Momoko Chiaki Desconectarse forzosamente de un juego de este estilo era algo que no le deseaba a nadie. El punzante dolor de cabeza que me martilleaba era incesante y terriblemente molesto. Apenas logré concentrarme en las palabras del director, mucho menos en la de los demás alumnos... si es que estaba diciendo claro. Estuve un buen rato quieta, intentando recuperar la normalidad en mi cuerpo, con los ojos cerrados. Cuando lo logré, abrí los ojos y vi que un par de mis compañeros ya se habían ido de la sala. Parecía que teníamos el resto del día libre pero mirando el reloj me di cuenta de lo tarde que realmente era. No pude evitar dejar escapar un bostezo. Algo más calmada tras el sorprendente evento, decidí pues encaminarme hasta mi habitación. Si había algo para cenar, no quería ni oírlo, el estómago se me había cerrado por completo.