MI ÁNGEL NEGRO.

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por Haruka Tomatsu, 21 Mayo 2014.

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    Haruka Tomatsu

    Haruka Tomatsu Iniciado

    Aries
    Miembro desde:
    21 Mayo 2014
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    1
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    MI ÁNGEL NEGRO.
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Romance/Amor
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    2466
    Bueno, Antes que nada, Saludarlos a todos (: soy nuevo en esto, pero básicamente lo que quiero es contarles mi historia, como todos acá o la gran mayoría, hemos sufrido por amor, pues de varias maneras, se que algunos se sentirán identificados/as,se trata de cuando uno ama tanto a una persona, que hace lo imposible por estar con ella/el cuando piensas que esa persona es tu razón de vivir, sin embargo la persona amada no valora todo lo que tú das y pese a eso tu Consideras que el ser amado/a es tu verdadero amor, del que solo hay una vez en la vida, esto es real, yo anotaba todo diariamente y pues decidí compartirlo con esta gran comunidad, por favor, sólo pondré la mitad de un capitulo junto con su prólogo. críticas constructivas ayudarían mucho. os quiero <3 añadir que esto es solo el comienzo, pero quiero saber como va.

    PRÓLOGO:
    El corazón se me rompió en mil pedazos, y cada pedazo hacia trizas mi alma… no puedo creer que mi amada me haya dejado, la vida no tiene sentido si no está ella junto a mi lado. Este dolor no cesa, es como un cuchillo que cada segundo se introduce más y más entre mis costillas hasta llegar al corazón, que yo sinceramente dudo mucho que este ahí.
    Thiare, ese era su nombre, cada vez que lo recuerdo se abren mis ojos caídos, ya no veo la luz, solo la oscuridad que se apodera de mi cuerpo, de mi mente, de mi corazón. Yo no quiero luchar contra esta oscuridad, ahora es parte de mí, porque la única razón que alejaba la oscuridad y me hacía ver la luz era mi Thiare, mía, de nadie más. Pero se me fue……
    Ahora solo quiero dejar este mundo, marcharme, reunirme con mis seres queridos, ahogar esta pena en alcohol, y eso que todo había comenzado tan bien, era la chica rara de la que todos evitaban, y yo también lo hice, sin embargo logró llamar mi atención con sus ojos, sus malditos ojos que cada vez que me observaban eran como unas cadenas que me sujetaban más y más, no pude hablarle hasta que hizo algo que todos dirían :QUE RARA ES ELLA, era rara, pero yo la amaba , quiero decir, la sigo amando, amo a esa rara que hacia cosas locas, amo a esa chica tímida que luego dejó florecer su personalidad, en realidad no sé como la pude dejar ir, como fui tan torpe, soy un IMBÉCIL, ya es tarde para recuperarla, no sabría que decirle, como reaccionaria, sé que me quiere, lo sé, pero yo no aguantaría que me dejara, no podría, no otra vez.
    Un cuchillo, unas tijeras, necesito irme de este mundo, no soporto la pena, quiero liberar esta sangre que recorre mis venas, que sea libre, para que así me deje libre a mi. Le escribo esto a todos aquellos que han dado mucho en una relación y su amado o amada no valora todo lo que entregaste. Sé que ustedes entenderán el porqué de mis actos, mi brazo ya no aguanta otro corte más, la gente normal diría que estoy loco por cortarme, pero debo decir que cuando me corto me olvido de toda la pena, es ahí cuando mi alma regresa a mí, me hace sentir vivo me hace saber que estoy en este mundo, me hace saber por lo que lucho, cada día me acuerdo de ella, no hay segundo que no piense en su rostro.
    Se preguntarán, ¿Por qué este joven la ama tanto?
    Eso es algo que relatare aquí, quiero que se sepan mi historia, quiero desaogarme porque historias como la mía hay muchas, regresare todo en el tiempo y contare mi historia, mis recuerdos.

    Estos son mis recuerdos, los recuerdos de un joven enamorado.






    Capitulo uno: Un inesperado comienzo de colegio.

    Era un día lunes 4 de marzo, eran las 6 de la mañana, yo despierto, en cama, hacia mucho frio en el ambiente, todo estaba oscuro, los débiles reflejos del cielo se asomaban por la ventana, yo sabía que era mi primer día de clases, aunque en realidad, ya estoy en Quinto año. Este es mi último año en el colegio tengo 17 años, solo me queda este y me voy a estudiar alguna carrera con informática, eso quiero, no me lo pienso dos veces. Miles de preguntas pasan por mi cabeza ¿Cómo será este año?, ¿Haré nuevos amigos? ¿Con quién me sentaré en mi primer día?, estaba con muchas ansias, hacía mucho tiempo que no veía a mis compañeros de curso, todos muy buenos amigos, no los vi en el verano pero por fin podríamos hablar, contar nuestras experiencias, lo que pasamos en verano, los amores de veranos que dejamos atrás, en fin, tenía muchas ganas de hablar con ellos pienso que ellos también conmigo,
    (Se escucha el despertador a lo lejos)
    Oí el tan característico sonido del despertador de mis padres que era como un BEEP BEEP que yo escuche por doce años seguidos, yo ya lo odiaba éramos muy enemigos, yo sabía que en cualquier momento mi madre gritaría para que me despertara y me levantara, aunque yo ya estaba despierto hace una hora.

