Nuestra Vieja Amiga

Tema en 'Fanfics Abandonados de Temática Libre de Anime' iniciado por Lyden, 14 Agosto 2013.

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    Lyden

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    gracias, pero ah estas cosas seria mejor que lo pongas en mi muro, por que creo que tu comentario es Spam
     
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    Lyden

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    Título:
    Nuestra Vieja Amiga
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Acción/Épica
    Total de capítulos:
    43
     
    Palabras:
    663
    Sentí una gran ráfaga en mi cara, penosamente abrí los ojos y me vi a mí y a Yuri cayendo a una gran velocidad

    —¡¡Runo!!‒ grito mientras agitaba las manos de forma alocada‒ ¡¡ayúdame!!

    — ¡Ven aquí!‒ le ordene tratando de alcanzarla con mi mano, ella se acercó y yo la abrase buscando una de mis cartas, saque la “Sora Board” al abrirla se formaron las palabras “Error”‒ ¡NO ME JODAS!‒ grite enojadísima

    Ambas caímos asustando a varias criaturas que no alcance a reconocer eran celestes y con grandes alas

    Me levante quejosa del suelo, pero no tan adolorida mire hacia arriba como las hojas caían de los árboles que posiblemente nosotras rompimos, mire a los lados buscando a Yuri, pero no estaba allí. Voltee mi vista y me encontré con una criatura sumamente extraña que sostenía a Yuri en una de sus manos.

    — ¡Maldito!‒ grite tomando mi Katana y la pistola‒ ¡Suéltala!

    El monstro rio provocando eco, lo mire desafiante. Pensaba en llamar a Utau o Karachi pero había olvidado que cuando me dieron la Katana y lo demás las transformaciones se cancelaron. Suspire resignada, y quite completamente la funda de mi Katana antes de caer al suelo se agrieto y rompió, re transformándose en un listón negro en la empuñadura. Sabía que no era tan fuerte como Dan y los demás, pero prefería arriésgalo todo a que perder a Yuri. Me enfrente a él con cero probabilidades de vencer, antes de que me golpeara una luz gigantesca me segó.

    —Despierta‒ escuche una voz, trate de abrir los ojos pero no podía‒ Quítenle la venda

    Sentí unas manos en mi cara y una entrada de luz excesiva, abrí los ojos y luego los cerré, intente llevar una de mis manos a mi cara lo que me fue imposible las tenía atadas

    — ¿D-dónde estoy?‒ dije con voz afónica

    — En juicio‒ dijo un hombre con una gran túnica negra‒Génesis

    — ¿Génesis?‒ pregunte mirando a todos en la habitación, sus serias caras me ponían nerviosa. Luego recordé ¿Qué le paso a Yuri?

    — ¿¡Donde esta!?‒ exigí gritando‒ ¿¡Donde esta Yuri!?

    Las personas de los estrados contuvieron su respiración, algunos retrocedieron, mirándome con disgusto

    —Castíguenla‒ dijo uno de los que tenían una cara temerosa, una de las cadenas que me ataban comenzó a ajustar. Algo que no sabían sobre mí, no tengo casi nada de sensibilidad, apenas sentí algo cuando me acuchille accidentalmente el año pasado. Comencé a hacer fuerza con ese brazo para atraer la cadena y suavizar el tacto.

    Las personas de la corte volvieron a contener el aliento. El juez principal hizo señas a una puerta, de allí salió un verdugo sosteniendo cadenas gigantes, como arrastrando algo, mire por encima de mi hombro y allí la vi a Yuri con cortes, moretones y la vista cubierta.

    —¡¡Yuri!!‒ grite exasperada, trate de acercarme pero las cadenas me lo impedían. A la mierda toda, Yuri estaba en estado crítico, necesitaba, TENIA que hacer algo. Hice fuerza con las manos y logre romper las cadenas al sentir una gran adrenalina correr por mis venas, me levante y fácilmente rompí las de mis piernas, que eran muchas. Corrí hacia Yuri y me deje caer dejando que mis rodillas absorbieran el golpe del impacto, tome a Yuri entre mis brazos

    —¡¡YURI!!‒ grite‒ ¡Abre los ojos!

    La adrenalina se aumentó y esta vez acompañada de furia, sentí como la sangre comenzaba a hervirme. Me pare dejando a Yuri en el suelo, me acerque a ellos quienes me miraban con temor. La Katana se formó en mi mano al igual que la pistola, me acerque lentamente al tiempo que ellos retrocedían. No recuerdo lo que paso después, solo que desperté en una cama de hospital.

    —Despertaste… que bien~‒ dijo una vos parecida a la mía, solo que calmada y cariñosa. Gire mi cabeza lentamente para encontrar a una chica de mirada tierna y serena, mis ojos se achicaron, mi corazón se paró al igual que mi respiración.

    —N-no puede ser…

    ¿Estoy soñando?
     
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    Para adolescentes. 13 años y mayores
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    Acción/Épica
    Total de capítulos:
    43
     
    Palabras:
    409
    Capitulo XLI; Runo
    — No lo puedo creer…‒ dije con las palabras en la garganta, frente a mí una chica de cabello azul cielo como yo atados en una trenza y con los mismos ojos violetas que yo. Era como mirarme al espejo.

    — Al fin haz despertado~ ‒ me contesto esa chica con un tono dulce y amable, todo lo contrario a mi

    — ¿Q-Quien eres?‒ pregunte tratando de pararme, al hacerlo note que tenía mi pierna izquierda tatuada con cadenas en llamas violeta, parecía que realmente se incendiaban‒ ¿¡Qué es esto!?

    — Tranquilízate, por favor~‒ pidió con un tono algo preocupado‒ Yo te explicare…

    Me senté esperando pacientemente sus palabras, ella se sentó derecha en uno de los sillones con las piernas juntas, como si fuera una princesa

    — Estas en la tercera dimensión, yo soy Runo Shiro Enma Misaki~

    — ¿S-Shiro?‒ pregunte mirándola más de cerca, Mi nombre verdadero era “Runo Kuro Enma Misaki”

    — Tu eres Kuro Enma‒ dijo sonriendo, me asuste un poco cuando me dijo eso. Inmediatamente pensé en Yuri, los de esa corte y que había sucedido.

    — Yuri está bien~ No tienes que preocuparte~‒ me volvió a sonreír‒ y sobre lo que sucedió en la corte aun no lo entenderías~

    Asentí algo confundida, Shiro Enma me ayudo a pararme me di cuenta de que solo llevaba un short negro y un sostén.

    — Lo mejor será que te pongas tus medias~‒ ella indico un estante donde había ropa y antes de irse volteo‒ Cuando termines hay alguien que quiero presentarte, él no te conoce, pero tú sí.

