One-shot de Pokémon - Pokémon Rianbow, el entrenador definitivazo.

​

Esta es una parodia de mi propio fic "Pokémon Rainbow" para el concurso de Batalla de foros, no soy muy bueno haciendo comedias, pero espero que lo logren disfrutar.​

​

​

​

​

​

Rianbow, el entrenador definitivazo.​

​

​

​

“Creo que ahora es el momento en el que debo decir alguna frase super filosófica y de gran sabiduría ancestral y relevancia para usar como cita al principio de este escrito"​

​

Rianbow​

​

En una pequeña ruta ubicada en Kanto, cuyo número ya olvidé porque no soy tan friki, se paseaba alegremente una niñita con un Rattata.


—Qué hermoso día, ¿no es así, Caries? —preguntó dulcemente.


El pequeño Caries asintió feliz.


—Estoy segura de que nada puede salir mal este día —continuó diciendo infantilmente—, después de todo, ¿qué podría pasarle a una niñita indefensa, paseando en medio de una ruta solitaria y sin más compañía que un Rattata que solo conoce Látigo?...

—¡Alto ahí, niñita! —gritó de repente un hombre vestido de negro que saltó frente a ella desde un arbusto— Entrega a tu pokémon.

La niñita se asustó y empezó a llorar.

—¡No! por favor no se lo lleve —contestó llorando—, iba a llevarlo con el dentista, y tal vez luego de que lo curaran le cambiaría el nombre porque entonces ya no tendría sentido.

—¡A mí no me importa! —exclamó el hombre arrebatándole al indefenso Caries— Soy un miembro del equipo Roquefort, y cómo soy muy vago para ir a las grandes misiones como mis demás compañeros, me dedico a robar pokémon inútiles que se debiliten de un solo golpe…

—¡Oh! —exclamó la niña— ¿Y ahora quién podrá defenderme?

—¡Yo! —exclamó una voz en la cima de un árbol, que misteriosamente antes no estaba ahí.

—¡Qué bien! —exclamó la niña— Es el… el… esté… ¿quién eres? —preguntó graciosamente.

El chico se contrarió terriblemente.

—¿Cómo que no sabes quién soy? —preguntó enojado— Yo soy Rianbow, el entrenador definitivazo —exclamó presumidamente—… pero no se lo digan a nadie —continuó en voz baja—, quiero que sea un secreto.

Por un momento, el ladrón y la niña se quedaron silenciosos, pero de repente empezaron a reírse.

—¿De qué demonios se ríen? —preguntó Rianbow enojado.

—Tu nombre es muy afeminado —contestó el criminal.

—Sí —siguió la niña—, en algún idioma significa Arcoíris —siguió riéndose.

Rianbow se estaba irritando.

—¿Quieres mi ayuda o no, niñita? —preguntó enojado— Porque por mí, puedes irte a la…

—No, espera, está bien, está bien —continuó la niñita ya más calmada—, ¡Oh! ¡Qué bien! ¡Es Rianbow, el entrenador definitivazo! ¡Estoy salvada! —exclamó exageradamente.

Rianbow sonrió maliciosamente.

—Así es, niñita —dijo presumido—, no contaban con mi definitividad… —en ese momento, se resbaló de la rama en la que estaba parado y cayó estrepitosamente hacia el suelo, golpeándose con todas las ramas ridículamente.

La niña y el criminal, así como el Rattata, se quedaron perplejos por lo absurdo de esa escena.

—Pero qué idiota —se rió el criminal—, se ha caído del árbol que misteriosamente hace un rato no estaba ahí.

Inmediatamente, Rianbow se puso de pie y adoptó de nuevo su actitud arrogante.

—No pasó nada —se defendió—, todos mis movimientos están definitivamente calculados —añadió cínicamente.

—Pues seas lo que seas —continuó el criminal sacando dos pokeballs—, nadie se mete con el team Roquefort y sale ileso —y de inmediato sacó a un Mr.Mime, un Raichu y a un Machoke.

