Mis Verdaderos Sentimientos

Hola que tal ¿cómo están? Espero que estén bien, como pueden ver soy nuevo aquí, y como lo ven aquí me encuentro publicando un Fic de Pokémon, espero que me dejen sus criticas eso sí que sean constructivas para que me ayuden a mejorar con la historia y así hacerla más placentera para ustedes. Bueno sin más que decir empiezo, ah se me olvidaba la historia tratara de AdvanceShipping así que una vez dicho eso que disfruten la historia. ¡Ahora sí, Empiezooo!

Capítulo 1: Sentimientos Encontrados​

Habían pasado varios meses desde que acabo la liga Hoenn y Ash había ganado la Batalla de la frontera, así que el decidió regresar a casa para visitar a su Mamá, claro eso si con su inseparable amigo Pikachu que como de costumbre estaba en el hombro de Ash. Ya una vez en casa.

¡Mamá estoy de vuelta! —Dijo Ash mientras abría la puerta, luego vio una figura que se asomaba desde la cocina—

¡Ash! —Dijo Delia sorprendida ya que no esperaba que Ash volviera tan pronto— Que sorpresa no esperaba que regresaras tan pronto.

Si tienes razón, a decir verdad yo tampoco me lo esperaba pero bueno aquí estoy.

¡Pikachu! —Dijo Pikachu mientras se subía al hombro de Delia—

Ohh Pikachu yo también me alegro de verte, dime ¿has comido bien?

Pika pi —Decía con un tono feliz—

Ya veo me alegro escuchar eso. Pero vamos Ash ¿Por qué no pasas?

Ah sí, gracias Mamá. Por cierto, huele delicioso, ¿Qué estas preparando? —Decía mientras se dirigía hacia la cocina, lo cual al llegar se encuentra con Mr. Mime— Hola Mr. Mime ha pasado mucho tiempo, ¿Cómo has estado? ¿Has cuidado bien de Mamá? —Dijo Ash con una sonrisa—

Mime mime —Le respondió Mr. Mime con una sonrisa—

Ya veo, muchas gracias Mr. Mime. Y entonces ¿Qué están cocinando?

Resulta que de pura casualidad Mr. Mime y yo estamos haciendo tu platillo favorito —Le decía con una sonrisa— Así que, porque mejor no vas dejar tus cosas mientras preparamos todo.

¡Si! Enseguida vuelvo —Dijo Ash mientras se iba corriendo a su habitación—

¡Ash no corras dentro de la casa!

¡Lo siento Mamá!

De veras que este chico nunca cambia —Dijo Delia para ella misma con una sonrisa en su rostro. Después de eso Delia se dispuso a preparar todo con ayuda de Mr. Mime—

Y así es como fue el recuentro de Ash con su Mamá después de un largo tiempo. Y ya una vez pasado eso Ash llego a su habitación mientras que Pikachu se quedó con Delia. En el cuarto de Ash.

Ahh —Dio un gran suspiro— Que nostalgia… mi cuarto sigue como lo deje antes de irme. Pero saben me alegro estar de vuelta. A todo esto me pregunto si May y Max ya habrán llegado a su casa, supongo que sí, ya que es lo más probable… saben no sé por qué razón siento esto, pero espero que May no me olvide pronto, me pregunto si la veré de nuevo… Si es lo más probable, sin duda nos volveremos a encontrar… espero que si. —Dijo Ash para sí mismo—

Mientras tanto con May todo había salido bien, llego a su casa sana y salva, sin ningún contratiempo por el camino. Una vez en su habitación May empezó a desempacar lo que había obtenido durante su viaje, lo último que saco de su mochila fue el listón que había ganado al quedar empatado con Ash en el concurso Pokémon. Lo cual May al verlo se le quedó viendo por un momento.

Me pregunto que estará haciendo Ash ahora, ¿ya habrá llegado a su casa? ¿Tendrá todavía la otra mitad del listón? —Decía May en voz baja para que no la escuchara nadie—

Por lo que veo, lo extrañas ¿verdad May? —Le decía una persona que estaba parada en la puerta—

¡Max! —Dijo volteando rápidamente— ¡Te he dicho muchas veces que toques antes de entrar!

