Regalamé una sonrisa...

Holaaaa, ¿Cómo están todas?, amigas le traigo otro Long- fic se me vino una idea a la mente ahora y dije ¿Por qué no? Bueno espero disfruten este fic les guste y si no también se vale me gusta mucho la época de Kagome asi que de nuevo será…

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Algo de occ pero muy levemente

Capítulo 1: ¿De quién me enamore?

¿Qué haría una chica de 16 años? , cuando una a esa edad se enamora trata de ser muy inocente y linda con la persona que le gusta, el chico al menos sonreía al hacer tantas tonterías y demasiados intentos por que algún día le hiciera caso, pero por alguna razón aquel chico no sonreía, ni un solo gesto de felicidad en su rostro o al menos una burla, pero nada el chico era más tieso que una estatua…pero una azabache lo haría cambiar, o al menos eso quería lograr.

Kagome’s pov

Era una mañana helada, la ventisca golpeaba mis ventanas con algo de fuerza, me encontraba en mi habitación durmiendo tranquilamente, de repente suena el escandaloso despertador anunciando las 7:30 am, al parecer era hora de empezar un nuevo día de escuela, actividades y demás, solo dejaba salir mi brazo izquierdo tratando de apagarlo, ese infernal ruido interrumpía mi dulce sueño.

-Mmm… ¿Qué rayos…?... ¡Ahhh!...duele… ¿eh?, ¿Qué hora es?...- Había caído de la cama por tratar de alcanzar ese inútil aparato, lo peor era que según era para despertarme y mira todo lo que había provocado.

-¡Kagome!, el desayuno está listo por favor ¡no tardes!- empecé a escuchar los gritos de mi madre para que me levantara de la cama y fuera a la escuela, me agradaba la idea, al fin era otro dia en el cual vería a InuYasha, a mi querido InuYasha.

-¡Enseguida voy mama!, no debo perder tiempo debo apurarme o no podre subir con el al tren- dije demasiado desesperada por verlo, quería que esta vez sí se fijara en mi, lo iba a sorprender…era mi segundo intento ¡tenía que funcionar!

De inmediato me metí a la ducha y después salí de ahí lo más rápido que pude, me puse una toalla en mi cabeza para evitar que escurriera, me comencé a arreglar lo más rápido que pude, aunque quería verme linda para el por eso lo hice bien pero algo apurada. Baje rápido las escaleras y mire la hora, aún tenía tiempo de desayunar con la familia.

-¡Buenos días!, ¿Qué bonita mañana no?...- les decía a todos dejando la cartera en la silla, mientras me sujetaba el cabello con mi listón favorito color celeste, venía con mi uniforme pero algo arreglada para que InuYasha, el chico que me volvía loca, que me hacía soltar suspiros cada 5 segundos.

-Buenos días hija, ¿bonito día?, pero Kagome está haciendo un fuerte viento y ha llovido casi todos los días…- decía mi abuelo, realmente no entendía porque para mí era un excelente día, era casi gritar porque verías de nuevo o más bien un día más a mi adorado InuYasha.

-Abuelo ¿Aun no lo entiendes?...vaya…- decía mientras me sentaba mirándolo riendo levemente, mi abuelo era muy despistado con ese tipo de cosas, tome un pan tostado y le unte la mermelada despacio, de repente llegaba a la mesa mi pequeño hermano Sota, le sonreí para darle de inmediato los bueno días.

-Buenos días Sota, ¿dormiste bien?...- le di primero la rebanada de pan a Sota, parecía haber tenido ese tipo de pesadillas de nuevo, pero se veía algo triste y distraído, al verlo asi puse una mano en su espalda para decirle que todo estaría bien y el solo me sonrió.

-Gracias hermana, últimamente no he tenido bueno sueños, se siente terrible levantarte todo sudado…- quería saber que atormentaba a mi hermano, creía que alguien lo amenazaba, sabía que él lo diría si asi fuera…aunque ¿Cuál podría ser la razón?...