—Espérate tantito —interrumpió Rianbow, quién de inmediato sacó de su mochila un ridículo cinturón con forma de T, y se lo puso dejando ver todos lo pokémon que tenía en él.

—¿Te gusta mi cinturón T? —preguntó engreídamente— Es la última moda entre los entrenadores definitivazos… lástima que el único entrenador definitivazo sea yo —dijo aún más presumido, y de inmediato sacó a un Mankey, un Squirtle y un Kadabra.

—Usa Pistola de agua —ordenó inmediatamente.

El Squirtle, sacó una pistolita de agua que tenía guardada en su caparazón, y con ella mojó al Machoke, lo cual le hizo gruñir de rabia y empezó a hacer berrinche.

—¡Asombroso! —exclamó el Roquefort— ¿cómo supiste que a mi Machoke no le gusta bañarse?


Rianbow sonrió maliciosamente.

—Es que yo tengo el poder del Varedian maind —contestó arrogante—, con él soy capaz de saber todo sobre un pokémon, sus ataques, su nivel, su naturaleza, su comida favorita, su color favorito, su orientación sexual, su banda de música favorita, su capítulo favorito de Golbatman… pero en este caso, solo lo supe porque olía horrible.

—Impresionante, niño —contestó el criminal—, pero no creas que porque ahora sabes cuál es el capítulo favorito de Golbatman de mi Machoke me vas a ganar… ¡Ataca con Golpe cuerpo!

El pokémon empezó a atacar, pero a muy baja velocidad, lo suficientemente baja como para que Rianbow pudiera pensar en una estrategia.

—Si toca a Squirtle con su cuerpo cochino está acabado —reflexionó solemnemente mientras Squirtle lo esquivaba—, todavía no llegamos a la parte del entrenamiento donde les enseño a derrotar a un oponente que huela horrible… ¡Ah! ¡ya sé! —exclamó— ¡Usa el ataque de Burbujitas de jabón! —ordenó.

Del mismo lugar de donde había sacado su pistolita de agua, Squirtle sacó una de esas cosas que sacan burbujas cuando soplas y atacó al Machoke con ellas. Éste quedó tan limpio después de ese mortal ataque que no lo pudo soportar y se desmayó.

—¿Pero cómo pudiste derrotar a mi gran y poderoso Machoke con un ataque tan débil hecho por un pequeño Squirtle? —preguntó el criminal asombrado.

Rianbow sonrió maliciosamente… de nuevo.

—Es que yo soy el entrenador definitivazo —se ufanó, como no, arrogantemente—, mi método es el resultado de un brutal y doloroso… digo, de un secreto y misterioso entrenamiento que plagié… digo, cree mientras viajaba por el mundo cuando era más niño de lo que soy ahora solo para llevarle la contra a mi padre.

El criminal se dio cuenta de que estaba luchando contra un entrenador de altura… pequeña, porque era un niño, así que se la pensó bien antes de actuar.

—Debo de tener cuidado con este niño —pensó seriamente—, ya que tiene el poder del Varedian maind debe estar pensando en una estrategia sumamente compleja para derrotarme.

—Hmmm —pensaba Rianbow muy seriamente—, me pica la cabeza… pero si me rasco parecerá que tengo piojos… debo averiguar qué demonios es un piojo y por qué lo he mencionado.

—Muy bien —exclamó de repente el criminal—, Mr.Mime, ¡usa Premonición!

El Mr.Mime enemigo se apresuró a efectuar el ataque contra el Kadabra de Rianbow. Ambos se habían encarado el uno al otro en un momento en el que no estaba narrando

El Mr.Mime, al usar Premonición, visualizó que el Kadabra de Rianbow iba a morir viejo y feo, lo cual lo desconsoló tanto que se puso a llorar.

—Qué bien —rio el ladrón—, si tu Kadabra hubiera tenido un futuro mejor esto no habría funcionado.

Rianbow se dio cuenta de que estaba en apuros si Kadabra no dejaba de llorar tan ridículamente.

