Capítulo 1: La derrota La derrota. Mis intentos de ganar eran en vano, cada pizca de éxito, sólo era un sorbo amargo de la realidad. Mis amigos, mi madre. Todos me seguían apoyando, a pesar de mis incontables derrotas. Mi sueño, soñe algo imposible y me desplome varias veces. El tiempo había pasado rápidamente, mis amigos envejecían… Yo envejecía … Ellos hicieron sus vidas, yo seguía tratando de alcanzar lo inalcanzable. 10 años desperdiciados con un sueño "imposible". Me encontraba en la final, el contrincante y yo, sólo nos quedaba un pokemon. Esto decidiría si mi sueño, no sólo es un "sueño" solamente. -¡Esta batalla está muy reñida!. Por un lado esta Ash de pueblo paleta. Y por el otro, la joven "promesa" de Kalos que a su tan corta edad ha arrasado en cada una de sus batallas.-Dijo el presentador -¡Pikachu usa Impactrueno!-Grite, con el puño en alto- ¡Es hora de demostrar nuestra fuerza!. -Tyrantrum esquivalo y usa Cola Dragón, este combate ya está decidido. Nunca haz ganado y nunca lo harás. El Impactrueno falla, y Tyrantrum logra acertarle un golpe crítico, lanzandolo a unos metros de donde se encontraba. Difícilmente Pikachu aún seguía de pie. -¿Pikachu puedes seguir? -¡Pika pika pi!-Rapitamente toma la compostura de batalla - ¡Muy bien! ¡Verás como la batalla será nuestra! ¡Pikachu ve con todo y usa Cola Férrea!. -Me gustara ver como pierdes de nuevo la Liga Kalos, quiero ver la misma expresión de derrota que te caracteriza.- Con un tono de voz algo sadico- Tyrantrum contrataca con Cuerno Taladro. Ambos ataques chocaron entre si, ninguno cedía, cada uno de esos ataques eran poderosos. -¡Increible! Ninguno cede, estoy seguro que el primero que ceda será derrotado. Se aprecia el entrenamiento de esos pokemon por lograr estar aquí. -¡Tyrantrum ya deja de estar jugando y acaba con el de una buena vez! Tyrantrum uso más fuerza, Pikachu poco a poco perdía la iniciativa. Hasta que se notó cual era el Pokemon más fuerte, Pikachu ya no continuó Cola Férrea sus heridas y cansancio le habían ganado. Tyrantrum lo arroja hacia la pared con su poderoso ataque. Levantando una gran nube polvo. Poco a poco la nube se fue disipando, dejando ver a un inconciente Pikachu. ¡Parece que Pikachu no puede continuar, así que el entrenador Joshua es el ganador de la batalla! El público gritaba lleno de entusiasmó, sólo unas cuantas personas veían con tristeza el resultado de la batalla. - ¿Te lo dije no? Eres muy viejo para seguir participando en torneos, hazle un favor a las personas y retirate.-Sonrie de forma desagrado. De su bolsillo saca la Pokeball de Tyrantrum y lo regreso a esta, alejándose del lugar. Fui donde se encontraba Pikachu, lo cargue en mis brazos. - ¿Era de esperarse no?.-Solte algunas pequeñas lágrimas- Parece que sólo fue un sueño imposible después de todo.- Pikachu seguía inconciente, se lo deje a la enfermera Joy para que lo pueda sanar. Ella sólo me miro con lástima. Salí de aquel lugar, me encontré con unos viejos amigos, uno de ellos se dirigió hacia mi con una sonrisa algo forzada. - ¡Estuvo increible la batalla! ¿No es así Misty? - Su voz denotaba un claro nerviosismo. - Por supuesto, nunca había visto una batalla así desde hace tiempo- Mintió, detrás de ella salió una pequeña niña pelicastaña. - Gracias. -Respondi sin ánimo- Por cierto ¿Quien es esa niña que salió detrás de Misty? - Ella es Lucy, mi hija.-Respondio el pelicastaño orgulloso. -Nunca pensé que ustedes dos tendrían una hija. ¿Por que no me lo dijeron antes? -Estabas muy ocupado, también recuerda que tu nunca te comunicas con nosotros.- Respondió Misty en reprochó - Si, es mi culpa. -Me acerqué a Lucy, ella sólo me miraba tímidamente y se escondía detrás de su madre- Parece que es muy tímida, no como su madre- Bromeó al respecto, ella sólo me mira con un aura asesina.