Pero… si la puerta estaba abierta —Dijo Max para defenderse—

¡De todas maneras esa no es excusa! me hubieras dicho que estabas ahí —Dijo May un poco molesta ya que no esperaba esto—

Vamos hermana no te enojes, no es para tanto. Además solo te dije que si lo extrañabas, ya que de seguro estabas pensando en él, ¿verdad?... ¿o me equivoco? —Dijo Max mientras se acercaba hacia donde estaba May—

¿A quién te refieres?... ¿con él? —Pregunto May un poco confundida—

Claro que me refiero a Ash, a quien más va ser, si no es a él —May al escuchar el nombre de Ash no pudo evitar sonrojarse un poco—

¿Cómo lo supiste? —Le pregunto un poco avergonzada—

Por si no lo has notado, te lo recordare, como puedes ver soy tu hermano, y claramente he visto cómo lo has estado mirándolo desde que empezó nuestro viaje, eso si nunca le quitabas el ojo de encima, ¿acaso creíste que no me iba a dar cuenta? Por cierto May, ya para aclarar todo esto, dime ¿te gusta Ash?

Eso es… —May no alcanzo a decir nada, ya que vio que Max tenía una mirada realmente seria, así que solamente le quedaba decir la verdad— Pues… s-si me g-gusta, pero porque preguntas eso en este momento. Además… yo estoy segura de que Ash no siente nada por mí —Eso ultimo lo dijo un poco triste—

¿Por qué dices eso? ¿Acaso ya le dijiste que te gusta? —Dijo Max un poco confundido, ya que no sabía porque razón May decía eso, es como si el supiera algo más, que May no sabía—

No… no le he dicho pero… a él solamente le gustan las batallas Pokémon… —Decía mientras miraba el listón que tenía en la mano—

Puede que tengas razón en eso… —May al escuchar eso casi le pide a Max que se valla, pero no lo hizo porque Max dijo algo mas— Pero…

Pero… —Dijo May mientras volvía a ver a Max—

Nunca lo sabrás… si no lo intentas, ¿no lo crees hermana? —Le dijo Max con una sonrisa mientras salía de la habitación pero antes de que se fuera— Por cierto, dice Mamá que ya va a servir la comida, así que dice que no tardes mucho —Después de eso Max se apresura a salirse de la habitación de May—

Gracias Max —Lo dijo mientras sostenía con fuerza el listón que tenía entre sus manos— Tienes razón, nunca sabré lo que siente Ash, si no lo intento.

Después de eso May bajo a comer y a contarles todo lo que había pasado durante su viaje, eso sí, ella estaba un poco más animada por lo que le había dicho Max, al parecer las palabras de Max le levantaron el ánimo.
Mientras tanto con Ash.

¡Como era de esperarse, tu comida sigue igual que deliciosa, Mamá hace tiempo que quería probar tu comida de nuevo! Claro que no me olvido de ti Mr. Mime ya que tu ayudaste a Mamá, así que enserio estoy muy agradecido por la deliciosa comida que prepararon para mí. —Decía con una sonrisa mientras comía a montones—

Ya veo, me alegra saber eso —Le contesto Delia también con una sonrisa, lo cual Mr. Mime hizo lo mismo—

Que te parece Pikachu, ¿verdad que la comida de Mamá esta deliciosa?

¡Pikachu! —Dijo Pikachu energéticamente—

Gracias Pikachu, me alegro que a ti también te guste mi comida. —Dijo Delia con una gran sonrisa—


Y bueno eso es todo para el primer capítulo, espero que haya sido de su agrado, muy pronto publicare el segundo capítulo que se titulara… a decir verdad aún no sé cómo se llamara el segundo capítulo, así que se quedara pendiente. Bueno sin más que decir me despido, no sin antes agradecerles por haber leído el primer capítulo. ¡Hasta la próxima!

 

Y bueno como lo prometí aquí está la continuación. Aclaro que este capítulo será un nuevo día, así que lo que sucedió en el anterior capitulo paso el día de ayer, una cosa más lo que este escrito en: cursiva, significaran los pensamientos. Ahora si ¡Empiezo!

Capítulo 2: Una visita inesperada​

Nos encontramos a nuestro héroe Ash Ketchum el cual todavía seguía durmiendo, ya que el día de ayer se durmió tarde debido a que le estaba contando a su Mamá de todas las aventuras que tuvo con sus amigos en la región Hoenn. Lo cual la Mamá de Ash noto como Ash hablaba más de una persona en particular. Y si como lo pueden imaginar resulta que tal persona es nada más ni nada menos que May. Pero bueno volvamos al día de hoy, ya era de mañana, y Delia como noto que Ash todavía no bajaba decidió ir a despertarlo.

