Sígueme (NaruHina, SasuSaku, SaiIno, NejiTen, ShikaTema, GaaMatsu, SuiKa)

Hola ¿Qué hay? Sí, lo sé. ¡Me demoré mucho! Gomenasai, no era mi intención, solo que estaba un poco bloqueada y pues, gracias a Shayury pude terminarlo ^w^. ¡Lamento si hay errores! Bueno, espero disfruten ^w^.

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Capítulo 6​

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​

Las seis amigas estaban hablando en la habitación de Suigetsu. Karin de verdad que se sentía algo incomoda estando al lado de él albino. Después de lo que paso entre ellos cuando estuvieron solos, sentía vergüenza estar a su lado. Pero no podía irse, ya que Sakura no podía salir de la habitación de Suigetsu durante la próxima hora, ya que ella junto con Ino son las encargadas de la estadía de Suigetsu. Sakura le comentó que Ino pudo quedar de vocalista y que ella había quedado de asistente de Hinata. La Uzumaki sonrió ante tal noticia.

―Karin-chan ¿Te puedo preguntar algo? ―Le dijo de repente la Haruno. Karin la miro indicándole que prosiguiera con su pregunta―. Debemos tener un nombre el cual presentarnos mañana, queremos incluir la palabra ‘Ángel’ en ella ¿Se te ocurre algo para ayudarnos? ―preguntó finalmente.

Karin empezó a pensar alguna combinación con la palabra ‘Ángel’, pensó durante unos 10 minutos sobre algún nombre que combinara mejor con esa palabra. Hasta que al final llego a una conclusión.

―¿Qué tal ‘Hearts of Angels’? ―preguntó Karin a sus amigas.

Estas se miraron entre sí. Ese nombre era perfecto según ellas. Todas sonrieron para mirar a Karin. La pelirroja quedo confundida, pero al instante pudo entender lo que a sus amigas se les paso por la cabeza. Antes de que pudiera reaccionar, tenía a sus amigas abrazándola con intensidad.

―¡Gracias Karin! ―agradecieron las cinco al unísono. La Uzumaki sonrió, mientras que los chicos miraron confundidos. Al separarse de ese gran abrazo, Naruto se animó a preguntar.

―¿Por qué el abrazo? ―preguntó el rubio confundido. No entendía que pasaba, Sasuke y Suigetsu menos.

―E-Es q-que f-formamos una b-banda femenina. P-Pero no s-sabíamos q-que n-nombre poner, s-solo e-es eso. ―responde Hinata tímidamente mientras hacía su típico juego con sus manos y se sonrojaba un poco. Naruto la observó durante unos segundos, cosa que hace que Hinata se sonrojara más.

―¡Ah! ―dijo, mientras ponía un dedo en la barbilla. Después de una pequeña pausa dijo con una radiante sonrisa.― Suena genial. Espero les vaya bien con la banda. ―respondió finalmente brindándole una gran sonrisa a la joven de ojos perlas. Esta enrojeció―. ¿Eh? ¿Te sientes mal? ―preguntó el rubio para acercarse a la azabache y tocarle la frente―. Estas rojísima. Pero no tienes fiebre... ―Naruto se vio interrumpido, ya que Hinata cae desmayada en su brazos―. ¿Eh? Oye, oye ¿Estas bien? ―preguntó, mientras la movía con delicadeza intentando despertarla. Los demás veían la escena con gracia. De verdad que Naruto parecía un tonto tratando de despertar a Hinata.

―Descuida Naruto, Hinata está bien. ―tranquilizó la Haruno mientras se acercaba a sostener a su amiga―. Veras que despertara en unos minutos, no te preocupes―.

―De acuerdo gracias Sakura-chan. ¿Así que se llama Hinata? ―preguntó el Uzumaki. Sakura asintió sonriendo le.

―¿Por qué Naruto-chan? ¿Acaso Hinata te gusto? ―preguntó la pelirroja haciendo sonrojar al rubio, pero después de unos minutos sonrió.

―N-No Karin-chan, s-solo es q-que me cae b-bien. ―respondio apenado el Uzumaki para cruzarse de brazos y bufar. Las chicas rieron ante tal acto del rubio.

―Dobe… ―se escuchó de Sasuke. No solo el rubio se dio vuelta para mirarlo, los demás también.
―¿Qué sucede teme? ―interrogó el de ojos azules a su amigo azabache.

―Debo irme a casa. Tú me trajiste, tú me llevas de vuelta. ―respondio seriamente cruzándose de brazos.

―De acuerdo teme. ―Accede el rubio con una gota en su sien. Sasuke estaba raro, muy raro―. Adiós Suigetsu, nos vemos y adiós chicas. ―el rubio se despide con un gesto de manos que fue correspondido.

―Adiós Suigetsu. ―Se despidió seriamente Sasuke. Las chicas lo miraron con una gota en su sien ¿Por qué era así? ¿Callado? ¿Distante? ¿Frío? Estuvo todo el rato en la habitación de Suigetsu sin decir nada. Luego de que Naruto terminara de despedirse de todos, los dos amigos se fueron del lugar.

―Bueno, es oficial. Somos ‘Hearts of Angels’ ―mencionó Temari a sus amigas. Estas asintieron sonrientes.

―Genial ¿Ya tienen una canción oficial? ―preguntó el albino. Las chicas asintieron.

―Nuestra vocalista no se encuentra ahora, pero tenemos nuestra canción llamada ‘Follow me’ ―respondio Matsuri.

― ¿Este hospital no se llama así también? ―preguntó Karin.

―Sí, es verdad. ―comento Tenten― Muchas casualidades, quizás ―agregó sonriendo, para que los demás rieran y se quedaran hablando un rato.











―Así que te gusta dibujar. Suena genial. ―comenta Ino mientras terminaba su batido de manzana y lo tiraba en el primer tacho de basura que encontró. Estaba en una pequeña plaza de comidas con Sai, ambos tenían sed así que pidieron un batido.

―Sí, gracias. Es un pasatiempo que siempre me gustó hacer. ―responde sonriendo el moreno―. ¿Te puedo decir algo? ―preguntó. Ino lo mira indicándole con la cabeza que sí―. Te ves preciosa ―basto para decir eso e Ino enrojece, Sai ríe por lo bajo― Lo digo enserio, preciosa.

―G-Gracias, supongo. ―agradece algo insegura la rubia―. Como sea, es raro que te lo diga alguien que apenas conoces, pareces pervertido. ―bufó la Yamanaka. A Sai se le coloca una gota en su sien.

―¿Acaso dijo pervertido? ―pensó confuso y sonriendo falsamente. Era la primera vez que le decían algo parecido.

―¿Te quedaste mudo que no dices nada? ―preguntó la Yamanaka a su pálido amigo. Este reacciono y se rió un poco―. ¿Cuál es la risa?

―Es que apenas me conoces y ya me consideras un pervertido. ―respondió el moreno. Es cierto, se conocen hace poco y ya lo juzga.

―Es que tú me das a entender eso ¡No es mi culpa! ―refunfuñó la Yamanaka cruzándose de brazos. Sai sonrió y siguieron hablando…






―Bueno Suigetsu me alegro que te encuentres bien, mañana le toca a Ino venir a verte, claro eso es luego de la audición. ―mencionó Sakura mientras le sonreía el albino. Las demás chicas a excepción de Karin se despidieron con un gesto en su mano mientras llevaban a cuestas a Hinata. La pelirroja decidió irse primera y sin despedirse de él, era vergonzoso debido a lo que paso antes entre ellos dos.

―Claro, gracias Sakura. Adiós chicas, suerte mañana. ―contesta el de ojos violeta para sonreír. Las chicas se fueron para que este desvaneciera su sonrisa por un semblante serio. Luego apoya su cabeza en su almohada y cerrara suavemente los ojos―. No puedo creer que estuve tan cerca de besarla... ―pensó― Tan cerca y a la misma vez tan lejos. Ahora que lo pienso, no se despidió ―pensó. Y era cierto, Karin se había ido sin que este se diera cuenta de ello. Fue raro para el ese momento ¿Qué hubiera pasado sí Naruto y Sasuke no interrumpieran? ¿Cómo se mirarían a la cara después? Son muchas dudas sin respuesta. Siguió pensando por un largo tiempo, hasta que finalmente decidió dormir un poco.







Sakura le estaba tocando la frente a Hinata para ver sí se encontraba bien. Al terminar de verificarlo suspiro para luego sonreír.

―Está bien, no se preocupen, solo fue un simple desmayo. ―contestó sonriente la Haruno.

―Qué bueno que Hinata-chan este bien, siempre me preocupa. ―bufó Matsuri cruzándose de brazos.

―Matsuri-chan tú sabes cómo es Hinata. ―comentó Tenten arqueando su ceja izquierda―. Como sea, debemos esperar a que despierte, no podemos irnos con ella desmayada.

―Tienes razón Tenten como sea, iré a buscar unos refrescos ¿Quieren? ―ofreció Temari. Todas asintieron para esta ir a buscar los dichosos refrescos.

―Karin-chan te he notado algo rara hoy con Suigetsu, no lo has insultado ni nada y me dijiste que te llevabas pésimo con él. ―mencionó la joven de hebras rosadas confundida. Karin se cruzó de brazos para suspirar―. ¿Ocurre algo?

―Estuve muy cerca de besarlo. ―confesó bufando, Sakura la miró algo sorprendida.

―¿Enserio? ―preguntó. La pelirroja asintió levemente―. Me alegro mucho por ti Karin-chan ―.

―Pero debes prometerme que no le dirás nada a Naruto-chan. ―Pidió a la Haruno. Naruto puede ser su primo y alguien simpático, pero a veces es muy sobre-protector con ella, por lo tanto muy celoso.

―Descuida Karin-chan. Tú secreto está a salvo con nosotras. ―le aseguró. La Uzumaki le sonrió para desviar su mirada hacia las puertas principales del hospital. Por ahí ve que pasa Temari con los dichosos refrescos.

