Boku no Hero Academia Orange Caramel.

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Personajes: Bakugou Katsuki/Izuku Midoriya.

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Capítulo 01.
Bubble Bath.

Lo sabía, muy en el fondo; jamás quiso verlo de esa forma, pero decir que le había llegado de sorpresa… era mentir. Cuando le había dicho a sus amigos más cercanos que había comenzado una relación con Bakugou Katsuki todos le habían dicho lo mismo, casi en coro: no van a durar.

Y muy en el fondo, Deku sabía que así era.

No sería por falta de amor, los sentimientos de ambos eran más que fuertes, pero sí que serían por la falta de todo lo demás que engloba una relación sana.

El peliverde se sumergió en la bañera, dejando que todas las burbujas salieran volando y se sintió relajado; si lo pensaba a fondo, hacia unos días se encontraba en ese mismo baño, con las mismas sales y todas esas burbujas, pero con los brazos del rubio a su alrededor. Pero se había prometido a sí mismo no sufrir, no cuando esperaba que la relación terminara en cualquier momento.

¿Acaso lo habrá manifestado?

Tonterías. Era obvio lo que le esperaba. Lo sabía y aún así quiso hacerlo.

Sumergió la mitad de su rostro, con la nariz apenas rosando el agua; lo suficiente para oler la lavanda de las sales de baño pero no tanto como para aspirar el agua. Cerro los ojos y entonces la puerta del baño se abrió y todos sus pensamientos volaron lejos.

—No le pusiste seguro a la puerta.

Fue lo único que pudo decir. Deku se acomodó en la bañera, dejando su torso desnudo al aire libre y le sonrió, no lo podía evitar. Katsuki le miraba con esa superioridad con la que miraba a todos, no era tan especial si lo pensaba bien; el rubio soltó un suspiro, no vivían juntos, pero era casi como si lo hicieran, así que era normal imaginar que el rubio iría ahí por alguna de sus cosas, pero no esperaba que fuese tan pronto. Habían terminado ayer.

— ¿Acaso no piensas invitarme a entrar, idiota?

El peli verde soltó una pequeña risa mientras se movía, incómodo, dentro de la bañera; el agua seguía tibia.

—No pensé que necesitaras invitación.

El rubio tan solo se rió y se acercó para besar con fuerza y posesividad al contrario, un poco más y terminaba dentro de la ducha con la ropa empapada, pero no fue así. Ambos supieron cuando detenerse. Después de media hora dentro de la bañera, Izuku salió de esta, envuelto en una toalla solo para mirar por la ventana al rubio alejarse.

Sus amigos no lo sabían, pero esta era la quinta vez que terminaban en el año que llevaban juntos; el peliverde no estaba feliz con todo eso, pero se había acostumbrado, Katsuki siempre había sido de ese modo y no iba a cambiar.

Tan hermoso y mágico como un baño de burbujas, te llena de felicidad mientras esta recién hecha y te termina por arruinar si pasas mucho tiempo en ella; frío, piel arrugada y totalmente hecho mierda.

Así era su relación con Bakugou Katsuki.