Long-fic de Pokémon - Ph association colosseum [¡¡RESUMEN AÑADIDO!!]

Ya se me fueron más de seis semanas n__nU. Pero bueno, al fin pude traerles el episodio 115 de este hermoso fanfiction.

Y sí, no he terminado de indizar... pero ya lo haré, poco a poco, así como hago mis episodios y otras labores.

No pierdan su fe en mí, compañeros. Es hora de develarles el siguiente capítulo n__n. ¡Se me cuidan, gente bonita de FFL!

Disfrútenlo...

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—Debo aplaudir su entusiasmo, jovencitos — Soltó Argus — Pero no bastará con eso. Primero, ustedes deberán escoger a un líder.

Todos los chicos de Black Spark se miraron unos a los otros. No estaba Ginta entre ellos, así que era momento de escoger a otro. El primero en hablar fue Sylvain, quien ya tenía claro a quien escoger

—Propongo que Nath sea nuestro líder por hoy

—¿Qué? ¿Quién? ¿Yo? — El joven Ampharos estaba sorprendido de que Sylvain lo tuviera en una estima lo suficientemente alta como para sugerirles a todos que él tomara las decisiones importantes que faltasen — ¿Por qué yo? Seguro otra persona podría hacerlo mejor

—Ese es el problema — Añadió Suzanne — No tenemos a nadie mejor… ¿Acaso ves entre los demás a alguien con mejores capacidades para ver lo que pasa en el campo de batalla?

—Parece que te estás olvidando de mí

Sazuke sonó ofendido, por lo que sonaba a que él se sentía perfectamente capaz

—¡Yo también puedo liderar!

—No suena mal esa idea… — fue lo único que Nathan soltó, antes de que…

—¡¡Jaaaaajajajajajajajajajaja!!

Sylvain comenzó a reír repentinamente. Era una risa similar a la de que cualquier gerente empresarial después de escuchar a algún Godínez cualquiera pedir un aumento de sueldo.

—¡Deja esa risa! — El chico Zangoose estaba casi encolerizado. Por lo menos Velvet pudo detenerlo con un brazo antes de que se pusieran a pelear

—¡Calma, Sazu! ¡No vale la pena!

—Fue un buen chiste para calmar la tensión. Te lo agradezco, Sazuke — Añadió el Toxicroak de manera alevosa

—¿Lo ves, Nath? — Continuó Suzanne — Al menos tú no te alterarías tanto por una simple broma. Necesitamos alguien que esté siempre enfocado

—¡Además lo hiciste excelente liderando a Velvet, Matt y Sazuke esa vez contra el marica de Eric Pocarde y sus chicas! — Añadió Juan — ¡Esto es lo mismo, solo que a mayor escala!

—Sigo sin estar convencido… — Continuó el Ampharos — ¿Matt?

—Yo paso — Dijo el Jolteon antes de que Nathan terminara su pregunta — Juan tiene razón. Tuviste que tener mucha fortaleza mental y planeamiento estratégico para hacernos ganar en la semana tres.

—¡Deja de mostrar tanta inseguridad, corderito! — Añadió Keith — ¡Lo harás bien!

Nathan no pudo decir nada. Solo miró a todos… incluso a Sazuke, quien a pesar de no estar nada contento, sí pudo soltar:

—Bueno, quizás sí sea la mejor opción entre nosotros…

El Ampharos volteó a mirar a quienes faltaban. Galanoth solo asintió, intentando transmitir confianza. Stella, en tanto, se arrimó a su hombro derecho y le dijo

—Tú puedes, amorcito.

Las dudas habían quedado atrás por fin. Nathan encaró Argus y declaró:

—¡Ya hemos decidido! Yo seré el líder de escuadrón esta vez.

—Me parece muy valiente de tu parte.

Entonces, Argus chasqueó los dedos… un par de pedestales de aproximadamente 110 centímetros de altura, con una ligera inclinación en su punto más alto, se levantaron a un lado de la Arena Sagrada. Y antes de que Nathan pudiera preguntar algo, el viejo Dragonite tomó la palabra una vez más.

—Sé que estás lleno de dudas, por lo que procederé a explicar cómo funciona. Sígueme

Ambos caminaron hacia el pedestal. Éste tenía un cuadrado dibujado, dividido como si fuera el Tres en Raya… o sea, nueve cuadrados más pequeños.

—Cada miembro de nuestro equipo tiene un símbolo que los representa. La idea es que crees uno para tus compañeros y para ti mismo. Es un ejercicio mental para que intentes sorprendernos… trata de demostrar lo que sabes de tus compañeros.

—¿Y cómo se supone que lo deba hacer? — Preguntó el Ampharos, haciendo notar que solo había un pedestal hecho de concreto y nada más.

—Solo concéntrate y toca cada cuadrado. Piensa en uno de tus compañeros y algo que consigas destacar de ellos.

—Ya veo. Hmmmm…

Entonces, Nathan tocó el cuadrado central con los dedos índice y medio de su mano izquierda, y de la nada, se formó un pequeño grabado. Era un escudo de tamaño mediano, de esos que era relativamente fácil maniobrar en la época. El escudo, como todos los que se han conocido, tenía su propio diseño… los bordes eran de color azul oscuro y el resto del fondo era de color amarillo. Y al centro tenía dibujado un Antílope. Además, en ciertos puntos, el fondo amarillo era invadido por un poco de escarcha color celeste.

—¡¡Es tal como lo tenía en mi mente!! — Exclamó el joven de 18 años en su mente. No quería mostrarse excesivamente anonadado ante alguien como Argus

En tanto, Argus ya había escogido los nueve símbolos. Repentinamente apareció un tablero enorme cerca de los pedestales. Era como los que ponían en los estadios y se cambiaban manualmente… pero estaba hecho de madera totalmente, sin pintar, salvo unos dos cuadrados, uno a cada lado, y divididos en nueve partes iguales.

¡O eso parecía! Ya que de la nada, aparecieron los dibujos representantes de cada miembro de ese equipo:

- Una aleta de tiburón con algo de mugre en el centro,

- Una tabla rota con una mano dando un karatazo en la esquina superior izquierda,

- Un casco enplumado le seguía inmediatamente en la derecha, para dar paso a…

- Un montón de huesos en el extremo superior derecho.

- En la fila central, justo a la izquierda de esa aleta sucia de tiburón, había un montón de bolsas ardiendo con llamas negras.

- Más a la derecha, aun en la fila central, habían tres corazones. Pero no separados, sino que cada uno dentro de otro, como si fuese una Matryoshka. El corazón al interior era rosa eléctrico, el mediano era de color negro y el exterior tenía un morado oscuro.

- En la fila del fondo podía verse, en la esquina inferior izquierda, un martillo y algo parecido a una pistola primitiva. Era la época del Renacimiento, después de todo.

- En el extremo inferior central podían admirarse un tridente y un dragón de agua.

- Y por último, el extremo inferior derecho, tenía un yunque sobre un montón de heno

Nathan solo tragó saliva mientras pensaba

—Argus conoce a sus protegidos al derecho y al revés. Es un conocimiento parecido al que tiene Ginta de todos nosotros… ¿Pero acaso yo tengo siquiera la mitad de lo que esos dos tienen acerca del resto?

En su subconsciente, el joven Ampharos sintió un Archeops con los talones vendados y un color más oscuro de lo habitual, pararse sobre su cabeza. ¿Acaso eso sería el símbolo de su Inseguridad? ¿Del miedo a defraudar a su equipo?

El simbólico Pokémon prehistórico picoteaba sin cesar a Nathan en la frente. No lo dejaba pensar con claridad…

En el mundo real, los demás podían ver cómo su líder designado estaba paralizado. No se movía en lo absoluto… era algo preocupante

—¿Pero qué le pasa a Nath ahora? — Preguntó Matt

—Ni idea — Comentó Suzanne — Pero creo que tiene problemas para pensar en lo que le ha propuesto ese apuesto Dragonite

—¿Apuesto? — Exclamó Juan — ¡Podría ser tu abuelo!

—¡La edad es solo un número y no tiene nada que ver con ser feo o guapo! — Se defendió ella. Posterior a eso calmó su voz — Además… — Y ella soltó un sorpresivo suspiro — Ya me di cuenta de que sería imposible que algo pasara entre nosotros.

Volviendo con Nathan, éste todavía podía sentir a ese Archeops invisible picoteando su cabeza.

—¡Mierda! — Pensaba éste — ¡No puedo concentrarme para nada! ¿Qué debería poner? ¿Y con quién empiezo? Quizás con Juan, pero…

Y el de tipo Eléctrico siguió dudando, sintiendo los repetidos picotazos del ave prehistórica… hasta que escuchó una voz familiar

—Tranquilo, Nath… te ayudaré a pensar

Eso bastó para espantar al Archeops imaginario y que el joven de dieciocho años saliera de su trance. Cuando él miró hacia quien lo había salvado, recibió un beso.

Era nadie menos que Stella, quien, una vez más, había espantado sus demonios

—No debes dudar de tus capacidades, queridito. — Continuó ella — Este no es el momento para pensar en lo que podría salir mal. Respira hondo y cuéntame qué es lo que te molesta…

El aludido hizo caso. Tomó aire, exhaló y contó todo

—Necesito crear símbolos que identifiquen a nuestros miembros de equipo. No puedo repetir los que Argus ha escogido… pero tampoco quiero que sean tan obvios.

—Oh, está bien… comienza conmigo.

—¿Estás segura? — Le dijo Nathan. Ella solo asintió con una sonrisa — De acuerdo, creo tener algo que podría representarte bien.

—Impresióname — Pidió la Lopunny.

Acto seguido, el joven Ampharos puso su mano en la sección derecha de la fila central. Ésta cambió a un fondo de color púrpura oscuro… con tres estrellas de color dorado y dejando una estela del mismo color. Era un diseño sencillo, pero al mismo tiempo hermoso dentro su simpleza.

—Oh… — Esa fue la única palabra que salió de la boca de Stella

—Es lo que, yo pienso, te representa mejor, preciosa — Le dijo Nathan

Ella inmediatamente abrazó a su amado y le dio un besote en la mejilla. Le encantó aquel detalle que el Ampharos demostró.

—No sé cómo lo haces, pero genuinamente me has impresionado. Estoy seguro de que podrás hacer lo mismo con los demás.

—¿Tú crees? — Preguntó el joven vestido mayoritariamente de amarillo

—Estoy 100% segura, Nath. ¡Ánimo!

Gracias a la demostración de confianza que Stella le mostró, el joven de tipo Eléctrico se concentró y puso la mano en otras cuadrículas. Esto fue lo que puso:

- En la casilla a la inmediata izquierda de él, puso un fondo de color verde oscuro, casi tirando a negro. El dibujo en cuestión era una medalla de oro enorme. Dentro de ella escorpión de bronce. Cuando la Lopunny preguntó, el Ampharos le dijo que tenía que ver con Sylvain, puesto que él gustaba de ser muy cruel y venenoso, tanto en batalla como fuera de ella. No obstante, eso no le restaba méritos a su labor policial, ya que era confiable y tenaz también.

- En la casilla encima de la suya, puso un fondo amarillo, con una típica palmera sobre un poco de arena… pero en esa palmera había unos lentes de sol. Al momento en que Stella preguntó sobre ese dibujo, se le respondió que representaba a Juan, porque los Flygon viven en desiertos y además él es un tipo muy relajado.

- En la casilla justo debajo del centro, puso unos clásicos reflectores negros emitiendo luz amarilla. Todo sobre un fondo fucsia. Stella estuvo a punto de exclamar, pero a último minuto reguló su voz y susurró a Nathan

—Esa es obvia… definitivamente es Suzanne

—¿Cómo lo supiste? — Preguntó el aludido

—Porque siempre… ¡Siempre! Quiere llamar la atención. Y si ella viera esto, reclamaría por que a ella le tocase el símbolo de las estrellas.

—Bien dicho — Y con eso el joven Ampharos rió por lo bajo, durante un corto lapso de tiempo. Posterior a eso, continuó concentrándose

- En la casilla del extremo superior izquierdo, puso un guerrero montado en un Rapidash. Este no tenía armadura ni usaba una lanza… en realidad tenía la cara pintada y dos sables, uno en cada mano. El dibujo era de color anaranjado entero; exceptuando las rayas azules de la cara, y el fondo era de un color rojo intenso. Stella pensó que se trataba de Keith, pero Nathan la corrigió diciendo que representaba a Sazuke, y que fue puesto deliberadamente en esa posición puesto que él siempre quiere ser el primero en saltar a la lucha, con el mismo énfasis en que Suzanne quiere llamar la atención y conseguir novio. La joven morena de tipo Normal rió mucho. Mientras tanto…

- En el extremo superior derecho él puso un antiguo ariete con un fondo, bien adornado y de color café, con la cabeza del arma de asedio en color dorado. Todo sobre un fondo de color cobrizo. En ese instante Stella paró de reír y dijo, “Ahora sí debe ser Keith”. Nathan solamente asintió.

- En el extremo inferior izquierdo, puso un fondo color verde claro. En él puso un árbol grueso y fuerte de colores naturales, pero que tenía clavadas una guadaña a la derecha de su tronco y una daga en el izquierdo. Stella se asustó al ver eso, pero su novio la calmó, explicando que representaba a Galanoth, porque tuvo un pasado lleno de dolor, destrucción y sufrimiento, pero que aun así se mantenía fuerte y fértil. Resiliente como pocos.

- Por último, en el cuadrado restante puso un fondo gris y una botella gorda y transparente con un líquido verde. Por descarte, la de tipo Normal dedujo que se trataba de Matt, y Nathan dijo…

—En efecto. Es un hombre de ciencia. Y no adorné más el dibujo porque es de los que va al grano.

—¿Ya terminaron? — Inquirió Argus, para luego recibir respuesta positiva por parte de su líder contrincante. —Excelente.

Al poco rato, los dibujos mentales de Nathan se transportaron al cuadrado izquierdo del tablero gigante, en las mismas posiciones en que fueron dejados previamente.

Posterior a eso, Argus exclamó

—¡Que comiencen los juegos!

Un Haunter se puso al centro del tablero, en medio de ambas cuadrículas. Éste usó dos pequeños Fuegos Fatuos, poniendo uno en cada mano.

—Las reglas son simples, estimados. Esto es un combate eliminatorio de nueve contra nueve. El peleador se escogerá al azar de entre los cuadrados presentes y no se permitirán sustituciones. Los luchadores serán eliminados si son noqueados, no se levantan a la cuenta de diez, si se rinden voluntariamente o si son echados del Cuadrilátero Sagrado. Una vez que son eliminados, Haunter quemará su dibujo… pero tranquilos, que nada malo sucederá realmente. Después de todo, esto es un entrenamiento para todos. El primer equipo que pierda los nueve dibujos, perderá. ¿Preguntas?