-No te preocupes hermanito, tu hermana jamás dejara que te hagan daño, ¡que se atrevan y verán!- decía con una sonrisa triunfante, al parecer eso calmo a Sota un poco y yo terminaba de prepararme otro pan tostado, me serví un poco de jugo de naranja y empecé a comer tranquilamente hasta que vi el reloj, ¡no puede ser, las 8 am!, como pude termine de comer le di 2 que 3 tragos al jugo y tome mi cartera muy desesperada, Sota me miro confundido, salí de la casa como rayo apresurada, ¡si se había ido este era mi fin!

-¡Espera mi querido InuYasha, ya voy!...- mis palabras sonaban agotadas mientras corría con fuerza, ya casi llegaba con mucho esfuerzo a la estación y ahí estaba, un apuesto chico de ojos negros y cabello del mismo color que el mío, parecía concentrado en su mundo, escuchando música pero quien sabe de qué tipo…mi chico era todo un misterio. Jamás hablaba con nadie, casi siempre lo veía callado ¿me pregunto porque?, llegue hasta lado y lo mire un momento, era tan genial…podría tener una oportunidad ese día, pero no decía nada, solo me miro un momento y alzo una ceja para voltear hacia el otro lado sin ninguna expresión en su rostro.

-¡Oh llego el tren!, ¿vas a subir?- le pregunte con naturalidad…mi chico no mostraba ninguna expresión, eso era raro…mi corazón casi se sale de mi pecho al verlo y ni una expresión…nada.
InuYasha subia al tren, yo lo miraba algo confusa me parecía que necesitaba un poco de tiempo para adaptarse, ¡pero que rayos digo!...¿InuYasha adaptarse?, pero si casi llevamos 1 año de ir en la misma clase y el seguía igual, pero yo haría que este lindo chico me mostrara al menos una expresión…quería lograr que me regalara una sonrisa…sola una, ese chico tan misterioso era totalmente serio, pero eso fue precisamente lo que me atrajo de el…su mirada, y su silencio…¡Oh por dios de mis pensamientos!...¿de quien me enamore?, ¿Quién es el?, ¿Por qué el..tenia que cautivar profundamente mi corazón?...

-¡Con permiso!, llegare tarde ¡demonios!- yo estaba mostrando una expresión de preocupación y mi chico de ojos café oscuro ni una palabra, ¡Por favor InuYasha…Regálame una bella sonrisa!

Continuara…

Bueno espero les haya gustado el primer capítulo, pronto el segundo capítulo no tardare, cuidence chicas hasta pronto

Próximo Capitulo: Tu mirada me mata, InuYasha… ¿Quién eres?

 

Alohaaaa chicas, de nuevo les traigo conti de este fic espero les guste y comenten, agradezco comentarios del fic realmente me agrada que les guste la idea de que Inu-sama sea como su hermano Sesshomaru y bueno sin más que decir lean y… ¡Sigamos Inuyasheando!

Capítulo 2: Tu mirada me mata, InuYasha… ¿Quién eres?

Llegue a la escuela algo agitada, estaba agotada de tanto correr para que mi profesor me mandara a volar de su clase.

-¡Lo siento!...ya he…- pero para mi sorpresa, mi chico InuYasha se encontraba solo en aquel salón tan grande, su mirada solo veía las ventanas y de pronto mi cuerpo sintió una fuerza briza, me abrase con fuerza y de pronto sin percatarme de ello…el me…

-No vayas a…resfriarte…- esas palabras resonaban en mi cabeza una y otra vez, acaso el… ¿estaba preocupado por mí?...era la primera vez que me hablaba, pero aun asi ni una sonrisa, ni un solo gesto…tan solo palabras.

-No pasa nada...¡ya va a comenzar la clase!, InuYasha…¿asi te llamas?...puedo sentarme a tu lado…- creo que fue muy lanzada, una vez mi madre me dijo que a los chicos había que tratarlos poco a poco, parecía que yo había entendido todo al revés.

