth
- Vigoroth
- Gabite

 

Ian Lockhart

—Wow, los Zorua no me dan ni un minuto de descanso, ¿Eh? Agradezco la confianza, pero quemé la mayoría de mis cartas en el turno anterior y lo que he robado no me sirve de momento. Tampoco pude generar Ghost para usarlos de relevo, así que no podré hacer mucho movimiento en mi campo, pero creo que igual podré hacer algo interesante.

—Coloco a Phantumb en mi reserva, y lo uso a él y a Ho-oh para mandar a Chandelure EX al campo, y uso el efecto de Lucario EX para traer un Lucario de mi baraja a mi mano, reduciendo su propio ataque en 10. Ahora, presten atención, que yo también haré un pequeño truco de magia ilusoria, aunque sólo sea un aficionado.

>>¡Magia de duplicado! Un Lion está aquí, frente a mí, teniendo un duelo, y el otro está... ¡En mi mano! Gracias a mi propia carta Lion, puedo enviar a Lucario como un envío normal sin relevos, en vez de utilizar uno como sería normalmente. Chandelure bajará el ataque de todos tus pokémon en 20, y el efecto de la ilusión de Zorua se irá. Tras eso comenzaré mi ataque.

—Lucario EX atacará a Zorua, que cae debilitado al recuperar su forma original, además de inflingirte muchísimo daño; por otra parte, mi Lucario normal, potenciado por los 3 EX que hay en el campo, también derrotará de sobra a tu Absol. Y por último, Chandelure también atacará a tu Snorlax, si bien no lo debilita, creo que sí que causé muchísimo daño a tus puntos de vida, ¿No?


Puntos de vida: 162/500
Espectroestal Z: 1/1
Baraja: 26
Mano: 2
Descartes: 6

Deck extra:
Mega-Gengar x2
Ditto-EX x1
Lucario-EX x1
Rotom-EX x1
Chandelure-EX x1
Mismagius EX x1
Krookodile EX x1
Pachirisu EX x1
Poipole x1
Nihilego x1

Activos:

LUCARIO EX: Lucha [ATK] (130+10+0=140/10=14)
Pokémon EX
Valor: 8
Salud: 90/90
Ataque: 150
Defensa: 80
Requisitos de envío: 3 pokémon de cualquier tipo.
Efecto: una vez por turno, puedes restar al rival directamente tantos puntos de vida como resulte de dividir entre 10 la suma de los ataques de todos los pokémon usados como relevos para enviar a este pokémon. Adicionalmente, si tienes una carta "Aura", "Riolu" o "Lucario" en tu baraja o descartes, puedes bajar en 10 el ataque de este pokémon para traerla a tu mano.

CHANDELURE EX: Fuego [4/7]
Pokémon EX
Valor: 7
Salud: 80/80
Ataque: 150
Defensa: 60
Requisitos: un pokémon tipo fuego y otro tipo fantasma.
Efecto: puedes bajar el ataque de un pokémon rival en 20 puntos de forma temporal, solo por ese turno. Este efecto solo es acumulable hasta los 40 puntos de ataque en un solo pokémon, y lo puedes usar tantas veces como resulte de la media de los valores de los pokémon usados como relevos.

LUCARIO: Lucha
Pokémon de efecto
Valor: 6
Salud: 80/80
Ataque: 160
Defensa: 70
Habilidad: Concentrar aura: al salir al campo, puedes robar directamente desde tu baraja una carta que lleve en su nombre la palabra "Aura". Además, de forma pasiva, el ataque de Lucario aumentará en 20 por cada pokémon EX que haya en el campo.

Reserva:

GENGAR: Veneno
Pokémon de efecto
Valor: 7
Salud: 70/70
Ataque: 130
Defensa: 50
Habilidad: Posesión: si tienes a este pokémon en el campo, puedes retirarlo a la reserva para, a cambio, tomar el control de uno de los pokémon de la reserva del rival y ponerlo en tu campo directamente. Este efecto solo sirve si el pokémon tiene un valor igual o menor a 6.

Cartas usadas/en activo:

LION: Entrenador
Carta de partidario
Puedes enviar a un pokémon de nivel 8 o inferior con un relevo menos de lo que sería necesario en el turno en que uses esta carta.

