de Inuyasha - Rosa azul, sangrando de amor (sess&kag)

Re: Rosa azul, sangrando de amor (sess&kag)

¡¡Hola!!

Ya me doy cuenta de que ojalá les haya gustado la conti. En fin, creo que no la pondré hoy, pero si quieren leer un fic que apenas lleva un capi y es compartido, pueden entrar aquí:

http://foro.cemzoo.com/f85-fanfics-...-leidy-otaku-jenny-y-sayo.html#post1229594776

Bueno, disculpen por todo. Tarea de cívica y ética.

 

Rosa azul, sangrando de amor (sess&kag)

¡¡Hola!!

Muchas gracias a tod@s por ser tan pacientes conmigo. Les traigo el capítulo 5, ojalá les guste.

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CAPÍTULO 5 "DESESPERACIÓN"

La ambulancia se dirigió rápidamente hacia el hospital más cercano.

Yo respiraba con dificultad. Podía ver como los faros se asomaban por la ventana, oía risas de niños y ruidos de autos.

Kagome sujetaba mi mano. No deseba en ese momento, nada más que disfrutar de su compañía, de saber que me amaba. Espero que fuera cierto. No deseaba más que ver su hermosa sonrisa otra vez, sin embargo, casi nunca la he visto sonreír y todo ha sido mi culpa.

-¡Sesshomaru, por favor, resiste!

Intenté responder, pero ninguna palabra salió de mi boca y sufrí cuando cerraba mis ojos lentamente, mientras ella se acercaba a mí, a punto de estallar a gritos, de nuevo. Quise decirle que todo estaba bien... pero no pude responderle, ¡me siento tan débil y repugnante! Termino de cerrar los ojos mientras oigo por última vez su voz...

-¡¡Sesshomaru, Sesshomaru... Sesshomaruuu!!

La voz de la chica resonó en las paredes metálicas de la ambulancia. Él había cerrado los ojos, pero ella se sentía desfallecer.

Al oír el grito, el paramédico que conducía le dijo:

-Señorita, ya casi llegamos. Tranquilícese por favor.

-¡Se va a morir! ¡Dáros prisa por lo que más queráis!

-Vale, pero esté tranquila.

Kagome se mordió el labio inferior mientras intentaba no sollozar.

Pasados unos siete minutos, la ambulancia se estacionó en frente del hospital. Kagome bajó junto con la camilla de Sesshomaru.

Se veían muchas puertas, hasta que llegaron a una antesala, donde un doctor de guardia, una persona mayor, aguardaba.

-¡Doctor! -excalmó el paramédico -Es un paciente, le dieron en el pectoral izquierdo. Es una bala un tanto imponente. No sé más... sólo traté de cubrir lo más posible su herida.

-Está bien.

El médico parecía demasiado tranquilo.

-Doctor, ¿él estará bien? -preguntó con preocupación Kagome.

-Ya sabe que nada es seguro, lo voy a llevar a quirófano, quizás haya algunas esperanzas todavía.

-Como diga.

Entonces se llevó al quirófano a Sesshomaru, me quedé esperando por él. Era mi culpa que haya sido herido. Quizás, si yo no lo hubiera conocido, él no estaría ahora así... herido de muerte.

Pasaron quince minutos que se me hicieron como horas. Después, un doctor más joven que el anterior, salió del quirófano.

-Señorita...

-¡Dígame! - me moría de ansiendad cada vez más.

-Hay un problema...

-¡¿Problema...?!

-Escuche, por favor. Sucede que hay algo muy extraño... que tal si lo hablamos en un lugar más privado. No me gustaría que otras personas escucharan.

Accedí.

El doctor y yo nos dirigimos hacia un lugar oscuro. Me daba mucho miedo. Admito que siempre he sido nerviosa. Además, primero era el bien de Sesshomaru.

-Hay algo en él que no es humano.

¡¿Lo había descubierto?! Seguramente ya no llevaba maquillaje y aparte se lo quitarían de inmediato. Fruncí el ceño mientras me ponía pensar a qué quería llegar con eso, hasta que su voz me sacó de mi mente.

-¿Por qué te parece tan atractivo?

-¿Eh? ¿Perdón? -estaba confundida.

-¿Te acuestas con él?

-Yo... no... -no podía hablar. ¡¿Qué diablos quería?!

-¿Es bueno? ¿No sabes que te puede lastimar por ser lo que es?

-¡No sé... de lo que ha...bla!

-¿Ah, no? Bien sabemos tú y yo que no es humano. Aunque no puedo saber quién o qué es esa cosa en realidad, sólo sé algo...