―¡Chicas traje refrescos! No tengo idea de tú sabor favorito Karin así que lo escogí al azar. ―advirtió la blonda de cuatro coletas mientras entregaba las latas de refrescos. Karin sostuvo su lata y ve que su sabor era el de manzana.

―No importa, acertaste Temari este es mi sabor favorito. ―responde la pelirroja.

―Ah que bueno. ―contesta esta mientras tomaba de su refresco. Todas la imitaban, mientras esperaban a que Hinata despertara. Estuvieron hablando un rato hasta que ven que la puerta principal del hospital se abre dejando ver al Uzumaki después de dejar a Sasuke en su casa.

―¡Hola chicas! ¿Aún no despierta Hinata-chan? ―preguntó confuso mirando a la joven de ojos perlados dormir plácidamente, parecía un ángel tierno caído del cielo según Naruto.

―No, aun no. Naruto-chan ¿Puedes llevarlas a casa de Temari? ―pidió la Uzumaki a su primo― Es que con Hinata desmayada no pueden sostenerla hasta la casa de ella.

―Claro no hay problema. ―responde este con su sonrisa. Todas fueron hasta el auto del Uzumaki mientras que este cargaba a Hinata en sus brazos. Hinata en ese momento abre los ojos lentamente, Naruto se da cuenta de ello así que le sonríe.

―Ah, parece que ya despertaste Hinata-chan. ―pronunció alegre el Uzumaki con su gran sonrisa.

―¿N-Naruto-kun? ¿C-Cargándome? ―se preguntaba Hinata confundida para sonrojarse y después de un pequeño tiempo se desmayara otra vez.

―¿Eh? ¡Oye! ¡Hinata-chan! ―exclamó confundido el rubio de ojos azules―. Qué rara que es esta chica ―pensó mientras la miraba desmayada y sonrojada. Él sonrió para seguir caminando hacía el auto. Al subir, estaba el grupo de amigas en la parte de atrás con una Hinata desmayada, mientras que Karin estaba en el asiento de copiloto, y Naruto de conductor. Finalmente emprendieron el camino hasta la casa de la Sabaku no. Naruto pensó que sería un buen momento para conocer a ‘sus nuevas amigas’ y decidió preguntarles algo―. ¿Con que representante van hacer la audición? ―interrogó el rubio algo curioso, ya que su padrino Jiraiya era un representante muy famoso.

―Oye Tenten ¿Cómo nos dijo que se llama? ―preguntó Matsuri. Como siempre, no recuerda nada sobre la reunión posterior a la audición.

―Como siempre, nunca recuerdas las reuniones que tenemos con los representantes. ―regañó la joven de ojos chocolate. Matsuri rió con una gotita en su sien. Tenten suspiro―. Su nombre es Jiraiya. ―responde. Naruto al escuchar eso, queda impresionado ¿Por qué ero-sennin nunca le dijo que tendría una audición con un grupo femenino?―

―¿Con ero-sennin? ―preguntó. Las chicas lo miraron confundidas al ver la reacción del Uzumaki.

―¿Con Jiraiya? ―preguntó la Uzumaki confusa. Creía que Jiraiya solamente representaba grupos masculinos ya que se entendía mejor con los chicos, pero al ver que iba a escuchar a sus amigas, quedo un poco impresionada.

―¿Ero-sennin? ―preguntaron todas al unísono. Esa palabra les dio algo de incomodidad.

―No le hagan caso a Naruto-chan. Jiraiya no es ningún pervertido, solo le dice eso para molestarlo. ―aclaró la de gafas. Las demás suspiraron aliviadas por la aclaración― Pero me sorprende que hagan una audición con el padrino de Naruto-chan.

―¿Dijiste padrino? ―interrogó la Haruno. Karin asintió mientras se ajustaba sus gafas―

―Jiraiya es padrino de Naruto-chan. ―respondió sonriente.

―Creí que ero-sennin solo le gustaba representar bandas de chicos. ―dice confuso el Uzumaki―

―A lo mejor quiere probar con un grupo femenino. ―cuestionó Karin mientras bajaba un poco la ventana de la puerta del auto por un poco de aire.

―Sí, a lo mejor es eso. ―secundo el rubio. Siguió conduciendo hasta que las chicas le dijeron que se detuviera debido a que ya llegaron a la casa de Temari. Karin bajo del auto para poder despedirse de sus nuevas amigas. Mientras que Naruto cargaba consigo a Hinata.

―Espera Naruto, deja que abra la puerta y la acomodas en el sofá. ―dijo Temari mientras abría la puerta. Naruto entró con Hinata en sus brazos acomodándola en el sofá grande que había allí, al dejarla la observó detenidamente unos segundos.

―Se ve…linda. ―pensó el Uzumaki. Pero luego de decir eso negó rápidamente con su cabeza, salió de la casa y se despidió de sus nuevas amigas y se fue con Karin hasta su casa.

Las amigas se acomodaron en otro sofá que había allí y suspiraron. Estaban nerviosas por la audición ¿Y si no resultaba como querían? Los pensamientos de las cuatro amigas se vieron interrumpidos ya que entraba a la casa una rubia muy feliz.

―¡Hola chicas! ―gritó eufórica la Yamanaka. Pero al notar las caras algo serias de sus amigas. Miro confundida. ―¿Hm? ¿Qué pasa chicas? Y ¿Qué le paso a Hinata? ―preguntó confundida viendo a la azabache acostada y con los ojos cerrados.

―Hinata esta desmayada a causa de Naruto. ―contestó divertida la Haruno― Al parecer le gusto un poco. ―agregó sonriendo.

―¿Naruto? ―preguntó confundida la blonda. Ya que ella no estuvo cuando Karin presentó a su primo a la Haruno.

―Ah, cierto que no estabas cuando Karin me lo presentó. Naruto es primo de ella, y al parecer el chico que le gusta a Hinata. ―agregó sonriendo pícaramente. Pero dejo de reírse ya que Hinata estaba despertando. La azabache se rasco un poco su cabeza y miró confundida a sus amigas y luego recordó que paso.

―Hola, c-chicas. ―saludó nerviosa mientras sonreía. Las demás sonrieron picaras pero decidieron no molestar a Hinata con lo sucedido.

―Oigan ustedes dos, tenemos una noticia. ―se escuchó de la castaña de pelo suelto. Hinata e Ino miraron a la joven de orbes negros confundidas ¿Una noticia? Se preguntaron para ellas.

―¿Qué es? ―preguntó entusiasmada la joven de ojos azules.

―El representante con el que haremos la audición mañana, es padrino de Naruto. ―contesto. Hinata al escuchar, enrojeció de repente ¿Acaso alguien le estaba haciendo un favor? Aunque no pudo evitar preguntar para que le confirmen.

―¿Eh? ¿E-El padrino d-de N-Naruto-kun será q-quien nos va a e-escuchar? ―preguntó sonrojada Hinata. Quizás las chicas le estaban jugando una pequeña broma debido a lo que paso hoy en el hospital con el Uzumaki pensó para sus adentros.

―Sí, así es Hinata. Lo sabemos porque estuvimos hablando mientras Naruto nos traía a casa de Temari. ―agregó la castaña de chunguitos. La Hyuuga sonrió para hacer su típico juego de manos mientras sus mejillas seguían encendidas. Las chicas siguieron platicando mientras dejaban pasar el tiempo, sea la noche y finalmente que mañana sea la audición.







Naruto quiso llamar a todos sus amigos a excepción de Suigetsu ya que este aún seguía en el hospital, para invitarlos a la audición de mañana. Por supuesto no iba a decirles nada sobre eso porque sabe con anticipación que Sasuke, Gaara y Neji se negarían. Decidió llamar primero a Sasuke, sería una buena oportunidad hablar con él, ya que cuando estaba llevando a casa al azabache, este se mantuvo callado. Marcó su número y espero a que este atendiera lo cual le demoró unos diez minutos.

―¡Hola teme! ―saludó el Uzumaki con una estruendosa voz.

―Dobe, te dije que no grites cada vez que me hables por teléfono. ―regañó el Uchiha mientras se acariciaba su oreja ya que ese grito lo aturdió un poco.

―Lo siento teme. ―se disculpó mientras se rascaba su cabellera rubia mientras reía.

―¿Me vas a decir que quieres o qué? ―habló cortante el Uchiha.

―Quería invitarte a casa ya que haré una pequeña fiesta, invitaré a los demás también. No le digas nada a Suigetsu porque si no se va a molestar conmigo. ―pidió el Uzumaki. Sasuke se había negado, pero el rubio no dejo de insistir. Estuvo insistiendo por unos 20 minutos hasta que el Uchiha harto, aceptó. Y así, Naruto lo hizo otras tres veces más, ya que el único que no le costó tanto convencer fue Sai. Al terminar con su ‘trabajo’ se fue a la cama a dormir tranquilo. Mañana será un nuevo día.







―Chicas…mañana tendremos la mejor oportunidad que podríamos tener, el de ser reconocidas por nuestro talento. ―reconfortaba Tenten. Las seis amigas estaban sentadas en el piso, formando un círculo. Algunas tenían miradas de nervios, otras decididas― Demos lo mejor de nosotras, ¿de acuerdo? ―agrego poniendo su mano derecha en el medio del círculo. Todas se miraron entre sí. La primera en poner su mano sobre la de Tenten fue Ino, que fue seguido por Sakura y así, hasta que todas unieron sus manos. Se miraron sonrientes y decididas, debían dejar todo en esa audición―

―¡Ah ganar! ―se dijeron entre todas sonrientes mientras alzaban sus manos hacía arriba. La noche se apodero de la ciudad y las chicas pensaron que sería mejor irse a dormir ya que debían levantarse temprano. Todas se acostaron en sus respectivos sobres de dormir y cerraron sus ojos para el mañana, el día tan esperado por la banda.