-como quieras…me da igual…- al menos no decía que no, pero su mirada era muy penetrante, ni un solo gesto, solo observaba esa porquería llamada iPod… ¿Cómo pude enamorarme de el?...

-Gra-gracias…por cierto…Mi nombre es Kagome Higurashi…es un placer Inu…Yasha…- por primera vez me sentía nerviosa, ya lo conocía perfectamente…pero mi chico no debía saberlo, no debía saber mi amor por él.

-mmm…- InuYasha, ¡por favor regálame una sonrisa!, porque siempre esa expresión es tu rostro, mi sueño es verte sonreir…solo una vez…

-Esta tan lejos de cumplirse…- creo que esas palabras jamas debi decirlas en voz alta…ahora mi chico me observaba algo confundido, y si creía que estaba loca…al parecer todos lo creían.

-¡Kagome parece una loca!...- de repente sin percatarme llegaba una chica de cabellos azabaches iguales a los míos, todos decían que si éramos parientes, al parecer Kikyo parecía mi hermana, pero jamás me importo eso.

-¿Ya vienes a fastidiar Kikyo?...no puedo creerlo…¿Por qué tenias que ser mi amiga?, ahora mismo podría decirte unas cuantas cosas- mas que enojarme, me daba risa la actitud de Kikyo…siempre era igual.

-Sabes que es broma Kagome, no tienes que enfadarte…¿Mmm?, ¿Kagome quién es el?...- no lo podía creer, hacía casi un año que InuYasha estaba en nuestra clase y apenas se daba cuenta de su existencia.

-Se llama InuYasha, pero Kikyo llegábamos casi un año juntos…¿Cómo es que apenas te das cuenta de su presencia?- creo que me había pasado, sentía que había herido a InuYasha y debía comprobarlo volteando a verlo, pero de nuevo esa expresión de tranquilidad, sin un gesto sin nada…¿Quién es InuYasha?

-Pues jamás lo había visto… ¿enserio llevamos un año?...yo…- pero fue interrumpida por el golpe de otra de mis amigas, al parecer Sango se había molestado mucho, ¿Por qué venia sudada?, creo que está más que yo

-¡Kikyo, de nuevo olvidaste tu cartera en la estación! …tonta- pobre Sango, me imagino que recorrió como más de un km buscándola, Kikyo era bastante distraída pero jamás pensé que fuera para tanto.

-¡Sango!, ¿Qué tal tu búsqueda?...Kikyo uno de estos días mataras de un infarto a la pobre de Sango…- parecía que el momento era gracioso, mis dos amigas discutían sobre esos típicos problemas entre ellas, por lo regular eso siempre pasaba, me di la vuelta para mirar a aquel chico…de nuevo lo mismo ¡Ningún gesto!, ni una palabra…

-¿Kagome, pero en qué piensas?, pareces muy concentrada- decía Sango mirándome divertida y Kikyo sonreía burlonamente… ¿soy yo o me miraban de manera extraña?

-Oye… ¿te gusta este chico, verdad?- como era posible, Sango había dado en el blanco…pero jamás se lo diría…jamás le diría que lo amaba, además de que me serviría hacerlo si él nunca mostraría alguna expresión de algo.

-¡Sango, deja de molestarme con esas cosas! …ya te dije que…- de repente sentí a mi otra amiga de cabello igualito al mío lanzarme contra donde estaba mi chico, el chico no mostro ninguna expresión y caí encima de él tirándolo de la silla, no puede ser sentía que ahora si me iba a morir de la vergüenza, aun asi no había nada de su parte ni siquiera me quitaba de encima suyo.