Nathan pensó brevemente en preguntar si había alguna seguridad de que serían enviados de vuelta a su tiempo… pero por alguna razón, pudo ver que Argus y su equipo eran personas confiables, a pesar del aura de misterio que daban.

Era momento de escoger a los peleadores. Nathan y Stella volvieron con su equipo

—Hey, borreguito — Keith llamó la atención de su líder temporal — Eres asombroso escogiendo dibujos representativos. ¡Estoy NPI!

—¿N-P-I? — Preguntó con curiosidad la Lopunny sobre ese uso de siglas

—¡Ni puta idea de saber a quién le tocará!

—Eres bastante lento — Le habló Matt al joven Camerupt luchador — Es obvio que el último cuadro en nuestro equipo me representa claramente. También veo claro el símbolo que representa a Suzy, así como el de Stella y el de Juan… los otros me tomará otro rato pensarlos.

—¡Oye, Nath! ¡Mejor será que nos digas a quién le toca cuando el Haunter escoja! — Parló Sazuke, casi con un tono inquisidor — ¡No puedo esperar a que sea mi turno!

—Tan típico de ti — Nathan solo le sonrió, sin burlarse ni nada — Ahora esperemos…

Y entonces, Argus interrumpió la tertulia del equipo Black Spark

—Chicos, atentos. Haunter está a punto de decidir…

Las llamas purpúreas en ambos lados danzaban pasando por los nueve cuadrados, de modo en que cada uno tuviese la misma posibilidad de ser escogido. La velocidad de las bolas de fuego se reducía cada vez más… hasta que se detuvieron en puntos específicos.

En el tablero de Black Spark, se había iluminado el ariete.

Mientras que en el tablero del otro equipo… Haunter escogió el tridente y el dragón.

—¡Ya le tocó al ariete! ¿Pero quién de nosotros es? — El joven Camerupt le preguntó a su amigo el Ampharos, el cual solo atinó a decirle

—Pues eres tú.

—¿En serio? ¡¡Súper!! — Exclamó Keith, emocionado — ¡Voy a ser el primero!

—¡Agh! ¡Qué suerte tienen los que no se bañan! — Se dijo Sazuke para sus adentros


Rápidamente y con mucho entusiasmo, el de tipos Fuego y Tierra se subió al cuadrilátero. Él pudo ver a una de las figuras encapuchadas.

—¡Revélate, hombre misterioso! ¡Quiero que esta pelea sea limpia como un panteón!

Pero el encapuchado respondió con una voz femenina.

—Hmph… más respeto, jovencito.

Dicho esto, aquella figura avienta su capucha a un lado y revela ser una hermosa mujer, de aproximadamente 175 centímetros de altura, vestida con una especie de armadura que enseñaba mucha carne, solo protegiendo sus senos, hombros y la zona pélvica. Esa mujer tenía el pelo de color magenta, con una fina cola de caballo sujetada por un tubo largo de tela. Sus ojos eran de color azul intenso y su rostro era en general perfectamente proporcionado y aparentaba estar bien maquillado. Simplemente bellísimo…

A tal grado que Keith no pudo evitar sonrojarse. Ni siquiera pudo emitir palabra… solo tontos balbuceos

—Yo soy una dama, mi estimado. Confío en que no cometerás ese error nunca más

—N-n-no, señorita. — Eso fue lo único que el Camerupt alcanzó a decir


—¡Ay, no! — Se lamentó Velvet — ¡Ya partimos con una desventaja fatal! ¡Esa mujer es claramente de raza Gorebyss!

—¿Y eso qué tiene? — Le preguntó Juan, intentando minimizar el problema

—Si serás tonto — Suzanne comenzó a hablar también — Keith es increíblemente débil ante el elemento del Agua. Además mírale la cara que tiene… ¡Esa mujer podría tenerlo comiendo de la palma de su mano! — Posterior a eso, ella suspiró — Le tengo cierta envidia…

—Pero… ¡Keith ha estado en situaciones peores! ¿No es así? — Ahora Stella intentaba derribar la negatividad latente — ¡Él podrá superar esto! — Y luego se dirigió a su novio — ¿No es así, Nathan?

—Por supuesto — Si bien por dentro él sabía que la posibilidad de perder aquella ronda inaugural siempre estaba presente, la mejor acción era mantener la fe en su compañero de equipo a pesar de todo — Conozco las capacidades de mi buen amigo, así que podría superar a esa mujer si se esfuerza…



Los combates en el siglo XVI están a punto de comenzar. Las reglas han sido explicadas y los primeros dos participantes medirán sus habilidades… ¿Podrán los chicos de Black Spark salir de esta? ¿Keith será capaz de derrotar a su misteriosa y bella oponente? ¡Descúbranlo en el siguiente episodio!

¡Esta historia continuará…!​

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Y ya lo saben, que el resumen está en la primera hoja de esta discusión. No olviden comentar y dejar sus sellitos. Cualquier crítica se acepta con los brazos abiertos n__n

¡Hasta la próxima!

 

¡¡Gracias, Arceus!! Es San Viernes :D

Bueno, esta vez me volví a demorar seis semanas en publicar n__nU. Pero pudieron haber sido más, debido a que me he metido a la actividad Interforos para competir con DZ. Pero no significa que he dejado de pensar en esta obra y los lectores regulares :B jeje

Amigos míos, les dejo con el episodio #116

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Inmediatamente, Argus señaló a ambos contrincantes que comenzaran a pelear

—Peleen honorablemente… ¡Ya!

—¡Toma esto, nene!

La primera en atacar fue la mujer Gorebyss, blandiendo su tridente y dando una especie de corte horizontal, el cual Keith esquivó por poco. Pero eso no la frenaría…

Luego ella dio una estocada rápida que casi le hace un corte en la zona oblicua izquierda del Camerupt veinteañero. Acto seguido ella intentó un ataque descendente, pero éste falló y Keith al fin aprovechó para agarrar el arma por el palo, y mirar fijamente a su rival, sin soltar el artefacto.

—Eso no resultará…

—Pido perdón por mi falta de modales, jovencito — Parló ella de inmediato — Mi nombre es Aldonza Aragón. Tú debes ser Keith…

—¿¡Cómo lo…!?

Ese momento de sorpresa por parte del joven de tipos Fuego y Tierra fue lo que bastó para que Aldonza consiguiera meterle un rodillazo en el vientre y que éste soltara el tridente, para luego usar un ataque de Hidropulso que cumplió el cometido de derribar al rival.

—¡Atrás, que voy a contar! — Advirtió Argus, sin acercarse más a la arena. Desde el borde de ésta podía ver con total claridad a Keith en el suelo


—¡Ay, mamacita! — Exclamó Juan, llevándose las manos a las mejillas y dejando ver un tono que iba entre la admiración y el miedo — ¡Esa mujer es buenísima peleando!

—Si no espabila, nuestro amigo va a perder de manera muy indecorosa — Soltó Sylvain mientras se cruzaba de brazos

En tanto, Nathan estaba muy cerca del cuadrilátero y se puso a animar a su compañero

—¡Keith! ¿Estás bien, colega? ¡Sé que esto no basta para derrotarte! ¡Puedes levantarte, lo sé!


Argus, en tanto, iba en el cinco, cuando repentinamente pudo ver a Keith levantarse y sacudir su cabeza.

—¡Se reanuda el combate! — Exclamó el viejo Dragonite

—Debo admitir que me has sorprendido — Declaró Keith a la carrera — ¡Pero no volverá a pasar!

Dicho eso, el Camerupt dio un pisotón para usar su Terremoto, lo cual inmovilizó a Aldonza eficazmente. Por fortuna para ésta, ella al menos tenía su tridente, el cual pudo enterrar en el piso para afirmarse.

Lo siguiente que el de tipos Tierra y Fuego hizo fue abalanzarse sobre su rival a base de puños y patadas, pero ésta logró evitarlos sin problema… en eso, Keith probó un sorpresivo ataque aplaudiendo en las sienes de la dama, aturdiéndola de una buena vez

—¡Así se hace, cuate! — Lo animó Juan el Flygon — ¡Ahora sí! ¡No muestres piedad!

Entonces, el de pelirrojo musculoso guardó su distancia y preparó un ataque de Avalancha. Muchísimas rocas sin mucho filo comenzaron a golpear a la mujer Gorebyss desde un ángulo elevado, mayoritariamente dirigidas a su cabeza y pecho. Ella rápidamente tropezó, pero antes de que Argus comenzara a contar, ella estiró su mano y el tridente, que antes estaba clavado en el piso, levitó y comenzó a girar hacia un Keith que no entendía que pasaba… hasta que le llegó un golpe en su dura cabeza

—¡Auch! ¡Eso no me lo esperé! — Exclamó el veinteañero peleador, mientras veía cómo el arma de su rival volvía a sus manos como si nada


—¡Qué chido! — Exclamó Suzanne, sorprendida y en ánimo de fangirl — ¡Aldonza domina la Telekinesia de la Confusión! ¡Cuando termine con Keith espero que me enseñe!

—Eso no es muy amable de tu parte — Dijo Matt sin hacer mucho ruido — ¿Intuyes que nuestro compañero Keith perderá?

—¿Y eso qué importa? — Retalió ella, bajándole el perfil al asunto — ¡Debo reconocer que esa mujer es una peleadora del más alto nivel!

Rápidamente Stella y Velvet, como chicas que son, estuvieron de acuerdo con las palabras de Suzanne. Las dos no despegaron sus ojos de la batalla, y la Beautifly se conformó con hacer lo mismo, ya que nadie le rebatía su posición.

—Solo espero que Keith salga bien de esta — Murmuró Galanoth finalmente.


Mientras los jóvenes de Black Spark hablaban, Keith se encontraba esquivando ataques con la lanza psíquicamente dirigida a su persona mientras se acercaba peligrosamente a su rival, usando Nitrocarga. Aldonza respondió con una Hidrobomba, pero el jovenzuelo logró barrerse y convirtió esa Nitrocarga en un barrido ardiente que lastimó la pierna de su rival.

—¡Ach! — Se quejó ella mientras pensaba — Este chico es más experimentado de lo que pensé…

Posterior a eso, ella tuvo que comerse dos ganchos al rostro. El segundo terminó dejándola muy cerca del borde del cuadrilátero. Keith intentó usar Llamarada para empujarla, pero ella la neutralizó con un Torbellino que llenó todo de vapor, confundiendo al joven bactriano volcán…

¡Y repentinamente el tridente voló hacia él, casi ensartándose en su zona abdominal!

—¡Phew! — Se relajó un poco el joven de veinte años al ver que esa lanza de tres puntas no logró hacerle daño.

Ah, pero la ofensiva de Aldonza no había terminado. Repentinamente un shock psíquico llegó directo a su cabeza y le erizó sus rojos cabellos.

Ahora Keith estaba confundido… pero literalmente.


—¡Reacciona, Keith! ¡Vamos, que se puede! — Le gritó Nathan para animarlo, pero la mente del joven camello parecía haber sido afectada por LSD, así que no oyó sino murmullos en idioma desconocido


—Ay, mamá… todo esto se puso muy raro

—¡Eres historia, Keith! — Desde otro ángulo, la bella dama Gorebyss se lanzó con una patada al estilo ninja, usando su tridente para apoyarse y ganar fuerza… fue tan sorpresivo y poderoso ese ataque que terminó haciendo que su rival cayese del cuadrilátero.

Y cómo no, Argus debía hacerlo oficial

—¡¡Keith ha salido de la arena!! ¡La ganadora de este round es la participante Aldonza!


—¡Lo sabía! — Exclamó Suzanne, extrañamente contenta — ¡Mujeres como la señorita Aldonza Aragón son demasiado buenas como para conocer la derrota! ¡Ningún bruto la va a dejar en vergüenza jamás!


Velvet, en tanto, se dedicó a ver el tablero de madera en lo alto. Uno de los Fuegos Fatuos de ese Haunter prácticamente incineró el símbolo del ariete, y lo hizo desvanecerse como si no hubiera existido jamás. Eso hizo que a Velvet le dieran unos escalofríos tremendos. Juntó sus pupilas y se abrazó a sí misma de manera incompleta, puesto que aún tenía el hombro izquierdo inmovilizado…

Por fortuna Sazuke advirtió esto y la abrazó suavemente, para luego hablarle con inusual ternura

—Velvet, tranquila… puedo entender que sientas miedo e impotencia en estos momentos…

—Sazuke… — Respondió ésta sin abrir los ojos — Tengo mucho miedo… estos rivales pueden todos poseer una fuerza exorbitante. ¿Qué pasará si perdemos? Y lo peor es que en mi calidad de lesionada no puedo ayudarles…

—Tranquilízate, por favor, amorcito. Nuestros rivales son gente de honor.

—¿Cómo puedes saber eso?

—No lo sé. Pero quiero creer en ello… o de lo contrario no me podré concentrar.

—¿Eh? — Con esa interrogante monosílaba fue que la joven Masquerain destapó sus orbes

—Yo también tengo algo de miedo. Pero la idea aquí es que lo superemos en lugar de quedarnos petrificados. Esta es una oportunidad única para fortalecernos y aprender técnicas de otra época… ¡Y no debemos desaprovecharla!

—No lo sé…

—Nathan declaró que él confiaba en el honor de nuestros oponentes… hasta ahora no se ha equivocado. Y con eso a mí me basta.

No obstante, el discurso alentador de Sazuke a su amada se vería interrumpido… por una risotada casi maniática

—Je… jejejejeje… Jajajajajaja… ¡¡JUAJUAJUAJUAJUAJUAJOJOJOJOJOJOJOJOJOJOJO… AAAAAAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!!

Era Keith, quien tardó unos instantes en darse cuenta de que había perdido. Nathan, Stella y Juan estaban cerca de él cuando éste comenzó a hacer eso.

Juan y Stella estaban claramente perturbados, pero Nathan solo puso su mano en el hombro de su buen amigo y esperó a que se calmara.

—¡Ay, Keith cabrón! ¡Seguro con eso perturbaste a todo el equipo rival también! — Exclamó Matt

—No sé ellos, pero a mí sí me dieron ñáñaras… — Declaró Suzanne

En unos segundos Keith se calmó y miró al césped. Solo pudo declarar…

—Lo siento, chicos… creo que la he cagado.

—Descuida, compadre. Lo hiciste bastante bien…

—¡Solo lo dices para ser amable! Dime la verdad, borreguito… — La frustración del Camerupt era casi palpable

—Es en serio. Lo hiciste bien considerando que te enfrentabas a una completa desconocida. Además, creo que no puedo evitar ser amable con todos ni aunque quisiera… debe ser algo intrínseco de mi especie, jeje…

—Como sea… — Keith desvió la vista para no mirar a nadie a los ojos.

—Oye, supongo que el encontrar a una mujer con esa cantidad de experiencia en combate debe sentirse como algo agridulce.

—La verdad es que sí. Los demás guerreros rivales deben ser igual de poderosos, considerando que estamos en la época del cénit de la magia y la fantasía…

—¿No estás herido, Keith? — Stella se atrevió a preguntar por fin

—Solo mi orgullo — El aludido la miró brevemente — Pero nada grave, gracias.

