Long-fic de Inuyasha - Seduciéndote para Protegerte [Inu&Kag]

Re: Seduciéndote para Protegerte [Inu&Kag]

¿Querían Epilogo? Les doy epilogo


Epilogo

Una mujer de ojos marrones y cabello azabache conversaba con su hija, de rasgos parecidos, en la cocina de su hogar. La más joven de la casa, llamada Aiko, lloraba mientras una furia en su garganta peleaba por salir
-¡Es que no lo entiendo, mamá! Nosotros solo somos amigos, no comprendo porque se enoja cuando voy con Bankotsu. Somos a-mi-gos, no es para que se ponga como un novio celoso!-dijo la niña
-Solo quiere cuidarte, hija, no intentes comprenderlo porque será imposible-dijo Kagome
-¡¿Cuidarme de que?! ¡No hay ningún peligro! Ni que Bankotsu fuera una mala persona-dijo Aiko indignada
-Nunca se sabe…-dijo Kagome con un suspiro
-Pero mamá, yo lo conozco, se que es un buen chico. Tú también lo conoces, ¿te parece alguien que pueda hacer daño?-dijo Aiko
-No lo sé, cariño, pero quizás deberías intentar hablarlo con Hiten-aconsejó la madre
-¡Lo he intentado! Pero siempre termina criticando a Bankotsu, y él es mi amigo, no me gusta que hable mal de él!-dijo Aiko
-¿Y por qué le cae tan mal?
-¿Cómo puedo saberlo? Todo lo que Bankotsu hace le molesta. Y ni hablar si me llega a abrazar, se pone como loco! Y lo peor de todo es que si Hiten me abraza, es Bankotsu el que se enoja!
-¿Y por que no hablan ellos para arreglar sus diferencias?
-¡Terminarían matándose! Yo quiero mucho a Hiten, pero solo somos amigos, en cambio con Bankotsu…-dijo Aiko y sus ojos se encendieron
-Ah, con que hay más que solo amistad con Bankotsu
-Si…-admitió la joven
-Es normal que Hiten se enfade, él solo quiere cuidarte. Él siente que Bankotsu le esta robando a su mejor amiga, siente su amistad amenazada
-¿Quién esta perdiendo a su mejor amiga?-preguntó un hombre de ojos dorados y cabello negro entrando en la cocina yendo directamente al refrigerador
-Hiten-dijo Kagome
-¿Otra vez pelearon?¿Esta vez por qué?-preguntó Inuyasha sirviéndose jugo
-Por Bankotsu-dijo Aiko con rabia
-Hiten esta celoso de Bankotsu, y siempre terminan peleando. Hiten solo quiere cuidar a Aiko, pero ella se enoja. Esa historia me suena conocida, ¿no querido?-dijo Kagome. Inuyasha escupió su jugo
-No se de que hablas, cariño jeje-dijo Inuyasha con un risa falsa-además, dile a Hiten que se quede tranquilo, no va a perder a su mejo amiga
-¿Cómo estas tan seguro, papá?-preguntó Aiko
-Porque tú no tendrás novio hasta los 30 años-dijo Inuyasha
-Si, claro, ¿y como podrás asegurarte de eso? No controlas mi vida, papá-dijo Aiko a la defensiva-no puedes saber cuando estoy con alguien y cuando no
-¿Crees que no tengo mis contactos? Yo no soy quien se encargará de mantener a los chicos alejados de ti, lo hará tu hermano.
-¡Ja! Si claro, que solo lo intente ese bueno para nada. Mi hermano ni si quiera sabe cual es mi salón. Podría pasar frente a él a los besos con un chico y él ni si quiera se movería de su estúpida computadora
-¿Eso crees? ¡¡Shippou!!-gritó Inuyasha
-¡¿Qué sucede?!-respondió el aludido desde su habitación
-¡Ven aquí un momento!-dijo Inuyasha
-¿Era necesario gritar?, ¿no podías ir a su habitación a llamarlo?-dijo Kagome
-¿Qué pasa?-preguntó un joven de cabello negro y ojos verdes, como su abuelo materno. Detrás de él venían sus amigos
-¿Sabías que un tal Bankotsu ha intentado coquetearle a tu hermanita?-dijo Inuyasha
-¡Papá!-dijo Aiko mientras Kagome se tomaba la cabeza resignada
-Mossou, ¿tienes la dirección de ese idiota?-preguntó Shippou a uno de sus amigos sin perder la calma
-Creo que podría conseguirla, mi hermano va con él al mismo salón-dijo Mossou
-Bien, esta tarde emboscada a su casa. Hay que conseguir huevos, harina y un poco de yogurt-dijo el de ojos verdes
-¡Ni se te ocurra!-dijo Aiko levantándose
-Cállate, niña-dijo Shippou
-¡Solo porque seas 2 años mayor que yo no te da derecho a llamarme niña!-dijo Aiko
-Claro que me da derecho-respondió Shippou
-Tiene razón, Aiko, aún eres una niña-dijo Inuyasha
