Restaurante

Tema en 'Distrito Comercial' iniciado por Kaito, 26 Marzo 2020.

  1.  
    Kaisa Morinachi

    Kaisa Morinachi Crazy goat

    Tauro
    Miembro desde:
    20 Julio 2015
    Mensajes:
    6,296
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Nagi Watanabe

    La mirada furtiva que había vuelto a darle al chico terminó otra vez encima de Yumemi-senpai, con la clara confusión y extrañeza que aún reflejaba, pues "Nuvoir" no sonaba muy japonés y dudaba siquiera que pudiera pronunciarlo bien. Aunque independiente de lo anterior, en cuanto mencionó sobre ir a hablarle, no sé, simplemente mi corazón poco menos se preparó para que saliera a esconderme debajo de una roca o qué sé yo. Había dado un respingo inhalando con algo de fuerza en el proceso, mirando a mi senpai con ojos más que abierto, no demoré en mutar mi sorpresa a nerviosismo y vergüenza que, mal creí, había dejado atrás estos dos últimos días. Negué igual de rápido tanto con manos como con la cabeza, terminando por mirar al suelo mientras hacia chocar mis dedos índice.

    Vamos, que al final de cuentas hablar con chicos seguía siendo una meta a superar, una que estaba tan lejos que solo imaginar llegar a ella daba pereza; exceptuando a los tipos que conocí por culpa del perico, pero era un contexto distintos, casi podría sentir que eran más parecido a unos hermanos, por el tema de trabajar en equipo y tal. Como sí el lazo del "destino" fuera excusa suficiente para sentirme más cómoda con ellos.

    —Él sabrá sí quiere hablarnos, ¿no? —solté más despacio de lo requerido, rozando el murmullo. Tras eso suspiré con pesadez, dejando a mi mirada divagar por el paisaje tras los cristales del restaurante. Luego volví a sostener la mirada de mi senpai, aun estando roja tal tomate, manteniendo la pena en mi expresión; manos entrelazadas por delante mío—. ¿A dónde piensa ir ahora, senpai?— Y mi mirada cayó en picada para enterrarse en el piso, bravo Nagi; sigue retrocediendo—. S-si no le molesta que sepa.
     
    Última edición: 21 Enero 2021
    • Adorable Adorable x 1
    • Fangirl Fangirl x 1
  2.  
    Kaito

    Kaito Usuario popular

    Aries
    Miembro desde:
    22 Enero 2020
    Mensajes:
    577
    Pluma de
    Escritor
    —Hm, eso es cierto... supongo que ambas se complementan bien, ¿eh?

    —¡Oh! Imagina si hicieran un dueto, ¿no sería fantástico?

    —Ah, suena maravilloso... cuando pienso en esas dos juntas... je je je...

    Nuvoir no quería saber a dónde se dirigía esa conversación, así que registró rápidamente lo que habían ordenado y se retiró. Por fortuna, ambos clientes parecían bastante contentos, y eso era lo importante... ¿verdad? Incluso recogió, cuando retiraba los platos, una generosa propina... ¡nada mal para su primer día!

    Pasó el tiempo mientras trabajaba en otras mesas. No tardó mucho en llegar el final de su jornada; Sato-san lo guió a la parte trasera nuevamente y lo felicitó por una buena jornada de trabajo. Le hizo entrega de su paga, y con una breve y cortés reverencia terminó su empleo del día.

    ¡Jornada completa!
    Recibes:
    +1500 Yen
    +20 Exp
    +150 Yen de propina
     
    • Fangirl Fangirl x 3
  3.  
    Gigavehl

    Gigavehl Equipo administrativo

    Cáncer
    Miembro desde:
    15 Abril 2019
    Mensajes:
    4,082
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Nuvoir Yang

    Por fortuna mi decisión fue certera y concisa. Los chicos parecían a gusto con mi respuesta pese a ser uno que no daba preferencia a ninguno y... Ciertamente la discusión se tornó un poco incomoda.

    Tomé su orden y prácticamente el resto del día se desarrolló con normalidad. La jornada acabó pronto y hasta Sato-san me felicitó por mi trabajo.
    Sonreí genuinamente por el gesto, claro. Lo normal, después de haber pasado tanto tiempo solo, tenía que salirme bien, me habría dado algo más que solo vergüenza.