Contenido oculto: Descartes

GASTLY: Fantasma
Pokémon de efecto
Valor: 2
Salud: 30/30
Ataque: 50
Defensa: 20
Habilidad: Lengüetazo: al atacar a un rival, dicho rival quedará inutilizado y sin poder atacar, aunque sí que podrá ser relevado o cambiado de posición (el cálculo de daño, sin embargo, se realiza normalmente). Este efecto solo se puede activar una vez, la primera vez que ataque.

ROTOM-EX: Eléctrico
Pokémon EX
Valor: 4
Salud: 70/70
Ataque: 70
Defensa: 70
Requisitos de envío: mínimo 1 pokémon fantasma o eléctrico. Adicionalmente, puedes relevar uno o más pokémon de tipo planta/volador/hielo/agua/fuego (puedes enviar varios, pero todos tienen que ser del mismo tipo, sea el que sea de los cinco anteriormente citados).
Efecto: si relevas a un segundo pokémon, Rotom conservará su tipo Eléctrico pero podrá elegir si quiere atacar con el tipo del segundo pokémon enviado. Además, modifica los stats de Rotom de la siguiente forma:
- +15 fuerza por cada pokémon de tipo fuego o volador relevado.
- +15 salud por cada pokémon tipo hielo relevado.
- +15 resistencia por cada pokémon tipo agua o planta relevado

UCHAWI: Entrenador
Carta de partidario
Nombra una carta de tu baraja. Puedes robar hasta cinco cartas; si la carta nombrada está entre dichas cinco, quédate con las cinco. Si no está, descarta las cinco cartas robadas y luego roba la carta nombrada.
PACTO AMISTOSO: Entrenador
Carta de efecto
Activa uno de los siguientes efectos:
- Suma los puntos restantes de ambos contendientes, divídelos a la mitad y repártelos entre ambos.
- Tanto tu rival como tú podéis coger una carta a placer de la baraja.
- Cambia tu mano con la mano del rival. Podrás usar sus cartas como si fuesen suyas y viceversa, pero al ser utilizadas irán a parar a los descartes de la baraja original.
WOBBUFET: Psíquico
Pokémon de efecto
Valor: 4
Salud: 150/150
Ataque: 0
Resistencia: 70
Habilidad: Mantoespejo: este pokémon hace tanto daño al rival como daño reciba él de su ataque.
YAMASK: Fantasma
Pokémon de efecto
Valor: 3
Salud: 50/50
Ataque: 10
Defensa: 60
Habilidad: Maldición del faraón: cuando este pokémon sea derrotado por un pokémon o efecto de una carta del rival (y solo si es eliminado así), mándalo a los descartes del rival en vez de a los tuyos. Resta 10 puntos de vida por turno propio al entrenador que tenga esta carta en sus descares. El efecto es acumulable con otros "Yamask" y "Cofagrigus".

RESURRECCIÓN: Entrenador
Carta de efecto
Puedes enviar al campo directamente desde tus descartes a un pokémon de tipo fantasma. Al hacerlo, envíalo con un tipo que no sea el fantasma (si el pokémon tiene originalmente tipo secundario, ese será su nuevo tipo; si no, será tipo normal)

HO-OH: Fuego
Pokémon de evento
Valor: 9
Salud: 150/150
Ataque: 120
Resistencia: 140
Este pokémon solo puede ser enviado al campo a través del efecto de la carta de entrenador “Torre Dorada”.
Habilidad: Danza Arcoiris: una vez por turno, puedes restarle a este pokémon tantos PS como desees. Cura a uno de los pokémon en el campo esa misma cantidad de PS.

PHANTUMP: Fantasma
Pokémon de efecto
Valor: 4
Salud: 50/50
Ataque: 70
Defensa: 70
Habilidad: Llamada sospechosa: si tienes a este pokémon en tu mano, puedes revelárselo a tu rival. Entonces, ordena en una lista las cartas de tu mano; al comenzar el próximo turno de tu rival, este elige un número (de entre tantos como cartas en mano tengas). Si el número escogido es Phantump, descarta todas las cartas de tu mano. Si el número escogido no es Phantump, puedes robar dos cartas extra en el próximo turno. Puedes repetir este efecto, reordenando la lista si lo deseas, una vez por turno, siempre que Phantump siga en tu mano.