¡Ash ya es hora de levantarse! —Dijo la Mamá de Ash, la cual estaba entrando a su habitación—

Cinco minutos más —Dijo Ash mientras se ponía las sabanas encima— Además hoy no tengo nada que hacer, solo planeaba pasar a ver al Prof. Oak mas tarde.

Está bien, solo cinco minutos, ¿me oíste? —Dijo Delia resignada, ya que sabía que aunque le dijera que no, el seguiría durmiendo—

Si Mamá ya escuche —Dijo Ash medio dormido, lo cual Delia al escucharlo así decidió darle más tiempo—

Bueno te daré veinte minutos, pero en ese tiempo te quiero listo, si no tendré que venir a volver a despertarte. Y de seguro no querrás eso, ¿verdad? —Dijo Delia con una sonrisa—

No te preocupes por eso, estaré listo en menos de veinte minutos

Entonces te espero abajo, no tardes —Le dijo Delia ya a punto de irse—

Gracias Mamá, te quiero —Dijo Ash feliz—

Después de escuchar eso, Delia paso a retirarse de la habitación de Ash. No pasaron más de quince minutos antes de que Ash se despertara por completo. Ya una vez despierto.

Buenos días Pikachu —Le dijo Ash a su Pokémon que estaba acostado en su cama. Pero Pikachu no le hizo caso ya que todavía se encontraba dormido— Que suerte, tú si puedes dormir todo el tiempo que quieras. Bueno creo que será mejor que te deje descansando —Dijo Ash para sí mismo mientras se dirigía hacia donde estaba su Mamá—

Buenos días Mamá —Dijo Ash mientras entraba a la cocina—

Buenos días cariño ¿y Pikachu? —le pregunto Delia al ver que Pikachu no bajo con el—

Sigue durmiendo, al parecer sigue cansado por todos los enfrentamientos que hemos tenido y por eso mejor decidí dejar que descanse. —Dijo Ash mientras se sentaba en una de las sillas que había—

Pikachu de seguro debe de estar muy cansado —Dijo Delia preocupada, lo cual Ash noto—

No te preocupes por Pikachu el de seguro debe estar bien, solo necesita descansar y estará como nuevo —Dijo Ash con su sonrisa habitual, para que su Mamá dejara de preocuparse sobre ese tema— Así que no hay necesidad de que te preocupes por él.

Tienes razón —Dijo Delia ya más animada—

Mamá, ¿ya está listo el desayuno? Lo que pasa es que ya tengo hambre —Lo decía mientras le chillaba su estómago—

En serio que sigues siendo el mismo de siempre —Se lo decía mientras empezaba a soltar pequeñas carcajadas— Después de todo sigues siendo mi niño pequeño

¡Mamá ya basta! Puede que no lo parezca pero yo ya he crecido —Dijo Ash un poco molesto por lo que le dijo su Mamá—

Puede que tengas razón —Le dijo mientras empezaba a recordad lo que paso ayer, justo cuando le platico sobre sus viajes que tubo. Pero lo que en verdad recordó fue cuando Ash hablaba sobre May con un brillo en sus ojos— Si, mi hijo ya no es un niño pequeño, mi hijo ya se está convirtiendo en un adulto —Pensó Delia para sí misma—

Mamá ya tengo hambre —Dijo Ash en un tono infantil—

Si, si ya voy —Dijo Delia mientras empezaba a servir la comida— Creo que hable demasiado pronto, parece que después de todo sigue siendo mi niño pequeño —Pensaba mientras servía la comida—

Después de eso Pikachu bajo, el cual lo recibieron con los buenos días, después de dispusieron a desayunar. Ya una vez que Ash termino de desayunar se dirigió a la casa del Prof. Oak con Pikachu. En él camino Ash iba pensando una cosa en particular.

Últimamente me he sentido muy extraño al pensar en May, me pregunto porque será. Pero no solo es cuando pienso en ella sí no que también cuando hablo de ella —Pensó Ash mientras caminaba, pero de pronto se detuvo— ¡Ahh! Ya sé lo que me pasa —Grito Ash cuando se le ocurrió algo, pero lo siguiente lo dijo de nuevo en sus pensamientos— Lo que pasa es yo por May… es que yo… ¡La extraño! —Dijo mientras golpeaba sus manos la una con la otra, como si esa fuera la respuesta, mientras volvía a caminar— ¡Sí! Eso debe ser lo que me pasa, pero… es normal sentirse así cuando extrañas a una persona. Ahora que lo pienso esto nunca me pasó con Misty. Pues… ¡¿Pues entonces que me pasa?! —Se preguntó Ash para sí mismo mientras se rascaba la cabeza como un loco, mientras que Pikachu veía todo lo que hacía su entrenador.