-Lo-lo siento…perdóname por favor…yo…- no pude decir nada más ya que el chico no se qué había pasado pero me abrazo de la cintura y se acercaba a mis labios lentamente, ¿Qué rayos pasaba?...pensaba que no le atraía si sus acciones le daban todas sus respuestas

-*Inu…Yasha…no te detengas por favor…- ¿pero qué demonios estaba haciendo?, InuYasha me iba a besar y yo suplicaba que no se detuviera, pero que cosas tan tontas estaba pensando, estaba a punto de unir mis labios con los suyos pose mis manos sobre su hermoso abdomen y respire muy nerviosa a punto de lograr mi objetivo…maldita sea pero tenía que interrumpir la profesora en ese momento, ¡Rayos tan cerca!

-¡InuYasha-sama!, ¡Kagome-sama!, ¿Por qué están asi?...me gustaría una explicación a esa pregunta- nos miraba algo sorprendida, ¿Qué me pasaba en ese momento?, mi corazón se aceleraba aun mas, todos nos miraban y mis amigas Sango y Kikyo se estaban riendo de mi gran sonrojo.

-¡Le puedo explicar!...por favor yo…- de nuevo fui silenciada cuando InuYasha se levantó y me miro de manera seria sin mostrar nada en su rostro, ¿se estaba burlando acaso?...si era asi, ¿Por qué casi me iba a besar?...se sentaba sin preocupación de las risas de los demás, yo me encontraba aun en el suelo, esa mirada era como un balazo hacia mi corazón, quería…matarme, ¡por favor InuYasha deseo ver tu hermosa sonrisa!

Bueno chicas espero les haya gustado este frio y misterioso capitulo pronto el siguiente, recuerden sigamos posteando y también apoyen a la conservación de un lindo chico sin sonrisa Alex y FFL por un mundo mejor para el anime.

Próximo Capitulo: Empezare a conquistarte, ¡mi sueño es verte sonreir!

 

Hola chicas de regreso de vacaciones, gracias por esperar mi regreso estoy aquí muy feliz de conectarme de nuevo y con una conti nueva jajajaja que obvia no pues por eso es capi nuevo ¡babosa! Bueno chicos espero les guste y disculpen mi chiste tan idiota disfruten

Capítulo 3: Empezare a conquistarte, ¡mi sueño es verte sonreír!
Después de aquel suceso decidí que lo mejor era pensar las cosas a sola, me separe de mis amigas y fui detrás de la escuela como casi nadie iba ahí asi pensé que era un lugar tranquilo y pacífico

-Vaya…cuanto silencio –en realidad era un silencio bastante extraño, el viento estaba algo fuerte a mi alrededor, de repente logre ver una luz resplandeciente y brillante donde se encontraba mi querido InuYasha al parecer estaba concentrado leyendo un gran libro sepa de qué y escuchando su misteriosa música, también sepa de qué.

-¿A…a que has venido Kagome? –que frías sonaron esas palabras, aunque también eran lo mejor que había escuchado en mi vida, por primera vez el chico de voz fría.

-Yo venía…en realidad no venía a nada contigo- me sentía muy nerviosa como para decirle que quería pensar sobre lo que acababa de pasar en el salón.

-mmm…de acuerdo entonces da igual- al parecer ya había dado un paso, por primera vez lo escuchaba hablar y su voz además de su mirada mataban y hacían que mi piel se pusiera de chinito.

-¿puedo preguntarte algo?...- me sentía mas nerviosa ahora al ver como InuYasha se quitaba los audífonos y bajaba el libro que leía mirándome fijamente a los ojos.

-Ya estás haciendo una pregunta, ¿no sería una segunda pregunta? –pensé en ese momento que se iba a reír ya estaba esperando ese momento pero para mí mala suerte nada…ni un gesto de nuevo esa terrible seriedad en su rostro.

-*Demonios, apunto de lograrlo*- solo me sonroje en ese momento al ver su mirada, después de no verme decir nada se levanta sin decir nada y empieza a caminar hacia el patio central del colegio.

