Mi mayor deseo...

Tema en 'Relatos' iniciado por Neko Nyan, 5 Mayo 2012.

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    Neko Nyan

    Neko Nyan Hola, soy nueva♥~ (?)

    Capricornio
    Miembro desde:
    3 Enero 2012
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    330
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Mi mayor deseo...
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Tragedia
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1628
    Bueno, este fic esta dedicado a la actividad Antes de morir yo... Y también para Hyuuga Erina que me invito a esta maravillosa actividad nwn!!!

    Mi mayor deseo...

    En una oscura noche, en el hospital 03, se encontraba un joven de 18 años en la habitación J-14, este respondía al nombre Jhon.

    Jhon se encontraba en una situación crítica.

    Cada dos semana tenían que hacerle unos estudios, así podrían tener un pista de lo que le ocurría. Pero por más estudios, diagnósticos, que le hacían no encontraban su cura, una esperanza de saber que enfermedad tenía, si era contagiosa, como se podía transmitir.

    El joven Jhon no tenía fe en los doctores. Cada día se alejaba de sus amistades, pero no solo de ellas, sino también de sus familiares. Se la pasaba encerrado en su habitación, no quería ver absolutamente a nadie, ni una luz que proviniera de afuera. Tenía miedo de que sus conocidos se lo tomaran como algo contagioso lo que él tenía, pues así habían sido siempre.

    Jhon solo tenía un deseo, un deseo que nadie conocía, ni siquiera su mejor amigo que lo siguió de la infancia hasta dicha edad. Ese deseo estaba relacionado con un secreto que tenía hacia su mejor amiga… Su amiga se llamaba Wendy, ella, su amigo Noel y Jhon, eran amigos desde los 4 años, siempre estaban juntos, se podía decir que ya tenían su grupo de amigos. Desde que la conoció Jhon, se enamoró al instante de ella, y no se lo dijo, nunca se le declaró, pues tenía miedo a que lo rechazara, y aún más en perder su amistad.

    Ya habían pasado un mes entero desde que le diagnosticaron esa extraña y desconocida enfermedad.

    Día a día deseaba e imploraba que encontraran la cura para volver a ver a sus amigos.

    Un día salió recibió las noticias de que dentro de un mes iba a recibir respuestas de lo que tenía, o eso esperaban los doctores.

    Tres semanas después salió a comprar comida, pues se le había acabado la despensa, al parecer iba a llover, los pájaros se alejaban, el cielo se tornaba gris junto con sus compañeras.

    En el transcurso del camino se encontró con sus dos mejores amigos, Wendy y Noel. Jhon siguió su camino sin decirles nada, escuchaba como a lo lejos su nombre que nombraban a gritos sus amigos… “¡Jhon!”, cada vez que escuchaba su nombre empezaba a apresurar el al paso. Hasta que empezó a correr, queriendo derramar lágrimas, pero su orgullo no lo dejaba. Empezó a caer chispas de lluvia “¡Espera Jhon, Jhon!”. Él no se quería alejar de ellos pero no tenía otra opción, no quería que sufrieran preocupándose por él y arruinarles su vida social.

    Hasta que se cansó de correr, no podía respirar por el agotamiento, se detuvo. Caminó hacia en frente sin ver a donde se dirigía, llegó contra la pared de un callejón. Se agachó, y le dio un golpe de enfadó a aquella pared de color carmesí, dejó caer gotas de sudor. Una gota de esas no venía del cansancio, sino de los ojos, su orgullo se rompió y empezó a derramar lágrimas sin consuelo alguno, nadie lo podía detener. Siempre se quiso desahogar y ese fue el momento indicado, sacó todo lo que se había guardado para él mismo, todo su sufrimiento que no podía suprimir ni un segundo más. Desde lejos se podía escuchar sus gritos desesperantes entre esa lluvia desgarradora, que empezó a intensificarse en cada grito del joven castaño de 18 años. Sus amigos tratando de buscarlo con ayuda de sus gritos lo encontraron, se detuvieron en frente del callejón en el que se encontraba Jhon. Su amigo Noel dio un paso para caminar hacia Jhon, pero algo lo detuvo, fue el brazo de Wendy. Ella avanzó hacia el joven de lágrimas. Se detuvo quedando a un metro de él. ─Jhon, ¿te encuentras bien?─preguntó mirándolo con una mirada de preocupación, ¡pero que tonta fue! Ella pensó que no fue lo mejor que pudo haberle dicho, pues era obvio que no estaba bien.

    Jhon no contestó, simplemente detuvo su llanto, no quería que lo vieran así.