Dicho esto, él solo caminó hasta la banca y se sentó sin decir más.

—La neta que estos rivales son sorprendentes, bro…— Fue lo único que Juan atinó a soltar

—Podremos con ellos, siempre que no tengan una ventaja de tipo tan clarísima — Le respondió su hermano — Ahora hay que ver quién de nosotros sigue…

Argus ya había ordenado al Haunter a seguir con el jueguito de sus Fuegos Fatuos. Mientras, Aldonza era felicitada por dos de los otros encapuchados

—¡Fue un buen combate, nena! — Exclamó uno que usaba una capucha de color marrón — ¡Ese jovenzuelo nunca supo de dónde vinieron los golpes!

—Y eso que no fue necesario usar demasiados ataques de tipo Agua… — Una figura de capucha fucsia también la estaba alabando

—Bueno, tuve un poco de suerte, es todo — Respondió ésta — Pero ustedes tengan cuidado. Esos jovencitos no deben ser tomados a la ligera por ningún motivo.

La palabrería amistosa se terminaría de repente cuando el encapuchado del báculo de metal apuntó al tablero y dijo “¡Ya se ha decidido! ¡Marcia es la siguiente!”

En efecto, la llama de Haunter iluminaba el montón de huesos de color ocre apilados sobre un fondo de color azabache.

Y en el otro lado, había salido iluminado el cuadro con el jinete sin armadura.

—Bueno, Marcia, ve por ellos querida.

—¡Lo haré!

Esa encapuchada en fucsia decidió acudir al campo de batalla usando los peldaños de una esquina y caminó despacio hacia el centro, mientras se quitaba el manto sin mucha prisa.

Y en cuanto su oponente…

—¿Ya te sientes mejor, Velvet? — Preguntó nuestro buen amigo, el Zangoose, sin soltar ese abrazo

—Creo que sí. Gracias — Respondió la joven de catorce años.

Recién ahí Sazuke se fijó en el tablero y pudo ver que le tocaba pelear al símbolo del guerrero montando a caballo

—¿Y de quién es ese símbolo?

—Es el tuyo, Sazuke — Respondió Nathan rápidamente, sorprendiendo al aludido de manera mayúscula. — Tú sigues, y confío en que darás una muestra de habilidad y fiereza inequiparables.

—¡Asombroso! — El de tipo Normal no se aguantó la emoción

—Eso demuestra que comer ansias no hace sino retrasar tu momento — Declaró Matt — Apenas te preocupaste más por Velvet que por tu turno para pelear, la suerte ha cambiado.

—¡Ve allá y aplástalos, Sazu! — Suzanne lo animó también.

—¡Contamos contigo, Sazuke! — Juan se unió a la arenga.

—No lo arruines… — Sylvain le advirtió por último

Ignorando ese último comentario, el Pokéhumano petiso subió al cuadrilátero de un salto, avanzó y se fijó en su rival.

Ella medía 169 centímetros y su figura era parecida a la de Aldonza pero con un poco más de carne, especialmente en los muslos. Su piel era trigueña y sus ojos totalmente negros, al igual que su cabello y su vestimenta que parecía un poco al de una practicante del vudú, con todo y un collar hecho con una versión miniatura del cráneo de un Cubone. Por último, ella usaba un adorno en el cabello, también hecho con huesos. Para ser preciso, parecían dos huesos entrecruzados adornando un mechón parado.

Eso, añadido a las “alas” que ella mostró al estirar sus brazos, daba a entender que era una PokéHumana de raza Mandibuzz.

—¡Siente el miedo fluyendo por tus venas, muchacho! — Habló Marcia al fin

—¿Miedo? — Repentinamente nuestro amigo Zangoose se vio más animado — ¡Yo lo que siento es mucha emoción! ¡Luces como una mujer muy fuerte! Tu nombre es Marcia, ¿Verdad?

—¿Eh? — Esta vez la expresión de la joven rival de Sazuke se suavizó al verlo tan emocionado y mostró mayúscula sorpresa — Sí, ese es mi nombre… ¿Seguro de lo que has respondido?

Esta vez el representante del equipo Black Spark se puso en guardia…

—Puede ser que esta situación siga siendo algo desconcertante. ¡Pero voy a aprovechar cada segundo que me quede!

—De acuerdo, muchachos… ¡Comienza el Round Dos!

Argus levantó sus manos y con ello Sazuke se lanzó cual cohete hacia su rival usando sus garras, pero Marcia logró esquivar por un margen muy estrecho. Pero Sazuke seguía intentando abalanzarse sobre ella, sin éxito…

En determinado momento ella saca sus dos huesos de adorno para el cabello y éstos se agrandan una fracción de segundo antes de que ella los lance…

—¡Es un doble Huesómerang! ¡Cuidado! — Velvet adivinó de qué se trataba el ataque que Marcia había ejecutado. Gracias a ello, Sazuke supo qué hacer…

Él pegó un salto por encima de Marcia, cayendo a escasos centímetros detrás de ella, y le pegó un codazo en la espalda antes de que ésta siquiera pudiera darse vuelta.

—¡Oh, bienamado Arceus! — Pensó Argus mientras veía esto — ¡Ese pequeñín es muy veloz!

El chico Zangoose intentó usar su ataque Hidropulso mientras su oponente seguía resintiéndose de ese golpe, pero ésta tomó los huesos en su camino de regredo y los usó como espadas para destrozar la bola de agua. Y después dio un salto hacia atrás, evitando un ataque de Trueno que estaba por alcanzarle.

—¡Por poco! — Pensó ella — ¡Mejor espabilo de una vez!

Lo siguiente que ella hizo fue lanzar un montón de anillos de oscuridad hacia Sazuke… vale decir, Pulso Umbrío. No obstante, Sazuke logró usar su Agilidad para evitarlos.

Era momento de un cambio de planes. Marcia retrocedió lentamente y no quitó su mirada de su contrincante ni por un segundo. Sin embargo, él fue mucho más rápido que sus reflejos y no pudo evitar ser golpeada en el estómago.

—¡Aaaaack! Eso realmente duele… Pero no me voy… a rendir… — Con ese pensamiento, ella extendió sus alas y lanzó unas plumas a la cara y brazos de su rival

—¡Mierda! ¡No veo más allá de mi nariz! — Se quejó Sazuke


—¡Ay, no! ¡Íbamos tan bien! — Exclamó Juan

—Esa chica no es la más atlética que hay, pero sabe usar Danza Plumas. Muy inteligente movida — Comentó Nathan — Si baja la visibilidad de Sazuke y su poder de ataque, podría sacarlo del ring sin mucha dificultad.

En eso, todos ven que, mientras Marcia recuperaba un poco el aliento, Sazuke se tambaleaba, acercándose a uno de los lados del cuadrilátero

—¡¡No retrocedas más, imbécil!! — Le gritó Sylvain — ¡Estás a punto de caerte, cabeza de Fletchling!

Entonces, la chica Mandibuzz retomó la ofensiva, usando sus huesos de nueva cuenta, pero en esta ocasión era por la vía cuerpo a cuerpo, golpeando incesantemente a su objetivo como si fuera un tambor. Si bien sus golpes no eran demasiado fuertes, ella empujaba lentamente Sazuke hacia el filo del ring.

—¡Cae… de… una… vez! — Esas palabras salían de la boca de Marcia mientras insistía en su labor. No obstante, el guerrero de baja estatura logró detener ambas manos al mismo tiempo luego de unos cuantos golpes recibidos — ¡Ay no!

—¡Acabaré contigo! — Declaró el joven Zangoose al mismo tiempo que soltaba un rodillazo brutal a la boca del estómago de Marcia y luego invocaba otro ataque de Trueno, el cual sí dio en el blanco esta vez.

Argus exclamó a Sazuke que se alejara, ya que iba a iniciar la cuenta de protección. Éste chirrió un poco los dientes, pero al ver que él había logrado infligir parálisis en su rival, se calmó y decidió obedecer.

—Creo que estoy cerca… — Pensó él, mientras se quitaba un montón de plumas de encima — Dudo que mi oponente pueda pararse luego de mis ataques…


—¡Lo haces bien, Sazukito! — Exclamó Suzanne, animándolo — ¡Sigue así!

—¡¡Hurra, Sazuke!! ¡¡Eres el número uno!! — Velvet no se quedó atrás con las loas

—Esa tonta de Marcia jamás tuvo oportunidad — Añadió Matt — Nuestro compañero es un arma letal cuando está inspirado… y ni hablar si lo haces enojar.


La cuenta de protección seguía. Aldonza aprovechó para dirigir algunas palabras a su compañera, quien intentaba levantarse a pesar de todo el dolor que sentía

—¡Marcia! ¡No es necesario que te levantes! ¡Deberías preocuparte más por tu salud!

—No… no me pienso rendir ahora… — La joven Mandibuzz se repetía eso una y otra vez mientras intentaba levantarse. Incluso se pegó un par de bofetadas a sí misma para espabilarse.

Argus iba por el nueve cuando ella al fin logró ponerse de pie, y en guardia.

—¡Vas a necesitar más que eso para vencerme, Sazuke! — Exclamó ella, firme en su convicción

—¡Sigan peleando! — Declaró el “réferi” de tipos Dragón y Volador.

Entonces, Sazuke se puso en guardia y comenzó a trasladarse en lateral, con la intención de formar un círculo que rodease a Marcia, lentamente…

—Debiste hacerle caso a tu compañera de equipo…

—¡Cállate, idiota! — Le respondió su rival, casi a los gritos — ¡Aún no estoy acabada!

—No falta mucho y lo sabes… — Declaró Sazuke sin perder los cabales… para luego aventarse contra ella en un Combate Cercano — ¡Toma esto, por testaruda!

—El Mudbray hablando de orejas… — Pensó Sylvain brevemente

Marcia intentó esquivar los golpes que le llovían, mas no pudo evitar algunos que le llegaron al rostro y al estómago. No obstante, no iba a caer así como así, por lo que usó Picotazos en la cabeza del Zangoose y lo aturdió unos instantes. Luego de ello, usó nuevamente uno de sus huesos para darle en la mejilla, como si fuera un beisbolista pegándole a la bola.

Eso lo alcanzó a derribar, pero solo por medio segundo. Éste se paró de inmediato y usó Llamarada. Fue algo tan repentino que impactó irremediablemente en su objetivo, dejándole quemaduras

—¡Aaaah! ¡Eso duele más de lo que pensé! — Pensó Marcia — ¿Por qué este pequeño Zangoose es tan poderoso?

—¡Ahora sí te eliminaré! ¡¡Garra Brutal!!

Finalmente Sazuke se lanzó una vez más contra su rival y usó su movimiento insignia, aprovechando el momento de debilidad de su contrincante. El impacto fue tan poderoso que casi manda a Marcia a caer fuera del cuadrilátero. De todas maneras ella había quedado demasiado golpeada como para levantarse. Si bien no tenía sus ojitos hechos espirales, la Mandibuzz se encontraba inconsciente. Solo faltaba hacerlo oficial…

—¡Marcia ha sido noqueada! ¡El ganador de esta ronda es Sazuke!

—¡¡Ooooooh sí, nene!! — El aludido levantó su brazo derecho en señal de triunfo, mientras que Aldonza se apresuró a atender a su amiga y la bajó del ring con cuidado, para luego sentarla en el césped.

—P-perdóneme, maestra… — Al menos Marcia todavía podía hablar — le he fallado…

—Ya, no te preocupes — Respondió la mujer Gorebyss con un tono comprensivo y amable — Siempre existe la posibilidad de que nos topemos con un enemigo así de poderoso… deberías saber a estas alturas que no todos tus rivales se intimidan así de fácil. Solo necesitas más entrenamiento.

—E-está bien… me esforzaré más a la próxima

—Ya lo sé, jovencita. Ahora descansa…

Los jovencitos del equipo Black Spark se fijaron en cómo el cuadro de los huesos apilados era quemado y borrado del tablero por las llamas fantasmales de Haunter. Sazuke, en tanto, ya había bajado del ring por sus propios medios y era felicitado por casi todo el equipo con palmaditas y palabras bonitas

—¡Así se hace, mi cuate! — Juan fue el primero — ¡Estamos empatados al fin!

—¡Viejo, qué potra tienes! ¡Esa Mandibuzz cayó como una pila de dominós! — Keith fue el siguiente — Te envidio, la neta.

—Esa fue una pelea muy inteligente. Mientras te apegues a tu estilo, nadie podría vencerte — Matt continuó.

—Hmph… yo lo hubiese hecho en menos tiempo — Sylvain le dijo — Más te vale que no te confíes

—¿Sabes? Tus palabras venenosas no van a arruinar este buen momento — Sazuke al fin le pudo responder — ¡Me estoy divirtiendo como nunca!

—Como sea — Continuó el joven Toxicroak policía, mirando a otro lado y cruzándose de brazos — Solo no abras mucho las piernas o te darán de nuevo en las joyas de la familia.

Nathan vio que el aludido se las cubría instintivamente y decidió interrumpir

—Bueno, dudo mucho que el equipo rival necesite recurrir a esos trucos sucios. Se ven como un equipo de lo más honorable.

—Ni siquiera podemos verlos a la cara. ¿Cómo podríamos estar tan seguros de eso, Nath? — Esta vez Sylvain le preguntó con total seriedad y sin su cizaña típica

—No lo sé. Solo quiero pensar que sus motivos son nobles. Probablemente Argus nos lo responda pronto

—¡Miren, chicos! — Exclamó Suzanne — ¡Haunter ha vuelto a hacer mover sus fueguitos!

—¡La acción no se detiene! — Soltó Sazuke, entusiasmado una vez más — ¿Quién será el siguiente en saltar? ¡Espero ser yo de nuevo!

—Ay, pero deberías tomar un poco de aire, Sazu… — Le contestó Velvet con un goterón en su cabeza.


Tal como Sazuke dijo, la acción no para. Cada equipo ha perdido un round y ha ganado otro. Pero aún quedan ocho por lado… ¿Qué pasará en el asalto siguiente? ¿Será un encuentro parejo o será un poco desbalanceado como el que vimos hace poco? ¡Descúbranlo en el siguiente episodio!

¡Esta historia continuará…!​

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El tiempo fluye... la acción no para... mis neuronas tampoco. ;)

Nos vemos en otra ocasión :B

==Nathancito estuvo aquí °w°==​

 

¡Bueno, chicos! Esta vez me demoré un poquito menos en actualizar n_n. Espero disfruten esta historia que ya tiene sus 117 episodios :D. Vamos a ver qué tanto lo disfrutan, nenes n_n.

Muchas gracias a todos los fieles lectores xP. Sin más demora... ¡Allá vamos!

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Las llamas bailaban, se meneaban un poco con el viento, mientras su controlador, ese Haunter tan extraño, reía de repente y ponía caras chistosas. Así hasta que se detuvo.

