Fandom: Naruto Título: With you (Contigo) Pareja: Sasuke & Ino. Summary: Nunca se había sentido tan patética en su vida. Diablos, ni siquiera el mismísimo Sasuke Uchiha podía, en sus malos momentos, hacerla tan indefensa como lo era ahora; todo por una estúpida superstición. Advertencias: Quizás un poco de OoC en Sasuke; sin embargo, creo que todos los hombres en su posición (sin excepción) terminan así en esas circunstancias. Tipo: One-shot. Género: Romance/Humor (Lo de siempre xD) ¡With you! Mis dientes comenzaron a castañear alarmantemente, me removí en la cama incomoda por el creciente helaje que se colaba por debajo de las cobijas. ¡¿Dónde diablos estaba Sasuke cuando se le necesitaba?! Me negaba a abrir los ojos y mis piernas se rehusaban a moverse de su lugar en busca del cuerpo que debería estar dándome calor. —Sasuke…— llamé, esperando escuchar su respuesta; pero esta nunca llego. Fruncí el entrecejo, ¿estaba jugando conmigo? En esta ocasión, teniendo el estímulo de la ira, me gire hacia mi derecha y palpe con diligencia el espacio donde debía descansar Sasuke; pero su sitio estaba vacío. Como acto reflejo, me senté sobre el colchón restregando mis ojos y bostezando. Luego de eso, observe consternada el lugar que debía estar ocupando Sasuke y seguidamente vire mis ojos hacia la salida de la habitación. ¿Adónde había ido? No me considero una persona asustadiza; pero joder, son justamente las tres de la mañana (*). Además, dicen que cuando un espíritu está cerca de ti sientes bastante frío y tú cuerpo se estremece… Justo como hace un momento. Respire profundo y volví a echarme sobre la cama, tratando de pensar hasta en que sería el almuerzo del día siguiente; mi mente tenía que alejarse de todo indicio de miedo. Tic. Ese sonido funciono como un resorte. Mi cuerpo se levantó del colchón como movido por una fuerza invisible; de nuevo, sentí el frío colarse por debajo de mis cobijas, precisamente por debajo de mis pies. Seguidamente, el aire helado se extendió por todo mi cuerpo; como si hubieran levantado las cobijas desde mis pies hasta la parte que cubre mi vientre. —¿Sasuke? Pensé entonces, que si no respondía a este llamado era capaz de salir de la cama corriendo y gritando como una desesperada. Pero luego, ese bochornoso pensamiento fue reemplazado por la imagen del rostro arrogante de Sasuke y sus ojos oscuros mirándome con burla, mientras susurraba: “¿Me extrañaste?”. ¡Nunca! ¡Ino Yamanaka jamás se comportaba como una mujer débil! Me niego a ser derrotada por un ser inanimado y sin vida aparente; pero sobre todo, a que este momento quede para siempre en las memorias del archivo familiar. Ridículos como el que iba a protagonizar jamás seria eliminado de la memoria de mi familia; además, Sasuke se encargaría de recordármelo en cada oportunidad. Volví a respirar profundamente, ya estaba convencida de no poder dormir esa noche; mi vista volvió a la entrada de la habitación y mis manos se acariciaban nerviosas. Por lo visto, Sasuke no tenía intención de volver a la cama. Suspire, mientras sacaba mis piernas de las cobijas y palpaba con mis pies el piso en busca de mis chancletas. No volvería a la habitación sin Sasuke; no era que tuviese miedo, solo que hacía mucho frio y necesitaba calor humano. Cuando me levante de la cama, sentí de lleno el cambio de temperatura; si sentía frio debajo de las cobijas, fuera de ellas era como caminar desnuda por la Antártida. Llegue hasta el perchero rápidamente y descolgué el primer saco que se atravesó por el camino. Cuando me lo puse, el aroma masculino de Sasuke lleno mis narices. Nada mejor para superar el miedo que la esencia de Sasuke conmigo. Camine con pasos cortos hasta la puerta de la habitación y la abrí rápidamente, no podía titubear. Di un paso fuera y camine por el pasillo, forzando a mis ojos ver a través de la oscuridad hasta dar con el objetivo. Cuando una puerta que acababa de pasar tranquilamente se descorrió de improvisto, un pequeño gritillo que no pude contener salió de mi garganta. Sin darme cuenta había dado el salto más inhumano de mi vida, mientras mi cuerpo se ponía en señal de defensa. —¿Ino?— la voz inconfundible de Sasuke lleno el ambiente. Podía ver claramente el brillo en sus ojos negros y aunque no estaba segura, podía imaginar la sonrisa que debía estar atravesando su rostro. Infinita vergüenza. Me sentí tan patética, que termine haciendo la cosa más impensable del mundo; me puse a llorar de pura indignación. —¿Ah?— articuló Sasuke, plenamente confundido mientras daba un paso y se acercaba a mí. Sentí su mano helada sobre mi mejilla y otra sobre mi vientre. —¿Ahora porque lloras?— preguntó, consternado y con un tinte de cansancio en su voz. ¿Qué decir? Hace unos días cuando llore viendo el trágico desenlace de mi novela de las cuatro, y por vergüenza a decirle la verdad, le había dicho que lloraba porque me sentí mal de repente; ocasionando que este se pusiera, de su peculiar manera, histérico e insistente con el tema de ir a un médico. Y precisamente ayer había llorado de felicidad mientras lo miraba trabajar. —Hace frío— murmure, sin saber porque decía aquello precisamente. —¿Lloras por el clima?