    Termine de vestirme, era un short gris, una remera strapples blanco y un saco sin mangas gris con una estrella en la espalda y al frente con unas botas altas que tenían parlantes en los lados, y baje al encuentro con Yuri, ella estaba sentada en uno de los sillones conversando con Shiro Enma

    — ¡Despertaste!‒ grito Yuri lanzándose a mis brazos para darme un abrazo que me dejo sin aire, le correspondí el abrazo, ella estaba bien.

    — ¿Quién era esa persona que querías presentarme?‒ pregunte acercándome a Shiro Enma

    — Ya puedes pasar~

    Escuche el ruido de unas puertas eléctricas abrirse y cerrarse seguido de unos pasos. Un chico apareció frente a mí, me puse a llorar. Su cabello era gris y sus ojos eran azules oscuro, los colores estaban invertidos, pero sin duda era el, su mirada amable no podía encontrarse en otro sitio.

    Parado frente a mí, la viva imagen de Nagishko Argento.
     
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    Nuestra Vieja Amiga
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    Para adolescentes. 13 años y mayores
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    43
     
    Palabras:
    3652
    Capitulo XLII

    Mis rodillas se tensaron, las lágrimas no paraban de brotar mis ojos, Yuri se dejó caer en el sofá, el chico nos veía confuso

    —Chicas~‒ intervino Shiro Enma posicionándose frente al albino platinado‒ Este es Nadeshko Argento, es el Nagishko de esta dimensión, Saluda Nade~

    Nadeshko reaccionó de inmediato y les dio una pequeña reverencia

    — ¡M-mi nombre es Nadeshko, encantado!‒ contesto el chico dando una pequeña reverencia, yo pensé que era exactamente la misma forma en la que Nagishko hubiera reaccionado, obediente y nervioso, como un cachorrito

    Me de inmediato y limpié las lágrimas con su mano y me acercó a saludar

    — Mi nombre es Runo Kuro Enma Misaki‒ saludé extendiéndole una mano, Nadeshko la aceptó gustoso dándome una pequeña sonrisa‒ Ella es Yuri Nakamura

    — Entonces…‒ susurro Nadeshko‒ ¿Cómo soy en la otra dimensión?

    Yuri y yo miramos hacia otro lado, Shiro Enma lo miro meneando la cabeza el entendió y no dijo nada, pero luego se animó a hablar

    —La Yuri de aquí está muerta también

    Lo miramos sorprendidas, Nadeshko se arrepintió de su comentario inmediatamente

    —Chicos~‒ interrumpió Shiro Enma‒ ¿Por qué no vamos a mostrarles Idol City?

    Nosotras asentimos penosamente, Shiro Enma se movió dándoles una indicación para que la sigamos, lo que hicimos. Nadeshko nos siguió de cerca, pero manteniendo la distancia

    — ¿Cómo es su dimensión?‒ preguntó Nadeshko

    —Casi igual a este, solo aquí la tecnología está más desarrollada‒ contesté mientras miraba por la ventana

    —Todo esto funciona por Misaki Energy~‒ comentó Shiro Enma con una sonrisa

    — ¿Misaki Energy?‒ pregunté

    —Es una energía ecológica~ después de que el mundo fue impactado por un meteorito ideé la tecnología “Misaki Energy”

    — Durante el juicio, los jueces dijeron algo sobre “Génesis”‒ comente, Shiro Enma me frunció delicadamente el ceño

    —No es nada de lo que debas preocuparte~‒ me respondió con una sonrisa

    —Espera…‒ dije llamando la atención de todos‒ ¿Dónde están Utau y Karachi?

    Metí la mano en mis bolsillos y me alerté al sentirlos vacíos, me levante y comencé a revisar toda mi ropa y de paso buscar el collar. De repente sentí un calor en mi bolsillo, de allí saque dos cristales que podían ocupar perfectamente el tamaño de mi mano

    — ¿Qué es esto?‒ pregunté mientras los demás me rodeaban, el cristal comenzó a brillar y pude divisar los cuerpecitos de Utau y Karachi como si estuvieran dormidas

    —Esto es lo que pasa cuando viajas por dimensiones~‒ comentó Shiro Enma‒ Cuando vuelvas a tu dimensión volverán~

    —No me gustaría preocupar a Len y los demás…‒ pidió Yuri‒así que por favor devuélvenos a nuestra dimensión

    Shiro Enma sonrió y con su vocecita tierna nos dijo una mala noticia— No sé cómo hacerlo~

    Yuri y yo nos quedamos quietas para luego soltar un gran “¿¡QUE!?” , Nadeshko intentó, en vano, calmarnos.

    La noche calló de sorpresa, salí al balcón de la habitación para apreciar las estrellas y de esa forma calmarme e intentar aclarar mis ideas

    -Llegamos a una dimensión paralela, donde yo sonrío siempre, Nagishko está vivo y Yuri está muerta.

    -Tengo un nuevo tatuaje súper en la pierna

    -Shiro Enma me está ocultando algo

    Suspire derrotada y me apoye en la baranda del balcón

    — Nadeshko ¿Hum?‒ susurre involuntariamente

    — ¿Cómo sabias que estaba detrás de ti?‒ preguntó una voz divertida, me di la vuelta tratando de no verme tan sorprendida

    — ¿Qué haces aquí?‒ pregunté mientras Nadeshko se colocaba a mi lado

    —Quería hablar contigo‒ me dijo, no sé por qué pero sentí mis mejillas arder

    — ¿Sobre…?

    —Preguntas y respuestas‒ me dijo mirándome a los ojos, yo lentamente y como tonta asentí‒ hagamos el juego de las 20 preguntas

    — ¿Cómo llegamos aquí?

    — Por culpa de génesis

    — ¿Quién es Génesis?

    — Nop‒ me paró con un gesto de mano, tal y como Nagishko solía hacerlo, solo que él decía “Ño” en vez de Nop

    —Es mi turno de preguntar‒ completo con una sonrisa

    Yo asentí con una sonrisa en mi cara mientras daba una risa diciéndole que debía preguntar

    —mmh… ¿A qué te dedicas en tu dimensión?‒ preguntó mirándome sin cambiar la posición de su cuerpo. Me di la vuelta dejando que mi espalda se apoyara en la barandilla

    —Artista‒ respondí

    — ¿De qué?

    —Cantante, actriz y dibujo un poco, por lo general de anime, como Dragon Ball Z

    — ¿Dragon Ball Z?‒ preguntó encorvando una ceja‒ ¿No querrás decir Dragon Ball 2?