    Elizabeth: Alex!
    Alex: ¿Qué pasa mamá?
    Elizabeth: LEVANTATE! TIENES QUE IR A CLASES!
    Alex: ¡está bien! ¡Ya desperté!

    Esa pequeña conversación era de todos los días, y siempre nos decíamos lo mismo ya era habitual, era como un rito, como una ceremonia de todos los días por las mañanas, no podíamos decir otra cosa, yo creo, que si decíamos cualquier otra palabra, era una novedad.
    Me levante, me quede mirando un zapato por 5 minutos como lo hacía normalmente (cosa rara en mí, no pregunten el porqué) baje al baño y me di una buena ducha, las gotas recorrían mi cuerpo dando un chispazo y bailando, el agua era tibia, como a mí me gustaba, cada gota me hacía despertarme más, termine, seque mi cuerpo y me puse mi uniforme, del colegio.
    -Pantalones color gris ajustados a las piernas
    -Zapatos color negro
    -Camisa blanca
    -Suéter negro
    -Corbata del colegio

    Tenía muchas ganar de irme, pero era muy temprano, mi madre Elizabeth, me tenía preparado un desayuno, me senté cómodamente y me serví lo que me tenía preparado,
    Conversamos un poco, hablamos de mis expectativas de este nuevo año en el colegio y cuando terminamos de hablar me cepille mis dientes, me puse mis audífonos, coloqué mi música preferida en mi reproductor de música, me despedí de mi madre y me fui al tan ansiado primer día de clases.
    La mañana era muy fría, más de lo habitual , nubes de unas formas muy raras color rojizo brillaban en el cielo, parecía una entrada triunfal al paraíso, pero no le tomé mucha importancia, yo iba en mi mundo, mi música, cuando me ponía mis audífonos todo lo demás era secundario, caminaba animado al ritmo de mis grupos favoritos, cuando crucé un puente, un puente celeste que tenía que cruzarlo cada vez que quería ir al colegio, un arrollo por debajo de él me hacía imaginarme muchas historias de terror ya que el arrollo era feo, tenía muchas plantas, era verdoso, burbujas salían de él y poca actividad en el agua me hacían pensar que no habían peces en aquel riachuelo.
    Cuando estaba a punto de llegar observe a los alumnos, con sus uniformes en la misma dirección que la mía, yo sabía que el año escolar había comenzado, ¡QUE ALEGRÍA!
    Sólo una curva me separaba del colegio, quería correr, pero me apacigüe.
    Pasé la Curva, esa maldita Curva, que cambió toda mi vida. Divise a lo lejos , una figura femenina, se notaba más pequeña, usaba el mismo uniforme pero ella usaba falda, divisaba su pelo negro, yo no presté atención, me fui acercando más y más y pude ver mejor a la jovencita, como había previsto, era más pequeña, pelo largo negro liso, su cara blanca, muy blanca, sus ojos hermosos, su cuerpo, era perfecta, la observe durante lo que quedaba de camino y ella me miro, yo me hice el tonto y miré hacia otro lado.

    Quien iba a saber… quien podría saber, que esa niña iba a ser el más grande amor de mi vida, quien iba a saber que ella sería mi todo, mis ganas de vivir, de despertar cada día, ella me devolvió la vida misma.

    Los dos entramos al colegio, aunque yo un poco más atrás que ella, cada uno por su camino, para subir al segundo piso teníamos que subir unas escaleras, habían 5 en total, yo siempre tomaba la primera, ella se fue por la segunda, me dirigí hacia mi sala de clases, podía ver a través de la ventana el gimnasio del colegio donde estaban haciendo la ceremonia de “los nuevos”, alumnos de primer año que llegaban al colegio, abrí la puerta de la sala y entré.



    Alfonso: Alex! Amigo mío, ¡Cuánto tiempo! ¡Cómo has estado!
    Alex: oh, Alfonso….
    (El era Alfonso, lo conocí en Segundo año, aunque era mi compañero de primer año, pero en primer año nunca le hablé, pero ahora es uno de mis mejores amigos, ya que hemos pasado por mucho con este tipo, Alfonso es Alto, Fornido, aunque su cara tiene rasgos como de un niño pequeño, aun con su gran cuerpo es un joven muy tranquilo).