    Cuando llegó la hora de ser libre de nuevo volví a la sala y saqué mi móvil a perder el tiempo recargado en una pared, quería revisar algo y me percaté tarde que ahí estaba la otra Trickster.
    Miré de soslayo a la chica que me acompañó en la tortura, acompañada de alguien más.

    Volví mi vista al móvil con calma para después contar el dinero incluido la merecida propina después de un poco de incomodidad. Guardé todo en mi billetera y esta vez con menor discreción miré a la chica que acompañaba a la de pelo rosado. Terminando como tomate y negando a velocidad, yo no había sido discreto cuando noté ese gesto suyo.

    La miré un par de segundos más, con mi rostro serio y seco y poco después volví mi vista al móvil.

    Ay... Por favor... No me digan que apenas comienza mi segundo día como "héroe" y mi compañera ya anda dejando pauta para socializar. O más... Ugh, ahora no.

    Ahí dejo a mi niño. Just in case (?
     
    Última edición: 21 Enero 2021
    • Gracioso Gracioso x 2
    • Adorable Adorable x 1
  4.  
    Amane

    Amane Equipo administrativo Comentarista destacado fifteen k. gakkouer

    Piscis
    Miembro desde:
    10 Julio 2013
    Mensajes:
    15,776
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Riamu Yumemi

    Al final no pude disimular la sorpresa al ver su reacción y acabé por levantar una ceja mientras la observaba. Por un segundo en realidad temí que le fuese a dar un venazo ahí mismo por culpa de los nervios o algo, la verdad lo digo.

    De todas formas, ¿cuántos años tendría? Podría ir... a primero, ¿verdad? Porque había asumido directamente que era su senpai, sin saber si yo iba a segundo o tercero. Así que quizás era normal, toda aquella vergüenza; seguramente su experiencia con chicos fuese nula y de ahí el pánico de ir a hablar con uno.

    Bueno, pero qué tierna.

    Solté una risilla y me encogí de hombros, porque la verdad es que yo nunca había tenido reparo en ir a hablar con quien me apeteciese, fuese chico, chica o cualquier otro género entre medias. Esperar a que te buscasen era un poco aburrido, ¿o no?

    —Eh, pues... —levanté la mano para mirar el reloj de mi muñeca y me encogí de hombros—. Ayer fui a una tienda de ropa pero no encontré a la dependienta así que pensaba hacerle otra visita hoy a ver si tenía más suerte.

    Pero aquello también estaba siendo divertido.

    Justo después de acabar de hablar, sentí como una nueva presencia hacía acto de aparición en la sala y me giré con una sonrisa, sabiendo perfectamente de quién se trataría.

    >>¡Hombre, Shiro-san! —exclamé, con un tono exageradamente alegre—. Qué casualidad que hayamos cogido el mismo trabajo, ¿no crees~? Oh, que maleducado por mi parte —abrí la boca con una expresión de sorpresa completamente fingida y me giré para señalar a la castaña—. Mira, te presento a mi amiga, Watanabe-chan~ Es más pequeña pero ya ha trabajado aquí antes así que en realidad es como si fuese nuestra senpai. ¡Pero solo aquí, eh!
     
    • Fangirl Fangirl x 2
    • Ganador Ganador x 1
  5.  
    Kaisa Morinachi

    Kaisa Morinachi Crazy goat

    Tauro
    Miembro desde:
    20 Julio 2015
    Mensajes:
    6,296
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    My comic re-life
    Nagi Watanabe

    —Uh —solté como respuesta, con un leve asentimiento de cabeza, más concentrada en distraerme de todas las malditas reacciones que estaba sufriendo. Quién lo diría, concentrarse para distraerse, para olvidar, para soltar; por eso era una manca total en clases, ¿verdad? Maldita sea, Watanabe, había que ver el desastre que eras en realidad.

