Sala de audio y vídeo

--En verdad me gusta--afirmé sonriendo. En eso miré a los alrededores y pude notar al chico que acababa de ver su vídeo.
--¿Ocurre algo? --pregunté.

 

—Claro que ocurre algo Nat...—le dije en un tono un poco más bajo, pero qué niña ¿acaso no recordaba lo que vio hace minutos?

Nos acercamos hacia el nuevo, quien aun estaba sentado frente al monitor.—Hey carnal... tranquilo.

 

--Oh... es verdad--dije recordándolo. --Creo que se me pasan muy rápido las cosas... pero ¿estás bien? --pregunté preocupada.

 

Momentáneamente el mundo se detuvo por varios segundos mientras mi cerebro comenzaba a guardar toda la información vista, simplemente guardé aquel disco en uno de mis muchos bolsillos interiores y saqué un par de monedas y comencé a juguetear con ellas entre mis dedos, debía perder un poco la ansiedad hasta que escuché una voces que parecían dirigirse hacia mí, me voltee un poco guardando una de las monedas:

-Amm, sí...-dije algo indiferente, mientras miraba a ambos que comentaban algo sobre lo que habían visto.-¿Alguno me pregunta que ha pasado?- pregunté cerrando mis ojos intentado bajar lo que parecía que iba a ser un posible dolor de cabeza más adelante...

 

—Creeeo que se trata de una excusa para que nos matemos entre todos—Miré hacia el techo de las instalaciones, me sacaba de onda tener que decirlo.—No preguntaremos que es lo que viste pero, en efecto... como dije, estamos atrapados en este lugar... para salir.... para salir... para..—Me distraje de forma repentinacon el juego que hacían sus manos, era entretenidamente hipnotizador.—Para salir... ah, sí, para salir... tenemos que matar a alguien...

 

--Quiere sacarnos de nosotros mismos y enloquecer supongo... eso no tiene gracia alguna--

 

-¿Un psicopata?- pregunté algo confundido mientras observaba a ambos charlando, parece que estaban mejor informados que yo.-Creo que me equivoque de academia.-dije algo sarcástico mientras seguía jugueteando con la moneda pasándola de una mano a otra de forma casi initerrumpida.-Se supone que esto es una escuela de habilidades ¿no?- pregunté algo confuso...

 

—Eso se suponíaaa hermano, pero, pero... Bueno, nuestro director es un oso de peluche, con eso te lo digo todo—El chico había sido traído a base de engaños como casi todos.

Después de explicarle toda la situación, con una que otra distracción por parte de su hipnotizante jueguito con las moneadas le hice una pregunta al muchacho.—¿Y cuál es tu talento?

 

Enseguida me sentí un poco mareada y me senté en una de las sillas --creo que tengo un poco de sueño--afirmé en voz baja y en unos cuantos segundos me quedé dormida.

 

-¿Un oso de peluche?- me pregunté con una pequeña sonrisa al imaginármelo debería ser 100% felpa...-Oh, mi talento es la magia...-dice haciendo desaparecer la moneda que tenía en mi mano y haciéndola aparecer en la oreja del chico.-Los clásicos siempre son los mejores...-dije mientras frotaba las manos y abría lentamente la mano demostrando que había desaparecido aquella moneda.-¿Y sus habilidades si no es hay molesta?- pregunté un poco frío mientras me volvía a sentar y observé como la chica se quedaba "noqueada"-¿Que le pasa?- pregunté por la chica.

 

—Qué qué demonios...—mis ojos estaban como platos. Rebusqué incrédulo en mi oreja, pero luego noté lo que hizo—¡Alucinaaaaaaaaaaaaaaaante viejo!

Yo amaba la magia, durante todos mis viajes había visto algunos trucos, sin embargo jamás preguntaba sus secretos, adoraba caer en la ilusión.—Yo soy músico amigo... y ella, bueno, no me lo ha dicho.—La chica se había quedado dormida de la nada, creo que tendríamos que llevarla cargada a su habitación.