La llama de la izquierda había caído sobre el ícono de la botella con el líquido verde.

Y la del lado opuesto iluminó la tabla destrozada por una mano.

—Bueno Matt, es tu turno… — Le habló Sazuke de inmediato.

—Entiendo — Contestó el aludido — Deséenme suerte, muchachos.

—No la necesitas — Le dijo Nathan — Eres muy inteligente y estoy seguro de que puedes con cualquier cosa

—Ya lo escuchaste — Suzanne reafirmó — Ya sabemos todos que la fuerza bruta está sobrevalorada. Sino pregúntale a…

Pero Keith interrumpió a la joven Beautifly puesto que él anticipó que se estaba refiriendo a su persona y los resultados de su pelea contra Aldonza

—¡Ella solo me pilló por sorpresa! ¡Ya cállate!

Rápidamente Velvet les pidió que se callaran y dejasen de pelear. En tanto, Matt subió sin más al cuadrilátero.

El joven Jolteon avanzó a ver a su rival, quien portaba una capucha de color azul muy oscuro.

—¿Será otro PokéHumano de tipo Agua? — Se preguntó el joven de diecisiete años para sus adentros — Esperemos que sea así, puesto que podré tenerla más fácil de esa forma. Bien el ícono que parece digno de karateka es solo para despistar y…

Repentinamente, bajo la capucha del rival se pudieron notar cuatro bultos moviéndose al unísono para ayudar a quitar la capucha de una forma “civilizada”. Entonces Matt pudo notarlo…

—¡Oh, recórcholis!

¡En frente suyo había un Pokéhumano de raza Machamp! Era un varón fornido y maduro de los que uno veía en los programas de Wrestling. Tenía el torso semi desnudo, con apenas unas fajas de tela alrededor de sus abdominales, además de unos pantalones de cuero resistentes y de color café. Además de pelo castaño recortado, barba y bigote dignos de guerrero espartano y unos pequeños ojos cafés que contribuían a darle un aura amenazante.


—¡Pero qué músculos, madre mía! — Exclamó atónito el joven Camerupt.— ¡Esos cuatro bíceps deben llevar años de entrenamiento arduo!

Él dio una mirada a Juan,Sazuke y Suzanne, quienes lo veían con cierta cara de furcia complicidad… ahí entendió que…

—¡Rayos! Esa debió ser la frase más homosexual que he dicho en mi vida…


—Mucho gusto, jovenzuelo — El grandulón rival le dijo a Matt mientras hacía sonar los nudillos de sus cuatro manos y pronunciaba la “z” con un pequeño alargue — Mi nombre es Fernando y espero que seas un digno contrincante.

—L-lo mismo digo, señor — Respondió el aludido, fingiendo no sentir temor alguno, y poniéndose en guardia

—Por lo que veo, ambos están listos. — Y entonces, Argus señaló el inicio de las hostilidades — ¡Vamos!

Lo primero que Fernando hizo fue darle un pisotón al cuadrilátero y generar muchos montículos que subían y bajaban. Matt terminó sobre uno de ellos y luchaba por mantener el equilibrio


—¡Es un ataque Terratemblor! — Nathan se dio cuenta de inmediato y se apresuró a gritarle instrucciones a su compañero de equipo — ¡Matt, ten mucho cuidado!


Y apenas Matt pudo volver a concentrarse, pudo notar que los temblores se hacían más fuertes… ¡Y que un rayo de color blanco recorría el cuadrilátero!

—¡Mierda, un ataque de Fisura! — Pensó Matt — ¡Fernando va en serio! ¡Debo esquivar!

El joven Jolteon debió usar su agilidad característica para evitar ser enterrado vivo, recorriendo el campo a saltos y con cuidado de no caer fuera del cuadrilátero. Pero eso no detendría a su contrincante…

El Machamp se lanzó hacia él con un Mega Puño, el cual fue apenas evitado con un movimiento digno de las películas deMatrix, para luego rodar en dirección al centro del cuadrilátero.

Ahí el joven de tipo Eléctrico y cabello puntiagudo comenzó a usar Onda Trueno para intentar paralizar a su rival. No obstante, éste estaba atento y usó un báculo de algún material extraño, el cual enterró en el pisoy atrajo la electricidad hacia él, anulando cualquier peligro de parálisis.

—¿¡Qué mierda es eso!? — Matt estaba tan sorprendido que dejó escapar una palabrota

—Ingenioso, ¿No lo crees, chaval? — Respondió su oponente — Un amigo me regaló este báculo pararrayos…

—¡Es el colmo de la conveniencia! — Exclamó Matt — ¿Cómo iba yo a saber que tenías uno?

—No es mi obligación decirte qué armas tengo a mi disposición. En ese aspecto no soy tan abierto como Aldonza.


—¡No discutas, Matt! ¡Solo piensa en otra cosa! ¡Ánimo! — Nathan decidió echarle porras a su amigo, antes de que Fernando retomara la ofensiva.

—¡Tú puedes, amigo! ¡Llévale una victoria para contarle a Nattie! — Stella también se sumó a la arenga.


—¡Auroesfera! — Sorpresivamente, el Machamp usó sus cuatro brazos para crear un total de cuatro bolas azules de energía, las cuales lanzó a gran velocidad y al mismo tiempo sin que se estorbaran la una a la otra.

Matt pudo esquivar las primeras tres, pero la cuarta le dio en un costado del abdomen, causando más dolor que daño real con la explosión

—¡Yeouch! — Pensó el Jolteon — ¡Este tipo es increíblemente poderoso! ¡No puedo dejarlo seguir atacando!

Sacando valentía de quién sabe dónde, Matt intentó usar Ataque Rápido mientras avanzaba en zig-zag. Fernando intentó una vez más usar Fisura, pero ésta no alcanzó a tocar a su objetivo, por lo que Matt aprovechó para embestir.

—Nnnng… — Se quejó por lo bajo Fernando — ¡Buen intento, pequeñín!

Pero entonces, él tomó a Matt por la chaqueta, con sus dos manos inferiores, y comenzó a golpearle la cara con los dos puños superiores y a ritmo de ametralladora


—¡¡Matt!! ¡Sal de ahí! — Gritó Stella, un tanto aterrada


—No le voy a dejar oportunidad de contraataque — Pensó el hombre de cuatro brazos, para luego lanzar a Matt hacia atrás como si fuera una catapulta huma… mejor dicho, PokéHumana.

—¡Iniciaré la cuenta! — Declaró Argus


—¡No desesperes, Matt! ¡Mantente calmado y piensa en algo que sirva para contrarrestar su fuerza! — Le animó Nathan, mientras el árbitro designado decía los primeros tres números


En tanto, el joven Jolteon comenzaba a sacar algo desde el interior de su chaqueta a la par que se levantaba. Los golpes que su rival le había atizado dolían mucho en verdad.

—Rayos… este tipo es poderosísimo. Necesito una nueva estrategia… y espero que él no sea muy inteligente como para ver a través de ella…

—Oigan, ¿Qué está planeando Matt? — Susurró Suzanne a sus demás compañeros — No me digan que…

—Parece que se traía unas pociones consigo en el momento en que nos teletransportaron — Comentó Galanoth con una voz igualmente baja — Creo que su oponente no se ha dado cuenta. Es una oportunidad de oro para sorprenderle.


A medida que Matt se levantaba, dándole la espalda a Fernando, éste último pudo notar un corcho que caía a los pies del joven Jolteon. Entonces intuyó…

—Hostia, que el chiquillo está tomando una pócima. Al parecer ha veníopreparao.

—¡Se reanuda el combate! — Anunció Argus, ante lo que el hombre mitad Machamp corrió hacia su rival con intenciones de darle unos puñetazos en la quijada.

—¡Eres mío! — Pensó Fernando.

Pero entonces Matt se volteó hacia él con los cachetes hinchados cual Raticate de la región Alola y escupió un líquido negro a los ojos de su contrincante.

—¡¡Aaaaah!! ¡Mis ojos! — Se quejó el contrincante de nuestro amigo Jolteon.


—¡Excelente plan! — Alabó Sylvain la vuelta de tablas que ahora estaba viendo — Matt le hizo creer a Fernando que se había bebido una pócima curativa cuando en realidad eso era… eeeem… ni puta idea.

—¿Siquiera es legal eso? — Preguntó Velvet, con una gotota en la frente

—Si no lo fuera, Argus hubiera descalificado a Matt en el lugar. Pero yo lo veo muy tranquilo…


En tanto, el veloz chico Eeveevolución aprovechó de beber otra pócima. Esta vez sí era una bebida energizante cuyo envase resultó ser un delgado matraz. Y bueno, al menos él rotulaba bien sus mejunjes desde que Galanoth casi se muere al beber uno de ellos.

Posterior a eso, decidió sacar una pipeta y rociarla en un lugar específico.

Todo esto lo consiguió hacer mientras Fernando se limpiaba los ojos

—¡Eso ha sido un truco nefasto, jovencito! ¡Ahora estoy encabronado de verdad!

Rápidamente el de tipo Luchador comenzó a lanzar más Auroesferas en packs de a cuatro, pero por alguna razón Matt pudo esquivarlo todo… y lo que no podía esquivar, lo neutralizaba con su Rayo.

—¡Cae de una puñetera vez, muchacho! — Exclamó Fernando, pero Matt lo ignoraba y seguía esquivando a medida que se acercaba a él. Entonces, el Machamp intentó asestarle un karatazo de gran potencia, el cual no consiguió dar en el blanco, debido a que Matt se había desplazado hacia atrás, para usar Ataque Arena

—¡Aaaaah! ¡Maldición! — Se quejó el rival a gritos — ¡No otra vez!

—¡Heeey! ¡Por acá! — Ahora Matt lo estaba instando a ir a por él — ¡Ven y atrápame, pendejo!

El plan había dado resultado. Fernando comenzó a correr hacia donde pudo escuchar las pullas de su contrincante. Cada vez se acercaba más, pero el joven Jolteon se hizo a un lado silenciosamente. Eso causó que el competidor de tipo Luchador siguiera de largo y además tropezara con un líquido de color azul marino

—¡¡Aaaaaaahhh!! —Gritó él justo después de pisar aquel líquido y casi caerse hacia fuera del cuadrilátero— ¡Rayos! ¡Eso estuvo cerca!

Pero lo que iba a ocurrir a continuación… ¡Nadie! Se lo esperaba

—Esto… es… ¡¡Esparta!!

¡Un feroz patadón por parte de Matt a las nachas de su oponente! Y Fernando terminó por caer de bruces al césped de ahí afuera

—¡Fernando ha caído fuera del cuadrilátero! — Anunció Argus de inmediato — ¡El ganador de esta ronda es Matt!

Casi todos los miembros de Black Spark aplaudieron a su veloz, inteligente y delgado compañero con ganas, mientras éste se secaba el sudor.

—¡Eso fue difícil! — Pensó Matt

—¡Excelente desempeño, mi pana! — Exclamó Juan, quien estaba justo al lado de su hermano Nathan — ¡David se chingó a Goliat!

—La diferencia es que yo dudo de lo que se escribe en la biblia… pero lo que vimos acá fue muy real — Respondió el Ampharos mientras chocaba los cinco con Matt

—Por ahora nos hemos salvado — Declaró aquel victorioso joven sin emocionarse — Casi no me quedan pócimas, por lo que si vuelvo a pelear, es probable que no corra con la misma fortuna.

—Mejor trata de recuperar tus energías. Nadie sabe qué pasará — Retalió el otro tipo Eléctrico — Haunter ha vuelto a hacer bailar sus llamas

—¡Excelente! — Exclamó Sazuke — ¡Ya quiero que me toque de nuevo!

—No comas ansias, que eso te perjudica más de lo que te beneficia — Repuso el joven Sceptile que estaba cerca suyo

—Jejeje… — El petiso Zangoose decidió no pelear esta vez y solamente puso su mano en la nuca en señal de modestia — No puedo evitarlo. Simplemente soy así…

—¡Atentos que las llamas están deteniéndose!

Suzanne pudo notar la disminución en la velocidad de éstas. Al poco rato las dos se detuvieron y decidieron quiénes serían los siguientes en desguañingarse a trompadas.

En el lado de los jovencitos de la era contemporánea, se iluminó el escudo con el antílope.

Y del otro lado, los corazoncitos superpuestos

—¡Vaya vaya! — Sylvain le habló a su amigo el Ampharos — Creo que es su turno, líder…

—Así parece — Respondió Nathan mientras estiraba un poco los músculos — Me pregunto qué tipo de rival me tocará

—¡Tú puedes, amorcito! — Le animó Stella sin dudarlo

—¡Mantente alerta, borreguín! — Keith también le dio ánimos

El aludido solo asintió en silencio y subió al cuadrilátero. Ante él apareció una figura encapuchada, la cual intentó quitarse ese ropaje… no obstante, le era muy difícil, lo cual hizo que a Nathan le saliera una gotota en su cabeza mientras esperaba.

—Eeem… ¿Necesitas ayuda? — Se ofreció éste

—¡No! Ya casi lo tengo… — Respondió una voz femenina. Era nadie menos que su oponente, quien al fin logró quitarse ese manto enorme — Gracias de todas maneras. Mi nombre es Esmeralda.

En lo que ella hacía una pequeña reverencia respetuosa, Nathan se puso a analizarla con la vista. Ella era una Pokéhumana de raza Gothitelle, la cual medía 166 centímetros de altura. Y sí, aun así era más alta que Sazuke, por lo cual el joven conocido por su control del hielo tuvo que evitar reírse por lo bajo. También pudo ver que ella llevaba un vestido muy bello, parecido al de una princesa, todo hecho de seda, de distintos tonos de púrpura y costuras de oro sobre botones de color obsidiana. En una mano llevaba una varita de color marfil y adornos de color dorado. Su pelo era negro como el azabache y por si fuera poco, aunque no denotara más de quince años, ¡Su delantera era un poco más grande que la de Aldonza!

Y el primero en notar ese detalle en serio fue Juan

—¡Te tocó la lotería, bro! ¡Cuánta carne para tirar al refrigerador!

—¡Cállate, pervertido! — El alto joven de tipo eléctrico le soltó a su hermano, para luego centrar su atención en su rival de turno, en completo silencio

—No me subestimes — Esa declaración de Esmeralda sorprendió a Nathan — Soy una peleadora hecha y derecha al igual que todos. ¡En guardia!

—Debí esperarlo de una joven de tipo Psíquico — Se dijo el aludido a sí mismo, mientras adoptaba una pose de pelea — ¡Demuéstralo!

De una buena vez, Argus dio inicio al cuarto round.

—¡Peleen!

El primer movimiento de Nathan fue el de usar sus disparos de Señal, confiado en que la Gothitelle no fuera lo suficientemente veloz para esquivar. No obstante, mayúscula fue su sorpresa al ver que ella había erigido una Pantalla de Luz más rápido de lo que él pudo disparar.