-¡Cállaros! ¿Qué tiene que ver esto con Sesshomaru?

-... yo no te lastimaré.

Me tomó por la cintura y empezó a manosear mi espalda.

-Al menos, eso intentaré.

Estaba besándome, y había bajado mi vestido... pronto mi ropa interior también quedaría fuera...

-¡¡¡Kagome!!!

Oí esa hermosa voz que tanto anhelaba oír. Era mi youkai, que venía a salvarme. Mi sensación de alivio despareció tan rápido como vino cuando pensé ¡¿Qué demonios hace con el pecho abierto y de pie?!

 

Rosa azul, sangrando de amor (sess&kag)

¡¡Hola, amig@s!!

Bueno, ahora les traigo la conti, muchas tracias por sus comments.

joha.suki Sí, es un maldito. Pero ya sabrás si Sess le da su merecido, yo ya le hubiera dado una buena golpiza, ¡saludos!

Sesshokag Imagínate yo ¡cuando lo escribí! Me dio una rabia, bueno, ya somos bastantes que odiamos al doctorcito ése. ¿En verdad crees que fue emocionante? Gracias y besitos.

KAnnome_chan Qué bueno que te haya gustado. Me alegra que te guste cómo describo las cosas. Mientras, pueda, continuaré así, así que ¡ven a verme seguido! Bye bye.

my_lady No te preocupes, que ahí está Sesshy. Lo de pecho abierto lo encontrarás a continuación... ¡saluditos!

kokoroyami Sí debió de ser. Pero bueno, sin mucho tiempo, mi mamá me presiona, ¡muchos saludos!

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CAPÍTULO 6 "CULPA"


¿¡Qué demonios hacía con el pecho abierto!? Una gran herida, parecía como si se hubiera salido a mitad de la... ¡operación! Fue espantoso ver su tórax cortado, dejando ver lo rojo que estaba por dentro. Quería vomitar, pero también llorar porque pensé que en cualquier momento se le iba a venir el corazón...

-¡Sesshomaru! -grité con la angustia reflejada en mis ojos.

-Tranquila... Kagome. Ahora... mismo le doy lo que se mere...ce.

Aún estaba jadeando como hace algunos momentos, horas quizás. No podía permitir que éso pasara. Pero antes de que pudiera hacer algo, otra persona me interrumpió.

-Ella y yo disfrútabamos.

-¿¡Qué dices!? -los ojos de mi apuesto youkai pasaron a ser de un oro fundido, a una pieza de oro tallada en piedra. Había endurecido su expresión.

-Después de todo, ella no tenía intención...

-¡Por supuesto que no...! -repliqué.

-...al principio. -Los ojos de Sesshomaru comenzaron a volverse color sangre, y sus manos apretaban -Pero después le hice comprender. Y ella mismo me dijo que no te dijera ni una palabra, porque se sentiría culpable por acostarse conmigo, mientras el remordimiento de que tú estabas en cirugía la atormentaba. Después de todo, ¿quién va a querer acostarse con una persona que no sirve?

Para cuando lo voltée a ver, tratando de contener las lágrimas, sus ojos ya eran totalmente rojos y sus pupilas azules y pequeñas. Sus ¿garras? estaba demasiado grandes.

Debió de aguantarse las ganas de chillar también, pero no lo hizo. Con todo y su herida se abalanzó contra mi agresor.

Jamás lo había visto tan furioso, aún cuando me gritaba o se enfadaba conmigo en el trabajo.El doctor quedó debajo de él y forcejeó, yo no sabía que hacer. Quería moverme y pedir ayuda, pero estaba petrificada. ¡Mis pies estaban cosidos al piso!

Cuando Sesshomaru intentó clavarle sus garras al infortunado, éste, sin que el youkai lo percibiera, sacó una navaja de afeitar. Sabía que no causan mucho daño, pero ¡dios!, él estaba tan herido y al descubierto, que hasta un alfiler podría matarlo.

Sabía que no me haría mucho daño a mí. Sabía que era mortal para él.

¿Qué problema hay si yo la recibo?

Éso fue lo único que pudo hacer que me moviera. Corrí a su lado, lo aparté de mi camino y me lancé sobre el doctor recibiendo el cuchillazo. Entonces caí a su lado, sentía un gran dolor, pero no sabía dónde me había apuñalado. Mis ojos se cerraban pero ¡no podía desmayarme en ese momento! Luché y me golpée la cabeza como pude. Mi visión se hizo borrosa.

A pesar de mis ojos, podía ver a un ángel que se acercaba a mí, preocupado. Lo único que pude decir fue...