    — Nop‒ me burle imitándolo‒ Dragon Ball Z-E-T-A

    —Dragon Ball D-O-S‒ me imitó, nos miramos desafiantes, con la mirada fija en el otro para ver una abertura en la defensa del otro y atacar, pero antes estallamos en risas

    —A-ahora que… Ahora que recuerdo‒ tartamudeé secándome las lágrimas mientras intentaba dejar de reírme‒ Principalmente iban a llamar a DBZ “Dragon Ball 2” pero por un error de la editorial lo llamaron “Dragon Ball Z” y quedo así

    — Y-y aquí… ‒comentó Nadeshko con risas‒ Lo iban a llamar “Dragon Ball Z” pero por un error de la editorial le mandaron “Dragon Ball 2”

    —Pregunta N° 2‒ dije sin reírme‒ ¿Qué clase de animales tienen aquí?

    — Los más populares son… Gatos, perros, aves, dragones, tigres, leopardos, elefantes metálicos, tigres dientes de sable y otros…

    —Espera, espera, espera‒ lo interrumpí‒ ¿Dragones? ¿Elefantes metálicos? ¿Tigres dientes de sable? En mi dimensión no hay ninguno de esos, bueno los tigres dientes de sable están extintos

    —La verdad… este mundo fue destruido hace tiempo‒ comentó con tristeza, yo lo mire preocupada‒ Y ya no recuerdo nada

    — Pregunta N° 2‒ dijo cambiando rápidamente de tema‒ ¿Cuánto me parezco al yo de la otra dimensión?

    —Bueno…‒ respondí muy pensativa‒ primero es que el “Tu” de esta dimensión se llama Nadeshko, y el mío se llama Nagishko. Tú tienes el cabello gris y los ojos azules, Nagishko tiene el cabello azul y los ojos grises, pero al final los dos son como «Cachorritos»

    — ¿”Cachorritos”?‒preguntó algo molesto

    — Exacto “Ca-cho-rri-tos”‒ deletreé mientras le acariciaba la cabeza como un cachorrito

    — ¿Por qué?‒ preguntó mirándome‒ ¿¡en que me parezco a un cachorrito!?

    — Parece que siempre tienes una sobredosis de azúcar, siempre alegre hasta a veces algo terco y torpe‒comente dejándolo con un tic nervioso en el ojo derecho‒ Pero al final siempre es leal y está allí cuando lo necesitas, por eso “Cachorrito”

    —Ya veo…‒ dijo pensativo‒ Tu turno‒ señalo dándome una señal con la mano

    Y así es como pasamos el resto de la noche con las 20 preguntas y antes de que me diera cuenta eran las 4 a.m. lo único que recuerdo antes de ir a dormir fueron unas cálidas palabras de “Buenas noches”

    Al día siguiente desperté en la cama con Nadeshko a mi lado, me sonroje completamente, pero aun así el me recordaba a Nagishko un pequeño cachorrito. Me di la vuelta, el reloj marcaba las 9.00 a.m. por lo general yo despertaba a las 10 a.m. por la pesadez del trabajo del día anterior.

    Toque el cabello gris platinado de Nadeshko, este se removió feliz y abrió los ojos delicadamente. Me miro algo soñoliento y luego se acercó a mí

    — ¡Wah!‒ exclamó abrazando mis pechos‒ que linda eres…

    Me quede congelada por unos segundos y luego le di un puñetazo lanzándolo de la cama, Nadeshko se froto la parte golpeada y dio un pequeño grito

    — ¿¡Porque fue eso!?‒ me preguntó con un notable moretón en su cabeza

    No respondí solo me quede abrazándome a mí misma con la clara mirada de «eres un pervertido»

    — oh maldición…‒dijo para sí mismo‒ perdón Runo

    Me lo quede mirando enojada, en la otra dimensión NUNCA había golpeado a Nagishko. Como mucho había dado un par de galones de oreja, pero NUNCA le había dado un golpe

    Antes de que el explicara, le eche de la habitación. Con un galón (tirón, como le digan en tu país) de oreja y le cerré la puerta en la cara. Apoye la espalada en la pared y me deje caer lentamente hacia el suelo, saque las gemas de Utau y Karachi al igual que el brazalete que me dio Dan

    Con mi dedo acaricie las gemas, estas brillaron y se unieron formando mi típico collar, con ese fragmento de estrella que casi olvidaba, lo deje delicadamente en el suelo para luego tomar el brazalete de Dan el cual lo acerque a mi cara.

    “¿Hace cuánto que había tenido ese raro sentimiento?” me preguntaba a mí misma

    «Desde la cita con Dan» me respondía inconscientemente

    “¿Cómo se llama este sentimiento?” me preguntaba “Amor… ¿verdad?”

    Suspire derrotada y camine al baño para comenzar a limpiarme un poco, hoy iríamos a un lugar turístico que Nadeshko quería enseñarnos y no tengo un buen presentimiento.

    —Hola‒ salude y todos me respondieron igual, Yuri se acercó con un plato de huevo revuelto y un jugo de naranja‒ gracias

    — Yuri~‒ dijo Shiro Enma con su voz pausada y despreocupada‒ No tienes que hacer el desayuno~ Eres nuestra invitada~

    —No, no‒ respondió con una sonrisa‒La verdad me encanta cocinar y como Runo y yo hemos tenido mucho trabajo no tengo la oportunidad de cocinar

    — Eres muy buena‒Le dijo Nadeshko haciendo que sonriera

    —Bueno la verdad aun me cuesta, pero no han probado la comida de Runo‒ respondió Yuri tirándome de cabeza a un sonrojo

    — ¿Cocinas?‒ preguntó Nadeshko

    —Solo cuando quiero‒ respondí recordando cuando trabajaba en la cafetería de mis “padres”

    Shiro Enma nos guio hasta una cochera donde habían varias naves, diez como mínimo. Muy tecnológicas, por lo que sentí un poco de envidia. Cuando Dan se fue me dedique a estudiar mecánica y todo eso para al menos tener un “Plan B”.

    —Vamos a ver~‒ decía Shiro Enma mirando las naves

    — ¿Por qué no escoges tú?‒ me preguntó señalando un panel con llaves

    Respondí con un “Hum” de fascinación, nunca había visto tanta tecnología de punta en mi vida, recorrí las naves inspeccionándolas con la mirada. Encontré una blanca con bordes celestes con espacio para seis personas como mínimo

    —Este‒dije tocándolo, Shiro Enma sonrió

    —El RC-018‒ comentó Nadeshko mirando la nave, Shiro Enma se acercó y coloco una tarjeta con el nombre que Nadeshko me dijo, la mire algo intrigada

    — Tu conduces~‒ ordenó Shiro Enma, Yuri la miro algo asustada. Ella sabía que yo era más salvaje que los de Rápidos y Furiosos

    Sonreí maniáticamente mientras veía esa tarjeta. Pero no tenía ni la más mínima idea de cómo usarla

    — Tienes que colocarla frente la puerta y el sistema hará el resto

    Puse la tarjeta como Nadeshko me indico, Yuri se escondió detrás de Shiro Enma. La puerta se abrió desplegando una escalera

    —No, no, no, no‒ repetía Yuri‒ Yo no me subiré allí, le tengo pavor a las alturas

    Quite mi atención de la nave para concentrarme en mi amiga, la cual estaba preparada para salir corriendo. Me acerque y le di un golpe en el cuello, ella se desmayó y aterrizo en mis brazos.