-Olvidemos esto entonces- como que olvidemos ¡no estoy dispuesta a olvidar! Haría que ese hermoso chico me sonriera aunque sea una vez, aunque fuera burlándose o algo asi

-¡No, espera InuYasha!- mi brazo entero reacciono de manera involuntaria y mirándolo algo tensa y nerviosa, el me miro algo extrañado pero aún muy serio.

-¿me harás esa pregunta o no?- al parecer además de serio directo e impaciente, ¿Quién eres tu InuYasha?, aun todavía necesito más sorpresas de ti…wow aunque su voz era genial y hermosa.

-S-si… ¿tu alguna vez…te has enamorado de alguien? – ¡¿pero qué rayos estoy diciendo?! , pues no es lógico que con pareciera que nunca hablo ni con un muerto.

-¿A qué viene eso?, si eso era todo, me puedes disculpar tengo mucho que hacer –¿eh?, ¿pero que fue eso?, o era yo o si estaba enamorado de alguien antes, leí en internet ese tipo de actitud de los chicos y solo se mostraba el dolor que ocultaban al reconocerlo abiertamente, mi chico empezó a caminar de nuevo y esta vez decidí no moverme ni nada por el estilo tal vez asi no me odiaría como todos los chicos que se cruzan conmigo.

-Lo-lo siento… -empecé a caminar lentamente hacia las escaleras principales, me notaba algo triste, quería llorar o tal vez solo quería sentirme bien de alguna manera.

-Esa chica es extraña… -esas palabras son las ultimas que decía aquel chico de cabellera larga, su seriedad ya estaba molestándome, ¿Qué nunca iba a mostrar ninguna actitud hacia mi persona?

-¡Kagome!- escuche la voz de inmediato de Sango y Kikyo ¿ya venían a molestar tan temprano?

-¿Qué paso ahora?, no me digan que de nuevo estaban espiando ¿verdad? –esas dos nunca cambiarían, estaba a punto de desmayarme el solo pensar en esa mirada y ese momento, pero sobre todo la actitud, la actitud tan seca que tenía.

-¡Chale Kagome uno que viene en buen plan y tú te pones tus moños!, bueno solo fue el final – ¿Cuál era la maldita diferencia? ¡Dios mío ayúdame con estas dos lorenzas de mi lado!

-Kikyo tu mejor calladita te ves más bonita, estoy algo molesta –tal vez no debería ser asi con mis amigas pero no me sentía bien para ponerme a escuchar su arguende.

-Kagome te daré un consejo de amiga si quieres que ese chico se fije en ti debes, escucha bien…debes cambiar tu guarda ropa estoy segura de que tu ropa ya es anticuada para el -¿mi ropa anticuada?, ¿acaso escuche bien?...pero ahora si estaban perdidas pero si mi ropa a mí me gustaba, ya intente mil veces verme bien para sacarle una sonrisa y aun asi ni me pela.

-Sango…¡¿Qué no ves que ya lo intente todo y no mas no?!...a duras penas logre que me hablara, pero estará más cañón que se fije en mi como una chica no como una extraña, al final dirá que me odia –lo último para mí fue muy doloroso, recordaba mis anécdotas pasadas y me sentía fatal.

-¿ya intentaste llamar su atención?, tal vez es tímido y por eso no te pela como dices Kagome- Kikyo sonaba de lo más seria, tal vez tenía razón y era algo tímido ¡por el amor a la tierra! ¿InuYasha tímido?, eso ni siquiera si ahorita viera al profesor vestido de la india María.

-O…tal vez se está haciendo del rogar, ¿nunca te han dicho que los chicos quieren que les ruegues tú?, no seas torpe amiga mía y piensa bien las cosas –Sango también sonaba bastante convencida de lo que decía y yo pensé en ese momento y llegue a la conclusión de que… ¡No manches, como iba a ser posible que ese chico se hiciera del rogar!, ni siquiera le importaba nada de lo que decía jajajaja como no.