—Vamos Kadabra, no te desanimes —trató de consolarlo, pero éste no dejaba de llorar porque ahora sabía que iba a morir viejo y feo, Rianbow decidió tomar medidas drásticas.

—Está bien —continuó—, vas a morir viejo y feo… pero no virgen, si ganas la batalla, luego te dejaré un rato en una guardería con un Ditto para que… bueno, ya sabes —añadió pícaramente.

Inmediatamente Kadabra se puso de pie super animado, ya que era Dittofílico, y se preparó para atacar.

—Muy bien —exclamó Rianbow— ¡Ahora ataca con Confusión!

Inmediatamente, Kadabra le mostró a Mr.Mime una fotografía de un círculo cuadrado, éste quedó tan confundido que empezó a atacarse a sí mismo hasta debilitarse.

El ladrón vio que no tenía oportunidad contra ese niño, pero como en ese universo los malos malosos siempre esperan hasta quedarse sin pokémon antes de rendirse decidió seguir la pelea.

—Entonces, ¡Raichu, Cola de Hierro! —ordenó.

Entonces, la cola del Raichu mágicamente se transmutó en hierro, y se dispuso a atacar a Mankey. Ambos se habían encarado el uno al otro en un momento en el que tampoco estaba narrando.

Mankey empezó a esquivar los ataques de Raichu, pero poco a poco su velocidad comenzaba a bajar, porque le estaban dando ganas de ir al baño.

—Te dije que no bebieras tanto jugo de Baya aranja antes del combate —le replicó Rianbow—, pero no importa… ¡usa Aguante! —ordenó.

De esa manera, Mankey pudo Aguantarse bien las ganas durante el resto de la pelea.

—Bendito Aguante —comentó Rainbow—, ¿qué haría yo sin ese movimiento?

—Deja de decir tonterías —interrumpió el ladrón—, en un rato va a comenzar Golbatman en la tele, y nunca me lo pierdo.

—Es verdad —exclamó Rianbow—, yo tampoco me lo pierdo nunca, así que vamos a terminar de una vez por todas… ¡Patada baja! —ordenó apresuradamente.

Inmediatamente, Mankey utilizó Patada baja justo en las partes nobles del Raichu, el cual se debilitó inmediatamente.

—¡Oye! —exclamó el ladrón— ¡Eso es trampa!

—El ataque se llama Patada baja —se defendió Rianbow—, ¿cómo te imaginabas tú que se efectuara ese ataque? ¿En la cara o qué? Es una técnica justa.

Viendo el Roquefort que ya no tenía manera de defenderse, cayó de rodillas, avergonzado de haber perdido humillantemente contra un niño de nombre afeminado con un ridículo cinturón con forma de T en el pecho que había salido de un árbol que misteriosamente antes no estaba ahí. Eso era más de lo que cualquiera podría soportar.

Rianbow se acercó a él con una sonrisa macabra en el rostro, lo cual lo asustó, porque cuando Rianbow sonreía macabramente, daba más miedo que Hannibal Lecter.

—Por favor —le suplicó el ladrón—, no me vayas a dejar inconsciente con el ataque de un pokémon de tipo eléctrico.

Rianbow se detuvo y le sonrió maliciosamente… otra vez.

—No te preocupes —le dijo con tono sarcástico—, ni siquiera tengo un pokémon de tipo eléctrico por ahora.

El ladrón se sintió aliviado, pero de repente Rianbow le volvió a sonreír macabramente.

—Así que voy a tener que darte de golpes con mi fuerte y endurecido Metapod hasta que te desmayes —y diciendo eso, comenzó a golpearlo con su Metapod, que sacó en un momento en el que no estaba narrando, hasta dejarlo en la inconsciencia.

—Espero que nadie lea esto —murmuró Rianbow al terminar—, o podría malinterpretarse eso de “golpearte con mi endurecido Metapod”.


—¡Qué bueno que estás bien, Caries! —dijo la niña abrazando a su Rattata— Y tú estuviste genial, Rianbow ¿cómo es que puedes derrotar a enemigos con un solo golpe y sin resultar herido?