El sol había salido de repente, golpeando así el rostro de las seis jóvenes que, con entusiasmo se levantaron y se dirigieron rápido hasta el armario. Estuvieron decidiendo que ropa ponerse, que peinado llevar y cuánto debían llevar de maquillaje. Luego de por fin decidirse, dejaron la habitación de Temari como un completo caos. Pidieron un taxi, cuando llegó, subieron rápidamente. Fueron directo hasta el estudio de grabación, cuando llegaron Jiraiya les indico que se preparen dentro de la cabina que ya las atendería. Cuando entraron, el albino fue hasta la recepción de su estudio para hablar con su asistente.









Naruto estaba en el jardín del frente de su casa. Esperando a sus amigos mientras miraba su reloj. Pudo averiguar por Karin que la audición sería cerca de las diez de la mañana y en el estudio de su padrino, así que les dijo a los demás que debían venir a las nueve de la mañana para empezar de lo mejor ese día. Claro que, estos no tenían ni la más remota idea de que iban a ir a la audición de un grupo femenino. Cuando Sasuke llegó en su auto junto a los otros, sonrió. Fue corriendo hasta el auto del Uchiha evitando que estos bajaran, se colocó en la ventana de la puerta del azabache haciendo que este bajara el vidrió.

―¿Qué pasa dobe? ¿No querías hacer una fiesta en tu casa? ―interrogó cortante el Uchiha. Naruto rió nervioso mientras se rascaba su cabellera rubia. Sasuke arqueó una ceja.

―De hecho, quería pedirte un favor… ―contesto. Sasuke lo miró indicándole que prosiguiera―. Debo ir a llevarle algo a Ero-sennin que está en su estudio de grabación y pues, como ya viniste con tú auto quería pedirte el pequeño favor de que lleves hasta allí. ―pidió inocente el rubio. Sasuke suspiro y asintió. El Uzumaki sonríe satisfecho de que su plan prosiguiera a la perfección, subió al auto de su mejor amigo en el asiento del copiloto mientras saludaba a los demás. El azabache emprendió el camino hacía el estudio de Jiraiya, que le tomó cerca de una hora ya que no quedaba muy cerca de la casa de Naruto.









―Hola, Jiraiya-sama. ―saludó el asistente del albino.

―Hola, Kakashi. ―saludó Jiraiya. Hatake Kakashi, tiene aproximadamente 27 años de edad. Pelo gris y ojos negros. Y oculta gran parte de su rostro con una máscara. Es asistente de Jiraiya desde que este comenzó con su carrera de representante. Se conocen desde que este era apenas un niño―. Escucha, las chicas estarán listas para salir en poco tiempo, necesito que… ―no pudo terminar de decir su oración, ya que escuchó unas pequeñas risas de cierto ahijado que tiene. Vio que por la puerta pasaban seis figuras, que eran Naruto con sus amigos, Sasuke, Neji, Gaara, Sai y Shikamaru―. ¿Qué necesitas Naruto?


―Hola, ero-sennin. ―saludó el rubio sonriente. Jiraiya lo regañó por el apodo que este le seguía diciendo aun cuando le ha dicho que le deje de llamar así. Siguieron discutiendo, mientras entraban a la cabina de grabación. Las chicas estaban listas para salir al aire. Jiraiya al llegar se sentó en su silla mientras se colocaba sus audífonos, Kakashi lo imitó. Los amigos de Naruto se sorprendieron al verlas allí tan alegres, como todo un grupo femenino.

―Ero-sennin de casualidad tienes audífonos para nosotros. ―pidió inocente el Uzumaki. Jiraiya le pidió a Kakashi que se los alcanzara. Este hizo caso y le dio a cada uno, un par de audífonos. Todos se los pusieron y esperaron para que ellas se presentaran.

―¡Somos ‘Hearts of Angels’ y le traemos nuestra canción ‘Follow me’! ―exclamaron las seis amigas. Mientras los seis chicos más el representante famoso y su asistente las observaban. Aunque, al ver a los chicos se pusieron un poco nerviosas. Pero eso no las iba a detener.

Continuará…

¡Adelantos!


¿?―¿Por qué eres una mujer tan problemática? ―cuestionó el Nara a Temari, mientras bostezaba.

¡!―Cantas hermoso…Ino-san. ―dijo Sai a la Yamanaka, logrando que las mejillas de esta se enciendan.

#―Tú…eres una molestia. ―habló de repente y cortante Sasuke. Sakura lo miró indignada, solo quería conocerlo un poco más.

*―¿¡Matsuri, te gusta Gaara!? ―gritó Temari, haciendo que todos miraran a las dos amigas, incluyendo al pelirrojo.


Espero que les haya gustado. Perdón, si no he subido hace un rato T_T. Bueno, eso es todo por el momento. Dejaré unas preguntas ^w^.

¿Les gustó?
¿Parte favorita? ¿Por qué?
¿Naruto sabe fingir muy bien? x’D
¿Errores? ¡Comenten! Trato de mejorar de a poco.



Eso es todo, espero disfruten. Saludos. Sayonara ;).

 

Hola, ¿qué tal? Espero que bien. Bueno dejaré el capítulo.



La canción que Ino canta esta en el capítulo 4 al principio ^w^. Espero disfruten, saludos.

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Capítulo 7​

​

Las chicas que estaban dentro de la cabina al ver a los chicos se pusieron nerviosas, no podían negarlo. Pero eso no va a impedir que canten, ya que es una de las metas que tanto querían cumplir. Sakura y Hinata, son las que ayudan al grupo con las melodías, letras de las canciones, etc. Pero en ese momento estaban dentro de la cabina, ya que ellas son parte de la banda, aunque no canten, ni tampoco toquen algún instrumento. En la cabina había un sofá, Sakura y Hinata se sentaron en él. Las chicas sostuvieron bien sus instrumentos, y Matsuri empezó a contar.

―¡En 1, 2…1, 2, 3! ―gritó animada, golpeando sus baquetas. La música empezó a sonar. Ino acercó sus labios al micrófono, esperando el momento para cantar. Sus ojos azules se cruzaron con los ojos negros de Sai. Este le sonrió, brindándole confianza. Ella sonrió, para luego empezar a cantar.

Ooh ​

I know you see me standing here ​

Do I look good my dear? ​

Do I look good today? (Today, today) ​

​

​

Ooh, ooh, ooh, ooh ​

​

​

I'm just another kind of girl, ​

And you want to see my world ​

So come and ride away ​

Yeah, yeah ​

​

​

Los chicos miraban el gran talento que poseía el grupo. Algunos chicos, les llamo la atención una chica en específico.​

A Shikamaru, le pareció extraño que le llamara la atención Temari. Tocaba muy bien la guitarra, además de que la pareció una joven linda. ​

​

​

If you wanna play ​

Come and play today ​

Let's just get away (yeah) ​

I will make you see ​

All of the things that you can be ​

Believe in yourself and follow me ​

​

​

Yeah, yeah, yeah ​

​

​

A Gaara le interesó el modo en que Matsuri tocaba la batería. Lo hacía de una forma, algo única. ​

​

​

Yeah yeah you have just gotta let it loose ​

And do what you choose to do ​

Don't walk away ​

​

​

Yeah yeah ​

​

​

El gran talento de Tenten con el piano, hizo llamar la atención del genio Hyuuga, además de que pensó por unos instantes que Tenten, le parecía linda. Pero, al pensar eso negó con su cabeza, y siguió escuchando. Hinata por su parte, se sorprendió que su primo se encuentre allí. ​

​

​

If you wanna play ​

Come and play today ​

Let's just get away (yeah) ​

​

​

Sai al escuchar a la Yamanaka, sintió algo dentro de él. No sabía que significaba, la veía allí, cantando con tanta pasión. Que sintió algo…algo que nunca había sentido antes.​

​

​

I will make you see ​

All of the things that you can be ​

Believe in yourself and follow me ​

​

​

Yeah yeah yeah​

​

​

Al terminar, Jiraiya, Kakashi y los demás presentes aplaudieron. Fue una gran canción. Las chicas salieron de la cabina de grabación y se acercaron hacia el albino.

―Bien, me pareció una muy buena canción. Pero, déjenme hablar con mi asistente en la recepción y en minutos les diremos nuestra decisión. ―respondió Jiraiya. Las chicas asintieron con una sonrisa. El albino junto a su asistente, Kakashi se retiraron del lugar para ir a la recepción y tomar una decisión. Temari, por curiosa que es, se acercó a los chicos.

―Oigan ¿Qué hacen aquí? ―preguntó indiferente. En realidad sus ojos estaban posados en Shikamaru, el cual bostezó y miró a la Sabaku no.

―Esa no es forma de hablarle a alguien. ―respondió el Nara. Temari bufó, mirando al joven de pelo negro con enojo.

―A ti no te incumbe como hable. ―contrarrestó. Shikamaru no respondió y decidió irse del lugar. Emprendió su camino hacia la puerta, pero alguien lo detuvo del brazo. Miró hacia atrás y pudo observar el semblante molesto de Temari―. Espera, aún no he terminado de hablar contigo.

―¿Por qué eres una mujer tan problemática? ―cuestionó el Nara a Temari, mientras bostezaba.

―¿Qué quieres decir con eso, vago? ―reprochó la rubia. Sakura pensó que esa pequeña discusión debería terminar, así que se acercó y los separo.

―Bueno, Temari, quien quiera que seas. Por favor, dejen de discutir. ―pidió la Haruno. Temari miró a su amiga, Sakura tenía esa mirada de inocencia en sus ojos. Esta suspiró.

―Está bien, como digas. ―respondió la rubia, cruzándose de brazos.

―Tks, solo para que lo sepas, mi nombre es Nara Shikamaru. No ‘Quien quiera que seas’ ―Informó a la Haruno, haciendo énfasis en ese nombre que le dio Sakura.

