El siguiente Pokémon que salió fue un Lillipup. Me recordó a mis padres, que tiempo atrás tenían uno, pero seguía sin ser precisamente lo que buscaba, así que lo dejé irse. Noibat seguía misteriosamente callado, y me preocupaba que volviera a chillar en cualquier momento
Astrid. La muchacha sonrió, satisfecha. Había capturado los dos Pokémon que quería y parecía que todos estaban contentos... Excepto que, a la lejanía, Devan aún parecía encontrar su propio Poocheyna. Se acercó a él un tanto sigilosa, dispuesta a ayudarle. —¿Necesitas que alguien te eche una mano? Cuántos más busques al Pokémon, mejor, y saldremos de esta ruta —le dijo con una sonrisa. Y aunque Devan insistiese en que no hacía falta que nadie le ayudase, Astrid lo haría de todas formas.
Astrid Por encima de su cabeza pasó volando un Pidgey, que siguió volando hacia adelante hasta que se perdió en el horizonte y no se pude divisar más su figura de ave. A su lado, Eevee caminaba muy cansado, casi como si se le viera forzado a ello, así que Astrid lo tomó entre sus brazos, dejando que el Pokémon se durmiese si lo prefería. Todavía no quería devolverlo a la Poké Ball, le gustaba su compañía, y creía que si lo llevaba a su lado tomaría poco a poco más confianzas. Tras caminar un rato más, un Starly pasó por su lado hasta aterrizar en el suelo a picotear una baya caída de un árbol.
El hecho de que apareciera un Spearow terminó de frustrarme del todo. El pájaro huyó volando nada más verme, Noibat parecía tener intenciones de empezar a hacer ruido otra vez y estaba perdiendo la esperanza de encontrarme con un Poochyena ese día. ¿Qué pasaba? ¿Se habían extinguido o algo? Reparé entonces en Astrid y en su ofrecimiento — Por favor —le dije, asintiendo. La desesperación se estaba casi apoderando de mí
Dante M. Una vez que Astrid capturó a su pokemon, volví a caminar por la ruta tratando de encontrar a otro Poochyena más, ya nos habíamos encontrado a dos y no deberíamos tardar mucho en encontrar al tercero, además teníamos que agregar que ahora eramos más personas buscando, a alguno tenía que aparecerle tarde o temprano. Pero al final.. parecía que ahora estaba destinado a encontrarme solo con Starly y uno que otro Lillipup
Astrid Los Poochyenas debían de odiarles en esos instantes, pues aparecían escasamente y les hizo sudar mucho... Astrid suspiró: Habían vuelto como al principio, sin la suerte de su lado. —Venga, chicos, no nos rindamos.
Astrid —¡¿Qué ocurre con los Pokémon voladores hoy?! ¡Están por todas partes! —exclamó Astrid, por primera vez perdiendo ese aura serena que la caracterizaba en cuanto un Pidgey volvió a sobrevolar su cabeza y emitiera un piar. Contenido oculto ESTOY YA HARTA </3 (?)
Esta vez ni siquiera había salido nada. Era terriblemente frustrante no encontrar ningún Poochyena y estaba empezando a pensar que había que actualizar la Pokédex para reflejar que se habían extinguido del lugar Contenido oculto ¿Sabéis lo peor? Que me pasa lo mismo en los juegos xDD. Creo que estoy gafado o algo (?)
Grité en mis adentros de alegría cuando apareció. Era una hiena de color grisáceo, con mechones negros en la cara y en las patas. Me miraba con una mezcla de curiosidad y agresividad. Sin pensármelo dos veces lancé la primera Pokéball vacía que me encontré en mi bolsillo. En ese momento, Noibat volvió a chillar muy fuerte. Quizá el Poochyena lo oyó, porque no hizo ningún intento por salir de allí. Supuse que había preferido ser capturado a quedar sordo de por vida Mi preocupación ahora pasó a ser cómo demonios callar a Noibat...
Dante M. Una ligera risa salió de mis labios cuando escuché a Astrid gritar aquello, tal vez había pasado de ser una situación divertida a ser algo completamente frustrante al no aparecer el pokemon deseado, pero bueno.. mi paciencia tendría que ser lo último que moriría en este mini recorrido. Para nuestra suerte, cuando quise seguir buscando noté que cerca de Devan ya había aparecido el pokemon. — Bueno, ahora solo falta llamar a Bisharp y...— me quedé un par de segundos en silencio al notar como mi pokemon venía a paso tranquilo como solía hacerlo siempre, solo que ahora caminaba detrás del Pawniard de Astrid, como si lo estuviera guiando de vuelta hacia el grupo —Ahora que todos tienen a sus pokemon... supongo que no queda mucho mas por hacer, ¿no?