Rianbow rió arrogantemente… ¡qué sorpresa!

—Ese es el secreto secretoso sumamente secretamente secreto más secreto de mi entrenamiento —contestó engreídamente… ¡qué sorpresa! —, no será revelado hasta dentro de mucho mucho mucho mucho tiempo, cuando ya todos se hayan olvidado que este episodio ocurrió… ¡Ah! Mira la hora, Golbatman está a punto de empezar, y hoy es el capítulo en el que se enfrenta al teniente Growlithe.

Y en seguida arrancó a correr hacia el pueblo más cercano para ver el programa. La niñita logró llevar a Caries al dentista, el cual lo curó completamente, por lo cual dejó de llamarse Caries… pero tuvieron que ponerle frenos. A qué no adivinan qué nombre le puso la niña al salir.




Bastante rato después, cuando el programa de Golbatman terminó, Rianbow y su grupo continuaron caminando por otra ruta, cuyo número no recuerdo porque, como ya les dije, no soy tan friki.

—Qué buen capítulo el de hoy —comentó Rianbow alegremente mientras caminaban—, y hubiera sido mejor si los dueños de la casa no hubieran llegado antes de terminar… tuve que convencerlos con mi Metapod endurecido para que me dejaran terminar el episodio… hmm, eso también puede malinterpretarse…

Y mientras seguía sumido en sus pensamientos definitivos tan profundos y complejos, a lo lejos vio a una chica que se acercaba caminando en la dirección opuesta.

—¡No puede ser! —exclamó Rianbow— ¡Es Boreal! La chica que amo —dijo rojo como tomate—… pero no se lo puedo decir porque tengo profundos dilemas psicológicos enredados en mi mente que ni yo mismo entiendo bien pero que se podrían arreglar fácilmente si no fuera tan inseguro de mí mismo —analizó seriamente.

En seguida, sacó un pedazo de papel de su bolsillo.

—Espero algún día poder decirte esto —empezó a leer lo que había en el papel—, “Hola, Boreal, quiero decirte que te amo desde que te conocí, te dije mi nombre y no te pareció afeminado... y porque siempre aguantas mis pesadeces. Quiero estar junto a ti, abrazarte y hacer mucho mucho mucho mucho Lemon contigo”… hmmm —reflexionó—, tengo que averiguar qué demonios es el Lemon, y por qué lo he escrito aquí.


Mientras Rianbow reflexionaba acerca de sus profundos y enigmáticos sentimientos, Boreal también lo había visto a lo lejos.

—¡No puede ser! —exclamó Boreal— ¡Es Rianbow! El chico que amo —dijo roja como sandía—… pero no se lo puedo decir porque tengo profundos dilemas psicológicos enredados en mi mente que ni yo misma entiendo bien pero que se podrían arreglar fácilmente si no fuera tan insegura de mí misma —analizó tímidamente.

En seguida, sacó un pedazo de papel de su bolsillo.

—Espero algún día poder decirte esto —empezó a leer lo que había en el papel—, “Hola, Rianbow, quiero decirte que te amo desde que te conocí, me defendiste de unos niños que solo me querían pedir la hora… pero aún así fue un gesto muy dulce. Quiero estar junto a ti, abrazarte y hacer mucho mucho mucho mucho Lemon contigo”… hmmm —reflexionó—, me pregunto qué es Lemon, y por qué lo he puesto aquí.


Un momento después, ambos se encontraron en el centro de la ruta.

—Hola, Rianbow —saludó Boreal amigablemente.

—Hola, Boreal —saludó Rianbow tratando de mantenerse frío, pero estaba tan nervioso y emocionado por encontrársela de nuevo que sus piernas temblaban. Boreal se dio cuenta.

—¿Te encuentras bien? —preguntó preocupada— Tus piernas están temblando.