—¡Sorprendente! — Pensó el Ampharos en voz alta

—Te dije que sé defenderme — Declaró la joven mientras blandía su varita mágica y convocó un Lanzallamas

—¡Magia! — Exclamó el objetivo, mentalmente, para después esquivar por los pelos.

Al rato, ella comenzó a meditar un poco. Todo parecía indicar que ella usaba Paz Mental


—¡Eso es, Esme! — Aldonza animaba a su compañera — ¡Sigue concentrada!


Nathan decidió correr hacia su rival para atacar directamente.

—¡Los atributos físicos de Esmeralda deben ser su lado flaco! ¡Debo acercarme! — Pensó.

No obstante, ella ya estaba preparada…

—¡Espacio Raro!

Y con esas palabras, el cuadrilátero se rodeó con una cúpula de color rosa. Al instante, Nathan casi se tropieza al sentir su cuerpo más pesado de lo normal

—¡Ah! ¿Por qué? — Pensó éste, un poco asustado — ¿Qué me sucede?

Esmeralda no emitió palabra. Más bien volvió a usar Paz Mental de forma disimulada, mientras levantaba su pequeño cetro, apuntando al cielo. Entonces se pudo ver una especie de cometa elevarse en el firmamento para luego explotar y dividirse en varios fragmentos ardientes que caían.

¡Era un Cometa Draco!

¡Había que esquivar a como diese lugar!

Pero esa era una toda una hazaña cuando sentías algo parecido a la gravedad de Júpiter en tus músculos. Así que, si bien ningún meteoro le impactó directamente, Nathan sintió varias ondas expansivas golpeando su cuerpo y haciéndole caer de rodillas.

—Qué noble caballero — Dijo la joven Gothitelle mientras reía dulcemente — No es necesario que te arrodilles ante mí

—¡Iniciaré la cuenta! — Exclamó Argus


—¡¡Aaaaah!! ¡Nathancito! — Stella gritó, muy preocupada

—Parece que a nuestro líder lo han pillado por sorpresa — Soltó Matt, para luego animar a su compañero del mismo tipo — ¡¡Nathan!! ¡No dejes que te venza una niña!

—¡¡Oye!! — Exclamó Velvet, ofendida — ¡Yo soy una también!

—¡Me refiero a una del equipo rival! — Se defendió el Jolteon


El réferi designado iba por el cuatro, en lo que Nathan pensaba en cómo voltear las cosas a su favor. Sabía que usar ataques Especiales sería algo casi inútil luego de ver lo elevadas que eran las Defensas Especiales de Esmeralda. Y además, sabía que acercarse sería una empresa complicada. ¿Cómo hacerle daño a esa habilidosa peleadora?

Entonces, él pudo notar que una loza del cuadrilátero se había aflojado debido a los combates anteriores y a los muchos meteoritos que cayeron hace poco. Tomó ese pedazo… pesaba fácilmente unos cuatro kilogramos con la gravedad aumentada, pero por fortuna podía lanzarlo una vez que se parase.

Nathan logró pararse cuando el Réferi estaba por decir el ocho, y acto seguido lanzó el pedazo de cerámica dura.

Lamentablemente, ésta volaba muy despacio a pesar de que éste la había lanzado con casi todas sus fuerzas… y Esmeralda pudo evitarlo

—¡Deberías saber que lanzar objetos peligrosos a las damas es algo de bárbaros! — Reclamó ella

—¡Reanuden el combate! — Dictó Argus. La Pantalla de Luz de la joven Gothitelle se había desvanecido, pero ella no dudó en reconstruirla

—Okey… eso no salió como esperaba — Pensó Nathan — Creo que necesito otro plan.

En ese instante, Esme intentó con un ataque de Hidrobomba, pero Nathan pudo evitarlo, por muy poco. Y justo en ese instante, el Espacio Raro se desvaneció y él pudo sentirse más ligero

—¡Hey! ¡Ya no estoy aletargado! — Pensó Nathan mientras tomaba otro pedazo del cuadrilátero.

—Tal como me enseñaron Aldonza y Pablo… tengo que seguir insistiendo así hasta que se rinda — Y dicho esto, ella pudo ver otro trozo de loza volando hacia ella, pero lo neutralizó usando Psi-choque. Acto seguido, volvió a invocar el Espacio Raro.

Y el ciclo reinició.

—Esta niña no se está guardando nada — Se dijo el Ampharos a sí mismo — Tengo que estar muy atento. Debe haber una ventana de oportunidad…

Acto seguido, la Gothitelle invocó un ataque de Roca Afilada el cual Nathan pudo evitar con mucho esfuerzo y guiándose por sus reflejos. En lo que él esquivaba, invocó su espada de hielo y pudo cortar algunas rocas viniendo desde ángulos más o menos frontales.

—¡Rayos! Mi espada se está agrietando… no es muy buena cuando se trata de cortar piedras — Caviló nuestro buen amigo Ampharos, justo antes de dar con una idea — Aunque podría servirme de algo.

Disimuladamente, él puso sus manos en la espalda y comenzó a mover los pies. Todo mientras ocultaba sus manos y espalda de una vigilante y confiada Esme. Él planeaba romper su espada en dos pedazos, y uno estaba suelto en su mano derecha


—¿Qué está planeando mi brother? — Preguntó Juan, contrariado

—Creo que al fin se le ha encendido el foco — Comentó Sylvain con toda la tranquilidad del mundo

—¿Eh? ¿Por qué lo dices? — Juan miró a Galanoth y éste asintió en silencio. Luego miró a Stella, y ésta le dijo

—Hay que confiar en él. Parece que ya descubrió cómo salir de este predicamento


Entonces, en lo que Nathan esquivaba varios ataques lanzados por su oponente, pudo notar un brillo delator en frente de ella. Su Pantalla de Luz se había vuelto a deshacer.

—¡Bingo!

Y entonces, mientras esquivaba otro lanzallamas, él disparó un alargado Rayo Señal a su torso, inflingiendo cierto dolor en ella. Y en lo que Esme se encorvaba ligeramente, su Espacio Raro también se desvaneció.

—¡Ahora o nunca! — La siguiente acción de Nathan fue lanzar ese pedazo de hielo sacado de su espada, como si fuera una kunai. Ésta impactó en la mano de Esme y le obligó a soltar el cetro.


—¡No! ¡La ha desarmado! — Exclamó Aldonza, con mucha preocupación

—¡Esme, ten cuidado! — Le gritó Fernando, sabiendo lo que se avecinaba.

Entonces, el joven Ampharos avanzó como una flecha y le dio a Esme un feroz golpe en la boca del estómago, seguido de…

—¡Arremetida de Lurantis!

Una estrafalaria combinación de artes marciales. Él puso ambas manos como si fuesen unas cuchillas recubiertas con hielo y comenzó a “picotear” el torso y los hombros de su víctima. Fueron fácilmente quince golpes en cuatro segundos, finalizados con una Patada Mjollnir en la sien de Esme. Ahora ella estaba en la lona…


—¡Woohoo! — Exclamó Stella, emocionada — ¡Ese es mi Nathan!

—¡Sabía que iba a sacarse algo así de la manga! ¡En el fondo siempre lo supe! — Declaró Juan, igual de contento

—Que no se confíe. Esa tal Esmeralda debe ser un hueso duro de roer. — Declaró Matt, poniendo mesura.


—Mejor será que se rinda, señorita — Dijo Nathan de forma más asertiva y templada que amenazante, mientras pateaba la varita a un lado, con tal que ella no la recuperara — Hay más de dónde salió eso.

—¡Uno! — Argus ya había comenzado a contar — ¡Dos…!


¿Habrá por fin logrado nuestro amigo Nathan el 3-1? ¿Podrá Esme levantarse después de aquella arremetida inspirada en un bicho de la región Alola? ¿Qué pasará luego? ¡Descúbranlo todo en el siguiente episodio!

¡Esta historia continuará...!
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Nos vemos en otra ocasión, shabos :V cualquier duda la responderé apenas pueda n_n... ¡Hasta la próxima y felices fiestas patrias a todos los chilenos!

Y a los que no, les deseo un domingo lleno de flojera y relax :V

==Nathancito estuvo aquí OwO==​

 

¡Hola, mis amigos! Jeje... de alguna forma he recobrado algo de ritmo y pude tener el episodio #118 en apenas tres semanas... cuando normalmente tardo entre 6 y 8 xD. Aun así, no voy a alardear... solo quiero entretenerles n__n.

¡Vamos al episodio, compadres!

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Poco después de emitir aquella desalentadora frase, Nathan pasó a secarse un poco el sudor de la frente.

—Uff… a buena hora recordé que yo me entrenaba con peso extra — Pensó él, haciendo memoria de algunas duras sesiones de entrenamiento en las que él usaba aditamentos tales como tobilleras y cinturones que pesaban muchísimo. — De no ser por eso, no hubiera encontrado forma de evitar esos ataques.

—¡Tres! — Argus seguía contando, a pesar de todo. Esmeralda hacía todo lo posible por levantarse, pero le costaba muchísimo.


Y entonces, una de las figuras encapuchadas que estaba entre los demás competidores de aquel estrafalario equipo del pasado, se la quitó y la descartó, revelando su identidad.

Era un joven que aparentaba diecinueve años, de pelo rojo como la sangre. Vestía una chaqueta sin mangas, de color azul, y unos guantes sin dedos, del mismo color. Sus pantalones eran de color rojo y sus botas de color negro. Por último, unos peculiares adornos en sus guantes y en su espalda delataban su raza de Pokéhumano…

Sin lugar a dudas, era de raza Garchomp.

—¡Esme! ¡Ese rival es mucho más de lo que puedes masticar! ¡Retírate!


—¿Huh? — Pensó Galanoth, víctima de una sensación muy extraña — ¿Por qué siento ese escalofrío? Ese muchacho…

—¿Escucharon eso? — Dijo Sazuke — ¿No es ese un miembro del equipo rival?

—Seh — Observó Juan — Y está intentando sacar a su compañera de en medio…

—¡¡Aaaawww!! — Repentinamente a Suzanne se le pusieron sus ojitos en forma de corazón — ¡Qué caballeroso de su parte! ¡Quiere tomar su lugar!

—Pero eso sería una descalificación… — Comentó Velvet

—¡El bienestar de tus compañeras de equipo es más importante que cualquier competencia! — Respondió la joven Beautifly para luego soltar un suspiro lleno de ternura.

—No es el momento para pensar en eso, ¿Lo sabías? — Reclamó Matt por lo bajo


En tanto, aquel joven de tipos Dragón y Tierra siguió insistiéndole a Esmeralda para que dejara de pelear… ¿La respuesta de ella?


—No, Pablo… no puedo rendirme… ahora.

Ella respiraba a un ritmo agitado y sus piernas temblaban… pero consiguió levantarse de todas formas

—No puedo dejar que los demás peleen y yo sin hacer nada…


Nathan había escuchado todo. Debía admirar la valentía de esa joven que a todas luces no estaba acostumbrada a una batalla. No obstante, comenzó a sentirse un poco culpable por tener una oponente que probablemente no estaba del todo preparada.

—Grrr… — Pensaba éste mientras refunfuñaba por lo bajo — Esto es demasiado incómodo… pero… no puedo retirarme así como así. Le estaría faltando el respeto a Esmeralda...


Poco después de que Argus dijera “nueve”, la joven Gothitelle al fin consiguió levantarse, luego de jadear muchísimo. No iba a rendirse tan fácilmente…

—¡No me has derrotado todavía! ¡Tengo más trucos!

Dicho esto, una inusual especie de niebla se levantó bajo los pies de Nathan y comenzó a extenderse, hasta cubrirlo del todo, mientras que a Esme le pasó exactamente lo mismo. Entonces el joven Ampharos pudo sentirse un poco más… ¿Ligero?

—Esto se siente muy peculiar… — Pensó el capitán de los chicos de Black Spark — ¡Pero no puedo detenerme!

Sabiendo que los ataques físicos serían más efectivos en alguien como Esmeralda, Nathan corrió hacia su contrincante. Ella, en tanto, comenzó a usar Roca Afilada para hacer que éste se alejase.

El Ampharos, en tanto, comenzó a esquivar todo con todavía más facilidad puesto que ella no recurrió a usar Espacio Raro. Pero aun así, una de las rocas le llegó en el hombro, causándole una cantidad sorprendente de dolor que lo hizo retroceder un poco y lo frenó momentáneamente

—¡Aaaagh! D-duele… — Pensó Nathan mientras se tomaba aquella parte afectada — Pero si yo he recibido ataques mucho peores en el pasado… ¿Por qué siento tanto dolor en esa zona?

—¡He usado Cambia Guardia! — Se jactó Esmeralda — Eres un hueso extremadamente duro de roer y para ser honesta, envidio tu resistencia. Y entonces pensé: “¿Por qué no tomar prestada un poco de ésta?”

—¡Eso explica el por qué me siento más ligero! — Eso fue capaz de concluir aquel joven alto de tipo Eléctrico — Mi densidad muscular y ósea disminuyó como por arte de…

—¿Magia? — Interrumpió la joven Gothitelle — Gracias. Estudié mucho para dominar ese conjuro y usarlo sin mi varita. ¡Ahora sí! ¡Prepárate a perder!

Otro truco que ella sabía usar a la perfección, y sin ningún instrumento extra, era Psico-choque… una gran onda de energía psíquica se dirigió hacia Nathan, pero éste rodó hacia un lado y se volvió a levantar velozmente.

—¡Rayo Señal! — Y con una mano, el Ampharos quiso contraatacar con uno de sus movimientos insignia. No obstante, Esme pudo levantar otra Pantalla de Luz

—¡Inténtalo de nuevo! — Le dijo la Gothitelle. Pero entonces, vio un pedazo de cerámica volar a su cara y no pudo reaccionar a tiempo para evitarlo.


—¡Tremenda Hostiaca! — Comentó Fernando, sobándose la mejilla con las dos manos derechas — ¡Eso debió doler, coño!

—¡No te confíes, Esme! — La alentó Aldonza — ¡Ese jovenzuelo no se detendrá así como así!


—Aaaauch… — Se dijo la jovencita con atuendo de princesa, para sus adentros — De no haber usado Cambia Guardia me hubiera noqueado. Ese Nathan es un verdadero cabeza dura…

Por fortuna, eso bastó para que la de tipo Psíquico volviera a concentrarse, y justo a tiempo, puesto que su rival se había lanzado a darle con su Puño de Hielo en reiteradas ocasiones. Ella apenas podía esquivar, y no pudo evitar comerse un puñetazo en el rostro que la hizo retroceder.

—¡Esmeee! — Exclamó Marcia, quien había despertado hace poco — ¡Atrapa!

¡Marcia había encontrado la varita de Esmeralda entre toda la confusión! Y fue muy valiente en lanzársela de vuelta a su legítima dueña.