―¿Nara Shikamaru? ¿Eh? ―pensó la Sabaku no. Luego de esa pequeña pelea, Sakura y Temari se acercaron a las demás.

―Y yo que pensé que era, linda. Que aburrido, resulta que ella es problemática. ―pensó Shikamaru mientras se acercaba a sus amigos.






Ino se acercó a Sai, con una gran sonrisa. Este la miró acercarse, él estaba muy sonriente ese día y no precisamente de sus típicas sonrisas falsas. Más bien, era de esas pocas sonrisas verdaderas que él hacía.

―¿Qué te pareció? ¿Sai-kun? ―preguntó feliz la blonda. No sabía el porqué, pero quería saber la opinión del moreno. Le importaba, y mucho saber qué opina.

―Cantas hermoso…Ino-san. ―dijo Sai a la Yamanaka, logrando que las mejillas de esta se enciendan.

―G-Gracias, aunque no creí que te hubiera gustado tanto. ―resopló la joven de ojos azules, cruzándose de brazos.

―Bien, tengo una idea. ―dijo de repente. Ino lo miró, indicando que prosiguiera― ¿Qué tal si después de todo esto, quieres acompañarme a un lugar?

―¿Qué clase de lugar? ―interrogó la blonda. Sai sonrió, logrando confusión en ella.

―Es una sorpresa, que me gustaría mostrarte a ti primero. ¿Qué dices? ―propuso. Ino dudó un poco, tenía que admitir que quería ir a ese lugar con Sai, pero por otro lado…desconfiaba un poco de él. Podría estar tramando algo, o simplemente le está diciendo la verdad y tiene una sorpresa para ella, pero, ¿qué decir? Pensó unos momentos, hasta que optó por creerle.

―De acuerdo, Sai-kun. Después de que nos digan la decisión de Jiraiya iremos a ese lugar que quieres mostrarme. ―respondió sonriente. Este al escuchar la respuesta, la miró un poco sorprendido, no creía que fuera a decir que sí debido al poco tiempo que se conocen. Pero, de todos modos ella le dijo que sí. Sai, sonrió a la rubia, logrando sonrojar un poco a esta. Luego de eso se quedaron hablando unos momentos.







Sakura miró a Sasuke. Se acercó a él. Eso sería serios aprietos para el Uchiha, últimamente ha tenido pensamientos raros de ella, que nunca había pensado de una chica. Él, la observó acercarse, pero de todos modos su semblante serio no cambió. Decidió que no debía ponerse nervioso, y menos por una chica. La Haruno se acercó a él con una sonrisa.

―Hola. ―saludó esta. Sasuke la miró serio.―

―Hola. ―respondió, cortante. Se sintió un poco aliviado que no le haya contestado como un niño tonto.

―Me llamo Haruno Sakura. ¿Cómo te llamas? ―preguntó aun con su sonrisa.

―Sasuke…Uchiha Sasuke ―contestó de la misma manera que antes. Sakura lo mira algo molesta―. ¿Qué ocurre?

―¿Por qué eres así de cortante? La única manera en la que te reconocí fue porque eras, ‘el chico cortante, del hospital’ ―interrogó. Era algo dudoso que sea tan cortante. Simplemente hace que Sakura, sea alguien muy curiosa y haga hablar con esa persona tan antisocial ósea, Sasuke.

―Eso a ti no te incumbe. ―responde con intenciones de irse del lugar. Pero Sakura no se dio por vencida y se puso frente al azabache. Este la miró un poco sorprendido― ¿Qué rayos haces? ―cuestionó el Uchiha.

―Solo quiero saber, porque esa rara actitud tuya. ―insistió la joven de pelo rosa. Sasuke arqueó una ceja, nunca conoció a una chica más insistente, como lo era Sakura.

―Tú…eres una molestia. ―habló de repente y cortante Sasuke. Sakura lo miró indignada, solo quería conocerlo un poco más, se apartó del camino del Uchiha, haciendo que este prosiguiera hasta la salida. Sakura, miró de espaldas al Uchiha y se mordió el labio inferior, evitando soltar una lágrima.

―¿Molestia? ¿Qué sabes tú? ¿Uchiha Sasuke-kun de mí? ―pensó la joven de hebras rosadas. Aún mantenía su mirada sobre Sasuke, aunque este seguía de espaldas. Luego de un rato, este salió y Sakura volvió con las demás.







Mientras tanto, Jiraiya y Kakashi estaban platicando sobre el grupo femenino. Era una difícil decisión la que debían tomar. Jiraiya de repente suspiró, llamando la atención del pelo gris.

―¿Qué va a decidir, Jiraiya-sama? ―preguntó Kakashi. El albino miró unos momentos a su asistente, serio.

―Son un buen grupo, debo admitirlo. Pero, esa chica… ―contestó cruzándose de brazos, suspirando nuevamente.

―¿Qué chica? ¿La cantante? ―interrogó su asistente. Jiraiya negó con su cabeza, y luego mirar hacia un costado.

―La de pelo rosa, me parece un poco familiar. ―contestó, mientras seguía tratando de recordar en donde había visto ese rostro antes.

―Según tengo anotado, su nombre es Haruno Sakura. ―comentó Kakashi fijándose en su libreta. Haciendo que el albino, lo mire sorprendido―. ¿Qué sucede, Jiraiya-sama? ―preguntó.

―Nada, pero de todas formas, debemos informarles a las chicas sobre nuestra decisión. ―Respondió. Kakashi asintió y ambos fueron hasta el estudio, llamando la atención de los presentes. Las chicas miraron atentas a Jiraiya, esperando una respuesta.

―Bien, chicas, decidí darles una oportunidad. ―contestó. Las seis amigas, miraron felices a quien será su representante.

―¡Gracias! ―agradecieron al unísono. Jiraiya y Kakashi sonrieron. Luego, el semblante del albino cambió a uno serio, miró a Sakura que seguía sonriente.

―Sakura. ―Pronunció de repente. La joven de irises jade lo miró indicándole que prosiguiera― Necesito hablar contigo, serán unos momentos. Acompáñame hasta la recepción, por favor. Kakashi, tú también ven. ―pidió. Los aludidos asintieron y se retiraron del lugar. Ino miró algo preocupada.

―Me pregunto qué será lo que tienen que hablar con Sakura. ―susurró. Tenten que estaba a su lado la tranquilizó.

―Descuida, verás que todo resultara bien. ―tranquilizó la castaña de chunguitos. Ino se calmó, y le sonrió a la castaña.






Mientras, Matsuri y Temari estaba conversando sobre el recién momento que pasaron. Ambas estaban felices de que Jiraiya haya aceptado ser su representante. Pero, la castaña además se puso feliz que cierto pelirrojo la haya observado tocando la batería.

―Te noto más feliz de lo que deberíamos estar, Matsuri. ―interrumpió sus pensamientos la Sabaku no. Esta reaccionó nerviosa y negó rápidamente con su cabeza.

―T-Te equivocas… ―contestó en susurro mientras se sonrojaba, miró a Gaara. El pelirrojo estaba hablando con Naruto ya que no tenía nada para hacer que solo eso. Temari se dio cuenta la mirada que la castaña le echaba a su hermano menor.

―¿¡Matsuri, te gusta Gaara!? ―gritó Temari, haciendo que todos miraran a las dos amigas, incluyendo al pelirrojo.

―¡¿Eh?! ―gritó nerviosa―. ¿Qué dices Temari-san? Por supuesto que no me gusta Gaara-sama. ―negó rápidamente tanto con sus manos y con su cabeza. Temari estallo en carcajadas, logrando confusión en la castaña de pelo suelto.

―Solo bromeaba, sé que quieres a Gaara pero como un amigo. ―explicó la Sabaku no. Matsuri suspiró, ¿porque Temari le hacia esas bromas pesadas? Es obvio que siempre estuvo enamorada de Gaara, desde el primer momento que lo vio. Solo que nunca se lo dijo a nadie. Prefirió mantenerlo en secreto con ella misma.








Jiraiya y Kakashi le indicaron a Sakura que se sentara. Esta hizo caso y se sentó en un sillón cómodo que había en la recepción. El albino junto a su asistente se sentaron frente a ella. Jiraiya aclaró un poco su garganta para poder empezar a hablar…

―Bien, Sakura. Por casualidades de la vida, te vi familiar, sentí que te vi en algún lugar antes. Luego de que mi asistente dijera tú nombre, pude saber quién eres tú. ―pronunció. Sakura lo miró, algo confundida. Sasuke que decidió entrar nuevamente, vio que estaban hablando con la joven de pelo rosado. Así que decidió quedarse junto a la puerta para escuchar de qué hablaban.

―¿Ah que se refiere, Jiraiya-sama? ―preguntó sonriendo, algo nerviosa. Jiraiya aún seguía con su semblante serio.

―Me refiero, a que se cuál fue tu pasado. ―contestó. Logrando que Sakura lo mirara impresionada. Kakashi miró confundido a su superior ¿Ah que se refería? ¿Qué pasado de Sakura Haruno?

―¿Así? ―preguntó nerviosa. El albino asintió―. Demuéstrelo.

―De acuerdo. Sé que tus padres fallecieron en un accidente automovilístico cuando tenías la edad de 1 año. Fuiste adoptada por Tsunade, quien es una amiga muy cercana a mí. ―respondió. Sakura se mordió el labio inferior, para luego derramar una lagrima.

―¿Cuándo me vio? ―preguntó en sollozos.

―Oh, fue hace mucho tiempo. Cuando apenas tenías 5 años. Déjame contártelo ―contesto mientras se acomodaba en el sillón.

Flash Back.

Jiraiya estaba en el hospital ‘Follow me’ tratando de localizar la oficina de Tsunade. La rubia lo había llamado debido a que necesitaba que cuidara de su pequeña niña, que había adoptado a la edad de un año, algo que nadie sabe más que directora del hospital. Cuando llego a su destino, golpeó la puerta. Escuchó que le decían que pasara, abrió la puerta y pudo observar a Tsunade sentada en el piso, cruzando sus piernas mientras jugaba a las muñecas con la pequeña Sakura, de 5 años.