 

-Simple ilusión, tío...-dije con una pequeña sonrisa, siempre sonreía cuando la gente se sentía feliz con su magia.-¿Músico? ¿De que tipo?- pregunté mientras observaba a la chica.-¿Está seguro que está respirando?- pregunté con una sonrisa irónica.

 

—¡Queeeeé onda amigo, haz otro, haz otro!—exclamé emocionado como un niño.

Tomé un poco de seriedad para responder a su pregunta—Músico mundial amigo, he recibido influencias musicales de todo el globo... aunque claro, tengo mis preferencias personales.

Seguidamente me acerqué y comprobé que sí, la chica respiraba, parece que el sueño tan sólo le había ganado.

 

-Bien solo uno más...-respondí sacando dos monedas y poniendo cada una en una mano distinta mientras la cerraba lentamente soplaba una y está desapareció de mi mano, luego me acerqué hacia él y le dije.-Sopla ligeramente para que la mano se transporte de esta mano a tu bolsillo...-dije con una pequeña sonrisa mientras escuchaba lo de su música a nivel mundial y sus influencias, pero aún miraba a la chica.-¿Como alguien puede dormir tan bien sabiendo que podrían asesinarla por solo un poco de libertad?- le pregunté al chico mientras pude observar como miraba a la chica y yo hice lo mismo.

 

Estuve caminando por todo lo que se nos permitia del edificio pero termine sin quererlo otra vez aqui, mi CD esta justo donde lo deje, en la mesa donde el cuervo habia estado sentado, lo tome y lo vi nuevamente, escuche que el mono y alguien más hablaba pero me sumi en ver el video otra vez, tengo que convenserme de que es digitalizado, encontrar errores es el primer paso.

 

Para cuando ingresé ya estaban presentes algunos conocidos. Reparé en que un nuevo estudiante encapuchado se había sumado a la pesadilla orquestada por Monokuma. Alcancé a ver el truco que había realizado con Graham, y supuse que ese talento lo había traído hasta la Academia. No quise ser maleducado con él, pero me urgía más darle al botón de "play" que saludarlo. Ingresé el CD que llevaba mi nombre, conecté mis auriculares y puse en marcha el vídeo.

Apareció, en toda la extensión del monitor, un fondo negro con un planisferio político dibujado en brillantes líneas verdes. Por un momento no ocurrió nada relevante, pero después comenzaron a encenderse puntos rojos en varias ubicaciones del mapamundi. Todos señalaban los lugares en los que se hallaban las fábricas de armas que mi familia había desperdigado alrededor del mundo, para que ningún ejército tuviera que esperar a que llegasen sus herramientas. Fruncí el entrecejo, desconcertado.
La pantalla parpadeó violentamente durante un fugaz segundo. No sé si fue impresión mía, pero estaba convencido de haber visto imágenes demoníacas, casi imperceptibles. Después del parpadeo aparecieron las imágenes de los incendios.

Todas, cada una de las fábricas de mis padres, ardían... Diversas tomas aéreas captaban cada catástrofe, una a una, ofreciendolas a mí con terrible violencia... Oía crepitaciones, sirenas, balas, gritos... Pero las fábricas ardían en solitario, olvidadas del mundo. El corazón se me encogió: toda el trabajo de mis padres se estaba reduciendo a cenizas, todas esas armas estaban desapareciendo... Y yo no podía hacer nada para evitarlo, porque como un estúpido había ido a parar a esa academia de los mil demonios... Si tan solo me hubiera unido al ejército, eso... eso no... Maldición... ¡MALDICIÓN!

Lo siguiente que vi me llenó de terror. Un primer plano del rostro demacrado de mi padre, del gran Pablo Igor Valenti. Mostraba una sonrisa orgullosa que no le había visto desde la muerte de mamá. De fondo podía ver la sala de estar de nuestra mansión, que no parecía haber sufrido el fuego (momentáneamente me sentí aliviado). De a poco, la cámara (o lo que sea) se fue alejando de él... Estaba sentado en un sillón...