—Casi la tengo… — La Gothitelle estiró su brazo izquierdo en son de atrapar su instrumento mágico. Pero éste fue desviado sorpresivamente, cayendo del otro lado de la arena — ¡Oh, no!

Y aquel quien había disparado era nadie menos que Sylvain, usando una de sus confiables Pistonfas.

—Dos pueden jugar el mismo juego, vaquerita — Pensó el Toxicroak a la par que soplaba la boquilla de su arma moderna, para luego guardársela.

Y todo eso causó también que Esme bajara la poca guardia que tenía. Oportunidad dorada que Nathan aprovechó para clavarle un feroz y doloroso golpe en la boca del estómago.

—¡Aaaagh! ¿Por qué… todavía… me duele tanto? — Ella soltó accidentalmente por lo bajo. El joven Ampharos entendió de todas maneras y respondió, a medida que se alejó el equivalente a unas dos zancadas de ella y adquirió una pose de boxeador, sin dejar de mover las piernas.

—No basta con robarse el poder de resiliencia de tu oponente… El conocimiento adquirido y entrenamiento diario son igual o más importantes. Tu fragilidad física es algo que puede paliarse con ejercicios y alimentación específicos. Pero hasta entonces…

¡Wham! ¡Pow! ¡Biff! ¡Swash!

No era el momento para claudicar. Nathan hizo gala de varios veloces golpes provenientes de un número extenso de artes de combate, usando a Esmeralda como un costal glorificado. Un jab de derecha, un karatazo en el hombro izquierdo, un rodillazo en el mentón, una patada lateral en el costado derecho, otra patada en la mejilla que hizo dar tres vueltas y media a Esme y por último…

—A-a-a-ah…

…un zape en la nuca.

—…De cada derrota uno puede aprender muchísimo… sigue practicando y no te sientas mal.

Esme cayó como un saco de papas, apoyada en el brazo de su oponente. Éste la cargó como si la princesa que aparentaba ser (y que sospechaba que era, en el fondo), y se la entregó a aquel joven de raza Garchomp que instintivamente se había subido a recogerla. Nathan se la entregó con delicadeza

—Muchas gracias por mostrar compasión, Nathan.

—Es una hábil peleadora con mucho potencial — Fue la escueta respuesta que el joven de tipo Eléctrico pudo dar, además de una reverencia al estilo oriental, para retirarse despacio hacia donde estaban todos sus compañeros de equipo.


—¡¡Whooooo!! — Gritó Keith — ¡¡Eso fue electrizante!! ¡Tal como nos tienes acostumbrados, amigo! ¡Tres a uno, bitch-!

—¡Oye, que ni se te ocurra completar esa oración! — Le reclamó Suzanne, para luego volver a felicitar a aquel que peleó de manera increíble — Como siempre, hiciste un despliegue de clase y estilo, mi estimado…

—¡Eres el número uno, Nathancito! — Stella lo animó también — Esa muchacha te tenía en las cuerdas y se lo volteaste con toda tu sabiduría y astucia. ¡Y vamos ganando cómodamente!

Pero Nathan no estaba feliz. Ni los vítores que un coliseo repleto pudiesen brindar, podrían calmarle.

—A ver, bro… ¡Ganaste la batalla! ¿Qué te tiene con la cara larga? — Le preguntó su hermano Juan

—Ella no estaba lista…

Él se sentó en el banquillo, junto con Velvet, quien instintivamente quiso darle palmaditas en la espalda

—¿Cómo es eso de que no estaba lista? — Preguntó ésta, en un ánimo plenamente comprensivo. Todo el mundo prestó atención a lo que su capitán interino estaba por decir

—Esme es una casi total inexperta en el arte de combatir. Sabe usar un montón de ataques y tiene una ofensiva variada y bien pulida… pero depende casi en su totalidad de mantener la distancia con su oponente. No tiene la tolerancia necesaria al dolor como para equipararse a cualquiera de nosotros. También, ella usó Cambia Defensa en mí…

—¡¡Pero las Gothitelle no aprenden ese ataque!! — Exclamó Matt, interrumpiendo — ¡Eso sí es algo sorprendente!

—¡Sssshhhh! — Le recriminó Stella — No interrumpas a mi Nath.

—Continúa, borreguito — Le dijo Keith

—Cuando fui afectado por ese ataque, un simple raspón me dolió mucho más que los palmetazos sorpresas que Keith me da a veces… — Ante esa mención, el joven Camerupt solo rió por lo bajo, producto de la nostalgia. Nathan prosiguió con la explicación — Al poder sentir parte de lo que ella sintió, me quedó claro que Esmeralda no está acostumbrada al combate cuerpo a cuerpo, la cual es una zona que yo sí exploto a menudo. Y lo peor es… — Pequeña pausa para tomar aire — Aquel joven Garchomp tuvo que quitarse el disfraz para intentar que se retirase… y ella siguió luchando. Al final, él me agradeció el ser compasivo…

—No entiendo qué tiene todo eso de malo — Razonó Juan… — Si vamos arriba en el marcador y a la tal Esme le pateaste todo su real trase- —…pero luego entendió. — ¡Oh!

—¿Lo entiendes ahora? — Dijo el joven Ampharos a su hermano — ¡No puedo disfrutar de un combate si me siento como un bravucón! ¡Y no se me quita de la cabeza la posibilidad de que Esmeralda está siendo obligada a pelear en contra de su voluntad!

—Vaya… no lo había pensado de esa manera — Comentó Sazuke, para luego pensar… — Y yo emocionándome como siempre… ¿Le pasará lo mismo a Marcia?

Pero entonces, Sylvain decide acercarse a Nathan y decirle…

—No seas estúpido…

—¿¡Qué dijiste!? — Saltó Sazuke de repente, pero Velvet lo tomó de un brazo para decirle

—No iba dirigido a ti, cariño

—Oh… — Y el Zangoose se tranquilizó. Posteriormente todos dejaron que Sylvain explicase su punto de vista mientras éste se cruzaba de brazos de forma muy seria.

—Nathan, el problema contigo es que además de las habilidades que muchos veteranos del combate envidiarían, también tienes el corazón de una abuelita de la caridad.

—¿Eso fue un insulto o un halago? — Susurró Sazuke a su novia, la cual le respondió encogiéndose de hombros… o más bien de un hombro, puesto que aún tenía el izquierdo inmovilizado.

En tanto, Nathan solo ladeó su cabeza un poco, como diciéndole a su amigo “¿A dónde quieres llegar?”. Gesto el cual aquel joven Toxicroak entendió de inmediato.

—Este no es el momento para pensar en las circunstancias de cada victoria. Solo se trata de ganar a como dé lugar, usando todas nuestras habilidades…

En eso, Sylvain se da una pequeña pausa para tomar aire y apuntar al grupo de encapuchados

—¡Ellos! Nos trajeron hasta acá. ¡Ellos! Saben a qué se enfrentan. Nos han investigado… a su arcaica manera, claro está, mediante visiones. Interrumpieron nuestra línea de tiempo para sus fines desconocidos… ¿Y tú vienes y piensas que alguno de ellos no quiere pelear?

—Bueno, pues… — Es lo único que Nathan atinó a decir.

—Además, su magia no está libre de fallos. Piénsalo. Invocaron a Stella, quien no era considerada en los planes… y también a Velvet, quien como puedes notar, ¡Está lesionada! Y el hecho de que tu novia haya decidido pelear a nuestro lado no es un atuenante. ¡Es más bien un agravante de la situación! Dos errores no hacen un acierto, Nath. O más bien, son tres que ¡Tampoco! hacen un acierto… recuerda que nos quisieron invocar desde una fase más temprana todavía de nuestra línea temporal.

—¡Ay, ya me duele la cabeza! — Rezongó Keith, tomándose una de sus sienes — Esto de las líneas de tiempo es demasiado confuso

En una situación normal eso hubiese sido gracioso. Más los ánimos no estaban para reír, puesto que Sylvain logró recordarles los riesgos que implican. Entonces, Juan tomó la palabra.

—Bueno, lo que nuestro uniformado quiso decir, brother, es que pienses un poco menos en los problemas que puedan tener ellos… y te concentres más en nosotros

—¡Somos una familia! — Exclamó Matt — Una bastante disfuncional, pero una familia al fin y al cabo. Nath, enfócate en animar a quien sea que le toque combatir ahora.

—¡Hey! ¡Es verdad! — Suzanne llamó la atención de todos — ¡Haunter está a punto de decidir a los siguientes peleadores!


En efecto, el Pokémon de tipos Fantasma y Veneno ya estaba por detener sus bolitas de fuego color verdoso. Al fin se decidió…

Por el lado de los de aquella época, se iluminó el montón de heno con el yunque encima.

Y por el otro lado, las estrellas doradas sobre el fondo de color púrpura

—¡Mi turno! — Exclamó Stella, emocionada

—¡Pos a darle, cuñadita! — Dijo Juan, animándola — ¡Seguro que puedes con esto!

Ella avanzó hacia el cuadrilátero usando las escaleras. Pero Nathan la siguió y dijo

—Stella…

Inesperadamente la aludida se frenó y le soltó lo siguiente a su novio

—Nath, querido mío, ¿Tienes dudas acerca de mis capacidades para luchar? ¿O acaso crees que no lo estoy disfrutando?

—¡Claro que no estoy dudando de tu poder! Es solo que…

Pero la joven de raza Lopunny se dio media vuelta y le dio un “piquito” en los labios.

—Tranquilo, amor. Solo estaba bromeando… entiendo perfectamente tu preocupación por mí, pero hemos entrenado juntos. Sabes que puedo cuidarme bien y que estoy mentalmente preparada para esto.

Acto seguido, ella toma ambos brazos de Nathan y éste reciproca el gesto.

—¿No tienes miedo, amorcito?

—No voy a mentirte. El nivel de competencia aquí es alto y desconocemos totalmente las capacidades de nuestros rivales… pero tenemos que afrontarlos si queremos volver a nuestras vidas normales. ¡Y aún tenemos una competencia de coliseo qué ganar! — Esto último lo dijo con una gran sonrisa y guiñando el ojo

—¡Ten mucho cuidado y da tu mejor esfuerzo, linda! — Fue la arenga final que Nathan pudo soltar

—¡Cuenta con ello!

En cuanto ella volvió a concentrarse en la pelea que venía, mayúscula fue su sorpresa al ver a un hombretón muy musculoso, con cinco centímetros pasados los dos metros de altura, con piel de color avellana, vestido únicamente con unos shorts negros… y si bien él no tenía camisa, sí que tenía mucho, ¡Pero muchísimo pelo en pecho! Su barba de leñador daba la impresión de que conectaba con el pelo que cubría su caja torácica, aunque bastó para aquel hombretón el levantar la barbilla para refutar aquella loca teoría. Por lo demás, aquel tipo tenía un peinado afro de color café, al igual que el resto del “pelaje” que lo cubría, y del cual sobresalían unos enormes cuernos grises con franjas doradas.

Ese afro y esos cuernos tan llamativos podían solamente ser característicos de…

—¡Tremendo espécimen de Bouffalant! — Exactamente. El pensamiento de Stella acerca de la especie de PokéHumano de su rival era preciso.

—Oh, me ha tocado pelear contra una linda nenita — Habló aquel gigantón — Esta será una pelea condimentada con mucha azúcar morena, jejeje…

—¡¡Mierda!! ¿Por qué rayos no me tocó pelear contra ese bocachancla? — Pensó Nathan, tratando de aguantar el enojo y la frustración, mientras se le dibujaba una vena de color rojo en la frente — ¡Vaya que hubiese disfrutado de volarle la mitad de sus dientes! Ahora espero que Stella cuando menos le quiebre algunos huesos

—¡De acuerdo, muchachos! ¡Peleen limpio! — Anunció Argus — El quinto round comienza… ¡Ahora!


La lucha comenzó con aquel pesado hombretón intentando asestar un puñetazo a la linda cara de Stella, pero ésta se deslizó entre las piernas de su rival, para luego dar un barrido parecido al de un arte marcial para así hacer que éste caiga. Aun así, la fuerza impresa fue insuficiente para derribarle.

Entonces el tipo intentó caer de sentón encima de Stella, pero ésta esquivó rodando y se levantó de forma ágil, lanzando un buen…

—¡Rayo Carga!

El ataque de tipo Eléctrico impactó en aquel rival, pero su pelo en pecho lo absorbió como si nada. Cuando menos el Ataque Especial de Stella se incrementó, mas eso no borró su sorpresa

—¡Muy bien hecho, Jack! — Le animó Pablo. ¡Con que así se llamaba aquel machote de raza Bouffalant! — ¡Si ganas te invitaré unos tragos!

—¡A Jack le gusta eso! — La respuesta de aquel peleador fue prácticamente a los gritos. Acto seguido, usó su Golpe Roca en el piso para así sacar una loza resquebrajada del cuadrilátero, y así tomar un trozo de ésta para luego lanzarlo hacia Stella, quien pudo evitar casi todo el impacto… puesto que un borde de cerámica le hizo un pequeño corte en la mejilla.


—La técnica de Jack es estrafalaria — El comentario técnico de Matt no se hizo esperar — Parece un completo idiota, pero tiene sus trucos bajo sus inexistentes mangas.

—¡Si no fuera alcohólico y vistiera mejor sería el novio ideal! — Suzanne se tomó la libertad de emitir un comentario… nada técnico, eso sí.

—¡Hey! ¡Deberíamos alentar a Stella! — Velvet tenía un punto válido, puesto que… — ¡No es el momento de hablar de apariencias y musculatura!


—¿Musculatura? ¡Hey! ¡Buen plan! — Inesperadamente, Jack escuchó el regaño de Velvet y usó Corpulencia, aumentando su ya envidiable masa muscular. Pero eso también le hizo ganarse un Puño Mareo por parte de Stella, el cual si bien aturdió un poco a su objetivo, no lo movió ni un ápice

—¡Rayos! ¡Mejor me alejo! — Pensó Stella, a medida que tomaba distancia y usaba su Rayo Hielo, el cual Jack recibió, cubriéndose con los brazos

—¡Gracias! ¡Tenía un poco de calor! — Fue la respuesta de aquel velludo gigante. ¿Acaso habrá aprendido a usar Mofa?

—¡No te burlarás de mí! — Declaró la joven Lopunny, quien usó un ataque de Barrido para pegarle otra vez en la pierna a su contrincante.

No obstante, Jack estaba listo para eso

—¡Ahora conocerás a mi amiga, la señora Inversión!

Los dos brazos del grandulón se rodearon de un aura brillante de color rojizo. Con el izquierdo él tomó el brazo de Stella y la levantó a medida que le apretaba con aquella gran mano, mientras que con la derecha le dio unas buenas cuatro bofetadas seguidas para luego azotarla contra el piso.


—¡¡Aaaaah, caray!! ¡Pero qué buen agarre japonés de brazo! — Exclamó Keith, sorprendido — ¡Eso debe doler un montón!