―Jiraiya, gracias por venir. De verdad necesitaba que alguien cuidara de mi pequeña Sakura. ―saludo la rubia de dos coletas.

―No hay problema Tsunade, sabes que me gusta ayudarte. ―respondió el albino. La blonda se levantó del piso y Sakura la imitó, sosteniendo la pierna derecha de la directora.

―Descuida Sakura. Mira, quédate con el tío Jiraiya ¿De acuerdo? ―le propuso la rubia. Sakura dudo unos minutos con su mirada de inocencia. Pero luego sonrió y asintió―. Esa es mi niña, bueno, me tengo que ir. ―Se despide de Sakura con un beso en la frente y emprendió su camino. No sin antes decirle algo a Jiraiya― Cuídala mucho, Jiraiya.

―Descuida Tsunade, sabes que la cuidare muy bien. ―contestó el albino con su sonrisa. Miró a Sakura que se había sentado en el piso a seguir jugando a las muñecas.

―Tío Jiraiya, ¿quiere jugar conmigo? Por favor. ―pidió la pequeña Haruno. Jiraiya le asintió sonriente y se sentó en el piso para jugar con ella.

Al pasar la tarde, Tsunade regresó. Sakura al verla le dio un gran abrazo, que la directora correspondió. Miró a Jiraiya, este estaba guardando todos los juguetes en el cajón. Pasaron unos momentos y Sakura finalmente se durmió rendida.

―Es muy simpática. ―comentó Jiraiya frente a la puerta. Tsunade lo miró, dudando unos momentos, pensaba en si revelarse la verdad, o no.

―Sí, es feliz aun por todo lo que tuvo que pasar. ―respondió mirando a la joven de irises jade.

―¿Hm? ¿Qué dices? ¿Qué tuvo que pasar? ―interrogó el representante. Tsunade volvió a dirigir su mirada hacía Jiraiya.

―Escucha, Jiraiya, debo admitirte algo. ―dijo de repente la blonda. El albino la miró confundido, pero luego de eso decidió sentarse a su lado.

―¿Qué? ―preguntó. Tsunade trago saliva y finalmente le dijo la verdad.

―Sakura…Sakura, no es mi hija biológica. ―reveló, mientras miraba a la de pelo rosa dormir como un angelito.

―¿Qué dices? ¿No es hija tuya y de Dan? ―preguntó. Tsunade negó con la cabeza―. Entonces ¿Cómo es que esta aquí?

―La adopte. ―contestó. Este se impresionó aun más― Verás, ella perdió a sus padres en un accidente automovilístico cuando tenía 1 año de vida. Ella no estaba con sus padres, ya que estaba en su casa siendo cuidada por una niñera ―explicó―. Yo tenía el enorme deseo de tener una hija, pero como los médicos me dijeron que no podía tener hijos…decidí adoptar una. Y aquí esta, Sakura Haruno. ―finalizó mirando con una gran sonrisa a la joven de pelo rosado, dormir plácidamente.

―No puedo creerlo… ―susurró, algo impactado por la noticia mientras se levantaba del sofá, en el cual estaba sentado junto a Tsunade.

―Por favor, prométeme que no se lo dirás a nadie. Ni a ella. ―pidió la rubia de dos coletas, aun con Sakura en sus brazos.

―Descuida Tsunade. Prometo no decirle a nadie. ―contestó el albino. Tsunade se lo agradeció y luego de eso se fue del lugar.

Fin Flash Back.


―Luego de eso, Tsunade me llamó diciendo que te dijo la verdad a los 8 años. Sin embargo, tú no te enfadaste con ella, porque sabes que Tsunade te quiere como a una hija biológica. ―agregó. Sakura se secó sus lágrimas y miró a Jiraiya― Eres fuerte, Sakura.

―Gracias…tío Jiraiya. ―respondió mientras abraza sin previo aviso al representante. El albino sonrió y correspondió el abrazo. Sasuke no podía creer lo que escuchó.

―¿Sus padres…fallecieron? ―pensó, mirando que las tres personas que se encontraban allí volvían hacia el estudio. Decidió esperar unos minutos, o pensarían que estuvo espiando o algo parecido.

Pasaron unos 10 minutos y Sasuke decidió entrar. Jiraiya les estaba explicando algo a las chicas.

―Bien, hablare con mi superior para que me dé la orden de lanzar la canción ‘Follow me’ y que recorra el mundo ¿De acuerdo? ―explicó. Las chicas asintieron― Por el momento, eso es todo. Pueden irse, tengo el teléfono de Temari para comunicar cualquier novedad. Adiós. ―se despidió. Todos salieron, menos Kakashi y Jiraiya. Cuando ya todos estaban afuera, se formó un tenso silencio.


Continuará…

¡Adelantos!

¿?―Es…hermoso. ―susurró impresionada la Yamanaka mientras observaba toda la ciudad junto a Sai.

¡!―¿Qué paso en tu infancia? ―interrogó el Uchiha a la Haruno.

#―Hola, Neji…que raro verte por aquí. ―saludó Tenten sonriente, al genio Hyuuga.

*―Pienso que eres rara, pero aun así, me gusta la gente como tú. ―pronunció el rubio. Hinata al oír eso enrojeció mientras hacia su típico juego con sus dedos.

¡Eso fue todo! Espero que les haya gustado, dejaré unas preguntas…


¿Les gustó?
¿Parte favorita? ¿Por qué?
¿Qué piensas del pasado de Sakura Haruno?
¿Errores? ¡Comenten trato de mejorar de a poco!

Bien, me voy retirando. Espero y pasen bien. Saludos.

¡Sayonara! ;).

 

¡Hola a todos! ¿Cómo están? Espero que bien. Bueno, gracias por los comentarios y los mg que dan -ya que son los que me alientan a seguir con la historia- . Espero que disfruten del cap, sí ven errores díganmelo. También si les gustó y quieren que siga xD. Bueno, creo que eso es todo.

Sígueme. ​

Capítulo 8.​

​

​

Al salir de la cabina se formó un tenso silencio. Los chicos estaban de un lado, y las chicas estaban en otro. Pasan 5 minutos y finalmente Sai decide hablarle a Ino, ya que como prometió, la iría a llevar a un sitio que, según él, es una sorpresa. Se acercó despacio, logrando las miradas de todos los presentes. Pero poco importó para el joven de pelo negro, se acercó a Ino y le sonrió.

―Ino-san, recuerda que iríamos a un sitio nosotros dos. ―Le recordó.

―Cierto Sai-kun. Vamos. ―contestó.

―Hum, me pregunto a qué sitio irán. ―habló pícaramente la joven de hebras rosadas― Apenas se conocen ¿Y ya son novios? ―preguntó. Basto para decir eso y logró que Ino enrojeciera y le respondiera a los gritos.

―¡¿De qué rayos hablas frente de marquesina?! ¡Por supuesto que no somos novios, es que Sai me invitó a ir a un lugar! Que novios ni que nada. ―contestó mientras se cruzaba de brazos y sus mejillas seguían encendidas. Las chicas rieron por el momento, mientras que de los chicos el único que las acompañaba en las risas, era Naruto.

―¡Oigan ustedes! ―gritó Temari― ¿Por qué no se ríen? ―agregó refiriéndose a los chicos a excepción de Naruto.

―Que aburrido…no tuvo nada de gracioso esa situación. ―resopló el Nara. Temari le dirige una mirada fulminante, que al parecer a Shikamaru no le intimidó ni un poco.

―Como sea, dejemos el tema atrás. ―reclamó la Yamanaka. Luego de eso, dirigió su mirada a Sai ―Vamos Sai-kun.

―De acuerdo. ―contestó con una gota en su sien. Nunca creyó que invitar a Ino a un lugar y los dos solos traiga con él problemas. Cuando finalmente Sai e Ino se perdieron de vista, fue cuando el silencio se apoderó del lugar nuevamente.

―Bueno, no sé ustedes, pero yo tengo que ir a una tienda de por aquí a comprar unas cosas, así que adiós. ―Se despidió Tenten con un gesto en su mano.

―Matsuri y yo debemos ir a una reunión familiar que teníamos prevista, por cierto…eso te incluye Gaara. ―Pronunció Temari, luego miró a su hermano, este asintió levemente.

―¿Reunión familiar? ¿Matsuri es parte de tú familia? ―interrogó la Haruno.

―Pues, hablé con mamá y me dijo que Matsuri tenía que ir sí o sí. Así que no tuve alternativa. ―explicó.

―Ah, ya veo. Bueno, buena suerte en la reunión. ―respondió Sakura. Temari y Matsuri le agradecieron para luego irse acompañadas de Gaara.

―Bueno, supongo que la ‘fiesta’ que planeó Naruto, era una farsa. ―recordó el genio Hyuuga, haciendo énfasis en la palabra ‘fiesta’. Los chicos restantes miraron a Naruto, el cual sonreía nervioso ante las miradas asesinas por parte de ellos.

―Vamos chicos, de todos modos la pasamos bien. ―se defendió el rubio, mientras se rascaba su cabellera rubia.

―Sí, claro, dobe. La pase de maravilla. ―habló sarcásticamente el Uchiha. Naruto le lanzó una mirada fulminante y luego se cruzó de brazos, y miró hacia otro lado haciéndose el indignado.

―Claro, teme. Tú siempre eres tan divertido en las fiestas. ―agregó el rubio en forma de sarcasmo. Siguieron discutiendo unos momentos hasta que Neji se hartó y decidió terminar esta discusión sin sentido.

―Detengan esta absurda pelea. ―regañó el castaño. Ambos se callaron, aunque con cierto enojo aun encima― Bien, ahora que ya se calmaron, diré que tengo irme. ―agregó en tono frío. Luego de eso, decidió marcharse, y da la casualidad de que toma el mismo rumbo que Tenten había tomado anteriormente.