- Tranquila Misty, sólo es una broma, Lucy sólo espero que no seas igual a tu madre- Sonreí con algo de nostalgia. -Vamos Lucy despidete de Ash- Yo sólo veía dudoso esa escena. La pequeña niña se acercó a mi y se despidió con la mano tímidamente- Adiós Ash cuidate- Ambas se alejan del lugar - ¡Vamos Misty! No te enojes sólo fue una simple broma- Grite, ella nisiquiera volteaba la mirada - No pensé que se enojaria tanto por sólo una broma. -Ella no esta enojada no te preocupes, Ash hay otra razón por la que vinimos a Kalos.- Su semblante había cambiado, se encontraba serio con algo de tristeza en su voz. Eso me preocupo -¡Qué pasa!-Respondi exaltado - Es Delia, ella enfermo- Esa noticia me cayó como balde de agua fría. -¿Qué es lo que tiene?-Grite exaltado, me sentía muy angustiado. - Por favor Ash, no te lo puedo decir.- Gary volteaba la mirada. -¡Dímelo!- Volví a gritar, lo tome de la camisa, estaba muy alterado no me podía controlar. - Ash calmate, no te alteres. Ella no te quería decir nada para no preocuparte, pero no puedo ocultarlo-Empezo a soltar algunas lágrimas- Lo siento Ash es lo único que te puedo decir. Ella ahora está en su casa Lo solté, sabía que el no me iba a decir nada más, Fui rápidamente donde se encontraba Pikachu y mis demás Pokemon. -Lo siento Ash- Dijo en la lejanía el pelicastaño Me los lleve conmigo, fui al aeropuerto de Kalos - ¡Quiero el primer vuelo hacia Kanto! -Estaba apurado -El vuelo sale en 10 minutos, pero es posible que lo cancelen por el mal clima que hay en Kanto. Aún así ¿Quiere el boleto?-Dijo la recepcionista -¡Si!-Rapidamente lo pague, y fui directo a subirme en el avión, esperando a que no lo cancelarán. Paso el tiempo y el avión despegó. No descanse durante el vuelo, estaba demasiado preocupado para eso. Llegué a Kanto rápidamente me baje del avion. Pikachu seguía durmiendo desde que estaba con la enfermera Joy se encontraba muy exhausto asi que no lo quise alarmar. En unas cuantas horas llegue al bosque verde, acercándome a mi hogar. Había una fuerte lluvia, los pokemon sólo se refugiaban. Llegué a mi hogar, toque la puerta y salió un doctor acompañado de Mr.Mime. Me Alarme más, me fui directo a la habitación de mi madre, sin saludar a Mr.Mime y dejando en el sillón a Pikachu. -¿Qué es lo que pasa? - Le hable alterado a mi madre -Hola Ash, no pude ir a Kalos, pero me alegro que estés bien- Ella ignoro la pregunta -¡No cambies el tema! ¡Gary me dijo que enfermaste y vi salir a un doctor de aquí! - No me pasa nada- Sonrió - ¡No mientas, que es lo que pasa!- Dije de nuevo, No podía gritar por que no quería que se alarmara - No, Ash no pasa nada, me encuentro ¡Muy bien!-Se dirigió hacia mi con una sonrisa -Dime la verdad- Caí al suelo, con algunas lágrimas en los ojos. - Por favor Ash no sigas, no quiero alarmarte. -Se le empezaba acumular unas lágrimas en los ojos -¡Dime!- Dije débilmente evitando el llanto. -Te lo diré, pero no sigas llorando- Con lágrimas en los ojos.- Me diagnosticaron tumor cerebral, esta muy avanzado.- No lo podía creer -¡No! No puede ser cierto-Aprete fuertemente los puños. -Lo siento Ash no quería que te preocuparas- Me desmoronaba poco a poco, mi mundo se rompía a pedazos -¡Por favor dime que es mentira!- No quería comprender lo que sucedía - Ash, yo jamás te mentiría- Caí en llanto, me encontraba muy triste para seguir la conversacion. Golpee fuertemente el suelo. Ella sólo me veía con tristeza. Me eche al suelo, no podía soportar aquella situación. Salí de aquel lugar bajo la fuerte lluvia me dirigí al bosque. Gritos descontrolados se escucharon por todo pueblo paleta. -Fin del capítulo- Espero que les guste, esta es mi primera historia en este foro. Sin nada más que decir ¡Adiós!.
Esto está bastante sad... Pero está bastante bien. Es una... perspectiva muy pesimista de Ash, pero aún así, no se siente edgy ni da la impresión de ser un mal intento de bashing o de venganza... realmente estoy muy interesado por cómo pueda seguir a partir de ahora y cómo va a sobreponerse Ash a lo que está viviendo. Da cierta vibra a fic de crecimiento que pega muy bien. Nos leemos.
