Prueba Ser una piloto de pruebas no es un trabajo fácil. En especial si se trata de una nueva nave experimental, la primera de su clase en ser fabricada. La cual solamente tiene inmensos y elaborados cálculos matemáticos, y piezas armadas con plegarias en lugar de metodología o experiencia, para respaldar su funcionalidad. El riesgo que algo salga mal y todo termine explotando, es alta. Sin embargo, estos riesgos son necesarios, sobre todo si se trata de ganar ventaja en la guerra omnica y así salvar vidas inocentes. Ese es el propósito de la nueva nave de combate, el caza teletransportador Slipstream, el cual permitirá un ataque rápido y eficaz en un parpadeo gracias a su matriz de teletransportación, antes que el enemigo siquiera pueda desplegar sus defensas. — ¡Vamos, love! No seas amargada, sonríe— Lena intentaba animar a su novia; la prueba comenzaría en una hora y deseaba llevar recuerdo de una sonrisa y un agradable momento como talismán de buena suerte, en lugar de un rostro pálido irradiando tristeza y preocupación. — Esto es serio, Lena. Tengo un mal presentimiento…— la voz de Emily estaba a punto de quebrarse por la preocupación. No podía dejar de pensar que la invención de una nueva arma siempre acarrea consecuencias, como un mal karma por desarrollar una nueva forma de destruir. — Todo saldrá bien. Te lo prometo, amor— con un beso suave la piloto logró que su amada esbozara una sonrisa, pero no era suficiente, deseaba llevarse una sonrisa radiante— Deshazte de toda esa negatividad que tienes dentro, my love, se me antoja un beso alegre— exigió Lena con picardía. — ¿Y como quieres que haga eso?— preguntó Emily abrumada por sus emociones. — Grita— propuso Lena sin hacer caso de la ceja alzada con recelo que le dirigió su novia— Así es, grita. Deja que todas tus preocupaciones salgan afuera. Vamos hazlo conmigo…— sujeto la mano de Emily y dio inicio a un grito ensordecedor. Emily se sintió avergonzada, pero no tardo en gritar a la par de su amada, dejando que todas sus preocupaciones se alejaran. Las personas alrededor les lanzaban miradas de reproche, pero la pareja simplemente se fugo del lugar sin dejar de reír. Los minutos restantes los pasaron caminando de la mano con total alegría, hasta que la piloto fue llamada para la prueba. — … Solo… Cuídate— pidió Emily suplicante, intentando mantener sus nervios al margen. — Siempre, love— Lena se despidió de Emily con un beso en los labios. La prueba dio comienzo. Todo parecía normal, el vuelo de la nave y las maniobras que podía realizar lucían excepcionales. Pero al momento de probar la matriz de teletransportación. La tragedia sucedió. Una inmensa y estruendosa explosión se escuchó en toda la base, junto al grito angustiante de una afligida mujer.