    —Listo vamos‒ dije mientras Nadeshko y Shiro Enma me miraban raro

    Subimos a la nave, era blanca, muy elegante y tecnológica. Nadeshko al subir tuvo que encorvarse para no chocarse con el techo, Shiro Enma era tan baja como yo, aunque hace unos días comencé a sumar centímetros. La nave estaba dividida en dos, la parte trasera estaba compuesta por un sillón circular para 6 personas, una mesa blanca baja en la que supongo que se apoyaban los pies y una pantalla ultra plana trasparente. La parte delantera tenía un sillón individual al estilo gamer donde tenía varios parlantes y una pantalla trasparente situada al frente del sillón, paralelo al sillón había todo un panel de control de la misma tecnología, lo que más me llamo la atención fue una ranura donde supuestamente debía insertar la tarjeta.

    Mire a Shiro Enma mientras se sentaba y acostaba a Yuri en el sillón. Esta asintió dándome a entender lo obvio, coloque la tarjeta en la ranura y el panel se encendió como una computadora mostrándome gráficas, datos entre otras cosas. Me senté sintiéndome como en un video juego al estilo Hyperdimencion Neptune.

    Un volante apareció frente a mí el cual tenía una pantalla que marcaba un desatino trazado por una línea rosa, sonreí maniáticamente de nuevo y me coloque unos lentes totalmente trasparentes para arrancar a toda velocidad perdiéndonos en las nubes de ese cielo muy, muy azul.

    — ¿A dónde vamos?‒ pregunté mientras miraba hacia abajo, un paisaje hermoso lleno de árboles y todo eso

    — Ya lo veras~‒ contestó Shiro Enma acariciando la cabeza de Yuri, estaba tan cercana a ella que por un momento me hizo creer que… estaba del “Otro lado” si es que saben a lo que refiero

    Viajamos por más tiempo hasta ver una gran montaña atravesando la vista. En ese tiempo estuvimos hablando de las dimensiones y tecnología, al parecer Shiro Enma nunca había conocido a Dan, ni tampoco existían los Bakuganes y además tenía un cuerpo débil. Por lo cual nunca tuvo el deseo de canto o deporte y simplemente se dedicó a la tecnología y mejorar la calidad de vida mundial, gracias a su “genio”.

    Mire la montaña y dirigí mi vista hacia el GPS que marcaba un “Destino final”, espero que eso no signifique que terminaremos igual que en la película.

    Aterrizamos al poco tiempo, si no fuera por que jugué millones de videojuegos de aviones nos hubiéramos estrellado

    — ¿D-dónde estoy?‒preguntó Yuri despertando lentamente

    — Al fin despiertas, Yuri~‒ dijo Shiro Enma sonriéndole

    — Estamos en la montaña de las almas‒ comentó Nadeshko sacando un mapa de su bolsillo emocionado‒ Aquí invocan algo llamado “Espíritus errantes”

    —Suena tenebroso‒ susurró Yuri poniéndose detrás de mi

    — Suena divertido ¡Vamos!‒ dije llevándome a Yuri conmigo

    Nadeshko nos siguió corriendo mientras Shiro Enma nos seguía hasta situarse al lado de Yuri

    —En este mundo~ tú eras una invocadora de espíritus errantes‒ le susurró al oído lo suficientemente fuerte para que yo lo escuchara

    —Eso me daría mucho miedo…‒ Yuri se agacho más detrás de mí como utilizándome como escudo humano. La tome de la mano y la entrelace con la de Shiro Enma

    — ¿Por qué no la llevas tú?‒ le pregunté a mi otra yo, esta me miro sorprendida y con un notable sonrojo pero al fin asintió y se llevó a Yuri con ella, la cual no dio ni el más mínimo quejido

    — ¿Cómo sabias?‒ preguntó situándose detrás de mi

    — Era obvio‒ respondí, le quite el mapa de las manos y señale un lugar específico‒ vamos aquí

    Nadeshko sonrió y juntos fuimos al destino que yo indique. La gente se vestía formalmente, la mayoría con yukatas o kimonos de diferentes colores, sonriendo. Podría venir aquí más seguido, o a vivir. Claro después de estar vieja, tal vez casada… con un hijo o dos

    Sonreí apenada por ese pensamiento, si darme cuenta de que Nadeshko me tocaba las orejas verificando de no llevar auriculares, tal y como lo hacía Nagishko, le tome de ambas manos y las apreté un poco

    — No llevo auriculares‒ dije bajando de “Mi nube voladora”‒Solo estoy entre las nubes

    Nadeshko soltó una risa‒ Shiro Enma dice “estoy en mi burbuja~”‒ imitándola con una voz aguda y pausada

    —Pensé que la llamarías Runo‒ dije sintiéndome algo rara, con un escalofrió

    — No, aquí le decimos “Shiro Enma”

    —En mi dimensión me llaman Runo, solo Yuri y Nagishko saben de mi segundo nombre “Kuro Enma”

    —Es gracioso, porque solo yo y Yuri sabemos su nombre “Runo Misaka”

    Reímos por un tiempo y nos dirigimos hacia un bosque de flores celestes, eran hermosas

    —Es hermoso…‒ susurre tomando una fotografía

    — Los arboles de cerezo son hermosos

    — ¿Cerezo?‒ pregunte hasta donde sabia los arboles de cerezo eran rosas

    —Si‒ respondió con sarcasmo‒ Por las cerezas, las cosas azules

    Me quede algo impactada, porque aquí todo era al revés, Goku en vez de ser hombre fue mujer y tiene casi la misma popularidad, los animales extintos estaba vivos. Y me pregunto ¿La rara no seré yo?

    Seguimos caminando por un rato viendo atracciones y otras cosas, me sentí como cuando tenía 14 y aún era una niña consentida por Dan, me reí ante ese pensamiento y en mi mente seguía pensando ¿Dan y yo podríamos ser algo más?