    Wendy le agarró el hombro, queriendo que le contestara aunque hubiera sido una tonta pregunta sin sentido. Pero él no le contestó, Wendy lo separó de la pared, haciendo que solo la viera a ella. Se le quedó viendo de reojo, Jhon no aguantó su mirada y empezó a llorar frente a ella, Wendy lo agarró de la nuca y recostó su rostro en su hombro

    ─ Desahógate todo lo que quieras Jhon, para eso estamos nosotros─ Le informó Wendy con una mirada muy tierna

    Al mes siguiente…

    Jhon no les había dicho nada aún a sus amigos. Pero ya había llegado el día más esperado de su vida, bueno, el segundo. El primero era otra cosa…

    Fue al hospital por sus diagnósticos y por buenas noticias y no por malas. Pero fue lo contrario, recibió malas en vez de buenas, los doctores aún no sabían que eran. Jhon se puso furioso y se llevó al doctor contra la pared agarrándolo de su camiseta

    ─ ¡¿Cómo de que aún no los tienen?! ¡Ustedes ya me lo habían asegurado este mismo día que me lo iban a decir! ─ Dos guardias lo agarraron para que soltara al doctor.
    ─ Señor, nosotros le dijimos si era posible hoy─ le informó la enfermera. Jhon se puso como loco tratando de que lo soltaran, pero de tanto esfuerzo y las fuerzas que hacía se desmayó.

    Lo atendieron inmediatamente, lo llevaron a su habitación predeterminada, ahí buscaron como hacer que siguiera con ellos, pues solo sabían que si iba a morir aún faltaba tiempo para eso. Por suerte unos minutos después pudieron que despertara. Se alegraron, pero lo tenían que hospitalizar, pues su situación había empeorado.

    Paso una semana, faltaba una más para que acabara según los doctores. Su familia lo iba a visitar junto con s otra familia, “sus hermanos del alma”, sus dos hermanos Wendy y Noel. Wendy se sentía frustrada, pues quería hacer algo por él pero no sabía de que manera. Trataban de convencer a los doctores de sacarlo y que disfrutará sus últimos días con ellos, pero los doctores no los dejaban. Cada día luchaban para escapar de ahí con él, pero siempre los sorprendían los guardias junto con los doctores y enfermeros. Y no podían hacer nada en el hospital.

    Pasaron los días, esos días e convirtieron en una semana, Wendy y Noel habían salido a pasear. En eso les llega un mensaje de que Jhon estaba muy grave, que tal vez ese día ya era su fin. Ellos corrieron lo más rápido que pudieron, hasta quedar en frente del hospital, no lo dudaron y abrieron la puerta, corrieron hacia la habitación J-14, no les importaba en ese momento las reglas del sitio. Llegaron lo más pronto que pudieron y entraron con Jhon, los dos se torturaban con ver a su amigo de oda la vida como le hacia falta más oxígeno, Los dos se acercaron para escuchar las últimas palabras de Jhon.

    ─ C-chicos… quiero que sepan que siempre los quise como si fueron mis verdaderos hermanos─ empezó a toser muy fuerte─ jamás los olvide… s-siempre les q-quise decir, pero no encontré el m-momento indicado…
    ─ Jhon…─ dijeron los dos al unísono poniendo atención a sus palabras
    ─ N-noel, recuerda de que nunca estarás solo… siempre estará Wendy contigo… y yo en tu corazón…─ Wendy empezó a sentirse muy mal, apunto de llorar─ Mientras no me olviden siempre estaré con ustedes… No quiero que vuelva suceder lo de la otra vez─ dijo Jhon con una sonrisa, los dos amigos sonrieron con él al recordar sus momentos─ Wendy… quiero que siempre recuerdes como fue n-nuestra r-elación cuando éramos enemigos, pues fueron los momentos más divertidos─ dijo recordando el tiempo antes de que fueran amigos
    ─ S-si Jhon
    ─ Y que siempre, siempre les oculté algo…
    Los dos se le quedaron viendo, ya Wendy tenía lágrimas en sus ojos apunto de salir
    ─ Wendy… Te quiero pedir algo…
    ─ Si Jhon, lo que quieras
    ─ Siempre d-desea algo con todo mi ser… Wendy, yo… yo siempre… Te amé─ dijo con mucha dificultad, Wendy se sorprendió al ír eso, nunca lo imagino de Jhon ─ Y mi deseo es… que me des.. un beso.. ─ Wendy lo miró con dulzura
    ─ J-jhon, te quiero confesar, que yo igual, siempre te ame, y esperé siempre el momento en el que me lo pidieras, pero nunca me imaginé que fuera de esta manera…─

    Wendy se acercó a los labios de Jhon lentamente, una lágrima corrió por su mejilla, Jhon trató de acercarse, y se le corrió una lágrima al igual que a ella. Al momento de rozar sus labios, paso algo trágico…

    Los rozaron y…

    Murió…

    Se escuchó el sonido que indicaba que ya había muerto, Wendy empezó a llorar a gritos, no le cumplió su deseo, simplemente los rozaron y él quería un beso. El doctor se acercó y le tapó el rostro con la sabana a Jhon… Wendy se acomodó en el hombro de Noel

    ─ Wendy… se lo cumpliste… no te sientas mal, tal vez solo rozaron, pero, le diste un beso…
     
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  2.  
    VeckeFer

    VeckeFer Usuario común

    Libra
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    8 Febrero 2012
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    T-T Como pudiste!!?? Que triste, solo un beso pedía el pobre Jhon, se lo hubieses dado, Wendy!!!
    Me encantó tu fic, expresa muchos sentimientos y emociones, está muy lindo y en ortografía no vi nada notable. Me encanta!!
    Me dio pena el pobre Jhon, ahora me quedé mal con él !!! Espero que ganes. está hermoso!!!
     
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