-¿Kagome, cuál es tu meta? –volvió a decir Sango acercándose a mí con una mirada pervertida y bastante picara poniéndome algo nerviosa en ese momento.

-Si Kagome ¿quieres que te bese?, es que yo te vi súper ilusionada cuando estábamos en el salón- decía mi casi gemela Kikyo, ¿yo ilusionada? Pero ni siquiera llegue a pensar que el hiciera algo asi.

-O… ¿quieres que te lleve en su corcel azul y te de un beso a la luz de la luna? –como creía esa tontería, ¿InuYasha como un príncipe?, pero que cosas se le ocurrían a mi amiga Sango

-¡Ya se!, quieres que…- pero estaba claro que las iba a callar y cada una les puse un pedazo de sándwich en la boca para que dejaron de parlotear.

-En primer lugar, ¡No me interesa besarlo ahora!, en segundo lugar ¡InuYasha es más seco y más frio que el refrigerador de mi casa¡ y eso ya es decir bastante…lo único que quiero es verlo sonreír… -mis palabras hicieron que mis amigas se quitaran el pedazo de sándwich y me miraran confundidas y mirándose entre ellas.

-¿Enserio?, ¿eso es todo lo que quieres?- decía Kikyo con cara de yo creía otra y Sango me miraba aún más confundida que antes.

-Pero harían una bonita pareja ¡vamos Kagome podemos ayudarte si quieres! –no quería ayuda y mostré una mirada determinante ante mis palabras ya mencionadas y muy seria.

-¡No quiero!, yo lo conquistare a mi manera porque mi más grande sueño es verlo feliz y que sonría al menos una vez…- dije haciendo suspirar a mis dos amigas en resignación y suspirando asintiendo.

-Bien Kagome como quieras… -sus últimas palabras antes de que tomaran sus cosas y salieran, ¡pero porque me dejaban sola!...vaya amigas las mías.

-Oye Kagome…-¿Qué paso?, sentí mi corazón shoqueado y a punto de salir de mi pecho.
Bien chicas espero les haya gustado pronto la conti y muchas gracias por postear e InuYashear un rato cuídense mucho y nos veremos en el próximo capi

Próximo Capitulo: Seremos amigos, ¿pero por cuánto tiempo?

 