-No cerraré los... ojos... te lo prometo... ¡lo prome...to!

No me había salido como yo quisiera. Escuché decirle "Kagome, déjate ir, verás que todo pasará. Si es necesario, yo mismo voy a..."

Ya no escuchó a oír más. Sus bellos ojos azules se habían cerrado.

El doctor se levantó con trabajos.

-Que disfruten de su estancia en el hospital. Les regalaré caramelos cuando salgan. ¡Suerte!

Caminó hacia la puerta, pero no pudo salir, porque alguien le dijo...

-¡Maldito! ¿Crees que te voy a dejar que la apuñales con tu navaja de mierda -estaba perdiendo el control, él jamás decía palabras incoherentes -y que te vayas así como así?

-¿Y qué harás?, ¿me acusarás?

-Ya lo verás.

El tono de Sesshomaru se notaba rápido, ya no tartamudeaba. Su pecho comenzó a sanar como por arte de magia (ni yo misma me lo creo).

-No te creerán.

-Entonces... las vas a pagar.

Sesshomaru se había aproximado a él, causando que este último se encontrara en un estado tembloroso. El youkai era mucho más alto que él.

De pronto, el atacante de Kagome recibió una puñalada de navaja por la espalda. Sesshomaru estaba a su frente, entonces ¿quién?

El doctor cayó, dejando al descubierto a Kagome. Ella había cerrado los ojos para decansar y se había perdido en sí unos momentos.

La ví tan furiosa como yo. Ambos miramos el lugar donde el otro había sido herido. Sólo que ella se sorprendió al ver mi rápida recuperación.

-Sesshomaru... ¡pensé que no ibas a sobrevivir! -se abalanzó hacia mí y soltó un quejido de dolor. Su pecho pegado a mi estómago le lastimó cuando se lanzó a mí tan precipitadamente.

La abracé y le acaricié su cabello.

-No puedes pensar tal cosa sobre alguein como yo. Estaré siempre para protegerte, pero necesitamos curarte éso.

-Tenía tanto miedo... -se aferró a mí con más fuerza, sólo que lentamente.

-Tranquila. Déjame que revise tu herida.

-¿A...quí? -replicó.

-Te llevaré a un lugar más seguro. Salvaste mi vida.

-Y tú la mía.

-Pero tú lo mataste...

-¡Y tú impediste que me violara! -gritó, perdiendo el control, en un intento desesperado de verme como su salvador. Pude percatarme de cómo se arrepentía de haber pronunciado la última palabra.

-Ya no te preocupes.

Entonces la tomé en mis brazos mientras ella me brindaba una cálida, pero frágil sonrisa. Traté de sonreír, pero no estoy seguro de que pude hacerlo. Nunca sonrío.

De pronto, sus ojos se abrieron extremadamente, como si hubiera visto un espectro.

-¡¡Lo maté, Sesshomaru!! ¿¡Sabes lo que eso significa!?

-Kagome, lo hiciste por defensa propia. -Le dije mientras caminaba hacia la salida.

-Pero él tenía razón... ¡le creerán más a él!

-No puede defenderse, los muertos no friegan.

-Pero sus compañeros sí.

-¡Carajo!

Kagome volteó a verme con la misma mirada cuando abrió sus ojos.

-¿Escuché bien?

-¡Diablos! ¿No ves qué estoy molesto? No pude evitar decirlo.

-De acuerdo.

Caminé hacia una estación de taxis y la cubrí con la ropa que le había quitado ese maldito, sólo por encima, para no lastimarla.

Cuando llegamos a mi departamento, ella se había quedado dormida. Ya no se preocuparía más, a menos de que despertara. La subí por las escaleras son cuidado y al llegar, la puse en mi cama. La contemplé por un rato y en mi corazón surgió una sensación de culpabilidad.

Entonces pensé en curarle sus heridas, pero estaba dormida. No quería que se sumiera en esa presión si no era necesario. Si la cuidaba y no salía, podría cosérselas después. Al menos, sé cómo hacerlo. Pero por ahora no... que se libre del infierno mientras duerme...

Entonces nos damos cuenta. El doctor tuvo la culpa, Kagome la siente y Sesshomaru la enfrenta.

 

Rosa azul, sangrando de amor (sess&kag)

Hola, ¿qué onda? ¿Esperando la conti? Mmm espero que así sea, jaja. Bien, hoy es domingo y mer tomé un ratito para escribirles esta conti. Pensé en ustedes y me dije: "¡Hoy les voy a poner conti!" y heme aquí.

machi_rutsuk ¡Hola! Gracias por leer mi fic, aquí te traigo la conti.

my_lady Pues es que Kagome no se había dado cuenta de que el doc ése tenía el As bajo la manga. Pues yo también espero que se mejore. Espero que hayas dormido bien. ¡Kisses a ti también!