    Y bueno, que me quedé cabizbaja, más que nada por que Yumemi-senpai reaccionó tan rápido que ni había alcanzado a sí quiera calmarme del todo aún. Y su grito no hizo más que provocarme un respingo silencioso, solo movimiento, ni un solo jodido sonido más que el que pudieron hacer mis zapatos y las suelas contra el piso. Shiro-san... Blanco... Mis ojos no demoraron en mirar a la chica, otra vez abiertos como platos, y mi rostro impactado no demoró en pasar del más rojo vivo, al blanco más espectral.

    Porque que puto miedo, la verdad.
    Tenía que ser honesta.

    Empecé a titubear unos sinsentidos, intercalando con rapidez la mirada entre Yumemi y el tal Shiro, que efectivamente era quién creí que era. ¡Dioses, pero era cosa de mirarle la cara! Mis manos y cabeza intentaban negar en ese tornado de emociones y malas conexiones neuronales, pero lo único que lograba era movimientos cortos, rígidos y a destiempo, sep; un jodido corto circuito.

    Tomé una bocanada exagerada de aire, acción que me permitió inflar el pecho y enderezarme, para proceder a fruncir el ceño con fuerza mientras empuñaba mis manos delante mío; no estaba enojada con ella, es más, podía llegar a agradecerle.

    Pero no, mis pasos no llegarían a eso.
    —¡Senpai! —exclamé, como siempre, aunque gritara con mis voz alterada esta nunca dejaba de ser mullida ni rozaba lo estridente ni chirriante. Podía sentir mis mejillas inflarse cada vez que no abría la boca para soltar algo... mis ojos también estaban perlados, ¿no? Diablos, podía largarme a llorar, por lo menos no por angustia, no de momento.


    >>¡N-no tienes que hacer eso! —miré el suelo apenas solté eso, tan consternada como extrañada, algo enojada, pero más que nada tensa... porque... prácticamente no hizo nada malo: No podía recriminarla con nada. Solté un gruñido que con suerte y parecía eso y no un quejido, mirándola con "Furia incontenible" un par de segundos, mejillas infladas y manos empuñadas.

    "Ya te las verás" Aunque vamos, debía estar riéndose para sus adentros, como siempre: Nadie me tomaba en serio.

    Me volteé entonces, para encarar al tal Shiro. Ahora sí que parecía, más que un tomate, un pez globo rojo, enojado e inflado. Le sostuve la mirada a pesar de todo, con "firmeza", entonces hice una inclinación de 90° grados, con la perfección brindada al ser una japonesa correcta promedio.

    —¡U-un gusto conocerle, senpai! —exclamé, aunque más que saludo pareciera que le estaba respondiendo al comandante amenazador de turno, a cual le tocó un pelotón de ineptos; yo era el inepto, y estaba en cierto modo aterrada.

    Pero ya no tenía miedo, porque bueno; sí lo tuviera, estaría llorando a cantaros o ya hubiera escapado de la situación literalmente, corriendo y haciendo rabietas.

    Nada de eso había ocurrido, solo quería que la tierra me tragara y las memorias de ese dúo fueran borradas.
    Imposible, así que tras un par de segundo me volví a levantar, enfrentando al chico con la más seria de mis miradas, aun hecha un desastre, pero mis puños tensados me daban a entender que no retrocedería antes una "amenaza"

    —Y no, no soy senpai de ninguno de ustedes dos —empecé, mirando un momento a Yumemi por sobre el hombro; antipática y seria, tal cual era Ichirou. Volví a clavar mi mirada en el tal Shiro—, pero eso tampoco significa que me puedan tratar como una cría, ¿les quedó claro? —hablé para ambos a pesar de que solo miraba al albino.

    Me crucé de brazos, tal vez algo prepotente.

    >>Porque sí no les quedó claro, temo decirles que nos vamos a llevar mal.

    Dioses, Nagi, tú no eres así.
    Deja de decir estupideces, maldita idiota.
     