―Chicos. ―habló Shikamaru llamando la atención de los dos chicos restantes― Tengo que irme, le prometí a Suigetsu que si tenía tiempo libre lo iría a visitar, y como Naruto nos mintió a todos no tengo otra cosa que hacer más que ir a visitarlo. ―agregó mirando al Uzumaki, este rió nervioso― Adiós. ―se despidió de sus amigos y se marchó del lugar. Otro silencio se apoderó del lugar una vez más, hasta que Hinata decidió decirle algo a su amiga de hebras rosadas.

―S-Sakura-san, no s-será mejor irnos a m-mí c-casa…yo la invito. ―comentó Hinata sonriendo. Sakura asintió. Estaban a punto de irse pero ambas chicas sienten que las sujetan de un brazo. Estas confundidas, miraron hacia atrás para observar que Naruto sostenía a Hinata y Sasuke a Sakura.

―¿Qué necesitas? ―preguntó la Haruno un poco cortante al Uchiha, la verdad que aún sigue molesta de lo que paso anteriormente con el azabache.

―Necesito hablar contigo. ―contestó. Algo que impresionó a la joven de hebras rosadas, quería decirle que no…que no deseaba hablar con él. No después de lo que este le dijo…‘molestia’ esa fue la palabra para que Sakura le tome un poco de odio al Uchiha. Estaba a punto de responder que no, pero, por alguna extraña razón dijo…

―De acuerdo. ―quiso golpearse a ella misma ¿Por qué rayos le contesto eso? No deseaba hablar con él, y sin embargo ha respondido sin conciencia de ello…lo contrario. Sakura se mordió el labio inferior, ahora solo quedaba hablar con él. Miró a Hinata, ella estaba muy roja y sabía el motivo de eso.

―Hinata-chan ¿Qué te parece si vamos a comer a mi restaurante favorito? ―propuso el Uzumaki. La Hyuuga lo miró enrojeciendo aún más, ¿acaso se trataba de una cita por parte del rubio?― Descuida, si te pones nerviosa porque piensas que es una cita deja de estarlo. Es una salida de amigos ¿De acuerdo? ―esas palabras hicieron que a Hinata se le fuera la pequeña ilusión que tenía. Pero tampoco podía desperdiciar esa oportunidad tan tentadora de pasar tiempo con el Uzumaki.

―D-De acuerdo, Naruto-kun pero…Sakura-san… ―miró a la Haruno. Esta le sonrió dándole a entender que no había problema de que ella salga con el Uzumaki.

―Vamos, ella tiene que hablar con el teme. ―respondió Naruto mientras se llevaba a la joven de hebras azabaches sosteniendo su mano, hacía Ichiraku.







Ino y Sai estaban caminando por lo que pareciera ser un pequeño campo que tenía un pequeño camino de azulejos blancos de mármol hasta unas escaleras llevando hasta lo más alto de ese campo. Sai le indicó a Ino que pasaran por las escaleras. Esta le hizo un puchero, estaba un poco cansada debido a la gran caminata que hicieron para llegar hasta aquí. Sai la miro sonriente.

―Vamos Ino-san…es solo subir esas escaleras y podremos ver un gran paisaje, que estoy seguro que te va a gustar. ―insistió el joven de pelo negro.

―Está bien Sai-kun, aunque este cansada iré hasta allí arriba. ―responde esta algo insegura ya que estaba muy cansada de tanto caminar. Sai miró a Ino algo exhausta por lo que se acercó a ella de a poco para inclinarse hacia adelante y señalándole a la Yamanaka que se suba a su espalda― ¿Qué haces Sai-kun?

―Estas muy cansada, vamos yo puedo llevarte hasta allí. ―contestó este, aun en posición para que Ino subiera a su espalda.

―De verdad, ¿no es problema? ―preguntó de nuevo la rubia. Sai le asintió― ¿Tanto quieres que vea ese lugar?

―Cuando estemos arriba te explico, ahora por favor sube. ―pidió el joven de pelo negro. La rubia asintió y se acomodó en la espalda del pálido. Sai la sujeto bien y emprendió su camino. Al llegar, Ino miró el lugar sorprendida mientras bajaba de la espalda del joven. Se adelantó un poco más y observaba cada detalle que sus ojos le permitían.

―Es…hermoso. ―susurró impresionada la Yamanaka mientras observaba toda la ciudad junto a Sai. Luego de unos momentos miró al joven de pelo negro, este tenía una sonrisa― ¿Me explicaras porque querías que viera este lugar a toda costa?

―Verás…es que, este lugar nunca es visitado, bueno, solo por mí. Nadie sabe de la existencia de este lugar. ―respondió mirando fijamente a los ojos de la Yamanaka. Mientras el viento movía el cabello de ambos. Ino lo miró un poco sonrojada― Cuando lo descubrí decidí dejarlo para mí solo, para cuando necesitaba desahogarme. Ni siquiera los chicos saben de este lugar. Pero Ino ―Ahora las mejillas del joven se estaban sonrojando de a poco― al conocerte, quería mostrártelo porque sabría que te iba a gustar tanto como a mí me gustó cuando lo vi por primera vez.

―Sai-kun… ―susurró sonrojada.





―¿Qué necesitas hablar Sasuke-kun? ―interrogó la Haruno algo cortante nuevamente. Sasuke arqueo una ceja confundido, mientras liberaba el brazo de la joven de hebras rosadas.

―Haber, hoy me estabas hablando bien ¿Y ahora me hablas mal? ―inquirió el Uchiha. Sakura frunció el ceño.

―Eso te pasa por hablarme mal a mi primero, Uchiha Sasuke-kun. ―respondió la Haruno cruzándose de brazos. Sasuke la observó un poco confundido.

―Así fui yo y por ti no voy a cambiar. ―contrarrestó el azabache, también cruzándose de brazos y mirando al lado opuesto que a la joven de hebras rosadas miraba.

―¿Me vas a decir que querías hablar conmigo? ―interrogó la joven de hebras rosadas nuevamente, mirando desafiante al Uchiha, aunque este estaba de espaldas.

―¿Qué paso en tu infancia? ―interrogó el Uchiha a la Haruno. Esa pregunta la dejo helada, quieta, sin saber qué movimiento o gesto hacer. Sasuke observó a Sakura ya que no recibía respuesta alguna de ella. La Haruno se mordió el labio inferior, aguantado las lágrimas y se fue corriendo del lugar― ¡Oye! ―gritó el azabache, pero era demasiado tarde. Sakura ya se había perdido de vista― No dejaré que te escapes… ―se dijo a sí mismo y empezó a correr en la dirección que había tomado Sakura.








La castaña de dos chunguitos estaba en un pequeño mercado de verduras, ya que necesitaba comprar algunos alimentos. Estaba viendo que más poder llevar, por lo pronto aún no ha elegido nada. Estaba tan distraída mirando las verduras, que sin querer chocó con la espalda de alguien.

―Disculpe… ―se disculpó la castaña. La persona con la que chocó se dio vuelta.

―No es problema. ―respondió. Para Tenten esa voz le fue familiar, miró un poco el rostro de la persona con la que chocó y resultó ser Neji.

―Hola, Neji…que raro verte por aquí. ―saludó Tenten sonriente, al genio Hyuuga.

―Es que mi tío me había pedido que saliera a buscar unas cosas. Las iba a ir a buscar cuando la fiesta de Naruto terminara pero como nunca existió, decidí venir ya aquí. ―explicó el joven de ojos perlados un poco cortante. Cargaba dos bolsas en las cuales había tanto fruta como verdura― Parece que aún no te decides que llevar.

―No, la verdad es que no. ―respondió mientras miraba las bananas― Las bananas están a oferta, que bien. ―dijo. Neji la miró confundido ¿Qué tenían que ver unas bananas en la charla que tenían los dos? Tenten rió nerviosa, no pudo creer que haya dicho una tontería.

―Me alegro. ―respondió confuso y algo cortante. No le gusta tener charlas sin sentido con alguien, que conoce de vista y que es amiga de su prima― Me debo ir, debo entregar esto rápido.


―Oh, sí claro. Fue un gusto adiós. ―se despidió un poco nerviosa. Cada vez que veía a Neji, siempre le causaba un poco de nerviosismo. Vio al castaño irse y luego de eso decidió que tenía que comprar algo sí ya estaba allí.







Suigetsu estaba en el hospital, acostado y un poco malhumorado debido a dos razones:
Numero 1: Ninguno de sus amigos, a excepción de Shikamaru (Qué ya se había ido) lo han visitado.
Número 2: se suponía que Ino vendría a cuidarlo, y aun no hay rastro de ella.
Estaba harto, de tener que estar encerrado en esa habitación. Para suerte de él le quedaban tres días en el hospital. Decidió mejor levantarse y estirar un poco las piernas. También se preguntaba, ¿por qué Karin tampoco lo ha venido a ver? Necesitaba hablar con ella, y más cuando estaban casi por besarse. Abrió la puerta de su habitación, y aun con su vestimenta de paciente decidió salir.
Recorrió cerca de dos pasillos hasta que se topó con Shizune.

―¿Usted que hace aquí afuera? Se supone que debe estar en su habitación, Hozuki. ―regañó. Suigetsu rió nervioso mientras se rascaba su cabellera.

―Vera, es una historia un poco graciosa, déjeme contársela…lo que paso fue que… ―Después de decir eso, empezó a correr hacía el pasillo que tenía a su lado. Shizune al ver eso lo empezó a perseguir. El albino corrió con un poco más de velocidad. Haciendo que la joven de pelo negro también aumentara su velocidad. Suigetsu rió mientras seguía corriendo. Pero sintió que se golpeó con algo, mejor dicho con alguien, que logró que este cayera hasta el piso. Se rasco nuevamente su cabellera blanca, y miró con la persona que se golpeó y pudo observar que era un guardia de seguridad. El cual lo miraba interrogante. El joven de ojos violetas miró hacia atrás, ya que sintió un gritó proveniente de la enfermera, que lo estaba persiguiendo. Este se levantó de golpe y siguió corriendo hacia adelante. Mientras el guardia miraba confundido el hecho. Shizune se detuvo, mientras trataba de recuperar el aire.