Capítulo 2: Estruendo Seguir algo a lo que simplemente no estás destinado es estúpido, tener esperanzas de que algún día lo lograrás, lo es aún más. Me di cuenta muy tarde de eso. Por más que lo intentara, el resultado siempre fue la derrota, ¿Por qué lo seguí haciendo a pesar de los años? ¿Acaso quería alcanzar lo que me era imposible? Quise ser diferente a los demás, quería ser "único" pero sólo me volví como ellos. Mis intentos de ser recordado, eran sólo una contradicción. Cada pizca de anhelo se convirtió en un mal chiste. Mi mundo se desmoronaba ante mi, sentir la impotencia de no poder hacer nada por impedirlo era frustrante. -Inicio del capítulo- -¡No!- Mi pecho estallaba de dolor- ¡N..o!-Volví a gritar, mis palabras dejaron de ser coherentes.- La noticia de la enfermedad de mi madre, fue un duro golpe. Mi corazón no dejaba de estremecerse del dolor que me causo aquella noticia. Mis gritos… Mis llantos… eran escuchados sólo por aquella tormentosa lluvia que azotaba en el espeso bosque. Mi tristeza se convirtió en odio y frustración. -¡Si sólo no hubiera estado enfocado en mi sueño, esto jamás habría pasado!- Fuertemente con la mano me sujete el pecho, intentando disminuir aquel terrible sufrimiento. -¡Maldita sea!- Mis lágrimas se disipaban por aquella lluvia, la cual se hacía más fuerte con cada minuto que pasaba en ese lugar. Mi vista se empezaba a nublar, mi fuerza disminuía, no podía hacer nada por impedirlo. Intente levantarme pero no lo logre. ¿Irónico no? Eso me hizo recordar todas las veces que trate de hacerlo, sin conseguir ninguna victoria. Poco a poco, me sentía más débil. Mis movimientos eran nulos. En un momento para otro, ya no veía ni sentía nada. _ En casa de la señora Ketchum_ Preocupada y alterada, ¿Cómo no estarlo? Su hijo había huido de aquel lugar sin importar el fuerte clima que azotaba toda la región Kanto. Decide ir a buscarlo a pesar de que Mr. Mime le impedía el paso. Con un gran nudo en la garganta, Delia le responde-¡Por favor!- Aquella mirada que denotaba llena de angustia, con un par de lágrimas cayendo de su suave y terso rostro. Pero Mr. Mime esta decido a no dejarla pasar. -¡Déjame ir a buscar a mi hijo!-Aquellas lágrimas se convirtieron en sollozos. Mr. Mime sólo miraba la escena con dolor Cayó de rodillas al suelo, rompiendo en llanto. Aún así ella trató de razonar con el Pokemon, pero el no se inmutó. -¡¿Por que me haces esto?!-Ella rompía en llanto, después de todo el Pokemon no quería que empeorará de estado por la lluvia. Aquel Pokemon sólo sentía punzadas en del pecho. Delia sólo recobra la compostura, y con la vista fija en el Pokemon, sólo le dedica unas palabras. -No pasará nada, te lo prometo- A pesar de estar angustiada y con un gran tormento en su corazón, sonríe levemente haciendo conmover al Pokemon psíquico. El cual sólo se aparta del camino. Después de todo una madre haría lo imposible por su hijo. Ambos salen del lugar sin protección alguna, buscando indicios de donde habría ido Ash. Pero era imposible la lluvia había quitado todo rastro de el. Estando angustiada y desesperada, buscando sin cesar a su querido hijo, pero con tanto alboroto ella llama la atención de una persona, que se encontraba a unos cuantos metros a la derecha. Aquella persona vestía con una bata blanca, su apariencia era la de un anciano, con el pelo grisáceo, el cual esta acompañado de algunos Pokemon que parecían salvajes. Se acerca para saber que estaba sucediendo, pero con gran sorpresa y temor logra divisar a la persona. -¡¿Delia?!-Grito aquel señor con gran asombro y angustia.-¡¿Qué haces afuera!?- Sus gritos no fueron lo suficientemente poderosos para captar su atención. Delia, sin prestar atención alguna se dirige a un espeso y profundo bosque, que se encontraba cerca del pueblo. Aquel anciano trató lo más que pudo, por alcanzarla y detenerla pero fue imposible. Su velocidad no era la misma de cuando estaba en su juventud. Cansado y jadeando, no tuvo otra alternativa que adentrarse en ese bosque. Mr. Mime se encontraba del lado opuesto buscando a Ash Momentos después, un gran estruendo sacudió todo pueblo Paleta, proveniente del bosque. Un grito totalmente agudo alerta a Mr.mime. _Fin del capítulo_ Espero que les este gustando mi historia, estoy dispuesto a recibir opiniones de cualquier tipo :D. Hasta pronto.