    Última edición: 22 Enero 2021
    • Fangirl Fangirl x 1
    • Espeluznante Espeluznante x 1
  6.  
    Amane

    Amane Equipo administrativo Comentarista destacado fifteen k. gakkouer

    Piscis
    Miembro desde:
    10 Julio 2013
    Mensajes:
    15,776
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Riamu Yumemi

    Pero bueno, me esperaba que la chiquilla se sonrojase y le diesen todos los nervios de nuevo, pero no que acabase poniéndose tan seria. ¿Intentaba intimidarnos o algo? Venga, qué gracia. No dejé que se me notase, la verdad, pero tampoco tuve las ganas de fingir que me había asustado de verdad o algo.

    —Eh, qué miedo, Watanabe-chan~ Si yo quiero que nos llevemos muy bien, ¿sabes?

    Al final no había podido esconder del todo el ligero tono burlón de mis palabras, pero venga, es que era inevitable dada la situación.

    >>¡Bueno! Como sea~ Un placer conocerte, Watanabe-chan, y un placer volver a verte, Shiro-chan~ Creo que al final si intentaré buscar la tienda aquella. ¡Nos vemos!

    Me despedí del par con la mano en alto y me dirigí hacia la salida del establecimiento, con la eterna sonrisa plasmada en los labios, como si nunca nada me afectase.
     
    • Adorable Adorable x 1
    • Sad Sad x 1
  7.  
    Gigavehl

    Gigavehl Equipo administrativo

    Cáncer
    Miembro desde:
    15 Abril 2019
    Mensajes:
    4,082
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Nuvoir Yang

    Cuando llamaron mi atención volví a deslizar mis ojos hacia el origen del sonido, era mi compañera con extraña alegría lo cual me hizo fruncir el ceño... Eh... ¿Pero de donde venía tanta energía? Escuchar el resto de sus comentarios solo me daba la respuesta, estaba fingiendo. ¿Para qué haría algo así? Luego me presentó a la chica, quién parecía cohibida, uhm. Si, parece que quiere que socialice tan pronto.
    Como fuese, la chica estaba horrorizada, parecía que le iba a dar un ataque de nervios en cualquier momento y yo solo pude reír por lo bajo, ah... pobrecilla. Supongo que no ha pasado por algo muy crudo en su vida, cuando iba a volver a mi móvil, pasando de largo a ambas vi la exagerada bocanada de aire y su exclamación, yo solo fruncí el ceño, serio aún al ver su accionar y esta vez elevé mi mirada directamente a ambas.

    Primero la chica parecía haber tomado un poco de valor, bien. Al menos eso quería pensar... no le he ni dirigido ni una sola palabra y pareciese que estaba por darle el sermón de su vida o peor. Venga, no niego que tengo mi carácter pero esto hasta para mí era ridículo.
    Como fuese, después se mostró recta... o eso quería pensar... ¿Me estaba amenazando? Esta claro que es una advertencia pero su forma de expresarse casi que pareciese que era alguien bipolar.

    Ah, dios. Solo vine por el trabajo, joder...

    Luego la chica de cabellos rosados se despidió y eso fue todo, yo fui deslizando mis ojos hacia donde se dirigía para volver mirar a la tal chica, solo suspiré y apagué el movil mientras me separaba de la pared y di un par de pasos hacia ella, dejando cierto espacio porque no quería tampoco joderla, estaba hecho un desastre y seguramente si me acercaba de más o reaccionaba hostil o se desmayaba ahí mismo, a mi más que gracia me provocaba lo contrario, sentía que tenía que cuidar de una cría que ni sabe ya qué decir.

    —Veamos... En primer lugar, ya sé que no eres una cría, pese que te comportes como una—. Solté, seco, serio. Sin reparo a alguno a las consecuencias, a mi no me daban tiempo para andar de dulce y suave con todo mundo.
    >>Y en segundo lugar, antes de hacer algo, respira, y reflexiona. Te va a dar algo cuando te topes con algo más intenso en tu vida. No me amenaces, lo único que conseguirás conmigo es que te pase de largo, si tanta molestia te llega a provocar.
     
    • Gracioso Gracioso x 2
    • Impaktado Impaktado x 1
  8.  
    Kaisa Morinachi

    Kaisa Morinachi Crazy goat

    Tauro
    Miembro desde:
    20 Julio 2015
    Mensajes:
    6,296
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Nagi Watanabe

    Mantuve el ceño fruncido, la expresión tosca e... intenté prolongar el rostro que pronto fue tan solo una fachada más. Mis labios tiritarón, mis ojos se cristalizaron, perdida en la silueta femenina que se marchaba sin más.