— preguntó Sasuke, tratando con demasiado trabajo mantenerse sereno. Oír sus palabras sólo me indujo más al llanto; seguramente lo estaba hartando con mi infantil comportamiento. —Vamos a la cama— dijo, intentando mostrarse cariñoso sin lograrlo. De todas formas, Sasuke no se destacaba precisamente por sus dulces palabras. Se puso detrás de mí y me acobijo entre sus brazos, mientras me empujaba con su cuerpo obligándome a dar pequeños pasos. Poco a poco el frío fue desapareciendo y para cuando volvimos a la habitación, ya no había rastros del helaje que sentía minutos antes. Sasuke me acompaño hasta mi lado de la cama y me ayudo a acostar, para luego cubrirme con las cobijas; aunque estuviese teniendo un gesto tierno y amoroso conmigo, su rostro se mantenía estoico. Sonreí y vi la satisfacción en su rostro al ver que ya no seguía sollozando. Cuando él ya se hubo acomodado en su lado de la cama y cerrado sus ojos, me quede mirándole detenidamente mientras sonreía. Me moví sobre la cama hasta llegar a su lado y pasar un brazo por su torso; él se removió acomodándose y luego sentí sus manos jugueteando con mi cabello rubio. Eso era algo a lo que Sasuke Uchiha no podía negarse. Amaba que mi cabello estuviese largo y suelto; pero por sobre todo, adoraba enredármelo. Cosa que no me gustaba tanto, pero que le dejaba hacer. —Sasuke. —Hmp— respondió él, al borde del sueño. —Perdón por mis constantes cambios de humor— dije, sintiéndome culpable de su permanente estado de estrés; era una primeriza en eso de los embarazos y de verdad nunca en mi vida pensé sentirme tan vulnerable como lo era ahora. Pero gracias a Dios, tenía a Sasuke para mí. —Sólo no me asustes— apuntó, con su voz tranquila de siempre. El día del supuesto “malestar” que me había orillado al llanto parecía no querer desaparecer de su memoria. Sonreí acurrucándome más a su lado, feliz. —Hace frío cuando no estás— murmure, cerrando mis ojos y sintiendo como la seguridad y el calor de la presencia de mi esposo me llenaba por dentro. Ahora no había ningún fantasma que interrumpiera mi sueño; yo y mi hijo estaremos perfectamente bien con la presencia de Sasuke cerca. Además, no sentiré frío mientras él esté cerca para darme de su calor y puedo asegurar, que Sasuke Uchiha siempre estará ahí para alejar el miedo y el invierno de mi vida. Fin~ x’DDDD Sinceramente, no estoy muy segura de cómo me quedo este One-shot. Lo había escrito para un concurso, mas sin embargo no lo utilice al final. Me había olvidado de él y revisando mis archivos me di cuenta que existía; espero vuestras opiniones o lo que sea que queráis decir acerca de este pequeño escrito. Sayonara!
Wah un SasuIno~ No contesté antes por que no lo ví, ya casi ni me paso por Naruto o al menos aquí. Me gustó. Fue una idea un tanto extraña, y al final nunca me hubiese imaginado que Ino estuviese embarazada, creo que quizá hubiese quedado mejor si hubieses dado señales de ello más al comienzo. No sé si vi errores porque tampoco los busqué. No me gusta el hecho de que Ino sea patética y todo eso cuando está con Sasuke, y por suerte aquí no lo es tanto. (?) :/ Me gustó tu narración, yo ya no soy muy buena en primera persona, y admiro a la gente que sí lo hace bien. ¡Ah! Una duda, ¿qué era ese cuarto? ¿Un baño, quizá? Porque no lo aclaraste, oh, si lo hiciste y no lo vi, lo lamento. :B ¿Sabes? Antes, cuando los fanfics estaban en cemzoo, el sasusaku había comenzado a extinguirse, cuando cierta usuaria todavía andaba por aquí... Ahora son puros fanfics n00bs sasusaku, o al menos la mayoría~ En fin, espero que sigas escribiendo. ;3 Bye~
xDDDD Pensé que el hecho de que ella llorara con tanta facilidad y que Sasuke fuese en cierta medida amable, era un indicio; sin embargo, buscaba sorprender con el final; así que supongo que lo conseguí (?) De cierta forma quería mantener ese detalle en secreto, espero no haya sido una mala decisión xD A mí tampoco me gusta escribir de mujeres patéticas ante un hombre; pero dado el hecho de que estaba en cinta, pensé que en su estado era algo que sería de cierta forma normal. Además que quería darle un poco de humor a la historia xD. Me parece graciosa la situación de Sasuke con una mujer embarazada, supongo que esa idea fue la que dio vida a esta historia (?) No soy muy buena narrando en primera persona, es más, rara vez lo hago. Esta es una de esas raras ocasiones Loool Supuse que estaba de mas aclararlo, quizás lo olvide xP. La única razón que yo encuentro para que un hombre como Sasuke este fuera de la cama a altas horas de la noche son las necesidades básicas x'DDDD Así que supusiste bien al pensar que era un baño; Dios, yo que molesto tanto con los detalles, pase esto por alto, gracias por señalarlo n.n Me alegra que te haya gustado el one-shot. ^-^ Cuidate!