—Ah, sí… lo que pasa es que… soy de temperamento tan frío, que todo mi cuerpo tiembla —contestó tratando de mantenerse indiferente—, ¿y tú qué has estado haciendo? —preguntó con verdadero interés, aunque fingió que no era así.

—Me ha ido muy bien —contestó Boreal alegremente—, he ido por todas partes de Kanto, resolví el misterio de por qué a los nadadores les gusta quedarse flotando en medio del mar todo el día sin moverse… también fui a ciudad Azufre y conocí a la líder Sobrina.

—¿Sobrina? —preguntó Rianbow.

—Sí, Sobrina —contestó Boreal.

—¿De quién? —preguntó Rianbow de nuevo.

—De su tío —contestó Boreal de nuevo.

—Ah, ya veo, ahora todo tiene sentido —contestó Rianbow… ¡de nuevo!



Y así, siguieron su camino juntos, platicando de cosas tan profundas y filosóficas como la conversación anterior. Se divirtieron juntos unos días, fueron a ciudad Plateada a burlarse de los ojos de Brock, fueron a pueblo Paleta a convencer al profesor Oak de que su nieto se llamaba Subnormal, fueron a la casa de Bill a mezclarlo en su máquina con un Caterpie…intentaron hacer un Lemon, pero como ninguno de los dos sabía lo que eso era solo hicieron limonada, porque era a lo que más les sonaba, y se la bebieron… en fin, pasaron una semana inolvidable los dos juntos.

Pero como no tendría chiste que se quedaran juntos por siempre, se separaron de nuevo a causa de sus profundos dilemas psicológicos enredados en sus mentes que ni ellos mismos podían entender bien que se mencionaron hace unos párrafos. De modo que, una vez más, Rianbow se quedó caminando solo.

—Ahora no la volveré a ver hasta dentro de mucho mucho mucho mucho tiempo, cuando los dilemas psicológicos enredados en mi mente que ni yo mismo puedo entender bien sean mucho mucho mucho mucho peores —dijo Rianbow sollozando ridículamente a sus compañeros en su cinturón T.



Pero al día siguiente, despertó con algún tipo de amnesia o no sé qué, porque ya había olvidado todo lo que había pasado el día anterior y caminaba como si nada, con su ya hartante sonrisa maliciosa y actitud arrogante hacia una ciudad cuyo nombre no sé porque no soy tan friki.

—Creo que ahora es el momento en el que debo decir alguna frase super filosófica y de gran sabiduría ancestral y relevancia para usar como cita al principio de este escrito —dijo Rianbow rompiendo la cuarta pared.

—A ver, ¿qué será?… —meditó un momento— ¡Ya sé!... Si todo este mundo está habitado por pokémon… y se supone que los pokémon son nuestros amigos con los que tenemos que convivir en paz...entonces… ¿de quién es la carne que comemos?

El universo completo de pokémon colapsó en una paradoja espacio temporal apenas Rianbow se planteó esa pregunta.







¿Kadabra tuvo su cita con un Ditto en la guardería, tal y como Rianbow se lo prometió?

¿Qué nombre le habrá puesto la niña a su Rattata al salir del dentista?

¿Se perdió el soldado Roquefort el capítulo de Golbatman?

¿Golpear a la gente con tu Metapod endurecido dejará de malinterpretarse?

¿Averiguará Rianbow lo que es un piojo?

¿Qué pasaría si alguien les explicara a Rianbow y Boreal lo que es el Lemon?

¿Quién es el tío de Sobrina?

¿Recordará el profesor Oak el nombre de su nieto?

¿Volverá Bill a su forma normal?

¿Tendrá Brock alguna enfermedad en los ojos?

¿Habrá Golbatman derrotado al teniente Growlithe?

¿Por qué será que a los nadadores les gusta quedarse flotando en medio del mar todo el día sin moverse?

¿Qué le habrá pasado al árbol que misteriosamente antes no estaba ahí?



Desafortunadamente, estas preguntas no tendrán respuesta porque, por si no lo recuerdan, ¡el universo donde estaban colapsó!

Fin.