de Inuyasha - Segunda familia

No nací de ella, pero la amo como si así hubiera sido. No llevo su sangre, pero al presenciar su valentía me hace sentir tan orgulloso como si la tuviera.

Los personajes de esta historia no me pertenecen. Son propiedad de Rumiko Takahashi, autora de: “InuYasha: Un cuento feudal de hadas”
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Mi madre murió cuando yo era muy pequeño, no pude entender jamás su repentina ausencia y sentía miedo por ella. A pesar de mi corta edad yo conocía el más grande temor de mi madre, la soledad; por eso le preguntaba a mi padre ¿Quién cuidará ahora de ella?, ¿Quién le hará ver que no está sola?; Mi padre sólo sonreía con tristeza y me contestaba: “Mientras tú no dejes de pensar en ella, jamás estará sola”…

Unos años después, mí padre también murió; Y ahora fui yo quien se sintió completamente solo y desprotegido, pero afortunadamente no fue más que un corto tiempo, porque entonces los conocí.

Ella es dulce y cariñosa; Siempre que puede me llena de dulces y juguetes, cuando no puedo dormir ella me arrulla con una melodiosa canción hasta que caigo dormido, y no mencionemos las noches que no le ha importado pasar un poco de frío con tal de cubrirme por completo con la cálida frazada; Ella no es un reemplazo de mi mamá que ya se fue, ella se ha ganado en mí un único y profundo cariño, sin duda una excelente madre.

Él, bueno, es alguien demasiado tosco y hasta a veces inmaduro, quizá sea porque ha sufrido mucho más que cualquiera de nosotros; Pero en el fondo es alguien noble e increíblemente valiente. Aunque a veces me vuelva completamente loco y me haya dejado inconsciente de un solo golpe más de una vez, sería yo un ingrato si no reconociera las veces que me ha alentado y ayudado a llenarme de valor para enfrentarme a situaciones que me aterraban; peleamos, gritamos y hasta nos golpeamos, él más brusco que yo, pero me llena de orgullo verlo como mi padre.

Jamás olvidaré a mis queridos papás y todos los momentos que viví con ellos; ya no me preocupa que mamá se sienta sola, ahora está con papá que sé bien que él se encarga de protegerla y recordarle lo mucho que la ama; sé que aunque no pueda verlos, ellos me siguen y me cuidan tal como lo hacían cuando vivían, y también sé que ellos se encargaron de poner en mi camino a mis nuevos papás…

-¡Shippo!, Entra a la cabaña, ahí afuera está muy fresco

-Keh, enano tonto, ni creas que detendremos nuestro viaje si te resfrías

Respiro profundo y le dirijo una última mirada al cielo –Nos vemos después mamá, papá…-

-¡Shippo!- me gritan al unísono

-¡Ya voy!- les contesto a mis nuevos papás y corro hacia ellos…

FIN ~
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Aquí un drabble que se me ocurrió hace unas horas me encantó el resultado, espero que a ustedes también