Bajé del pokémon Psíquico y lo metí en su pokeball para que descansara. Tras esto, eché a correr y empecé a buscar al pokémon que me vendría de perlas en mi equipo y que necesitaba a toda costa.
En cuanto me puse a buscar, un Lairon bastante agresivo se me cruzó por el camino, tirándome al suelo y lo miré molesta. Saqué a Slaking y lo debilitó en un momento, para después capturarlo. Había sido más rápido de lo que esperaba. Volví a subir a Sigiliph y nos fuimos del lugar para volver a Témpera.
Skarmory sobrevolaba la Pradera Arte, y se disponía a descender cuando Togepi hizo un ruido y señaló más adelante. Skarmory miró y también soltó una exclamación, de modo que tuve que mirar. Y entonces lo vi. —¿Qué rayos es eso? —murmuré, viendo el camino… ¿un arcoiris? Pero si no había llovido en días… era bastante extraño—. Vamos a explorar, Skarmory.
Sonrei--sabes,nadie me gana a esto--Dije mientras lo tumbaba contra el suelo--aunque parezca que no,tengo bastante fuerza--Dije sonriendo
Cada vez estaba mas cerca de Rojo hasta que lo atrapé--ja,te atrapé que lento eres--Dije sonriendo felizmente por haber ganado
En mi cara se coló un sonrojo —Vale, vale, me ganaste —me volteé hacia donde estaba ella y sonreí con bastante sonrojo—