Ruta 302

La gardevoir sonrio ya sin hambre pero aun debil

--Tranquila gardevoir estaras bien--Le dije sonriendo y esta sonrio--

 

No pude evitar sonrojarme un poco, y darle un beso corto en los labios
—Vale, lo admito, estuve medio triste toda la semana —le dije—

 

Me sonroje un poco y sonrei
—Pues te dije que no estuvieras triste—Le dije a Rojo

 

Sonreí
—Bueno, sin apoyo moral ya te puedes imaginar lo que decae una persona —le comenté con una leve sonrisa—

 

Me recoste en el cesped y sonrei mientras veia el cielo con lucario y la gardevoir

 

sonrei
—Jaja, Pues si—Le dije sonriendo a Rojo

 

Me apegue a ella
—Me gustaría hacer la cena, pero Sylveon se comió todo, y la pobre está herida —le dije— Pero no nos preocupemos, ya se está recuperando

 

--Gardevoir te acuerdas de los dias que pasabamos juntos?--Le pregunte sonriendo y esta asintio con.una sonrisa--

 

—Bueno, no pasa nada—Le dije sonriendo mientras sacaba tres tabletas de chocolate de mi mochila —no es mucho pero bueno—Le dije sonriendo mientras le daba una tableta y le lance una a Yair—Espero que se recupere pronto—Le dije a Rojo

 

Tomé la barra de chocolate
—Ella es fuerte, va a recuperarse pronto —le dije con una leve sonrisa—

 

sonrei mientras abria el chocolate
—Eso espero—Le dije sonriendo

 

—Claro que sí... —sonreí y destape mi chocolate, para luego comérmelo a bocados pequeños—

 

Agarre la tableta de chocolate

--Gracias mizuki--Le dije sonriendo a mizuki mientras me sentaba y abria el chocolate--

 

Sonrei y escuche a Yair
—No hay de que—Le dije sonriendo mientras empezaba a comerme el chocolate

 

Lucario me vio comer chocolate por lo que se sento y espero a que le diera

--Oye tu sabes que a ti te hace daño el chocolate--Le dije sonriendo a lucario y este bajo la mirada--

 

Miré a Mizuki y me apegue mucho más a ella
—Está delicioso, ¿No?

 

Mire a Rojo y asenti
—Pues si—Le dije sonriendo a Rojo mientras me comia el chocolate

 

Recosté mi cabeza en su hombro
—Vale —miraba el cielo rojizo volverse negro, anocheciendo—

 

recoste mi cabeza en la suya
—Es precioso ¿verdad?—Le dije mientras miraba al cielo

 

Sonreí un poco
—Sí que lo es —añadí mientras le tomaba una mano— Pero tu lo eres mas