LION: Entrenador
Carta de partidario
Puedes enviar a un pokémon de nivel 8 o inferior con un relevo menos de lo que sería necesario en el turno en que uses esta carta.

 

Lion sonrió, soltando todas sus cartas sobre la mesa.

—Vaya, debo decir que has ganado, y de forma sorprendente, sin duda. Es culpa mía, en todo caso: no debí haber esperado ni un solo minuto para enviar a Dragonite EX al campo cuando tuve ocasión. Posiblemente habría ganado de no haberme contenido, ¡supongo que te subestimé! Pero bueno... la cuestión es que tienes talento, mucho. Ando sorprendido de que no estés participando en el Torneo, creo que tendrías muchas posibilidades. Y, ¿quién sabe? Si algún día ese talento para duelos que pareces tener te lleva más alto y tenemos una batalla menos casual y más... profesional, ahí sí que no me contendré. No pensaré "pobre chaval, dale una oportunidad", como he hecho ahora, cosa que me ha costado la derrota. Pensaré "no le dejes respirar ni un segundo, porque él no te va a dejar respirar a ti".

Ryu, tras un rato observando a los dos, comenzó a reír.

—Qué mal perder tienes —le dijo a Lion.

—… no, no es mal perder, es culpa mía y, por tanto, merezco la derrota —rebatió, molesto, Lion—. Pero la realidad es que podría haberle ganado.

—Sí, sí, yo también creo que habrías ganado. Pero lo has hecho mal, chico. Así es como se pierde. Malas decisiones de tu parte, buenas de la suya. El ego se paga, ¿sabes?

—¿Y me hablas de ego tú?

V-Vaya, parecían haber entrado en otra pelea de hermanos. Por suerte, Lion respiró hondo, y sonrió una vez más, mirando a Ian.

—Se ve que te interesan las cartas raras, ¿no? Está bien. Yo tengo alguna que otra, naturalmente. Creo que te mereces que te dé una de ellas, no en vano has logrado superar a un duelista supremo. Aquí tienes, pues: es una de las cartas que usé contra ti, Llamada de Titanes. En la estrategia que uso con esta baraja, es bastante clave; si no obtengo rápido a Mewtwo, no tengo tanto potencial como podría. Así pues, cartas como esta son muy útiles para mí. Espero que a ti también te sirva.

Tras decir eso, Ryu se levantó y miró a su hermano.

—Venga. Deja al chico ya en paz de una vez. Es hora de seguir.

Y suspiró.

—… sí. Supongo que no queda más remedio —Lion también se levantó, y alzó una mano a modo de despedida—. Hasta la próxima. Espero volver a tener la oportunidad de enfrentarme a ti y tomarme la revancha. Porque te lo aseguro: me la tomaré.

Ambos, así, se marcharon, comenzando a caminar hacia la capital.

… huh. ¿Se referiría a esto la adivina?

Obtienes Llamada de Titanes y 100 TP.

 

Ian Lockhart

Al final terminé ganando por los pelos, pues sabía que de no vencer en ese turno, Lion me podría haber hecho una ingente cantidad de daño en su siguiente turno y adiós al duelo. Me sorprendió que se tomase la derrota de manera tan seria; vamos, que estaba claro que yo definitivamente no estaba a su nivel, pues había jugado con su baraja más sencilla y se notaba que no había dado todo. Claro que no me había contenido, ¿Cómo podría haberle ganado de haberlo hecho? ¿Quién se contiene contra un duelista supremo?

¿y por qué darle demasiadas vueltas? Al fin y al cabo, al menos desde mi punto de vista aquello había iniciado como mero entretenimiento y en todo caso consideré el duelo más como una prueba para medir mi progreso y tal. Lion podía aplastarme cuando quisiera,¿No podía tomárselo mejor como una manera de probar a un duelista, en vez de verlo sólo como victorias o derrotas? O mejor aún, verlo como una oportunidad de ver nuevas cartas, tal y como hice yo. ¡Mierda, su Mewtwo era genial! Y su Zorua, aunque molesto, era muy interesante.

Quizá es que a Lion, siendo un duelista supremo y habiendo tenido infinidad de duelos, nada en mi baraja le era nuevo; quizá debería intentar sorprenderlo la próxima vez consiguiendo algo raro de verdad.