-¡No te metas, Papá! ¡Asssh! Ustedes dos creen que tienen control en mi vida, pero yo hago lo que quiero, no me importa si les agrada o no!-dijo Aiko
-Sigue con tu ilusión, pequeña, pero tarde o temprano tendrás que resignarte-dijo Inuyasha
-¡Mamá! ¡Diles algo!-dijo Aiko
-Inuyasha, la niña tiene razón, déjala vivir su vida en paz, y Shippou tú también. Aiko tiene derecho a hacer lo que quiera, ya tiene suficientes problemas como para que ustedes le den aun más-dijo Kagome
-¡Lo ven!-dijo Aiko
-¡Keh! Tú no tendrás novio mientras pueda impedirlo, no importa lo que diga mamá-dijo Shippou
-¿Ustedes piensan que tienen control sobre mi vida? Ja! Ustedes serán los que se resignen-dijo Aiko
La joven rebelde fue hacía donde estaba su hermano. Le dirigió una mirada desafiante, y luego tomó a Mossou, quien estaba al lado de Shippou. Todos miraron atónitos como Aiko atraía a Mossou hacía ella y lo besaba sin ningún pudor. Fue un pequeño roce, pero suficiente para desatar la furia de su hermano y su padre. Enseguida Kagome se lanzó a detener a Inuyasha y Entei, el otro amigo de Shippou, hacia lo mismo con el de ojos verdes.
-Suéltame, Entei, voy a matarlo!-dijo Shippou forcejeando
-¡Kagome! ¡Déjame que lo asesine!-dijo Inuyasha
-¡Pero yo no tuve la culpa! ¡Fue Aiko quien me besó!-se excusó Mossou sonrojado y asustado. Aiko solo se río
-Aiko, sácalo de aquí, ¡rápido!-dijo Kagome, teniendo problemas para detener a su esposo
-¡A la orden, mamá!-dijo Aiko y tomando a Mossou del brazo se lo llevó
-No dejes que escape, Kagome!-dijo Inuyasha
-Entei, maldito traidor ve tras él!-dijo Shippou
Mientras tanto, Aiko sacaba a Mossou de la casa. Cuando abrió la puerta principal vio a un hombre con los mimos ojos de su padre, junto a él una mujer con el cabello negro cortado en capas cargaba un bebé y detrás de ellos un joven de unos 17 años con ojos marrones como su madre.
-¡Tíos! Llegan justo a tiempo-dijo Aiko sonriendo y se fue corriendo junto con Mossou
Sesshomaru miró a Rin y a su hijo mayor, podían escuchar el alboroto en la cocina. Entraron cautelosos, y se encontraron con el panorama de la pelea. Kagome y Entei les pedieron ayuda, y les tomó varios minutos – más unos cuantos gritos de Kagome – lograr calmar a Inuyasha y Shippou.
Mientras tanto, a varias cuadras del lugar, Mossou y Aiko por fin dejaron de correr. Bastante agitados se sentaron en un banco del parque para recomponerse. Aiko se río, y Mossou la miró de reojo
-¡Estas loca! ¡Casi me matan por tu culpa!-dijo Mossou
-Jaja debiste ver tu cara, jaja, no esperaba que te fueras a sorprender tanto-dijo Aiko
-¡¿Cómo esperaba que reaccionara?! ¡Me besaste!-dijo Mossou
-Oh, vamos, hablas como si fuera tu primer beso jaja-dijo Aiko sin dejar de reír
-Maldición, Aiko, ahora tu padre y tu hermano van a matarme-dijo Mossou tomándose la cabeza
-No es para tanto, tus padres hablaran con mi papá y lo calmarán, y de mi hermano se va a ocupar mi mamá-dijo Aiko
-Lo dices como si fuera tan fácil-dijo Mossou
-Estoy segura que Sango y Miroku podrán con mi papá. Y Shippou, bueno, en cuanto esté de nuevo frente a su computadora se olvidará del tema
-¿Y que pasa si mis padres no pueden calmar a tu papá?
-Ya cálmate, si? Ellos lo harán, y si no lo hará mi mamá. Además, tarde o temprano tendrán que aceptarte-dijo Aiko acercándose peligrosamente
-Odio que hagas las cosas tan simples-dijo Mossou
-Vamos, actúas como si hubiera sido la primera vez que nos besamos-dijo Aiko y lo besó.
-Hablando de besos. ¿Cómo es eso de que Bankotsu te estaba coqueteando?-dijo Mossou
-Oh, no. ¡Tú también! Bankotsu es solo un amigo, me esta ayudando a distraer a mi papá y mi hermano para que no sospechen nada de nuestras relación-dijo Aiko sonriente
-¿Y para eso es necesario que te toque?-dijo Mossou celoso
-¡Oye! Para los celos esta Hiten, tú no molestes! Ahora vamonos-dijo Aiko levantándose
-¿A donde?-preguntó Mossou
-¡A tomar un helado!-dijo Aiko tan sonriente que le contagió su alegría a su novio.

Fin [Y ahora no me salgan con 'la segunda parte' porque mando a cerrar el Fic]