Sky se percató de que Devan había encontrado, al fin al pokemon escurridizo y aplaudió de alegría por él. Escuchó entonces a Dante y pensó que tal vez aún podían permanecer allí un rato más, quizás a alguno le apetecía un duelo, tal vez. —¿Y un combate? —Preguntó acercándose a los demás. —¿Alguno quiere combatir? —Podría ofrecerse ella o simplemente observar algún otro y aprender, pues observando también se podía aprender de grata manera.
Astrid Sonrió abiertamente en cuanto escuchó el grito de alegría de Devan y cómo la Poké ball capturaba al Poochyena. No obstante, su Pokémon, un Noibat, empezó a chillar, lo cual ocasionó que Astrid arrugase el rostro en ua mueca de dolor, pues no podía taparse los oídos al llevar a Eevee en sus manos (que se encogió entre sus brazos por el terrible sonido). Por suerte Devan consiguió que el Pokémon callase, y respiró tranquila. No obstante, se percató de una cosa. —¡¿Y Pawniard?! Y mirando a su alrededor, divisó al Bisharp de Dante guiando al enérgico y activo Pwniard, que correteó más deprisa para ponerse delante de su entrenadora y empezar a dar piruetas, feliz de verla. —Yo también me alegro de verte, pequeño —dijo, serena y con una sonrisa—. Ahora, regresa a la Poké Ball. Pawniard accedió, dejándose engullir por el rayo rojo que las Poké Ball emitían mientras oía la propuesta de Sky. —Lo lamento, Sky, conmigo no va a ser —dijo con tono cansado—. ¿Qué tal tú, Devan? Tú no has luchado contra Sky.
Ante la contestación de Astrid se decepcionó un poco pero le dedicó una sonrisa igualmente. — No pasa nada —dijo. Se agachó y acarició a Poochyena. Entonces se le ocurrió otra idea ignorando el tono cansado de Astrid, tan despistada que era. —Astrid, ya que nos ganaste a Devan y a mi, ¿por qué no luchas con Dante? — Le propuso animada, estudiar los movimientos de un entrenador más experimentado sería de agradecer.
Estaba bastante cansado de buscar a aquel dichoso Poochyena, pero no podía decir que no a un combate — Me parece bien —dije, asintiendo. Me dirigí susurrando a Noibat—. ¿Estás listo, Noibat? El murciélago me mordió esta vez en el brazo. Lo interpreté como que estaba listo para combatir mientras ocultaba en mi inexpresividad una mueca de dolor. Iba a ser horrible combatir con él, pero había que probar qué sabía hacer. Además, no había combatido contra Sky, así que usaría el enfrentamiento para estudiarla NOIBAT: Volador/Dragón (Ágil) Allanamiento: ataca ignorando sustitutos, pantalla luz/reflejo, velo sagrado y cambios de estadísticas del rival. Salud: 80/80 Fuerza: 75 Resistencia: 75 Agilidad: 3/3 (95 de Velocidad) (40) Movimientos: -Ataque Ala (40 Potencia, Volador (Base: 30, STAB +10)) -Lanzallamas (60 Potencia, Fuego) (Usos: 4/4) -Ala de acero (30 Potencia, Acero) -Supersónico (Confunde) (Usos: 2/2)
Al segundo Devan aceptó combatir con Sky, la cual se emocionó casi al instante. —¡Si! — dio un salto emocionada. —¡Adelante, Fletchling! Fletchling salio de la bola emocionado para su primer combate. FLETCHLING: Normal/Volador (Ágil) Sacapecho: Impide que se disminuya la resistencia del pokémon. Salud: 90/90 Fuerza: 100 (10) Resistencia: 81 Agilidad: 2/2 (92 de Velocidad) (30) Movimientos: -Picotazo (40 Potencia, Volador (Base: 30, STAB + 10)) -Onda ígnea (60 Potencia, Fuego) -Gruñido (baja en 10 la fuerza del oponente) -Nitrocarga (30 Potencia, Fuego; al usarlo se regenera un punto de agilidad perdido) (Usos: 2/2)
Dante M. Al parecer Sky quería tener una pelea antes de que abandonáramos la ruta y buscaba a alguien con quien combatir un poco, algo que probablemente solo hubiera aceptado si ninguno de los, a fin de cuentas estaba haciendo de su guía así que... se podrían hacer ciertas excepciones. Pero por suerte, Devan ya había aceptado justo después de que Sky hubiera dicho que yo podría pelear contra Astrid ya que ella los había vencido a ambos. —Pues.. si tu quieres tener un combate, Astrid no me molestaría en lo absoluto, quizas tengas tu tercera victoria el día de hoy