    De nuevo sentí las manos en mis oídos, volví negar y sacarle las manos de mis oídos

    —Lo siento‒ dije‒ Le digo a las nubes que no pero ellas me joden

    Nadeshko rio‒ Sí que te quieren

    Yo me reí de nuevo. Nadeshko recorrió el parque con la vista hasta ver un gran árbol de flores azules, señalo el árbol e hizo un gesto para que lo siguiera. Nos sentamos debajo y el saco un Obento de gran tamaño, lo abrió dejando ver mucha variedad de comida, desde sushi hasta comida Americana

    —Bien ¿Por qué no me hablas de alguna de tus canciones?‒ me preguntó, termine de tragar y me dispuse a hablar

    — ¿De qué tipo te gusta?

    —Alguna que de polémica, si es depresiva mejor

    Me puse a revisar mi repertorio de canciones mental, hasta encontrar unas canciones interesantes

    —Esta se llama ERROR;

    “¿Puedes verlas? Las lágrimas en mis ojos

    Mis sistemas han fallado y ya no me queda tiempo

    Estoy borrosa por los colores de la vida

    Azul, blanco y rojo. Los colores que siempre me han mostrado

    Aunque son alegres muestran una gran tristeza

    ------

    ¿Qué es lo que estaba buscando?

    ¿Lo eh encontrado?

    ¿Sé que es?

    Las últimas palabras que quiero decir no salen

    Las últimas palabras atoradas

    ERROR

    -----

    ¿Estoy desapareciendo?

    ¿Desapareceré?

    Pero aun quiero tener un motivo para vivir

    ¿Eso no es suficiente?

    Quiero seguir respirando, respirando

    Pero las últimas palabras no quieren salir

    Me duele, me duele

    Y Penosamente doy las gracias

    Por todo ese tiempo

    No creo que fuera perdido

    Las últimas palabras se atoran

    ERROR

    ---

    ¿Seguiré viviendo?

    ¿Me estoy rompiendo?

    ¿Me han abandonado?

    ¿O yo me eh abandonado?

    Adiós a todos

    Ha sido lindo tenerlos

    Pero ya debo despertar

    Me duele, me duele

    La realidad me persigue y ataca sin piedad

    Me duele, me duele

    Gracias por todo

    Las últimas palabras se han atascado

    ERROR”

    —Es muy buena, pero depresiva‒me dijo mirando al cielo, volvió hacia mí con una sonrisa algo arrogante ‒ ¿otra?

    Sonreí y asentí

    —Esta se llama “Blindfolded” significa “Los ojos vendados”, esta nunca la eh sacado al mercado, solo yo la eh escuchado

    “El tiempo para rápidamente

    El reloj de vida se deteriora más rápido aun

    Y yo sigo abrazada a recuerdos que lentamente se convertían en cicatrices

    La gente dice que todo estará bien con una máscara de sonrisas

    En este mundo triste ¿Qué es lo que puedes ver?

    Por eso (Grito)

    Gritare hasta quitarme esta la última venda

    Gritare hasta que me presten atención

    Ese anormal sentimiento en mi pecho y en de los demás

    Todos lo llaman “Amor”

    ¿Existe eso aun?

    Las vidas se pierden violentamente dejando solo unos recuerdos que rápidamente desaparecen

    Todos con los ojos vendados

    Gracias a mentiras implantadas

    Trato de advertirles, pero no me creen…”

    —Hasta allí escribí‒ comente tomando un poco de agua, Nadeshko apoyo su cara sobre sus manos

    —Debes ser una gran cantante‒ me dijo con la boca llena

    —Una de las mejores‒ respondí algo sonrojada

    —Canta una canción bonita‒ pidió con una sonrisa, me atragante con el sushi. Él se asustó un poco y me dio algo para beber mientras me tomaba por la espalda.

    —Ya buscare una‒ respondí mirando mi reloj una amplia lista

    — ¡Esta!‒ exclamó señalando una “Reboot” aclare un poco mi voz y me puse a cantar

    “Desciende una maga, sobre una pequeña y oscura habitación

    Sólo me dijo un "adiós"

    Días sin temporadas empezaron a superponerse

    Todavía lo recuerdo…

    "trata de decorarlo con su color favorito"

    lo que está enredado es deshecho uno por uno

    Antes de darme de cuenta lo que había anhelado

    Teniendo miedo de la perfección, nos alejamos

    Hoy desde un escenario blanquinegro, vemos un sueño electrónico

    El sonido de los pasos, oramos por una reencarnación

    Y la desaparecida cuarta dimensión cambia ese color

    Se alzó un llanto

    El escenario de siempre bloquea la ruta de escape

    Ese día se tocó un amanecer

    Esos días sin temporadas continuaron sin fin

    Yo lo siento así

    La verdad reveladora es un tanto decepcionante

    La calurosa calima, lleva algo doloroso

    Esa historia que estaba cerrada por miedo a una compensación

    Una vez más fue abierto... a una continuación

    Hoy desde un escenario blanquinegro, vemos un sueño electrónico

    El sonido de los pasos, oramos por una reencarnación

    Y la desaparecida cuarta dimensión cambia ese color

    Se alzó un llanto”

    —Que linda canción ¿tuvo muchas visitas en YouTube?

    —Sí, un billón y medio creo

    —Pero que humilde eres Kuro Enma

    Me reí ante ese comentario, a lo lejos vi a Shiro Enma, raramente, corriendo. Con un gesto de mi mano le indique donde estábamos, corrió hacia nosotros y callo, pero yo logre atajarla antes de que tocara el suelo

    —Shiro ¿Qué sucede?‒ preguntó Nadeshko

    — ¡Esto es grave!‒gritó con lágrimas en sus ojos, sin su típica tonada
    Ciao Puttanos, nah os quiero.
    Vengo con un nuevo capitulo de; No una pagina, ni dos paginas...DE 12 FUCKING PAGES :D
    ¿por que? ¡POR QUE SI!
    Nah, por que ya quiero terminar con la primera temporada de NVA y cambiarle el nombre a "Las cadenas de la condena eterna" aunque creo que en ingles quedara mas piola.
    NVA terminara en el cap 50 y tengo MUCHAS cosas que poner antes de terminar con la temporada, hasta entonces ACCION, ACCION EVERYWERE y os JURO que tendran una sorpresa en unos de los capitulos siguientes y al final de la siguiente temporada quedaran SHOCKEADOS por la visita de alguien... en la proxima temporada ¡Adios virginidad de Runo! (Fabiola me lo pego) y DanxRuno al 1000%
    bye-bye
     
    Última edición: 13 Mayo 2014
  5.  
    Lyden

    Lyden Usuario común

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    Nuestra Vieja Amiga
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    «Yuri fue capturada por los espíritus errantes» Fueron las palabras que salieron de la boca de Shiro Enma. Inmediatamente Nadeshko la subió a su espalda y corrimos al templo, por unos segundos tuve la sensación de que el cielo era negro, parpadee un par de veces para darme cuenta; El cielo era negro.

