Drabble Quedó luz en su corazón. (Twilight Princess)

Titulo: Quedó luz en su corazón (Twilight Princess).
Palabras: 651.
Summary: Midna piensa que no sólo se llevó la preocupación y el entendimiento de la princesa Zelda, si no también se robó un suspiro por parte de Link…
Advertencias: Posibles faltas ortográficas y confusión en los tiempos.
Clasificación: K.
Notas: Inspirado mientras pasaba uno de mis juegos preferidos.

.Quedó luz en su corazón.​

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¿Qué es lo que pasó exactamente en ese momento? ¿Desde cuándo era amable con la demás gente? ¿Quién le enseñó a ir tras los seres que necesitaban ayuda? ¿Desde cuándo compartía sus sentimientos y debilidades con los demás?

La princesa del crepúsculo no podía soportar tantas dudas a la misma vez, ya era demasiado tormento soñar con aquel héroe que salvó a su reino, no deseaba seguir el resto de su vida de esa desagradable forma. Recordó entonces que tan sólo habían pasado unos cuántos días desde que aquél espejo, diseñado para conectar dos mundos diferentes, se había fragmentado con una lágrima sincera de ella; sin embargo Midna piensa que no sólo se llevó la preocupación y el entendimiento de la princesa Zelda, si no también se robó un suspiro por parte de Link… aquel momento que no ocuparon las palabras para despedirse.

―Y… ¿cuál es su respuesta? ―preguntó un ser chaparro de piel oscura y a la vez resplandeciente, sus ojos se tornaron de un color carmesí. Esperaba resignadamente la respuesta de la princesa―, él la espera en la entrada del palacio.

―¿Qué? Ah… sí. ―Ella despertó de sus pensamientos y se dio cuenta que estaba en sus aposentos, se levantó para afirmar jurisdicción a pesar que no le importaba ni en lo más mínimo quién quería entrar a verla―. Haz lo que tengas que hacer.

El personaje, extrañado por su respuesta sin sentido, se retiró sin mas antes de hacer una reverencia, otra vez Midna había quedado completamente sola. “Sola”, hace mucho que no se le venía aquella palabra en la mente. En aquellos días un valiente héroe la acompañaba cada momento, era imposible una gota de soledad en ese tiempo… y aunque lo había conocido en su forma humana con sus verdes ropajes, lucía mejor en su forma de bestia de ojos azules; le parecía que era más fácil de manipular y divertirse al mismo tiempo.

―Link… ―soltó un suspiro casi inaudible con la mirada en el suelo, observó el lujoso azulejo de la gran habitación. Recordó por instantes el espejo roto y el rostro de Link junto con él, ¿acaso lo extrañaba demasiado? ¿Podrá vivir el resto de su vida en ese mundo oscuro sin él?

Al parecer la presencia del muchacho había sido una gran influencia para ella, aquellos ojos azules tan profundos como el mar le hacían falta a su vida mísera y sin sentido.

―Ojala… algún día ―musitó levantando la vista y esbozó una sonrisa maquiavélica como antes, se levantó de su asiento y bajó los escalones haciendo notar sus pasos por el eco de la habitación, el sonido era a la vez silencioso―. Yo… lo encuentre… no él mismo, pero… el héroe de este lugar, será él mismo, pero en forma oscura. Sí, un héroe de la oscuridad.

Su corazón revivió dando una pequeña luz de esperanza, aquel héroe que tenía su corazón ya estaba fuera de su alcance por decisiones de ella. Nació algo nuevo en ese instante, aquel órgano volvió a palpitar como antes, si no hubiera sido por ese detalle el sentimiento puro que había nacido sin avisar la hubiera devorado poco a poco. Lo encontraría, a ese mismo Link, pero en su forma oscura… como ella misma. Estaba tan deseosa, tan segura, que podía jurar que lo sentía cerca… en ese momento, cuando pasara aquel día sería completamente feliz.

―Hee, hee, hee ―soltó una risa como la princesa bien sabía, resonó en las paredes causándole un bienestar―. Qué tontos han sido, me extrañaran en su mundo de luz. Me extrañaran Link y Zelda.

Se abrieron las puertas oscuras de repente, sonaron unos pasos medianos y un poco presurosos, parecían el sonido seco de unas botas. La princesa del crepúsculo alzó un poco su mirada y agudizó sus oídos para todos los sonidos que aquella silueta emitiera, no era tan alto como esperaba, pero tenía porte de caballero…

Sonrió inesperadamente…