Uh, si nada le había sorprendido... ¿Conocería la carta Lucario-EX de antemano? Podría preguntarle y...

...eh, ¿No iba yo a pedirle algo a Lion y a su hermano?

—¡Esperen! —grité, corriendo en la dirección que se habían marchado, aunque había perdido ya su rastro por completo—. ¡Yo también me dirijo a la Capital, déjenme acompañarlos...!

Maldición, toda mi estrategia y preparación se había ido al garete.

-Rumbo a la Capital

 

E Ian se dispuso a avanzar hacia la capital, que quedaba muy cerca. Caminó por aquel largo sendero en solitario, habiendo perdido a Lion y a Ryu, que se alejaron demasiado como para que pudiese seguir viéndoles. De modo que, al quedar solo, se tomó su tiempo para caminar con tranquilidad, aburrido y cansado.

Faltaba ya poco para llegar. Parecía que había conseguido alcanzar el lugar, de hecho, cuando, de pronto, escuchó un silbido. Las puertas de la pequeña muralla que rodeaba la ciudad estaba literalmente a unos cuantos pasos... ¿por qué tenía que suceder aquello justo entonces, de forma tan inconveniente? Un ruido estridente sonaba cada vez más cerca...

Ian se giró, temeroso. Y, en efecto, le vio, montado en una moto, acercándose a él a gran velocidad.

Prince le había alcanzado.

Con su extraña pistola en la mano, mientras conducía la moto, disparó hacia él, pero logró esquivarlo, por fortuna. Derrapó justo frente a Ian, parando la moto en mitad de su camino e impidiéndole avanzar... y, mientras le apuntaba de lleno con la pistola, sonreía.

—Heh. Nunca imaginé que fueses tan estúpido como para decirle a aquel tendero que irías en la dirección en la que efectivamente ibas a ir. ¿Es que quieres que te atrape, o qué?

Se bajó de su vehículo y comenzó a girar alrededor de Ian, sin dejar de apuntarle.

—Me has dado más problemas de los que pensaba, miserable. Tenías que ser una presa fácil, ¡y te has logrado escapar! Pero parece que eres lo suficientemente imbécil como para dejarme un caminito de migas de pan libre para que lo recorra. En fin —hizo girar la pistola en sus dedos, solo para terminar, luego, apuntándole de nuevo, pero a bocajarro, con la boca de la pistola rozando su frente—. He hablado con los jefes. Resulta que puedo perfectamente pegarte este tiro, les da igual. Al fin y al cabo, te iban a convertir en carta ellos mismos. Así que eso hace mi trabajo mucho más sencillo, no crees?

>> Bueno, te dejaré unas últimas palabras antes de que te reúnas con tu querido maestro. ¿Algo que decir?

M-Mierda, estaba completamente acorralado. ¿Q-Qué podría hacer?


>> Improvisar: golpearle con una piedra del suelo.
>> Improvisar: sacar el orbe y usarlo como escudo.
>> Improvisar: sacar la carta de Seur y usarla como escudo.
>> Improvisar: forcejear para tratar de robarle la pistola a Prince.
>> Improvisar: golpearle y salir corriendo.

 

Ian Lockhart

Lo sabía, había estado esperando este momento éstos últimos días, y aún así, cuando escuché aquel motor a lo lejos, el miedo se apoderó de mí. Logré evitar los disparos a duras penas, pero Prince fue capaz de acorralarme una vez más: Su pistola estaba encañonada en mi frente.

¿E-Era éste mi final?

...Ni de coña. Aunque todo mi cuerpo temblara y mis nervios estuviesen al límite, ésta era sin duda mi oportunidad. Había una razón por la que me había pintado la diana en la cabeza, y era porque hacer que Prince me encontrase era más fácil que buscarlo yo mismo.

Este sujeto era el responsable de lo que le pasó a Seur, y mi objetivo se había convertido en darle caza. Su pistola... su pistola era el elemento crucial que hacía que mi plan tuviese un mínimo de esperanza de funcionar.


¡Sólo tenía una oportunidad, y no iba a desperdicarla!

—Tú y tus jefes pueden irse a la mierda Prince, esas son mis últimas palabras para ti.