    La gente corría por todos lados enloquecida, nosotros nos hacíamos camino por ese mar turbulento de gente tratando de salvar sus vidas, todos sus gritos de terror y rezos hacia un dios de nombre que no pude reconocer pasaban por mis oídos.

    «Ten piedad de nosotros, diosa de la luz ////»

    «Denos otra oportunidad, diosa ////»

    « ¿Hemos hecho algo incorrecto, ////?»

    Iba a preguntar a quién estaban rezando tan impacientemente, pero me pareció una falta de respeto, así que solo me quede callada. Las personas iban disminuyendo a medida que avanzábamos, varios nos decían que nos fuéramos y que era demasiado peligroso para que unos niños estuvieran aquí. La mayoría reconocía a Shiro Enma y solo le deseaba buena suerte antes de salir corriendo con los demás.

    El templo era igual a los de mi Japón solo que los pétalos azules oscurecidos por el cielo negro lo hacía parecer más macabro de lo que era, Shiro Enma se lamentaba una y otra vez en el hombro de Nadeshko, disculpándose conmigo por perder a Yuri, y él le consolaba diciéndole que no era su culpa una y otra vez

    — ¡Pero si es mi culpa!‒ gritó moviéndose tan violentamente que Nadeshko la soltó accidentalmente‒ ¡Como la última vez, en la inundación del distrito 59!

    Me paré a mirarla cuando dijo “El distrito 59”, el mismo lugar donde Nagishko murió quemado. Ella seguía llorando en el suelo, patética y odiándose a ella misma a muerte. Me acerque a paso lento dándole una señal a Nadeshko para que retrocediera, este me hizo caso y me puse en cuclillas frente a ella. Mire su cara llena de lágrimas y le di una bofetada que hizo que su cara girara unos noventa grados hacia la izquierda

    — ¡Esas estúpidas lagrimas no resolverán nada!‒ le grité, ella no salía de su asombro al igual que Nadeshko, la tome los dos lados separados de su camisa strapples y la acerque a mi cara con expresión sombría‒ Si realmente quieres evitar tanto como yo que le pase algo a Yuri ¡Deja de lamentarte como una tonta!

    Shiro Enma me miro atónita, cerró los ojos y puso una cara de determinación. Tomo mi mano y yo le ayude con mi impulso a correr, ella corría con una de sus manos flexionada como una niña pequeña y tímida. Nadeshko iba unos pasos más adelante, era un chico y no tenía que cargar 44 kilos.

    Al llegar al templo estaba totalmente vacío, las sacerdotisas y sacerdotes habían salido corriendo junto con la otra gente.

    — ¿Vacío? Genial‒ dije golpeando mis manos contra mis caderas

    —No seas tan pesimista‒ dijo Nadeshko llevando sus manos detrás de la nuca

    —Solo soy realista, no hay nadie

    Nadeshko recorrió la habitación con la vista para darse cuenta de que yo decía la verdad obvia, no había nadie

    — Cobardes‒ escupió Shiro Enma, con una voz fuera de lo habitual; una con odio y rencor‒ Decían que querían ver la grandeza del otro mundo con sus propios ojos y cuando están frente a ella se van corriendo

    No tuve más opción que apoyar el concepto de Shiro Enma acerca de los sacerdotes y sacerdotisas. Siempre buscando la “Iluminación bajo el ala del «Dios»” que buscan y cuando aparece, huyen para salvarse el pellejo.

    —En esta dimensión, todos son así ¿Allí también sucede? ‒ comentó Shiro Enma mirando al suelo y luego me miro a mi‒ En otras palabras… ¿crees en Dios?

    — En mi dimensión hay distintos «Dioses» y las personas nacen y crecen en una religión específica que los familiares y la localización geográfica implantan u otros cambian de la religión familiar por otros medios. Algunos son buenos, otros son malos, cuando dices «Yo no creo en “Dios”» comienzan a llamarte “Ignorante” o “Estúpido” y te preguntan una y otra vez “¿En serio crees que fuimos creados por una explosión?”. Yo la verdad no creo en ningún «Dios» no creo que fuimos creados por una razón, solo pasó… Y tampoco creo en que inclinarme a rezar sea la solución, creo que las acciones son lo que vale. Tal vez exista un “Dios” o tal vez no, pero al fin y al cabo él, ella, ellos no nos ayudaran. Tenemos que hacerlo nosotros mismos y solo… vivir

    Shiro Enma sonrió complacida‒Sabes~ En mis sueños siempre me preguntan eso “¿Crees en Dios?” y yo nunca supe que responder y me quedo dando vueltas en la cama buscando la respuesta, pero ahora que he hablado contigo, me siento mucho mejor, esta noche te prometo que dormiré tranquila

    Sonreí cuando me lo dijo, por lo general ella solo decía algunas frases u oraciones incompletas, interrumpidas por algo o alguien.

    —Vinimos aquí para rescatar a Yuri, no para que ustedes dos tengan una charla motivacional desde el lado Filosófico‒ nos cortó Nadeshko, me pare firme y le pedí a Shiro Enma que nos llevara hacia donde Yuri había sido secuestrada, ella señalo un amplio pasillo que se perdía con la vista, entramos corriendo hasta llegar al final, del MUY, pero MUY, largo pasillo

    La entrada estaba destrozada y unas que otras cenizas volaban por el ambiente. Apenas movimos la puerta se redujo a cenizas recién quemadas. Entramos con sigilo y yo mantenía firmemente tomada la mano de Shiro Enma. En el centro de esa gran habitación había un agujero completamente oscuro rodeado de un barandal de, si no me equivoco, era de cristal.

    —El hoyo del fin del mundo…‒ murmuró Shiro Enma poniendo las manos en el barandal

    — ¿Completamente apagado?‒ completó Nadeshko mirando con profunda desesperación el hoyo

    —Este es el hoyo del fin del mundo, aquí es “Un punto sagrado” donde una diosa creó el mundo basándose solo en un recuerdo‒ dijo Shiro Enma, de repente me miro‒ En un recuerdo de tu dimensión

    —Dices que… ¿La diosa de aquí, era una humana en mi dimensión?

    —Algo más… Ella era un Bakugan, de alguien muy poderoso…

    Puse una mano en mi cara, Dan peleo con los mejores peleadores del mundo y trate de recordar los nombres que me daba en las “Citas” que teníamos. La mayoría de los Bakugan eran hombres y solo una pequeña parte eran mujeres, tenía la mente en blanco y de repente me vino un nombre y una voz a la mente

    «Soy yo Runo…»

    Solo ese nombre, ese nombre tan importante para mi bastó para que mi mirada se llenara de luz. Mi primera compañera no humana, una de las personas en la que podía confiar, ese nombre que me marco como un tigre. Levante mi cabeza y grite con todas mis fuerzas, lo más fuerte que mis entrenadas cuerdas vocales me lo permitieron

    — ¡Tigrera!