―Escuche, ese es un paciente que se escapó de su habitación. Ayúdeme a atraparlo. ―explicó la enfermera al oficial. Este asintió, y ambos empezaron a correr para poder atrapar al albino.




Naruto y Hinata estaban en Ichiraku ramen comiendo lo más animados. La azulina hacia su típico juego de dedos, mientras que Naruto reía. Estuvieron un rato hablando, conociéndose un poco. Naruto se sorprendió que ella sea prima de Neji, debido a que este nunca le dijo nada de ella.

―¿Hinata-chan porqué siempre te sonrojas? ―preguntó el rubio. La joven de hebras azabaches se sonrojó un poco, mientras seguía jugando con sus dedos.

―P-Porque…pues la verdad e-es que no lo s-sé. Solo me s-sonrojo y y-ya. ―contestó tímida. Dejo el tazón de ramen vacío, junto a los otros 10 tazones que había comido anteriormente. Naruto miró algo asombrado que Hinata haya comido 10 tazones de ramen mientras que él había comido cerca de 8. El rubio sonrió, llamando la atención de la azulina― ¿Por qué t-te ríes? ―preguntó sonrojada y algo confundida.

―Pienso que eres rara, pero aun así, me gusta la gente como tú. ―pronunció el rubio. Hinata al oír eso enrojeció mientras hacia su típico juego con sus dedos.

Continuará…

¡Adelantos!

¿?―Sí, lo escuche de Jiraiya. ―contestó Sasuke.

¡! ―ya veo...―respondió Matsuri sonrojada.

#―Tsunade…no me hagas perder el tiempo. ―se quejó la anciana.

*―¡Acaso eres idiota! ¿Cómo se te ocurre hacer esa jugarreta por el hospital? ¿Te gusta preocuparme verdad? ―regañó Karin. Pero luego se sonrojó, debido a lo que acabo de soltar.


Espero que les haya gustado, si vieron errores lo siento. Gracias por todo n.n.

¿Les gusto?
¿Parte favorita? ¿Por qué?
¿Suigetsu le gusta meterse en problemas? xD.
¿Qué piensan de la sorpresa que le dio Sai a Ino?
¿Errores? ¡Comenten! Trato de mejorar de a poco.


Supongo que eso es todo. Espero pasen bien y gracias de nuevo por leer. Saludos. Sayonara ;).

 

¡Hola! ¿Cómo estan? Espero que super bien nwn. *o* Muchísimas gracias por sus comentarios, los apreció a cada uno de ellos y son los que me alientan a seguir con la historia Bueno, mejor les dejo el capítulo jiji ^w^. Espero les agrade...

Contenido oculto

Una canción mientras transcurre parte de la historia, ya verán cuando hay que reproducirla ^w^.

Sígueme.​

Capítulo 9​

Jiraiya estaba en la oficina de su estudio de grabación, sentado en un cómodo sillón, bebiendo una taza de café y leyendo unos papeles. Su lectura fue interrumpida por un toque de puerta. Este permitió el acceso al visitante, la persona entró y resulta ser Kakashi, con una pequeña caja en sus manos.

―¿Kakashi? ¿Qué sucede? ―interrogó el albino, dejando los papeles a un lado de su escritorio.

―Jiraiya-sama, encontré esta pequeña caja, tiene algo dentro que le puede interesar. ―explicó el de pelo de plata. Jiraiya le indico que se acercara, y dejara la caja en el escritorio. Kakashi obedeció, e hizo lo que su superior le pidió. Jiraiya abrió la caja y pudo observar detenidamente un cd, que tenía solo 5 canciones grabadas. El albino lo miró extrañado, trataba de recordar donde había visto este cd por última vez.


―Quizá lo recuerde sí escucha el cd, Jiraiya-sama. ―aconsejó su asistente. El representante asintió, y fue en busca de una pequeña radio que tenía allí en su oficina. Al localizar el radio, colocó el cd dentro de este y empezó a sonar la primera canción. Jiraiya sonrió indicándole a Kakashi que recordó de quien provenía este cd.

I don't wear designer clothes ​

I don't go to the finest schools ​

But, I know I ain't no fool baby ​

I may not be a star ​

​

​

Sai sostuvo las manos de la Yamanaka, esta se puso un poco nerviosa, debía admitirlo. Ambos estaban sonrojados. Sai se empezó a acercar de a poco, con intenciones de besar a la rubia. Ella se tensó un poco, estuvo dudando. ¿Qué debía hacer? Lo único que se le cruzó por la cabeza fue empujar a Sai hacia atrás, e irse corriendo del lugar. Sai al ver la acción de la Yamanaka, se entristeció. Se sentó sobre el césped y se quedó contemplando la ciudad. Pensando sobre que hizo mal.

I'm not driving the sickest car ​

But, I know I can make you happy baby ​

I don't know what you been used to ​

Never been with a girl like you ​

But, I can give you a love that's true to ​

Your heart, not material things ​

Sasuke corrió por todos los lugares que pudo. Hasta finalmente localizar a la joven de hebras rosadas, sentada en una banca del parque ‘Yellow Moon’ y secándose las lágrimas que derramaba. Realmente consolar a una mujer nunca se le cruzó por la cabeza, ni siquiera lo ha intentado. Pero, este caso era diferente, ya que él, había arruinado todo preguntando algo tan delicado, como la infancia que tuvo que pasar la Haruno. Se acercó, hasta finalmente sentarse al lado de la joven de hebras rosadas.

―¿Lo oíste todo, verdad? ―preguntó entre sollozos la joven de irises jade. Sasuke se sorprendió un poco, debido a que Sakura se había percatado de su presencia.

―Sí, lo escuche de Jiraiya. ―contestó Sasuke. Sakura seguía sollozando. Y eso hacía sentir un poco culpable al azabache.

[Chorus] ​

I'll give you my song ​

These words to you ​

Sing you what I feel ​

My soul is true. ​

I don't have the world ​

Can't give it to you girl, ​

But all that I can do (All that I can do) ​

Is give this song to you ​

Matsuri decidió salir a tomar un poco de aire. La madre de Temari siempre la interrogaba, cada vez que venía y no comprendía el porqué de tantas preguntas. Apoyó sus codos, sobre una baranda de madera. Apoyó sus su mentón sobre sus manos y miró el hermoso paisaje que tenía frente a ella.

―¿Estas bien? ―se escuchó detrás de la castaña. Esta, reconoció inmediatamente la voz de la persona y miró hacia atrás para confirmarlo, efectivamente se trataba de Gaara.

―¿Gaara-sama? ¿Qué hace aquí? ―interrogó sorprendida la joven.


―Decidí salir a tomar un poco de aire también. ―explicó.

―ya veo...―respondió Matsuri sonrojada. Observó como Gaara se acercaba hacia su lado y apoyarse sobre la baranda.

Nah Nah ​

Nah Nah ​

Nah Nah ​

​

​

[Verse 2]​

Yeah I know that you are blessed ​

But there's something you're missing yet ​

Your own melody... oh baby ​

I don't know what you been used to ​

Never been with a girl like you ​

But, I can give you a love that's true too ​

Your heart, not material things ​

Naruto llegó a su casa, se sentó sobre el primer sofá que vio. Prendió la televisión y se quedó viéndola, mientras pensaba en lo bien que la había pasado junto a la joven Hyuuga.

Flash Back.

Naruto estaba abriendo la puerta de su auto, dejando salir a Hinata. La joven de ojos perlados lo miró sonrojada. Naruto sonrió, desde que la conoció le parecía raro que se sonrojara tanto.

―H-Hasta luego, N-Naruto-kun. ―pronunció finalmente la joven Hyuuga, mientras hacia su típico juego de dedos. Naruto la miró sonriente, dejando a la azabache más roja, de lo que ya estaba.

―Adiós Hinata-chan, espero salgamos de nuevo muy pronto. ―respondió el rubio. La Hyuuga enrojeció el doble. Casi se desmaya, pero por suerte, pudo evitarlo. Naruto sonrió― Nos vemos, Hinata-chan. ―se despide de ella con un beso en la mejilla. Subió al auto y se fue del lugar. Hinata al ver que se fue, se desmayó. Para suerte de ella, Neji venía llegando del puesto de verduras. El castaño al ver a su prima así, suspiró, y luego como pudo, entró a Hinata a la casa.

[Chorus] ​

I'll give you my song ​

These words to you ​

Sing you what I feel ​

My soul is true (My soul is true) ​

I don't have the world ​

Can't give it to you girl (can't give it too you girl) ​

But all that I can do (All that I can do) ​

Is give this song to you ​

Tsunade estaba en su oficina mientras terminaba de leer unos papeles que había allí. Al terminar de leerlos, los organizó y los dejo a un lado de su escritorio. La puerta de su oficina se abre de repente, dejando ver a una anciana con cabello canoso, recogido con una aguja tradicional japonesa, y ojos casi entre cerrados. La rubia se mordió el labio inferior, dando a entenderle a la anciana que su presencia no le agradaba para nada.

―Sé a qué vienes, y mi respuesta es absolutamente no. ―pronunció de repente la rubia de dos coletas. La anciana, suspiró y se cruzó de brazos. Tsunade, la miraba totalmente decidida de su respuesta.

―Tsunade…no me hagas perder el tiempo. ―se quejó la anciana. La rubia golpeó su mano sobre el escritorio, causando un estruendoso ruido. La anciana aún seguía con su semblante serio. La directora se levantó de su silla y se puso frente a esta.

―Mejor déjame en paz, Koharu. ―Amenazó.

