Microrrelato Oscuridad

Para la actividad ¡Vamos a pensar!
Tema: Taparse con una manta.
Palabras: 376 + Título.
Título: Oscuridad
Espero que os guste aunque no estoy muy orgullosa...

Corrí, corrí, hasta que mis piernas no pudieron más, hasta que mi respiración dijo basta. Entonces me deje caer, lentamente. Sentí la hierba húmeda acariciándome el rostro, una suave caricia. Mi respiración era agitada, sentía que el corazón se me saldría del pecho. No podía más, no podía mover mi cuerpo y lo único que hice fue llorar. Miles de lágrimas cristalinas salían ferozmente de mis verdosos ojos. Esos ojos que momentos atrás transmitían una felicidad infinita. Pero esa felicidad se acabó en un solo instante, al ver esa escena. Mi corazón se paró y sentí que caía en un pozo negro sin fin. Y solo podía correr, alejarme de todo eso.
Mire al cielo oscuro, las estrellas brillaban con intensidad. La soledad del bosque me calmo. La noche hizo de cuna y el susurro del viento de nana. Una voz ronca me despertó, la voz de un hombre. Me cogió en brazos, al recordar todo lo que había pasado volví a llorar. El hombre me acaricio la mejilla mientras me decía que ya había acabado, que estaba a salvo. Al secarme los ojos puede ver que el hombre que me había encontrado llevaba puesto el uniforme de la policía. Me llevo con sus compañeros, a cuestas. Me sentó en el asiento del copiloto y se arrodillo para quedar a mi altura.
-Sabes lo que te voy a preguntar, ¿no?-Me pregunto. Asentí .Lo sabía pero no quería decirlo, no quería revivir otra vez esa escena. No dije nada, me quede mirando el suelo sin atreverme a mirarle a los ojos. Su mirada penetrante me ponía nerviosa.
-Sé que te duele, pero sabes que debes decírmelo y lo siento. No quiero que sufras más.-Por cada palabra que decía una lágrima descendía por mi pálida mejilla.
-Fue…-no podía pensar con claridad, no me salían las palabras-Mi padre la mato.
Al acabar la frase mi llanto aumento, nunca había llorado de esa manera. El policía me dio una manta y se fue para decírselo a sus compañeros. Me tape con ella. Intentando alejarme de esa realidad que me estaba matando por dentro. Me acurruque en el asiento debajo de esa manta. Esa manta que a partir de ahora sería la encargada de protegerme porque mi madre ya no estaba.