¿Pika-chu? —Dijo Pikachu confundido mientras veía como se comportaba Ash—

Después de que Pikachu estuviera todo confundido, por fin llegaron a la casa de Prof. Oak. Una vez ahí Ash toco la puerta.

¿Quién es? —Dijo él Prof. Oak al otro lado de la puerta—

Soy yo Ash y Pikachu viene conmigo —Respondió Ash—

¡Ash que sorpresa! —Exclamo él Prof. Oak cuando vio que era Ash— Vamos, vamos entra —Le dijo con un tono feliz—

Gracias Prof. Y dígame, ¿Cómo ha estado? —Decía Ash mientras entraba a la casa del Prof. Oak—

Pues bien, uno que otro dolor de espalda, pero aparte de eso estoy bien. Me imagino que ya estas planeando irte de viaje de nuevo, ¿verdad? —Le dijo mientras se dirigía a la cocina a preparar té, con lo cual Ash se quedó callado por un momento, lo cual hizo que él Prof. Oak se preocupara— ¿Qué pasa muchacho? —Le pregunto un tanto preocupado—

Es solo que esta vez… —Hizo una pausa— No planeo salir de viaje, estaba planeando quedarme en casa a practicar por mí mismo aquí. Ya que hay muchos entrenadores fuertes ahí afuera, yo pienso que aún no tengo lo que se necesita para enfrentarme con ellos, lo primero que tengo que hacer es hacerme más fuerte… para así poder ganar una liga ya de perdido, ¿no cree eso Prof.? —Dijo Ash con una mirada seria, para luego convertirse en el mismo de siempre—

Ya veo, así que vas a hacer eso —En ese momento él Prof. Oak empezó a sonreír— Si crees que es lo mejor por mí no hay problema, además de que me parece bien que te quede aquí, ya que las cosas serán más fáciles para mí.

¿Qué quiere decir con eso? —Pregunto Ash confundido por lo que dijo él Prof. Oak—

No te preocupes por eso, no es nada en particular —Le dijo con una sonrisa—

Después de eso Ash pasó a visitar a todos sus Pokémon, los cuales le recibieron con una grata bienvenida. En cuanto vieron a Ash, todos se le abalanzaron sobre él, pero eso no le molesto ya que él estaba feliz de poder verlos de nuevo. Para pasar el rato Ash se puso a jugar con todos sus Pokémon. Pero aunque estuviera con todos sus Pokémon Ash no dejaba de pensar en May.

Mientras tanto May estaba planeando su nuevo viaje hacia… bueno eso ella solo lo sabe. Pero ahora por el momento May estaba hablando con sus padres.

Mamá, Papá ¿están de acuerdo con esto? —Les dijo May a sus padres, ya que antes de esto ya había platicado con ellos sobre a donde iba a ir—

Claro que si hija —Le dijo Caroline con una sonrisa—

¡Ve y triunfa! —Le dijo Norman mostrando su dedo pulgar en forma de victoria—

Gracias mama y papa realmente se los agradezco, estoy muy feliz. ¡Muchas gracias! —Les dijo May mientras los abrazaba a los dos—

No hay necesidad de que nos agradezcas, somos tus padres y lo que nosotros queremos es que tú seas feliz —Dijo Carolina con una sonrisa mientras le correspondía él abrazo—

Pero en ese momento notaron que Max no decía nada. Lo cual Norman se acercó a su hijo.

¿Qué pasa Max, por qué no dices nada? —Pregunto norman mientras se acercaba a Max—

¿Estás bien cariño? —Pregunto Caroline preocupada—

¿Max, estás bien? —Pregunto May. Mientras se ponía a la altura de Max—

Pero en ese momento noto que Max estaba llorando.

