de Dragon Ball - [Misión] Goku tragaba comida

No me había fijado que acá hacían misiones xD así que cumplo la de esta semana

No estoy acostumbrada a escribir cosas así de melosas como esto, así que espero que les guste ^^
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Goku tragaba comida. Era lo que hacía, ya que ni siquiera la estaba masticando. Bolas de arroz, carne picada, incluso papas fritas le había preparado Milk, quien, como era la costumbre, se le quedaba mirando atónita.
-Ya deberías estar acostumbrada a que yo coma mucho... ñmmm.
A punto de echarse una hoja de lechuga sin siquiera limón o sal, vio que Milk seguía mirándole.
-¿Qué pasa? ¿Tengo algo en la cabeza?
Tal vez el arroz había salpicado, así que se restregó su pelo a ver si caía uno que otro grano.
-Ah, espera. Tengo una mejor idea.
Reunió todo su ki y lo elevó rápidamente, emitiendo una ráfaga que por poco bota a Milk al suelo. Ahora sus cabellos eran dorados, y si hubo arroz en su cabeza, había tenido que volar.
-A mi no me gustas de rubio.- Insinuó Milk sentándose a su lado- Me gusta más tu cabello cuando es negro.
-¿En serio?- Tomó una pierna de pollo y la mascó con ansias- No sabía eso.
-Así es, Goku... me gustas como te conocí al principio.
-Pero la primera vez que me viste ni me acordaba quién eras tú, creo que te enfadaste muchísimo esa vez.
-Oh, no me lo recuerdes.
Milk decidió intentar algo osado. Se acercó hacia Goku inclinándose en su silla, y comió del mismo pollo que él estaba probando.
-Oye.. es mío.
Pero por fin al Saiyajin se le aclararon las ideas.
-¡Ah! Ya entiendo.- Y rió- ¡Quieres competir conmigo a ver quien come más!
-Oh... ¡Eres tan inmaduro!
El movimiento por su enfado le hizo inclinarse más de la cuenta y la silla se cayó dando un fuerte sonido. Milk se precipitó al suelo, pero Goku, con reflejos de guerrero, soltó el pollo tirándolo al aire. Sujetó a Milk por la cintura y ella por fin se sintió confortada. Era lo que realmente quería.
-Ahora lo entiendes... eso era lo que yo deseaba.
Milk le miraba con ojitos brillantes, y se incorporó de a poco, acercándose al rostro del saiyajin...
-¿Deseabas caerte? Qué rara eres a veces, Milk.
-¡Aaagh! ¡Esto no puede estar pasándome!
De un golpe casi destroza la mesa, y luego se marchó fuera de la casa dando un portazo.
-¿Y ahora qué pasó?- Se preguntó Goku- ¿Acaso habré hecho algo malo?
El pollo le dio un golpe en plena cabeza, y es que Goku había olvidado por completo que lo había arrojado al aire para recuperarlo después.
-Ahora sí que tengo algo en la cabeza... ahora va a estar lleno de pelitos amarillos, no me lo podré comer.
Hizo un experimento. Volvió a su estado natural, y los pelos pegados al pollo volvían a cambiar de color también.
-Vaya, no sabía que eso funcionaba de esa forma.

Pero ya que había desperdiciado su pollo, necesitaba concentrarse en las cosas importantes, y al fin notó que en realidad no tenía nada de nada en la cabeza. Comer hasta hartarse estaba bien, pero Milk se había marchado por algún motivo, y tenía la impresión de que era su culpa.
-¡Ya sé lo que quiero de verdad! Esto de la comida es sólo en entretenimiento.- Al fin reaccionó, y dejando toda la comida tirada, fue a buscar a quien de verdad necesitaba. Sin ella, no habría Gohan, no habría Goten,
ni habría comida. Pero sin Milk, no habría Milk, esa fue su mayor conclusión.

La encontró hablando con Goten, que aún no volvía de jugar en los prados. El niñó preguntó qué fe profesaban las mantis religiosas, y Milk encontró la pregunta tan rara que lo mandó a seguir jugando.
-Gohan era el que estudiaba todas esas cosas, para volverse un gran investigador. A ti te tengo muy consentido.
-Oye ma... estás rara ¿Te pasó algo?
-No, no me pasa nada, ahora sólo ve a jugar.
Pero Goku apareció del cielo con una flores en la mano. Había por casualidad una mantis encima, y el insecto miró a Milk con sus brazos doblados. Milk vio la cara de su esposo, y se imaginó a la mantis entonces como si estuviera pidiendo disculpas con su pose.
-Oh... Goku.- Sus ojos nuevamente estaban brillantes.
-Milk, perdón, es que muchas veces el hambre o las ganas de pelear no me dejan ver lo linda que estás, y creo que luego de estar 7 años sin verte, debo tratarte mejor. Así que toma las flores, me tardé un poco en regalarte algo... jeje.
La mujer tomó las flores con fuerza y la mantis saltó a la cabeza de Goten.
-¡Huy! Ahora le podré preguntar a la mantis sobre su religión, jeje.
Y el pequeño niño se fue corriendo a perseguir la mantis.
-Oye Milk.- Preguntó Goku- ¿Sabes cómo vienen los niños al mundo?
-Sí. Dende imagina a cada persona que ha de nacer, y Míster Popo en arcilla las construye.
-¡Exactamente!
Milk y Goku fueron de vuelta la casa, y cuando Goten regresó no le dejaron entrar por un largo tiempo. Llegó la noche, y ahora que el saiyajin no tenía cola, por fin pudo ver la luna llena junto a ella.