Hola chicas es hora de actualizar historia, perdón si no lo he hecho pero ya saben uno que tiene 4 fic para actualizar consecutivamente y además tengo que razonar ideas buenas para los capítulos, asi es la imaginación de una loca como yo espero realmente este capitulo les guste y como siempre me pongan un lindo comentario para seguir escribiendo. Sin mas que decir disfruten
Capitulo 4: Seremos amigos, ¿pero por cuánto tiempo?
Sentía un escalofrió recorrer mi cuerpo, cada palabra estaba llena de temor al voltear en ese momento, un chico de coleta alta me miraba de manera penetrante y a la vez dulce.
—Kagome, ¿estás bien? Oye hace rato vi a un chico platicar contigo, ¿Quién era? —me decía un amigo de hace mucho, el tenia el cabello castaño y se lo ataba de una coleta alta, siempre se preocupaba por mío seguridad aunque algunas veces fuera algo sobreprotector.
— ¿Qué acaso nadie conoce a InuYasha? —pregunte algo confundida, me cruce de brazos y mi amigo me miro de manera celosa, de alguna manera no le gustaba que hablara de otro chico, yo sabía que sentía algo mas por mi pues no era tonta, pero la verdad es que el único chico que me gusta es InuYasha y nadie más.
— ¿InuYasha?, ¡¿Quién diablos es ese?! , que acaso ¿es tu novio? , ¿Tu pretendiente? —decía bastante celoso, casi pensé en ese momento que se iba a ir a buscarlo y a golpearlo como hacía con los chicos que me pretendían.
—No…con decirte que ni siquiera es…—pero no pude terminar con algo que me impacto en ese momento, InuYasha estaba detrás de Kouga-kun con una mirada llena de rabia y recelo, parecía que ya se conocían y se odiaban con todo, mi querido pelinegro bajo su libro y se quito los audífonos caminando hacia mí con la mirada llena de seriedad
—Kagome…— sin decirme nada mas, mi querido chico de ojos marrón se acerco hacia mi peligrosamente, pero como siempre sin un gesto de nada, ni una sonrisa, ni siquiera una mueca de nada, cerro sus hermosos ojos oscuros y me beso con calidez por supuesto que yo correspondí lentamente, aunque si que estaba mas confundida que nadie.
— ¡¿Kagome, que rayos es esto?! , dijiste que…ah con que este tipo es InuYasha, ¡Quieres alejarte de mi mujer! —mi amigo apretó los puños con mucha ira, yo segui besándolo la verdad es que yo si quería recibir ese beso, siempre espere que mi querido chico de mirada seria me besara asi, aunque tengo una pregunta ¿Por qué lo hizo?
Después de la falta de aire evidente ambos nos separamos, me miro muy serio y tomo mi mano alejándose de Kouga con rabia, yo me trate de soltar sin ningún éxito, claro que Kouga intervino y me puso detrás de el mirando a InuYasha con mucha rabia y ganas de matarlo.
—¡¿Quién demonios te crees?! , Kagome dijo que no eres su novio, además yo nunca permitiré que sea tuya, ¡Antes muerto! —nunca antes vi a Kouga-kun tan molesto con algún chico, aparte de frio InuYasha presento la ira profunda de mi amigo, ¿Qué tenia este chico de ojos oscuros y penetrantes? ¿Por qué siempre me hacía casi temblar de los nervios?
—Kagome… ¿vienes conmigo? —me estiro la mano tanto que yo casi me desmayo, asentí levemente tomando su mano, Kouga se sorprendió y después lo vi cabizbajo, creo que realmente me quería mucho, tanto que su mirada era tierna y llena de tristeza.
—S-si…InuYasha, ¿Por qué tu…? —Kouga ya se había ido cuando yo voltee de nuevo a mirarlo, me sentía mal, no hubiera querido que el viera ese momento porque además yo lo disfrute y era lindo.
—Tranquila, no debes sentirte mal…además quería decirte lo que me habías preguntado hace un rato, ¿recuerdas? —wow era sorprendente, InuYasha me dijo que me calmara, que no me sintiera mal, ¿estaba soñando? , además por primera vez formo una oración de 17 palabras, muy largo para él, le debió costar trabajo.
— ¿Cuál es tu respuesta entonces? —pregunte con algo de timidez pero a la vez muy impaciente, quería saber si algo lo había hecho frio.
—Si podemos ser amigos…pero no me preguntes más acerca del amor, además tengo otra condición para ti, ese chico que estaba contigo…aléjate de él, si vas a ser mi amiga no quiero que el este cerca de ti…porque me pondría celoso — ¡Que! ¿Acaso escuche bien?, fue lindo lo admito, pero con esa mirada seria no me agradaba del todo, ¿debía confiar en él? Para mí que esto es más que sospechoso.
—P-pero…—no me dejo hablar porque ya me había besado de nuevo, ¿Qué rayos era eso? Había dicho amigos, pero por alguna razón…
—Kagome...seremos amigos, pero ¿Por qué cuanto tiempo? —esas fueron las palabras del siglo, ¿Qué quería decir? Pensé que a el no le gustaba ni un poco…yo lo amo, deseo estar con el siempre ¡Por favor InuYasha! Regálame una sonrisa…
¿Qué tal chicas? Espero les haya gustado, me llego la idea de repente ya verán como desarrollare la historia, disculpen si no era algo que esperaban pero el siguiente será genial y necesitaba esa idea, cuídense y si tienen internet ahí nos vemos. Próximo Capítulo: Tu mirada me recuerda, ¡Soy Aome!... No me confundas