¿Qué pasa Max, que tienes? —Pregunto May preocupada—

No es nada hermana, es solo… que te voy a extrañar —Dijo mientras se limpiaba las lágrimas con las manos, para luego ver a May con una sonrisa, como señal de que no es algo que deba de preocuparle—

Yo también te voy a extrañar Max… gracias por todo lo que has hecho por mí —En ese momento May se acercó a Max para darle un abrazo, lo cual él le correspondió— En serio gracias por todo Max —Le volvió a decir pero esta vez mientras lo miraba con una sonrisa—

No hay necesidad de que me agradezcas, todo esto lo hice porque yo quiero que seas feliz, ya que a mí no me gustaría verte deprimida. —Le dijo, ya más animado—

Pero eso sí, no te olvides de hablarnos de vez en cuando —Decía Caroline ya casi a punto de llorar por saber que su hija se iría de viaje de nuevo—

Claro que lo hare Mamá, por eso no te preocupes, así que por favor no llores, ya que si no me harás llorar a mi también —Decía ya a punto de romper en llanto—

Vamos no hay necesidad de llorar, ya que esto no es un adiós para siempre. —Dijo Norman para tratar de tranquilizarlas, pero con muy malos resultados ya que ni siquiera lo escucharon, al verse en tal situación no le quedó más remedio que pedir la ayuda de Max— Tú también di algo Max —Le dijo Norman a Max para que lo ayudara—

Pero aunque me digas que diga algo… no sé qué decir —En ese momento Max se puso a pensar rápidamente en algo, hasta que se le ocurrió algo— ¡Ahh, Ya se!

¡Saben! —Dijo Max en voz alta para que todos le prestaran atención— No hay necesidad de llorar, ya que esto… —Todos se le quedaron viendo a Max, esperando lo que iba a decir— ¡Ya que esto no es un adiós para siempre! —Al decir eso, las dos se calmaron un poco—

Si, tienes razón Max —Dijo May ya más tranquila—

Lo siento no debí ponerme así —Dijo Caroline ya más calmada—

Si, Max tiene razón —Les dijo Norman a las dos con una sonrisa— Bien hecho Max —En ese momento Norman puso su mano encima de la cabeza de Max—Que buena frase, pero siento que esa frase ya la había escuchado, pero no recuerdo donde. Bueno que más da, lo bueno que todo se solucionó —Pensó Norman para si mismo—

Después de eso se pusieron a platicar de otro tema, ya que a May solo le quedaban cinco horas antes de que su barco partiera con rumbo hacia… con rumbo que solo ella sabe. Ya después de eso la tarde se les paso rápido a Ash y a May ya cuando se dieron cuenta ya era de noche. Lo cual Ash decidió regresar a casa lo cual primero se despidió de sus Pokémon y del Prof. Oak. Mientras que May se despedía de sus padres y de su hermano ya que el barco estaba a punto de partir.

Después de eso la noche transcurrió con normalidad. Lo cual para nuestros héroes la noche paso rápido. Ya era de día, eran más o menos las ocho de la mañana, por milagroso que parezca Ash ya se había levantado, ya que su Mamá y Mr. Mime fueron a hacer unas compras con lo cual Delia dijo que regresarían hasta la noche. Así que por decirlo Ash estaría solo en casa todo el día.

Mientras tanto May llego a su destino a las siete de la mañana. Ya llevaba caminado más o menos una hora, después de todo ese tiempo May por fin logro ver un pueblo, con lo cual sus ojos se llenaron de un brillo hermoso. Después de llegar veía por los alrededores hasta que un lugar en particular le llamo la atención, lo que hizo que se dirigiera hacia haya. Ya una vez ahí…

Ding dong —Escucho Ash el timbre de la puerta— ¡Ya voy! —Dijo el entrenador mientras se dirigía a la puerta— Me pregunto quién será —Se preguntaba mientras caminaba con dirección hacia la puerta—

Cuando Ash abrió la puerta se sorprendió mucho al ver de quien se trataba, se quedó paralizado, sin poder articular palabra alguna.

¡Hola Ash! —Dijo la chica con su mano en forma de saludo mientras le mostraba una gran sonrisa. Con lo cual Ash simplemente no podía decir nada ya estaba perplejo por tal situación. Muy apenas pudo decir su nombre—

¡M-May! —Le contesto nerviosamente, ya que él no esperaba una visita como esta. Para nuestro héroe esta es una visita inesperada—

To be continued…



Y esto es todo para el segundo capítulo espero les haya gustado. ¿Qué creen que pasara de ahora en adelante? ¿Cómo supo May que Ash estaba en Pueblo Paleta? Todas están preguntas serán respondidas en el siguiente capítulo, así que no se lo pierdan. Una cosa más me gustaría que me dijeran que les parece la historia porque en verdad me gustaría saber su opinión. Bueno eso sería todo, así que sin más que decir me despido no sin antes agradecer a Arturo de jesus y a Barkiel por darle me gusta a mi historia ya que me motivaron a seguir escribiendo mi Fic. Por supuesto también agradecerles a ustedes por haber leído el segundo capítulo. ¡Hasta la próxima! ¡Cuídense!