Drabble de Naruto - Resaca.

Autor: Temarii Juuzou.
Personajes: Minato, Jiraiya.
Actividad: Este cuerpo no es mío.

_____________________________________________________________________

Resaca.

La resaca comenzó en el momento justo en el que los rayos de Sol dieron directo en su rostro. Era extraño, no recordaba que la habitación de su pequeño hogar tuviese ventana, aunque era más probable que no estuviese en su hogar, como solía pasarle siempre que salía de fiesta. Lanzó un bostezo y pasó una de sus manos por sus ojos, sintiéndose aún mareado y mucho más ligero, quizá el alcohol aún no dejaba del todo su cuerpo.

—Buenos días.

No se espanta, suele despertar en camas ajenas siempre que toma de esa forma, pero si le sobresalta el hecho de sentir unas manos gruesas que le acarician su cabeza y una voz gruesa llamándole “amor”.

Entonces abre sus ojos y observa el lugar donde despertó y se siente abrumado, porque no es un cuarto barato de hotel ni mucho menos una habitación de solterona desesperada; siente un nudo en la garganta, por primera vez en su vida, Jiraiya se metió en la habitación de una pareja casada: las suaves almohadas y la falta de ropa regada en el suelo le decían todo.

—Maldita sea —se levantó de golpe y miró a quien sea la persona con la que se acostó anoche solo para palidecer.

No sabía que era peor, el hecho de que al parecer anoche se había acostado con un hombre o que aquel hombre fuese su alumno.

— ¿Cariño, estas bien? No es normal en ti maldecir tan temprano —la mano de Minato fue directo a su frente y Jiraiya le dio un fuerte manotazo por inercia, el rubio lo miró con una ceja levantada y sin entender nada.

—-Yo… —el ninja mayor se levantó de la cama, solo para tropezar con las cobijas de la cama y caer de espaldas. Soltó un suspiro lleno de alivio al verse aún con ropa, pero el grito que salió de su garganta terminó por despertar a un pequeño bebé en la habitación continua.

Era delgado, mucho más de lo normal y con un par de pechos sobresalientes. ¿Acaso todo era una cruel broma del destino o una mala jugada de bebidas? Con suerte todo podría ser una simple broma por parte del cuarto Hokage.

—Kushina… —el rubio comenzó a hablar, pero los llantos del pequeño bebé lo hicieron salir de la habitación, lo que le daba la oportunidad de huir al sannin.

Minato volvi+o al momento en que Kushina pretendía salir por la ventana, con un pequeño Naruto en brazos. Jiraiya miro al par de rubios, especialmente al pequeño quien alzó los brazos a su dirección.

—Creo que tiene hambre. Deberías alimentarlo, amor.

— ¿Yo? —Jiraiya miró con espanto a Minato — ¿Con que?

El rubio soltó una pequeña risa antes de besar la frente de su esposa y luego la de su propio bebé.

—Con tus pechos, por supuesto.

Si era un castigo, Jiraiya prometía no volver a tomar ni acosar a ninguna mujer en su vida de nuevo.