Sceptile regresó a su pokéball en cuanto se lo pedí, luego de felicitarle, claro está. Hacía tiempo que él no combatía, me alegraba saber que su evolución había sido de gran ayuda. Samurott apareció ahora tras oír las palabras de Lucas, animado por el hecho de encontrarse en un clima tan apetecible para él. —Gracias por el combate, me encanta ver que no perdiste el tiempo desde la última vez. Tendré que empezar a tener cuidado contigo, a saber cómo estaréis dentro de nada —le felicité a él igual, y de un salto subí a lomos de mi inicial, viendo el trayecto que nos quedaba. Alcé el brazo con motivación, y Samurott pareció prepararse.—. ¡A toda velocidad hacia la siguiente ruta, vamo allá! A gran velocidad, ambos pokémon nos llevaron a la siguiente ruta, con Togekiss siguiéndonos desde las alturas.
Togekiss me dejó en una pequeña islita, al comienzo de la ruta. Le agradecí, y lanzó una adorable sonrisa antes de irse de nuevo con su entrenadora. Muy bien...aqui estaba. El camino hacia la siguiente mini isla era muy grande, pero revisando, el agua no estaba muy profunda... —Rayos..¿en serio estoy pensando en hacerlo?—pregunté, y parecía que la respuesta era sí. Sin mas dilación, decidi no molestar a Linoone esta vez, y caminé directo hacia el agua. (1/20)
—Ugh....—exclamé, ante la fria e incomoda agua—¡Agh, no es justo! El agua me llegaba hasta la cintura, llegando a mojar mi camiseta. El fondo estaba lleno de arena que te hundía el pié hasta el tobillo a la menor aplicación de fuerza, y me dejó el zapato lleno de arena. ¡Que incomodo! Un shellos pasó a mi lado, y me lanzó una sonrisa. Era muy mona, así que no tardé en lanzarle una ball. (2/20)
—Waaaaah—seguí quejandome. unas mini olas se dignaban a mojar la parte de mi cuerpo que seguía seca. Luego de unos minutos, solo mi cabello estaba seco. Pasó por mi lado un Slowpoke. Me lanzó una de sus adorables sonrisas retardadas, y decidió terminar de mojarme, lanzando una pistola de agua hacia mi cabello. Gracias, supongo. (3/20)
Mis medias estaban llenas de arena, y me provocaban una horrible repulsión al caminar...era horrible. Por si fuera poco, en el agua no podía hacer un gran avance, pues por mucho que tratara de caminar rápido, mover las piernas dentro del agua siempre cuesta más que hacerlo al aire libre. Además, las olas me empujaban un poquito cada vez, lo que me alejaba en un tercio de lo que lograba avanzar. (4/20)
Muy pronto, el mismo Slowpoke apareció a mi lado. Solo flotando desde su espalda, semovía con mayor rapidez de lo que yo alguna vez podría. Saludé, y me lanzó otro chorro de agua, a modo de saludo. Luego movió la cola, y se disparó hacia adelante. Rayos, hasta un Slowpoke se movía aqui mejor que yo. (5/20)
No pasó mucho antes de que un tierno Tympole me saludara con su colita...Awww, que mono era. Le saludé de vuelta y el renacuajo chapoteó, feliz. Llegué con dificultad a él y lo acaricié, cosa que el pokémon pareció agradecer. Luego, con su enorme sonrisa, siguió chapoteando. (6/20)
Ya podía ver más cerca la islita donde podría descansar un rato. Mientras tanto, traté de hundirme menos en la arena para así poder moverme con mayor rapidez. Resultado: nefasto. Por más que lo intentara, mis piés se hundían hasta el tobillo. Rayos. Un Psyduck pasó por mi lado, chapoteando. Me miró, dijo Psy y continuó su camino como si no existiera. (7/20)
Las olas se hicieron más comunes, esta vez desde mi espalda. Empecé a entrenarme para saltar cuando la ola fuera a pasar por mi lado, o me sumergería en agua salada. Yo podía llegar a esa pequeña isla, y podía hacerlo solo. ¡Claro que si! ¡Drake no se iba a rendir por unas pequeñas olitas! Uhg, debo dejar de pasar tiempo con Emperador. (8/20)