―No me asustas para nada, Tsunade. Este hospital será cerrado muy pronto. Y yo seré la encargada de ese cometido. ―esta vez, fue Koharu quien la amenazó. Tsunade la miró molesta, pero a la anciana poco le importó. Después de decir eso, se fue del lugar. La rubia decidió tomar un poco de aire, entonces se fue de la oficina.

[Bridge] ​

I'll give you my heart, my song, my words baby (Give this song to you) ​

What I can say, I'll sing it. (Give this song to you) ​

Oh, Oh, Oh (Give this song to you) ​

I'll give my song and the rest to you baby, baby ​

Sing you what I feel, my soul is true ​

Suigetsu corrió hasta el techo del hospital. Hacía mucho viento, y el con su vestimenta de paciente, sentía un poco de frío. Miró hacia todas partes, no había señal de Shizune o del guardia de seguridad. Suspiró aliviado, cerrando los ojos calmado. Al abrirlos, se encontró con unos ojos color miel, lo miraban interrogantes.

―¿Se puede saber qué haces aquí? ¿Te das cuenta que no puedes salir de tú habitación a menos que te den de alta? ―En efecto, se trataba de Tsunade, la directora del hospital. Suigetsu se rió un poco, y nuevamente empezó a correr. La rubia lo empezó a perseguir.

[Chorus] ​

I'll give you my song (Song) ​

These words to you (Words) ​

Sing you what I feel (Yeah) ​

My soul is true x2 ​

I don't have the world ​

Can't give it to you girl ​

But all that I can do (All that I can do) ​

Is give this song to you​

Al terminar la canción Jiraiya retiró el cd del radio, lo guardó en la caja nuevamente y miró a su asistente con una sonrisa. Kakashi entendió a que se debía.

―¿Entonces ya lo recuerda, Jiraiya-sama? ―preguntó el de pelo de plata. Jiraiya asintió.

―Sí, perfectamente. Este cd lo grabó Kushina junto a Minato. ―recordó mirando la caja con el cd dentro― Grandes recuerdos.

―Sí. ―secundo Kakashi.







Shikamaru estaba acostado en el césped de su casa, con la espalda apoyada en un árbol. Bostezó para luego mirar las nubes. Estaba a punto de dormirse, cerró los ojos lentamente hasta que se escuchó un ladrido de perro muy cerca suyo. El Nara gritó para mirar que efectivamente había un perro a un costado de él, que le resultaba familiar. Miró hacia delante para ver al Inuzuka riendo por lo que paso anteriormente.

―¿Kiba? ¿Qué haces en mí casa? ―interrogó el joven de pelo negro.

―Solo paseaba a Akamaru, y justo pase por el frente de tú casa. Así que me dije ¿Por qué no visitar a Shikamaru? Te llame como unas 500 veces, nadie me respondió. ―contestó mientras se secaba las lágrimas de la risa― Pero note que la puerta de tú casa estaba abierta, así que decidí entrar con Akamaru. ―explicó― Enserio, en cualquier momento entraran a robarte y tú ni cuenta te vas a dar.

―Como sea, es muy problemático. ―bufó, mientras se acomodaba otra vez en el árbol.

―¿Sabes Shikamaru? Algunas veces me caes muy mal. ―reconoció el castaño. Shikamaru suspiró, demostrando que eso no le importaba mucho.

―Que problemático, mejor ve y has lo que quieras. Con tal de que no interrumpas mi sueño. ―respondió el Nara. Kiba se cruzó de brazos y asintió con su cabeza, se fue con Akamaru a cualquier parte de la casa de Shikamaru, mientras que este último, se quedó dormido apoyado en el árbol.






Gaara seguía apoyado en la baranda, al lado de Matsuri. Ella estaba muy nerviosa, nunca había estado tan cerca del pelirrojo desde que tenía memoria. Ambos miraban hacia el frente, viendo como los pájaros cantaban, como el viento movía las hojas de los árboles.

―¿Te puedo preguntar algo? ―habló de repente el joven Sabaku No. Matsuri lo miró nerviosa, asintió con su cabeza indicándole que prosiguiera― ¿Por qué Temari te preguntó si estabas enamorada de mí? ―Interrogó, dirigiendo su mirada hacia los ojos negros de la castaña. Esta enrojeció ante tal pregunta, sabía que esto iba a pasar tarde o temprano. Matsuri trago saliva nerviosa, miró rápidamente hacia el frente, mientras que sus mejillas enrojecían aún más por los nervios. Gaara aun la miraba interrogante, quería una respuesta. Y no la dejaría ir hasta recibirla.

―P-Pues, porque a e-ella, ―no supo cómo responder. Así que, simplemente respondió lo primero que se le cruzó por la mente― le gusta hacerme bromas pesadas. Es o-obvio que a t-ti te v-veo como a un amigo, Gaara-sama. ―contestó finalmente. Gaara no sabía cómo tomarse esa respuesta, sí bien, o mal. Una parte de él se entristeció un poco. Pero por otra, se tranquilizó. Sería difícil seguir hablando con la castaña sí esta sintiera algo por él. Sería tanto difícil como incómodo. El pelirrojo suspiró, y cambio su vista hacia el frente. Matsuri aún seguía nerviosa, no sabía que decir.

―Ya veo… ―habló, después de varios minutos de silencio. Dejo de apoyarse sobre la baranda, para luego emprender su camino hacia dentro de la casa― Era solo para aclarar eso, Matsuri. ―agregó para finalmente perderse de vista. Matsuri suspiró un poco aliviada.

―Me pregunto… ―se susurró― ¿Qué hubiera pasado sí le dijera lo que siento, Gaara-sama? ―se preguntó, mirando aun hacia el frente.




Sasuke aún se encontraba al lado de la joven de hebras rosadas. Ella ya se estaba calmando, lo cual tranquilizó un poco al azabache. Que decida ser duro incluso con ella, eso no significa que le haga un poco mal verla llorar, y más sí fue por su culpa.

―Escucha, Sasuke-kun, ―pronunció de repente la Haruno. Sasuke captó toda su atención en ella, indicándole que prosiguiera― debes prometerme, que no le dirás nada a nadie, ni siquiera Ino que es mi mejor amiga, sabe de esto. ―pidió, mirando fijamente los ojos negros del Uchiha. Este también se quedó mirando fijamente los ojos jade de ella. Logrando que sus miradas se conectaran. Se quedaron mirando fijamente, hasta que Sakura corrió su mirada― ¿Me lo prometes? ―preguntó.

―Está bien, te lo prometo, Sakura. ―aseguró este. Sakura le sonrió.

―Gracias… ―agradeció, sonriente. Sasuke observó la sonrisa de la joven de hebras rosadas por unos momentos, hasta que decidió mirar hacia el frente. Sakura rió ante el pequeño momento que pasaron.

―¿Cuál es el chiste? ―preguntó el Uchiha. Sakura dejo de reírse.

―Es que tu personalidad de ‘niño cortante’ me hace reír. ―respondió a carcajadas, haciendo énfasis en la palabra ‘niño cortante’. Sasuke bufó cruzándose de brazos, haciéndose el indignado.

―¿Quién la entiende? Primero llora, y ahora se ríe. ―pensó con una gota en su sien.






Karin estaba en el hospital. Pues, después de ese momento en el que casi se besan, no ha visitado al albino por nervios, además de que es un ‘arrógate, cara de pescado que se haría el lindo solo porque estuvo a punto de besarla’ según ella. Estaba en la recepción, lleno un pequeño formulario y fue en busca de la habitación ‘101’ del hospital. Mientras caminaba por los pasillos, siente un grito un poco conocido, y unos pasos algo apresurados. Mira hacia atrás y puede observar a Suigetsu corriendo, siendo perseguido por Tsunade que mientras lo perseguía se encontró con Shizune y el guardia de seguridad. Estos tres trataban de atrapar al Hozuki. Este corrió y no se fijó por donde andaba y se estrelló nuevamente con alguien, cayendo otra vez al piso. Se rascó su cabello blanco y miró hacia arriba. Trago saliva, al percatarse de que se trataba de Karin.

―¿Se puede saber qué haces corriendo por el hospital? ¿Y vestido así? ―interrogó la pelirroja. Suigetsu la miró, con una sonrisa nerviosa. Iba a huir nuevamente sino fuera porque las tres personas que lo perseguían se tiraron encima de él, evitando así que escapara.

―A-Ayúdame… ―se escuchó del albino, mientras sacaba su brazo izquierdo. Karin bufó.

Media hora después…

Suigetsu se encontraba en su habitación nuevamente, acostado y con unas vendas en su cabeza. Karin estaba colocando un recipiente con el almuerzo de Suigetsu, en la pequeña mesa que estaba a su lado.

―G-Gracias, Karin…supongo. ―agradeció el de ojos violeta. Karin lo miró fulminante, haciendo que este se asustara.

―¡Acaso eres idiota! ¿Cómo se te ocurre hacer esa jugarreta por el hospital? ¿Te gusta preocuparme verdad? ―regañó Karin. Pero luego se sonrojó, debido a lo que acabo de soltar. El albino la observó algo sorprendido por lo que dijo.


Continuará…


¡Adelantos!

¿?―¿Te preocupo? ―preguntó Suigetsu.

¡!―¿Qué pasa? ¿Tsunade-sama? ―interrogó Sakura, que llegaba con Ino.

#―¡Ustedes no pueden cerrar este hospital! ―gritó con todas sus fuerzas la rubia.

*―Debemos ayudar como podamos, Naruto. ―respondió Jiraiya.


Bueno, eso fue todo, dejaré algunas preguntas…

¿Les gustó?
¿Parte favorita? ¿Por qué?
¿Ino hizo mal al irse así?
¿Koharu logrará su plan de cerrar el hospital ‘Follow me’?

¿Errores? ¡Comenten! Trato de mejorar de a poco.
Bueno eso es todo. Espero que les guste, nos vemos en el próximo capítulo. Saludos. Sayonara ;).