Sala de Música

— ¡Claro que tienes que participar, eres la princesa! — Dije riendo. Esa mini obra que improvizamos sirvio para subirme el animo, y no solo a mi, todo el mundo parecia de mejor humor. — Hola, Brooke. — Dije saludando y dejando aparte mi personaje de Juez real. — Perdona por acusarte, pero ya sabes, el personaje... — Rei mientras observaba el disfraz de bufón que traia Dani, le quedaba muy chistoso.

 

--Supongo que sí, yo tampoco pude reclamarte a mi padre desaparecido, que no comprendo aún quién es --dije con duda.

 

--Vale... es que llegaron de repente y eso me confundió pero si parciparé-- afirmé emocionada.

 

— Tranquilo... después de todo preferible que me acuses a que Daniela me queme en la hoguera — dije riendo, aunque fuera broma verme en una hoguera me resultaba algo tétrico — En el segundo acto podrás reclamarme un poco Natalie..

 

( No vi el mensaje, perdón xD jaja es que ahora estoy conectado desde mi celular y me tardan en aparecer los mensajes, olviden lo que puse jajaja )

 

—El rey es una sorpresa—Dije emocionada, las se mis pelotas imaginarias al aire i coloque mi sombrero en donde supuestamente caerían para luego colocármelo—No prendería una hoguera, aunque mi vida dependiera del fuego no prendería ni una pequeña hoguera, cosas malas pasan cuando hay fuego—Mencioné, tome aire y sonreí nuevamente, casi olvidando lo que dije.

 

—Con una actitud noble y gentil—Agregue riendo.

 

— En definitivo, es Graham Natalie — dije sonriendo, esperando que Evangelin y los demás llegaran de casualidad por aqui

 

—Me gustaría que Monokuma abriera un teatro, sería maravilloso tener un lugar especial para actuar—Dije con una mirada soñadora.

 

--No dudes en llamarme para cuando hagas alguna que otra obra, disfruto ver a las personas actuar --dije feliz.

 

—Prepárense que la obra continuara, Natalie quédate aquí—La tomé por los hombros y la conduje fuera de mi escenario—Espera aquí y cuando mencionemos nuevamente a la princesa entras con un semblante triste—Le pedí con una sonrisa

 

— ¿Entonces.. ya puedo contestarle al Juez? — le pregunte a Daniela que vendria siendo tambien la directora

 

--¿Eh? ¿Qué personajes interpreto? --pregunté confusa.

 

—Eres la princesa Natalie.
Me puse en medio de mi escenario Con una postura firme mirando a mi público imaginario y con los brazos abiertos y vos fuerte y clara dije—Daremos comienzo al segundo acto de la obra "El rey desaparecido", recuerden quitar el flash a sus cámaras debido a qué puede des concentrar a los actores, gracias por su atención—Dije como sí fuera una máquina, me dirijo a los "Actores" y dije—Pueden continuar.

 

Miré al Juez que se encontraba dalante mio y después de jugar un rato con mi cabello comencé a caminar al rededor de él, observandolo — Hmm... tal vez no sea suficiente, el rey es tan buena persona que creo que la recompensa no es suficiente señor juez... — dije fingiendo estar decepcionada

 

—Os regalare mis vienes materiales si logra traer a nuestro rey de vuelta—Dije con desesperación mientras unas pocas lágrimas caían de mis ojos, aprendí a llorar a voluntad.

 

Vi como Brooke entraba en su personaje poco a poco y luego respondia, era gracioso, porque empezaba a actuar como la antagonista, asi que respondi:
— Bueno, ¿Que tan codiciosa puedes ser, hechicera? Que hasta el bufón te ha ofrecido sus bienes materiales, ¿Que mas puedes querer? Habla, que el tiempo apremia y nuestro rey aun no aparece.

 

—Y se escucha un sollozo tras la puerta de la pobre princesa que no ha bulto a ver a su padre tras la tragedia—Comente, dándole paso a Natalie para que actuara.

 

--¡Mi padre! ¡Mi querido padre! --gritaba entre sollozos. --Por favor, devuélvanlo, es... es lo único que me queda, no tengo a nadie más y ya está muy viejo --dije tirada en el suelo, cubriéndome la cara con un pequeño trozo de tela.

 

— Creo que tú mas que nadie entenderás, querido Juez...que nosotros los hechiceros no la tenemos fácil en este que es nuestro mundo — hice una pausa y sonreí — Incluso con lo que me ofrecen no bastaría para poder cumplir la misión que conlleva este poder.—noté que la princesa pedía a su padre — Tendrás que convencerme con algo mas que simples lagrimas. Princesa