Tomé rápidamente el orbe oscuro entre mis manos, sabiendo que cada fracción de segundo era vital y empujado por mi propio instinto de superviviencia lo coloqué entre la pistola y mi cabeza a modo de escudo en el momento que sentí que Prince accionaría su pistola. Ya había presenciado lo que podía hacer el orbe en aquella ocasión, ¿Sería capaz de hacer aparecer el milagro una segunda vez?

¿Qué pregunta era esa? Claro que iba a lograrlo...

...porque de no hacerlo, todo estaba perdido.

>>Improvisar: sacar el orbe y usarlo como escudo.

 

Al ver el orbe entre el camino de su "pistola" y él, Prince se mordió el labio. Trató de apuntarle en otra dirección con la pistola, pero no hubo forma; Ian lograba mantener el orbe delante de la trayectoria de la pistola en todo momento, y eso le frustró.

—Miserable, ¡suelta esa mierda! Ni de coña voy a dejar que me metas otra vez en ese puto mundo de las cartas, ¿me oyes?

¿M-Mundo... de las cartas...?

Como sea, hubo un forcejeo entre ambos, y finalmente Ian logró darle un empujón a Prince lo suficientemente fuerte como para hacer que se tambalease y cayese al suelo. Aprovechó el momento para huir, tomando la moto de Prince mientras este gritaba, desesperado, a su espalda. Aunque no sabía manejar la moto muy bien, logró hacer que avanzase en un zigzag desorientado, y precisamente ese descontrol que Ian tenía sobre la moto fue su mejor arma contra Prince, que no podía apuntarle bien desde la lejanía.

Y así, logró escapar de él. Uf... había estado cerca.
¿A qué ser referiría Prince con eso del... mundo de las cartas?

Como fuese, Ian había logrado entrar en la capital. La enorme aglomeración de personas le permitió mezclarse con las multitudes. Aunque Prince, sus jefes o quienes fuesen estuviesen por allí, no sería fácil dar con él en esas circunstancias.

Tras caminar un buen rato, finalmente logró encontrar la dichosa Fábrica de cartas. Estaba a las afueras de la parte este de la ciudad, algo apartada del resto. Y, de hecho, aquella ciudad se encontraba en la parte Este de Valm. Cuando se acercó a la Fábrica, Ian vio con curiosidad una estructura extraña... una especie de cilindro de cristal opaco, grande, del tamaño suficiente para que cupiesen dentro varias personas, cerca de la fábrica. ¿Qué demonios era eso?
Sin prestarle mucha más atención, quiso entrar en la fábrica, pero los guardias no le permitieron la entrada. Habló entonces del tendero y de cómo este le había dicho que aquí le ayudarían a saber de la carta de Lucario EX, pero... el guardia insistía en que no podía dejarle pasar. Tsk, tendría que hablar con alguien de dentro, pero, ¿cómo hacerlo?

Tras analizar la fábrica por los alrededores, pudo observar con curiosidad cómo, en la parte de atrás, varias personas se encontraban fuera, fumando, en lo que parecía ser un tiempo de descanso. Una pequeña puerta quedó abierta, sin vigilancia... pero estaban esos tipos allí, hmmm…

>> Improvisar: silbar para distraerles.
>> Improvisar: moverse con sigilo para colarse.
>> Improvisar: lanzar algún objeto en otra dirección para distraerles.
>> Improvisar: ir de frente y pedirles que te dejen entrar.

 

Ian Lockhart

Aunque el disparo de Prince jamás llegó a efectuarse, pude seguir manteniendo el orbe entre su pistola y yo en cada movimiento, logrando desconcentrar lo suficiente a Prince como para poder forcejear con él y derribarlo. Sin embargo, en ningún momento soltó aquella maldita pistola, y en un ataque de nervios, huí en su motocicleta. El nerviosismo y mi nula experiencia manejando hicieron que avanzara con un zigzageo constante, tratando de permanecer en equilibrio todo el rato.

En algún momento perdí a Prince.

Me maldije internamente por haber escapado, en vez de haberlo reducido y obtener toda la información de él. Al final, el pánico me había ganado. El pánico de fallar y terminar igual que Seur.