Aerthis_Yuna Muchas gracias por leerlo. Me alegro que te haya gustado. Ojalá te guste este capi. Bye!

SARITZ ¡Qué bueno que te haya gustado! Créeme yo igual tenía ganas de que supieran que se amaban, jeje. Me gustó que se salvaran porque me encanta ¡el romance! (suspira) Y bueno, a mí no me importaría que Sess fuera youkai, jaja. ¡Saludos!

Bien, si no saludé a alguien más, es porque me posteó mientras hice la conti. Pero ¡saludos!

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CAPÍTULO 7 "MALOS PENSAMIENTOS (1era parte)"
Desperté con un sol abrasador. Abrí los ojos lentamente, para no aturdirme con la luz.

-Ya despertaste -conocía aquella voz. Su voz.

-Sí.

Nos quedamos en silencio por unos minutos, mirándonos a los ojos. Era inmensamente placentero observarlo de esa manera, pero me resultaba incómodo que ninguno de los dos hablara. O lo que es peor, no saber qué decir.

-Así que no sabes qué decir.

-¿Eh? -yo parecía no haber captado del todo.

-Puedo leer tus pensamientos.

-¡Cielos! -sí que estaba más sorprendida que nunca.

-Cielos -me imitó. Parecía burlarse de mi fragileza en el carácter- cielos, creo que todo este tiempo te he oído.

-Diablos.

-Ahora, cambiando de tema -prefiero que lo acepte a que lo cambie con indirectas, porque odio que suceda de esa manera con las personas- tengo que curarte.

-¿Ahora?

-Kagome... -puso una cara de fastidio y rodó los ojos- primero me reprochas que en tal lugar. Aquí estás en mi departamento, y ahora, ¿me dices que ahora no?

Sus ojos me derretían cuando se inclinó hacia mí, quedando a escasos centímetros.

-Lo que usted... diga -titubée.

Encaró una expresión pícara. Se acercó a mí y me besó con cuidado. Terminó.

-Entonces te concederé tiempo y te curaré más tarde. Por otro lado, tengo que salir.

-¿A dónde?

-A avisar a la empresa que no trabajharé unos días.

-¿¡Dejarás de trabajar!?

-Sí, por ti.

-Eso es demasiado -traté de sonar juguetona, pero creo que mi tono fue muy parecido al preocupado.

-No lo es.

Me besó de nuevo, sólo que en la mejilla y demasiado rápido. Partió por la puerta.

Y entonces ya no supe qué hacer. La verdad es que se fue y mi mente no podía dejar de pensar en él.

Por otra parte, no quería que me curara. Es decir, primero, soy una molestia, me siento así. Segundo, ¡me hirieron en el pecho! No tengo ni idea de lo que haré cuando esté descubierta ante él... seguro que me veo horrible con esa rasgada.

Intenté concentrarme en otra cosa, pero los minutos pasaban como joras.... hasta que por fin llegó.

-Me extrañaste.

-Tú no sabes. Tuve que estar aquí acostada pasando las horas.

-¿Sabes? -su mirada otra vez.

¡Noooooooooooo!

-¿Qué... pasa...?

-Hora de curarte.

-Ehm... yo no sé si esté lista...

-Estás sonando demasiado rara.

-¿En serio?

-Ciertamente.

No pude leer bien la expresión en su rostro tan perfecto.

Se puso encima de mí, cielos, ¿¡qué hace!?

-Será mejor que primero te pongas de espaldas para que puedas quitarte la camiseta que te amarré.

¡Era una mal pensada! Lo sabía. Maldita mente loca.

Me puse de espaldas y lo obedecí. Me desató la camiseta, empezaba a dolerme. Pero gracias que todavía traigo ropa interior. Pero ¡cómo duele!


Perdón por lo corto, pero por el momento debo retirarme. Mañana les prometo la segunda parte.

 

Rosa azul, sangrando de amor (sess&kag)

¡¡Hola!!

Por fin puedo estar de vuelta. Se me complica mucho ésto con los exámenes, pero en fin, ojalá que les guste lo que les voy a poner.

joha.suki ¡Hola! Me da gusto verte y saber que no me abandonas. Mmm pues sip, yo igual pensaría eso, osea, ¿¡qué vas a pensar se Sess se te pone encima!? Bueno, aquí te traigo la conti. Saludos.

pomy Me alegra que sigas leyendo mi fanfic, pero si no entiendes, con muchísimo gusto yo te explico, sólo dime en qué dudas. Si es por el formato, ya me las arreglaré pero cuenta conmigo si tienes dudas. ¡Besito!

Diva_Dulce Bien, sí tiene que ver con las rosas azules, pero si todavía no entiendes puedes hacer mandarme vuestras dudas y yo respondo. Si es por el título, no te preocupes, que pococ a poco irá apareciendo, ¿eh? ¡Besote!

KAnnome_chan ¡Síiii! Opino lo mismo, ése maldito, ash ni hablar. Wiii, Sesshy es súper. No te preocupes por no postear pronto, sólo no me abandones. ¡Saludos!

Bien, si no saludé a alguien más, es porque me posteó mientras hice la conti. Pero ¡saludos!

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CAPÍTULO 7 "MALOS PENSAMIENTOS (2da parte)"

Kagome emitió un pequeño chillido de dolor cuando Sesshomaru la volteó boca arriba para revisarla, de forma demasiado pensativa para el gusto de ella.

-Hay algo aquí que no me convence.

-¿Qué? -dijo la chica, desorientada.

-Pues yo no veo ninguna herida.

-¡Pero tú viste cómo me acuchillaron! -chilló.

-Sí, pero... -puso cara de pensativo, de nuevo- no la veo.

-¿Y...?

-Y supongo que vas a tenerte que quitar el resto de la ropa.

-¡Aprovechado! -Kagome se sonrojó, e intentó parecer enfadada, pero no le salió muy bien.

-Si es lo que piensas...

-Yo...

-Yo sólo decía que te quitaras tu...

-Ya lo sé.

Kagome se volteó de espaldas de nuevo. De nuevo, volviendo a quejarse de dolor. Él la observó durante un minuto.

-Espero que no te duela.

-Sí, pero hazlo rápido. Apuesto a que cuando el broche esté fuera, me dolerá por la presión.

-Bien.

Sesshomaru desató el broche con sumo cuidado. Su espalda parecía intacta. Al menos no la habían atravesado completamente, o estaría muerta, tal vez.

-Tu espalda se ve bien.

-¿En serio? -volvió a sonrojarse- Gracias.

-Intacta.

-De... acuerdo ¡Diablos! Y yo que pensé que había dicho que mi espalda le parecía bien. Siempre es lo mismo.

-También pienso eso.

-¿¡Pero qué diablos...!?

-¿Lo olvidas? -él no perdía nada de paciencia.

-¡¡Demonioooos!!

-Cálmate, cariño. Ahora debes voltearte.

Se estaba poniendo nerviosa. No quería que la vieran así.

-Pero prométeme que no vas a ver.

-¿Y qué crees que haga? ¿Reviso tu herida a ciegas?

-No, yo lo haría.

-Haz lo que quieras -se resignó.

-Cierra los ojos.

El youkai obedeció y cerró sus bellos ojos ámbar. Esperó pacientemente.

Kagome se volteó con dificultad y se quitó el sujetador. Comenzó a ver que tenía una herida algo cerca del corazón. Un poco grave solamente, pero muy doloroso. Entonces intentó limpiar la herida que ya emanaba bastante sangre, pero se le escapó un grito más de dolor.

Por instinto, Sesshomaru abrió los ojos. (¡Jooo, pervertidos! No penséis mal).

-¡Sesshomaru!

-¡Diablos!

-¡Te dije que no los abrieras!

-¿¡Y qué iba a hacer si gritaste como si te mataran!?

-No seas exagerado.

-Tú misma sabes que no habías gritado así.

-Uhm...

-¿Lo ves? En fin, ya que he abierto los ojos, te ayudaré con la herida.

Kagome cerró los ojos y respiró profundo.

-De acuerdo.

Sesshomaru se inclinó sobre ella y puso una gasa (tela para vendaje) con un poco de agua oxigenada (¡agua para curaciones!).

-Te ves preciosa.

-¡Sesshomaru, concéntrate! -la chica cada vez se sonrojaba más.

-¿Crees que no lo hago? Si algo me saliera mal, me culparía. Además, eres hermosa.

En otro lugar...

Un hombre de cabellos negros y ojos como la sangre se paseaba por su lujosa casa.

-Y me lleva lo que se trae ése cabrón. Pero no importa, ya lo arreglaremos.

-Sí... señor.



¿Y qué piensan, eh? Espero que les haya gustado y hasta ahí lo dejo. Soy mala... ¡¡Muajaja!!

¡¡Saludos a todos!!