La cámara se alejó más, y reveló que mi padre estaba sentado sobre una inmensa bomba atómica... en la que estaba estampada el logo que identificaba a nuestras fábricas. Me levanté con brusquedad, estupefacto ¿HABÍA FABRICADO UN ARMA NUCLEAR?

Entonces volvió a aparecer el fondo negro, esta vez con un texto: "Si no asesinas a alguien, la bomba estallará. Desaparecerá la única persona que realmente te quiere. Desaparecerá el pueblo en el que vivían juntos. Estarás totalmente solo en el mundo"

El video terminó. Muy despacio y sin parpadear, mi quité los auriculares. Al hacerlo, los lentes de aviador se posaron accidentalmente sobre mis ojos, oscureciendo todavía más el mundo que me rodeaba. Qué casualidad irónica...

Me tapé el rostro con las manos y así me quedé, apagado como el monitor.

 

¡Alto! Regrese la imagen, allí estaba el error que necesitaba, en los gemelos, con mi primer sueldo pagué tatuajes para todos mis hermanos e incluso Andrew así que conozco los de cada uno.

Alex tenía dos serpientes entrelazadas alrededor de su bicep y Drake tenía un pequeño detalle en el ojo y el mismo diseño alrededor se su pupila estaba en su bicep brazo contrario de su gemelo idéntico.

Andrew siempre se equivoca cuando los nombra pero en la grabación los dijo bien y eso nunca ha pasado es secillamente imposible que el video sea real.

-Busca el error- le dije a Alex que estaba bastante descolocado, pero mi voz era tan vacilante que lo repetí para creermelo yo misma -Busca el error, hay errores, los hay pues es digital, hay errores- lo dije lo suficiente mente alto para que todos me escucharon y estaba tan feliz que pude quedarme dormida allí mismo en la silla casi abrazando el computador.

 

Fui envuelto por la voz de Nix, que me hizo poner los pies en la tierra. Ya se había dormido para cuando pretendía darle una respuesta. Coloqué los lentes de aviador sobre mi frente para mirarla mejor. Tenía razón en sugerir que los videos eran poco más que montajes: yo mismo estaba contemplando esa posibilidad. Lastimosamente, aunque fuera verdad lo de la falsedad de las imágenes, éstas podían cumplirse a la brevedad, porque eramos nosotros los que estábamos encerrados en la Academia, mientras que ese oso maloso de dos colores, al parecer, contaba con más libertad de movimiento.

Dejé caer los lentes sobre mis ojos. Mientras conectaba los auriculares a mi reproductor, del que empezó a surgir mi música predilecta, me quedé recostado sobre mi silla, cruzado de brazos. Hice como que dormía (el vidrio de los lentes de aviador era demasiado oscuro para que alguien notase que no dejé caer los párpados), cuando en realidad pretendía estudiar el comportamiento de los que se hallasen en esa sala. Mi mente calculaba quiénes podían ser las personas más peligrosas a partir de ahora.

Las imágenes eran falsas, eso era lo más probable, pero ¿y si son predicciones de la futura tragedia? Otro iba a preguntarse lo mismo. La cordura de alguien podía llegar a derrumbarse y yo, el "Súper Estudiante Apuntador", tenía que estar listo para la acción.

Esperé en silencio.

 

Llegué a esta sala y me encontré con un CD con un video en el, pensé un poco y decidí no verlo porque al ver la reaccion de los demas probablemente sabía lo que contenía y pensé...esto nadie lo necesita, mas alla que sea cierto o no, lo que busca monokuma es debilitarnos y confundirnos mentalmente para que hagamos lo que el quiere, pero conmigo no sera así.

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Desde que vi el video, me había quedado bloqueada, desconcertada. No sabía que hacer. ¿Todo esto era verdad?
Aún así, escuché todas las conversaciones, pero la respuesta de Nix de "busca un error", me hizo reflexionar. Decidí volver a poner el video, colocarme de nuevo los auriculares y buscar el fallo.

--Buscar el fallo, pero...¿dónde? Todo parece tan real, que me asusta. -- me dije en voz alta.