...Seur, aún debía obtener información sobre él. Dado que lo de Prince fue un fracaso, no me quedaba de otra más que seguir con el plan de la Fábrica.

Por supuesto, no iba a ser tan sencillo. Cuando llegué allí un guardia me prohibió la entrada, y por más que hablé, no hubo forma de convencerlo. Lo que significaba que iba a tener que colarme, eso estaba claro. La primera pregunta esencial, el "¿Por dónde?" se respondió al encontrar una entrada abierta, cercana a unos tipos que fumaban. La siguiente pregunta era "¿Cómo entrar?".

Se veían demasiado relajados para notarme, quizá sí...

Improvisar: moverse con sigilo para colarse.

 

Ian logró pasar con discreción por detrás de los guardias, que estaban distraídos charlando entre sí. Al pasar por su lado, oyó la conversación:

—Estoy harto de hacer cartas de entrenador. Es super aburrido. Todo el día maquetando los diseños y escribiendo lo mismo una y otra vez.

El otro suspiró.

—… ya. Aún quedan un par de semanas para que venga el nuevo cargamento. Entonces empezaremos a producir cartas de Pokémon a mansalva.

—Es una lástima que no nos dejen crearlas a nosotros, hm. Mola verlas, son interesantes, y vienen con efectos chulos y tal. Pero nooo, ¡no podíamos hacer eso, no! Nosotros solo a empaquetar como locos. Ay...

El otro rio, mientras daba una calada.

—Yo me inventaría cartas geniales si me dejasen crearlas. ¡Un Pokémon de tipo Acero con la habilidad de matar a todo Pokémon que entre al campo! Chorrocientas resistencias y super ofensivo. ¡Valor 4 y Fuerza 110!

—Ja, ja, ja, ¡romperías el juego si haces eso, listo! Por eso no nos dejarán crearlas ni tener nada que ver con la creación de las cartas huh.

—Yo qué sé, tío. Los jefes son muy raros con tanto secretismo. ¡Igual vienen las cartas exportadas de vete a saber donde, y tienen tratos ilegales o algo chungo! En fin...

… estaban demasiado distraídos, no fue difícil colarse. Lástima que parecía haber alguna carta interesante en una caja que estaba junto a ellos. Si los hubiese distraído, quizás habría podido echar un ojo, ish.

Bueno, lo importante era que, al fin, estaba dentro. Se coló por una especie de pasillo, y pudo esconderse entre las máquinas que había alrededor. Una serie de cintas transportadoras se desplazaban, todas ellas con láminas que eran el molde para las cartas. Varias personas se colocaban en distintos puntos y, con máquinas diversas, de forma mecánica, iban escribiendo sobre las cartas, dándoles color, imprimiendo imágenes, etc. Era un proceso largo y que parecía muy aburrido, la verdad. ¿Cuántas de esas hacían al día? Ugh.


En cualquier caso, logró escabullirse, y, tras dar unas cuantas vueltas, logró llegar a la parte superior de la fábrica, la zona de oficinas. Varias puertas se distribuían por la zona, etiquetadas con los cargos de quienes se encontraban detrás de dichas puertas. Serían, muy probablemente, los despachos.

Mientras caminaba por la zona, oyó voces detrás de una puerta. Ponía "Director"... hey, quizá él podría ayudarle, ¿no? Si le hablaba del tendero, seguro que le conocería y le echaría un cable.
Pero al acercarse a la puerta... se dio cuenta de que una conversación entre una chica y dos hombres tenía lugar allí dentro.


Decisión crucial:
>> Espiar la conversación. con sigilo.
>> Llamar a la puerta para ser atendido.
>> Esconderse lejos y esperar a que alguien salga.

 

Ian Lockhart

Tsk, así que los fabricantes de cartas también andaban en algo chungo. Encajaba con la capacidad de Prince de convertir personas en cartas con aquellas pistolas. ¿Cuántas cartas no serían en verdad personas normales, como Seur o como yo, convertidas en cartas sin motivo aparente?

Maldición.

Entré a la fábrica con todas esas cosas en mente, hasta di con la oficina del director. Tragué saliva durante un momento, ¿De verdad debía estar allí? La adivina me dijo que los cazadores y Seur estarían muy relacionados, así que era probable que la fábrica estuviese liada con ellos. En ese caso, no había sido la decisión más inteligente entrar allí.