Pronto, encontré a un Gulpin flotando a mi lado. ¿Como hacía eso? No me lo explicaba. El Gulpin me miró, estudiandome, pero debió de suponer que no iba a ser facil comerme, por lo que se alejó a gran velocidad. ¿C-como podía irse tan rápido, si sus patitas...? No, no quería saberlo. (9/20)
Y antes de llegar a la islita, ví a un Masquerain...se veía muy bien, era muy mona. Revoloteó un poco a mi lado, y luego se alejó. Era una especie muy bella...y lo siguió siendo por otros dos segundos, antes de que el Gulpin que había visto antes diera un enorme salto y se la zampara. Segundos después, eructó un par de alas de colores. Jadeé, y seguí mirando en dirección a la isla para no traumarme—No vi eso, no vi eso... (10/20)
Por fin, llegué a la pequeña isla, igual de pequeña a la que Togekiss me había llevado una media hora antes. Suspiré, y me tumbé en la arena. Me quedé dormido inmediatamente. Al despertar, solo había pasado una hora, y ya estaba listo para seguir. Volví a bajar hacia el mar, y volví a sentir la arena en mis zapatos... (11/20)
Vale, ya estaba volviendo a odiar esta zona. Sin embargo, delante de mi, no demasiado lejos, se hallaba algo que parecía misteriosamente un padro. Y en los prados no había agua salada, ni arena en los zapatos, ni nada de eso. Además, era justamente donde debía ir para llegar a la Calle Victoria. (12/20)
Otro Masquerain apareció, y esta vez le pedí que se alejara, pues cierto Gulpin parecía estar cerca. Masquerain, visiblemente ofendida, me atacó con sus ataques aéreos, y luego se fue. No me importó, realmente. Acababa de salvar una vida. (13/20)
Rayos...esto se ponía peor. Las olas eran más potentes, y la arena hundía más. Sin embargo, estaba seguro de que lo lograría. Si no lo lograba, Emperador se iba a sentir avergonzado de ser mi starter...si, lo haría por probarle a mi inicial que yo también tengo orgullo. (14/20)
Otro Psyduck apareció...y este estaba chapoteando, sin saber nadar, igual que un Growlithe. ¿Un Psyduck que no sabía nadar? Eso no se ve todos los días. Siguió chapoteando hasta cansarse, y solo entonces decidí agarrarlo y llevarlo en mi hombro. Era muy pequeño, ¿sería un bebé? El pequeño pokémon agradeció, mientras jadeaba. (15/20)
Psyduck no pesaba mucho. Y parecía encontrarse a gusto. No pasó mucho antes de que se pusiera a cantar, lo que reafirmó mi teoría de que era un bebé. Psyduck se subió a mi cabeza, usandome de faro para ver donde se encontraba la orilla más cercana. Era tan adorable que no pude reprocharselo. (16/20)
Psyduck se cansó muy pronto de mi lento avance, y decidió irse por su cuenta. Me di cuenta de que aunque seguía chapoteando sin saber nadar, se movía de manera más veloz que mi lento avance. Rayos. Seguí con lo mio, y me encontré a un muy tierno Shellos, este de color azul. Sin poder resistirlo, lo capturé. (17/20)
Ya el prado podía observarse a la distancia, así como un par de pokemon que bailaban felices. Esa zona parecía una especie de paraíso, comparado con esta malvada marea baja. Ruta 313 usó "arena en los zapatos" , pensé. ¡Es muy molesto! ¡Drake ha odiado este lugar de manera efectiva! Dejé de dejar volar mi imaginación, y me concentré en seguir, aunque empezaban a dolerme las piernas. (18/20)
—Ya....ya casi—solté, y era verdad, ya no quedaba nada para llegar. Podía ver esa zona tan cerca...pude distinguir a un Paras bailando felizmente...si, todos alli eran felices. Debía llegar allí para descansar un poco y ser feliz yo tambien. Pensamientos de alguien que se moria de aburrimiento. (19/20)