    El sonido de mi melodiosa voz en perfecta sintonía con el pequeño viento que atravesaba el lugar hizo temblar la tierra, el hoyo del fin del mundo se volvió a llenar de luz y al mismo tiempo retumbar. Desde el fondo una luz emergía a una velocidad impresionante, la tierra comenzó a agrietarse para darle espacio a esa terrible luz

    « ¿Estas feliz de verme de nuevo?»

    — ¡Estoy MUY, MUY feliz!

    «En ese caso…»

    La luz destrozo completamente el suelo debajo de nosotros, haciendo que pareciera que estuviéramos cayendo desde las nubes. Me costó tiempo acostumbrarme a la luz más el viento que rugía ferozmente contra mi cara.

    Las nubes se dispersaron y allí pude ver como un reino se alzaba majestuosamente, lo que menos podía creer; Estaban 6 símbolos flotando por encima de las puertas:

    Pyrus

    Haos

    Aquos

    Ventus

    Darkus

    Subterra

    Solo que Haos resaltaba entre todas estas por su brillo. Una ola de energía nos rodeó amortiguándonos la caída de otros 1000 m que nos esperaba complacida tomando el té con su amiga la muerte

    Esa ola nos llevó hasta dentro de ese reino, al bajar la vista vimos a varias personas vestidas con armaduras; Mujeres, hombres, ancianos, hasta niños portaban armas. Atravesamos todo el reino en silencio, solo observando esa vista que se nos brindaba.

    Llegamos a un palacio, la ola de energía nos bajó lentamente hasta dejarnos completamente en el suelo.

    Una figura femenina se acercó a nosotros caminando elegantemente, su cabello platinado se agitaba con el viento, su figura era tan brillante….

    —Bienvenidos…

    —… ¿Tigrera?

    La mujer sonrió, porque al parecer ese era su nombre. Mi guardián Bakugan, mire a Shiro Enma y Nadeshko quienes estaban arrodillados con la frente en el suelo paralelos a Tigrera

    —U-un honor conocerla, Diosa Tigrera‒ dijeron al unísono Nadeshko y Shiro Enma

    Yo me quede algo confundida mirando a Tigrera y luego a ellos. Después recordé ¡Yuri había sido secuestrada!

    — ¿Dónde está Yuri?‒ pregunté mirando a Tigrera

    — Por aquí‒ respondió señalando una gran puerta con el símbolo de Haos, la seguí dejando a Shiro Enma y a Nadeshko arrodillados. Pasamos la gran puerta de cristal hacia un largo corredor.

    — ¿Por qué nunca fuiste a la tierra?‒ le pregunté

    — Lamento nunca haber ido‒ respondió y luego hizo una pausa‒ es que no puedo salir de este reino

    — Entonces… ¿tú creaste el mundo de Shiro Enma?

    Tigrera asintió y luego me miró

    —Quería hacerte de nuevo, pero un alma no se puede clonar

    — ¿Qué hay de Nadeshko y Yuri? Yo nunca te dije nada

    — Cuando hice la segunda dimensión todo salió al revés‒ dijo con lágrimas en sus ojos‒ Hasta la historia y las personalidades

    — Nadeshko salió igual a Nagishko en personalidad

    — Es que en tu cabeza habían más recuerdos con el que con Yuri‒ respondió‒ Luego de la creación yo no puedo cambiar la historia

    — ¿Sabes cómo se creó mi mundo?‒ pregunte sin mirarla

    — Creo que fue el Big Bang

    — Shiro Enma dijo “El Bakugan de alguien muy poderoso”‒ comente recordando nuestra charla‒ ¿Quién es o era tu compañero?

    Tigrera no respondió, solo camino dejándome con la sensación de que no debía hablar más…

    —Perdón…‒ dije frotando mi brazo izquierdo‒ Estoy siendo algo grosera

    — No, está bien‒ me cortó Tigrera mirándome con una sonrisa y lágrimas‒ Estabas sufriendo y yo no pude estar para ti

    Me quedé callada, hace tiempo había abandonado el Bakugan para concentrarme en mi misma.

    — Los viejos recuerdos se transformaron en cicatrices‒ dijo en voz baja, casi un susurro

    — No había nada que tu pudieras hacer‒ contesté sin mirarla, solo apuré mi paso para terminar lo más rápido posible nuestra charla

    Tigrera me guio hasta una amplia habitación totalmente echa de cristal, estos tomaban una forma asimétrica y descontrolada, al mismo tiempo que estos estaban en movimiento. Escuche el sonido fuertemente bajo de una cascada, gire mi vista para ver mi hipótesis en estado físico; una cascada que llevaba agua de mil colores, esta corría hacia la otra habitación, perdiéndose.

    Unas puertas aparecieron al otro lado del cuarto, Tigrera apuró el paso y entró dándome la señal de que yo debía seguirla. Al entrar vi algo que había soñado más de mil veces; El fin del mundo.

    Era un abismo, parecía que alguien había aparecido con una bola de demolición y había destrozado el piso. Me acerque al borde y vi como la cascada de tiempo atrás caía violentamente al olvido. Tuve ganas de llorar, pero me contuve apretando los puños, no sabía por qué quería llorar, realmente no lo sabia

    — Quieres llorar por que esas son las almas, sueños, esperanzas de las personas que se rinden y las que mueren‒ comentó Tigrera‒ La entrada al infierno

    — Entonces… hagamos lo que hagamos ¿Iremos al infierno?

    Tigrera lentamente negó y me sonrió‒ Solo las personas malas

    —Te are un acertijo, si lo respondes bien; te llevaras a Yuri y una respuesta verdadera

    Ni siquiera quise pensar que pasaría si perdía, los acertijos no me daban. Pero aún así, lo intenté, asentí y ella preguntó;

    —Si nosotros «Los buenos» matáramos a todos los «malos» ¿Quiénes quedarían?