...Pero lo hecho, hecho está. Ahora debía recabar toda la información que pudiera; tenía el presentimiento de que no me convenía que me descubriesen, así que...

Espiar la conversación. con sigilo.

 

Y, al espiar, pudo oír todo lo que decían...

—No tenemos tiempo de tonterías. La cuestión es que se os pagó para que atrapaseis a ese estúpido niñato y aún no lo habéis hecho. ¡Os dimos un convertidor y todo para que lo tuvieseis fácil! —era la voz de un hombre, suave, pero con un tono muy furioso. ¿Sería él el dueño de la fábrica?—. En la Sede necesitan ya los orbes, ¿sabes? ¡Conseguidlo de una vez, al chico y al orbe!

—… hm —la voz susurrante de una chica sonó entonces—. Eso es culpa de mi hermano. Pero ya me ha informado: el chico viene hacia aquí, hacia la capital. Supongo que yo tendré que encargarme de él. Pero no puedo dejar de lado mi otra tarea. ¡AGH! ¡CUANTO ESTRÉS, JODER!

—Más os vale atraparlo —insistió el otro—. Hablando de eso, ¿cómo va la otra tarea?

—… sin pistas.

—Tsk. Mercenarios. No valéis para nada.

—… Cazadores. Somos Cazadores.

—Bueno, ¿y vuestra jefa? —habló de nuevo el primer hombre.

—… permanece en las sombras. Actuará solo cuando sea necesario.

—¡¡Pues es necesario, joder!! —se quejó de nuevo—. ¿Qué no entiendes? ¡¡Sois tres personas y teníais dos tareas!! ¡Repartíos mejor, hostia!

Y, de pronto, una voz calmada habló. La de otro hombre. Sonaba refinado, pero algo mayor: debía de ser alguien de avanzada edad.

—Bueno, bueno. No perdamos la calma. No sé de los asuntos que os atañen a vosotros, pero me gustaría poder hablar de lo que me trae a mí aquí. Tengo una agenda ajetreada...

El otro hombre suspiró.

—Por supuesto. ¿Nos dejarías a solas...?

Aquello iba, por supuesto, dirigido a la chica. Ella, tras bufar brevemente, se levantó, arrastrando la silla por el suelo. Ian entró en pánico. ¡I-Iba a salir! Y le vería allí... tsk, ¡demonios! ¿¡Qué haría ahora!? ¡¡N-No había tiempo para esconderse ni para huir!! En ese puto pasillo no había nada...

… o sí. Él estaba perdido, eso seguro, pero... ellos iban a por el orbe, ¿no? Ian lo agarró con fuerza, mirándolo. Si lo cogían a él, no cogerían el orbe, eso seguro. Alzó la cabeza, y vio el conducto de ventilación que había sobre él. El techo no era nada alto, de manera que llegaba bien al conducto, que era lo suficientemente amplio como para que cupiese el orbe entre las rendijas horizontales. Colocó allí el orbe, y realizó un intento fútil, tras eso, de salir corriendo. La puerta se abrió a sus espaldas, y oyó la voz desquiciada de la chica.

—¡ALTO, CABRÓN!

Oyó entonces el inconfundible ruido que emitía la pistola que Prince llevaba al ser accionada. Y el disparo fue certero, impactando en él. Notó cómo sus huesos se retorcían, como si estuviese... encogiendo, o algo similar. Y, de pronto, perdió el conocimiento.


…


La chica se acercó, tomando la carta que había quedado allí, en el suelo, donde estaba Ian. El resto de sus cartas y sus pertenencias también estaban allí... tiradas en el suelo.

Los otros hombres acudieron rápidamente, ante el escándalo.

—¿¡Qué ha pasado!? —exclamó el dueño de la fábrica.

Y la chica fue rápida. Sus ojos casi adormilados detectaron que la carta que había quedado donde Ian desapareció era... anormal. La introdujo dentro de la baraja y sacó otra carta cualquiera. "Gastly" fue la que sacó. Se giró, mostrándola al otro, y dijo:

—… un intruso. Estaba espiando. Era un chavalillo, pero no hay problema.

>> … ya no podrá contar nada de lo que haya oído.



Fin del capítulo 2.
+200 TP.