—¡Gracias, capitán Obvio! — Le contestó Nathan, muy molesto, para luego re-enfocarse en la pelea — ¡¡Stella!! ¿Puedes continuar?


Argus estaba a punto de iniciar la cuenta, pero Stella se levantó de inmediato, sacudiéndose un poco el polvo.

—Eso dolió… ¡Pero no dejaré que me lo hagas de nuevo!

—¡Me diviertes, morena! ¡Crees tener una oportunidad contra el poderoso Jack! — El rival declaró.

—Debo encontrar otra forma de hacerle daño a ese gigante… podría engañarlo para que caiga fuera del cuadrilátero, pero lo veo difícil…

Sin previo aviso, Jack había usado su ataque de Ariete, el cual Stella pudo evitar saltando… y entonces decide caer rápidamente con su ataque de Bote… aunque termina por montar a aquel Pokéhumano medio búfalo

—¿Qué haces? — Preguntó él

—¡Solo me apego a lo que sé! — Respondió su rival, mientras se agarraba del cuello de su oponente — ¡Arre, toro!

Jack intentó moverse de manera brusca y golpear a Stella para quitársela de encima durante más de treinta segundos, mas no tenía resultados, puesto que ella siempre se las arreglaba para esquivar los puñetazos de manera acrobática, sin despegarse en lo más mínimo

—Eso ha sido un buen ejercicio. Buen trabajo, torito — Y para rematar, ella le dio un Dulce Beso en la mejilla, causando en el interior de Nathan una tormenta de celos


—¡Guácala de Rockruff! — Pensó el joven Ampharos, poniendo una cara típica de constipado — ¡Apuesto a que ni se baña el cabrón!


Ella se bajó de la espalda de Jack dando un salto y pegándole en la espalda con las dos piernas. No fue suficiente para dejarlo en el piso por mucho tiempo, pero sí que había conseguido infligirle confusión.

—Arroz con leche, me quiero casar… — Balbuceaba aquel Bouffalant

—¡Perfecto! ¡Ahora puedo echarlo con facilidad! — Se dijo Stella a sí misma, para luego usar Rayo Hielo en el piso del cuadrilátero. Eso había llamado la atención de Jack, quien se le lanzó a pegar un ataque de Pisotón, que a la final falló, debido a que Stella se hizo a un lado. Además, al pisar la superficie resbalosa, éste tropezó.

¡Era el momento idóneo para contraatacar!

—¡Aquí te voy! — Declaró la Lopunny, para tomar al grandulón de un brazo y una pierna y comenzar a darle algunas vueltas.


—¡Ah, carajo! ¡Esa Lopunny sabe usar Llave Circular! — Exclamó Fernando con una comprensible preocupación

—Ya perdió… — Comentó Aldonza por lo bajo


A la final Stella logró lanzar a su rival a la zona resbaladiza y él terminó deslizándose de panza como si fuese un Prinplup. Como no había final del camino, se terminó dando de hocico contra el pasto afuera del cuadrilátero. Y eso significaba que…

—¡¡Jack ha salido del cuadrilátero!! — Así es. Argus tenía el deber de anunciarlo — ¡La ganadora es la participante Stella!


—¡¡Síiiiiiii!! — Gritó la joven de tipo Normal, llena de felicidad, como si fuese una niña pequeña a la que le regalaron el hornito microondas más caro del mercado — ¡Lo conseguíiii!


Ella saltó hacia Nathan, quien la recibió con los brazos abiertos y cerró ese lindo abrazo


—¿Verdad que lo hice bien, querido? — Preguntó ella

—¿Bien? ¡Fue estupendo! ¡Te las ingeniaste para vencer a alguien que fácilmente cuadruplicaba tu masa muscular! Eres asombrosa, amor… — Él le dio un besito en la boca a su chica, pero luego se preocupó, puesto que vio sangrar la cortada de la mejilla de su chica — ¡¡Velvet!! ¿De casualidad tenemos gasa?

—¿Eh? — Stella no entendía del todo, pero pasó su mano por su mejilla cortada y vio un poco de su líquido vital. Afortunadamente eso no la asustó, así que atinó a calmar a Nathan

—Tranquilo, mi corderín… solo es una cortadita. Yo también estoy dispuesta a sangrar por el equipo, por si lo olvidabas

Eso último lo dijo con algo más de seriedad. El Ampharos no pudo evitar sentirse culpable mientras la bajaba de sus brazos

—Lo siento. Me estoy preocupando demasiado, ¿Verdad?

—¡Menuda novedad, Sherlock! — Se burló Juan por un rato — Deja que yo traje unos pañuelos desechables. Es todo lo que tenemos a mano ahora

Dicho esto, Juan secó la poca sangre que aún le chorreaba a Stella

—¡A la mierda las escuinclas que pasan en Facebook! ¡Esta sí es una mujer luchona, carnales!

Esa declaración levantó una respuesta sonora y afirmativa por parte de todos… vale decir, un “¡Sí!” generalizado.

—Si Stella se puede lucir así, no veo por qué yo no — Comentó Suzanne, y luego le habló al Haunter — ¡Vamos, fantasmita! ¡Gira esas lucecitas!

Primero que nada, Haunter quemó el cuadrito que tenía el yunque sobre el montón de paja… después, volvió a intentar decidir a los siguientes peleadores

—No deberías apresurarte, Suzanne — Le dijo Galanoth, rompiendo su característico silencio

—Tranquilo, lagartijo… sé lo que estoy haciendo — Le respondió ella con confianza


En tanto, Pablo daba una ojeada a la reacción del equipo que Nathan había “formado”. Entonces, comentó para sus adentros…

—Vaya, vaya… esos jóvenes realmente tienen espíritu de equipo. Nos están haciendo morder el polvo a pesar de estar en una desventaja informativa…

Y una sonrisa se esbozó en su rostro

—Creo que si me enfrento a cualquiera de ellos, deberé pelear al máximo de mis capacidades…


¿Cuáles serán las capacidades de las que Pablo está hablando? ¿Lo veremos peleando pronto? ¿Quiénes creen que serán los siguientes? ¡Descubran esto y mucho más en el siguiente episodio!

¡Esta historia continuará…!​

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Muchas gracias por su atención. Ya saben que si les gustó pueden dar click al botoncito de Me Gusta que anda por ahí abajo... y espero también comenten y critiquen de lo lindo :P

¡Hasta la próxima!

 

Nuevamente he demorado solamente 20 días en traerles la conti, jeje n__n. Como sea, espero que la disfruten a concho... ¡Ya tenemos 119 episodios acá! ¡WHOOOOO! \0O0/

Jajajajaja :L. Espero que estén bien, queridos lectores... se los quiere mucho :P

Ahora sí, al episodio

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—¡Estamos dominando, amigos! — Exclamó Sazuke con optimismo — ¡Ya quiero que me toque de nuevo para ratificarlo!

—¿Qué hablamos de comer ansias, Sazukito? — Le regañó Velvet, ante lo que su noviecito respondió de forma jocosa:

—Si ya saben cómo me pongo, ¿Para qué me invitan? ¡Jajajaja!

—Vaya pendejo… — Pensó Sylvain mientras ponía atención a Haunter — Pero qué se le va a hacer… quizás sí le toca a él de nuevo y le dan una paliza…

Entonces, el Pokémon de tipos Fantasma y Veneno detuvo sus fuegos en dos casillas distintas.

Del lado de los jovencitos de Black Spark, nuevamente era el turno de la pócima

Y del otro lado… el pistolón con el martillo

—Y no se me hizo el milagrito… — Siguió hablando para sus adentros aquel Toxicroak policial

—¡Qué suerte tienen algunos! — Exclamó Sazuke, sin sonar molesto, para luego hablar a su amigo Jolteon — ¿Cómo te sientes, Matt?

Aquel joven rubio de tipo Eléctrico se encontraba elongando los músculos, a modo de calentamiento

—Pues por lo menos no estoy adolorido. Lo malo es que se me han acabado las pócimas…

—¡Anda, carnal! Ya lo dijo Nath, que la batalla se define por habilidades y no tanto por otros factores

—Él estaba hablando de Esme y su habilidad para cambiar los atributos… no de esto.

—¿¡Y cuál es la diferencia!? ¡Anda y pelea!

—Ten cuidado — Le advirtió Suzanne — Nadie sabe a ciencia cierta a qué nos enfrentamos. Un martillo y un arma de fuego son un símbolo de herrería. Quizás es un viejo como Argus, que tiene incontable experiencia en batalla

—Lo tendré. Lo prometo

Matt avanzó al cuadrilátero por segunda vez. Si algo sabía él es que su oponente estaría más fresco que él. Pelear a distancia y aprovechar su velocidad sonaba como un buen plan.

Sus cavilaciones, sin embargo, se verían cortadas cuando vio que la capucha anaranjada de su oponente… ¡Comenzó a incendiarse!

—¿¡Pero qué carajos!? — El Jolteon no pudo evitar soltar aquella palabra altisonante al ver que solamente la capucha se quemó y que no dejó rastros… ¡Y que su portador estaba ileso!

Para más remate, el oponente tenía un look muy… particular cuando menos.

¿Por dónde comenzar? El tipo al frente de Matt medía 167 centímetros y no solo aparentaba una complexión maciza y compacta… ¡Aquel rival era todo regordete y granudo!

Y por si eso fuera poco, usaba una armadura de apariencia muy extraña y un casco a la medida exacta de su cabeza, con tres picos juntos. Todo era de color rojo con ciertos toques de óxido, muy a lo Steampunk. La armadura en sí tenía una especie de generador con forma de mochila en su espalda, con todo y correas. Además uno de los brazos estaba cubierto por más metal que el otro, dando más apariencia todavía de que el tipo era torpísimo.

—Jejeje… — Y su voz semi-gangosa tampoco ayudaba en ese aspecto — ¡Qué bueno que mi armadura es ignífuga! Aunque no sé si resista los rayos todavía… pero será la oportunidad perfecta para probar.

—Eeeem… — A Matt se le dibujó una gotota de sudor en la frente, mientras pensaba — Esto va a ser interesante, cuando menos…


—¡Jajajajaja! — Sazuke no pudo evitar reírse — ¡Pero si es el peor cosplay que he visto jamás en mi corta vida! ¡Jojojojojojo!

—¡Cállate, idiota! ¡Y ahora sí va dirigido a ti, por si no te has fijado! — Sylvain le respondió, visiblemente mosqueado. — ¡No sabes las capacidades que podría tener ese tipo!

—Sylvain… es un milagro que no arruines mi humor. — Respondió éste, aguantándose más risas, sin mucho éxito — Jajaja… no sé si es un Hariyama o un Wailord… ¡Pero sé que Matt lo tiene chupao!

—Vaya que te falta por aprender… — Galanoth musitó en respuesta

—¡Jejejeje! Tampoco me aguas la fiesta tú…


Argus ya había exclamado para que comenzara el sexto round. Matt aprovechó para lanzar un ataque de Trueno, ante el cual su oponente solo pudo decir…

—¡Activar pararrayos!


Y Nathan lo había escuchado

—¿Otro Pararrayos? Bueno, espero que cuando menos su máquina tenga algún desperfecto…

Pero no. El Pararrayos absorbió toda la electricidad, y aquel inventor no aparentaba haber recibido ningún daño a pesar de poner los ojos chinos… por si acaso.

—Pues hay que admitir que ese tipo hizo un buen trabajo — Pensó el Ampharos — Si me termino enfrentando a él, voy a tener serios problemas.


Cuando menos, Matt se había tomado la situación de manera madura…

—Bueno, otro más que es inmune a la electricidad… ¡Habrá que acercarse!

Y dicho esto, el joven zorro picudo decidió usar Agilidad para ver si podía confundir a su rival. Pero no contaba con que éste tenía todo bajo control.

Entonces, su mochila aparentó sacar un par de alas rojas, las cuales impulsaron a aquel gordo directo hacia su contrincante, mientras exclamaba

—¡Cabeza Hierro!


Todo el equipo Black Spark exclamó sorprendido, cuando vieron a aquel aparentemente indigno oponente cabecear a Matt con todo su ímpetu, prácticamente atropellándolo… ¡Y casi tirándolo del cuadrilátero! El “réferi” le pidió a aquel rollizo participante que se mantuviera alejado; orden la cual obedeció sin chistar y caminando lentamente hacia atrás.


—¡¡Lo sabía!! — Exclamó Sylvain — ¡Nunca hay que subestimar a ningún tipo que use máquinas, por muy primitivas que estas sean! ¡Ni aunque tenga cuarenta kilos de sobra!

—Aaaaah… ¡¿P-p-pero qué mierda pasó aquí?! — Sazuke tenía la mandíbula inferior pegada al piso, producto de la impresión — Si se veía tan abultadamente inofensivo como un peluche…

—Viejo, eso debe doler… — Comentó Keith de repente — ¿Creen que ese tipo me construiría algo bonito cuando todo esto termine?

—¡¡Es el :cemzoorado: enemigo, maldita sea!! — Le reprendió el Toxicroak a los gritos — ¡Lo único que construirá para nosotros es un dolor inimaginable!

—¡Matt! ¡Levántate! — Stella decidió animarlo en lugar de participar de la conversación — ¡No te dejes!


Por fortuna, el Jolteon consiguió levantarse cuando la cuenta de protección iba en siete, aunque con un dolor de cabeza del demonio

—¡Aaah! ¡Eso me pilló por sorpresa! — Se dijo a sí mismo, frustrado, el científico del presente — ¡No puede terminar así!

—¡A pelear, señores! — Anunció Argus

—¡Pin Misil! — Ahora la estrategia de Matt era la de atacar a distancia pero con otros métodos

—No servirá — Declaró el rival con voz queda, mientras esquivaba una lluvia de pinchos de manera increíblemente ágil. Por fortuna, Matt ya no se veía tan descolocado al ver eso, lo que le permitió esquivar un ataque de Cañón Flash por parte de aquel robusto contendiente.

—¡Maldición! — Se quejó Matt para sus adentros — ¡Ya no tengo más pócimas para recuperar salud! Solo me queda seguir atacando con lo que pueda…

El Jolteon disparó su Rayo Carga para intentar, aunque fuese, incrementar su potencia de Ataque Especial. Todo mientras intentaba moverse por el cuadrilátero y mantener distancia.

Lamentablemente, ese oponente lo tenía todo bajo control, y de su mochila lanzó un ataque llamado

—¡Bombas Imán!

Unos seis pequeños misiles con forma de magnetos fueron capaces de absorber todo el Rayo Carga de Matt y después viajaron hacia él.


—¡¡Cuidado!! — Le gritó Sazuke


Jolteon hizo caso e intentó esquivar… pero éstas le dieron de todas maneras como si fueran misiles teledirigidos, causándoles un dolor intenso en un costado.