    Que se marchaba...
    ¿Huía...?
    Lo que era seguro

    ... Es que no volvería a menos que ella quisiera.

    Al igual que ellos.

    Cabizbaja, apretándome los brazos con la mano contraria correspondiente, escuché sermón de Nuvoir; conteniendo, casi como sí fuera campeona olímpica de ello, las ganas de llorar. Mi respiración, profunda, calmada y lenta, no se alteró en ningún momento. Porque respirar con detenimiento era lo único que te impedía evitar un corazón acelerado, unas piernas huidisas;

    Una acción irracional...
    Un arrepentimiento profundo.
    A los pocos segundos de que terminó de hablar, inhalé hondo y alcé la vista, firme; brazos cruzados, el semblante serio, pero ni cerca de apacible. No me veía como el manojo de nervios de hace unos momentos, claro; no sabía cuál de los dos era más difícil de sobrellevar...

    Ichirou...
    Kazuki...
    Nunca sería el primero,
    y el tercero tan solo era una ilusión de mi parte.

    Nagi Watanabe podían haber varias, pero solo una se apodaba Aki con sus amigas de antaño y, de seguro, solo yo iba a cazar monstruos a lugares desagradables e inimaginables.

    Hablar con Yang Nuvoir debería ser más fácil que...

    que...

    huir de ellos.

    —Lo admito, Yang —hablé seria y a esas alturas poco me importaba la sorpresa de que mi calma también fuera notable, más teniendo en cuenta que sostenía la mirada del chico sin mayores problemas... algo me sentaba familiar. Entorno los ojos, alzando un poco el mentón, afianzando el agarre de mi mano sobre mi propia piel—; soy como una cría—. Y negué a ojos cerrados, suave y cabizbaja, para agregar—, pero no soy una cría— Y lo volví a encarar, mucho más estoica y firme de lo que podría haber presenciado nunca, porque...

    ¿Por qué?
    No había tiempo para respuestas.
    >>Como tú tampoco eres un adulto, ¿no?— Solté uno de mis brazos para girarlo de manera vertical, dejando la palma abierta hacia el techo, el miembro en diagonal, a una altura cercana a mi cabeza. Mi pose, a pesar de defensiva, era relajada; menos mi ceño fruncido, junto de mi voz monocorde y algo más grave que mi suavidad normal—. Respeto tu preocupación y temor respecto a mi persona— Byakko, tigre, viento; me volví a cruzar de brazos, firme y la mirada cada vez más entornada, más que altanera, como una serpiente siseánte—. Así que...

    Giré a ver el paisaje tras la ventana, sinuoso, imparable; a pesar de que apenas había gente cruzando las veredas por afuera... igual había energía. El pueblo, a final de cuentas, pocas diferencias tenía con Ikekuburo; todo lo humano y derivados tenían demasiadas similitudes. Mirando aquel paisaje perpetuo tras la ventana, dije lo siguiente tras exhalar por la nariz;

    —Estamos en igualdad de condiciones, querido —solté sin siquiera pensarlo, mirándolo de reojo; desafiante. Mi voz no tuvo ningún indicio de suavidad, coquetería o sí quiera alguna sensualidad innata; era pura y dura seriedad gélida.

    Como la de mi padre.
    Tal cual mi madre.

    Sin saberlo, fue criada y amadrentada por dos perfeccionistas de cuidado...

    Estaba lista para luchar hasta con la bestia más irracional; el sabio más idiota.

    Volteé a verlo con cuerpo y vista, encarandólo manos en la cintura, ladeando la cabeza; una sonrisa gatuna, tan desafiante como juguetona, me brotó del más puro instinto; vamos Yang Nuvoir; ¿Sería Onii-chan o Aniki?

    ¿Otōto o presa?
    Porque yo solo era una cosa en mi familia; lo que debían defender y la Onee-chan de nuestra última esperanza.