    —Los asesinos‒ respondí sin dudar ni un segundo

    — Te has convertido en una niña muy sabia

    — ¿Niña?‒ pregunte mientras me volteaba a verla

    — Aun eres una niña‒ me dijo firmemente Tigrera

    — Pero… ¡Eh salido a flote yo misma!‒ grité si había algo que odiaba era que me llamen niña‒ Tuve que dejar de ser una niña, dejar de lado todos mis juguetes para convertirme en mujer

    — Estas haciendo un berrinche‒dijo‒ Eso no es maduro

    — ¡Madurar es para frutas!‒ grité quitando mi mirada de ella

    — Eres sabia, pero inmadura y terca

    — ¿Dónde está Yuri?‒ pregunte ya calmada‒ Quiero irme de aquí, volver a la dimensión de Shiro Enma para encontrar la forma de volver a la mia

    Tigrera señalo el abismo, donde una esfera luminosa emergió de allí. Esta se acercó a nosotras y disperso dejando ver a Yuri rodeada de un gran animal, blanco con detalles rojos y dos colas

    — ¡Runo ten cuidado!‒ gritó Tigrera poniéndose frente a mi

    — ¿Qué es eso?‒ pregunté asustada

    — Es un Kitsune‒ exclamó formando un rayo en su mano derecha

    Me sentía inútil mirando a como Tigrera me defendía del Kitsune, tome torpemente la Katana y me adelante a Tigrera, sentí como mi corazón se aceleraba y la adrenalina comenzaba a subir por mis piernas. El Kitsune se puso en posición de ataque frente a mí y comenzó a emanar un brillo muy fuerte, se me adelantó y atacó.

    — ¡NO LA LASTIMES!‒ gritó Yuri por detrás del Kitsune, este se detuvo y se acercó a ella con una reverencia

    Tigrera tanto como yo nos miramos sorprendidas

    — Ella es mi mejor amiga, no es una enemiga‒ le dijo con suavidad mientras tímidamente acariciaba su cabeza, luego se volteó hacia mí con una reverencia y se recostó detrás de Yuri

    Luego de eso corrí hacia Yuri para darle un abrazo, esta lo aceptó gustosa, me separe para mirarla a los ojos

    — ¿Estas bien?‒ pregunte mirando su cara levemente magullada‒ ¿Qué te sucedió?

    Antes de responder alzo su vista y vio a Tigrera‒ ¿Quién es ella?

    — Mi nombre es Tigrera, Runo me ha hablado mucho sobre ti‒ ante todo pronóstico ella se presentó dejándome un gran sonrojo en mis mejillas

    — Tigrera…‒ repitió tocándose los labios con los dedos‒ ¿Ya conocías a Runo?

    La verdad nunca le había dicho nada a Yuri sobre mi pasado como peleadora Bakugan, y esperaba que Tigrera no me lanzara a un enojo por parte de Yuri.

    — ¿Qué fue lo que paso allí abajo? ¿Y porque un Kitsune te acompaña?‒ pregunté cortando la conversación que ellas animadamente mantenían

    — Su nombre es Red

    El Kitsune movió la cabeza en señal de afirmación, volví la vista hacia Yuri quien mantenía su sonrisa

    Los diez minutos siguientes Yuri me explicó que ella al parecer tenía el mismo talento con los espíritus que la Yuri de la otra dimensión, por lo cual le capturaron para absorber su alma y volver a la vida a diez espíritus errantes. Pero cuando estaban a punto de matarla Red apareció a salvarla y cuando Tigrera llamo a su alma Red dijo que quería estar con ella, lo que aceptó gustosa.

    — Entonces eso fue lo que paso…

    Yuri sonrió, y acarició el lomo flameante de Red, este se movió según sus caricias con un leve ronroneo.

    — Solo me falta aclarar algo‒ dije mientras me rascaba la parte trasera de la cabeza, Tigrera me miró, Yuri dejó de acariciar a Red y me miró‒ Si él quiere estar contigo… ¿Cómo lo llevaremos a casa?

    Red lanzó una distorsionada risa, se levantó provocando que Yuri colocara sus manos en el suelo para sostener el peso de su cuerpo. Red movió sus numerosas colas, su cuerpo se volvió más y más pequeño hasta ser del mismo tamaño de un gatito… con dos colas.

    — ¡Que tierno!‒ exclamó sosteniendo y lanzando repetidamente al pequeño Kitsune

    Escuche como Tigrera comenzaba a alejarse, me di vuelta para ver cómo se acercaba a una pared. Esta se desintegro dejando ver como una luz atravesaba el cielo y se acercaba a gran velocidad al castillo.

    — Él está viniendo‒ dijo con una sonrisa que pude detectar a través de su voz

    — ¿Quién?‒ pregunté acercándome a ella por detrás

    — Ya lo conocerás

    Salió de la habitación, Yuri y yo la seguimos desde atrás. Mi amiga caminaba sosteniendo firmemente a su Kitsune. Aunque Tigrera no nos pidió que la acompañáramos; nuestra curiosidad por semejante cambio de actitud.

    El suelo estaba hecho de cristal puro, por cada paso que daba hacia el sonido de una tasita de té siendo golpeada repetidamente por una cucharita de plata. Al llegar a la amplia azotea del castillo alcance a ver una estrella fugaz en medio de ese cielo muy azul.

    Esta cambió su rumbo dirigiéndose hacia nosotros, yo estaba asustada, pero me tranquilice al ver a Tigrera mirándolo tan felizmente. La estrella fugaz aterrizó casi en el centro de la azotea y se rompió en varios pedazos provocando un ruido muy parecido al de una copa encontrando su fatal final contra el suelo, de los pedazos luminosos se formó una silueta, no pude distinguirlo hasta que la luz se esfumó por completo. La silueta era de un chico más alto que yo, cabello corto y… azul.

    Si no se dieron cuenta; estoy hablando que frente a nosotras estaba Kanashi. Ni siquiera pude reaccionar, ¿Pero qué mierda significaba esto? ¿De qué lado estaba? Él ni siquiera nos prestó atención, solo paso justo entre el espacio de dos metros entre Yuri y yo. Cuando ya estuvo delante de Tigrera, luego de una pequeña reverencia, de uno de los bolsillos de su jacketa de cuero sacó un objeto esférico y de color negro

    — Aquí esta lo que le prometí, ahora es su turno‒ dijo después de que Tigrera tomara la esfera y comprobara su correcto funcionamiento, de lo que sea que haga.

    — ¿Oigan que está pasando aquí?‒ pregunté sin resultado alguno, antes de preguntar nuevamente sentí una mano en mi hombro, una hermosa mujer con un arco y flecha en su espalda‒ Lars Lion…

    — Hola Runo, no te veía desde que tenías doce años‒ saludó con una pequeña sonrisa‒ déjalos hablar, no te preocupes

    Las palabras de Lars Lion me tranquilizaron, pero ver a la persona que intentó quitarme a mis guardianes con mi antiguo Bakugan, NO era para nada tranquilizador.

    — Todo está en perfecto estado, te devolveré tus recuerdos señor Argento

    Yo y Yuri volteamos inmediatamente al escuchar ese apellido, vimos a Kanashi arrodillarse. Tigrera volvió a formar un rayo en su mano y lo introdujo lentamente en su frente, sus ojos se abrieron y su cuerpo temblaba.

    Hubo otro gran destello de luz cuando el destello se hizo leve pudimos ver a un chico de cabello azul y ojos grises.
     
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