Y para rematar, el de tipo Eléctrico no vio un pequeño martillo volando hacia su cabeza, el cual le dio en toda la frente, noqueándolo de una buena vez


—¡Pero qué buena puntería tiene ese gordo! — Declaró Juan, sorprendido

—Me tomó un tiempo descubrir su raza PokéHumana — Continuó Galanoth, sin mostrar ninguna expresión facial — Pero está claro que el tipo es un Scizor. Y uno muy bien entrenado a pesar de su físico nada agraciado…

—¡Será buen peleador pero seguro que la higiene no es una de sus prioridades! Asquito… — Sentenció Suzanne finalmente


Claro que aún faltaba hacer oficial el final de este round

—¡El participante Matt ya no puede pelear! — Argus declaró con una voz firme — ¡El ganador de este round es Irwin!

—Con que Irwin, eh… — Pensó Nathan mientras se subía al cuadrilátero para llevarse a su caído amigo, quien tenía un chipote de un tamaño ligeramente menor al de un PokéHuevo, en su cabeza — Realmente sabe pelear. Nos ha sorprendido a todos…

—¡Nunca subestimes a un herrero! — Habló aquel Scizor con una voz triunfante — ¡Años de estudio y trabajo con metal ardiente me han hecho quién soy!

—Y también una dieta rica en masas, carnes rojas y tocineta… — Siguió pensando el joven Ampharos, mientras se retiraba.


El ícono de la botellita alquímica en el sector de los jóvenes de Black Spark se incendió, causando que a Velvet le volvieran los escalofríos.


—Nunca me deja de perturbar ese Haunter…

—No tiene caso el asustarnos ahora — Le aconsejó Suzanne — Debemos tratar de acostumbrarnos lo mejor posible a esto.

—¡Es cierto! — Continuó Sazuke — No me lo van a creer, pero ahora estoy más emocionado que nunca.

—¿Por qué, Sazukito? — Le preguntó su novia

—¡Pues porque Aldonza no es la única luchadora capaz que tienen! Ya me parecía raro que Matt, Stella y Nathan les pasasen por encima a sus rivales sin mucha dificultad, pero ahora sé que debo concentrarme. Si Irwin es tan competente a pesar de parecer inofensivo, entonces tendremos que usar todo nuestro poder para salir de ésta.

—Y espero que tengan mejor suerte que Matt o que yo… — Añadió Keith al último — Viejo, estos espectáculos no se ven todos los días.

—Se lo están tomando todo muy a la ligera — Les dijo Sylvain, quien estaba por soltarles una monserga a Keith y Sazuke, pero…

—¡Hey! ¡Que Haunter volvió a barajar sus fueguitos! — Soltó Suzanne de repente, acallando a todos y apuntando al Pokémon de tipos Fantasma y Veneno.

Todos vieron cómo danzaban esas dos bolas de fuego de colores parecidos al verde acuamarina. Éstas giraron… giraron… y perdieron velocidad hasta detenerse una vez más

Del lado de los de la época pasada se había iluminado el tridente con el dragón

Y del lado de los jovencitos… la palmera con lentes de sol.

—¿Una Palmera con lentes de sol? — Se preguntó Sazuke — ¿A quién corresponde?

—¡Hermano, te toca! — Se escuchó a Nathan hablarle a su hermano Juan

—¡Ya era hora, mano! — Declaró el joven Flygon — La señorita Aldonza no la tendrá fácil contra mí

—Bueno, ni modos — Sazuke sonó aparentemente decepcionado, mas decidió animar al joven de tipo Dragón — ¡Ve allá y pulverízala!


En el lado opuesto del cuadrilátero, Aldonza recibía un par de palmaditas en el hombro por parte de sus compañeros

—¡Adelante, maestra! — Le dijo Marcia — ¡Usted puede!

—No parece una amenaza — Dijo Fernando al verlo subir al ring — Pero ya sabes lo engañosos que pueden ser estos chavales

—Descuiden, chicos. Tomaré todas las precauciones necesarias.

—¡Ve por ellos, Aldonza! ¡Vamos! — La animó Pablo finalmente, al ver que ésta subió de un salto al cuadrilátero en lugar de usar las escalerillas.

Al llegar ahí, la mujer Gorebyss miró fijamente a Juan, con intención de analizarlo. A Juan no pareció importarle eso en lo absoluto. Él solo respiró hondo y dijo

—Guapa, si no vas a decirme nada, mejor será que peleemos de una vez

El árbitro estaba de acuerdo con Juan, así que dio el inicio oficial al round. Aldonza intentó lanzar su Rayo de Hielo de inmediato, pero Juan puso pecho a tierra y lanzó su Dragoaliento al estómago de su rival. Ésta se resintió un poco pero no cayó, ante lo que Juan declaró

—No te andas con rodeos, ¿Verdad?

—Para nada, mi estimado — Respondió la aludida, y comenzó a invocar un Torbellino de agua que iba hacia su contrincante, pero éste esquivó sin problemas.

Juan intentó contraatacar con Dragoaliento una vez más, pero Aldonza lo esquivó e intentó lanzarle su tridente, el cual falló en un inicio…


—¡No olvides que el tridente puede regresar hacia ti! — Le avisó Nathan a su hermano, ¡Y justo a tiempo! ¡Puesto que eso permitió a Juan desviar el arma con su cola!


—¡Gracias, bro! — Respondió el joven Flygon a su hermano con una seña de pulgar arriba, para luego intentar atacar en el cuerpo a cuerpo usando ¡Doragon C…! Digo, Garra Dragón.

Desafortunadamente para Aldonza, ella recibió un par de zarpazos por parte de Juan. Rápidamente ella retrocedió y volvió a “llamar” a su Tridente con telekinesia, para luego lamerlo.

—Espera, ¿Es eso baba tóxica? — Juan usó su aguda visión para notar que las puntas del arma de su oponente se teñían de púrpura

—¡No escaparás! — Ahora Aldonza intentó usar su Rayo Confuso. Juan intentó evitarlo tapándose los ojos con un brazo. Eso sí, el impacto le obligó a retroceder un poco, y al descubrirse los orbes, éste comenzó a tambalear.


—¡Oh, no! — Exclamó Keith de repente — ¡Lo han confundido! ¡Y están a punto de envenenarle!

—¡Hazte a un lado, Juan! — Le gritó Stella


—¡Ahora verás! ¡Siente mi Puya súper Nociva!

La mujer de tipo Agua intentó apuñalar a Juan como si fuera cualquier tipo intentando perforar un bistec de manera civilizada para cortarle. Pero con lo que no contaba ella, era que Juan solo fingía estar confundido para poder atrapar el tridente con ambas manos. Esa astuta acción terminaría por descolocarla

—¡¡No puede ser!!

—¡Lo siento, pero no soy un chuletón para que me punces! — Mientras Juan respondía a su manera, él usó su cola para pegarle tres puñaladas de Puya Nociva, y luego la alejó de golpe con un Lanzallamas. El plan de Juan era ahora ver si podía quemarla o envenenarla… y un vistazo a la cara de la mujer Gorebyss fue suficiente para ver que había logrado lo segundo.


—¡¡Excelente, Juan!! ¡Lograste engañarla! — Le felicitó su hermano Nathan

—¡Uff! Vaya que nos asustó… — Dijo su amigo Camerupt en voz baja


Acto seguido, Juan intentó volverá a la ofensiva, pero Aldonza lanzó un Psicorrayo para defenderse y le dio en toda la cara a su rival. Aun así, ella sentía que no podría resistir mucho más debido al envenenamiento


—¡Hala, Aldoncita! — Exclamó Fernando — ¡Tú puedes con ese gilipuertas!

—¡No se rinda, maestra! — Marcia también la animó.


La mujer de raza de criatura del fondo de Hoenn intentó atacar con su lanza, a punta de movimientos veloces… no obstante, Juan pudo esquivar y luego emprender vuelo. Ahí Aldonza intentó usar nuevamente Rayo Hielo, pero Juan maniobró hábilmente para evitar todo lo que se le venía.

—¡Esto se acaba ahora! — Declaró el Flygon, lanzándose hacia su rival — ¡Ataque de Alas!

Aunque su rival intentó esquivar, el cuerpo no le respondió a tiempo, y terminó llevándose un buen golpe en el abdomen… la zona que no estaba cubierta por la armadura.

—¡Atrás! ¡Voy a contar!


El réferi detuvo la pelea tal como se supone que debe hacerse. Juan solo hizo caso y jadeó un poco para recuperar el aire.

—¡Ufff! La señorita Aldonza realmente me ha exigido muchísimo — Pensó él — Espero que no se levante…

La mujer, en tanto, apoyándose en su arma alargada, intentó ponerse de pie… y parecía lograrlo cuando la cuenta iba en seis. Lamentablemente se desmayó a causa del veneno que corría por su torrente sanguíneo

—¡¡Aldonza no puede continuar!! ¡El ganador de este Round es el participante Juan!

Éste, al ver al réferi declararlo ganador, solo atinó a rascarse la nuca por unos segundos, declarando en voz baja…

—Creo que la suerte me acompañó esta vez.

Juan solo caminó hacia donde estaba el resto de su equipo dispuesto a felicitarle

—¡Estuviste increíble! — Exclamó Sazuke — Si alguien hubiera traido una cámara filmadora, lo podríamos ver de nuevo. ¡La manera en que contrarrestaste ese intento de envenenamiento por parte de doña Aldonza fue asombrosa!

—Hasta yo debo aplaudir eso, Juan — Sylvain continuó — Venciste a un rival muy duro en verdad

—Gracias, chicos, pero si no la hubiese visto pelear antes, seguramente no corría con la misma suerte — Admitió humildemente el vencedor de aquella contienda

Claro que había una personita a la que no le gustó nada lo acontecido.

—¡No puedo creer que alguien sin clase haya conseguido vencer a aquella mujer guerrera! — Pensó Suzanne sin revelarle a nadie — ¡Definitivamente Juan tiene un número exagerado de santos en la corte!

—Suzanne, ¿No vas a decir nada? — Le convino Velvet, llamando su atención

—Eeeem… — A la Beautifly no le quedó otra alternativa que disimular — ¡Buen trabajo, Juanito! ¡Espero repitas contra otro de esos rivales pronto!

—Créeme que lo haré con gusto, nena — El aludido le guiñó el ojo

—Hemos vuelto a ampliar la ventaja. Sigamos disfrutando de esto — Comunicó Nathan a todos los demás.


Mientras tanto, con el equipo que metió a los jovencitos en este embrollo… Aldonza fue auxiliada fuera del cuadrilátero por Pablo y Fernando. Si bien los ánimos no eran los mejores, al menos se lo tomaban con relativa calma…

—Mierda, mierda, mierda, mierda… — …bueno, todos excepto Jack, quien acababa de darse cuenta hace muy poco que una chica joven y delgada como Stella logró sacarlo del ring, y estaba sentado mirando hacia otro lado… y a su lado estaba Irwin, revisando una de sus máquinas estrafalarias… para ser más precisos, la que usaba como mochila

—Tranquilízate, compadre — Le decía el corpulento Scizor mientras alternaba periódicamente entre revisar su armatoste y darle palmaditas en el hombro.

—¡Maestra! — Marcia, quien en ese entonces estaba vigilando a una todavía inconsciente Esmeralda, vio cómo tenían que ayudarle a moverse. Lo primero que Aldonza hizo fue toser, para luego decir

—Descuida, cariño… e-estoy bien.

—¡Ese Flygon te dejó una cortada en el vientre muy fea! — Declaró Pablo — No puedo creer que no estés sangrando.

—Ese Ataque de Ala se centró en sacarme el aire… — Respondió la mujer Gorebyss, para luego toser de nuevo — Ese chico es muy astuto al saber dónde golpear

—¡Por estas cosas es que te digo que uses armadura que cubra tu abdomen! — Le dijo Fernando, sonando muy preocupado

—Bueno, chicos… ¿Cómo lo están llevando? — Argus llegó y tomó la palabra con esa simple pregunta — ¿Se esperaban este resultado?

—¡Ni en mis más locas pesadillas creí que estaríamos dos a cinco abajo, joder! — Respondió el hombre mitad Machamp — ¡De no ser por Aldoncita e Irwin estaríamos peor!

—¿No querían un desafío, acaso?

Esta vez habló una de las dos figuras que todavía traían capucha. En específico, aquel que tenía el cetro metálico en su mano derecha.

—¿Se arrepienten de que haya usado mi magia para traer peleadores de un futuro demasiado distante? Casi ochocientos años no pasan en vano y lo saben. Algo similar pasó cuando traje guerreros del siglo cinco, pero al revés.

—O sea que… con cada generación tienen mejores técnicas, sin contar los aparatos extraños — Dedujo Marcia

—Correcto.

—Cuando trajiste a los del siglo diecisiete también estuvimos a punto de perder. Y gracias a ellos pude mejorar un poco mi traje de batalla — Comentó Irwin

—Es una buena anécdota — Añadió el viejo Dragonite — Pero por ahora deberíamos plantearnos en descansar por un día para replantearnos el cómo dar vuelta esta situación… y encontrar un sitio más cómodo para que Esmeralda pueda dormir

Todos de miraron entre ellos por un breve instante y manteniendo el silencio. No obstante, la otra figura encapuchada protestó.

—¡Esperen! ¡No me voy a ir de aquí sin haber peleado!

—¿Estás segura? — Le dijo Pablo — ¿No deberíamos preocuparnos más por Esme?

—Entiendo que tengas como prioridad la salud física de Esme… ¡Pero por su salud emocional quiero dedicarle una victoria antes de irnos! Sé que seguiríamos abajo en el marcador y que podría incluso perder. ¡Y aun así quiero intentarlo!

Pablo miró a sus demás compañeros por un rato y luego de intentar leer sus pensamientos, decidió…

—Confiamos en ti.

—Entonces que así sea.

Argus sigilosamente llamó a su Haunter para susurrarle un par de instrucciones y darle también unos bollos.

—Buen muchacho. Ahora a decidir el último round del día, porque está por oscurecer…

Y así, el Pokémon gaseoso subió de nuevo a su posición y comenzó a batir sus fueguitos.


—¡Haunter ya va a decidir de nuevo! — Dijo Keith para alertar a los demás miembros de su equipo

—Que sea yo, que sea yo… — Comenzó a decirse Sazuke para sus adentros

—Hmmm… se está poniendo el sol — Comentó Galanoth en voz baja

—Tranquilo, que como dice cierta canción, “Yo no le temo a la oscuridad” — Sylvain le contestó finalmente.


Los equipos siguen con ganas de camorra. El sol está por ponerse y los de Black Spark aún tienen a siete de sus miembros en condiciones de pelea. ¿Qué ocurrirá en el siguiente round? ¿Se confiarán nuestros jóvenes héroes? ¡Descúbranlo todo en el siguiente episodio!

¡Esta historia continuará…!​

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Y ya lo saben, que cualquier comentario o crítica la pueden dejar abajito en la caja de comentarios :L. ¡DUH! xD

Nos vemos en otra ocasión n__n/