    —Eso es todo, Yang-senpai —solté aterciopelada, una voz que me subió sangre al rostro, pero que no deshizo mi sonrisa gatuna ni mi mirada desafiante—, yo no deseo llevarme mal con nadie.

    Cerré los ojos, cambiando la extraña sonrisa por una más plena. Alcé el rostro hacia el cielo, arqueando un poco la espalda hacia atrás; estiramiento. Hablé en esa posición, notándose el efecto del movimiento en mi voz, cansada y reprimida sonó.

    >>Así que evitemos sermones entre nosotros, Yang-chan —solté calmada, inconsciente de cuanto estaba tensando la cuerda. Cuando volví a erguírme como correspondía, manos en la cintura, mi mirada era de absoluta seriedad—, yo ya tengo a un niño que cuidar y a una madre a quien obedecer—. Alcé un poco el mentón, altanera—, así que supongo que tú, mínimo, también tienes a quién te ordena cosas y...

    Desvíe la vista, con la expresión más apática hasta el momento, encogiendóme de hombros un leve instante.

    >>Supongo que te cuidarás más a ti mismo que a otros, ¿no?— Ni yo sabía cómo llegue a su conclusión— Se está haciendo tarde, tengo cosas que hacer antes de que anochezca.

    Lo volteé a ver, solo para hacer un ligero gesto de despedida con la mano; lo único suave y amigable en toda mi actitud represiva y estoica.

    Ya-ne

    Tras eso fui a recoger mis pertenencias y me marché; totalmente calma y apacible, aunque solo fuera de momento; del local que se volvería un lugar recurrente para mí.

     
    • Me gusta Me gusta x 1
    • Fangirl Fangirl x 1
  9.  
    Gigavehl

    Gigavehl Equipo administrativo

    Cáncer
    Miembro desde:
    15 Abril 2019
    Mensajes:
    4,082
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Nuvoir Yang

    Miré a la chica, parecía en un momento romperse a llorar o a darle el ataque de nervios, yo solo giré los ojos visiblemente incómodo. No es que me diera lástima o algo pero de verdad no comprendía de donde venía todo ese innecesario ambiente.
    Pero luego pareció recuperarse, mi mirada seria nunca la solté, fijé sus ojos como ella hacía lo mismo conmigo, hasta que habló.

    ¿Que yo tampoco soy un adulto?

    A duras penas había contenido una muy sonora carcajada.

    Igualdad de condiciones... tal vez, pero su "querido" lo único que hacía en vez de provocarme era que simplemente lo tomara como mocosa inmadura.
    Volví a escucharla, mientras me cruzaba de brazos, sus comentarios más que afectarme, me hacían enfurecer.

    "así que supongo que tú, mínimo, también tienes a quién te ordena cosas y..."

    Hija de...

    Dejé mi pose y la dejé acabar de hablar, será egoísta o estúpida, porque hablar como si me conociera es que era pasarse de imbécil.
    Me dirigí a la puerta de salida y la abrí para que la chica pudiera salir.
    —Si no soy un adulto para ti, es tu problema. Si no quieres que nos llevemos mal, no te comportes como si entendieras a la gente a la primera. Porque no tienes idea de lo que mucha gente pasa en su vida, cariño. ¿Igualdad de condiciones? No me hagas reír... Yo no tengo quién me mande, me alegro que tengas una familia que cuidar, es una lástima que yo tenga que vivir por mi cuenta y encima seguir tolerando a gente tan estúpida como ver y escuchar comentarios como si por simplemente ver a una persona, ya desvelaste su vida—. Setencié, con una frialdad absoluta.

    >>No me digas ni senpai, ni oni-chan ni cuanto apodo se te ocurra. Nuvoir es mi nombre, punto. Si, soy lo suficientemente orgulloso para cuidarme yo mismo y a nadie más. Así que lo siento, si a ti no te parece, es tu problema—. Finalicé, para salir una vez ella había abandonado el local y con esa misma aura setenciante la dejé sola, si me hablaba, la iba a pasar de largo...

    Ahora de forma definitiva.

    Discúlpalo Mori, temo que le tocaste una fibra muy sensible y personal :(
     
    Última edición: 12 Febrero 2021
    • Ganador Ganador x 2

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso