Propuesta de escritura: Un pecado capital + una relación de amistad. Participantes: Kaisa Morinachi y Zero Pecado: Ira. Sometimiento a la ira —¡Siempre es lo mismo! —gritaba—, ¡Siempre te equivocas! ¿Cómo mierda puedes olvidar siempre todo? —caminaba con furia de acá para allá, león enjaulado, bufó como un toro. Me miró y sus ojos eran como dagas... ¿Cuánto temor habría en mis ojos?—, ¡¿Sabes cuánto me costó mantener mi promedio?! ¡Gracias a ti he quedado por debajo de Jacinta! —Lo siento —dije con torpeza, la angustia se colaba en mi boca. —¡¿Lo sientes?! ¡¿EN VERDAD?!— Se acercó a mí, desafiante, brazos extendidos a los costados. Le miré con pánico. Me agarró del cuello de la camisa—, ¡¿Desde cuándo?! ¡¿Cómo vas a entender lo que siento si nunca has sacado buenas notas, idiota...?! El pánico en mi mirada, mis manos resistiendo a la barandilla, mi cuerpo se inclinaba por el borde. Mi corazón latía y era incapaz de llorar. Y sus ojos refulgian con rabia... —¿Entonces qué quieres? —dije con la voz temblando, pena. Frunció el ceño, titubeante... Gruñó... Me soltó con brusquedad, suspiró con hastío y caminó, otra vez, en círculos como una bestia enjaulada. Me miró con frialdad. —No quiero que me vuelvas a hablar. Y se marchó. Vi su silueta alejarse... el pánico en mi mirada. El sol de la tarde le hizo sombra, dejé de buscar su figura y mis ojos cayeron al suelo. Mi espalda se estrelló contra la pared del desolado pasillo... caí. Me aferré a mis piernas. Claro que sí... ¿Qué valía mi amistad? Que se buscará a otros que en verdad le merecieran. Y con un nudo en la garganta lloré. Cada día odiaba más los trabajos grupales.
Qué decir. Me sorprendió la decisión de narrar la historia desde el punto de vista de la victima, le da bastante más peso a la historia a la hora de empatizar, centrando no el pecado sino el... ¿final? de esta amistad. Que triste. El uso de párrafos de una frase me da la sensación de cuando en una película una escena que duraría algunos segundos se alarga por varios minutos, la situación es importante para el personaje y su mente va más rápido de lo normal. Y eso, como siempre, es un gusto leerte.