    Alex: Pues, Bien, no hice mucho en el verano, salí un par de veces, nada divertido.
    Alfonso: ese eres tú, ¿No? Prefieres quedarte en casa a salir con tus amigos, eres un ermitaño.
    Mi cara reflejó cierto disgusto por aquel comentario, pero ciertamente tenía mucha razón
    preferiría quedarme en casa antes de salir, a algún lado con la familia, odiaba eso, mi mundo era mi pieza, oscura vacía, mi música era mi alma, hasta que llegó ella.
    Conversamos con Alfonso un buen rato, hasta que llegaron mis otros amigos;
    Víctor: joven muy blanco, de estatura media, con el hablamos mucho, quizás demasiado, no paro de reírme, pensamos igual.
    Ignacio: otro amigo mío, este pretende ir a la moda con la música que escucha y como se viste, pero realmente es otro chico más de los tantos que quieren llamar la atención, pero es amigo mío, solo habla estupideces, y con Víctor solo nos reímos.
    Orlando: Joven alto, muy inteligente, El mejor del curso, su pelo ondulado, con el fuimos compañeros en la preparatoria y somos muy unidos.
    Arián: junto con Orlando y Arián hemos pasado casi diez años juntos, Arián es tímido, no habla casi nada, siempre lleva mucha ropa, incluso en verano lleva gorro y chaqueta, es muy raro, tiene el cabello largo y siempre parece aceitoso.

    Estos eran mis amigos, los mejores, con ellos pasaba la mayoría del día, hay otros más pero no somos tan unidos como con estos.
    Se escucha el sonido del timbre, van a comenzar las clases, estábamos conversando cuando logro ver a la profesora Responsable de mi curso del 5*A la señorita Melissa bubbler, y al lado de ella, estaba y se dirigía hacia mi sala, aquella chica hermosa que vi en la mañana, tan blanca su cara, su pelo negro le resaltaba por sobre todo, ella era como un ángel, ¿Sería una alumna nueva del curso? Me moría de ganas por que así fuera, pero no fue así.
    La niña entró en la sala de clases de al lado, supuse que sería del 5*B, me puse triste pero se me pasó al rato, de todos modos sólo era una niña linda como tantas habían en colegio.
    La profesora Melissa comenzó con la clase, como siempre ha sido, un discurso sobre las metas de este año, un saludo para cada uno de los alumnos, las materias que esta profesora nos enseñaría que en su caso era ingles y tantas más palabras motivacionales que a nadie motivan.

    Si bien yo le prestaba atención a la profesora Melissa, no dejaba de pensar en la chica esa, era tan perfecta, tan hermosa, yo solo quería conocerla, no importaba como, tenía que hablarle, pero mi personalidad no me lo permitía, no soy de esas personas que hablan con todo el mundo, soy muy reservado, bueno, lo era.
    Luego de una hora angustiosa de motivaciones generalizadas con mis amigos comenzamos a hablar, no importaba el tema, solo para no escuchar a la profesora y su intento de discurso de Oscar, todos contaban sus historias vividas en el verano, Arian Visitó parís donde su tío, pero él se quedó en la casa de parís todo el verano, y como era de esperarse a nadie le causo rareza, Arian era así. Alfonso visitó a su abuela en Los Ángeles y conoció mucha gente y también anduvo en cayac, Víctor no salió de su casa como todos esperábamos, ya que él era muy similar a mí, Estaba Muy entretenida la Conversación cuando inesperadamente sonó el timbre para el primer “Tiempo libre” en nuestro colegio, habían cuatros tiempos libres, el primero era de 20 minutos, donde podías ir a comprar o salir o lo que sea, Alfonso muy alzado y entusiasmado se levantó y me preguntó,

    Alfonso: HEY, Alex ¿Vamos?
    Alex: ¿Dónde?
    Alfonso: Ya sabes a ver a nuestras criaturitas..
    Alex: Pues venga, vamos, quiero estirar un poco las piernas y preguntarles como estuvieron, ¿Sabes? No las vi en todo el verano, algo nuevo habrán de contarnos.

    Las criaturitas es un grupo de varias amigas, que fuimos separados en tercer año, estas criaturitas con Alfonso y yo somos MUY unidos, Demasiado Quizás.
    Y salimos de la sala Alfonso y yo, pensé que el camino sería más largo, grata fue mi sorpresa al darme cuenta que Alfonso entró en la sala de al lado, el 5*B, recordé casi instantáneamente que en esa sala había entrado mi ángel, mi ángel de pelo negro, Me puse muy nervioso, si veía a mi ángel ¿cómo iba a reaccionar? Quizás le hablaría, pero como me conozco no lo iba a hacer, dude un tiempo si entrar o no en esa sala de clases, tenía muchas ganas pero algo me decía que mejor no lo haga, quizás era el destino, que me estaba advirtiendo que si entraba mi vida cambiaría, que iba a sufrir, pero también que iba a amar. Respire hondo, abrí la puerta, entré y vi a mis criaturitas todas sentadas juntos con Alfonso, todas me saludaron gratamente y cordialmente, disimulé mirar hacia todos los lados, pero no la veía, hasta que divise al final del salón una chica tapada con su chaqueta, la tenía en su cabeza creo que estaba durmiendo, cuando de pronto se saca la chaqueta de la cabeza y bosteza, era ella, era mi ángel , era la persona que mas amaría en este mundo, había encontrado a mí AMOR VERDADERO, y yo sin saberlo, sin saberlo aún.











     

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