Era una pelea entre dos Pokémon bastante rápidos por lo que pude intuir. Vi en mi Pokédex que Noibat podía causar problemas de estado a su oponente, lo cual podía ser una buena ventaja en combate. ¿Por qué no probarlo? — Noibat, Supersónico. A partir de ahí, tocaba confiar en la fortuna, esa que aquel día no me estaba sonriendo mucho NOIBAT: Volador/Dragón (Ágil) Allanamiento: ataca ignorando sustitutos, pantalla luz/reflejo, velo sagrado y cambios de estadísticas del rival. Salud: 80/80 Fuerza: 75 Resistencia: 75 Agilidad: 3/3 (95 de Velocidad) (40) Movimientos: -Ataque Ala (40 Potencia, Volador (Base: 30, STAB +10)) -Lanzallamas (60 Potencia, Fuego) (Usos: 4/4) -Ala de acero (30 Potencia, Acero) -Supersónico (Confunde) (Usos: 1/2)
Astrid Astrid sacudió la cabeza, cansada. —Estoy agotada de tanto caminar, pero creo que una batalla contra ti estaría bien —le dedicó una sonrisa que oscilaba entre serena y cansada—. Sacaré a Pawniard, ya que Eevee está dormido. Y en efecto, el Pokémon de tipo normal estaba dormido, de nuevo, en sus brazos y no parecía que fuera a levantarse ni con dos combates pokémon. PAWNIARD: Siniestro/Acero (Equilibrado) Presión: todo movimiento que impacte sobre él gastará dos usos y no uno Salud: 90/90 fuerza: 140 (15) Resistencia: 135 (25) Agilidad: 2/2 (60 de Velocidad) Movimientos: -Garra metal (40 Potencia, Acero (Base: 30, STAB + 10)) -Cuchillada (50 Potencia, Normal) -Tormento (El rival no puede repetir dos veces seguidas el mismo movimiento mientras este pokémon esté en el campo. No puede ser esquivado) (Usos: 1/1) -Eco metálico (baja en 20 la resistencia del oponente) (Usos: 5/5)
Dante M. — Hace mucho que no tengo una batalla así que, esperemos que todo salga bien — Miré a Bisharp y lo regresé a su pokebola, ya no había necesidad de que estuviera cuidando al pequeño pokemon de Astrid, después de eso miré a Mawile y con un pequeño movimiento de mi cabeza le indiqué que ella era la seleccionada para ir en esta batalla, lo cual pareció haberla emocionado mucho. MAWILE: Acero/Hada (Balanceado) Intimidación: Baja 10 la fuerza del rival cuando sale al campo. Salud: 100/100 Fuerza: 170 (30) Resistencia: 170 (30) Agilidad: 1/1 (50 de Velocidad) Movimientos: -Cabezahierro (50 Potencia, Acero) -Triturar (60 Potencia, Siniestro) (Usos: 4/4) -Represión metal (Daña con 1.5 x el daño recibido en el turno anterior) (Usos: 2/2) -Carantoña (50 Potencia, Hada)
Astrid Astrid sonrió en cuanto escuchó a Dante decir eso, pues sus sospechas al conocerlo en Lienzo fueron confirmadas. Y no solo con ello, sino que el Pokémon que sacó al campo, aquella Mawile que lo acompañaba, salió al combate totalmente emocionada, cosa que infundó más energías al activo Pawniard, que hizo un par de movimientos con sus brazos. Volvió a sonreír, contenta. —¡Muy bien, Pawniard, es tu primer combate! Espero que lo hagas muy bien —animó a su Pokémon, el cual dio saltitos en respuesta—. ¡Garra metal! PAWNIARD: Siniestro/Acero (Equilibrado) Presión: todo movimiento que impacte sobre él gastará dos usos y no uno Salud: 90/90 fuerza: 130 (15) Resistencia: 135 (25) Agilidad: 2/2 (60 de Velocidad) Movimientos: -Garra metal (40 Potencia, Acero (Base: 30, STAB + 10)) -Cuchillada (50 Potencia, Normal) -Tormento (El rival no puede repetir dos veces seguidas el mismo movimiento mientras este pokémon esté en el campo. No puede ser esquivado) (Usos: 1/1) -Eco metálico (baja en 20 la resistencia del oponente) (Usos: 5/5)